Anhelo del Corazón SasuHina
Capítulo 2
Título:「El conejo tiene agallas
'—Hinata'
La llamó con voz distante y ella bastante cansada por los momentos compartidos de intimidad, abrió lentamente los ojos, diciendo con ternura.
'—Sasuke–kun...'
Este se contuvo de acariciarla y solo la miro con detenimiento mientras con voz plana, dice.
'— Ya es hora que me marcheHinata,discúlpame con nuestros hijos por no despedirme.
Sus palabras la pusieron sobre alerta que a pesar de la fatiga y de seguir desnuda, se sentó y lo miró de pies a cabeza, preguntando desconcertada.
— ¿A dónde vas,Sasuke? ¿Te citó,Naruto?
Él negó con la cabeza y colocándose su mochila que llevaba para viajar, responde.
'— No puedo decírtelo, no es nada que corresponda con una misión otorgada porKonoha.
Desvió su mirada y tomó la bata que reposaba en el banco del tocador, y colocándoselo sobre sus hombros, volvió a decir.
'—Hinata,lo siento...'
Desconcertada estaba y no le quedo de otra que ponerse la bata para decirle.
'—Sasuke–kunsabes que puedes contar conmigo.
Pero cambiando su mirada a una expresión inflexible, declaró con gélida actitud.
'— Sólo te desperté para ponerte al tanto que me iré por mucho tiempo. No te entusiasmare con una respuesta que ni yo sé'.
Después de eso, se dio media vuelta y salió por la puerta,Hinatainconforme con lo que decía, se levantó y sin colocarse calzado fue detrás de él, pero tan pronto como salió de la puerta principal, desapareció de su vista.
Entonces sus ojos se llenaron de lágrimas por un extraño presentimiento, miró de un lado a otro y todo a su alrededor comenzó a desquebrajarse, asustándola.
. . .
Sasukeque había conciliado el sueño, a pesar que sentía que era una situación incorrecta, se despierta repentinamente al sentir que laHyugatemblaba mientras lo llamaba por su nombre.
—Sasuke–kun... S–Sasuke...
Bosteza y lleva su mano a la frente de ella y siente que se encontraba fría, pero con escalofríos para aliviarla manifiesta suninjutsumédico y lo pone en su frente, diciendo.
—Hyu...Hinata,ten calma estoy aquí.
Pareciendo que alcanzaban sus palabras a ser escuchadas por ella, de manera, que al relajar sus gestos y ver que se acomodaba mejor en su pecho, él detuvo suninjutsu
" Esto es pena". Pensó antes de ser contagiado por la tranquilidad que expresaba al dormir, que provocó que cediera a dormir está vez sin reprocharse.
. . .
A la primera luz del día,Hinatasintiéndose mejor, se levanta bastante descansada y contenta de queSasukeregresaré y pareciese cómodo durmiendo a su lado, decidió entonces salir a buscar el desayuno para eso, hizo a un lado su brazo que se aferraba a su cintura y luego de estirarse, beso la comisura de sus labios antes de cubrirlo con su propia capa.
Como no vio reacción suya, sólo se fue hacía la ribera del río dónde había encontrado a su esposo con sus amigos para buscar peces.
Sintiendo que se encontraba bastante lejos,Sasukeabrió lentamente los ojos e incómodo por el beso se indignó a pensar así.
" Si suele ser normal esto, creó que me será difícil mantener la farsa"
Llevando su mano a su sien, recargo su espalda a la roca que le servía de espaldar mientras suRinneganno se apartaba de los movimientos de laHyuga.
. . .
Habiendo llegado a la orilla, revisó las aguas caudalosas con sudōjutsu Byakuganpara encontrar en que parte había peces para atrapar, su visión no tardo en encontrarlos, pero como no tenía equipo se ingenió a refinar suchakraensenbon(agujas)y como era hábil pudo repartir equitativamente suchakrapara poder sumergirse en el agua.
