Las puertas de aquel lugar tan silencioso y lúgubre para cualquier ser humano razonable, por fin se abrieron ante sus ojos, su corazón no dejaba de latir con fuerza, sentía que la ansiedad por correr por aquellos pasillos la gobernaba, el sentido de urgencia después de haber esperado tanto no la dejaba en paz, pero ahí, mientras le hacían reconocimiento visual, tenía que mantener la calma, simplemente mantenía la respiración algo agitada…
—¿Todo bien?— preguntó aquel fornido guardia al verla con detalle.
Ella lo observó con una expresión de pocos amigos… —Si, solo que hay poco aire aquí abajo—
—¡Ha! Te acostumbrarás…— respondió el haciéndose a un lado para que por fin ella pueda ingresar.
Ni bien puso un pie dentro, se quedo momentáneamente detenida por la impresión de lugar, era un pasadizo oscuro, teticro, con paredes metálicas y al parecer un lugar totalmente inadecuado para cualquier ser humano, por instinto giró a ver al guardia, pero el con un ademán burlón negó con la cabeza…
—Ahí entrarás sola nena, Lord Freezer te está esperando—
Ella solo bufo y giro su mirada nuevamente hacia su horizonte, limpio el sudor de sus manos en su uniforme blanco y camino por aquel tenue pasillo, había caminado como si cruzara habitaciones largas y aún el pasillo continuaba, sin sonido, con poca luz, con un olor a puro hierro, mientras avanzaba trataba de controlar su respiración, debía hacerlo, ya que había llegado al único lugar existente donde habitaban sus esperanzas, desde que inició aquella riesgosa travesía se había encargado de conocer todos los rincones posibles, pero ninguno daba con lo que estaba buscando, no le importó tener que contribuir con sus desquiciantes proyectos y tener que para su desvergüenza, conseguir buenos resultados, no le importó si eso la llevaba a donde quería llegar, si eso, le abriría más puertas y como ahora, al parecer lograba estar en el corazón del sadico psicopata, aún recordaba aquellas palabras, como si aquello se hubiera convertido en vehemencia, como si ya nada existiera y el único ser que podía creer en esa posibilidad, también la dejaba atrás.
FLASH BACK
—Fue suficiente… debes detenerte—
Ella levantó la mirada y mordiéndose los labios para ajustar su quijada, lo confrontó. —Jamás, yo se que lo voy a encontrar—
—Estas asumiendo demasiados riesgos, ese sujeto no dejará que salgas de ahí nunca, te perseguirá, entiende, Kakaroto…—
—¡Suficiente! Por favor— dijo suspirando mientras lo miraban fijamente. —por favor, no lo creas, Vegeta… no me abandones en esto—
El suspiro agotado, viéndola a detalle, aquel cabello ahora corto, rubio, con una personalidad tan distinta, era sorprendente ver como aquel personaje que creo, ahora lo tenía frente a sus ojos…
—Bul.. —
—Anya, no te vuelvas a confundir— diciendo eso se acercó a él peligrosamente. —Prométeme que no me dejarás sola en esto—
Aquel escritor no tuvo el poder de quitarle los ojos de encima, mientras ella cuidadosamente se colocaba frente a él, sintiendo su respiración.
—¿Cuándo vas a detenerte? — preguntó el sintiéndose hipnotizado, aquel aroma, aquella arrogante y persuasiva mirada.
—Vegeta… no hay marcha atrás, si en caso no lo encuentro, mataré a Freezer y ahí, podrás desligarte por completo de esto— susurró mientras acariciaba sutilmente su mejilla. —Seguramente, yo también moriré después de eso—
Aquellos ojos negros se abrieron con espanto y para sorpresa de ella, sintió como sus brazos rodearon su cintura y sus labios fueron tocados, Vegeta unió sus labios a los de aquella rubia, con intención, ¿acaso existía algo más en ese momento? Para el no, ya que solo cuando ella colocó la mano sobre su torso, el se detuvo.
Anya le mostro una pequeña sonrisa y sin decir nada má, se retiró de su vista, caminando como si el no existiera más.
—Yo… te protegeré— susurró aquel sin que ella logre escucharlo.
FINAL FLASH BACK
—Vaya, veo que los pasillos te asustaron— mencionó Freezer al ver a la recién llegada.
Ella miró a todos lados y presa de cierta sorpresa titubeó…
—No, no hay problema, me gusta confirmar que todos sienten lo mismo, esto solo confirma que este es el mejor lugar— mencionó con cinismo Freezer.
—Es teticro, dime, ¿Qué escondes aquí? ¿Por qué dices que es el mejor lugar?— cuestionó ella sin dejar de ver con detalle a su alrededor.
Freezer alzó una ceja, odiaba que lo tutearan, pero ella… ella lo hacía de una forma que, por alguna razón, no lograba incomodarlo, solo atraerlo a la curiosidad.
—Este, es mi lugar preferido, aquí, logro lo que necesito y…
Mientras el hablaba ella procesaba cada palabra como flujo de información, imaginándose cada detalle expuesto por el.
—El que entra aquí, nunca más, sale…—mencionó con una sonrisa sadica y soberbia.
—Acaso… ¿tiene prisioneros? —cuestionó ella sintiendo su corazón bombardear a cada paso.
—¿Prisioneros? — cuestionó el empezando a reír por aquella pregunta. —¿Me crees un psicopata? —
—Yo… no, no lo sé, igual yo sería reservada— respondió con cierto titubeo.
—Vaya… me gusta, eres aguerrida y sin escrúpulos, sin embargo, lamento decepcionarte… aquí no hay nadie—respondió con total frialdad al que le decían el lagarto.
—¿Nadie? — repitió sus palabras ella, totalmente escéptica. —Entonces ¿que es este lugar? —
—Aqui— mencionó aquella palabra estirando sus brazos mientras giraba su torso con deleite y burla. —Aquí, solo hay muertos, nada vivo podría habitar aquí —
Aquellas palabras talaron en la mente de aquella joven, sus ojos se abrieron con real espanto, sintiendo un nudo en la garganta, eso no podía ser verdad, sin embargo miró a su alrededor y no había nada, solo pozos y cavernas vacías con aparatos tecnológicos, ni un rastro humano, sin poder contenerse se acercó a cada uno, miró, y no había nada, la angustia empezó a gobernar su ser, como era posible, estaba a punto de colapsar, de mandar al diablo todo y liberar el horror de sus sentimientos, liberar las lágrimas que se transformarían en sangre, pero pasos apresurados interrumpieron aquella escena.
—¡Que sucede! —
—Lord Freezer, ese maniaco otra vez— mencionó con preocupación el guardia.
—¿Qué quieres decir? —cuestionó Freezer confundido.
