Capítulo 83 El Segundo Encuentro con el Perro Negro

Entonces, me han avisado que los capítulos 80-83 desaparecieron en el sitio de

su traductor. Por lo tanto, los traduje. Sin embargo, ese sitio ha vuelto a

estar en línea. No obstante, los capítulos están aquí, así que los estoy publicando;

¡disfruten! -El Mago Traductor)

Cuando escucharon a Peeves, todos jadeaban. Sirius Black irrumpió en el castillo e incluso intentó entrar en la Sala Común de Gryffindor.

Esto era terrible. Afortunadamente era Halloween y no había nadie en la torre.

El profesor Dumbledore pidió a todos los estudiantes que regresaran inmediatamente al Gran Comedor. Para garantizar la seguridad, los profesores realizaron una minuciosa búsqueda del castillo. Evan siguió a los demás y bajó apresuradamente, todos ellos susurrando sobre lo ocurrido.

"¿Crees que Black todavía está en el castillo?" murmuró Hermione ansiosamente.

"Por lo que dijo Dumbledore, obviamente cree que podría estarlo." Ron susurró, "Es muy afortunado que haya elegido esta noche, ¿sabes?"

"¡Sí!" Colin asintió incómodo. Miraba nerviosamente a su alrededor, como si Sirius Black estuviera escondido en un rincón, listo para saltar.

"Supongo que ha perdido la noción del tiempo, estando prófugo. No se dio cuenta de que era Halloween. De lo contrario, no habría entrado".

Las palabras de Ron fueron aceptadas por todos. Además, la gente se preguntaba mutuamente lo mismo: "¿Cómo entró?"

"¡Quizás sabe Aparatar!"

"Esto es imposible. Si lees el libro Hogwarts, Una Historia, sabrás que este castillo está protegido por algo más que paredes." dijo Hermione rápidamente, "Hay todo tipo de encantamientos en él, para evitar que la gente entre furtivamente. No puedes simplemente Aparatar aquí. Y me gustaría ver el disfraz que podría engañar a esos Dementores. Están vigilando cada entrada a los terrenos. También Filch conoce todos los pasadizos secretos, ¡los tendrán cubiertos!"

"Quién sabe, después de todo, es Sirius Black, el mago oscuro que solo es superado por Ya-Sabes-Quién." Ron arrugó la nariz nerviosamente, con los ojos fijos en el baño de las chicas al final del pasillo en el segundo piso. Recordaba su experiencia terrorífica el semestre pasado.

Al oír que mencionaba a Voldemort, todos guardaron silencio por unos segundos, y nadie habló. Caminaban en silencio por el oscuro pasillo del segundo piso.

Harry seguía a Ron pálido y sin color. Black debía haber entrado en el castillo para matarlo, y este presentimiento era realmente bastante desagradable.

"Anímate. No importa qué trucos haya usado Black para entrar en el castillo, sin duda será descubierto por Dumbledore. ¿Qué opinas al respecto, Evan?"

"¡Quizás!" Evan dio una respuesta evasiva.

Miraba por la estrecha ventana del lado izquierdo del pasillo, y sus ojos se posaron en el césped afuera del castillo, donde había un enorme perro negro cubierto de espeso pelaje, ¡Sirius black! No muy lejos de Black estaba el colorido Crookshanks, y se deslizaban por el césped.

Como si sintiera algo, Black se giró de repente en su dirección.

Al segundo siguiente, junto con la mirada de Evan, Harry vio a las dos criaturas en el césped. Se apresuró a la ventana, mirando atentamente.

"Mira afuera; ¿ves algo, ese gran perro negro?"

"Harry, ¿no estás viendo de nuevo a ese Grim?" Ron se acercó inquieto, murmurando vagamente. "¡Parece como ese maldito gato!"

"¡Quieres decir Crookshanks!" Hermione se acercó siguiendo y dijo ansiosamente, "¿Qué hace Crookshanks afuera del castillo? Black todavía puede estar en la escuela."

"Por favor, Hermione, Black no matará a un gato. Está en el castillo para..." Ron se detuvo abruptamente y miró nerviosamente a Harry.

Harry parecía no entender lo que quería decir. Dijo con entusiasmo, "Ese perro, estaba justo al lado de Crookshanks. ¿Ninguno de ustedes lo vio?"

"Está tan oscuro afuera, es posible que estés equivocado, tal vez sea solo un árbol grande o una piedra o algo así." Ron tragó saliva y vio a los demás mirándolos.

"¡De ninguna manera, Evan, ¿también lo viste?!"

Evan no respondió, calculaba secretamente la distancia entre aquí y el césped afuera.

Si fuera lo suficientemente rápido, quizás no fuera demasiado tarde para bajar de aquí. Tal vez era una buena oportunidad para contactar a Sirius.

"¡Tú ve primero. ¡Yo iré al baño!" dijo Evan apresuradamente.