Dentro, la corriente empezó a causarle problemas, pero eso poco lo importó cuando pescó un par de peces de un tamaño considerado, pero cuando iba por otro par, sus fuerzas flaquearon y tuvo que emerger con lo que tenía, sin embargó, al estar por llegar a la orilla, sus piernas tuvieron un calambre que provoco que se tambaleara, y temiendo perder su pesca, lo levantó a lo alto antes de ser obligada a sumergirse, pero entonces,Sasukeapareció tomándola de su cintura, lo colocó como un costal en su hombro. Inesperada por su actuar,Hinatase río hablando apenada por su infructuosa pesca.
— je, je, je... Itoshī anata,lo siento tan solo conseguí atrapar a un par...
Él negó lentamente con la cabeza mientras salían de las frías aguas y volvían al refugió, contestó.
— No importa, traje comida conmigo.
Sus palabras le aliviaron, pero le causó cierta curiosidad que pronto, despejo cuandoSasukedespués de bajarla, comenzó a buscar en su bolso lo que había traído con él.
Hinataal verlos aún acostados, preguntó.
— ¿Ya despertaron?
ElUchihasin palabras solo negó con la mirada y volvió a mirar dentro de su bolso, dónde sacó losbentosenvueltos en una tela, lo desenvolvió y recordando que tenía uno estofado, se lo dio a sus manos aHinata.
Teniendo algo de frío se abrazó a sí misma, él dándose cuenta de ese hecho, se quitó su capa y lo pasó por su hombro antes de sentarse a comer.
Hinataque estaba sentada frente a él, abrió elbentoy se dio cuenta que la comida tenía un pálido color, pero su atención se centró en la servilleta que tenía la inicial bordada "U. Sakura"dudosa tomó los palillos mientras nombraba de forma casual el nombre de su amiga.
—Sakura.
Disimuladamente miro aSasuke, pero al ajeno a sus palabras, decidió no pensarlo mucho y probar lo que había en elbento,su primer bocado le hizo recordar lo mal que preparaba este platillo. Simulando agradó, dijo.
— Mmm... su esfuerzo está dando frutos.
Trago y se sirvió un poco de la carne, pensando que podría rescatar lo que estaba comiendo,Sasukesintiendo una actitud extraña en sus palabras, abrió elbentoy al fijar su mirada en ello, lo entendió todo.
«¿Qué cree qué hace?» fueron las palabras que retumbaron en su mente antes de atrapar su muñeca en el aire, habló con frialdad
— ¿Por qué?
Recordando que esa expresión dura solo la ponía cuando estaba enfadado, con perplejidad a su reacción ella respondió.
—Sakura–sanfue muy amable en prepararte dosbentos... y yo...
Lo último titubeo ySasukemucho más molesto no le dejo terminar de hablar, porque inmediatamente le quitó de su mano los palillos con comida y los arrojo junto a ambosbentosmuy lejos.
— ¡Si la comida no está bien, no debiste probarla para empezar,Hyuga!
Se lo recriminó como si lo hiciera a sí mismo y poco le importo queJūgoySuigetsudespertarán, su enojo no tenía control.
Hinataestaba desconcertada que solo apresuró a levantarse cuandoSasukese paró erguido y dio media vuelta para ser él quien trajera más peces del río, pero laUchihateniendo ese presentimiento tan vivido en su ser de abandonó, lo detuvo tomándolo del brazo mientras decía.
— ¡No es necesario!
Su timbre sonó preocupado de manera, que él la miro sobre su hombro y notando que ocultaba su rostro en su espalda, la oyó tartamudear, diciendo.
— e–estos dos pescados pueden ser preparados para los cuatro...
Lentamente alzó su vista y al encontrarse con su mirada, se separó lentamente, para ir a tomar el par de peces y demostrarle que abriéndole por la mitad podía alcanzar para los cuatro.
Sasukesoltó un suspiro antes de ayudarle con la fogata y los palos largos que ayudarían a que se asaran. Cuando terminaron de preparar y esperaron a que las cuatro partes cocieran,HinataySasukese sentaron uno alado del otro, metidos en sus pensamientos que tenían que ver mucho con sus recuerdos.
