Vegeta se encontraba en el comedor de la Corporación Cápsula mientras desayunaba con sus hijos, se había encargado de eso aquella mañana ya que Bulma seguía dormida. Había estado trabajando en un proyecto importante los últimos días y se había dormido hasta tarde para poder terminarlo, así que no creía que se fuera a levantar pronto.
Bien, a la escuela- dijo Vegeta recordándoles la hora a sus dos retoños, Bra lo miró confundida al escucharlo.
Pero es cumpleaños de mami y sigue dormida-dijo la niña como reclamo, aunque era pequeña ya comprendía lo que era un cumpleaños y quería saludarla antes de irse.
Podemos saludarla en la fiesta más tarde ¿No?- dijo Trunks, sabía que si se iban a despertarla llegarían tarde. Además habían querido dejarla dormir debido a que se había quedado hasta muy tarde.
No es conveniente que la despierten ahora, se acostó tarde en la noche- respondió Vegeta, incluso él dudaba de atreverse a despertar a su esposa cuando estaba tan cansada- Vayan y luego podrán hacerlo, de todos modos ya saben lo que hay hoy- dijo haciendo referencia a la fiesta.
Siii, fiesta- dijo Bra sonriente, se acercó a su papá para darle un abrazo antes de ir por su mochila para ir al jardín de infantes- Adiós papi, cuida de mami todo el día y recuerda, sorpresa- dijo la niña con emoción mientras saltaba con su mochila en la mano.
Suerte con mamá hoy, será difícil- le deseó Trunks a su padre mientras se despedía con la mano.
Le habían asignado al príncipe saiyajin que pasara el día con ella y no se enterara de manera alguna de la fiesta. Los padres de Bulma habían tenido la idea de organizarla a sus espaldas para darle una sorpresa. Usualmente a ella le gustaba organizar sus propias fiestas, pero no había tenido tiempo debido a todo el trabajo que había tenido los últimos días y había descartado la idea.
Vegeta suspiró pesadamente en cuanto los dos se fueron, debía prepararse mentalmente para eso. Eso de los cumpleaños a él le parecía una estupidez, pero sabía bien que era importante para su esposa ya que ella amaba su cumpleaños.
Haré un esfuerzo hoy- dijo para sí mismo, no es que fuera a cambiar su forma de actuar, pero si quería que eso saliera bien debido a que sabía que al final su esposa estaría feliz al saber de la sorpresa.
Miró la hora en un reloj que había en la cocina, era algo difícil calcular cuándo podría levantarse su esposa aunque asumía que se habían acostado aproximadamente a las tres de la mañana.
Luego de que pasó un buen rato, se dirigió al refrigerador para buscar lo que estaba preparado para el desayuno especial de la científica. Los padres de Bulma estaban ocupados con el asunto de la fiesta aunque él los había estado ayudando el día anterior con eso, ahora su deber era estar con Bulma todo el día sin que ella se enterara de eso y luego llevarla a la fiesta.
Una vez buscó la bandeja del desayuno también se puso a preparar café para acompañar las cosas del desayuno, su esposa lo amaba más que nada.
Luego de tener el café listo subió las escaleras llevando la bandeja consigo. El desayuno incluía distintos tipos de tartas dulces, café, galletas, y además tenía algunos globos amarrados a los lados de la bandeja que flotaban.
Abrió la puerta del cuarto y entró sigilosamente ya que quería verificar si su esposa se había despertado. Notó que ella comenzó a moverse levemente en cuanto él se acercó a la mesa de noche de su lado de la cama.
Dejó la bandeja con cuidado en la mesa de noche y miró a Bulma dormir algunos segundos, aunque seguía dormida estaba un poco inquieta ya que se estaba moviendo.
Cump...-murmuró Bulma dormida, se dio vuelta en la cama con los ojos cerrados y Vegeta la miró confundido al escuchar que estaba hablando aún dormida- Mmm...-la escuchó, había dicho algo inaudible para él.
Vegeta siguió observándola algunos segundos más aunque tal vez fuera extraño estar haciendo eso, ya sabía cómo se veía su esposa dormida. Bulma dejó caer su brazo al suelo al moverse otra vez y se quedó quieta por algunos segundos, a pesar de seguir en la cama, su rostro se veía tan bello como siempre.