El guardia lo miró con real preocupación. Freezer entendió y salió de ahí inmediatamente, sin ninguna explicación hacia aquella joven que giró con sorpresa al verlo salir rápidamente de aquel lugar, y en el tiempo oportuno que sus ojos empezaron a derramar lágrimas con un quejido sonoro, miró a su alrededor, y esa que fue su esperanza, se había perdido, nunca más lo volvería a ver, nunca más escucharía su voz, ni sentirá sus abrazos, ni olería su piel, lo habían asesinado, era cierto, aquel cuerpo había sido el, no podía con aquello, se sentía débil, con ira, demasiada ira, y un odio indescriptible, habían matado al ser que amaba, justo cuando habían jurado estar juntos he irse lejos de ahí, sentía que le habían robado la felicidad de por fin pertenecerse y eso nunca se los perdonaría…
Se levantó lentamente, secando sus ojos, salió de ahí, aquella joven peliazul que aún había existido dentro de ella, acababa de morir.
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Cerró el computador nuevamente, no quería aceptarlo ni reconocerlo cuando veía a su ama de llaves verlo con suspicacia, no lo haría, no delante de nadie, pero muy en el fondo mientras ingería ese sorbo de vino, una ligera sonrisa marcaba sus labios, mientras un suspiro algo relajado lo empezaba a envolver, sin embargo el timbre de su puerta llamó su atención se acercó a la baranda de su escalera y observó a Tennis recibir a la visitante.
Tennis retrocedió por instinto, ella supo reconocer a quien tenía en frente, lo que no supo es entender el porqué se esa mirada perdida, era como si aquella chica que conoció un día, no existía más.
Vegeta se sorprendió en gran manera al verla, ella ingresó y levantó la vista, aquel escritor la veía desde su baranda, tenía la camisa blanca abierta, mostrando su fornido torso.
Ella no espero más, se retiró la bata, la dejo caer en el piso, dejo caer aquel bolso y se retiró los lentes haciéndolos caer también sin cuidado, y fue directamente hacia el, como si aquello que viera fuera el cielo, como si necesitara de él para sentirse aún de ese mundo.
El escritor vio como ella subía aquellas escaleras y pudo ver en sus ojos lo que temía. Bulma estuvo delante de él y sin pedírselo se recostó sobre su pecho, abrazándolo con fuerza, mientras escuchaba palpitar su corazón.
Vegeta se quedó sorprendido, miró a Tennis que observaba confundida, pero por la mirada de el supo que debía dejarlos solos…
—Está muerto, Goku está muerto— mencionó ella mientras aferraba su rostro a su pecho y las lágrimas caían sin detenerse.
Vegeta se quedó detenido, en silencio, con la mirada perdida sin ninguna expresión. —¿Cómo lo confirmaste? —
Bulma se alejó y levantó la mirada. —Fui al único lugar que quedaba, es que en realidad su cuerpo fue el que vimos, solo terminé por confirmarlo—
El abrió sus ojos con real consternación e intensidad, y para sorpresa de ella la atrajo hacia el con fuerza, levantó su rostro y la miró atentamente. —Entonces todo se acabó, debes superarlo—
Bulma lo vio a los ojos evidenciando el odio que sentía.
El lo noto de inmediato —¡Basta! Ya debes detenerte, debes seguir adelante, debes… olvidarlo— mencionó con ímpetu.
—¡pero que dices! Vegeta tú sabes quien era el para mí, como puedes hablar de esa forma como si no hubiera significado nada—
—Bulma, ¡el está muerto! Debes hacerte la idea y sacarlo de tu vida, de tu vida de una vez—
Ella se sentó al filo de la cama y suspiró. —Eres libre Vegeta, solo vine a decirte que este ya no es asunto tuyo, te libero de todo— diciendo eso se levantó con la mirada fría.
El escritor giró rápidamente para tomarla del brazo. —¿Qué vas a hacer? —
Bulma lo miró y ladeó su cabeza sonriendo sarcásticamente y no respondió.
—No te vayas, quédate esta noche aquí, conmigo— mencionó Vegeta sin un ápice de expresión, simplemente frío y directo.
La ahora pelirubia se sorprendió. —¿Dónde está Milk? No creo que—
—Ella no está aquí—mencionó el alejándose de ella mientras se servía una copa de vino.
—¿Dónde está? —Cuestionó Bulma alzando una ceja con sorpresa.
Vegeta miró hacia la ventana, observó los edificios y se quedo momentáneamente en silencio
—Ella se fue… y nunca va a volver— diciendo eso tomó todo el contenido de la copa y la dejó sobre el escritorio, Bulma se quedó desconcertada ante aquello.
—Es extraño, como que se fue, yo pensé que entre ustedes…—
—Ella se fue, se acabó simplemente, no me interesa volver a hablar de ella— mencionó con un tono frío y distante. —¿Deseas? — le preguntó acercándole un poco de licor.
—No— diciendo eso lo observó, persibio en él una mirada distinta, totalmente distinta. —Debo irme—
—¿Por qué? ¿Acaso no sientes soledad? Podríamos darnos un poco de compañía—mencionó el escritor con persuasión.
—Todo esto es tan extraño, siento cómo si no fuera real, no puedo aún creer que sea cierto que Goku no esté, y ahora me dices que… Milk se fue, ¿te dejo? — mencionó Bulma notoriamente afectada. —¡por qué nos pasa esto! —
Las manos de aquel escritor empezaron a moverse con cierta ansiedad, sus dedos empezaron a acariciar su propio cabello con cierta manía, su expresión se tornaba más fría e impaciente.
—Eso no… no tiene importancia—
Bulma miró hacia ambos lados. —Solo, solo quiero descansar, ir a mi cama, en ese suburbio que ahora es mi hogar, hasta que termine con todo esto—
Vegeta levantó la vista y preso de cierta presión al tratar de controlar sus ímpetus, dirigió su mano hacia su cama. —Tienes donde descansar, simplemente hagamosnos compañía—
Ella suspiró, caminó hacia aquella espaciosa cama, y se hecho boca arriba, mientras sus ojos observaban el techo y lo extravagante de sus dibujos, eran como si reflejaran una historia… —Nunca me detuve a ver el techo, o a preguntarme que significa aquel dibujo—
Vegeta se echó con ella y se quedó viéndola mientras ella no apartaba sus ojos de aquellos trazos. —Es una mujer cayendo a un abismo, pero logra sostener una cuerda, aunque la termina rompiendo con sus propias manos—
—Ella misma se mató— continuó Bulma para después cerrar lentamente sus ojos…
Aquel la quedó observando como un lobo vigilante a su presa, veía su perfil, como su pecho se levantaba por su respiración y como aquel bello rostro estaba oscurecido por la penumbra de aquel amor roto, y a pesar de eso, ella estaba ahí, durmiendo en su cama, cayendo en un profundo sueño, no pudo evitar expresar una ligera sonrisa torcida, era lo que estaba buscando…
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—¿Bulma? ¿Bulma? —
Aquella peliazul abrió sus ojos lentamente mientras sus ojos recuperaban la visión en aquella oscuridad, la sombra de aquel cuerpo era indiscutible, aquel aroma, aquel perfil y ese cabello rebelde que tanto adoraba…
—Despierta… Bulma—
Ella se incorporó con asombro mientras se aferraba a él y con sus manos sostenían con fuerza su piel.
