UNOS DIAS ANTES.

—Señor Alderp, nuestro informante nos dice que la joven Dustiness ha salido el día de hoy en una aventura y la encargada del gremio por fin ha enviado el archivo de la joven que la señorita Dustiness tiene encarcelada en su mansión. —

El viejo mayordomo enfrente de mí, había dicho estas palabras apenas llegar de responder la puerta, puso las carpetas con la información en la mesa. Además de un pequeño cheque ya hecho y que necesitaba mi firma. Mantener a Lalatina vigilará no era fácil, en especial con los infames miembros de su equipo.

Tragué rápidamente el pedazo de comida que estaba masticando, para poder responder.

—¿Otra vez quiere su recompensa esa chiquilla? Está bien que esta vez trajo información buena de Lalatina pero su codicia no tiene límites. —

Realmente no era mucho pero no me había hecho rico firmando cheques.

—¿Quiere que me desaga de ella? —

Si le doy autorización, quién sabe qué podría hacer este mayordomo sádico, no por nada lo contrate.

—No, No, aún necesito alguien dentro de la mansión Dustiness. Cuando llegue el momento puedes matarla, no necesito testigo. —

Tome el cheque y lo firme, espero que es bruja disfrute la miseria que le pagó por traicionar a su señora, porque una vez que ya no sea útil. Vera porque nadie puede encontrar evidencias para enjuiciarme.

—Como ordene. —

—Bien, ya te puedes retirar. —

—Antes de retirarme señor Alderp ¿Que debería hacer con la otra jovencita que ha estado quedándose en la mansión por la última semana? Su estadía ya termino—

Oh sí. Se me había olvidado de ese pequeño problema, me gustaría disfrutarla otra semana más pero me ha estado aburriendo últimamente, no me importa si se queda o se va, para este momento mi bastardo ya debe estar creciendo en su vientre.

—jejejeje, Dile a esa chiquilla que ya se puede ir a su casa, que los intereses ya están pagados. Que su familia no vuelva a retrasarse con los pagos. —

A menos que quisiera otro bastardo.

—Como diga señor. — Con eso, el anciano mayordomo se marchó a cumplir con mis órdenes.

Corte otro pedazo de carne fina y me la llevé a la boca, nada más que lo mejor para mí persona, casi no podía esperar para reclamar la deuda de los Dustiness.

La Madre de Lalatina se me había escapado en mis días de juventud pero está no lo haría.

Si este plan fallaba, simplemente recurriría al collar que tenía guardado en el ático, tomar el cuerpo del príncipe sería lo mejor. Juventud, poder, un cuerpo tonificado y por último a Lalatina.

Cuando me aburriera de ella, sin duda habría muchas otras mujeres que podría disfrutar.

Sin duda lo disfrutaría mucho pero esos malditos miembros de la familia real son muy quisquillosos, no había garantía que lo usara por voluntad propia incluso si lo enviara como regalo pero no era necesario, una vez el collar estuviera dentro del palacio solo lo tengo que recupera y esperar un descuido del príncipe.

Claro aun faltaba tiempo para esto, de cualquier forma nada me impediría obtener a Lalatina.

Tomé los documentos que el jefe de mayordomos me había dejado y empecé a verlos, un poco de comida cayó sobre ellos pero no importaba, el gremio podría hacer otros documentos si fuera necesario.

Luna no solo tenía un buen cuerpo sino que era competente, sino fuera porque me metería en problemas con el gremio, ya la hubiera metido en mi cama.

—Veamos lo que tenemos aquí.

Chris; tipo ladrona, plebeya de nacimiento, domicilio no conocido, familia no conocida, no cuenta de banco o propiedades, no antecedentes penales o de cualquier tipo. La típica aventurera parásita de la sociedad que termina muerta en alguna misión o termina como madre soltera con un empleo mediocre, ¿Cómo diablos una chica así llegó a ser amiga de Lalatina?—

Los dibujos que venían adjuntados con los documentos no estaban mal, la chica no era muy femenina que digamos pero su rostro era lindo, aunque no gastaría preciados recursos llevándola a la cama. No era más linda que la prostituta promedio de la capital.