Mmm... agh-dijo Bulma por lo bajo antes de abrir los ojos, al hacerlo espero algunos segundos a que sus ojos se acostumbraran a la luz que se colaba por la ventana del cuarto- ¿Qué hora es?- preguntó confundida, aunque todavía no lo había volteado a ver a él.
Es mediodía- respondió Vegeta, Bulma volteó a verlo sorprendida al escuchar su voz ya que no sabía que su esposo estaba allí.
¿No entrenas a esta hora? ¿Me estabas mirando dormir?-preguntó Bulma confundida, era un poco extraño que él no estuviera en la cámara de gravedad a esa hora.
Si, entreno a esta hora pero decidí venir a ver si ya estabas despierta- respondió la primer pregunta- Y si, pero no fue mucho tiempo- dijo aunque hubiera preferido poder evadir aquella pregunta.
Ya sabes qué día es- dijo Bulma sonriente al ver que él estaba allí, extendió sus brazos hacia él y le indicó con sus manos que se acercara.
Celebración terrícola del natalicio de una persona-respondió Vegeta- En este caso el tuyo- dijo mientras se acercaba para sentarse en el borde de la cama para estar junto a ella.
En lenguaje coloquial- le recordó Bulma mientras se abrazaba a su cuello.
Feliz cumpleaños Bulma- respondió el saiyajin, ya sabía de sobra qué expresión se debía decir en un evento así, la mujer sonrió al escucharlo y le dio un beso en la mejilla. Sabía que él sólo era así con ella y eso la hacía muy feliz.
¿Qué me traes? ¿Mi regalo de cumpleaños?- preguntó con tono lascivo, le dio un pequeño beso en los labios a su esposo.
Si hacemos eso tu café se enfriará- le mencionó Vegeta, Bulma volteó a ver la bandeja que estaba en la mesa de noche y sonrió aún más.
¿Tú me lo trajiste?- preguntó asombrada, no esperaba que él le llevara el desayuno a la cama- Es el mejor cumpleaños de mi vida, dámelo-dijo Bulma, empujó levemente a Vegeta para que se levantara y le alcanzará el desayuno que estaba en la mesa de noche.
Vegeta lo hizo de inmediato, sería mejor que ella desayunara pronto o el café se enfriaría.
Tiene tarta de fresa- dijo Bulma emocionada en cuanto Vegeta puso la bandeja en su regazo.
Leyó la tarjeta que le deseaba un feliz cumpleaños y bebió un sorbo de café luego de endulzarlo rápidamente, disfrutó mucho el primer sorbo, se sentía muy relajada después de tantos días de trabajo continuo.
Espera ¿Y los niños? Hoy hay escuela-dijo Bulma con preocupación, había olvidado que ella se había despertado muy tarde y ese día era viernes.
Se fueron hace un rato-respondió Vegeta, Bulma suspiró aliviada al escuchar su respuesta.
Así que tu te encargaste, menos mal, Bra todavía no puede alistarse sola- dijo la científica, aunque Vegeta se había estado encargando de eso los días que ella había estado muy ocupada aún así solía estar al pendiente de que sus hijos no faltaran a la escuela.
Tardó un poco en decidirse en qué listón del cabello quería usar, pero si llegó a desayunar a tiempo para irse- le comentó, Bulma sonrió al escucharlo.
Esa niña, siempre le pasa lo mismo y la mayoría de sus listones son rosas- dijo Bulma antes de reír, sabía que eso era algo habitual en ella, a su hija le encantaba la moda aunque era pequeña- Desayunaré rápido, recuerdo que papá dijo que quería hablar conmigo sobre algo del trabajo hoy pero no me dijo qué era- dijo Bulma mientras comía un trozo de la tarta de fresa.
Me dijo que te dijera que no te preocuparas por eso, además dijo que él y tu madre volverían tarde- mencionó Vegeta, Bulma lo miró sorprendida al escuchar eso.
¿Solo tu estas en la casa?-preguntó asombrada la científica al escuchar eso- Qué lástima, al menos quería hacer una reunión casual por mi cumpleaños ya que no pude hacer una gran fiesta este año- dijo mientras bebía un poco más de café, realmente le gustaba festejar su cumpleaños a lo grande.