ElUchihapara empezar, seguía sin entender cómo ellos pudieron casarse, si nunca hubo ningún contacto y menos cuando éstos eran compañeros de la academia, lo poco que sabía era que ella se había casado con elDobedeNarutopues de los labios deSakuraoyó que laHyugaestaba muy enamorada de él.
Por parte deHinata,se sentía muy preocupada de cómo abordar el tema de la amnesia, pues a sus ojos, él parecía que había regresado al mismo momento en que apenas se estaban conociendo, o sea a la vez
«Que él...»
De pronto siente un malestar en la cabeza, que lleva su mano a masajear su sien,Sasukeal notar qué su ceño se arrugaba, preguntó.
— ¿Qué sucede,Hinata?
Como la miraba con insistencia, sus labios formando una suave sonrisa contesta.
— No es nada,Sasuke–kun...
Incluso si sus gestos se armonizaban, no convencidoSasuke,tocó otro tema.
— gracias por tratarnos a mi equipo y a mí...
Bajando la mirada con rubor en sus mejillas, contestó.
— Es algo que estoy dispuesta hacer como tu esposa además de que en varias ocasiones tus compañeros te salvaron...
Evito mostrar sorpresa de que supiera algo así, en silencio puso su mirada en las llamas que asaban el pescado y antes de formular palabras,Hinatacomenzó a decir.
— me preocupó mucho, no tener noticias de ti...
Miro hacia su lado y él sin inmutarse, preguntó.
— ¿Por cuánto tiempo?
Volviendo su mirada a la pequeña hoguera, respondió con un deje de tristeza.
— Tres meses...
Llevo su mano a su quijada para analizar lo que decía laHyugay uso su arco reflejo para mirarla con cuidado,Hinatasoltó con alivió las siguientes palabras.
— Estas aquí conmigo y eso, me regresa el alma al cuerpo.
Lo cual hizo que ambos se giraran a mirarse, él indiferente y ella con sentimientos contenidos dejó que cayeran por sus mejillas varias lágrimas que antes de notarlo él mismo, comenzó a borrar con las yemas de sus dedos.
— He vuelto.
Incluso si no hacía gestosSasukelo dijo casi con sinceridad yHinataenvuelta en su amor por él, sus ojos comenzaron a centellear de felicidad mientras pronunciaba con tartamudez.
— B–bienvenido,itoshī anata...
Después de varios minutos,SasukeyHinata,se relajaron y volvieron a estar en silencio, sin embargo, ese tiempo fue aprovechado para vigilar que ya estaban listos para comer sus partes de lacarpa.
Sabiendo en que punto le gustaba a su esposo, lo sacó del fuego y se lo ofreció, diciendo.
— Espero que no hallas olvidado en que punto te gusta el pescado–o,Sasuke...
Al oír sus palabras rápidamente recordó lo queSuigetsule contó, y sin mostrar algún gesto que desestimé lo queSuigetsule hizo entender "de laamnesia",lo recibió y ante sus ojos se sirvió.
Al sentirlo en su boca lo primero que notó, es que estaba crujiente y la carne no estaba ni seca, ni muy húmeda lo cual, de cierta forma, le hizo disfrutar.
Hinataen cambio, quemó un poco el suyo y solo pudo comer menos de la mitad, porque se decidió en ofrecérselo aSasuke.
Siendo consciente que quizá no lo aceptaría, con voz despreocupada, dijo.
— Ya–a me llene, toma el resto ¿sí–i?
Y se lo acerco a su mano y como no lo tomaba, se lo puso en la mano y a él no le quedó de otra que comérselo.
Hasta entonces,Hinataretiró las partes que tenía para los demás del fuego y oportunamente por el olor ahumado,SuigetsuyJūgodespertaron casi a la vez.
SoñolientoSuigetsuse saltó las formalidades del saludo, para decir.
— Llovió mucho anoche, ¿no?
Hinatasintiéndose comprometida por el timbre, respondió mientras hacía queSasukepasará la parte que le correspondía aSuigetsuyJūgo.
— Sí, lamento no encontrar mejor lugar...