No hay mucho que considerar realmente, sabia como la usaría en mi plan, ya lo había hecho antes y no seria muy dificil de hacer.

Me levanté, dejando medio comido el plato y me dirigí a la planta inferior, mis pies empezaron a doler con unos pasos. Sin duda ya necesitaba un cuerpo nuevo, aunque eso solo era cuestión de tiempo.

No por nada había pagado tanto dinero por ese maldito collar.

Pase por el pasillo principal justo a tiempo para ver cómo esa mujer era escotada hacia fuera, ella no me volteo a ver, hace unos meses esa hija de comerciante había sido tan arrogante en aquella fiesta. Mirala ahora, su gran orgullo aplastado, sin duda una de las mejores sensaciones que una persona podría experimentar.

La próxima vez pediré a la hermana o a la madre, no sabía cual elegir.

Cuando esta salió de la mansión para tomar el carruaje que debía estar esperándola afuera, volví a mis cosas, seguí mirando el dibujo de la chica ladrona y aunque sentía haberla visto en algún lugar antes. Simplemente no podía recordar dónde.

Baje la escalera hasta la área prohibida del castillo, en dónde estaba ese maldito demonio, si no temiera que se pudiera escapar sin duda lo pondría en un lugar en donde no tuviera que bajar por estás malditas escaleras.

No solo estaba oscuro y húmedo, sino que estos malditos escalones habían sido mal puestos, estaban inclinados un poco. Haciendo que tuviera que hacer fuerza para no caerme.

Si tan solo mi antigua mansión no hubiera sido destruida.

—Hey, despierta Demio estúpido, te tengo más trabajo. —

Lo pateé para que se levantara, este bastardo me había dicho que no dormía, pero cada vez que vengo a este lugar se encuentra tirado en el piso.

—¿Trabajo? —

Con tan solo su mirada me ponía la piel de gallina, no sabia el porque pasaba pero sin duda me disgustaba.

—Si trabajo, quiero que metas en muchos problemas a esta chica, haz que su destino dependa de mí voluntad. —

Le pase la imagen de la chica, no confiaba que no rompiera el archivo así que con la imagen sería más que suficiente. Normalmente un nombre sería suficiente para que este demonio supiera de quién estaba hablando, asi que un dibujo debía ser mucho más útil para él.

El demonio se quedó viendo la imagen por un buen rato sin decir nada, era normal así que no dije nada, hasta que este hablara.

De cualquier forma, entre menos habláramos mejor.

—Extraño, no recuerdo haber visto a esta chica en la realidad antes, es como si no existiera. Me pregunto si será una alimaña de oraciones. —

Hablando otra vez con tonterías, claro que nunca la había visto antes, la parte que le falta de su cabeza realmente debió llevarse toda su inteligencia.

—Necesito que la metas en muchos problemas, tantos que Lalatina necesite pedirme un favor para rescatarla. —

Él me volvió a ver antes de volver a ver la imagen.

—Lo podría intentar pero todo problema que cause se solucionará solo por su suerte, eso no significa que no podré meterla en problemas, solo que estos no serán duraderos . —

—¡¿Qué?! No serán duraderos, no digas tonterías... da igual… No necesito que arruines su vida, solo que arruines que la metas en problemas y si no puedes meterla en problemas, entonces sólo tendrás que hacer que se endeude mucho. —

Esa chiquilla no tiene en dónde caerse muerta, sin duda le pedirá dinero a Lalatina, eso evitará que está pueda pagar los pagos de la deuda.

—Eso será más sencillo, la chica parece propensa a desperdiciar dinero pero te advierto que el pago que exigiré a cambio será alto. —

La sonrisa que siempre pone en este paso me pone incómodo, como si mi cuerpo me dijera que corriera tan lejos como pudiera de él, pero afortunadamente sé cómo manejar esto.

—De qué estás hablando, ya te pagué. —

—¿que? ¿En serio? —

—Si, cuando llegue. —

No sabía si había tenido buena o mala suerte al invocar a un demonio olvidadizo, tantos favores gratis sin duda era conveniente, aunque si no me aseguraba que lo hiciera se solía olvidar de hacerlo.

