Disclaimer: Estos personajes no me pertenecen.
Capítulo dieciséis
Vegeta
Miré alrededor de la habitación para asegurarme de que todo estaba listo como yo querí habíamos hecho mucha decoración, en su mayoría jarrones con rosas blancas colocados alrededor de la habitación, pero la celebración de una boda requería un poco de extravagancia.
Ante la insistencia de Caulifla, hice que todo el asunto fuera atendido por una conocida empresa de vestidos con pantalones negros, chalecos y pajaritas circulaban por la sala con bandejas de champán. una vez que llegaron los se instaló una pequeña orquesta en la esquina de la gran sala de estar.
Bulma aún no lo sabía, pero yo había pedido un pastel de bodas a uno de los mejores panaderos de la hubiera gustado que nuestra celebración hubiera sido mas grande ,pero dos semanas no era mucho tiempo para planificarlo todo.
Cuando sonó el timbre, me acerqué para contestar porque el mayordomo que había contratado para la fiesta estaba trabajando con los encargados del catering para preparar todo para la fiesta.
Sonreí cuando abrí la puerta y vi quién estaba parado al otro lado.—Tío Bills, gracias por venir—.
Me alegré de que pudiera tomarse un tiempo de su apretada agenda para venir a nuestra celebració ía haberse retirado, pero el hombre siempre estaba haciendo algo.
Admiraba a Bills Ouji más que a casi todos los que conocía y esperaba ser como él algún dí había acogido cuando nadie más lo había hecho y me dio la oportunidad de una buena lo llamé tío Bills, técnicamente no era pariente mío, sino un viejo amigo de mi ía lo adoraba y lo consideraba familia.
—Vegeta, mi querido muchacho—.El hombre mayor sonrió mientras entraba al ático.—¿Dónde está tu hermosa esposa? No puedo esperar para conocerla—.
No podía esperar para presentarles a las dos personas que más me importaban.—Bulma todavía se está preparando—, le dije.—Creo que está un poco nerviosa—.
El tío Bills levantó una ceja.—Es un poco tarde para tener los pies fríos, ¿no?—
—No son nervios por la celebración de la boda. Se supone que sus padres y su hermana estarán aquí esta noche—.
La sonrisa desapareció instantáneamente del rostro de Bills.—¿Vienen aquí? ¿Esta noche?—
Fruncí el ceño ante la repentina preocupación que pude ver en el rostro de mi tío.—Sí.—
—Debiste decírmelo.—
—Tío-—
—Creo que es mejor si vuelvo cuando no haya tanta gente viniendo a visitarte—.El tío Bills se volvió hacia la puerta abierta.—Te llamaré en unos días y podemos reunirnos para almorzar o algo así—.
—Tío Bills, ¿qué-—
Las puertas del ascensor se abrieron y salieron las tres personas que menos deseaba ver en mi tío Bills se congeló, su cara se volvió blanca como la sorprendió cuando la madre de Bulma se detuvo y también palideció.
¿Qué estaba pasando aquí?
Mi tío asintió con la cabeza hacia ella.—Bunny—.
Esperar.
¿Qué?
Miré lentamente de la madre de Bulma a mi tío adoptivo.—¿Conoces a Bunny?—
—Sí—, admitió el tío Bills.—Nos conocimos hace mucho tiempo—.
—¿Que demonios estas haciendo aquí?—espetó la madre de Bulma.
El tío Bills sonrió.—Fui invitado.—
—¿Qué?—ella gritó.—Estás mintiendo.—
—No lo soy, en realidad.—
Me sentí como una pelota de ping pong por la forma en que mi cabeza rebotaba entre los estaba pasando aquí además de la furiosa animosidad entre Bills y Bunny, pero maldita sea si sabía lo que era.
—Tienes que irte—, escupió Bunny.—No te quiero aquí—.