—Me dijeron que habías muerto, todos te creen muerto— musitó con real impresión, sintiendo como su corazón se mantenía acelerado, mientras sus ojos se abrían más deseando que no sea una alucinación.
—¿Tú les creíste? ¿Les crees Bulma? —Aquel preguntó mientras su mirada se dirigía a los labios de aquella mujer que se desvanecía en sus caricias.
Bulma empezó a sonreír, hasta que el detuvo su tacto, se levantó y se fue alejando de ella.
—No, no te vayas otra vez, ¡no quiero que te vayas! —dijo ella levantándose en el acto para sostener su brazo.
—Queda poco tiempo Bulma, tal vez no pueda esperarte más—
Ella lo miró confundida viendo para su espanto cómo su cuerpo empezaba a desvanecer…
—¡No! ¡No me hagas esto maldita sea! He hecho de todo para encontrarte, pero he sido un fracaso, si de verdad estas vivo, no me lo perdonaría nunca—
—¿Podre volver a verte Bulma? El tiempo se acaba— mencionó el con una repentina voz debilitada, haciendo que ella se desespere por mantenerlo entre sus manos, pero aquella alucinación se desvaneció entre sus dedos…
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El sudor acompañó su intempestivo despertar, aún era de noche, pero no pudo contenerse más, empezó a llorar con fuerza, con frustración. Rápidamente unos brazos la sostuvieron, haciéndole acordar donde se encontraba, Vegeta la miró alarmado por su comportamiento.
—¡Bulma, detente, detente! —
Ella por fin abrió los ojos, lo vio directamente… —¡El está vivo! —
Vegeta la miró con real preocupación. —¡Que dices! —
—Tengo que irme— dijo tajante ella haciéndolo a un lado.
Vegeta giro a sostenerla del brazo con fuerza. —Estas actuando cómo una persona sin razón es evidente que Kakarotto murio y debes de una maldita vez aceptarlo—
Bulma lo vio directamente. —Lo siento si parezco una maldita loca, pero se lo que hago y estoy consciente de todo—
Vegeta la soltó sosteniéndose sus cabellos, prendió la luz y ella pudo observar a aquel hombre, con un pantalón negro, el mismo con el que lo vio horas atrás, el torso completamente desnudó, descalzo, y ella… cuando se dio cuenta, abrió sus ojos con real incredulidad, ella.. estaba completamente desnuda.
Vegeta vio la expresión de su rostro y alzó una ceja… —¿Ahora no te acuerdas? —
—¿Por qué estoy desnuda? — diciendo eso hizo un mapeo de sus prendas y las vio en el suelo…
—Hemos tenido sexo, uno que hace mucho no tienes—mencionó el retirando aquel cigarrillo de su bolsillo y empezando a fumar.
—No es posible, yo… yo no me acuerdo de nada— mencionó ella alarmada.
Vegeta se acercó a ella y la jaló hacia el haciendo que ella sobresalte, presionó su cuerpo al de ella y empezó a caminar empujándola hasta la fría puerta.
Bulma empezó a respirar aceleradamente, la expresión de el era distinta, vehemente y despiadada, hasta que sin premeditarlo mostró una sonrisa.
—¿Por qué te aferras a él? Acaso no ves lo que tienes frente a ti—mencionó Vegeta sosteniéndola de la barbilla con cierta fuerza.
Aquella ahora pelirrubia no pudo decir nada al quedarse fría por su actitud, no pudo evitar sentir cómo su piel se escarapelará cómo si estuviera en un terreno peligroso.
—Olvídate de el, es una relación que nunca hubiera podido ser real, es incesto, es horrendo, vergonzoso, no podías seguir con eso, te ibas a arruinar la vida y la de tus padres, por que conformarse con la oscuridad, cuando puedes ser libre— mencionó Vegeta mirándola atentamente.
Bulma sentía cómo sus lágrimas mojaban la mano y recorrían los dedos del escritor, quien aún sujetaba su barbilla.
—Ya no hay más distractores, quiero que te quedes conmigo, seamos solo tú y yo—
Bulma retiró la mano de el al entrar en si nuevamente, quiso alejarse, pero esta vez la sostuvo de la cintura. —Estas siendo demasiado brusco Vegeta, puedes controlarte— mencionó ella en un tono delicado, controlando su propio carácter.
Aquel abrió sus manos y la soltó, ella rápidamente fue por su ropa, la sostuvo y fue al baño y cerró la puerta. El se acercó a su balcón y se quedó pensando mientras la aspiración a aquel cigarrillo lo relajaba, todo tendría un final épico, no había marcha atrás, era parte de lo que la mente del escritor describía.
—Vegeta, dices que hemos tenido sexo y no recuerdo nada, es imposible que omita algo asi de mis recuerdos, ¿Qué me esta pasando? — musito ella con real preocupación llamando la atención del escritor.
Vegeta se acerco y sin previo aviso toco sus labios con su boca, aquel beso fue persuasivo. —No estas sola, yo estoy contigo, seremos los dos—
—No entiendo, ¿tus sentimientos han cambiado tan rapidamente? Pense que querias a Milk— dijo ella con la mirada cabizbaja.
—No es necesario mencionarla, ella ya no existe— dijo el con mucha seguridad en sus palabras.
Bulma lo miro fijamente. —¿Te volvio a herir, es eso? O es que acaso realmente no tienes sentimientos—
El escritor no bacilo en reir ante tal deducción. —Creo que si los tengo, pero solo para conseguir lo que quiero—
Ella no entendio sus palabras, pero aquello le genero confución, curiosidad. —¿Qué es lo que quieres? —
Vegeta guardo silencio unos segundos mientras la miraba atentamente. —Te quiero a ti—
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Ya no habia marcha atrás, ya nada la detendria, hoy era su ultimo día y sus acciones serian radicales… sus pasos continuaron sin titubiar, aquellos que veian su ingreso observaron asombrados pues de ella no habian sabido en meses, sin embargo se hacian a un lado mientras que con cierto titubeo la saludaban algo ansiosos.