Trunks se va a ir a la casa de Kakaroto después de la escuela y se llevará a Bra también, parece que quiere jugar con la hija de Gohan- agregó el saiyajin, Bulma parecía algo decepcionada al ver que no podría hacer nada ese día por su cumpleaños con sus amigos.
Parece que todos van a estar ocupados entonces-dijo la científica pensativa-Y supongo que tú te vas a ir a entrenar ahora- supuso, le parecía extraño que él se estuviera quedando a hablar con ella mientras desayunaba.
Hoy no voy a entrenar así que podemos hacer lo que quieras tu- le sugirió Vegeta, Bulma lo miró con cierta sospecha.
¿Y por qué?- preguntó la científica mirándolo con duda- Se que no te importan los cumpleaños- le recordó con el mismo tono.
No, pero a ti si, así que aprovecha antes de que cambie de opinión- le propuso Vegeta con seriedad, no pretendía dejar que ella descubriera el plan de la fiesta.
Bulma lo miró pensativa mientras comía otro trozo de la tarta de fresa. Luego de tragarlo, le dio un beso en la nariz de improviso a su esposo ya que él estaba sentado al borde la cama mientras hablaba con ella.
No me mires con esa cara, sabes que no me da miedo cuando me miras así- le dijo con tono desafiante- Quiero ir al centro comercial ¿Me acompañas?- le preguntó directamente.
¿Vas a comprar baratijas?- preguntó Vegeta, Bulma lo miró pensativa ya que todo eso le parecía algo extraño.
Tal vez, pero hace rato que no tengo tiempo de ir así que me gustaría comprar un vestido bonito para usar hoy aunque no tenga una fiesta- dijo la mujer sonriente, le gustaba mucho ir de compras- Y si vas puedo traer varios, tú eres fuerte- comentó pensativa, sonaba a algo divertido para ella.
Bien, cuando termines tu desayuno podemos irnos- dijo Vegeta con simpleza, sería una buena excusa para que estuvieran todo el día afuera.
Los padres de Bulma estaban organizando todo en un salón de fiestas elegante en la capital del oeste, pero deberían volver a la casa ya que habían dejado varias de las cosas que usarían para decorar en la mansión y unos empleados vendrían a buscarlas más tarde.
Cuando volvamos podríamos comprar un pastel, seria lindo estar un rato con los niños cuando vuelvan de la casa de Goku- mencionó Bulma como idea mientras seguía comiendo de su tarta- Esto está delicioso- dijo antes de comer un pedazo de fresa de las que la tarta tenía encima.
Como quieras- respondió Vegeta fingiendo desinterés, estaba pensando cómo podría llevar a la científica a la fiesta sin darle demasiada información cuando volvieran del centro comercial.
Luego de que Bulma terminó de desayunar, se cambió de ropa y se arregló para que pudieran irse. Vegeta se puso una camisa blanca y un pantalón oscuro para cuando se fueran aunque Bulma se sorprendió un poco al ver que iba algo elegante.
¿Por qué usas esa ropa? Pensé que no te gustaba- dijo Bulma mientras se ponía un vestido rosa pegado al cuerpo que le llegaba un poco antes de la rodilla- Ayúdame con el cierre- le pidió ya que no alcanzaba a cerrarlo porque estaba en la espalda.
Siempre dices que nunca uso esta ropa- respondió Vegeta sin darle demasiada importancia a lo que le había dicho, se acercó para cerrar el cierre del vestido de su esposa y ella le sonrió.
¿Estás siendo lindo conmigo porque no tuve tiempo de hacer una fiesta este año? No soy una niña- dijo Bulma ya que le parecía que estaba siendo algo más tolerante de lo usual- Aunque igual si quiero que vayas conmigo al centro comercial- le mencionó, no quería que su esposo se arrepintiera de su ofrecimiento.
Si fueras una niña supongo que estarías llorando, eso hace Bra cuando quiere algo y no lo consigue- dijo Vegeta como respuesta, Bulma sonrió, aunque sospechaba que algo sucedía para que él la estuviera acompañando tanto ese día.
Vegeta solía pasar tiempo con ella e incluso había días que no entrenaba para hacerlo también, pero sentía que ese día se estaba esforzando un poco más por contentarla a ella, aunque podía dejarlo pasar teniendo en cuenta que era su cumpleaños.
