CAPÍTULO 5
-¿Cuál sería la mejor opción? ¿tren o carretera? - pregunto él sosteniendo en sus manos un mapa de carreteras.
- ¿Estás seguro de esto Tom? - cuestionaba Albert revisando la agenda de los horarios más próximos a salir.
El patriarca de la familia había decidido ayudar al hermano de Candy en escoger su mejor ruta para el viaje, Tom aun se debatía si podría resultar un viaje cómodo para los niños transportarse en tren que en automovil, si eligiera por ferrocarril a lo mucho sería un día y dos horas de viaje, a que si fueran por carretera doblarían ese tiempo muy probablemente, así que decidió encaminarse a la mansión de las rosas en Lakewood para pedir asesoramiento a Albert el cual no se negó en absoluto al contrario le ofrecía ayuda para escoger el mejor método de transporte.
-Si me lo permites Tom, te sugiero el tren, demoraras un par de horas más, pero así los niños irán cómodos durante todo el viaje, debido a que estarán en primera clase. - alego el rubio, a Tom le incomodaba la sugerencia, aun no podía acostumbrarse a todo el estilo que brindaba ser parte de la sociedad clasista, pero si eso les permitiera un mejor viaje para sus pequeños estaba dispuesto aceptar ir en primera clase.
-en cuanto arriben, un automovil los estará esperando en la terminal, listo para llevarlos hasta la mansión de los Leagan en la costa- dijo él planeando cada detalle de su viaje.
-Muy bien Albert, gracias por tu tiempo y asesora-
-no tienes que agradecer Tom, lo que sea para mi familia, cuídame a esos pequeños son la adoración y de la abuela Elroy, aun a su edad te asesinaría ella misma si algo les pasara.
Tom sintió comenzó a sentirse nervioso ante la idea del rubio con respecto a la tía Elroy que a pesar de que se encontraba más grande y con un problema de salud la mujer aún se veía fuerte y podía seguir en pie, el muchacho trago saliva ante la imagen de una Elroy furiosa, le volvió agradecer por cada una de sus atenciones y le aseguro que sus hijos disfrutarían del viaje, podía imaginar sus caritas relucientes ante la emoción sin embargo Tom todavía no se sentía muy seguro, después de un largo tiempo vería nuevamente a su esposa ¿Qué le diría en cuanto la viera de nuevo? ¿Cómo estaría después de todo este tiempo? ¿llegaría a embargarla con preguntas del porque había dejado de recibir noticias suyas? Sea lo que pudiera a ocurrir estaba decidido en buscarla no se echaría para atrás, arreglaría todo de una vez y la tendría en sus brazos nuevamente que era lo que desesperadamente deseaba.
-nos veremos pronto Tom- con esto se despidió el joven patriarca, y Tom salió para embarcarse en ese inusual y anhelado viaje.
El vapor comenzaba a salir por la chimenea de la locomotora, el rechinido de las llantas que comenzaban a avanzar a toda la velocidad y el sonido de la campana que indicaba que habían comenzado ese viaje de cual ya no había vuelta atrás.
Los niños ya se encontraban instalados en sus camerinos propios de aquel vagón elegante reservado únicamente para las familias mas prestigiosas y adineradas, Tom se servía un poco de wiski de aquel minibar que contenía la sala principal del vagón, observaba cada detalle de ese elegante espacio de donde los habían acomodado no es que le disgustara pero desde que se casó con Eliza Leagan, debía acoplarse a su mundo y costumbres, así como ella lo hizo al suyo.
Tom seguía mirando con lujo y detalle cada rincón de ese lugar cuando su mirada se poso hacia la mesita junto a la venta pudo ver a su hija sentada frente a esta mirando pensativamente por la ventana, Tom no dudo en acercarse a su pequeña y descubrir que es lo que la tenía en ese estado.
-¿No estas cansada princesa?- pregunto él, su pequeña respondió negativamente ladeando la cabeza de un lado a otro sin apartar la vista del paisaje.
-¿estas emocionada por ver a tu madre despues de tanto tiempo?- volvió a preguntar, la chica suspiro profundamente y giro la cabeza para encontrarse con los ojos miel de su padre.
-creí que sí, pero…
-¿pero? ¿que pasa cariño?-
- ¿qué me asegura que ella lo estará al vernos? –
-¿Por qué dices eso Melissa?- le cuestiono con el entrecejo fruncido ante la inseguridad de su pequeña.
-no recibíamos más cartas de ella, desde hace dos meses- enfatizo lo ultimo -¿cómo sé que estará feliz de vernos? - Tom le dedico una cálida sonrisa a su princesa de esas sonrisas que te decían que no habría porque preocuparse no había nada que temer.