—¿Sucede algo? — pregunto la sra. Brief al ver la cara de estupefacción de su jardinero, asi que no pudo evitar dirigir la mirada hacia lo desconocido, sin embargo su expresión se quedo detenida con la quijada semi abierta mientras las tijeras se le caian de la mano.
Bulma al verla no pudo evitar sentir satisfacción, no sabia cuanto pero la habia hechado mucho de menos, sin pensarlo se acerco a ella y la abrazo con fuerza.
—¡Querida! — Bunny correspondio en el acto. —Pero que te has hecho, tu cabello, esta… te pareces tanto a mi— menciono ella con cierta emoción. — Estas hermosa—
—Madre, dime, ¿Dónde esta mi papá? — pregunto Bulma mirandola fijamente.
—Él no esta, tenia un congreso, seguro quieres verlo— menciono ella acariciando su rostro. —¿Cómo esta la universidad?, desde que decidiste hacer ese intercambio, te he extrañado, la casa no es la misma— menciono con cierta nostalgia.
La joven observo a detalle su rostro y notaba ese aire de nostalgia y tristeza que como ella no podia ocultar.
—¿Lo extrañas verdad? — pregunto ella de repente.
Bunny la observo a los ojos y sin poder evitarlo se humedecieron. —Siempre, siempre lo haré—
—Madre, escuchame bien, es hora de que sepas cosas se te fueron ocultadas todo este tiempo— menciono tajante Bulma.
Su progenitora cambio de expresión. —¿Qué quieres decir? —
—Acompañame— diciendo eso Bulma sostuvo la mano de su madre con firmeza.
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—¿Qué es esto? — cuestiono Bunny totalmente anonadada.
—No espero que te enojes, por favor no lo hagas, solo fue por tu seguridad— menciono Bulma mientras su madre observaba las camaras de seguridad del laboratorio.
—Bulma esto es…—
—Lo sé, lo sé, te puede parecer horrendo, pero tuve que hacerlo, tuve que guardar evidencia, ya que sabia que si una dia llegara el momento de decirtelo, no queria que pienses que estaba loca o que aun no superaba la muerte de mi hermano. —
—Bulma esto…— mientra trataba de pronunciar aquellas palabras sus puños se cerraban con fuerza, alarmando a la joven sin embargo, giro a verla con sus ojos azules totalmente abiertos por la impresión. —¡Bulma, esto es asombroso! —
La joven se quedo sin palabras.
—Si existe esa posibilidad y a estas alturas tu eras la unica que las tiene, entonces no las pierdas, si tan solo hay una sola posibilidad, entonces has lo necesario, pero traelo de regreso— menciono su madre con real intención.
Bulma no podia creerlo. —Madre yo—
—Entiendo, si tu padre las tuvo y Vegeta también, es porque habia una fuerte justificación para creerlo, y yo no puedo superarlo, un chico como él, con un futuro por delante, si han hacerle daño entonces, usare todo para destruir a quien le hizo esto—
Aquella joven no pudo con la impresión por aquellas palabras, la persona que menos se imagino, estaba dandole su respaldo..
—Yo te apoyare Bulma, pero lo quiero de regreso— menciono su madre con la expresión fuerte y segura que una vez tuvo y que por aquel suceso la perdio consumida en la tristeza.
Bulma deseó abrazarla, darle las gracias pero sabia que habia tomado una decisión radical, y no habia marcha atrás, debia decirlo todo. — Hay posibilidad de que ya no este, ten eso en cuenta, no quisiera que esto te vuelva a afectar—
—Nunca tuve esa posibilidad, ya padeci su muerte, al menos quiero… quiero hacer lo que por cobardia no hice— menciono ella.
—¿Qué quieres decir? — pregunto Bulma confundida.
—Yo… — Antes de continuar suspiro, le era dificil continuar, pero ella sintio que tampoco habia marcha atrás —yo averigue cosas de tu hermano, contrate a un detective privado, me dijo todo, antes de que sucediera todo ese desastre—
—Lo sé, ese dia me lo dijiste— menciono Bulma
—No te dije todo, y no hice nada— menciono la matriarca. —Yo debi investigar a fondo, dar con el culpable de todo esto, pero… me dio tanto miedo descubrir más. — diciendo eso su madre levanto la mirada y la vio directamente.
—Ese dia no lo dije, porque más importante era la vida de tu hermano, pero me entere de lo más delicado que me hizo retroceder y no querer saber más—
Aquella joven pelirubia sintio como si su estomago se vaciara y las manos repentinamente le temblaran.
—Por eso me lamento, porque aquel miedo que me hizo estar en una burbuja y no quise averiguar más, y me arrepiento porque tu padre a sido un inepto, no ha podido descubrir al autor de tremenda bajeza y a escondidas ha tratado de saber si esta vivo su hijo ¿Cómo es que se a dado por vencido? —
Bulma se quedo en silencio, mientras su mente daba un sinfín de vueltas, queriendo negar aquellas posibilidades, con un miedo atroz de preguntar.
—Considere que lo que estaba pasando, era demasiado para ti y para todos, como para exponer algo más que complique aun más las cosas, en ese momento comprendi todo—
Ya no era necesario preguntar, era evidente a donde llegaria aquella confesión. Bulma solo sabia que sus lagrimas no paraban de salir y su rostro no podia ocultar el rojizo de la vergüenza.
—Entendi entonces porque el rechazo a Lazuli, por que tus repentinos cambios de humor y tu tristeza poco despues de saber del compromiso de tu hermano, porque si fueron tan unidos de niños ahora parecian en contienda constantemente, y como él cambio contigo y se volvio tan frio y distante cuando se entero lo de Vegeta, yo pensé, que fue por el tema de tu educación, del apoyo hacia mi, por tu reputación, pero no, eran celos… celos de hombre—
Bulma no pudo evitar retroceder mientras se tapaba la boca con ambas manos.
—Todo… fue reciproco, hora entiendo por que nunca aceptabas salir con alguien, preferias estar en casa, y era obvio, aquí tenias todo, él… él estaba aquí, y por más que me pregunté muchas veces, ¿por qué? Era logico que Goku termine su relación con Lazuli, el no la amaba, él…— diciendo eso empezo a sollozar… —él te amaba a ti—
La mirada de su madre la dejo sin palabras, sumergida en un mundo fuera de la realidad, estaba ahí a pocos metros de su madre, escuchando con sus propias palabras la descripción de sus actos, de sus ilicitos actos. Bulma cayó al piso, de rodillas, se sintio doblegada y con el dolor de saber que no solo tuve que soportar el saber de la perdida de su hijo sino de la destrucción de los mismos.
—¿Por qué… por qué no me reclamaste nada? — menciono Bulma mirando hacia el piso.