Los dos se fueron al centro comercial y recorrieron todas las tiendas que ella quiso, para su sorpresa Vegeta no se quejó ni una vez. Usualmente él se agobiaba fácilmente en los lugares con mucha gente ya que no le gustaba que hubiera tanto ruido ni tampoco la presencia de tantos otros humanos.
Luego de recorrer varias tiendas había comprado varios vestidos y atuendos que le habían gustado, aunque uno de ellos había llamado especialmente su atención.
Había adquirido uno que era color lila, era de tiras y aunque tenía escote no era excesivamente pronunciado, era algo sencillo pero a la vez elegante, además se había comprado unos zapatos de un tono similar para que hicieran juego con él.
Pararon de recorrer tiendas para descansar un rato, Bulma miró a Vegeta esperando poder adivinar si estaba molesto por haber estado tanto tiempo haciendo eso, aunque no pudo adivinarlo ya que la expresión de su esposo era neutral.
¿Estás cansado? ¿Quieres comer algo?- le preguntó Bulma pensativa, le sorprendía que aquello resultará tan bien.
Estoy bien, aunque si tú estás cansada podemos parar, ya compraste bastante ropa- dijo Vegeta mientras ponía las cajas y bolsas cerca de donde estaban sentados. Habían ido al patio de comidas del centro comercial para poder sentarse un momento.
No tanto, pero tal vez a ti te agobie venir, se que el centro comercial no es tu lugar favorito- dijo la científica pensativa, no quería hacer que su esposo se sintiera incómodo aunque ella lo estuviera disfrutando.
Ya te dije que haría lo que quieras hoy, aprovecha o cambiaré de opinión- dijo Vegeta como respuesta, Bulma le sonrió al escucharlo.
Bueno, podríamos comer algo ahora y comprar algunas cosas más, todavía no compre nada nuevo para cuando tenemos tiempo a solas- dijo mientras le guiñaba un ojo, notó que Vegeta se sonrojó levemente al entender a qué se refería.
Mujer vulgar- respondió Vegeta, aunque afortunadamente nadie estaba cerca para escuchar su conversación.
Puedes decirme lo que me queda mejor, aunque me vea bien en cualquier cosa aun así me gustaría comprar algo que a ti te guste- dijo la científica sonriente- Si tú me haces feliz también mereces una recompensa- dijo mientras lo miraba a los ojos, aunque sabía que él no solía hablar de esas cosas en un lugar tan público como ese.
Vegeta la siguió mirando con sonrojó en sus mejillas a pesar de que la idea sonaba bastante tentadora, todavía debía hacer que ella estuviera más tiempo fuera de la casa ya que no había pasado tanto tiempo desde que se habían ido de la mansión.
Luego de comer allí y de varias compras más, la tarde comenzó a caer. Bulma ya estaba un poco cansada por tantas compras y decidió que los dos comenzaran la retirada de allí para poder volver a su hogar.
Espera, voy a comprar un pastel aquí antes de que volvamos- dijo Bulma, había recordado que quería hacer eso antes de que volvieran.
Tal vez no sea necesario, tu madre dijo que compraría uno- dijo Vegeta como aviso para que no gastara dinero innecesario en eso. Al menos no era contarle de la fiesta directamente, había evitado perfectamente bien que su esposa sospechara de ello en todo el día.
¿En serio?- preguntó Bulma sonriente- Qué bueno, entonces podemos volver ya, no creo que necesitemos más pastel, mamá siempre compra unos enormes- mencionó mientras comenzaba a caminar. Vegeta la siguió mientras llevaba todas las cosas que su esposa había comprado, eran varias cajas y bolsas.
Al salir Bulma desencapsuló su aeronave en el borde de la calle y abrió el maletero de la misma para poder poner las compras allí. Ella las fue guardando mientras Vegeta aún las cargaba para poder acomodar todo de forma que nada se dañara en el trayecto a su hogar.
Bien, ya podemos ir a casa- dijo Bulma luego de cerrar el maletero con llave, miró a su esposo sonriente. Estaba muy feliz por el día tan entretenido que había podido pasar con él.
Sería más rápido que volvamos volando, esta cosa tarda mucho- comentó Vegeta, la miró de reojo esperando que aceptara su ofrecimiento.
Pero el centro comercial no está tan lejos de la casa, solo tardaremos unos veinte o veinticinco minutos en llegar- mencionó Bulma pensativa, no le parecía que fuera tanta demora.