-pero que dices cariño, tu madre estará muy contenta de verlos- le aseguro a su hija.
-¿Y a ti?, ¿también se pondrá feliz de verte papá? – la mirada de Tom se había transformado, mostrando un gesto serio y sus ojos reflejaban inseguridad, la pregunta directa de su hija lo había tomado por sorpresa, ¿qué podría decirle? Ni él sabía si a su mujer le resultaría grato verlo después de tanto tiempo y considerando las últimos acontecimientos y circunstancias en que tuvieron que separarse, realmente lo dudaba, pero no quería perturbar a su pequeña por lo que despejo todos esos pensamientos de su cabeza.
-también lo estará, ve a descansar amor, son casi 24 horas de viaje, después podremos ir a cenar algo- Melissa le hizo caso a su padre y se levantó del cómodo diván para dirigirse a la habitación extra donde había una piltra individual cerca de la ventana, el espacio era un poco reducido, pero mantenía los distintivos lujos que representaba su posición.
Mas tarde para la cena Tom había llevado a sus niños al vagón comedor para que degustaran lo que les apeteciera, no obstante Tom les advirtió que no fuera nada pesado o con mucha azúcar o no dormirán en toda la noche de ser posible.
Noah y Zaid, no habían terminado de comer su platillo de entrada por lo que Tom los sentención de que no tendrían postre si no lo terminaban.
-pero ya no quiero comer más- decía el pequeño zaid entre pucheros. -queremos postre papá – pedía el pequeño.
-yo estoy lleno papá- decía Noah deslizando su plato hacia un lado, Tom los entendía por lo que no los obligo a comer más sin embargo no les dejaría comer demasiado dulce en su postre nocturno, frente a el vio que Melissa apenas si tocaba su comida.
-¿tampoco tienes mucho apetito cariño?- decía sacando a la niña de su trance.
-no, estoy satisfecha- dijo ella dejando su cubierto a un lado de su vajilla de porcelana.
-¿no quieres postre?- le pregunto Tom
-bueno si, me gustaría una rebanada de pastel –
-la pediremos enseguida, pidamos los postres ahora- decía Tom observando alrededor para ver si llegaba a ubicar a un mesero.
- si! Postre!- exclamaba el pequeño Zaid levantando sus manos al aire e intentando ponerse de pie para estar a la altura de su padre, Tom lo sujeto con firmeza por miedo a que fuera a caerse pero el pequeño no se quedaba quieto.
-Zaid, por favor siéntate bien, te me puedes caer – decía Tom tomando a su pequeño en brazos y acomodándolo nuevamente sobre el diván, pero zaid estaba tan activo que entre risillas desafiaba a su padre poniéndose nuevamente de pie, los demás comensales observaban la embarazosa pero divertida escena de Tom tratando de calmar a su pequeño latoso.
Una bonita y rubia mujer observaba la escena con ternura y le dedicaba una tierna sonrisa al vaquero lo que Tom lo hizo sonrojar incomodamente por un segundo.
-Ya, zaid, siéntate- sentencio el vaquero, pero el niño se hacía de oídos sordo por lo que Tom decidió sostenerlo y sentarlo en sus piernas sujetando sus manitas y tomando su servilleta para limpiarle la carita que la tenía cubierta de pure.
el niño se tuvo que dejar limpiar por su padre sin embargo intentaba alejar el pañuelo por diversión y solo por contraer a Tom.
-Mírate, parece que comiste con los cachetes zaid- le decía su padre divertido mientras luchaba contra sus manitas que lo obstaculizaban para hacer dicha tarea. La mujer seguía observando con discreción aquella divertida escena de un padre y su pequeño, la muchacha no dejo de darle el busto bueno al joven, fornido, atractivo a la vista y además cariñoso, tierno y atento con sus pequeños, se cuestionaba ¿quién era ese vaquero? Lo deducía por la ropa que lleva.
Una vez que logro su cometido volvió a sentar al pequeño a su lado, pero este no daba indicios de querer estar quieto sus hermanos que se sentaban al otro lado de la mesa lo veían sonrientes de como zaid podía a ver terminado todo batido e imaginarse que lo mismo pasaría con el pastel terminara lleno de merengue.
Tom dudaba si seria buena idea dejarle comer dulce seguramente lo tendría despierto toda la noche.