Antes de que pudiera decir algo, mi tío se rió entre dientes.—No creo que dependa de ti, ¿verdad?—
—Por supuesto que lo es—, espetó ella.—Esta es la fiesta de compromiso de mi hija. Si quiero que te vayas, te vas—.
La conmoción me quitó el aliento de los pulmones.
—¿La fiesta de compromiso de tu hija?—El tío Bills se volvió para mirarme.
Simplemente negué con la tenía ni idea de lo que estaba hablando esta mujer una sola vez dije que era una fiesta de compromiso, e incluso si lo fuera, no estaría comprometido con Tights.
—Creo que ha habido algún tipo de malentendido aquí—, le dije.
Bunny puso una sonrisa en su rostro que parecía forzada e irreal.—Por supuesto, tiene razón, Sr. Ouji—.
Creo que me voy a enfermar.
—Realmente debo pedirle que elimine a este hombre de la lista de invitados—, dijo Bunny.—Él no tiene derecho a estar aquí—.
—Tengo más derecho a estar aquí que tú—, dijo el tío Bills.
—¡Necesitas irte!—Bunny gritó, completa con un pisotón.
—¿Quieres decir antes de que Bulma descubra la verdad de lo que hiciste?—
¿La verdad?
Entrecerré los ojos.—¿Qué está pasando aquí? ¿Qué verdad?—
El tío Bills se apretó cuando me miró.—¿Hay algún lugar donde podamos discutir esto en privado? ¿Quizás en tu oficina?—
Sí, puede que no sea una mala idea.
Di media vuelta y me dirigí a mi había entrado cuando me agarraron del brazo.
—Sr. Ouji... Vegeta—, dijo Bunny mientras me agarraba el brazo con fuerza.—Diga lo que diga este hombre, está mintiendo. Me odia. Me culpa por la muerte de mi hermana. Dirá cualquier cosa para ponerte en mi contra—.
—¿Tu hermana?—¿Bunny tenía una hermana?No recuerdo que apareciera en el informe que me dio Caulifla.
—No me sorprende que no hayas oído hablar de su hermana antes—, dijo el tío Bills mientras entraba a la ó hace unos veinticinco años.
Hice una mueca cuando miré a Bunny.—Lo siento mucho.—
—Fue un accidente sin sentido—, dijo el tío Bills.—El auto patinó en el hielo y se fue por un barranco. Ella, sus padres y el bebé que llevaba todos murieron. Mi bebé. ¿No es eso lo que me dijiste, Bunny? ¿Que todos murieron?—
UH oh.
—Por supuesto que todos murieron—, dijo Bunny rápidamente.
Teniendo en cuenta lo pálida que estaba, dudé en creerle.
Ciertamente no podía creer las lágrimas que brotaban de sus ojos.
Ella sollozó y se secó los ojos.—Estaba destrozada.—
—Como yo—, dijo el tío Bills.—Es horrible perder a tu prometida y a tu hija por nacer en un accidente sin sentido. Especialmente un accidente que nunca debería haber ocurrido. Si tus padres no hubieran obligado a irse a casa, ella ni siquiera habría estado en el auto en primer lugar.—
La palidez del rostro de Bunny se volvió roja de ira cuando se dio la vuelta y comenzó a gritarle a Bills.—¿De verdad crees que mis padres iban a dejar que te casaras con ella? No eras nada. Abandonaste la escuela secundaria sin dinero. Mi hermana era una modelo. Era querida dondequiera que iba. No estaba hecha para gente como tú—.
Eso podría explicar la obsesión de Bunny por convertir a Tights en modelo.
—¿Es por eso que me dijiste que mi hija estaba muerta?—preguntó el tío Bills con la voz más tranquila que jamás había oído salir del hombre.—¿O fue por el fondo fiduciario que ella había establecido para nuestra hija?—
Espera.
¿Hija?
—¿Qué hija?—Yo pregunté.
Estaba bastante seguro de que ya lo sabía, pero tenía que estar seguro.
La sonrisa del tío Bills era agridulce cuando se volvió para mirarme.—Sabes qué hija—.
