Capítulo XV

Grant se sirvió un vaso de whisky y lo llevó hasta el sillón. Luego de dejar a Lionel, llegó a su departamento y revisó todos los datos que ya tenía y que obtuvo luego de investigar, y atar algunos cabos sueltos. Consideró que ya era hora de cerrar la trampa y obtener la recompensa. Lo haría al día siguiente.

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En cuánto las imágenes terminaron. Lex ya había dado cuenta de todo su desayuno y hasta un poco de el de Clark.

–Me gusta como me veo de Presidente y vestido de blanco.

Clark tuvo que estar de acuerdo con la afirmación de Lex.

–Te verías muy guapo.

Lex se giró a verlo y le dio un leve beso en la boca…

–Pero sin ti en mi vida, no sería divertido. Así que, ¿Qué haremos para evitar que Brainiac logre su objetivo?

Clark suspiró, murmurando.–No quiero viajar al pasado.

Lex bebió lo último de su té y dijo:

–No me has dicho que sucedió.

–Hubo algo que Jor-El me pidió y…

–No lo hiciste. Digo, he notado que te resistes mucho a hacerle caso.

Clark se encogió de hombros.–No empezamos nuestra relación de buena manera. Lo que pasó fue ..–Clark le relató lo sucedido con Jonathan.–Por eso no le hago mucho caso.

Lex sonrió levemente, se acercó al oído de Clark y con los labios pegados al oído del Kryptoniano, le susurró…

–La IA tiene mucha información importante para ti y .. puedo programarla para que sea menos intransigente.

Clark se volteó y besó con pasión a Lex.

–Te amo, eres el humano más inteligente que he conocido.

–También soy guapo.

–Eso se da por contado.

Clark se levantó y fue hasta la habitación por la tablet de Lex. Regresó y se la entregó.

–Ten amor. Confío en que encontrarás una solución.

Lex sonrió cuál Gato de Cheshire y comenzó a arrastrar el dedo. Clark lo levantó de la mesa y lo guió a la sala, donde lo sentó en el sofá mullido, le dio un beso en la frente y enseguida se acomodó a su lado y alzó los pies del mayor para masajearlos. Clark pidió un televisor y una pantalla apareció frente al sillón, al mismo tiempo la pequeña mesa de centro se abrió para mostrar algunos controles y audífonos. Clark tomó un par de audífonos y se los colocó para escuchar la pantalla y no molestar a Lex.

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Lionel iba llegando a a LuthorCorp y tuvo que reprimir su gesto de malestar ya que Grant lo estaba esperando. Grant se adelantó y recibió al mayor

–Me imaginé que vendrías a trabajar

–No se requiere esfuerzo físico para hacer negocios.

Grant no respondió, más siguió al mayor y de ese modo llegaron a la oficina de este. Todo el día hizo lo posible por ayudar a Lionel.

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Lex se estiró y bostezó.

–No sé que tengo más, si hambre o sueño.

Clark se estiró y se levantó dejando a Lex.

–Es mejor que comas antes de ir a descansar un rato.

–Me parece buena idea. Y ¿Sabes qué?

–¿Qué?

Lex se movió y el moreno lo ayudó a levantarse.

–Con la tecnología de la Fortaleza y algo de ingenio logré que Brainiac se desviara de su destino.

–¡¿Como?!

–Digamos que no logró llegar al pasado, simplemente hizo una vuelta de regreso al presente. Kara también, pero a ella si la envié a la granja. Luego de comer deberías de ir a verla.

Clark sonrió ampliamente.

–Lex Luthor, eres un hombre muy ingenioso.

El aludido se encogió de hombros.

–Comamos. Vas a ver a tu prima, pero debes regresar rápido. Hay algo que debemos discutir.

–¿Algo malo?

–Pues más bien, con nosotros juntos, resulta ser solo inexacto

–…

El mayor agitó una mano.–No te preocupes, haremos algo al respecto. Sé de que se trata o creo recordarlo.

–Entiendo.

Los dos comieron. Después de acompañar a Lex a la habitación, Clark salió rumbo a su granja.

Después de poco tiempo, Kara escuchó a Clark, antes de que llegará a la entrada del camino y salió a recibirlo.

–¡Clark!

La rubia recibió a su primo con un abrazo. Los dos entraron a la casa y ella le preguntó:

–¿Sabes cómo pude llegar aquí?

Clark se rascó la nuca y le explicó…

Jor-El tuvo mucho que ver.

–Después de todo no es tan malo.

–Eso parece, verdad.

Clark no entró en más detalles, aún tenía que buscar las llaves o lo que Veritas poseía, pero estaba totalmente de acuerdo con Lex, en que nadie debía saber sobre Conner y él, al igual que debían evitar que cualquiera pudiera entrar a la Fortaleza.

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Era ya tarde, cuando Grant encaró a Lionel.

–¿Qué hiciste con Lex?

Lionel dejó los documentos que leía y preguntó:–¿De que hablas?

–No soy un Luthor en balde y obviamente sé que él no tuvo nada que ver con la muerte de Martha Swan. Lo has estado usando para verte como el buen Luthor, lo has hecho pasar como el malo.

–Mira, nunca imaginé que serías tan buen hermano.

–Quiero saber en qué posición me deja tu amor paternal. Tengo que saber si debo estar preparado para –en algún momento –esperar lo mismo.

Lionel vio con desdén al otro hombre.

–Lex puede ser una decepción para mí, pero sigue siendo mi hijo. En cambio tú, solo eres …un experimento.

Grant se giró y vio con odio al Luthor.

–Siempre serás un mentiroso Lionel. Solo deseas tener un hijo, pero ni de lejos es Lex. Ese Kent es por el que has sacrificado todo y a todos, por eso no me fue difícil buscar tus huellas y dar con Veritas. En lo personal no me parece real nada de lo que dicen, sin embargo, considero que Lex si lo cree y la información puede ser una gran moneda de cambio.

Lionel caminó hasta pararse frente a Grant.

–No tienes nada, no eres nada.

Grant se quedó en silencio y Lionel sintió haber ganado, más Grant sonrió, sacó una pistola, disparó al ventanal y luego empujó a Lionel por el.

–Siempre ha sido mejor la acción directa, verdad... padre.