Disclaimer: Nada de esto me pertenece, la saga crepúsculo es propiedad de Stephenie Meyer y la trama es del webtoon y la novela "La emperatriz divorciada" de Alphatart y con arte de Sumpul, yo solo busco entretener y que más personas conozcan esta historia.


Capítulo 283. El Diablo Se Muestra Amigable (2)

Dentro de unas horas había una fiesta de té.

Irina se arregló el flequillo que cubría la cicatriz y se puso un vestido ligero y cómodo que no tensara su vientre abultado.

Últimamente, sentía su cuerpo más pesado, las piernas entumecidas y frecuentes tirones en el vientre. Iba al baño más a menudo y sus manos y pies se hinchaban incluso cuando estaba quieta.

A pesar de los esfuerzos de la Vizcondesa Clearwater por aliviar sus molestias, no podía hacer mucho.

—Mi bebé. Parece que pronto nacerás.

Irina susurró al bebé mientras acariciaba su vientre.

Últimamente, también estaba preocupada por el sexo del bebé.

Hasta ahora no le había importado si fuera niño o niña. Sería bueno si fuera niño porque así consolidaría su posición como sucesor, pero, aunque fuera niña, podría tener un niño después.

Más bien, pensaba que sería mejor tener una niña y después un niño.

Sin embargo, ahora que estaba más alejada de Jasper, sabía que el bebé tenía que ser un niño.

El Imperio Oriental nunca había tenido una emperatriz reinante.

Tanto por el bien de su hijo como por el suyo, el bebé que nacería tenía que ser un niño.

En ese momento, alguien llamó a la puerta.

Era una sirvienta.

—Un caballero me pidió que le entregara este sobre.

Mientras decía esto, la sirvienta le extendió el sobre a Irina. Luego añadió con vacilación,

—Me pidió que le entregara este sobre y que Su Majestad devolviera una respuesta... también me dio dinero por hacer esto.

—¿Cuánto?

—Mucho.

¿De qué trata la carta? Irina abrió el sobre y sacó la carta, mientras la sirvienta esperaba a un lado.

Sus ojos recorrieron la carta rápidamente. Después de tantas reprimendas de Jasper, ahora podía leer y escribir con fluidez.

Después de leer la carta, una sonrisa de alegría apareció en la cara de Irina.

—¿Son buenas noticias?

—Son noticias divertidas.

Irina se dirigió a su escritorio con la carta en la mano, sacó un papel en blanco y sumergió la punta de la pluma en tinta.

[No sé con certeza si Isabella es infértil. Sin embargo, a pesar de haber estado casada durante mucho tiempo con Su Majestad Jasper, no pudo tener un hijo, es por eso que lo supongo. Lo que sí es seguro es que la razón por la que Su Majestad se divorció de Isabella fue a causa del problema de la infertilidad.]

Si Jasper pensara que Isabella no era infértil, no se habría divorciado de ella para casarse conmigo.

Irina pensaba que el divorcio de Jasper con Isabella era una prueba clara de su infertilidad.

Después de escribir esto, Irina lo encontraba divertido.

Al final, Irina se quedó pensando profundamente y escribió una frase que sonaba un poco amable.

[Pero, sería una pena que perdiera su posición sólo por una suposición incierta. Isabella será una buena emperatriz, así que espero que no sea arrinconada por la incertidumbre.]

Tras meter la carta en un sobre y estampar su sello, Irina se la entregó a la sirvienta.

La Vizcondesa Verdi comenzó a peinar de nuevo a Irina, mientras ella tarareaba con un mejor estado de ánimo.

Sin embargo, ese estado de ánimo cambió en cuanto asistió a la fiesta del té.

El tema del bebé que pronto nacería pasó a primer plano, pero fue por las palabras de un noble que dijo con preocupación,

—Cuando nazca el bebé, ojalá pueda crecer fuerte...

Era una voz de anhelo, pero si uno escuchaba con atención, podía darse cuenta de las intenciones ocultas en sus palabras.

No fue 'espero que sea fuerte,' sino 'ojalá pueda crecer fuerte...' ¿Por qué tuvo que desdibujar el final de sus palabras tan significativamente?

Incluso otro noble añadió,

—La Familia Swan ha sido leal a la Familia Imperial durante generaciones. Pero puede que no sea leal al próximo emperador.

¿Estos sujetos están maldiciendo el futuro de mi hijo?

Disgustada, Irina los miró fijamente con el ceño fruncido, y el hombre que mencionó el punto del Duque Swan dijo rápidamente, agitando la mano.

—Bueno, es una relación difícil de llevar.

Incluso después de escuchar la excusa, Irina seguía de mal humor. Pero en su interior, sabía que tenía razón.

Los Duques Swan estaban disgustados con ella, así que naturalmente no serían leales a su hijo.