De manera que bastante apenado tomó de la mano deSasukela carpa asada y haciendo un movimiento de negación con la cabeza,Suigetsudijo.
— Es verdad que sentí un frío intenso, pero que fue bueno queSasukete tuviera a su lado.
Guiño con su ojo izquierdo para molestarlos, provocando que sus mejillas deHinataadquieran rubor y la expresión indiferente deSasukemostrará enfado.
Suigetsusonriendo con descaro siguió a decir.
— ¿Por qué tu si dormiste muy cómodo, verdadSasuke?
Antes que su enojo alcanzará las nubes, con voz gélida, comentó.
— Empieza a comer, porque cuando terminen iremos conOrochimarupara hablar de nuestra falta de recuerdos.
Hinatase sorprendió ySuigetsuyJūgono le quedo más que asentir por la orden delUchiha.
.. .
Cuando acabaron de comer los tres,Hinatafue hasta ellos para acabar de tratar sus lesiones con un bucle dechakramás pequeño, pero efectivo y solo se detuvo cuando dio fin al tratamiento.
— Eso es todo.
Suavizó su gesto en ellos, a lo queSuigetsuyJūgono dudaron en sentirse agradecidos, soltando estas palabras en unísono.
—Arigatō
Ella les negó con un movimiento de cabeza mientras decía.
— Soy yo la que agradecida por traer de vuelta aSasuke–kun.
Hizo una corta reverencia queSuigetsucon voz amena y para molestar a la actitud plana queSasuke,dijo.
— No se preocupe, ha regresado para quedarse.
LaHyugaasintió con la cabeza y una suave sonrisa, pero no gustando como se tornaba el tema,Sasukeintercedió hablando con impaciencia.
— Ya es momento de irnos, levántese.
Jūgofue el primero en hacer caso y poco despuésHinataen compañía deSuigetsu.
. . .
Sabiendo que la guarida no estaba tan lejos deKonoha,todos viajaron a un ritmo normal para llegar a la entrada, en el trayectoSuigetsusintiendo aburrido el silencio que había entre ellos, preguntó.
—Hinata–chan¿Cómo se llaman tus hijos? Porqué lo tienen, ¿verdad?
Girando su mirada a él tocando su mejilla disimuladamente miro aSasuke, que empezó a tomar atención a la conversación que se estaba formando de manera que, ella responde.
— Sí, son mellizos sus nombres sonItachiyHanae,tienen 10 años.
La sonrisa deSuigetsuaflora y se acerca hacíaSasukepara darle una palmada en el hombro mientras susurra algo queHinatano escucha, pero provoca queSasukele lance una mirada de muerte.
Después de eso, vuelven a retomar el silencio para no tentar por el lado deSuigetsu,su suerte.
.. .
En la entrada al escondite,Sasuke, JūgoincluidoSuigetsuse percatan que no se encontraba el CapitánYamato,creyendo que no estaríaLord Orochimaruahí, dan media vuelta para emprender su camino aKonoha,pero antes de dar un paso,Mitsukiel experimento adulto aparece, diciendo.
—Ohayō,¿Han venido a ver aLordOrochimaru?
Sasukesolo le hace un gesto de afirmación mientras pregunta indiferente.
— ¿Está aquí?
Rápidamente contesta bajando la mirada mientras mueve el brazo para mostrar cortesía.
— Sí, está en la sala de investigación genética.
Sasukevolteando a mirar aHinatacon voz apacible, dice.
— Espérame aquí,tengo que tratar algo en privado,cuando salga regresaremos a la aldea,Hinata.
No quedándole otra, solo afirmó con la cabeza y los vio adentrarse al lugar junto al chico que les había hablado, ella se sentó en una de las rocas rotas a esperarlo.
.. .
En el largo pasillo,Sasukegracias a suRinnegan,sintió la presencia deOrochimaruy al no ver que era distinta a la que conocía, camino con seguridad, pero entonces, sintió lachakraexaltadadeKariny se detuvo en seco cuando abrió la puerta para mirar con ojos enojados aSuigetsu.
