Capítulo 4 – La respuesta

Luego de haber salido con Spike en busca de sus amigas, Dusk Shine había entrado en la mayoría de los vagones del tren. Sin embargo, seguía sin encontrar a sus cinco amigas.

"Así qué… Dices que esta lagartija gigante hizo desaparecer a las chicas y luego te dejó encerrado por más de un año en un vagón." Preguntó Spike muy incrédulo, luego que su hermano mayor le contara un resumen de lo sucedido. "Quizás… solo te quedaste dormido un segundo y fue una pesadilla."

"No fue ninguna pesadilla. Y no era una lagartija gigante, era un draconequus." Dijo Dusk sin prestarle atención a que Spike pareciera no creer su loca historia, solo enfocado en seguir avanzando hasta revisar hasta el último de los vagones del tren.

Y justamente fue en el último vagón del tren, cuando Dusk ya comenzaba a asustarse al imaginarse qué haría si sus amigas no estaban allí, que finalmente Dusk y Spike encontraron a las cinco yeguas que buscaban.

"¡Chicas!" Gritó Dusk lleno de alivio al ver a sus cinco amigas en el vagón, listo para correr hacia ellas y abrazarlas. Sin embargo ese impulso se detuvo inmediatamente al ver detenidamente a sus amigas.

Al parecer, luego que Dusk y Spike entraran en dicho vagón, ninguna de las cinco yeguas había reparado en su presencia. Todas estaban ocupadas haciendo otras cosas, y eso que realizaba cada una era precisamente lo que sorprendió a Dusk y Spike…

Applejack parecía estar escondiendo una maleta tras de sí y repetía que ella no escondía nada, desviando la mirada y poniendo esa mala cara de póker que ella ponía cada vez que mentía. Y luchando contra Applejack estaba Rarity, quien parecía obsesionada con quitarle aquella maleta mientras gritaba '¡Mía! ¡Mía!' una y otra vez. Por su parte, al otro lado del vagón, estaba Fluttershy, con una cara de pocos amigos, empujando a Pinkie Pie y burlándose de ella. En tanto que Pinkie Pie tenía la cara de enojo más grande que Dusk y Spike le hubieran visto jamás, y se lanzó a intentar luchar contra Fluttershy mientras esta la evadía volando. Mientras tanto, la quinta de sus amigas, Rainbow Dash, se mantenía acostada en la malla donde iban las maletas, como si fuera una hamaca, fingiendo estar dormida, sin importarle en absoluto que sus amigas estuvieran discutiendo.

"¿Qué les pasó?" Dijo Dusk asombrado, quedándose sin palabras al ver a sus amigas peleando entre sí.

"Eh… ¿Es mí idea o se ven un poco más grises de lo habitual?" Murmuró Spike confundido al ver bien a sus amigas.

'Solo estaba revisando tus recuerdos para ver con qué manipularte…' Fueron las palabras que Discord le había dicho a Dusk cuando sintió que algo había intentado atacar su mente. Palabras que inmediatamente vinieron a la mente de Dusk al ver de tal forma a sus amigas.

"¡Fue Discord! ¡Él le hizo algo a sus mentes!" Dijo Dusk comprendiendo rápidamente lo que sucedía. Entonces Dusk corrió hacia donde estaban sus amigas para detener su pelea y ayudarlas. "¡Chicas, dejen de pelear! ¡Ustedes no son así! ¡Esto es solo un truco que Discord usó para confundirlas!"

Solo cuando Dusk dijo esas palabras, fue que las cinco yeguas recién se percataron de su presencia. Al hacerlo, las cinco yeguas dejaron inmediatamente de discutir entre ellas, pero a cambio, todas miraron con furia a Dusk y le dieron la espalda, lo que dejó impactado al potro.

"¿Q-Qué pasa? ¿Por qué están actuando así? ¿Qué fue lo que les hizo Discord? ¿Cómo fue que las manipuló?" Preguntó Dusk asustado al ver que todas sus amigas parecían querer ignorarlo.

Repentinamente el silbato del tren sonó, anunciando que estaba llegando a la estación de Ponyville, lo que distrajo a todos por un segundo. Mientras el tren se detenía, Dusk volvió a mirar a sus amigas para volver a intentar hacer que lo escucharan.

"Chicas, necesito que me escuchen." Dijo Dusk muy preocupado, acercándose a Pinkie Pie para tocarla y hacer que lo mirara. "Necesitamos ir a la biblioteca y-"

"¡No me toques!" Gritó Pinkie Pie furiosa, haciendo que Dusk se sobresaltara. Entonces las puertas del vagón se abrieron para dejar bajar a los pasajeros. "No te atrevas a volver a tocarme, ni a hablarme, ¡Ni siquiera a mirarme! Nunca más." Agregó Pinkie Pie gruñendo, mirando una última vez a Dusk y luego bajando del tren.

"Lo mismo digo, estoy mejor sola." Dijo Rainbow Dash, volando para salir rápido del tren, no sin antes golpear con su cola a Dusk en su cara.

"Jamás volveré a preocuparme por nadie, solo por mí. ¡Todo mi amor es solo para mí!" Dijo Rarity tan elegante como siempre, mirando molesta a Dusk, agarrando con sus cascos todas las maletas que había en el vagón y bajando torpemente de él.

"¡Ja-ja! ¿Quieres llorar? ¡Pues eso es lo que te mereces!" Dijo Fluttershy burlándose en la cara de Dusk, también bajando rápidamente del tren.

"¿Qué les pasa?" Dijo Spike sorprendido, luego de ver a sus amigas bajando del tren y ver que Dusk simplemente se quedó congelado con una cara de dolor. "¿Por qué están tan molestas contigo?"

"No sé de qué hablas, yo no vi nada raro." Dijo Applejack poniendo su cara de mala mentirosa. "Ahora, si me disculpan, debo ir a ver a mi novio." Agregó Applejack, volviendo a mentir, bajando lentamente del vagón.

"¿¡Applejack tiene novio!?" Dijo Spike asombrado, aún sin entender por qué sus amigas actuaban tan raro, por lo que no podía imaginarse jamás que la honesta Applejack estuviera mintiendo.

Cuando Spike miró a su hermano buscando alguna explicación, se asustó al ver que Dusk parecía tener la mirada perdida, como si hubiera visto un fantasma.

"Yo dejé que esto pasara… Por mi culpa ellas…" Susurró Dusk, comenzando a respirar agitadamente al pensar que por su culpa Discord había alterado, quizás irreversiblemente, las mentes de su dulces y bondadosas amigas.

Antes que Dusk pudiera seguir hundiéndose en la culpa, él y Spike se sorprendieron al ver que una docena de ponies llenos de maletas se agolparon en la puerta del vagón para intentar entrar.

"¿¡Qué es lo que pasa!?" Gritó Dusk sorprendido mientras era empujado por todos los ponies que llenaban el vagón a más no poder.

Al no obtener respuesta, Dusk iluminó su cuerno y se teletransportó a él y Spike fuera del vagón. Entonces Dusk miró a la estación de trenes y se impactó al ver que estaba llena por casi todos los habitantes del pueblo, todos empujándose para intentar subir al tren.

Antes que Dusk pudiera seguir preguntándose qué era lo que sucedía, vio que a lo lejos, sus amigas se alejaban de la estación, adentrándose hacia el pueblo. Sabiendo que sus amigas debían ser su prioridad, Dusk se lanzó corriendo tras ellas, mas alcanzó a dar solo unos pocos pasos, ya que al salir de la estación, se quedó sin habla ante lo que veía. El pueblo de Ponyville era un caos, ¡Literalmente! Las casas flotaban boca abajo, los caminos parecían estar hechos de jabón, decenas de animales saltaban y bailaban junto a flores y árboles vivientes, todos vistiendo vestidos de tutú, y en el cielo se movían de un lado para otro nubes de algodón de azúcar lloviendo chocolate sobre todas partes.

"¿¡Qué pasó con el pueblo!?" Gritó Dusk impactado, dándose cuenta que esta era ya la tercera cosa inexplicable que veía en menos de cinco minutos.

"¡Oh! ¡Nuevos visitantes!" Dijo repentinamente Discord, apareciendo frente a Dusk con una gran sonrisa. Disfrazado con un elegante traje blanco y una corbata negra. "¡Bienvenidos a Caosville!" Agregó Discord sonriendo, haciendo aparecer un enorme letrero con el supuesto nuevo nombre del pueblo.

"¡Discord!" Dijo Dusk con una mirada llena de furia al darse cuenta que él era el causante de todo, de que el pueblo estuviera patas arriba, de que todos los ponies estuvieran huyendo del pueblo, y por sobre todo, de que sus amigas hubieran cambiado. Aquello hizo que por un fugaz momento Dusk cerrara sus ojos por el dolor de cabeza que tuvo, causando que lanzara pequeños rayos mágicos de su cuerno.

"No te enojes tanto, querido Dusk. ¡Ya verás que esto es para mejor! ¡Todos amarán el nuevo Caosville!" Dijo Discord sonriendo amablemente, luego mirando a los otros pasajeros que habían bajado del tren y que se veían desconcertados luego de haber visto a la multitud abordando el tren y ahora viendo un pueblo flotando al revés. "Mis queridos huéspedes, soy su anfitrión, Discord, el señor del caos, ¡Bienvenidos a Caosville! Aquí les ofrecemos una experiencia cien por ciento caótica, libre de cualquier responsabilidad, donde sus sueños más locos pueden volverse realidad." Dijo Discord elegantemente.

Al escuchar a Discord hablar, la furia de Dusk se esfumó por un instante ante el terror de lo que pudo suceder.

"¡Discord atacó Ponyville! ¡Los elementos de la armonía!" Pensó Dusk aterrado, decidiendo correr inmediatamente a la biblioteca, sabiendo que Discord seguramente ya había destruido los elementos, pero de cualquier forma, necesitaba comprobarlo por sí mismo.

Como si el propio pueblo hubiera adivinado lo que Dusk pensaba, justo en ese instante la propia biblioteca apareció flotando dada vuelta justo frente a Dusk. Entonces, mientras Discord estaba distraído con los demás visitantes al pueblo, Dusk corrió hacia la biblioteca.

"No hace falta que vayas." Dijo repentinamente una voz femenina, que erizó el pelaje de Dusk. Al darse vuelta, Dusk vio que allí estaba Sunset Shimmer, con su siempre arrogante mirada de superioridad. "Si buscas los elementos, están a salvo." Agregó Sunset, levitando el cofre en el que Dusk había ocultado los elementos de la armonía.

"Tú… ¿Lograste salvarlos?" Preguntó Dusk asombrado, nuevamente sin saber cómo reaccionar ante Sunset y aquella noticia.

"Bien, me alegra que se pudieran reunir." Dijo repentinamente Discord, apareciendo entre Dusk y Sunset con una sonrisa divertida. "Ahora, para cumplir mi parte del trato." Dijo Discord mirando de reojo a Sunset, y luego a Dusk, poniendo una sonrisa más malvada.

Acto seguido Discord chasqueó sus dedos, y lo siguiente que Dusk supo es que había sido teletransportado. El asombro de Dusk fue total al ver a su alrededor y ver que ahora estaba en medio del castillo de Canterlot, solo él y Sunset Shimmer, quien se mantenía viéndolo fijamente, como si estuviera analizando sus reacciones.

"¿¡Por qué estamos en el castillo de Canterlot!?" Preguntó Dusk aterrado, dándose cuenta que había abandonado a Spike y sus amigas.

"Eso era parte del trato." Respondió Sunset, desviando la mirada al ver la mirada de Dusk.

"¿¡Qué trato!? ¿¡De qué estás hablando!?" Preguntó Dusk acercándose a Sunset y mirándola fieramente, una mirada que sorprendió a la unicornio amarilla.