Podrían ser diez- insistió Vegeta, Bulma lo miró pensativa mientras decidía lo que harían.
Bueno, estoy un poco cansada, creo que podría recostarse un rato antes de que vengan mis padres si volvemos temprano- dijo Bulma pensativa, se decidió a volver a encapsular la aeronave con las cosas adentro del maletero para que pudiera llevarse todo en su bolso.
Hay que despegar rápido-dijo Vegeta como aviso, Bulma se acercó a él para abrazarse a su cuello mientras él la cargaba en sus brazos. A esa hora las calles de la capital del oeste parecían estar más calmadas y pudieron despegar sin causar demasiado tumulto.
Bulma sonrió mientras se aferraba a su esposo y sentía el viento en su rostro, afortunadamente no hacia tanto frío y podía disfrutar de ver la ciudad desde las alturas mientras volaban.
Hace mucho no hacíamos esto, es lindo- dijo Bulma mirando maravillada lo pequeña que se veía la ciudad, verla desde esa perspectiva era hermoso- Creo que es uno de mis mejores cumpleaños aunque no haya podido tener una fiesta, me divertí mucho contigo hoy- dijo la peliazul volteando a ver a su esposo embelesada.
Esta mañana si parecía que eso era muy importante para ti- mencionó Vegeta mientras seguía su camino, Bulma ya no estaba prestando tanto atención a la vista ya que lo estaba mirando a él.
Yo amo hacer fiestas en mi cumpleaños, pero esto me gusta mucho más- dijo la científica sonriente- Aunque me gustaría pasar un rato con los niños también, eso lo haría perfecto- dijo la mujer sin desvanecer su expresión de felicidad, se sentía muy afortunada.
Los verás dentro de poco- le aseguró Vegeta- ya deben estar allá- mencionó, aunque no había especificado donde.
En pocos minutos, Vegeta aterrizó, aunque no estaban en la Corporación Cápsula. Se encontraban en un jardín tenuemente iluminado que se veía muy elegante, parecía un lugar muy fino.
Vegeta ¿A dónde me trajiste? ¿Esto es propiedad privada?- preguntó Bulma algo preocupada, aunque sabía que su esposo no era alguien tonto también sabía que podía ser algo impredecible- Esto no es la casa- le reprochó mientras se volvía a aferrar a su cuello para que volvieran a volar.
Ya lo sé- respondió Vegeta mientras se dejaba hacer, Bulma lo miró confundida sin soltarlo.
¿Entonces por qué me trajiste aquí?- preguntó aún más confundida. Algunas luces más se encendieron en el jardín dejando que pudieran apreciar más los detalles del mismo, Vegeta hizo que Bulma se separara de él al ver aquello.
Ven- dijo Vegeta mientras comenzaba a caminar por el jardín, le tendió la mano a su esposa para guiarla a donde debían ir. Bulma lo siguió confundida ya que no sabía dónde estaban, no reconocía ese lugar por más que lo observaba mientras caminaba con Vegeta.
Llegaron a una puerta que estaba adornada por varias plantas además de que estaba iluminada de la misma forma que el jardín, como ya era casi de noche todo se veía increíblemente misterioso.
Entra primero- le dijo Vegeta sin demasiada explicación mientras accionada el picaporte de la puerta.
Bulma miró pensativa la puerta mientras se acercaba a ella hasta que notó lo que estaba pasando, había tardado demasiado en poder adivinarlo como para haber podido prepararse para eso.
Terminó de pensar en lo que sucedía apenas entró, al hacerlo todo estuvo en silencio un segundo hasta que todas las luces del lugar se encendieron al mismo tiempo.
De pronto, lo escuchó.
¡Feliz cumpleaños Bulma!- dijeron todas las personas presentes en aquel elegante salón en el que habían estado aguardando por su llegada. Sus padres, sus hijos e incluso todos sus amigos estaban allí, miró la cara de todos en un pantallazo rápido antes de sonreír de oreja a oreja por la sorpresa.
Feliz cumpleaños mami-dijo Bra mientras corría hacia ella antes que nadie, tenía un vestido de fiesta rosa puesto y tenía un peinado con dos coletas.