-no se calmara si no le dan lo que desea- decía la muchacha entre pequeñas y melódicas risillas que apenas podía escuchar, Tom se giró y pudo ver a la rubia levantarse de su mesa el vaquero había sonreído apenado, ya no había muchos comensales una que otra familia sentada lo que era extraño debido a que él conocía que la alta sociedad se reunía para la cenas portando elegantes y costosos trajes y que las mujeres que se esmeraban demasiado en su arreglo personal ya que estas reuniones sociales se consideraban realmente importantes para cierto beneficio de cada familia adinerada.
la mayoría de las mujeres ya se habían retirado, pero otras aún se quedaban entablando animadas platicas, la muchacha que se acercó a Tom parecía que también estaba a punto de retirarse junto a su dama, no sin antes decirle a su joven dama que mandara un mesero para el joven para que este pudiera ordenar el postre del pequeño.
Enseguida había llegado el mesero con una torta con merengue de fresa para los pequeños.
-¿que le puedo traer a usted señor?- pregunto el hombre de edad avanzada que trabajaba de mesero, Tom pudo ver al hombre un poco cansado quizás por las ida y vueltas de servicio a los comensales, el vaquero compadeció al hombre y le dijo que no se preocupara el, con su niños era suficiente y le había sugerido que mejor se retirara a descansar pero el hombre se negaba pues su jefe aun no les permitía retirarse debido a que los hombres se quedarían más tiempo y debía servir los tragos, el vaquero le insistió y le aseguro de que él se encargaría de que no le llamasen la atención. Después de todo pertenencia a un clan prestigioso y podría usar el apellido y su estatus para casos como estos.
El hombre inseguro lo pensaba, pero Tom le transmitía una calidad y seguridad que hacía que se pudiera confiar en el, sinceramente aquel hombre se veía realmente cansado por lo que termino por tomarle la palabra al vaquero no sin antes agradecerle profundamente.
-gracias, señor, no tengo como agradecerle esto que esta haciendo-
-no se preocupe... por favor, retírese a descansar, yo me encargo- con esto el hombre salió del vagón.
Al poco rato los niños había terminado sus postres y lo que resulto increíble para Tom fue ver a su pequeño Zaid ya dormido en sus brazos, Tom cargo a su pequeño levantándose de la mesa y sus otros dos hijos le siguieron.
-vamos a regresar niños deben descansar esperemos mañana arribar pronto- les decía mientras acomodaba a su pequeño recargando su pequeña cabecita sobre su hombro.
Cuando salían del vagón comedor Tom alcanzo a escuchar a lo lejos a un hombre con una voz gruesa que mencionaba el apellido Leagan.
-Tienes alguna idea de ¿cómo resultara eso? -
-No será difícil, el señor Leagan esta convencido de mis propuesta, en caso de que reniegue, me asegurare de que lo reconsidere – ambos hombres rieron con malicia haciendo que el cuerpo de Tom se tensara y estremeciera por completo al escuchar, esa voz ¿la había oído antes? su entrecejo se posicionaba con ira al recordar aquella voz, el vaquero giro para localizar aquellos hombres y al que suponia reconocer con esa voz pero no vio a nadie más, pareciera que había pasado de largo hasta el siguiente vagón … «¿propuestas? ¿Qué clase de propuestas? » pensaba él sin sacarse de la cabeza aquella voz.
-¿Papá? –le llamo su princesa.
- ¿pasa algo? – le pregunto Melissa preocupada por su padre al ver como se había detenido en seco y ver su semblante serio. Tom reacciono enseguida, debía llevar a sus pequeños acurrucarse ya se hacía tarde.
-no princesa, nada, vayamos a acostarlos- les dijo con un tono más calmado, pero no convencia a la pequeña pelirroja lo que la hizo posar su mirada a donde su padre lo había hecho unos segundos antes y observo a un hombre que la miraba de solsayo desde el otro lado del vagón lo que la hizo paralizar por unos instantes, el hombre abrio los ojos con asombro al ver a la pequeña pelirroja en el mismo tren.
-¿Melissa? - la llamo su padre que ya había avanzado, la pelirroja se giró de inmediato y corrió por detrás de su padre, cuando llegaron por fin a su vagón privado llevo a sus dos pequeños al dormitorio, noah ya se había puesto su pijama y metido entre sus sabanas, Tom recostó a su otro pequeño que aun estaba en sus brazos, el pequeño sintió que su padre lo recostaba comenzó a balbucear como queriendo despertar, pero tom lo volvió arrullar.