Justo en ese momento, varios guardias entraron al salón al descubrir que dos intrusos habían entrado sin autorización, pasando todas las vallas defensivas del castillo. Seguidos por la mismísima princesa Celestia, quien se sorprendió al ver que Dusk Shine y Sunset Shimmer estaban en medio del gran salón.

"Todo está bien, guardias. Vuelvan a sus puestos." Dijo Celestia tranquilamente, yendo junto a Dusk y Sunset mientras los guardias seguían sus órdenes.

"¿¡Qué trato hiciste con Discord!?" Volvió a preguntar Dusk, mirando amenazantemente a Sunset.

"¡Yo rescaté los elementos de la armonía de la biblioteca!" Dijo Sunset, mirando molesta a Dusk luego que él la viera con tanta furia. "No sé cómo, pero él sabía exactamente donde estaban." Aquel comentario hizo que Dusk abriera grande sus ojos y bajara su mirada, sintiendo que su ira era reemplazada en parte por la culpa.

Tras esas palabras Sunset miró con una cara de reproche a Dusk y luego enfocó su vista en Celestia, quien solo se quedó en silencio, esperando que Sunset y Dusk hablaran.

"Tomé los elementos antes que Discord lo hiciera, luego lo amenacé con hacerlos desaparecer para que jamás los encontrara." Dijo Sunset seriamente, mirando a Celestia. "Luego hice un trato con él. Dijo que convertiría a Ponyville en la nueva capital del caos, y a cambio dejaría en paz al resto de Equestria. Siempre y cuando prometiéramos jamás volver a usar los elementos de la armonía contra él."

"Tú… ¡Vendiste Ponyville!" Dijo Dusk aterrado y furioso ante lo que escuchaba.

"¡Hice lo necesario para salvar Equestria!" Dijo Sunset mirando molesta a Dusk. "¡Lo intenté! ¡Intenté enfrentarlo! Pero la diferencia de nivel mágico es demasiada. Ni yo, ni tú, ni siquiera la propia princesa podrían contra su magia del caos."

"¡Pero condenaste a todos los ponies que viven en Ponyville!" Dijo Dusk furioso.

"No es verdad, tú lo viste. Todos los ponies de Ponyville que querían huir, lo hicieron. Él no tomó rehenes, todos los ponies que decidan quedarse en Caosville, lo harán por voluntad propia." Respondió Sunset entrecerrando sus ojos, luego mirando nuevamente a la princesa. "Ya descifré a Discord. No es un ser que ambicione el poder, es todo lo contrario, él quiere liberar y mostrar su poder. Es como un potrillo. No podemos detenerlo, pero podemos contenerlo."

Ante la abrumadora lógica de Sunset, Dusk bajó su cabeza y desvió la mirada. Él sabía que Sunset había logrado salvar Equestria del caos, su lógica era innegable. Él mismo había experimentado de primera mano el abrumador poder de Discord y sabía el daño que pudo haber causado a miles de ponies. Y eso afectaba a Dusk más que a nadie, pues había sido él mismo quien casi había entregado en bandeja de plata el destino de Equestria. Aún así… sabiendo que iba en contra de la lógica, su corazón le impedía aceptar que el pueblo que había aprendido a amar, había caído en las garras del señor del caos.

"Es un precio bajo a pagar, comparado a salvar toda Equestria." Dijo Sunset tocando gentilmente el hombro de Dusk y mirándolo dulcemente.

"Solo importas tú, no es así. Mientras puedas conseguir lo que quieres, nada te importa." Dijo Dusk mirando a Sunset con resentimiento, recordando todo lo que Sunset le había hecho a sus amigas. "Tú fuiste a Ponyville e intentaste acabar con la amistad de mis amigas, ¡Lo vi en sus rostros! ¡Ellas ni siquiera eran capaz de mirarme a la cara! Luego dices que hiciste un trato con el ser que manipuló la mente de mis amigas, ¿¡Y esperas que acepte lo que dices y las abandone!?" Gritó Dusk furioso.

"No es mi culpa que tus 'amigas' sean tan débiles de mente como para ser manipuladas tan fácilmente. ¡Solo los más fuertes sobreviven!" Dijo Sunset, mirando a Dusk con una mirada penetrante. "Además, tu amigas no importan, ¡Lo que importan son los elementos! Lo único que tenemos que hacer ahora es buscar a otros cinco ponies que representen los valores de los elementos de la armonía, y así podremos usar su poder si Discord no cumple su palabra."

Al escuchar que Sunset insultaba y menospreciaba a sus amigas, Dusk puso una mirada furiosa y apuntó con su cuerno a Sunset, como si por un segundo hubiera perdido la compostura. En tanto que Sunset solo lo miró con una triste mirada y simplemente cerró sus ojos.

"¡Ya basta!" Dijo Celestia con una fuerte voz. Ella no había querido interrumpir a Dusk y Sunset en su discusión, esperando que ambos lograran entenderse mutuamente. Pero al ver la furia de Dusk, decidió actuar antes que Dusk hiciera algo de lo que se arrepintiera. "Lo que dice Dusk es cierto, no podemos abandonar Ponyville ni a las amigas de Dusk, si es que Discord las ha manipulado. Pero lo que dice Sunset también lo es, no podemos simplemente ir y enfrentarnos así sin más a Discord. Su plan… fue lo suficientemente inteligente como para salvar al resto de Equestria del caos."

"¿¡Le estás dando la razón a Sunset!? ¿¡Vas a aceptar el trato que ella hizo con Discord!?" Dijo Dusk sorprendido y enojado ante las palabras de su maestra.

"Por supuesto que no. Pero al menos nos conseguirá el tiempo suficiente para elaborar un plan de acción." Respondió Celestia, un poco sorprendida al ver a Dusk tan enojado. "Mañana deberían llegar Luna y Cadance a Canterlot. Una vez estemos todas las princesas reunidas, podremos actuar."

"¡P-Pero mis amigas siguen atrapadas allá! ¡Discord jugó con sus mentes! ¡Debemos ir a ayudarlas ahora mismo!" Gritó Dusk impaciente. En ese momento Celestia tocó suavemente el rostro de Dusk y le sonrió dulcemente.

"Ayudaremos a tus amigas, pero debes ser paciente. Sé que en este año que has estado en Ponyville, has aprendido el gran valor de la amistad y el amor, pero nada sacarás si tus sentimientos te ciegan y te sacrificas en vano." Dijo Celestia intentando tranquilizar a su querido alumno. "Prométeme que esperarás hasta mañana, y luego veremos cómo poder enfrentarnos a Discord."

Al ver a su maestra sonriéndole, Dusk no pudo evitar recordar que era la misma sonrisa con la que Sunset había intentado tranquilizarlo. Eso solo lo hizo molestarse aún más al pensar que todos intentaban manipularlo para que solo siguiera lo lógico, cuando lo único que él quería en ese momento, era seguir a su corazón.

Sintiéndose atrapado y solo, Dusk bajó molesto su cabeza. Y sin responder nada ni volviendo a mirar ni a la princesa ni a Sunset, caminó molesto hacia el interior del castillo, aceptando de mala gana lo que le pedía su maestra.

"¡Dusk! ¡Espera!" Gritó Sunset persiguiendo a Dusk, luego que este llegara a uno de los pasillos.

"¿Qué quieres?" Dijo Dusk molesto, sin molestarse en mirar a Sunset a la cara.

"Tú… debes saber algo." Dijo Sunset lentamente. "Yo… hay otra cosa que incluía el trato que hice con Discord. Le hice prometer que él nunca usaría su magia contra mí, ni contra ti."

"¿Por qué hiciste eso?" Preguntó Dusk luego de un largo silencio. Tan molesto, que seguía sin atreverse a ver a Sunset por temor a reflotar su ira.

Tras la pregunta de Dusk, Sunset se quedó en silencio varios segundos, hasta que finalmente habló.

"Fue por amor." Dijo Sunset lentamente. Ante esa respuesta Dusk nuevamente se quedó en silencio, simplemente conteniendo su enojo al pensar que Sunset solo quería manipularlo nuevamente.

"Tú no sabes lo que es el amor." Dijo Dusk molesto, sin mirar en ningún momento a Sunset, volviendo a caminar para alejarse de ella.

Mientras Dusk se iba, Sunset solo se quedó de pie con su cabeza gacha y sus ojos cerrados, con decenas de pensamientos y emociones cruzando por su cabeza.

"Tú no lo entiendes Dusk, ya no hay vuelta atrás." Susurró Sunset, abriendo lentamente sus ojos mientras recordaba lo que tuvo que hacer para que Discord aceptara el trato de no atacar nunca a Dusk ni a ella. "Las piezas ya están en movimiento, y sin importar lo que suceda, yo ya gané."

La noche finalmente cayó en Canterlot, una noche muy peculiar, ya que desde la aparición de Discord, el sol y la luna subían y bajaban a intervalos irregulares, tanto que el día anterior había durado casi dos días completos. Aquello hizo que los ponies se alegraran de la caída de la noche, dado lo agotado que estaban. Sin embargo, mientras todos aprovechaban para descansar, un potro lavanda aprovechó la oscuridad de la noche para robar un cofre y huir del castillo de Canterlot sin ser detectado.

"Lo siento princesa, pero no puedo esperar más. ¡Debo salvar a mis amigas!" Dijo Dusk corriendo, llevándose consigo los elementos de la armonía. Saliendo de Canterlot en dirección a Ponyville.


Luego de haber corrido por tres días y tres noches, lo que en realidad fueron solo algunas pocas horas, ya que el día y la noche ya no eran un concepto válido para medir el tiempo, con el señor del caos jugando con los astros; fue que finalmente Dusk llegó a Ponyville. Llegando además más rápido de lo que se esperaba, pues al salir oculto, no había podido tomar el tren. Sin embargo, tal parecía que todos los caminos que llevaban a Ponyville, habían sido convertidos en resbaladillas de agua con jabón, como si Discord quisiera atraer más visitantes a su divertida y caótica nueva ciudad.

Una vez Dusk entró en Ponyville, se dio cuenta de lo mucho que había cambiado. Ya no solo con las casas flotantes y la lluvia de chocolate, sino que ahora los cerdos volaban, las flores cantaban, los cerros estaban tapizados de brillantes colores, manadas de conejos con patas gigantes corrían por todas partes, y varios muffins saltaban por los suelos diciendo 'cómeme' una y otra vez. Pese a aquello, lo que más sorprendió a Dusk fue otra cosa, ver que aún habían varios ponies en el pueblo, pero todos haciendo cosas muy locas, como cantando de cabeza, otros bailando sin parar, y otros flotando y nadando en el aire como si fuera agua. Todos muy sonrientes y divertidos, cada uno haciendo una alocada actividad distinta.

"¿Por qué aún hay ponies aquí? Pensé que la mayoría había huido en los trenes." Dijo Dusk sorprendido, pensando en voz alta.

"Algunos son visitantes nuevos, y otros son algunos pocos que quisieron quedarse y probar si todas las maravillas que decía Discord eran ciertas." Dijo repentinamente Bon Bon, quien se había acercado a Dusk al verlo llegar al pueblo. "Y otras como yo, nos quedamos para acompañar a nuestras amigas." Agregó Bon Bon con una mirada cansada, apuntando hacia una carretilla que llevaba, en donde estaba Lyra, quien reía como maniática moviendo sus cascos delanteros, los cuales habían sido transformados en unas extrañas garras con cinco pequeñas extremidades cada una, llamadas 'manos'.

"¡Tengo pulgares!" Rio Lyra alocadamente, moviendo sus nuevas manos.

"Entonces lo que Sunset dijo era verdad… ¿Aquí son libres de venir e irse cuando quieran?" Preguntó Dusk, curiosamente más sorprendido por el hecho que Sunset no hubiera mentido al hecho de ver a Lyra con esa extraña 'mano'.