Bajo la mirada asombrada de los demás, se dio la vuelta y caminó hacia otro pasillo y corrió hacia la puerta del castillo.

Cuando estuvo seguro de que no había nadie alrededor, leyó suavemente, "Animago".

Tan pronto como cayó la voz, el cuerpo de Evan se convirtió rápidamente en un gato negro. Pasó por el profundo vestíbulo de mármol lo más rápido que pudo y salió silenciosamente del castillo.

Evan se estremeció cuando el frío viento nocturno le golpeó de frente.

El Castillo de Hogwarts estaba particularmente sombrío esa noche y, contra la tenue luz de la luna, las grotescas estatuas en el campo revelaban cierta rareza, varios murciélagos se deslizaban desde una baja altitud, y de vez en cuando llegaban a los oídos el ulular de los búhos.

Alrededor del muro a lo lejos, los Dementores se cernían, donde la tierra estaba yermo y todas las plantas estaban marchitas y muriendo.

Black no podía caminar en dirección al muro. Evan se dio prisa en voltear a ver hacia el Bosque Prohibido. A través de la luz de la luna, vio al gran perro en el que se había convertido Black y a Crookshanks desvaneciéndose en la sombra del Bosque Prohibido. Inmediatamente, se apresuró a alcanzarlos.

Justo al entrar en la sombra, una figura saltó de repente detrás de un árbol.

¡Era un ataque sorpresivo!

Evan sintió el calor que venía desde el frente. Miró hacia arriba y vio a Sirius Black como un gran perro, lanzándose hacia él con sus dientes de una pulgada de largo. Con un estruendo, Black saltó sobre él con un impacto poderoso.

Evan cayó y rodó por el césped hasta chocar con un gran árbol y detenerse.

Estaba deslumbrado y sentía como si sus costillas estuvieran rotas.

Quería ponerse de pie, pero Black no le dio la oportunidad. Mostró sus colmillos, miró maliciosamente a Evan, gruñó suavemente y saltó de nuevo.

Viendo cómo la enorme figura se acercaba cada vez más, Evan se apresuró a salir de la deformación de Animago y sacó su varita de su cintura con la mano derecha mientras su cuerpo volvía a su forma original.

La punta de la varita emitió una luz roja que golpeó a Sirius Black.

Black voló hacia atrás y aterrizó en el pasto, dando un gemido doloroso.

"Ya es suficiente, deja de intentar atacarme, ¡o la próxima vez no será solo lanzarte de vuelta!" Evan se limpió la sangre de la comisura de los labios y luchó por ponerse de pie con la mano izquierda en su rodilla.

Jadeaba, y Black, que estaba frente a él, también jadeaba.

Durante segundos, ninguno de los dos habló, y la atmósfera era grave y terrible.

Evan vio los ojos de Black destellar locamente en la oscuridad, mirando fijamente su varita. Sus músculos estaban tensos y sus dientes apretados de manera agresiva, como una bestia mirando a su presa.

"Escucha, no tengo intenciones dañinas. ¡Sé quién eres y sé por qué estás aquí!" Evan apuntó cuidadosamente su varita a Black. "Solo quiero hablar contigo sobre mis amigos Harry y Ron..."

Antes de que terminara de hablar, se escucharon unos pasos apresurados acercándose.

Evan se volvió rápidamente y vio un resplandor deslumbrante. Parpadeó y se ajustó por un momento, solo para ver al profesor Lupin.

"¡Profesor Lupin!"

"¡Eres tú, Evan! Escuché el ruido cuando estaba revisando el Autillo. ¿Qué pasó aquí? ¿Por qué estás fuera del castillo?" Lupin miró a Evan sorprendido y dijo con preocupación, "Sirius Black acaba de irrumpir en el castillo, es muy peligroso, y Dumbledore pidió que todos los estudiantes se reúnan en el Gran Comedor."

"Yo... yo..."

Evan no sabía qué decir. No podía decirle que había salido para tener un encuentro agradable con Black.

Aunque Lupin fue un amigo cercano de Sirius Black cuando eran estudiantes, ¿creería que Black había sido injustamente acusado en ausencia de evidencia?!

Evan negó con la cabeza. Sin pruebas reales, con el carácter de Lupin, incluso si creía que Black era inocente, lo primero que haría sería atar a su antiguo amigo y llevarlo a Dumbledore.

Quizás, si todo salía bien, atraparían a Peter Pettigrew.

Pero si Peter lograba escapar, Evan temía que Black fuera entregado a los Dementores antes de mañana, y un beso esperaría por él.

Esto era terrible. Evan vaciló y decidió ocultar la verdad.

Nota del traductor: ¡Hola! Soy el Traductor_Mágico. Espero que te encuentres bien y estés disfrutando de los capítulos. ¿Quieres leer hasta 146 capítulos más? ¡Acabo de publicar el capítulo 570 en ! Si estás interesado en apoyarme y leer más capítulos, no dudes en hacer clic en el botón de abajo