-sh,sh,sh, mi pequeño, sigue durmiendo campeón. – le decía en susurro y después le deposito un beso en la frente de su pequeño se giró hacia noah que ya se hacía dormido y repitió el mismo gesto salió del pequeño y lujoso dormitorio de los chicos y paso frente a la puerta de su pequeña la cual toco antes de poder entrar al no escuchar respuesta de ella abrió lentamente la puerta y la miro observando por la ventada la niña ya se encontraba en pijama y recostada pero no parecía conciliar el sueño.
-¿te sucede algo cariño? - pregunto tom.
-¿crees que Lucien estará bien… sin nosotros? -le pregunto pensando en el caballo de su madre.
-por supuesto que si cariño, estará bien, tu abuelo y nana cuidaran de el -agrego tom acercándose a su pequeña.
-¿papá?- le volvió a llamar
-¿si cariño? -
-me dejaras montarlo ¿cierto? Por algo no lo vendiste. -
-no lo vendí, porque es de tu madre, y… ella quería que tú lo tuvieras, sin embargo, trabajaremos en ello antes de que puedas siquiera pensar en volverlo a montarlo-
-¿trabajar en que?- pregunto ella extrañada.
-en la confianza de Lucien, los animales sienten cariño, y Lucien también quedo ese con miedo, no hay que presionarlo, ¿de acuerdo?-
-si papá-
-ahora descansa amor, mañana será otro día.- con esto la pequeña se acostó y tom acaricio fraternalmente el mentón de su nena cuando algo lo hizo abrir los ojos asombrado, Melissa aún tenía sobre su rostro el moretón causado por dicha pelea con la hija de los franz, tom se tallo la cara con sus manos en gesto de frustración de tan solo imaginarse lo que su madre diría cuando la viera así, Eliza seguramente pegaría el grito en el cielo si viera a su hija de esa manera y ya ni que decir de sus abuelos en especial Sarah la cual parecía esperar cualquier oportunidad para reclamarle.
-¡carajo!- maldijo.
Tom le coloco nuevamente el bálsamo que había traído consigo por parte de Flammy y Candy, que el golpe ya se había desinflamado por completo, pero aún seguía ese condenado moretón.
¡hola! les mando un saludo con un lindo y enorme abrazo,espero que esten se encuentren muy bien, que esten contentas y felices les comento estaba planeado subir este capitulo ayer pero me senti un poco indispuesta, pero acambio subire este hoy y mañana el otro, si no logro dormir subo el otro en unos momentos mas jiji
muchas gracias nuevemente por la oportunidad que me dan, significa muchisimo looro de alegria al escribir esto.
Luna Andry: ¡holi!muchisimas gracias por la oportunidad brindada, es una dicha saber que te ha gustado esta historia,para mi un honor y un placer que gustes acompañarme en esta historia, muchisimas gracias en verdad, Tom es lindo jeje, me encanta que te encante el protagonismo de tom en esta historia, no te preocupes ya les pondre que paso antes de la desgracia.
Hirumi HdZ: ¡holi hermosa! gracias por seguir acompañandome en esta historia,significa mucho para mi que en verdad le haya gustado, estos hombres, hijoles, son dos estafadores ardidos, uno actua por despecho y venganza y el otro por conveniencia jiji espero que te haya gustado este capitulo, tranqui con respecto a lo de Eliza ya sabremos jijiji.
andre3456: yo tambien siento esas mariposas jiji ya casi llega ese reencuentro lo prometo, que dicha saber que te gusto espero que este capitulo tambien haya sido de tu agrado, mil gracias por seguir acompañandome.
GeoMtzR:¡hola mujer hermosa! mi querida amiga ¿como estas? espero que te encuentres muy bien, no te preocupes por haberte extendido notaras que yo tambien jeje entre mas mejor, me encantar leerte y saber que cuento con tu apoyo hermosa mil gracias espero de verdad que este episodio te haya gustado mucho, si, jeje queria que se defendiera asi como si dijera: sabes, estaba pensando seriamente disculparme pero ahora no"tomala" jejeje queria darle como esta convinacion de caracter antes creo que hubiera quedado que lo dijera con el tono usual de eliza jaja es que esta niña (gabriel) quiere sacar provecho jiji. De echo me debatia si ponerla o no ponerla al final dije si, si la pongo jiji, prometo que les pondre lo que paso aquella noche, mientras tanto aqui les dejo un poquito de ese viaje en tren jiji, no te preocupes hermosa que yo estare aqui esperando jiji espero de corazon que te haya gustado muchisimo y estoy muy ansiosa por leer tu siguiente capitulo tambien jejeje. un fuerte y enorme abazo!.
si no consilio el sueño subo el siguiente, nos leemos pronto y les deseo un lindo puente, saludos cordiales.