"Sí, pero es peligroso estar mucho tiempo aquí." Respondió Bon Bon con una mirada preocupada. "He notado que quienes más tiempo llevan aquí, comienzan a olvidar la realidad y lo que los trajo realmente aquí… En fin, tengo que irme, debo entregar un informe… Agente Sweetie Drops, fuera." Agregó Bon Bon, poniéndose unas gafas oscuras, y llevándose a su amiga en la carretilla.

"¿Agente Sweete Drops? Supongo que el hechizo de Discord también la está afectando." Pensó Dusk, tratando de entender el súbito cambio de actitud de Bon Bon.

Mientras ambas yeguas se retiraban, Dusk bajó su cabeza y miró la alforja que llevaba consigo, en donde cargaba el cofre que se había robado de Canterlot, pensando que debía encontrar rápido a sus amigas antes que Discord lo descubriera y le quitara los elementos.

"¡Dusk!" Gritó la voz de Spike, haciendo que Dusk sonriera al escucharla.

"¡Spike!" Dijo Dusk feliz mirando hacia su izquierda, y por primera vez, tuvo que levantar la vista en vez de bajarla para poder ver a su pequeño hermano.

¡Spike había crecido! ¡Literalmente! Su aspecto era exactamente el mismo, pero su tamaño era de al menos diez veces lo que era normalmente. Y al ver que Dusk Shine lo miraba desde abajo, Spike sonrió orgulloso.

"¿¡Qué te pasó!?" Preguntó Dusk impactado al ver a su hermano con gigantismo. Dándose cuenta de otro pequeño detalle, que los ojos de Spike parecían estar grises.

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"¿De qué hablas? Estoy igual que siempre." Dijo Spike confundido, agachándose para darle unos cariñosos coscorrones en la cabeza a Dusk de forma paternal. "Me alegra que mi pequeño hermanito también viniera aquí."

"¿Pequeño hermanito? ¿¡De qué hablas!? ¡Tú eres el hermano pequeño y yo soy el mayor!" Dijo Dusk mirando confundido y preocupado a Spike.

"¿Eh? Eso no es verdad, ¡Mira mi tamaño!" Dijo Spike alzando una ceja. Luego Spike se quedó varios segundo en silencio, con una cara pensativa, como si le costara recordar algo. "Yo era el hermano mayor, ¿Verdad?" Agregó Spike con una mirada confundida, mientras un remolino en sus ojos apareció fugazmente al darse cuenta lentamente de la verdad.

"Sin importar el tamaño que tengas, tú siempre serás mi pequeño y adorado hermanito." Dijo Dusk con una tierna sonrisa. Dándose cuenta que Spike luchaba por recordar la verdad.

Con las palabras de Dusk, Spike finalmente pudo salir de su trance y recordar la verdad. Y al hacerlo, instantáneamente la magia caótica de Discord desapareció, y con un gran '¡Poof!' y un destello, Spike volvió a su tamaño normal. Cayendo por la altura, pero rápidamente fue atrapado por la magia de Dusk antes que se golpeara contra el suelo.

"Yo… ¿Qué estaba haciendo?" Preguntó Spike confundido, como si hubiera despertado de un largo sueño.

"Creo que la magia caótica de Discord cumplió un deseo que tenías…" Respondió Dusk con una mirada pensativa, intentando entender cómo es que funcionaba la magia de Discord. "Esto puede ser más complicado de lo que pensé… ¡Spike! ¿Sabes dónde están las chicas?" Preguntó Dusk luego de meditar un segundo y llegar a una conclusión.

"N-No estoy seguro…" Respondió Spike rascándose la cabeza, aún muy confundido por todo lo que había pasado desde que había vuelto a Ponyville.

"¡Ven! ¡Debemos darnos prisa!" Dijo Dusk preocupado, subiendo rápidamente a Spike en su lomo con su magia, y comenzando a correr. "Si mi teoría es cierta, el tiempo está en nuestra contra."

Dado que estaban en el centro de Ponyville, la primera opción para buscar a sus amigas fue en Sugarcube Corner y en Carrousel Boutique, sin embargo, ni Pinkie Pie ni Rarity estaban allí. Aquello hizo que Dusk comenzara a preocuparse más aún, pensando que quizás Discord pudo haber tomado a sus amigas como prisioneras. Sin embargo, antes de aceptar esa idea, debía descartar todos los hogares de sus amigas, y adivinando que sus amigas podían estar en cualquier lado luego de haber sido afectadas por la magia caótica de Discord, Dusk hizo una última apuesta y se dirigió donde pensó que era más seguro que podía estar alguna de sus amigas, la que tenía el vínculo con su familia más fuerte: Applejack.

Corriendo a toda velocidad, finalmente Dusk y Spike llegaron a Sweet Apple Acres. Una vez allí, Dusk inmediatamente notó los cambios que la magia del caos había provocado en la granja y sus habitantes. La plantación de maíz había explotado y se había convertido en palomitas de maíz; las manzanas de los árboles ahora eran gigantes, tanto que hacían que las copas de los árboles cayeran al suelo por el excesivo peso; en tanto que en frente de la gran casa de la familia Apple, la abuela Smith movía velozmente sus patas, bailando como si fuera una jovencita; mientras que Big Mac excavaba velozmente por distintas partes del campo, como si fuera un enorme topo, haciendo zanjas por todas partes. Tanto la abuela Smith como Big Mac tenían sus pelajes levemente grises, tal como lo habían tenido sus amigas cuando Dusk las encontró en el tren.

"Spike, tú busca a Applejack en la casa, yo iré al granero." Dijo Dusk preocupado, separándose de su hermano para encontrar lo antes posible a su amiga.

Una vez entró al granero, Dusk suspiró aliviado al ver que sobre un montón de paja, se encontraba Applejack. Quien estaba descansando, comiendo una manzana, la cual se regeneraba cada vez que ella le daba un mordisco. Sin embargo, lo que más sorprendió y asustó a Dusk fue ver que el pelaje, melena y ojos de Applejack, estaban mucho más grises de lo que habían estado la última vez que él la vio, como si su pelaje hubiera perdido toda pizca de color y brillo.

"Lo que me temía… Tal y como dijo Bon Bon, parece que mientras alguien más está en este pueblo, su mente es más afectada por la magia de Discord." Pensó Dusk asustado, acercándose lentamente a su amiga. "Aún así, solo hizo falta que Spike recordara la verdad para que saliera del trance en que estaba, y con eso, la magia de Discord dejó de funcionar inmediatamente… Espero que no sea demasiado tarde para Applejack y las demás."

"¡Applejack!" Gritó Dusk preocupado, haciendo que su amiga le prestara atención.

"¿Eh? Ah, eres tú." Dijo Applejack mirando molesta a Dusk y luego bajando su sombrero para fingir que estaba durmiendo. "Lo siento, estoy muy ocupada trabajando, así que no puedo verte digamos… ¡Nunca!"

"Applejack, ¡Estás bajo el hechizo de Discord! ¡Debes recordar quién eres en verdad!" Dijo Dusk aproximándose a su amiga para que lo mirara de frente.

"Yo jamás miento. Así que es verdad cuando te digo que estoy muy ocupada." Respondió Applejack molesta, desviando la mirada y comenzando a silbar despreocupadamente.

En ese instante Dusk supo que su amiga no saldría tan fácil del trance como había sucedido con Spike. Tal como lo demostraba su pelaje completamente gris, la mente de Applejack necesitaría de algo más fuerte que simples palabras para recordar la verdad. Y afortunadamente, Dusk ya tenía un plan de reserva que esperaba funcionara.

"¡Tú no eres así! La Applejack que conozco jamás mentiría. Ella siempre es honesta con todos." Dijo Dusk con una mirada de súplica, intentando una última vez hacer entrar en razón a su querida amiga. Sosteniendo uno de sus cascos, acercándose a ella y obligándola a que lo mirara a los ojos.

"Yo…" Dijo Applejack confundida, como si por un segundo hubiera tenido la fuerza para luchar contra el hechizo de Discord. Sin embargo, ese mismo hechizo inmediatamente cobró fuerza y le recordó a Applejack la visión que había tenido en el tren. "¡No! ¡No quiero escuchar nunca más la verdad! ¡Tú lo dijiste la noche en que me declaré! Yo… ¡Yo solo soy una tonta yegua campirana, sin modales ni estudios, que solo te avergonzaría si te vieran a mi lado!"

"¿Qué? Applejack, yo jamás diría eso." Dijo Dusk sorprendido ante lo que le decía su amiga. Entonces Dusk inmediatamente se dio cuenta que eso fue lo que Discord debió haberle hecho ver a su amiga en el tren para confundirla y atacara su mente.

"¡Mentiroso! ¡Sí lo dijiste! ¡Lo piensas siempre! ¡Lo piensas ahora mismo! ¡Te avergüenzas de estar conmigo!" Gritó Applejack soltando unas pocas lágrimas. "¡No quiero escuchar nunca más la amarga verdad!"

Luego del grito de Applejack, Dusk bajó un instante su cabeza y cerró sus ojos.

"¿Quieres escuchar la verdad?" Dijo Dusk lentamente, levantando su mirada para mirar fijamente a Applejack, con una mirada llena de ternura. "La honesta verdad es que amo tu fuerza. Y no lo digo por la increíble fuerza de tus cascos, sino por la gran fortaleza de espíritu que tienes para siempre hacer lo correcto y mostrarte firme ante el peligro. La verdad es que amo tu bello acento campirano y tu olor a dulces manzanas cuando estoy cerca de ti. Amo ese gran amor que tienes por tu familia, y la pasión que sientes por tu trabajo. Y amo que seas la pony más honesta y confiable que he conocido."

En ese momento Dusk acercó a más no poder su rostro al de Applejack, quien solo se quedó impactada por las declaraciones de Dusk, mientras su honesto espíritu reconocía que todo lo que Dusk decía era auténtica verdad.

"Esa es la verdad Applejack. La verdad es… que no puedo vivir sin ti, ni ocultarte la verdad que siente mi corazón por ti." Agregó Dusk sonrojándose, acercando sus labios a los de su amiga y besándola apasionadamente.

Ante aquel sorpresivo beso, los ojos de Applejack se abrieron impactados, pero lentamente ella los fue cerrando, logrando que sus emociones superaran por un segundo el poderoso hechizo mental de Discord. Y mientras eso ocurría, Dusk hizo brillar su cuerno, haciendo que la mente de Applejack reviviera todos esos bellos momentos que habían pasado juntos ella y sus amigas, en donde ella siempre había sido el pilar de la honestidad de su grupo, un valor tan arraigado en el alma de Applejack, que finalmente pudo salir a la luz y derrotar el hechizo del señor del caos.

Al sentir que una perturbación mágica ocurría en su amiga, Dusk se separó del beso. Así pudo ver como los ojos de Applejack brillaron con un fulgor arcoíris por un instante. Luego la magia de Discord comenzó a desaparecer lentamente mientras el gris desaparecía del pelaje de Applejack, y ella volvía a brillar con su característico color naranja, su melena rubia, y sus coloridos ojos verdes.

"¿Eh? ¿Q-Qué pasó?" Dijo Applejack confundida, como si hubiera despertado de un largo sueño. "Estábamos en el tren de Canterlot y luego… ¿Peleamos? Pero después… ¿Todo fue un sueño?" Preguntó Applejack confundida mirando a Dusk, recordando algunas partes de lo vivido, mientras otras eran algo borrosas, como en un mal sueño.

"No fue un sueño, pero eso no importa ahora. Lo único importante es que estás de vuelta con nosotros." Dijo Dusk tiernamente, tocando gentilmente la mejilla de su amiga. Tan feliz de que su plan hubiera funcionado, que sentía que estaba a punto de llorar de felicidad por haber encontrado la forma de recuperar a sus amigas.