Lo que podría ser fastidioso si tienes a tus enemigos investigando cada movimiento que haces.

—De cualquier forma, usa tus poderes de una vez, no tengo todo el día. —

El Demonio levantó la mano y un destelló salió de sus manos, sin más que hacer ahí, simplemente subí las escaleras directo al baño. Necesitaba quitarme la maldita sensación que este demonio siempre me dejaba cuando lo visitaba.

UN DÍAS DESPUÉS

—Aquí está el pago de la deuda de este mes, puede contarlo. —

La bolsa de monedas de oro era tan pesada que la propia mesa se estaba empezando a doblar por el peso, sin duda una vista hermosa pero no la vista que quería, para eso tendría que esperar unos meses.

—No será necesario, con un hombre de su reputación Señor Dustiness, es obvio que estará hasta el último centavo. —

Hice una seña y los hombres que me acompañaban se acercaron para tomar el dinero, teniendo problemas incluso juntos para cargar el saco, los Dustiness sin duda eran unos monstruos cuando se trata de fuerza.

¿Cuántos pagos más podía soportar la tan prestigiosa familia dustiness? 2 / 3 pagos más, a lo mucho calculaba que podrían aguantar medio año si pedían prestado para pagar. Pero al final, no tenían suficiente dinero para pagar.

Su fortuna no era muy grande, no por nada estaban enemistados con aquella familia de nobles que los llamaba pobres, el único punto sensible de la familia hasta donde sabía.

Exigiría a Lalatina de una vez pero no podría ganar un duelo de honor si este maldito se ofendiera lo suficiente, da igual, antes de que llegue el festival de la diosa Eris Lalatina estará en mi cama.

Este maldito que me quitó a la madre, no podrá evitar que disfrute a su hijo, me asegurará que su futuro nieto tenga mi sangre

—Bueno, supongo que es hora que me retir… —

El sonido de destrucción me interrumpió, rápidamente un escándalo se empezó a escuchar en la parte trasera de la mansión, el idiota de Ignis haciendo honor a su tan afamoado caracter y a pesar de su edad. Tomó una espada de su pared para dirigirse a la fuente del escándalo.

Supongo que algunos hábitos nunca se olvidan, menos para alguien como él.

Ordene que llevaran el oro al carruaje y que lo preparen para partir cuando llegue, antes de seguir a todos en búsqueda de lo que pasaba. Si fuera un total cobarde nunca hubiera llegado hasta este punto de mi vida, si hubiera un peligro obviamente huiría pero si hubiera algo que ganar, sin duda estaría ahí.

Llegué tarde por mis torpes piernas, las sirvientas ya habían huido del lugar y los guardias estaban regados en el patio derrotados, viendo en como un enorme dragón blanco estaba intentando golpear a ese vejete con su cola.

—No podemos dejar al padre de Darkness salir herido. —

—¿Que? ¿Bromeas? No podemos dejar que él yerra a Faitfore. —

A mi derecha sin que se diera cuenta de mi presencia había dos chicas hablando, una de ellas era la amiga ladrona de Lalatina, llamándola por ese desagradable nombre de aventurera que está usaba con los plebeyos.

De igual manera, parecía como si lo que pasaba estuviera relacionado con ella, Sonreí.

En primer lugar porque ese maldito demonio realmente había hecho algo, en segundo porque un dragón blanco valía mucho y sin duda conseguiría sacarle mucho dinero a este si lo capturaba y por último ese maldito de Dustiness podría morir hoy si me sonreía la suerte.

—-¿por qué está haciendo esto? No tiene sentido, ni siquiera está hablando, pareciera como si fuera un dragón salvaje. —

—No importa eso ahora, hay que usar el collar y controlar al dragón, tenemos que irnos de aquí. —

Entendí lo que estaba pasando, realmente ese demonio se había lucido en esta ocasión, un collar que controla dragones.

maravilloso.

Sin que me vieran me acerque por atrás y en un rápido movimiento le arranque el collar, algo así de útil sin duda debía estar en mi posesión, solo esperaba que no dejará de trabajar al ser roto.