—Nunca los he dejado de amar y aunque en definitiva iba a tomar acciones importantes para ustedes al enterarme de esto, decidi manejarlo discretamente y analizar las opciones, pero… no tuve más tiempo, porque sucedió aquella desgracia y eso dejo de ser importante— menciono Bunny acercandose a Bulma al mirarla destrozada.
—Lo siento, perdoname, pero no puedo ocultarlo más, yo amo a Goku, me enamore de mi hermano y el de mi desde muy jovenes, no quisimos nunca hacerles daño pero era inevitable, no pudimos controlarlo, ibamos a huir mamá, probablemente esa hubiera sido la mejor solución…— menciono Bulma mientras sentia las manos de su madre sobre sus hombros.
—Mirame Bulma— menciono Bunny al ver que aquella solo le hablaba al piso. —¡Mirame a los ojos! —
—No puedo, no puedo— mencionaba la joven en negación por tal confesión.
—¡Bulma! ¡Si el sentimiento que tienes por Goku trae de nuevo a tu hermano entonces no lo ocultes más! — le grito su progenitora con autoridad mientras la sarandeaba de los hombros.
Bulma por fin vio directamente a su madre.
—Hay cosas que tienes también que saber— menciono su madre.
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Los pasos de aquella joven caminaban seguros por aquel pasadizo, algunas oficinistas la miraban con cierta antipatia, sin embargo la sonrisa hipocrita era evidente, aun así para ella eso era irrelevante.
—¿Dónde ha estado? Lord Freezer la ha necesitado— menciono su asistente con frialdad.
—Vengo a hablar con él— menciono ella segura, ocultando sus manos en los bolsillos de su saco.
—Esta ocupado, le dire que la llame— menciono.
Sin embargo ella omitio sus palabras, siguió adelante y se dio con dos altos y fornidos hombres. "siempre resguardado" penso la joven antes de acercarse a ellos.
—Voy a pasar— menciono Anya
Aquellos se miraron entre si iban a refutar pero…
—Necesito hablar con el, es importante, me ausente porque fui en búsqueda de información importante—mencionó ella
—¡Le dije que estaba ocupado! —mencionó disgustada la asistente.
—Ella no tiene conocimiento de la información —Lo justificó la joven haciendo que de repente uno de los de seguridad de un ademán de adelante.
—¿Estás seguro? —cuestionó el otro de seguridad.
—No creo que le incomode, la ha estado buscando, puede que se enoje si le decimos que la vimos y se fue— de eso modo justificó su decisión el guardaespaldas.
Los tacones de la joven hacían un sonido particular que Freezer ya conocía. Aquel estaba de espaldas sentado en su silla de escritorio, Anya aprovechó para colocar cerrojo a la puerta.
—¿Asi que apareciste? Crei que aquel sótano te había decepcionado— mencionó Freezer sin darle cara.
—La verdad es que sí me decepcionó, pensé encontrar personas encarceladas—mencionó Anya con liviandad.
Ante aquellas palabras el giró inmediatamente. —¿Encarceladdas? ¿Y por qué tendría que encarcelarlas? —
—No lo sé, ajuste de cuentas tal vez, o ¿experimentos? —respondió ella sin bajarle la mirada. Esta vez su expresión denotaba una personalidad diferente.
—Te ves diferente —mencionó el al analizar su comportamiento. —Sin embargo, es una pena decepcionarte, no soy un psicopata, no tendría por qué tener personas torturadas—
La poca paciencia que hasta entonces había tratado de mantener se estaba agotando aún así daría la última carta. —¿Asi? Pensé que un hombre con su reputación, no andaba en juegos, pensé que si tenía enemigos los eliminaría o se vengaría—
Aquel con sus palabras se quedó estupefacto. —¿Mis enemigos? ¿Mi reputación? ¡De qué estás hablando! ¡Acaso estás mal de la cabeza! —
Aquellas palabras y el tono de su voz estaban cambiando, pero antes de que el se levante de su asiento ella se acercó a él, lo suficientemente como para dejarlo detenido y perdido en sus ojos azules, por más villano que fuera o insensato que pareciera no podía ocultar la atracción física que tenía por aquella mujer.
—Bien, aquí me tienes Freezer— mencionó ella sentándose sutilmente sobre el.
Las manos de él se quedaron en el aire, sorprendido pero no incómodo. —¿Qué estás haciendo? —
—Lo que he querido hacer desde el primer día que te vi—mencionó ella con total seguridad en sus palabras estremeciendo sagazmente a aquel que no dejaba de mirar su rostro y lo bello que era.
Por un momento se sintió emocionado o alarmado, es que acaso tendría un encuentro sexual con ella, acaso tanto era su fascinación por el cómo para delatarse tan insensatamente en su oficina, a sabiendas de que podía rechazarla o humillarla, el era calculador y con cierta reputación pero era algo diplomático y seguido a ciertas costumbres aristocráticas, por lo que lo que ella le estaba mostrando era cierta insolencia, sin embargo al sentir su piel sobre su cuello, empezó a dudar de sus propias convicciones. Cuando se dejó llevar, aquel sonido inconfundible de un arma lista para disparar lo detuvo, abrió sus ojos mientras que su respiración se aceleraba.
—No te muevas y ni se te ocurra gritar, porque te juro que disparo todas las balas que tengo cargadas y haré pedazos tu estomago—mencionó ella en un susurro justo a su oído.
Aquel levantó las manos mientras sentía el prominente objeto apretar su estomago.
—¿Quién demonios eres? —
Bulma lo observó con ira revelando por fin sus intenciones. —Soy hermana del que te enzañaste, soy Bulma Brief hermana de Goku—
Aquel abrió sus ojos con real asombro.
—Ahora sí sabes quién soy verdad, ¡Maldito bastardo! —
Aquel cambió su mirada a una fría y sin escrúpulos. —¿Por qué estás aquí? —
—¡Quiero que me digas dónde está mi hermano! Dímelo ya o te juro que te mataré —
Freezer empezó a sonreír. —Sabes que así me mates o me hieras no saldrías viva de aquí, tengo seguridad por todos lados, o es que eres tan estupida que no lo tomaste en cuenta en tu plan de justifica—
—Se muy bien lo que va a pasarme, pero aún así tú no saldrás vivo de aquí, así que, si muero, mueres tú conmigo, no solo vengo con esta arma, mi cuerpo puede hacer pedazos todo este espacio en cualquier momento—
Cuando ella pronunció aquellas palabras la sonrisa de Freezer desapareció. —¿Acaso eres suicida? —
—A eso vine, pero puedes vivir y decirme dónde está mi hermano de una maldita vez—mencionó ella presionando su estómago.
—Con que eso te han dicho… vaya que ingenua eres, estás perdiendo tu tiempo y tu vida en vano, yo nunca le hice daño a tu hermano—mencionó el mirándola fijamente.