"¡Aquí estaban!" Gritó repentinamente Spike con alegría, luego de llegar al granero al ver que Dusk no había salido de allí.

"Escuchen, no tenemos tiempo. Si mi teoría es correcta, cada segundo que pasa, el hechizo mental de Discord se hace más fuerte." Dijo Dusk mirando a Applejack y Spike. "Necesito que vayan al pueblo y sigan buscando a las demás chicas."

"¿Y qué hay de ti?" Preguntó Applejack preocupada.

"Iré al borde del bosque. Debo confirmar si Fluttershy está en su casa o no." Dijo Dusk con una mirada determinada. "Si no la encuentro, volveré y me uniré a ustedes."

Luego que se separaran, Dusk corrió para llegar lo antes posible a la pequeña cabaña de Fluttershy. Incluso antes de llegar, Dusk sabía que algo malo había ocurrido allí. Normalmente, al acercarse a la arboleda que rodeaba la cabaña de Fluttershy, se podía escuchar el canto de las aves y se podía ver a los animalitos corriendo por el camino. Sin embargo, ahora todo estaba silencioso, con una inquietante atmósfera que no era propia de aquel bello lugar.

Una vez Dusk llegó a la cabaña de Fluttershy, quedó impactado al ver lo que estaba ante sus ojos. Todos los animalitos de Fluttershy estaban ocultos en sus cubiles, y las aves en sus nidos, temblando de miedo mientras la ex pegaso amarilla volaba de un lado a otro, burlándose de sus pequeños animalitos. Y claro, era la ex pegaso amarilla, ya que, al igual que Applejack, ahora su pelaje, melena y ojos eran completamente grises y opacos.

"Ju-ju, así que eres un gigantón miedoso. Y ustedes, ¿Son animales de agua o de tierra? ¡Decídanse!" Dijo Fluttershy burlándose de su querido oso Harry y de las nutrias que estaban a su lado, las cuales saltaron inmediatamente al rio para huir de ella. "Y tú… de todos los grandes monstruos de la historia, eres por mucho el más malvado que me he encontrado." Agregó Fluttershy mirando con rencor a su adorado conejito Angel.

Ante las palabras de Fluttershy, el conejito Angel fue el único que no tembló ni salió corriendo por la repentina rudeza y crueldad de Fluttershy, y en cambio la miró enojado y le chilló en respuesta.

"¡Eh! ¿¡Qué dijiste sobre mi madre!?" Gritó Fluttershy impactada por las fuertes palabras que usó el conejito contra ella. Insultos que ni siquiera ella diría.

"¡Fluttershy!" Gritó Dusk, corriendo hacia donde estaba su amiga.

"Oh… Lo que faltaba, ¡Llegó el gran héroe de Equestria…! ¡Por qué mejor no te tiras a un pozo!" Dijo Fluttershy volando directamente hacia Dusk y mirándolo furiosa, cara a cara.

"Fluttershy, esta no es la verdadera tú." Dijo Dusk intentando tocar a la pegaso para calmarla y acercarla más a él. Sin embargo Fluttershy vio lo que Dusk intentaba y con gran fuerza lo empujó, haciendo que él cayera de espaldas.

"¿¡Tú qué sabes de la verdadera Fluttershy!? Tú siempre quisiste a la Fluttershy débil, a la tímida, a la grandísima tonta llena de bondad que le sonreía a todo el mundo aunque la pisotearan." Dijo Fluttershy mirando furiosa a Dusk. "¿Pues qué crees? ¡Esa Fluttershy se acabó! Ahora sé cuan cruel puede ser el mundo y cómo la bondad puede lastimar, cómo tú lo hiciste. Ahora sé que para vivir en un mundo cruel, ¡Hay que ser aún más cruel!"

Al escuchar las palabras de Fluttershy, Dusk inmediatamente entendió que, al igual que con Applejack, Discord debió haber hecho alguna ilusión en el tren para que ella creyera que Dusk la había lastimado de alguna forma.

"La bondad no es mala. Es el sentimiento más bello que puedes tener. Es lo que hace que podamos pensar en los sentimientos de los demás antes que en los propios." Dijo Dusk levantándose del suelo y mirando tiernamente a su amiga.

"¡No es cierto! La bondad hace débiles a los ponies, la bondad hace que solo sientas pena por los demás… Tú solo estás conmigo porque no quieres lastimarme… ¡Tú solo estás conmigo porque te doy lástima!" Gritó Fluttershy furiosa, alzando su casco y golpeando a Dusk en su cara.

Ante el golpe de Fluttershy, Dusk cerró sus ojos por el dolor, sin embargo se mantuvo inmóvil donde estaba. Entonces Dusk volvió a mirar a su amiga, y a pesar del dolor del golpe en su mejilla, Dusk se mantuvo mirándola con una tierna mirada.

"Puedes golpearme lo que quieras, si crees que eso te hará feliz." Dijo Dusk con una pequeña y tierna sonrisa. "Pero yo sé que la verdadera Fluttershy es tan pura de corazón, que eso jamás le traerá tranquilidad ni felicidad. No importa cuanto lo intentes, tu bondadoso corazón no puede ser cambiado solo por una ilusión."

Al escuchar aquello, Fluttershy se enfureció aún más sintiendo que la estaban desafiando. Entonces comenzó a golpear a Dusk, lanzando varios golpes que, dado que su cuerpo nunca había peleado antes, no eran demasiado duros. Sin embargo, eran lo suficientemente fuertes para lastimar a Dusk, quien solo cerró sus ojos y dejó que su amiga lo golpeara.

Luego de unos pocos golpes, Dusk sintió que los golpes bajaban en fuerza y cantidad, por lo que pudo abrir levemente sus ojos. Al hacerlo, vio que Fluttershy se obligaba a seguir golpeando a Dusk, sin embargo, ahora ella lloraba mientras lo hacía, como si le doliera a ella misma estar golpeando a Dusk.

"La bondad que hay en ti es demasiado brillante, ninguna magia puede ocultarla." Dijo Dusk tiernamente, sosteniendo el casco con el que Fluttershy lo estaba golpeando y acercándose más a ella. "Amo a la pony compasiva y amorosa que eres tú, amo tu ternura y tu delicadeza. Y quiero que esa pony que amo vuelva con nosotros."

Entonces Dusk besó a Fluttershy y usó su magia para hacerle recordar a su amada amiga su verdadera esencia, mostrándole todos los recuerdos que la hacían ser quién era. Aquello hizo que el hechizo de Discord finalmente desapareciera y Fluttershy recuperara el color en su pelaje y en sus ojos.

"¿Q-Qué pasó?" Dijo Fluttershy confundida, sintiéndose mareada luego de salir del hechizo de Discord. Mirando a Dusk confundida frente a él, sin saber cómo ambos habían llegado allí. "Espera… Yo… ¿Te estaba golpeando?" Agregó Fluttershy asustada y preocupada mientras partes de los recuerdos volvían a ella, sin estar segura si aquello había sido real o solo un mal sueño.

"Tú jamás me harías daño." Dijo Dusk tiernamente, sonrojándose al poder volver a ver los bellos ojos de su amiga. "Ven, debemos darnos prisa. Debemos ir a ayudar a las demás."

Tras eso, Dusk y Fluttershy corrieron de vuelta al pueblo, con Dusk explicándole rápidamente a su amiga lo que había sucedido, tapando así algunas lagunas mentales que Fluttershy tenía en sus recuerdos. Una vez llegaron al pueblo, inmediatamente se toparon con Applejack y Spike, quienes al ver a su tierna amiga Fluttershy junto a Dusk, suspiraron de alivio por saber que estaba a salvo.

"Justo íbamos a buscarlos." Dijo Applejack una vez se reunieron con Dusk. "Hemos buscado en la mayoría del pueblo, en todos los lugares a los que normalmente vamos con las chicas, pero solo pudimos encontrar a una."

"¡Rarity está en la alcaldía!" Dijo Spike muy asustado. "Intentamos hablar con ella y convencerla de que todo era una ilusión, pero fue inútil. Se rehusó a escucharnos y a abandonar la alcaldía."

"No es tan sencillo romper el hechizo de Discord. Debo usar magia para fortalecer sus recuerdos justo cuando la magia del caos que está en su mente es más vulnerable a romperse." Dijo Dusk con una mirada seria, luego mirando a sus demás amigas. "Yo iré con Rarity. Ustedes deben seguir buscando a las demás, ¡Donde sea! ¡Ellas deben estar en alguna parte del pueblo sin duda!"

Tras la orden de Dusk, los cuatro se separaron y Dusk corrió hasta la alcaldía, la cual seguía estando en el centro de Ponyville, sin embargo, se mantenía flotando boca abajo, mientras varios ponies que trabajaban normalmente en la alcaldía, hacían varias locuras alrededor del edificio. Una vez adentro, Dusk inmediatamente vio a Rarity, quien parecía estar en un trono en medio del salón, riendo como villana loca, mientras la propia alcaldesa estaba bajo los cascos de Rarity, como banquillo para que ella apoyara sus patas. Además de eso, la alcaldía estaba repleta de un montos de objetos al azar, como si alguien hubiera ido por todo Ponyville saqueando todo lo que veía a su paso y lo hubiera puesto en el salón principal de la alcaldía.

"¿Rarity?" Dijo Dusk con extrañeza, acercándose lentamente hasta donde estaba su amiga.

"¿Quién es? ¿Otro pony que será parte de mi gran colección?" Dijo Rarity, con su melena y ojos completamente grises, sin el brillo que siempre había amado Dusk ver en ellos. "Oh… Eres tú. Puedes irte." Agregó Rarity con desprecio al ver que quién había entrado en la alcaldía había sido Dusk Shine.

"¿Qué es todo esto? ¿Por qué estás sentada en medio de la alcaldía rodeada de baratijas? ¿¡Y por qué ocupas a la alcaldesa como taburete!?" Preguntó Dusk sin encontrar una razón lógica a todo lo que veía.

"Yo solo deseaba descansar un día de las agotadoras tareas de ser alcalde." Respondió la alcaldesa sonriendo, con su pelaje levemente gris, símbolo de que ya había comenzado a ser afectada mentalmente por la magia de Discord.

"¡Silencio taburete!" Gritó Rarity mirando molesta a la alcaldesa y luego a Dusk. "¡Yo soy la dueña de Ponyville! ¡Todo lo que ves es mío y solo mío! Y nunca compartiré nada con nadie, porque todos estos son mis valiosos tesoros. Las joyas, los edificios, ¡Incluso los ponies que aquí viven! ¡Todos son míos! ¡MÍOS! ¡BWAHAHA!" Agregó Rarity, volviendo a reírse como villana loca.

Mientras Rarity reía, Dusk pudo entender cómo parecía funcionar el hechizo de Discord en la mente de sus amigas. A Applejack la había vuelto una mentirosa, a Fluttershy la convirtió en una pony cruel y ruda, y a Rarity en una yegua avariciosa y egoísta.

"Tú no quieres estar aquí encerrada sola, con todas estas cosas. Lo que tú en verdad quieres es volver con tus amigas, compartir con ellas y volver a ser la yegua amorosa y generosa que siempre has sido." Dijo Dusk acercándose más a Rarity.

"La generosidad solo te lleva a estar sola y sin nada." Dijo Rarity, levemente nerviosa al ver acercarse a Dusk. "Nunca más regalaré nada, todo es mío, mío, mío." Repetía Rarity al sentirse flaquear, lo que parecía reforzar el hechizo de Discord en ella.

"Tú no eres así. Tú eres la yegua más generosa del mundo. ¡Amas dar todo de ti! Y no es porque sientas algún compromiso o porque quieres que te reconozcan. Esa hermosa alma caritativa que tienes lo hace porque ama ver felices a los demás. Con tal de ver a alguien sonreír, tu eres capaz de dar tu dinero, tus vestidos, tu tiempo, tu amor…" Dijo Dusk llegando en frente de Rarity y estirando su casco para tocarla.