—Te has perdido una semana entera.
Parecía que había calma en su voz, pero eso poco duró cuando se paró frente aSuigetsu,exclamando.
—Hōzuki Suigetsu,¡DÓNDE DEMONIOS TE PERDISTE!
El rostro del nombrado palideció y mirando que ya no tenía el corte de machona como en su mundo, usaba vestido largo, sorprendido y temeroso, la nombró.
—Karin–n.…eres tú.
Pensando que era una nueva forma de molestarla, se giró indignada y viendo queSasukeyJūgoestaban ahí, dijo.
—Sasukeasí que regresaste. Es bueno verte, pero te vez sombrío
Le dio una rápida mirada y llevando su mano a su vientre, siguió.
— se nota que estar tanto tiempo lejos deHinata–chante hace ver bastante decaído.
Le señalo a sus marcas alrededor de sus ojos, pero pronto, pasó a siguiente plano, cuandoMitsukiinstigó alUchihacon las siguientes palabras.
— ¿Seguimos?
No hubo respuesta por parte deSasukey solo comenzó a andar, sin importar queKarintomará aSuigetsupara llevárselo por la puerta que había abierto ella misma,Jūgolo iba siguiendo, peroMitsukial ser cuidadoso y ver que se veía cansado, le señalo la sala de recuperación y lo acompaño.
. . .
Por otra parte,Sasukeabrió las puertas de par en par y cuando lo vio parado contemplando uno de sus muchos experimentos, él dio pasos hacía él y mientras las puertas se cerraban,Orochimarupreguntó sin voltear.
—Sasukehas vuelto con vida, dime ¿Con que propósito estás de nuevo aquí?
Manteniendo una expresión indiferente se acercó un par de pasos más para preguntarle sin rodeos.
— ¿Qué sabes de realidades alternas?
PensandoOrochimaruque era un tipo de enigma se gira para pensar por un momento antes de responder.
— Creo que no lo suficiente, ¿A qué se debe esa pregunta?
• • •
Hinataestando cansada por el uso dechakra,aprovechó en reposar apoyada a la gran roca que tenía a su espalda, pensativa en lo extraño que le parecía tener que volver a empezar conSasukepor su falta de memoria.
Sintiendo verdadera intriga por conocer lo que realmente lo había orillado a marcharse.
Al oír pasos, se levantó y al ver que era soloSasuke,suavizó su mirada preguntando.
— ¿Y los demás?
Permitiéndose mirarla de pies a cabeza por unos momentos, contesta.
— Sé van a quedar aquí.
No queriendo mirarla, aparto la mirada y con un sentimiento de resignación, le ofrece su mano para que lo tomará y llegué a bajar, soltando la siguiente frase.
— Volvamos a la aldea.
Ella no dudo en tomar su mano para bajar, pero viendo que prefería mantenerse distante, lo soltó y camino a su lado en silencio por mucho tiempo.
Habiendo alcanzado llegar a los árboles que formaban un largo sendero,Sasukese paró en seco yHinatalo imitó con tan sólo un paso adelante.
Sasukeno sabiendo como abordar el tema que iba a tocar, decidió empezar por llamarla de su nombre.
—Hyu–Hinata, sabes que mi situación no es la mejor.
Miro hacía al frente para no hacer contacto visual con ella, pero muy atenta a sus gestos lo permitió seguir.
— Perdí todos los recuerdos que nos relacionan como pareja y casi nada sé de ti.
Inclinó la mirada mientras arrugaba el ceño para brindarse a sí mismo, ese aire de confusión y molestia por su actual situación, dijo.
— Creó que deberíamos intentar mantener distan...
Sabiendo lo que iba a proponer, lo detuvo colocando ambas manos en sus hombros y parándose de puntillas, unió sus labios con los suyos en un beso suave y dulce, pero por muy extraño que fuera no sintió desagrado por ello,es más, lo continúo con pasión y anhelo por un par de minutos que fueron sorprendentes.
De tal modo, que sólo se separaron cuando les faltó el aire a ambos.