—No seas cobarde, confiésalo, fuiste tú, nadie más quedria hacerle daño, nadie más que tú y tus malditas venganzas, como lo hiciste con Vegeta—
—Debi imaginarlo, Vegeta otra vez—mencionó el con un semblante de hastío. —Bien, llegaré a un acuerdo contigo —
—¡Qué! Yo no estoy en juegos estúpidos, dime de una vez dónde está Goku o mueres ahora mismo—
—¡Entiende! Yo no tengo ningún motivo para hacerle daño a los Brief, tengo acuerdos empresariales importantes, no son mi objetivo, pero es una lástima, que creas en las mentiras que te inventaron —
Bulma no daba crédito a sus palabras, es que era imposible si no era el, entonces que demonios estaba pasando. —Mientes... tu, tu hiciste que apuñalen a mi hermano en esa contienda, fue tu gente—
—No fue mi gente, nunca fuimos nosotros, el único psicopata que tú tanto buscas, lo tienes frente a ti, en tu casa y tal vez… en tu cama— murmuró el al saber el histórico de la hija de los Brief.
Bulma empezó a mover la cabeza en negación.
—Solo analiza, ¿por qué quedria una persona como yo, lastimar o asesinar a tu hermano? ¿Qué ganaría? El no es mi Objetivo—
—¿Obejtivo? ¿De que hablas? —
—Tu hermano, sabía muy bien con quién estaba, con quién frecuentaba y lo peligroso que podía ser, pero como tú… y como otros, seguramente se dejó llevar y confió, aunque en el fondo supo siempre quién era—
—¿De qué hablas? ¿De quién hablas? —
—Sabes muy bien de quién hablo —mencionó Freezer mirándola fijamente.
—No, eso es imposible, me estás engañando— diciendo eso se levantó de él sin dejar de apuntarlo, esta vez a la cabeza. —Vegeta sabe que fuiste tu—
—Le creiste… solo estas perdiendo tu tiempo, nunca encontraras a tu hermano porque estas en el lugar equivocado o esta muerto ya, lo que no entiendo, es por qué Vegeta lo haria, que tiene tu hermano que el desearia para si— menciono al aire aquel mientras sus pensamientos trataban de analizar aquel hecho.
Bulma se quedo en silencio, con la respiración agitada sintiendo que sus ojos querian demostrar lo afectada que se encontraba… pero Freezer sin perder su atinado filo la miro directamente.
—Ahora recuerdo, en esos afanosos encuentros clandestinos se movia mucho dinero, cuando vi que tu hermano era un excelente peleador investigue de el y supe entonces que era el hijo de los Brief, porque el tenia cierto anonimato, pero yo puedo saberlo todo y fue donde ¡PUM! descubri algo interesante…—menciono él con una sonrisa ladina sin importarle estar siendo amenazado. —Descubri que los hermanitos Brief tenian una relación incestuosa—
Aquellas palabras hicieron tambalear a la peliazul.
—Ahora si yo hubiera querido realmente destruirlos, con toda la evidencia que logre obtener, pude haber hecho publico esto y derrocar a tu familia, pero nunca lo hice, es más ni mire las fotos que me entregaron por eso es que no reconoci tu rostro, creo que siendo yo una persona con mi poder, no necesito mentirte mocosa estúpida, baja esa arma de una vez—
Bulma lo miro con rabia, enojo, pero no puedo mantener su amenaza, simplemente bajo las manos.
—Vegeta arruino la vida de alguien que quise, pero no solo eso, me calumnio y logro que yo perdiera esa batalla, el es mi objetivo, pero al ser tan sanguinario como yo, no tiene escrupulos, y si le doy él me lo devuelve, por eso con él debo ser cuidadoso, aunque el tiempo me desespera, se que pronto lo tendre en mis manos—
—Insinúas que…—
—Yo no insinúo nada, yo estoy afirmándolo, el sabe dónde está tu hermano, claro está si él realmente tiene un fin o un propósito—
Bulma reaccionó, empezó a recordar situaciones, momentos, escenarios donde él siempre ha estado involucrado, incluso después todo, recordó las advertencias sin justificación que Goku le había dado en su momento, no pudo con eso, retrocedió golpeando su cuerpo contra la pared.
—Vaya parece que acabas de recordar algo, estoy seguro de que si fuera yo, este tiempo trabajando aquí, hubieras descubierto algo, pero no encuentras nada porque no existe— mencionó Freezer haciendo que ella analice más cosas y recuerde que el siempre tuvo todo acceso a la casa y conocía los horarios de todos, conocía los secretos de Goku y conocía su debilidad.
—Demonios… —musitó ella tocandose la cabeza con ansiedad.
—Es una pena, diste tu vida en vano, ahora moriras sin realmente recuperarlo o tal vez sin tener la justicia que buscabas—
—Vegeta hizo que yo esté aquí, me utilizó…—balbuceó ella totalmente desconcertada…
Freezer abrió los ojos grandemente. —¿Cuanta información le has dado? —
—El sabe todo, le he dado todo este tiempo información de ti y de tus movimientos—
—¡Que! ¡Eres una estupida! Ese miserable… ahora entiendo como pudo atacar un grupo de defensa de mi guardia sin problemas, conocía sus ubicaciones y sus horarios, ¡maldita sea! —
—¿Tú familia sabe de esto? —mencionó el sigiloso.
—Mi padre solo a sido un títere, nada más—
—Supongo— mencionó Freezer molesto. —Bien, te adverti que no saldrías viva de aquí, yo soy inocente, no crees que asesines a alguien injustamente, no tienes salida Brief, acepta tu destino—
Bulma empuñó sus manos, si lo que él decía era cierto entonces sus esperanzas no existían más, todo se había acabado, cerró sus ojos mientras aquella arma se escapaba de sus manos. Antes de que Freezer lleno de rabia por aquel mal momento tome su vida y la vuelva polvo, ella recordó su rostro, y cierto presentimiento interrumpió ese momento, aquel sueño y algo en su pecho no la dejó en paz. Levantó la mirada y fue hacia Frezeer, quien sin piedad solo deseo verla muerta.
—Espera, ¡necesito tiempo!—exclamó ella.
—No lo tienes—respondió fríamente el.
—Yo soy la única que puede entregarte lo que tanto quieres— se apresuró a decir sintiendo que el aire se escapaba de sus pulmones.
Freezer la miró con suspicacia. —No soy tonto para confiar en ti, tienes mucha información sobre mi, eso es peligroso—
—Si me estás diciendo la verdad y en verdad fue el, yo lo descubriré y te lo entregaré lo juro—mencionó Bulma en un acto de ruego. —Claro, si de verdad es cierto lo que dices—
Ambos se vieron fijamente, por algún presentimiento oscuro el supo que debía contestar.