"¡No te acerques! ¡No te quiero cerca mío!" Gritó Rarity aterrada, golpeando el casco de Dusk para que no la tocara.

Aquello ya había llamado la atención de Dusk previamente, y aunque decidió preguntar, Dusk ya tenía una sospecha de cuál era la razón de esa reacción de Rarity hacia él.

"Cuando entré a la alcaldía y me viste, parecías decepcionada… ¿Por qué te quieres adueñar de todo y de todos… excepto de mí?" Preguntó Dusk mirando preocupado a su amiga.

"Tú… Si te tengo cerca, ¡Todos me odiarán! Mis amigas me odiarán, terminaré sola y sin amor…" Dijo Rarity completamente aterrada. "¡No! ¡Este amor es mío y solo mío! ¡No compartiré nada con nadie! ¡Ni siquiera mis sentimientos! ¡Ni siquiera mi amor! ¡Nunca jamás!"

Rápidamente Dusk comprendió que la visión con la que Discord parecía haber logrado alterar la mente de Rarity, había sido con algo relacionado a que sus amigas la dejarían sola por haberse enamorado de él.

"Sabes que nuestras amigas jamás nos abandonarían, no importa la razón, ¡Tú lo sabes!" Dijo Dusk, finalmente logrando acariciar la mejilla de Rarity, quien al sentir el tacto de Dusk, comenzó a temblar y a llorar de miedo ante lo que pensaba que ocurriría.

"Mi amor es solo mío…" Repitió débilmente Rarity, comenzando a luchar contra el hechizo que Discord usó en ella.

"Quédate con tu amor." Dijo Dusk acercándose más a Rarity y mirándola fijamente a los ojos. "Y si hace falta, toma todo el mío." Agregó Dusk, besando dulcemente a Rarity y activando al mismo tiempo su magia en ella.

Con la magia de Dusk, los recuerdos de una vida de generosidad se volvieron fuertes en la mente de Rarity y la hicieron revivir esa bella sensación de felicidad al compartir lo que era de ella. Y esos bellos sentimientos lograron finalmente imponerse al hechizo de Discord, haciendo que Rarity finalmente recuperara su hermosa y reluciente melena purpura, y sus brillantes y profundos ojos color zafiro.

"¿Dusk? ¿Dónde estamos?" Dijo Rarity confundida, tomándose su cabeza con un casco mientras intentaba recordar lo sucedido, con pequeños flashes de recuerdos que llegaban a su mente.

"Estamos en la alcaldía." Dijo Dusk con una sonrisa de alivio al ver de vuelta a su amiga. "Y ahora, debemos ir a salvar a Rainbow Dash y a Pinkie Pie."

Luego de salir corriendo de alcaldía, inevitablemente Rarity se detuvo en shock al ver lo que había ocurrido con su hermoso pueblo.

"¡Qué desastre! Esto… ¡Esto es un horror estético!" Dijo Rarity abrumada al ver las casas flotantes y la lluvia de chocolate, pero principalmente, por los cerros tapizados de brillantes colores. "¡Los colores ni siquiera combinan!"

"¡Rarity!" Gritó repentinamente Spike, llorando de alegría y corriendo a abrazar a Rarity al ver que había vuelto a la normalidad.

"Tranquilo Spikey-wikey, todo estará bien ahora." Dijo Rarity, acariciando dulcemente la cabeza del bebé dragón mientras este la abrazaba.

"¿Y las demás?" Preguntó Dusk, preocupado al ver que Spike estaba solo.

"Encontraron a Pinkie Pie, ¡Síganme!" Dijo Spike, rápidamente recordando su propósito allí, comenzando a correr para liderar a Dusk y Rarity.

Al llegar a donde Spike los guió, Dusk se sorprendió de ver que habían llegado a la escuela de Ponyville. Una vez allí, Dusk vio que en el patio de juegos estaban Pinkie Pie, Fluttershy y Applejack. Con la primera de ellas gritándole y gruñéndole a las otras dos.

"¡Déjenme en paz! ¡No quiero que una maniática de las manzanas me diga qué hacer ni cómo comportarme! ¡Y mucho menos una tonta que ni siquiera puede hablar en voz alta!" Gritó Pinkie Pie enojada, reprendiendo a Applejack y Fluttershy, quienes solo se quedaron quietas, con sus cabezas gachas, como si estuvieran siendo víctimas de una bullie en la escuela.

"¿Qué le pasa a Applejack y Fluttershy? ¿Por qué no le dicen nada a Pinkie Pie?" Preguntó Dusk, mirando confundido a Spike.

"No lo sé. Cuando encontramos a Pinkie, ella le estaba gritando a unos potrillos aquí. Luego Applejack me dijo que fuera a buscarte mientras ella y Fluttershy intentaban tranquilizarla." Respondió Spike, igual de confundido al ver la pasividad de Applejack y Fluttershy.

"¡Chicas!" Dijo Dusk acercándose a donde estaban sus amigas.

Al girarse a ver a Dusk, tanto Applejack como Fluttershy lo miraron con temor por un segundo, como si esperasen que Dusk también había llegado allí a regañarlas. Sin embargo, luego de un segundo, sus ojos se abrieron grandes y parecieron reaccionar.

"¿Sus ojos estaban grises otra vez?" Pensó Dusk preocupado, sin estar seguro de lo que había visto, ya que había sido algo muy rápido.

"¡Dusk! Yo… No sé qué pasó. Estábamos intentando calmar a Pinkie y luego… sentí como si tuviera que quedarme callada para recibir los gritos de Pinkie." Dijo Applejack sacudiéndose la cabeza.

"Quizás la magia de Discord se está haciendo más fuerte en Pinkie Pie, y las está afectando a ustedes." Dijo Dusk preocupado, diciendo una de las dos teorías que pensaba en ese momento. Luego mirando a Pinkie Pie, quien solo se quedó quieta, mirándolo con una mirada de profundo odio, apretando fuerte sus dientes a más no poder. "Ustedes sigan buscando a Rainbow Dash, y permanezcan juntas, ya que parece que la magia de Discord se hace más fuerte. Yo me quedaré con Pinkie Pie y la ayudaré. ¡Vayan!" Dijo Dusk mirando seriamente a Pinkie Pie, mientras Fluttershy y Applejack se unían a Rarity y Spike para seguir lo que Dusk les pidió.

"¡Váyanse todos! ¡Quién los necesita!" Gruñó Pinkie Pie, dándose la vuelta y tomando un poco de arena que había allí en el patio de juegos. "Esta tierra… ¿¡Por qué es tan arenosa!? ¡Y estos juegos! ¿Qué son? ¿¡Para potrillos!?" Continuó Pinkie Pie, gruñéndole a todo lo que veía.

"Son juegos para potrillos, ¡Porque estamos en una escuela para potrillos!" Pensó Dusk con ironía. Dándose cuenta que al parecer el efecto del hechizo de Discord en Pinkie Pie había sido que estuviera enojada y gruñona con todo lo que veía.

"La Pinkie Pie que conozco disfrutaría de esos juegos, aunque fueran para potrillos, y se reiría jugando con todas sus amigas." Dijo Dusk, como siempre, intentando apelar a aquel lado de sus amigas que Discord había ocultado.

"¿Por qué habría de reírme de algo?" Respondió Pinkie Pie mirando con desprecio a Dusk Shine. "El mundo es un lugar triste y oscuro… De nada sirve la risa. Eso es solo algo tonto que hacen los ponies tontos sin cerebro."

Al escuchar aquellas palabras, Dusk no pudo evitar imaginarse por un segundo a Sunset diciendo aquellas mismas palabras. Palabras que él había creído ciertas por tanto tiempo, hasta que justamente Pinkie Pie le había enseñado el gran valor de la risa.

"Esas no son tus palabras, la verdadera tú jamás diría eso." Dijo Dusk acercándose más a Pinkie Pie. "Tú eres la luz de este mundo, tu iluminas nuestros días cuando todos nos sentimos tristes o enojados. Tú eres la pony más feliz del mundo, con tanta felicidad que contagias a todos quienes te rodean con una gran sonrisa… Quizás una sonrisa no cambie el mundo, pero sí cambiará a los ponies que vivimos en él." Agregó Dusk, sonriéndole tiernamente a su amiga.

Al ver la sonrisa de Dusk, Pinkie Pie abrió grande sus ojos, y por un instante pareció rendirse ante las palabras de Dusk. Sin embargo, el falso recuerdo implantado por Discord en el tren, volvió a su cabeza, e hizo que ella inmediatamente volviera a gruñir y a mirar con odio a Dusk.

"¡Mentiras! ¡Son solo mentiras! ¡Lo único que quieres es seguir burlándote de mí!" Dijo Pinkie Pie con una amarga expresión.

"¡Yo jamás me burlaría de ti!" Dijo Dusk sorprendido ante tal acusación.

"¡Eso es mentira! ¡Tú te burlaste de mí! ¡De mis sentimientos! ¡Todos se rieron de mí porque abrí mi corazón! Todos se burlan de mí, y yo… yo… ¡Yo no quiero más risas!" Gritó Pinkie Pie con una mezcla de tristeza y enojo, gruñéndole a Dusk. "No hay nada en este mundo que me pueda hacer reír, porque-"

"Amo tu sonrisa." Dijo repentinamente Dusk, sonrojándose y mirando fijamente a Pinkie Pie.

"¿Eh?" Dijo Pinkie Pie abriendo grande sus ojos. Habiendo sido tomada completamente por sorpresa ante esa abrupta declaración.

"Amo tu sonrisa, y amo tu alegría. Amo tu dulce voz, y amo tus cálidos abrazos." Repitió Dusk sin vacilar, siempre mirando a Pinkie Pie a los ojos.

"¡T-Te estás burlando de mí!" Dijo Pinkie Pie nerviosa y enojada, por primera vez recuperando algo de color al sonrojarse sus mejillas. "¡Son solo mentiras! Lo que quieres es-"

"Amo tus fiestas y tus juegos. Amo que hagas de este mundo un lugar más feliz." Volvió a repetir Dusk, interrumpiendo a Pinkie antes que hablara.

"¡Ya basta!" Gritó Pinkie Pie cada vez más nerviosa.

"Amo que llenes mi vida de sorpresas. Amo que ilumines mi vida con tu risa." Repitió Dusk sin dejar hablar ni de mirar a Pinkie, causando que ella se quedara congelada con una extraña expresión. Era como si su rostro intentara por todos los medios posible mantener el ceño fruncido y su boca gruñendo. Sin embargo, el sentimiento que provocó en Pinkie Pie escuchar una y otra vez la palabra 'amo', causaron que su boca comenzara a temblar, como si su corazón no pudiera aguantar más y le ordenara sonreír de felicidad, pero su mente peleara contra eso e intentara mantenerla gruñona.

En ese momento, Dusk supo que finalmente el alma feliz de Pinkie Pie luchaba contra el hechizo de mental de Discord. Y para terminar de hacerla salir del hechizo, ella solo necesitaba un último golpe de felicidad, uno que Dusk bien conocía ya que la misma Pinkie le había mostrado como compartir la felicidad con un pony al cual se ama. Entonces Dusk acercó sus labios y besó a Pinkie Pie, logrando finalmente que ella abriera aún más grande sus ojos y su pelaje comenzara a recuperar su característico color rosa.

Al ver que el hechizo de Discord se rompía, Dusk dejó de besar a Pinkie y esperó a que su amiga recuperara totalmente la conciencia.