Sonrojada por la intensidad de su esposo, inclinó la mirada y jugando con sus dedos con aquel tic que tenía, dijo.
— Etto–o al parecer tus labios conservan tu memoria...
Sorprendido y molesto por lo que había hecho, se recriminó en su mente.
«¿Qué acaba de pasarme?Kuso...»
Tuvo que mirar a otro lado porque sus mejillas le ardían, pero retornando a la calma entre ellos y sin necesidad de mirarlo directamente,Hinatacon compresión y ternura, dijo lo siguiente.
— S–sí crees que no puedes recuperarlos...
Llevó ambas manos al lado de su corazón como el movimiento que hacía para motivarse, continuo a decir.
— haremos nuevos recuerdos junto a nuestros hijos–s...
Y como si esas palabras alcanzarán al corazón deSasuke,muy sorprendido se giró hacia ella y como buscando una seña en particular para hacerla desistir, y no encontrar nada, se dio cuenta que sólo podía ceder ante su mirada determinada.
«¿Quién lo diría? El conejo tiene agallas»
Suspiró profundamente antes de decir con voz apacible.
— Sigamos.
Hinataasintió y poniéndose a su lado, comenzaron a andar sin percatarse que así lo hacían en su noviazgo.
• • •
EnKonohagakure
En la entrada principal,se volvieron a detener porqueSasukese sintió extrañado por las estatuas de losSieteHokage'sy la misma ciudad deKonoha.
Pareciendo que era algo nuevo a sus ojos,Hinatase mantuvo en silencio observándolo.
Los ojos deSasukerecorrieron todo el panorama y estaba absorto en su mente que apareció en su rostro, ya que la villa frente a él, no era para nada a lo qué conocía en su mundo.
Los rostros de losSiete Hokage'sno tenían las señas particulares de la máscara que usabaKakashi,todo lo contrario, su rostro estaba descubierto con la seña de su herida en el ojo y unSharinganen el ojo perdido.Narutoya no tenía la banda de la aldea que antes de hacerla le había dicho que se vería ridículo, y no tomó en cuenta por lo tarado que es, pero ahora su peinado era distinto y las facciones que tenía de su padreMinato,salían muy claras con esa mirada sobria.
En cuanto, a los edificios, mantenían partes ligeramente tradicionales en la entrada, pero que no estorban opacando los rostrosHokage.
Preguntándose como se vería el hogar donde convivía con su familia,Hinataperspicaz toco su brazo, para decirle con voz gentil.
— Te mostraré nuestro hogar...
Él se limitó asentir y girarse en dirección donde ella le indicó para comenzar a seguirle, pero al momento aparecieron unos jóvenes que no reconoció, diciendo esto.
— Señor y señoraUchiha,ohayō.
Hinatase limitó asentir ySasukesólo se mantuvo en silencio, porque con voz cortes uno de ellos, comenzó a decir.
— ElSéptimo Hokagenos ordenó que, sin importar el día o la hora, fuera a verlo, por favor, acompáñenos señorSasuke.
Sasukea pesar de su notaría indiferencia, giro su mirada haciaHinatapara decirle lo siguiente.
— Espérame por favor en la recepciónHinata,veré aNarutopor un rato, ¿sí?
Comprendiendo el motivo, ella no dudo en asentir soltando un suspiro, respondió.
— De acuerdo, te esperó.
Su mirada solo mostró comprensión y fueron juntos hasta la entrada a las instalacionesHokagedondeHinatase volvió a quedar abajo mientras el subía las gradas hacía la oficina.
. . .
Percibiendo con suRinneganaNaruto,Sasukeabre la puerta sin ceremonia, hablando así.
—Narutose rápido con tus motivos.
ElUzumakial estar de espaldas revisando uno de los muchos documentos que debe leer, sonríe con energía.
— VayaSasuke¿Tan rápido pretendes volver a casa con tu hermosa esposa?
Mira por encima de su hombro a este y con una sonrisa zorruna, toma asiento en su sillón e invita a su hermano/rival a sentarse.
Hostil hasta el final, se mantiene parado y habla con cautela.