—Dime Freezer, hacemos un trato—
—El la miró atentamente, el silencio gobernó el espacio, pero fue clave, ella necesitaba una respuesta.
—¿De verdad lo harias? Sabes… lo que yo haria con él— mencionó Freezer con suspicacia.
—Asi es—
—¿No te importaria? —la cuestionno.
—Si un psicopata como tu, la verdad ya no—menciono ella con dudas, creyendo que era una simple artimaña de él, creyendo que todo era falso y solo una salida para acabarla al verse descubierto, pero ella estaba lista, lista para que todo se destruya y por fin a ver tenido algo de justicia, pero solo eso necesitaba, aquella respuesta para confirmar la verdad.
Freezer la vio a los ojos, ella lo vio a él, cuando ella creia que el llamaria a sus guardias para que la asesinen y estaba dispuesta a todo, escucho de sus labios algo inimaginable.
—Esta bien, ve por él, descubre su infamia y entregamelo—menciono Freezer desmoronando toda la consciencia de la joven….
—¿Qué? Tu sabes que si yo descubro que me mentiste, tengo suficiente información de tus lugares privados, secretos, y movimientos, no hay forma de que no te encuentre y con todo el dinero que tengo, te destruya—
Frezer sonrio maquiavelicamente. —Esta vez, no fui yo, asi que no tengo miedo de tus amenazas, solo anhelo tener a ese bastardo pagando, me las debe—
Bulma lo miro consternada, analizando su expresión, viendo sus movimientos y su actitud no era de alguien que estaba ocultando algo, ni estaba mintiendo.
—Pero antes… te prepararé un poco, tratar con alguien como el, que no conoces realmente, puede ser peligroso ya que el podra deducir tus pensamientos, necesitas saber como aquel escritor con fachada de sujeto civilizado, puede pensar o actuar— menciono Freezer con una sonrisa fria.
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Corrio, tropezo, siguio corriendo, ¿Quién demonios era Vegeta? Como era posible que ahora este en la lista de los sospechosos o peor aun, del responsable directo de aquel acto tan ruin, ella siguio, corrio, llego a su vehiculo y lo toco el timon con apego, ese era uno de los autos de su hermano, si era cierto lo que insinuaba Freezer, ella, se encargaria de hacerlo pagar por cada dia lejos de ella.
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—Yo solo espero que sea como tu dices—menciono Yamcha apagando el cigarrillo.
—Asi es, demoroó pero, ya la tengo casi lista—respondio el sin ninguna incomodidad al respecto.
—Te veo de mejor animo, eso a pesar de todo me da gusto, esa zorra se volvio a ir, perdiste a tu mejor amigo y ahora sales adelante, admiro eso de ti Vegeta— comento Yamcha al aire.
—Prefiero que no te expreses de ella, es más no la menciones, realmente ya no me interesa—
Respondio Vegeta.
—Entiendo, espero esta vez si veas la posibilidad definitiva del divorcio, es por tu imagen—
—Quiero pedirte algo—menciono el escritor con interes.
—¿Qué cosa? —
—Quisiera que organices un torneo, de los que siempre me han gustado—menciono el con sigilo.
—¿Qué? Pero pense que despues de lo que habia pasado, preferirias alejarte de ese entorno, sabes que hicieron investigaciones y…—
—Si, pero yo no sali involucrado— lo interrumpio Vegeta —Necesito organizar uno, tu sabes que dejan mucho dinero y… de paso puedo seguir en busqueda de Freezer—
Yamcha lo miro con duda, no le agrado esa solicitud, pero al ver el afan de aquel lo considero.
—Hablaré con los chicos al respecto, sabes que necesito de ellos para organizar algo asi—
—Has lo que quieras, pero hazlo—menciono Vegeta sintiendose entusiasmado.
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Aquel dia en la noche, el estaba listo para salir, tenia puesto una camisa blanca, un pantalon negro y con cierto aroma embriagante, estaba dispuesto a disfrutar de una noche social, sin embargo, cuando el ascensor se abrio, vio ante sus ojos a aquella ahora peliazul mirandolo atentamente, lucia hermosa. El no pudo evitar sorprenderse.
—¿Ibas a salir? —
—Si, ese era el plan… no sabia que vendrias—
Bulma sin responder ingreso a su departamento. —Pensé mucho en lo que me dijiste, tal vez, tengas razón, es hora de olvidar—
—Tu cabello, lo cambiaste, ¿Qué paso con…—
—Ya no tiene sentido, si Goku esta muerto, ya no tiene sentido—lo interumpio mientras suspiraba—Prefiero no hablar de eso, entonces ¿vine en mal momento? —
Vegeta iba a salir a hacer algo de vida social, pero vio la facha de aquella mujer y no pudo evitar verla con detalle, aquellas formadas piernas no se ocultaban debajo de esa pequeña falda. —¿Viniste a estar conmigo? —
Bulma lo vio directamente, se quedo en silencio unos segundos, con cierta duda en su pecho y en sus pensamientos, como era posible creer que alguien como él, podria ser capaz de algo asi.
—¿Estas aquí? —ironizo Vegeta al verla algo perdida.
—Lo que pasa es que… te veo muy apuesto— dijo ella con cierta sonrisa forzada, tratando de ocultar sus pensamientos.
El escritor ladeo su cabeza y la observo detenidamente, con una sonrisa enigmática.
—Lo siento, solo me estoy dejando llevar, creo que mejor me voy— diciendo eso paso por su costado, pero él, la detuvo.
—No te vayas, solo que… me tomaste por sorpresa, ¿deseas tomar algo? — le ofrecio dirigiendose a la barra.
—Dame una copa de vino— le respondio mirando su espalda con una mescla de miedo y culpa, si todo resultaba falso, se arrepentiria de todo eso y ya no queria más lamentaciones.
Vegeta le acerco la copa, ella la recibio y carraspeando su garganta lo miro atentamente. —¿Cómo va tu libro? ¿Sigue siendo tan oscuro y destructor? —
El la observo sorprendido. —Te dije que no lo publicaria—
—¿Sigues escribiendolo verdad? No acabaras de hacerlo hasta que este terminado — menciono ella recordando aquellos relatos.
—Bulma la inspiración puede ser complicada… despues de todo — respondio inclinandose sobre el meson.
—Pensé que deseabas tener algo conmigo, aveces pienso que me crees demasiado ingenua— menciono ella viendolo a los ojos tratando de leer su reacción.
—¿Qué? ¿Por qué lo dices? — respondio con una sonrisa considerando interesante el contexto.