—¿Qué tenemos aquí? Unas pequeñas terroristas, se atreven a atacar a una familia tan prestigiosa como los Dustines. —

Mi presencia sorprendió a ambas chiquillas, tenía que admitir que la rubia no estaba nada mal. Aunque más importante, parecía ser de una familia muy rica por su ropa tan elegante.

Mi pequeño discurso al parecer distrajo a Ignis, quien fue inmediatamente sacado a volar por el dragón, se escuchó un gran estruendo con el golpe asi que sabia que había sido fuerte.

Este terminó entrando por una ventana, rompió algunos muebles, si muriera sin duda me ahorraría muchos problemas.

—Devuélveme eso. —-

La chiquilla conocida como Christ estaba apunto de usar robar en mi, por lo que sonreí, no es la primera vez que alguien usa ese hechizo contra mi.

Tome su mano, la levante y la azote contra el piso. No había llegado a donde estaba siendo un debilucho.

—Es mejor que se vayan de aquí antes que mis guardias personales lleguen. —

La chica rubia ayudó a levantarse a la ladrona que seguía con la intención de pelear pero en ese momento el dragón blanco salió volando, por lo que me distraje.

—ROBAR —

Esa maldita chiquilla me había quitado el collar, ambas corrieron rápidamente, haciendo que me rindiera en ese momento. No había forma que las alcanzara. De cualquier problema, entre más tiempo estuviera libre más problemas le acusan a los Dustines.

Podría recuperar el collar cuando las detuvieran.

Con algo de suerte, el siguiente mes la Lalatina estaría rogando por una extensión del plazo de pago y felizmente tomaré su mano. Por ahora solo tengo que reportar este asunto en la fiscalía, no permitiría que el idiota de Dustiness ocultara lo ocurrido aquí para ayudar a esa ladrona, ahora la cuestión era de que debía acusarla; intento de asesinato, terrorismo o rebeldia contra el Reino.

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—¿Qué tal este vestido? —

Ella me enseño un vestido largo color rosa de una pieza que se había puesto, tenía que ser el tercero o cuarto que se había probado desde que llegamos aquí, realmente cuando me dijo sobre esto pensé en ropa más atrevida no de vestidos formales para fiestas de nobles.

Eso me ganó por tener esos tipos de pensamientos, creo que las noches de súcubos realmente han dañado mi mente.

Rain por su parte parecía muy feliz de estar aquí probándose vestidos, aunque supongo que el hecho que me convenció de pagar por dos vestidos en una tienda que parecía costosa, tenía algo que ver con eso.

No era como si me molestara ver a una linda chica probándose vestido pero era muy aburrido, siempre pensé que momentos como estos eran un chiste de las películas y series.

—Bien. Aunque no creo que sea tu color. —

Una mujer entrando en sus veintes con un rosa tan brillante sin duda no quedaba bien, en especial para un vestido que está hecho para una fiesta elegante.

—Lo sé, voy a preguntar al encargado si no tendra uno en negro o en rojo. —

"Colores adultos" ese fue el primer pensamiento que pasó por mi mente, la ropa de Amarilla de se Darkness y Azul de Aqua siempre me había dado la impresión de ser muy infantiles o tal vez sea por la infantiles que era esas dos.

Yunyun y Megum por otro lado, a pesar de ser menores que las otras dos, se veían mejor. Claro que esto era si ignoras el extraño sentido de la moda de los demonios carmesí.

En ese momento me di cuenta que Rain había dejado su bolsa de dinero en el probador, estaba abierta y con algo de dinero como varios cupones de descuento fuera.

Me preguntaba porqué habría contado dinero en el vestidor, tal vez quería otro vestido más y estaba viendo si le alcanzaba.

Lo que me hace preocuparme por el bienestar de mi propia cartera

—Jajajajajajaja —- la riza de una mujer fuera de la tienda me atrajo la atención, por lo que me acerqué para ver de qué se trataba.

La mujer en cuestión era una belleza castaña y de ojos azules de unos 28 años que vestía un vestido azul con blanco, con un cuerpo que solo podría ser descrito como perfecto.

Ella estaba en medio de la calle por mientras que una chica rubia se encontraba tumbada en el suelo, alrededor estaban otras mujeres que parecían estar con la chica de azul, ninguna parecía ayudarla.