— Para eso me enviaste a llamar?
Niega con la cabezaNarutoy poniendo una expresión seria, pregunta.
— ¿Cómo te fue?
No sabiendo a que exactamente se refería,Sasukedivaga en su respuesta.
— Ni yo lo sé.
Muestra confusión elUzumakiy fijándose en su apariencia descuidada, comenta.
— Discúlpame si te hice venir de inmediato, pero me preocupa "El asunto Daisuke"
Sasukeindiferente a entender el tema se limita a repetir el nombre oído.
—Daisuke.
Como le extrañaba su actitud distante alUzumakiprosigue a decir.
— Sé que es hijo de ustedes, pero me inquietó que no tuvieras el mínimo tacto de mantenerme informado durante estos tres meses.
Sasuketan indiferente, hizo creer aNarutoque seguía molesto con él por pedirle que renunciará, pero preocupado por el futuroNaruto,dijo.
— Tú mejor que nadie, sabe que tu linaje no es conocido por perdonar.
Bajo la mirada y se recargo hacia delante viendo que parecía inmutable y sus palabras. Sin embargó,Sasuke analizaba fríamente sus palabras en su mente.
«Tengo otro hijo»
Es de ese modo que, siendo cuidadoso de sus palabras, responde así.
— No puedo ignorarlo.
Narutorecordando que ese mismo sentimiento tenía porSasuke, pero recordando queHinataestaba comprometida esa jugada cruel, dice.
— Créeme que te entiendo, pero pasaron 15 años y él tiene sed de venganza hacía ustedes, sus padres.
Cruzó sus manos entre sí y sin apartar la mirada de él, pasó a decir.
— SíHinatano habría sido maldita, por quien rapto aDaisuke,yo mismo dejaría aShikamaruoKonohamarumi puesto para ir contigo hasta encontrar a tu hijo y hacerlo recapacitar.
Su expresión decidida le hizo fe de eso, sin embargo, al verlo pensativo, le escucho decir.
— perderás más si intentas traerlo de vuelta,Sasuke.
Mentiría elUchihasi dijera que no sé sorprendió por esa revelación, pero en un intento de mantener la calma, contestó pensativo.
— Lo tomaré en cuenta,Naruto.
Sus palabras simples, pero sinceras hicieron que elUzumakise sintiera tranquilo por él, de modo que dijo con esperanza.
— Así lo espero.
El ambiente sombrío se calmó y no habiendo más que tratar,Sasukedio media vuelta para en caminarse en la salida, no obstante,Narutorecordando el regreso de la excursión que habían tenido todos del mismo grado que su hijaNarumi,dijo.
—Sasukeme olvidaba informarte queHanaeyItachi,regresan hoy de la excursión a la Aldea de laNube.
ElUchihasolo detuvo sus pasos al escucharlo y volvió a caminar para evitar preguntarse sobre con quien su amigo estaba, pero antes que saliera totalmente de su oficina, hablo rápidamente.
—Temediles que les envió mi saludoSakuray yo, ¿sí?
No había necesidad de decir que ese hecho lo incomodo, pero recordando que ese mundo nada tenía que ver con él, alzó su brazo para responder sin girarse a mirarlo.
— Claro,Dobe.
Narutosonrió ySasukecon expresión plana siguió su caminando en dirección donde laHyugao mejor dicho 'esposa' lo estaba esperando.
. . .
Tan pronto, que ella lo vio se aproximó a él, tomándolo del brazo, dijo.
— Regresemos a casa.
Se limitó asentir y dejándose guiar salieron juntos, en el camino varias personas le saludaron como si fueran de la realeza, y creyendoHinataque esto lo incomodaba, apuró el paso y lo llevo por lugares menos concurridos.
Cuando estaban por una larga plaza llena de una hilera de árboles,Sasukese percató de lo familiar de aquella zona.
Manteniendo su vista en el caminoHinatase lo anunció con una sonrisa al ver por reflejo su sorpresa.
— Bienvenido de nuevo al distritoUchiha,anata...