—Yo se que cuando alguien tiene una fascinación por algo, por el arte por la ciencia o lo que sea, no lo deja paralizado, en la oportunidad precisa lo toma con fuerza, creo que todo lo sucedido es suficiente inspiración, sobre todo para alguien que a sido casi observador— menciono la peliazul mientras jugaba con su copa de vino.
Aquel no pudo evitar sonreir nuevamente. —Bueno, digamos que un poco, pero nada dramatico, le he dado un giro diferente y nada que puedo afectarte—
—¿Un giro diferente? — cuestiono ella con cierto interes inquietante.
—Si, uno que no tiene que nada que ver con la realidad, digamos que si un día te animas a leer, veras que es pura subrealidad— menciono tomando un sorbo de vino.
—¿Cómo un mundo paralelo? O ¡ya se! Una realidad alternativa, oculta entre lineas tal vez— menciono ella con un mirada con determinación.
—Vaya, eres muy análitica, brindemos por eso— respondio levantando su copa en un brindis.
Bulma chocando sutilmente sus copas observo los ojos oscuros de él y esa mirada tan profunda que le brindaba… Sin poder evitarlo sintio las manos de Vegeta sobre las suyas, ella guardo silencio, dandole acceso a que el respire sobre su cuello, sienta su piel y con ciertos besos empiece a acariciar sus hombros…
—¿Entonces todo termino verdad? — pregunto repentinamente él —Ahora somos solo tu y yo— rompio el silencio al no tener respuesta, dejandose llevar por el olor de la piel blanca de la joven Brief.
Bulma ladeo su cabeza sintiendo los besos de aquel, sintiendo como el de repente se atrevia a acercarla más, deslizando sus manos hacia sus gluteos. —No sabes cuanto quise esto— volvio a interrumpir el silencio . —Te hare mia por todos lados— le dijo en un susurro vertiginoso, revelando con el tono de su voz toda la lujuria y codicia que sentia por ella.
—Vegeta…—Aquella peliazul al sentir las manos de el inrumpir en la intimidad de su piel, empezo a tratar de alejarlo con sus manos…
Aquel sonrio de lado, verla con la respiración algo agitada lo adormecio más, simplemente la jalo hacia él y sin importarle el momento, abrio sus piernas con cierta urgencia.
—Vegeta, ¡calmate!— empezo a forcejear ella tratando de alejarse aunque parecia en vano.
—No puedo, te desee tanto, me prive de muchas noches, ya no hay por que esperar más, ya no existe ningun motivo—
De pronto la necesidad se convirtio en urgencia, ella siendo espectadora, pudo medir su nivel de fuerza y el deseo desquiciante que lo estaba cegando sin importarle siquiera hacerle daño.
—¡Estoy en mis dias! ¡espera por favor! — aquella salida desesperada, pero oportuna, en el acto aquel se detuvo.
—¡Maldita sea! — refuto el tocandose sus cabellos.
—Tranquilo Vegeta, no es para tanto— menciono ella
—Soy asquiento, demasiado como para que me digas eso— diciendo eso se alejo de ella yendo hacia la barra.
Bulma suspiro con alivio aunque giro a verlo directamente y notar el semblante frio y distante que ahora tenia en su rostro.
—Vaya… pareces molesto— respondio ella.
—Sigues pensando en él— menciono de repente Vegeta con cierto enojo contenido.
Bulma se quedo estupefacta al escucharlo, aun en su mente estaba en la contienda de creer que fuera verdad y debia arriesgar todo. —Si—
Vegeta ante eso sintio como si la sangre le hirviera y sin ningun reparo dio un golpe estrepitoso sobre la mesa del bar haciendo sobresaltar a la peliazul. —¡Kakarotto esta muerto! No entiendo cuando lo vas a superar— diciendo eso arreglo sus prendas, sostuvo sus llaves y la invito a salir.
—¡Qué! ¡No! No quiero irme— menciono Bulma causando confusión en el escritor.
—Yo no estaré aca, saldré— menciono tajante él.
—Bueno, vete, yo te esperare— respondio ella con cierto desparpajo.
El examino su comportamiento, se acerco a ella y lo medito por unos segundos. —No, no hay sentido que te quedes y no es necesario que me esperes—
Bulma se levanto de su asiento, habia controlado bastante su carácter, pero el comportamiento tan atipico y poco conocido que ahora él le mostraba, la hacia ser más insistente, debia tener respuestas y no podia irse de ahí. —Vaya Vegeta, al parecer si no hay sexo no hay nada, tan superficial es lo que me ofreces, asi ¿quieres que me olvide de Goku? —
"La provocación a veces saca de contexto incluso al más calculador"… menciono Freezer ante la mirada atonita de aquien momentos antes era su vil verdugo.
Vegeta la miro con la expresión endurecida, sostuvo sus cabellos con cierta mania y sin que ella pueda premeditarlo la jalo del brazo toscamente.
—¡Que haces! — refuto ella al ver que el la llevaba a cierto lugar.
—Acabas de arruinar mi noche, ahora…— diciendo eso y mirandola a los ojos fijamente. —Arruinare la tuya— diciendo eso la empujo hacia una habitación pequeña y cerro la puerta con seguro.
—¡Que demonios haces Vegeta, sacame de aquí! — grito ella mientras pateaba aquella puerta.
Vegeta empezo a reir ante su comportamiento. —Rezale a tu hermano, tal vez te escuche, a ver si asi de una maldita vez se aleja de ti y te hace recapacitar—
Bulma se quedo en silencio mientras escuchaba como el se alejaba y la puerta principal se cerraba brucamente.
Empezo a patear la puerta, a buscar luz, pero su enojo y desesperación la hizo repetir lo mismo inconscientemente, sin ninguna solución, estaba muy enojaba sintiendo que ella no era un objeto para que nuevamente el se crea con la capacidad sobre ella de privarla de su libertad, en eso mientras sus pensamientos atribulados estaban enardecidos, ella se acordo de ese hecho, Vegeta fue el causante de que ella este recluida unos meses en aquel lugar de salud, mientras la investigación de su hermano se daba, sus ojos se abrieron y su cuerpo se detuvo, colocó ambas manos sobre la puerta y su cabeza se puso a ver el piso. Efectivamente mientras todo se daba ella no pudo hacer nada, injustamente la habian privado de su libertad y de la capacidad de manejar aquella investigación y él fue quien manipulo todo para que sus padres lo permitieran.
Se limpio las lagrimas con la manga de su camiseta y su ceño se fruncio con gran ira. Ella no lo permitiria.
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.
Las patadas venian una tras otra, con ira, con enojo, con celos desquiciantes que no podian detenerlo ni aplacar su actuar. —¡Maldita sea! ¡Te voy a matar! ¡Te voy a matar! — esta vez no quedará nada de ti.
Continuara…
AMAPOL