—¿Pero cómo?—Yo pregunté.—Bulma y Caulifla son hermanas—.
—No, no lo son. De hecho, Bulma es tres meses menor que Tights. Es la única hija de Doc y Bunny Brief—.El tío Bills respiró temblorosamente.—Bulma es mi hija—.
—¿Soy tu hija?—
Oh demonios.
Lentamente me giré para ver a Bulma de pie en la veía fantá vestido que le habíamos hecho le quedaba como un guante, y su cabello había sido recortado y peinado donde enmarcaba su rostro y hacía que sus ojos azules resaltaran como diamantes.
Se habría visto perfecta si no estuviera tan pálida.
Rápidamente crucé la habitación hacia ella y lo atraje a mis brazos.—No sé qué está pasando aquí—, le susurré al oído, —pero creo que los esqueletos en el armario de tu madre acaban de salir—.
Más bien explotó.
—¿Qué estás haciendo?—una alta voz femenina chilló detrás de nosotros.—Quítale las manos de encima a mi prometido—.
Oh maldición, había olvidado la otra parte de este fiasco.
—¿Desde cuándo soy tu prometido?—Gruñí mientras me giraba para mirar a Tights.—Nunca hemos tenido una cita—.
Tights sonrió tan dulcemente que quería vomitar.—Oh, los detalles no importan, cariño. Sabía que estábamos destinados a estar juntos desde el primer momento en que te vi—.
—No soy tu prometido, Tights—.
—Por supuesto que lo eres—, dijo Bunny mientras daba un paso adelante para pararse junto a su hija.—De eso se trata esta noche, ¿verdad? ¿De anunciar tu compromiso con Tights al mundo?—
—No.—Levanté mi mano anular y luego me estiré para sostener la de Bulma.—Es para anunciar mi matrimonio con Bulma—.
—¿Qué?— Tights gritó mientras señalaba a Bulma.—¿Te vas a casar con ella?—
—Ya estamos casados—, respondí con mucha satisfacción.
—¿Ya estás casado?—
—Acabamos de regresar de nuestra luna de miel—.
—¿Tu luna de miel?—
Me giré para mirar a Bulma.—¿Hay alguna razón por la que sigue repitiendo todo lo que digo? ¿No estoy siendo lo suficientemente claro?—
Tal vez mi inglés no era tan bueno.
—No puedes casarte con ella—, insistió Tights.—Se supone que debes casarte conmigo—.
—¿No lloraste y lloraste porque no querías casarte con Bejīta Saiyan, entonces mamá y papá decidieron casarme con él?—Bulma preguntó.
—Por supuesto que no me iba a casar con ese perdedor degenerado—, espetó Tights.—Mamá dijo que consumía drogas y todo tipo de cosas. Se crió en un parque de casas rodantes, por el amor de Dios. No tendría nada que ver con gente como él. Probablemente contraería alguna enfermedad contagiosa o algo así—.
Bulma me señaló.—Conoce a Bejīta Saiyan —.
Saludé.
Mis cejas se dispararon cuando los ojos de Bunny rodaron hacia la parte posterior de su cabeza y se desplomó en el suelo.
Nadie trató de atraparla.
—¿Eres Bejīta Saiyan?—Tights susurró.—¿El tipo que creció en el parque de casas rodantes?—
Me encogí de hombros.—Solía serlo. Cuando murió mi madre, me fui a vivir con mi tío Bills y él me adoptó, cambiándome el nombre a Vegeta Ouji—.
—Espera...— Su frente se arrugó.—Si es tu tío, entonces no puedes casarte con Bulma—.Ella sonrió brillantemente.—Eso funciona entonces. Te divorcias de Bulma y luego puedes casarte conmigo—.
No estaba conectando los puntos.
—¿Por qué no puedo casarme con Bulma?—Yo pregunté.
—Bueno, ella es la hija de Bills. Si fuiste adoptado por él, entonces no puedes casarte con su hija. Eso se llama incesto y es contra la ley—.