"¿Eh? ¿Qué pasó?" Dijo Pinkie Pie lentamente, una vez recuperó la conciencia. Teniendo las mismas lagunas mentales que habían tenido sus amigas al despertar de aquel profundo trance. Entonces Pinkie Pie intentó recordar lo que había sucedido, e inconscientemente levantó uno de sus cascos y tocó sus labios. Al hacerlo, Pinkie Pie puso una gran sonrisa y comenzó a reírse llena de felicidad. "¡Jajaja! Yo… Yo no estoy segura de qué pasó, pero… por alguna razón ¡Me siento muy, muy feliz!" Dijo Pinkie Pie sonrojándose mientras se reía, mirando a Dusk tiernamente.

Al ver la bella sonrisa de su amiga devuelta en su cara, Dusk también comenzó a reír, sin poder evitar contagiarse con la risa de su amiga.

"Quizás fue un sueño, o una ilusión, pero este sentimiento… solo una vez me sentí así de feliz antes…" Pensó Pinkie Pie con una gran sonrisa, viendo a Dusk y sonrojándose al recordar su primer beso.

Luego de compartir aquellos pocos segundos de felicidad, súbitamente un cerdo con alas pasó volando entre ellos, lo que hizo que Dusk volviera a concentrarse en su misión.

"Ven, debemos ir con la chicas y encontrar a Rainbow Dash." Dijo Dusk, poniéndose nuevamente serio, pero esta vez, sonriendo ante la confianza que sentía al ver que ya casi había recuperado a todas sus amigas.

Pese a que Pinkie Pie hubiera preferido perseguir a ese extraño cerdo volador, y que se asombró al ver lo loco y divertido que parecía estar todo en el pueblo ahora; al escuchar que debían ayudar a Rainbow Dash, Pinkie olvidó todo eso y se concentró en esa misión. Una vez Dusk localizó a sus amigas, vio que lamentablemente todas tenían caras de preocupación, lo que significaba que no había buenas noticias.

"Buscamos por todo el pueblo, pero no encontramos a Rainbow Dash en ninguna parte." Dijo Rarity preocupada.

"Yo busqué en su casa en las nubes, y en el cielo, pero tampoco pude encontrarla." Dijo Fluttershy, temerosa por su amiga pegaso.

"El único lugar que no hemos buscado es en la estación de trenes… pero allí está Discord, intentando atraer más visitantes al pueblo. Y no creo que sea buena idea acercarse." Dijo Spike, también preocupado luego de haberse acercado a la estación de trenes y haber comprobado aquello.

"Bien, al menos Discord sigue distraído." Dijo Dusk con una mirada pensativa, sin saber dónde más buscar a su amiga. "Pero si no está en ninguna casa y Fluttershy revisó el cielo, ¿Dónde podrá estar Rainbow Dash?"

"Quizás cavó un hoyo y se escondió allí. Creo que una vez la vi excavando un hoyo hasta Canterlot. Ella es realmente buena cavando." Dijo repentinamente Applejack, apretando sus labios y haciendo su característica mala cara de póker cuando mentía. Entonces ella repentinamente se dio cuenta de lo que dijo y sacudió su cabeza fuertemente. "¿Eh? Yo… ¿Por qué dije eso?" Agregó Applejack confundida luego de recuperar la razón.

Al ver esa reacción en su amiga, Dusk rápidamente se le acercó y la miró directamente a los ojos. Así pudo notar que por breves lapsos, los ojos de Applejack parecían volverse levemente grises, pero recuperaban rápidamente su color.

"Mientras más estamos en este pueblo, la mente más se afecta. Si no nos damos prisa, podrían volver a caer en el hechizo." Dijo Dusk preocupado, comenzando a pensar en que era raro que él no sintiera ningún efecto aún de la magia de Discord, pese a que llevaba todo el día allí.

'Le hice prometer que él nunca usaría su magia contra mí, ni contra ti.' Las palabras de Sunset sobre el trato que había hecho con Discord, inmediatamente se repitieron en la cabeza de Dusk, haciendo que se diera cuenta de a lo que se refería.

"Ella lo hizo por puro egoísmo, pero… al menos me es útil para poder salvar a mis amigas." Pensó Dusk, sintiéndose aliviado por un instante que Sunset lo hubiera protegido, pero inmediatamente descartando aquel pensamiento al recordar lo manipuladora que había sido.

Al desviar la mirada ante el recuerdo de Sunset, Dusk repentinamente se quedó viendo hacia el cielo, ya que algo le llamó la atención.

"Chicas… ¿Esa nube no está demasiado alta?" Dijo Dusk con una mirada de duda, mirando hacia una solitaria y pequeña nube que se encontraba demasiado alta en el cielo. "Fluttershy, no volaste tan alto, ¿No es así?" Preguntó Dusk, adivinando que efectivamente su tímida amiga no había volado tan separada del suelo como para ver esa nube.

"S-S-Sí, E-E-Es R-R-Rainbow D-D-Dash…" Dijo repentinamente Pinkie Pie comenzando a temblar, algo que Dusk inmediatamente supo reconocer como su pinkie sentido.

Confiando ya por experiencia en el sobrenatural sexto sentido de Pinkie Pie, Dusk puso una cara pensativa. Inmediatamente supo que era arriesgado que Fluttershy volara sola hasta donde estaba Rainbow Dash, ya que podía huir o incluso atacar a su amiga por el efecto del trance de Discord. La mejor y única opción era que él mismo fuera hasta allí, ¿Pero cómo?

"Necesitaré tu ayuda." Dijo finalmente Dusk, mirando lleno de determinación a Pinkie Pie, y entregándole a Spike su alforja con el cofre.

Sabiendo que no tenían tiempo para buscar un globo, dado que lo más seguro era que Cherry Berry había sido de las ponies que huyeron de Ponyville antes de convertirse en Caosville; el plan de Dusk fue que Pinkie Pie inflara decenas de globos y los atara a la cintura de Dusk. Así fue como Dusk finalmente logró elevarse del suelo, y lento pero seguro comenzó a ascender en línea recta hacia aquella pequeña nube en el cielo.

Dada la gran altura a la que estaba la nube, y a que Dusk nunca estaba tan alto, el frio comenzó a hacer que Dusk empezará a temblar. Sin embargo, Dusk se mantuvo firme en su meta, apretando sus dientes, hasta que finalmente logró llegar a la pequeña nube. Una vez allí, Dusk dio un suspiro de alivio al comprobar que había estado en lo correcto. Allí, recostada despreocupadamente con sus ojos cerrados, estaba Rainbow Dash, completamente gris, tal como lo habían estado sus otras amigas.

"¡Rainbow Dash! ¡Gracias a Celestia que estás aquí!" Dijo Dusk aliviado, pinchado uno de sus globos para dejar de subir, y usando su magia para hacer el hechizo de caminar sobre nubes.

Al ver que Dusk saltaba en su nube, Rainbow Dash le dio una mirada de desagrado y se levantó rápidamente.

"Pfft, de todos los ponies, tenías que ser justamente tú." Dijo Rainbow Dash de mal humor, abriendo sus alas para alejarse lo antes posible de Dusk. Sin embargo, la pegaso no alcanzó a despegar, dado que Dusk uso su magia para retenerla allí. "¡Suéltame! ¡No ves que estoy ocupada entrenando!"

"¿Entrenando?" Preguntó Dusk confundido.

"Este es el campo de entrenamiento de los Wonderbolts, ¿Qué no lo ves?" Dijo Rainbow Dash apuntando con su casco a la pequeña nube sobre la que estaban parados. Ante eso, Dusk lentamente abrió sus ojos al comprender que eso parecía formar parte del trance en el que estaba su amiga.

"Bueno… Sé cuán importante es que tú entrenes aquí con los Wonderbolts, jeje." Dijo Dusk con una nerviosa sonrisa, decidiendo seguir el juego de Rainbow Dash. "Pero ahora mismo en Ponyville todo es un caos, y hay cosas más importantes que hacer."

"¡Meh! No me interesa." Dijo Rainbow Dash dándole la espalda a Dusk. "Ya te lo dije, mi entrenamiento es lo más importante. Solo eso me importa."

"¡Por supuesto! ¡Discord atacó la lealtad de Rainbow Dash!" Pensó Dusk inmediatamente.

"Rainbow Dash, tú eres la pony más leal del mundo, y sé que jamás nos abandonarías cuando te necesitamos. Tus amigas te necesitan, ¡Yo te necesito!" Dijo Dusk tocando suavemente el costado de Rainbow Dash para que volviera a mirarlo.

"No hay nadie más importante que uno mismo. Los sueños de uno, las esperanzas de uno, ¡Eso es todo lo que importa!" Gritó Rainbow Dash enojada, comenzando a molestarse por la insistencia de Dusk.

"Nadie quiere quitarte tus sueño, pero… puedes dejarlos de lado un momento cuando tus amigos necesitan tu ayuda. Tú lo sabes, nada es más importante que ayudar a un amigo necesitado." Dijo Dusk sin retroceder pese a la mirada de Rainbow Dash. "Incluso… a veces puedes poner en pausa tus sueños por seguir tus sentimientos… Tú me lo mostraste, la noche de la Gran Gala." Agregó Dusk, bajando su mirada un instante y luego mirando con ternura a su amiga.

"Un error que jamás volveré a repetir." Respondió Rainbow Dash, acercando sus ojos a los de Dusk y mirándolo con desprecio.

"Eso no es cierto. Yo sé lo que en verdad sientes, porque yo también lo siento por ti." Dijo Dusk antes de besar sorpresivamente a Rainbow Dash, quien solo se quedó en shock al recibir ese beso. Sin embargo, antes que algo más pudiera pasar, Rainbow Dash alejó a Dusk de ella.

Tras alejar a Dusk, Rainbow Dash no dijo nada. Ella solo se quedó mirando hacia abajo con una mirada confundida, como si estuviera luchando sobre qué decir y sentir en ese preciso instante.

"Por amor, eres capaz de arriesgarlo todo." Dijo Dusk con una tierna sonrisa. Entonces él uso su magia y reventó todos los globos que estaban atados a su cintura. Y en un acto de locura, o quizás de fe, él saltó de espaldas de la nube y se dejó caer.

Mientras caía, Dusk alcanzó a ver que Rainbow Dash se asomó por la nube y vio con asombro como Dusk caía al vacío. Sin embargo, ella seguía con su pelaje gris y su mirada confundida, lo que significaba que seguía bajo el trance de Discord. Y finalmente Rainbow Dash se dio la vuelta y solo se quedó en su nube.

"Quizás no fue una buena idea." Pensó Dusk, comenzando a dudar de lo que había hecho. "¡No! Yo confío en mis amigas, ¡Confío en Rainbow Dash! Su alma leal es más fuerte que cualquier cosa, ¡Incluso que la magia de Discord!" Pensó Dusk rápidamente, cerrando sus ojos y confiando en lo que su corazón le decía.

Los segundos pasaban y Dusk seguía cayendo, pero su mente inconscientemente ya había calculado la velocidad de caída, y se dio cuenta que ya estaba a punto de golpear la tierra. Hasta que finalmente Dusk escuchó a lo lejos un fuerte sonido, como el de un disparo, y unos pocos segundos después 'alguien' lo tomó entre sus cascos y lo salvó de caer.

"¡Solo te salvé de caer! ¡Esto no significa que seas importante para mí!" Dijo Rainbow Dash volando velozmente mientras salvaba a Dusk, con sus ojos y cejas moviéndose compulsivamente, como si la pegaso no supiera si estar molesta, indiferente o feliz por lo que había hecho.

"Claro que no, me salvaste porque soy tan importante para ti como tú lo eres para mí." Dijo Dusk con una sonrisa, aprovechando su cercanía a la pegaso para tocar su frente con su cuerno. Activando así su magia y haciendo que Rainbow Dash recordara a sus amigas, el valor que ellas significaban para ella, y su verdadera esencia. Causando así que finalmente la pegaso celeste recuperara su color y su melena arcoíris.