Lentamente soltó su brazo, que silencio agradeció porque empezó a caminar hasta la puerta y mirar a su alrededor con asombró.
«ElClan Uchihaestá de nuevo en pie»
Su corazón palpitaba con tanta emoción, que antes de que una lágrima cayera por tal emoción, respiro hondo y pasó por las puertas que tenían el orgulloso abanico de fuego del clanUchiha.
Si por fuera se veía magnífico, por dentro era increíble pues todas las casas de los que fueron miembros su arquitectura seguían siendo tradicional, solo la casa que supuso que era del líder, tenía la estructura de una mansión bastante moderna con dos plantas altas situado al final del camino.
Verdaderamente no se comparaba en nada a sus días de niño, pues era mucho más próspera y valía todo el dinero que se había usado en este proyecto, pero en su mirada se posó un poco de tristeza, al saber que en su mundo tuvo que ceder todo aquello que pertenecía a su clan y que lo único que dejaron para conmemorar a su hermano fue su estatua con estas palabras.
• UCHIHAITACHI•
"El niñoquese sacrificó para resolver los problemas de los adultos"
Hinataal darse cuenta del cambio en él, toco su mejilla con cariño y lo llamó así.
—Sasuke–kun¿Te sientes bien?
Evitando mirarla respondió soltando un suspiró.
— Sí, es solo que...
Titubeo para seguir pues no estaba seguro cuanta similitud su mundo compartía con este y no deseaba ser imprudente,Hinataapartando su mano dijo.
— por lo que veo, para ti ver este lugar en sinceridad sorprendente, pero lo entiendo, ya habrá tiempo para te enseñe todo el lugar.
Con esas palabras comenzaron a caminar hacia la casa principal donde habitaban, ya que las casas otras estaban planeadas a ser usadas cuando los hijos de ellos comenzarán a formar familia.
Incluso si estaban listas para habitar en cualquier momento. Teniendo la regla estricta de limpiar dos veces al mes cada residencia para evitar que se deteriore lo que tanto principal aSasukele había costado hacer.
. . .
Distraído por el jardín de rosas blancas y rojas que formaban perfectamente el logoUchiha, Hinataabrió la puerta y al ver sus pantuflas lilas, se quitó las sandaliasninjapara colocárselas,Sasuketambién se las quitó, pero al no ver pantuflas para él dudo en pisar la alfombra blanca que parecía cubrir ese suelo.
Hinatamiro pensativo y se inclinó para abrir el mueble donde guardaban las pantuflas y al ver las de los mellizos, no le quedo otra que sacar las pantuflas azules que hace tiempo el mismoSasukese negó a usar porque le parecía infantiles.
Sacándolo de su empaque, lo puso frente a él, diciendo.
— Tus pantuflas las subí a nuestra habitación, lo siento...
Y aunque su timbre de voz sonaba ingenuo, su sonrisa delataba su malvada intención de vérselas puesto.
Una pequeña vena se notó en su frente cuando tuvo de contenerse a negarse a usarlo, pero como no quería ni ensuciar ni mojar la alfombra, se resignó, murmurando.
— Son ridículas...
Solo lo dijo por los conejos que sobre salían en la punta de los pies y un pequeño rabito peludo en donde estaba el talón.
Hinatapara disuadir su atención de las pantuflas y ver qué tipo de reacción pondría, comentó lo siguiente de la forma más común posible.
— ¿Qué te parece si tomamos un baño?
El rostro deSasukeenrojeció de la pena y preguntó bastante sorprendido.
— ¿juntos...?
Sus nervios a flor de piel, le hicieron sentir que al fin podía tener el control de coquetear de modo que camino hasta él y beso su mejilla con ternura y susurró en su oído con voz melosa, lo siguiente.
— Sí es lo que quieres...
Perplejo por su atrevimiento, paso en seco su saliva y sin ocultar que estaba sonrojado, paso de ella sin decir palabra alguna para comenzar a subir las gradas.
...
..
.
•Continuará . . .
• Espero que lo hayan disfrutado. Recuerden primero sale en *Wattpad* y si hay tiempo enFanfiction.