La escena era tan conocida para mí, era la típica escena de un bully.

Me recordaba cuando mi amiga de la infancia fue confrontada por la ex-novia de ese bastardo, lo único que ella pudo hacer en esa ocasión fue cubrirse la cara para evitar que dejaran alguna marca visible para sus padres.

Si, esto fuera un anime, este sería el momento que un guapo príncipe salvará a la chica inocente pero no parecía que nadie de los que pasaban se quería involucrar en el asunto.

Esas chicas se veían muy ricas así que no me sorprendió que nadie lo intentara, bueno no era mi asunto así que era mejor que volviera con Rain.

Cuando estaba apunto de voltearme fue cuando escuche otra voz.

—¡DETÉNGANSE! —

Este grito devolvió mi atención a la escena, no pude evitar asustarme al ver como lo que parecía ser una niña encapuchada, se ponía enfrente de la chica tumbada y las demás.

Estas últimas parecía estar molesta porque alguien se estaba enfrentando a ellas, sus caras de fastidio eran evidentes.

Humillar a los demás es una actividad que ciertas mujeres disfrutan, en especial cuando tienen posiciones sociales altas, mayormente para ver hasta dónde pueden salir con la suya.

—No pueden tirarle los panes de esa forma. —

Mire en el piso una bandeja de metal y unos cuantos panes aplastados que no había visto antes, ahora que lo pienso, no había visto a ninguna vendedora callejera en toda la capital.

—¿Quién te crees niña? esta plebeya estaba vendiendo sus sucios panes en esta área tan fina, por supuesto que tenemos derecho a correrla de aquí. —

—No, no lo tienen, no es contra la ley siempre que pague sus impuestos. — la niña movió sus brazos mientras protestaba..

—No me importa lo que una mocosa diga, si dejamos a los plebeyos vender aquí, pronto tendremos una horda de ellos vendiendonos. –

Realmente admitía que los vendedores callejeros podrían ser un problema, desde que llegué a este mundo he tenido que tratar con muchos de ellos, ni hablar del periodo en que trabaje de eso junto a Aqua.

Por lo que sabía lo molestos que podrían ser, pero esas mujeres estaban exagerando.

—Pero esa no es la forma, ahora discúlpate. —

—¿Qué?... ¿Disculparme?... ¿Quién te… —

La niña se quitó su capucha para dejar ver su cara y cabello rubio que había estado escondiendo hasta ahora.

Sabía que no le esperaba nada bueno a una niña tan pequeña al enfrentarse a mujeres tan malas, así que ni siquiera lo pensé y me dirigí a la puerta.

Tal Vez sera porque había una pequeña posibilidad que me llamara Oni-chan pero ni siquiera lo pensé antes de salir.

Aunque la escena más extraña me esperaba simplemente saliendo.

Todas las mujeres desde la mujer sexy de azul hasta la misma vendedora de panes y algunos transeúntes estaban inclinándose antes la pequeña niña.

—Perdone usted mi rudeza. —

Ok, no estaba seguro de lo que pasaba pero la niña parecía tenerlo todo bajo control.

En ese momento fue cuando al ver a su alrededor la niña me noto entre la multitud, nuestros ojos se encontraron, no supe porque pero la pequeña niña se asustó como un niño al ser atrapado por suspadre comiendo algo que no debería.

Dijo algo pero no fui capaz de escucharlo, ahora que lo pienso, había visto a la misma niña entrar a la cafetería en la que me había llevado Rain.

Ahora que lo pienso, es sumamente raro ver una niña pequeña en una cafetería, aunque debo admitir que pensé que estaba con sus padres.

Le dio el perdón a las mujeres y luego se disculpó antes de irse corriendo.

Por lo que al estar terminado todo ese asunto, no tuve otra opción que volver con Rain que estaba saliendo del vestidor con un vestido exactamente igual al anterior pero en negro.

—¿Cómo me veo? —

—eeeeehh — No sabia que decir, no estaba mal pero como todos los vestidos en este lugar se me hacía muy concerbador, Darkness usaba más atrevidos, o tal vez era que tenía pechos tan grandes que todo lo que usaba parecía atrevido.