Al recuperar sus recuerdos, Rainbow Dash despertó de su trance, lo que hizo que se sorprendiera y dejara de volar bien, causando que ella y Dusk cayeran a la tierra. Lo que afortunadamente no les causó mayores daños, ya que ambos habían estado volando casi a ras de suelo luego que Rainbow Dash salvara a Dusk de caer.

"Hnng… ¿Qué pasó?" Dijo Rainbow Dash sobándose su cabeza luego de haber chocado en la tierra.

"Pasó que te recuperé." Respondió Dusk, abrazando cariñosamente a su amiga, causando que Rainbow Dash se sorprendiera y se sonrojara ante el sorpresivo abrazo de Dusk. Sin embargo ella no dijo nada y solo se quedó quieta, disfrutando del tierno abrazo.

"¡Rainbow Dash!" Gritaron Pinkie Pie y las demás chicas, quienes, junto a Spike, corrieron hacia donde estaban Rainbow Dash y Dusk, luego de verlos caer.

Finalmente todos estaban reunidos, Dusk Shine, Fluttershy, Pinkie Pie, Applejack, Rarity, Rainbow Dash y Spike. Todos a quienes había querido venir a salvar Dusk, estaban a salvo. Con eso ellos podían salir de ese loco y desastroso pueblo, y estar a salvo. Sin embargo, Dusk sabía que no se había acabado. Ellos no podían simplemente huir de Ponyville y abandonar el pueblo que amaban y a los demás ponies que habían caído presos del hechizo de Discord. No, Dusk no era como Sunset Shimmer… Y aunque Dusk sabía que lo que Sunset Shimmer había sido lo más lógico, él nuevamente iba a confiar y a seguir lo que le decía su corazón.

"¿Qué hacemos ahora Dusk?" Preguntó Applejack luego que todos terminaran de abrazarse.

"Spike." Dijo Dusk mirando a su pequeño hermano, quien inmediatamente entendió lo que Dusk quería y abrió la alforza de Dusk.

Usando su magia, Dusk levitó el cofre, lo acercó a él, y este se abrió. Apenas el cofre abrió su tapa, todos se asombraron al ver que dentro brillaba. Eran los elementos de la armonía, que por alguna razón brillaban más que nunca.

"Eso es nuevo." Dijo Pinkie Pie asombrada.

"No estaba seguro si funcionarían. Ya que la última vez que nos los pusimos, no pudimos hacerlos funcionar." Dijo Dusk con una mirada pensativa, recordando aquella vez en que habían querido sanar las alas de Rainbow Dash con la magia de los elementos. "Sin embargo, ahora es como si los mismos elementos nos pidieran usarlos… como si estuvieran deseosos de alejar este caos y volver a traer la armonía a Equestria." Agregó Dusk, usando su magia para levitar los collares de los elementos y colocándolos en los cuellos de sus amigas.

"¡Oh, sí! El único collar que usaría todos los días." Dijo Rainbow Dash con una sonrisa, orgullosa de ver la joya con la forma de su cutie mark, y sintiendo inmediatamente la magia que esta emanaba dentro de ella.

"Definitivamente se sienten distintos a la última vez que los usamos." Dijo Rarity, recordando también el último incidente con las alas de Rainbow Dash.

"Pero… ¿Qué pasa si no funcionan?" Preguntó Fluttershy, mirando preocupada a Dusk.

"Funcionarán." Dijo Dusk lleno de confianza, sintiendo la magia de los elementos al ponerse la corona con el elemento de la magia sobre su cabeza. Tal como dijera Rarity, esto se sentía diferente a la última vez que se puso la corona, esta vez se sentía más parecido a la vez que él y sus amigas los usaron para derrotar a Nightmare Moon. "Hora de recuperar nuestro pueblo." Agregó Dusk, con una mirada llena de determinación, mirando hacia el otro extremo del pueblo, en donde debía estar el poderoso señor del caos.


En la estación de trenes, Discord sonreía satisfecho al lograr atraer más ponies para que entraran a su pueblo. Cualquier otro hubiera pensado que atraer ponies a un pueblo caótico, donde las casas volaban y los caminos eran de jabón, sería una locura. Pero Discord sabía muy bien lo fácil que era atraer abejas con miel, y lo único que hacía cuando algún pony pasaba cerca del pueblo, era ofrecerles cumplir algún sueño, ya fuera hacerlos más apuestos, más altos, más adinerados, o alguna loca fantasía. Algo que era muy fácil de crear con la poderosa magia caótica de Discord.

Lo que los pobres ponies no sabían, era que esas fantasías que Discord cumplía, eran solo momentáneas. Lo suficiente para atraerlos al pueblo y que estuvieran algunas horas dentro de Caosville. Luego, la misma magia del caos se impregnaba tanto en las mentes de los ponies, que estos olvidaban por completo sus motivaciones iniciales, y finalmente terminaban haciendo locuras y uniéndose a los seres de caos que Discord disfrutaba de ver.

"Otro cliente satisfecho." Dijo Discord, sonriendo divertido desde un trono flotante que se encontraba al lado de la estación de trenes, viendo como su última víctima, un potro llamado Caramel, disfrutaba de su deseo de ser irresistible para las yeguas.

Discord había cumplido el deseo de aquel potro, sin embargo, siempre con un toque de perversa diversión, Discord hizo que en efecto las yeguas quedaran enamoradas de Caramel tan solo al verlo, pero no yeguas de su edad, sino que varias ancianas, que ahora lo perseguían y se lanzaban sobre Caramel para que los besara, mientras Caramel luchaba por escapar.

"Oye, no le cumpliste bien su deseo." Dijo desde debajo del trono Apple Bloom, quien, junto a sus amigas Sweetie Belle y Scootaloo, eran las siguientes en la fila de deseos de Discord.

"Claro que le cumplí su deseo. Es solo que deben tener cuidado con lo que desean." Se burló Discord, quien ya se estaba aburriendo de cumplir correctamente los deseos de los ponies y ahora se divertía un poco más.

Las tres potrancas habían estado ajenas a todo el caos ocurrido en el pueblo, ya que habían estado con su profesora y demás compañeros en un viaje de campo. Al volver, Apple Bloom había invitado a sus amigas a su casa, y al llegar a Sweet Apple Acres, descubrieron lo extraño que actuaban Big Mac y la abuela Smith. Al correr hacia el pueblo para buscar ayuda, no les tomó mucho tiempo descubrir lo sucedido y encontrar al extraño señor del caos, quien prometía a los ponies cumplirles sus deseos si permanecían en el pueblo.

"Apple Bloom, ¿Estás segura de esto?" Preguntó Sweetie Belle nerviosa, mirando con temor al enorme draconequus frente a ella.

"Él dijo que cumplía cualquier deseo, ¡Así que le pediré que devuelva a la abuela y a mi hermano a la normalidad!" Dijo Apple Bloom llena de determinación.

"Claro que puedo cumplirlo, pero ese es solo tú deseo. ¿Por qué no aprovechan esta oportunidad y dejas que tus amigas pidan antes sus propios deseos?" Dijo Discord con una falsa sonrisa de amabilidad, decidiendo divertirse un poco con las pequeñas potrancas.

"¡Oh, Oh! ¡Podría hacer que me crezcan alas más grandes para poder volar!" Dijo inmediatamente Scootaloo, saltando de la emoción.

"¿Un deseo para mí? Hmm… ¿Qué podría pedir?" Dijo Sweetie Belle con una mirada pensativa. "¡Oh! ¡Ya sé! ¡Podría desear que hubieran más miembros en nuestro club!" Dijo la pequeña unicornio emocionada, pensando que se le había ocurrido una grandiosa idea.

"¿Un club?" Preguntó Discord con curiosidad, alzando una ceja.

"¡Las Cutie Mark Crusaders!" Gritaron las tres potrancas con un grito casi ultrasónico, dejando sordo a Discord por un segundo.

"Así que quieren miembros nuevos para su club…" Dijo Discord con una mirada pensativa luego de destaparse los oídos. Entonces él miró de reojo a las potrancas y sonrió. "Quizás podrían invitar a alguien alto y poderoso en la magia para que se una a su pequeño club… Probablemente él no esté interesado, pero lo haría… solo porque está aburrido." Dijo Discord fingiendo desinterés, mientras frotaba una garra sobre su pecho.

"Alto y poderoso… ¿Te refieres a Dusk Shine?" Dijo Sweetie Belle confundida.

"¡No! ¡Tal vez se refiere a las princesas! ¿Cómo no se nos ocurrió antes invitarlas?" Dijo Scootaloo emocionada, pero luego poniendo una mirada pensativa. "Aunque Dusk y las princesas ya tienen sus cutie marks, así que no se si podrían unirse…"

"¡Ugh! Ya basta, ¡Fuera de mi vista!" Dijo Discord molesto, chasqueando sus dedos y haciendo que las tres potrancas desaparecieran de allí. "Como si alguien quisiera entrar a su tonto club." Agregó Discord desviando la mirada con una mezcla de molestia y frustración, luego que las tres potrancas no entendieran su indirecta.

"Pensé que en mil años, este extraño sentimiento se iría, pero… sigue ahí." Pensó Discord con una fugaz mirada de tristeza, sin entender cómo llenar el vacío que sentía su corazón y sin entender que pese a sus poderes casi ilimitados, y pese a que él mismo lo negara, él seguía teniendo sentimientos dentro de sí. Y en especial un sentimiento, llamado soledad, se iba haciendo cada vez mayor conforme pasaron los siglos de vida de Discord. Lo había incomodado mil años atrás, y lo volvía a incomodar ahora. "Supongo que seguiré divirtiéndome hasta que averigüe como llenar el vacío. Después de todo, tengo toda una vida inmortal para averiguarlo." Pensó Discord, sin entender lo que inconscientemente había estado buscando al hablar con aquellas tres pequeñas ponies.

"¡Aquí estás Discord! ¡He venido a enfrentarte!" Gritó repentinamente la voz de un potro detrás de Discord.

Una vez el draconequus se volteó, se sorprendió un poco al ver que allí estaba Dusk Shine, con una mirada llena de determinación, y lo más importante, con la corona con el elemento de la magia sobre él.

"Vaya, vaya, esto sí es una sorpresa. Pensé que Sunset Shimmer te había contado sobre nuestro pequeño trato." Dijo Discord, olvidándose rápidamente de sus pensamientos melancólicos y sonriendo perversamente al ver a Dusk.

"¡No me interesa el trato que hicieras con Sunset! ¡Yo vine aquí para salvar a Ponyville y a mis amigas!" Gritó Dusk, sin quitar ni un segundo la mirada de los ojos de Discord.

"Ah, sí, tus amigas. Todo por esa valiosa amistad que sientes. ¿Aún no lo entiendes? La amistad no sirve de nada." Dijo Discord con una mirada enojada, como si la mismísima palabra 'amistad' lo molestara más de lo normal en ese momento. "Y dime, ¿Dónde están tus amigas?"

"¡Aquí están!" Gritó Dusk, quedándose inmóvil, como si aquello hubiera sido una señal. Sin embargo, luego de unos cuantos segundos, se hizo evidente que nada pasaría, lo que sorprendió a Dusk.

Tras eso, Dusk miró hacia atrás y caminó hacia de vuelta, perdiéndose por unos segundos de la vista de Discord. Entonces Dusk arrastró por la cola a una Pinkie Pie totalmente gris, que gruñía molesta mientras Dusk la arrastraba. Tras Pinkie venía Fluttershy, con el mismo pelaje gris que su amiga, quien comenzó a burlarse de Pinkie Pie por ser arrastrada por Dusk. Luego apareció Applejack cargando a una dormida Rainbow Dash sobre su lomo, ambas con los pelajes igual de grises que las otras dos yeguas. Y finalmente llegó Rarity, quien fue atraída por Spike, quien llamó su atención con una gran esmeralda para que la siguiera.