Incluso cuando ese bebé fuera educado como el príncipe heredero, o incluso cuando alcanzara la mayoría de edad y se convirtiera en el emperador, podrían seguir estando disgustados y bloquear su camino.

Irina sintió escalofríos sólo de imaginarlo.

La Familia Swan era una familia prestigiosa del Imperio Oriental. Aunque rara vez los duques trabajaron como funcionarios del gobierno, tenían una gran influencia en la alta sociedad.

Además, el Marqués McCarty. ¿Qué hay de él?

Había heredado la posición de marqués de joven, tenía una personalidad rebelde y guardaba un fuerte rencor contra Irina por el destierro de su amigo Jacob.

Este hombre tampoco apoyaría a su hijo.

Tengo que encargarme de esto.

Al volver a su habitación después de la fiesta del té, Irina sabía lo que tenía que hacer.

Ya había hecho algunas cosas malas para sobrevivir en el palacio imperial. No tenía problema en añadir un par de cosas más a la lista. De todos modos, ¿no es así el palacio imperial?

Protegeré a mi bebé.

Iba a eliminar a cualquiera que pudiera bloquear el camino de su hijo. Tan pronto como Irina tomó una decisión, llamó al mercenario del Vizconde Vulturi.

Menos de tres horas después, apareció el mercenario. Irina arrojó un gran collar de joyas al mercenario y le ordenó,

—Dijiste que también matabas gente, ¿no?

—... Sí.

—¿Puedes matar a nobles?

El mercenario se rió como si hubiera escuchado un chiste.

—No hay diferencia entre matar nobles o plebeyos.

Esas palabras fueron agradables de escuchar para Irina.

—Entonces, mata a los Duques Swan.

—¡!

—Fueron al Imperio Occidental por un tiempo, pero pronto estarán de regreso. No tienes que matarlos apresuradamente. Sólo hazlo antes de que nazca el bebé de Irina. Así que mátalos como quieras cuando estés preparado.

El mercenario respondió después de pensar un momento.

—Si quieres que mate a los Duques Swan, tendrás que pagar más. Es más difícil y peligroso.

—No importa el dinero.

—El costo es de diez mil krangs.

—¿Diez mil krangs?

Irina se sobresaltó. La cantidad era mayor de lo que esperaba.

—¿Estás diciendo que para matar a una persona necesitas diez mil krangs?

—No es una, son dos. Además, no es como matar a dos transeúntes. Alrededor de ellos debe haber muchos guardias y para matarlos tendré que pasar a través de todos.

Eso era cierto. Aun así, ¿no es demasiado diez mil krangs? Irina se mordió el labio inferior.

Era un mercenario que el Vizconde Vulturia había buscado, y desafortunadamente era tan codicioso como él.

—También, tendré que escapar después de matarlos, y la Familia Swan no tardará en enviar personas a matarme. La hija de los Duque Swan, que está en el Imperio Occidental, también puede enviar personas a matarme. Si tienes que arriesgar la vida e incluso pensar en tu seguridad posterior, realmente, diez mil krangs no es mucho, ¿verdad?

No tenía nada que refutar.

Irina finalmente despidió al mercenario diciendo que estaba bien.

Diez mil krangs...

Pero diez mil krangs seguía siendo demasiado dinero.

Aunque era la emperatriz, no podía manejar las cuentas.

Cuando le pedía dinero, el Barón Lant se lo daba enseguida, pero si le decía que necesitaba diez mil krangs, preguntaría la razón. Era un hombre molesto.

¿Qué debería hacer?

Al final, Irina decidió volver a pedir ayuda al Duque Riddle. No había nadie más que pudiera darle una suma de dinero tan grande.

Afortunadamente, esta vez el Duque Riddle tomó la mano de Rashta con una sonrisa,

—Por supuesto que te lo daré.

—Lo siento siempre...

—Está bien. Me lo pagarás todo, ¿no es así?

—Por supuesto. No te preocupes.

Cada vez que el Duque Riddle le prestaba dinero se aseguraba de dejarlo por escrito en un documento.

Irina escribió su nombre en el documento y miró fijamente al Duque.

Cuando sus miradas se cruzaron, el Duque Riddle preguntó con una sonrisa, "¿Qué sucede?

Irina sacudió la cabeza.

—Estaba pensando que el Duque es realmente hermoso.

—Tú también eres hermosa.

—No, realmente... si el diablo existiera, creo que se parecería a ti.

—¿El diablo?

Las comisuras de los labios del Duque Riddle se levantaron como si lo encontrara divertido.

—No te ofendas. Es sólo que recordé lo que había escuchado en alguna parte. El diablo es tan hermoso que puede hechizar a la gente...


NOTA:

Es bastante acertada la opinion de Irina.

Como siempre Irina haciendo cosas horribles, al menos ya no falta tanto para su caida.

No se si les podre actualizar el fin de semana, voy a hacer todo lo posible, voy a estar avisandoles por el canal de whats.

Nos leemos despues.