—Tomaré eso como un "Hermosa" — ella volvió al vestidor para volverse a cambiar a su ropa normal —- Supongo que ya es hora de volver a la aldea carmesí, aún tengo algo de trabajo con el príncipe, por cierto ¿Dónde te estás quedando? —

—En la casa de Yunyun. —

Ella simplemente no contestó pero suponía que estaba molesta por la mención de esta, realmente estaban desarrollando un odio mutuo sin que pudiera entender la razón.

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La agua salía de mi mano por mientras que veía como la bañera en la que estaba se llenaba lentamente, era obviamente un hechizo muy útil pero de todas maneras me sentía mal, como si hubiera traicionado todo lo que era.

Darkness simplemente había hecho lo que le había pedido, así que no podía enojarme con ella.

La suave corriente del agua no era nada en comparación al ardiente calor de una explosion, como se supone que le agarre cariño a una habilidad tan patética, Yunyun parecía muy feliz cuando me la enseñó diciendo lo útil que era en la vida diaria.

Sin duda era raro sentir como mi magia se agotaba muy lentamente a diferencia del gran drenado de energía que provocaba mi explosion.

—Hey Darkness, no es mi culpa, necesitaba vomitar…. Hey, no me quites mi botella. —

Esas dos estaban haciendo un escándalo justo enfrente de la puerta del baño, entre ella llegando ebria y Kazuma volviendo de su paseo con aquella chica, la casa de mi rival estaba muy ruidosa.

Necesitaba un lugar tranquilo para procesar esto, simplemente no estaba acostumbrada a no salirme con la mía cuando la cosa se trataba de la magia.

Mañana a primera hora, volveremos a Axel, donde descansaremos unos días antes de ir de misión nuevamente.

Donde tendré que dar lo mejor de mi para conseguir los suficientes puntos para conseguir nuevas habilidades y ahorrar algunos para mejorar mi explosion.

Si lo hago bien, nadie sabrá que sigo mejorando mi explosion hasta que la use en una emergencia, quedando como la gran maga que soy.

—Espera Aqua, estás rompiendo mi ropa y Kazuma está en la casa. —

—Ese Nini está siendo regañado por Yunyun, así que… —

Estuve apunto de levantarme de la tina para pedir que se callaran pero pude soportar mi impulso de hacerlo.

Cambiando de tema, no era una idiota o tan ciega para no notar el extraño comportamiento de Yunyun cuando se trataba de Kazuman, era obvio que ahi estaba surgiendo algo.

Algo asqueroso pero al final de cuentas algo.

La cuestión era que no sabía si tenía que apoyar a mi rival o evitar que una relación tan extraña tuviera lugar, lo único claro era que tenía que sabotear a esa chica llamada Rain, esa era una de mis obligaciones hacia Yunyun.

Aqua y Darkness eran tan densas que no necesitaba preocuparme por ellas por un buen tiempo.

Tal vez tuviera que hablar esto directamente con Yunyun pero no quería darle la impresión de que somos amigas, además que no se nada de como tratar con chicos y menos con una basura humana como Kazuma.

—¡Por Eris, no vomites sobre mí.! —

¿Qué sería lo que verían esas dos en ese chico? No es fuerte, guapo, ni valiente. Lo único que tiene a su favor es el dinero y mi rival nunca ha sido de las chicas que se fijan en eso.

Era más probable que fuera yo misma quien iniciara una relación con él por esos motivos que la inocente Yunyun.

Aunque como dijo mi madre, ella estaba madurando más rápido que yo.

Era un verdadero fastidio pensar en ese tema por lo que decidí simplemente ignorarlo por el momento, me concentré en tomar un baño y me seque para ponerme la ropa e ir a la habitación que compartía con las demás chicas.

Era incomodo compartir el cuarto y la cama con esas dos, Aqua no dejaba de babear me y ayer Darkness casi me mata cuando me abrazó dormida, ahogándome con sus pechos.

Ahora tengo la teoría de que ella duerme con muñecos gigantes en su cama, ya que no paraba de repetir el nombre de un muñeco cuando dormía y de decir que era menos suave que antes.