Bulma la cargó de inmediato al verla y comenzó a agradecerle a todos por la sorpresa mientras sentía la emoción invadir su cuerpo ya que no había esperado que tuvieran planeado algo así.
Organizamos tu fiesta sorpresa ya que no podías hacerlo tu querida, espero que lo hayamos hecho como te gusta- dijo su madre en cuanto se acercó a felicitarla por su cumpleaños, su padre también lo hizo con una gran sonrisa en el rostro.
Le pedimos a Vegeta que te entretuviera durante todo el día, parece que lo hizo bien- dijo el padre de Bulma a su vez luego de desearle un feliz cumpleaños a su adorada hija.
Muchas gracias por todo, me encantó- dijo Bulma emocionada.
Se había quedado sin palabras al no haber sido capaz de adivinarlo antes de estar cruzando el umbral de aquella puerta. Volteó a ver a Vegeta ya que él sólo estaba mirando lo que sucedía recargado a un lado de la puerta.
Luego de saludar a los demás que aguardaban por felicitarla, la fiesta comenzó y todos estaban charlando o comiendo con alegría debido al alegre evento que celebraban.
Bulma se acercó a su esposo que seguía allí junto a la puerta, parecía que no tenía tantos ánimos de hablar con los demás, aunque eso era algo habitual en él.
Te felicito, lograste engañarme- dijo la científica mirando a su esposo con suspicacia. Realmente aquella sorpresa la había tomado desprevenida, le había encantado- debí sospechar cuando no te fuiste de la tienda cuando me probaba la lencería- agregó sonriente.
Tampoco eres tan lista- dijo Vegeta con sarcasmo al ver que su esposa le reprochaba sutilmente el haberle ocultado eso.
Cállate- le dijo mientras le daba un codazo- Acompáñame afuera, voy a buscar un vestido a la aeronave. Quiero ser la más hermosa en mi cumpleaños- dijo sonriente, afortunadamente tenía muchos en su vehículo.
Vegeta la siguió al escuchar su petición, caminó siguiendo a Bulma para que pudiera aparcar la aeronave al borde de la calle.
La próxima fiesta sorpresa recuerda traerme un vestido por si acaso, me gusta verme bonita- le sugirió con tono de reproche mientras sonreía, aun no podía creer cómo había podido engañarla sin que ella pudiera estar cerca de adivinarlo.
Lo tendré en cuenta- respondió Vegeta sin darle mucha importancia al tono que había usado para hablarle.
Bulma sacó el vestido lila y los zapatos que había comprado ese día y se cambió en la aeronave rápidamente. Incluso se había maquillado casi a la velocidad de la luz mientras Vegeta la esperaba afuera de la misma.
Salió de ella con una gran sonrisa y luego cerró la puerta de su vehículo. Volteó a ver a Vegeta y le extendió su mano para que los dos regresaran a la fiesta.
Caminaron hasta la puerta sin que ninguno dijera nada al otro, aunque antes de atinar a abrir la puerta Bulma se detuvo para mirar a su esposo con una gran alegría.
Este es el mejor cumpleaños que he tenido- le aseguró con una gran sonrisa, Vegeta la miró mientras le devolvía su típica media sonrisa. No podía disimular que le agradaba verla tan feliz.
Bulma se acercó a él y le dio un pequeño beso en los labios sin que él se lo esperara.
Tengo algo para ti debajo de este vestido cuando la fiesta termine- le avisó con una sonrisa traviesa. Había podido ponerse la lencería que había comprado ese día también para poder lucir mejor su vestido con ropa interior nueva.
Luego de decir eso y ver la expresión sonrojada de su esposo, le guiñó un ojo mientras sin soltarlo lo guiaba de la mano al interior del salón otra vez.
Fin.
Buenas noches! Hice este oneshot algo tarde porque se extendió más de lo esperado, pero no quería dejar de publicarlo ya que me involucre mucho en él para hacerlo.
Este oneshot está dedicado al cumpleaños de la hermosa Bulma, es el 18 de Agosto pero lo publique tarde. Ha sido mi personaje favorito desde que vi Dragon ball por primera vez y la aprecio mucho.
Si lea gusto por favor déjenme un voto o un comentario ya que eso me anima a hacer más oneshots y drabbles. Espero les guste este oneshot tanto como yo disfrute haciéndolo, muchas gracias por leer.
Nos leemos pronto.
Niebla~