En lugar de responder eso porque era simplemente ridículo, le pregunté: —Entonces, ¿sabías que Bulma no era tu hermana biológica?—.
—Por supuesto que lo sabía. Ella estaba—¡Ay!—Tights se frotó la nuca mientras se giraba para mirar a su padre.—¿Por qué me pegaste?—
—¡Callarse la boca!—
Al menos alguien en esta familia tenía un poco de cerebro.
Simplemente no mucho.
—¿De verdad eres mi padre?—Bulma preguntó.
Miré hacia abajo para verlo mirando al tío Bills con tanta esperanza en su rostro.
—Soy.—Las lágrimas brotaban de los ojos de Bills.—Durante tantos años, pensé que te había perdido en ese accidente automovilístico junto con tu madre. No fue hasta que Vegeta me dijo que se iba a casar y me dio tu nombre que supe que estabas viva—.
—¿Por qué no dijiste nada antes de ahora?—
—Estuviste fuera en tu luna de miel. Pensé en venir un poco temprano esta noche y decírtelo—.Bulma se rió entre dientes cuando Bills puso los ojos en blanco.—No tenía idea de que esta tormenta de mierda sucedería—.
—Entonces, ¿no estoy relacionado con ellos?—Bulma señaló a Tights y sus padres.
¿Padres?
—Doc y Bunny son tu tía y tu tío, no tus padres. Y Tights es tu prima, tu prima mayor por tres meses—.Las fosas nasales del tío Bills se ensancharon.—Ella no es tu hermana—.
—Oh, gracias a Dios.—Bulma se derrumbó contra mí.—Creo que es lo mejor que he escuchado—.Su cabeza se levantó.—Además de querer casarte conmigo, por supuesto—.
Sonreí.
—Por supuesto.—
—¡No puedes estar casado!—
Bulma se rió cuando puse los ojos en blanco y me volví hacia casados. Acostú alejé de Bulma y me acerqué a mi escritorio, recogiendo los papeles que había preparado antes.
—Y estos son para ti—.
Tights frunció el ceño mientras los tomaba.
—¿Qué son éstos?—
—Facturas de todas las boutiques a las que fuiste de compras después de decirles que estábamos comprometidos y hacer los arreglos para que me enviaran la cuenta. No estamos comprometidos y no les pagaré—.
—Pero...— El pánico puro absorbió el color del rostro de Tights.—No puedo pagar esto. No tengo esa cantidad de dinero—.
—Deberías haber pensado en eso antes de acumular una factura tan alta—.Tenía muchas ganas de sonreír, pero no había terminado de dejar caer el boom sobre esta perra loca.—Y no creas que puedes ir a buscar otro préstamo. Ya hablé con el Sr. Mr. Satán, y él prometió no solo cortarte a ti y a tu familia, sino que les ha dicho a sus amigos que no te prestarán nada—.
Lo había comprobado solo para asegurarme de que había cumplido con nuestro acuerdo, y lo había que obtener un rendimiento de un millón de dólares en un préstamo de cincuenta mil dólares fue un gran avance para lograr que el tipo hiciera lo que yo quería.
También podría haber tenido algo que ver con la aplicación.
Tights trató de devolverme los papeles.—Tienes que pagar esto—.
—Ni en sueños.—
Ella entrecerró los ojos.—Te llevaré a la corte—.
Resoplé.
—¿De qué cargo?—
—Pensión alimenticia—.
La miré por un momento para ver si hablaba en me di cuenta de que lo estaba, me eché a reír.
—No puedes demandarme por pensión alimenticia. Nunca hemos vivido juntos y mucho menos hemos tenido una relación. Ni siquiera hemos tenido una cita, ¿o te olvidaste de esa parte?—
Sé que lo había mencionado antes.
—Dijiste que me llamarías tan pronto como estuvieras disponible—.
Levanté mi mano anular.
—Nunca estare disponible—.
No en esta vida.