Una gran cantidad de herramientas y productos de limpieza justo en la puerta de la habitación por lo que simplemente me dirigí al lado contrario.

—Aqua, deja de dormir y ayúdame. —

Darkness no era muy buena limpiando y no le gustaba, así que dudaba que la habitación estuviera limpia por un buen tiempo.

Baje las escaleras, para ver a Kazuma de rodillas frente a Yunyun, ellos me vieron pero era claro que no me quería ahí por lo que preferí salir de la casa a dar un paseo.

—Buenas noches, ¿Vas a dar un paseo? ¿No crees que es muy noche? —

—Si, tengo que pensar en algunas cosas. —

—Está bien, solo cuídate. — dijo mientras me daba un pulgar arriba.

El jefe de la aldea parecía ser una persona amable y alegre, casi era difícil de creer que sea el padre la chica que está dando un regaño en la sala.

¿A dónde podría ir? Estaba el campamento del príncipe que siempre estaba ocupado, podría pedir que los soldados me contaran unas historias o podría ir al bar a beber un poco para intentar alcanzar a mi rival en ese tema.

—Oh, pero si es la Loli de las explosiones. —

—¡¿Cómo me llamaste?! —

Repentinamente por mientras que caminaba, una voz muy familiar me hizo enojar, era Vanir acompañado de Wiz.

—¿Qué hacen ustedes dos en este lugar? —

En ese momento noté que Wiz estaba medio chamuscada y su ropa estaba sucia ¿se habían enfrentado contra un enemigo? Espera se supone que los lynch son invulnerables a ataques físicos ¿ que clase de monstruo habita cerca del pueblo que pueda hacer algo como eso?

—Está encargada de la tienda, convención a Mua de venir a esta aldea en búsqueda de un artesano hábil para fabricar los inventos del chico pervertido que tienes como líder de equipo, pero ese afamado artesano resultó ser no otra persona que la persona que le vende objetos invendibles a esta comerciante de la pobreza. —

—No me llames así, te digo que es muy bueno. —

—Un bueno para nada, no necesito a un artesano que ponga un efecto indeseado a cada producto que haga. —

No podía pensar en ninguna persona en la aldea carmesí que pudiera encajar en esa descripción.

—De igual manera, te importaría dar un paso atrás, no soy muy fanatico del sentimiento de confusión que estás emanando. —

—¿eh? ¿Qué te tiene confundida Megumin? —

Proveniente de wiz estaba segura que era preocupaciones real pero de igual manera no quería decirle nada.

—Ella está confundida por la relación de la chica callada y el chico virgen, además de tener que aprender otros hechizos a parte de explosion, si me preguntas es una tontería esto último. ¿Que clase de mago idiota solo aprende un hechizo pudiendo tener más? —

–¡VANIR! Eso fue muy descortés, discúlpate con Megumin. —

—¿Por que? Es obvio que dejar a su amiga masoquista elegir en qué gastar los miserables puntos de experiencia que tenía, fue la mejor decisión que esta chica ha hecho por un buen tiempo. —

Intentó golpearlo sorpresivamente pero como cabe esperar de un demonio que puede ver el futuro simplemente lo esquivo.

—Enojo, no es mi emoción favorita pero es mucho mejor que la confusión. —

Tire otro golpe y otro pero ninguno lograba darle.

Necesitaba calmarme, era inutil intentar atacarlo y simplemente le estaba dando lo que quería, así que simplemente pare de atacar.

—Sabes algo, no me importa, creo que mejor vuelvo a casa de Yunyun. —

Empecé a caminar de regreso, ahora enojada por lo ocurrido, Wiz se disculpó pero no era con ella mi problema.

Lo último que escuche de ellos fue a Vanir negándose por segunda ocasión y decir que era hora que ellos dos volvieran a Axel, que una gran suma de dinero le esperaba por todos los productos defectuoso de su tienda.

Ni wiz ni yo entendimos lo que quiso decir, pero eso no me detuvo para irme, era mejor ayudar a Darkness a limpiar que seguir hablando con ese demonio.

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Darth David The Simp: Realmente no tengo periodo para actualizar, lo siento.