Al ver a las yeguas en ese estado, Discord no pudo evitar soltar una enorme carcajada. Tal parecía que su trance seguía funcionando, y mejor de lo esperado. En el tren, él se había preocupado de que el trance en aquellas cinco yeguas fuera particularmente más profundo, por lo que le dio risa ver cómo aquellas ponies que debían de portar los elementos de la armonía, se comportaban totalmente contrarias a los elementos que debían portar.

"Bien, bien, tienes a tus amigas contigo. ¿Ahora qué?" Dijo Discord burlándose de Dusk.

"Ahora esto." Dijo Dusk, levitando los collares con los elementos de la armonía y colocándolos en los cuellos de sus amigas. "¡Formación!"

De mala gana, las amigas de Dusk escucharon lo que él les pidió y se acercaron hasta él.

"Oh, qué aterrador." Dijo Discord con sarcasmo, fingiendo escalofríos. "Evidentemente me superaron, y ahora es momento de enfrentar mi destino. Disparen cuando estén listas." Agregó el señor del caos cerrando sus ojos teatralmente, haciendo aparecer una diana de tiro al blanco sobre su pecho para burlarse de la determinación de Dusk.

Al ver que Discord bajaba completamente la guardia, Dusk sonrió con confianza.

"Cualquier otro pony pensaría que esto funcionaría, que solo hay que traer los elementos de la armonía y usarlas contra ti, pero yo sé la verdad. Los elementos de la armonía son solo rocas si no hay ponies que despierten su magia. ¡Son las ponies que representan la risa, honestidad, lealtad, bondad y generosidad, las que pueden despertar la verdadera magia de la armonía! ¡Tú lo sabías! ¡Por eso fue que te empeñaste en hechizar a mis amigas!" Dijo Dusk iluminando su cuerno, al mismo tiempo que la joya de su corona también comenzaba a brillar.

Al usar Dusk su magia, el hechizo que había usado para pintar de gris los pelajes de sus amigas se desvaneció, y sus cinco amigas dejaron de actuar y sonrieron con la misma sonrisa de confianza que Dusk, al tiempo que sus elementos también se activaban. Al ver que todo había sido un engaño, Discord abrió grande sus ojos ante la sorpresa, pero ya era demasiado tarde para hacer cualquier cosa.

Tal como sucediera la noche que derrotaron a Nightmare Moon, los elementos de la armonía brillaron, los seis ponies que los portaban comenzaron a flotar, y los ojos de Dusk brillaron con un fuerte resplandor al sentir la magia de la armonía corriendo por todo su ser. Entonces un gran destello brillo en los cuerpos de los seis ponies y una luz arcoíris fue disparada al cielo desde donde estaban, volando a gran velocidad y cayendo igual de rápido justo sobre el señor del caos.

Habiendo sentido previamente aquella magia, los ojos de Discord no pudieron evitar mostrar terror al reconocer esa sensación recorriendo su cuerpo, una magia que era el opuesto exacto a la magia que él usaba: esta era la más pura magia de la armonía. Su cuerpo lentamente comenzó a petrificarse, y en un intento en vano, Discord intentó mover sus garras, pero ya era inútil. La petrificación finalmente llegó hasta su cabeza y Discord fue finalmente convertido en estatua nuevamente.

Tras haber convertido en piedra al señor del caos, la magia que emanaba de los elementos de la armonía lentamente comenzó a desvanecerse, y los seis ponies cayeron suavemente de vuelta en la tierra, sintiendo la calma y paz que les brindaba la magia de la armonía una vez la usaban.

"Vaya… ¡De verdad que esa magia está a otro nivel!" Dijo Spike asombrado, quien no había visto previamente a sus amigas usando la magia de los elementos. "Prometo que nunca más usaré la corona de Dusk para rayar queso." Agregó Spike, quien en secreto seguía usando la corona de Dusk para esas banalidades.

Ante el comentario de Spike, Dusk no pudo evitar suspirar con una pequeña risita. Luego él miró hacia el frente, en donde ahora se encontraba una perfecta estatua de Discord, aún con una mirada de total asombro luego de haber sido engañado.

"¿T-Terminó todo?" Preguntó tímidamente Fluttershy, aún temerosa de que Discord pudiera escapar.

"Sí, todo acabó." Dijo Dusk con una sonrisa tranquilizadora.

"Bien, eso es bueno, pero… ¿Cómo vamos a arreglar todo esto?" Dijo Rainbow Dash apuntando hacia el pueblo tras de ellos, en donde la magia del caos se mantenía, tal como lo dejó Discord.

"Yo… no lo sé. Esperaba que la magia de la armonía lo arreglara, pero supongo que tendremos que hacerlo nosotros." Dijo Dusk rascándose la cabeza y suspirando cansado, pensando en que tendría que pasar días revirtiendo toda la magia caótica que Discord había realizado. "Creo que tendré que pedir ayuda a las princesas para-"

¡CRACK!

Repentinamente Dusk se congeló al escuchar algo resquebrajándose. Entonces rápidamente se volteó para ver tras de sí, en donde seguía la estatua de Discord, tan inmóvil como siempre.

"¿Qué pasa?" Preguntó Rarity preocupada al ver la cara de susto de Dusk.

"N-No es nada…" Respondió Dusk bajando su cabeza aliviado. "Creo que aún estoy algo paranoico. Por un momento pensé que-"

¡CRACK!

Esta vez no había duda, los seis ponies y el dragón presente escucharon aquel sonido. Entonces todos se giraron nuevamente a ver la estatua, y sus caras se quedaron congeladas de temor al ver una grieta en la estatua de Discord, la cual se fue haciendo más y más grande, con varios sonidos de resquebrajamiento cada vez que aparecía una nueva grieta en la estatua. Hasta que finalmente una luz brilló por entre medio de las grietas, y una fuerte explosión de luz cegó a todos por un instante.

"¡Brrr! Odio ser convertido en piedra. Se siente tan frio…" Dijo Discord sacudiéndose como si tuviera frio, como si nada extraordinario hubiera pasado.

"N-No puede ser…" Susurró Dusk casi sin habla, luego de ver que Discord se había liberado.

"Vamos Dusk, pensé que tú eras el listo. Si estás viéndolo, no puedes decir que no es posible." Dijo Discord sonriendo perversamente, disfrutando con la cara de asombro y temor que los ponies tenían al verlo liberarse.

"¡Chicas! ¡De prisa!" Gritó Dusk asustado, nuevamente iluminando su cuerno para volver a usar su magia.

Ante el grito de Dusk, las cinco yeguas rápidamente salieron de su estupor, y saltaron para estar al lado de Dusk y que así sus elementos nuevamente comenzaran a brillar.

"¡Oh, oh, espera! Ahora quiero hacer una mejor pose." Dijo Discord divertido, poniéndose unas gafas de sol y apuntando con sus dedos índices hacia el frente, como si fuera alguien genial.

Ignorando las burlas de Discord, Dusk solo se enfocó en activar correctamente los elementos de la armonía, tal como había hecho previamente. Entonces, tal como sucedió antes, los seis ponies comenzaron a flotar, sus elementos y cuerpos brillaron, al igual que los ojos de Dusk, y nuevamente un gran y poderoso rayo arcoíris salió disparado de donde ellos estaban y golpeó fuertemente a Discord. Quien por su parte, se mantuvo haciendo su pose de chico genial mientras era convertido completamente en piedra.

Una vez Discord volvió a convertirse en piedra, los seis ponies volvieron a caer en el suelo, solo que esta vez Dusk estaba exhausto. Usar tanta magia para activar los elementos de la armonía era agotador, y hacerlo una segunda vez no había ayudado. Además, al hacerlo esa segunda vez, Dusk se había asegurado de usar casi toda su magia para que la magia de los elementos actuara aún más fuerte en Discord, pensando que quizás eso había fallado la primera vez.

"Huff… Huff… Se… ¿Se terminó?" Dijo Dusk respirando agitadamente debido al agotamiento mágico, alzando débilmente la vista y viendo que frente a él se encontraba nuevamente Discord convertido en piedra, solo que esta vez, con una pose distinta a la de la primera estatua.

"¿Q-Qué fue lo que pasó? ¿Cómo fue que él se liberó?" Preguntó Applejack, aún confundida y temerosa por lo que acababa de suceder.

"N-No lo sé… Quizás… La primera vez no usé suficiente magia." Dijo Dusk con una mirada de duda, sin estar seguro de lo que decía.

"Pues… Parece que ahora sí funcionó bien." Dijo Pinkie Pie, quien se había acercado a la estatua de Discord y le dio unos cuantos golpecitos con el casco, haciendo que se escuchara el inconfundible sonido de una piedra. "Sí, completamente convertido en piedra. Y créanme, yo sé de piedras." Agregó Pinkie Pie con una sonrisa.

Mientras las cinco yeguas suspiraban de alivio, ya más tranquilas al ver que no había ninguna grieta en la nueva estatua, Dusk solo se quedó inmóvil, con una cara pensativa.

"La magia de los elementos es increíble… Tan poderosa… No hay duda de que su poder sobrepasa la magia del caos de Discord, ¡Pude sentirla! Este poder fue tanto o más poderoso que la vez que los usamos contra Nightmare Moon. ¡No hay duda! ¡Es imposible que Discord se pueda liberar por su cuenta! ¡Y no hay nada que supere el poder de los elementos de la armonía! ¡Este es el fin!" Pensó Dusk, intentando calmarse a sí mismo. Sin embargo, pese a todos esos pensamientos, él seguía estando intranquilo. "Pero entonces, ¿¡Qué fue lo que acaba de pasar!? ¿¡Cómo fue que Discord se liberó la primera vez!? Yo… Estoy casi completamente seguro que el poder que liberamos la primera vez fue idéntico al que liberamos la segunda vez que usamos los elementos…"

"Chicas, debemos devolver esta estatua a Canterlot lo antes posible." Dijo Dusk mirando seriamente a sus amigas, decidiendo no querer correr riesgos. Justo en ese momento, sus cinco amigas cerraron fuerte sus ojos, como si todas hubieran tenido una fugaz migraña que desapareció en solo un instante. "Lo más seguro es que la princesa custodie la estatua, para que-"

¡CRACK!

Al escuchar ese sonido, el rostro de Dusk se puso pálido, y lenta y temblorosamente volteó su cabeza para mirar hacia atrás. Al ver la estatua, vio que una pequeña grieta apareció en el pecho de Discord, y tal como pasara anteriormente, esta se fue haciendo más y más grandes, agrietando lentamente toda la estatua.

A diferencia de la vez anterior, esta vez Dusk supo lo que pasaría, sin embargo, ahora Dusk solo se quedó inmóvil y sin habla. Sabía que Discord se estaba liberando, ¡Pero no entendía por qué! ¡La magia de los elementos de la armonía no podía haber fallado! ¡Era tan poderosa como lo recordaba! ¿¡Cómo era posible esto!? Y lo peor era que Dusk estaba tan agotado, que ya no podía usar más magia. Aquello hizo que el potro lavanda solo se quedara mirando con terror mientras el señor del caos volvía a liberarse.

"¡Ugh! En serio, odio dejar que me conviertan en piedra. Pero supongo que lo vale con tal de ver esas caritas llenas de terror." Dijo Discord una vez volvió a liberarse, sonriendo malvadamente y mirando con goce la aterrada cara de Dusk.

Las cinco yeguas se quedaron igual de paralizadas que Dusk. Todas ellas lo entendieron rápidamente. Si los elementos de la armonía habían fallado, no había magia capaz de poder derrotar al poderoso señor del caos. Y mientras la aterradora verdad carcomía las mentes de los ponies, Discord solo estiró su cuello y sus garras como si todo aquello fuera algo cotidiano y estuviera a punto de hacer ejercicio.

"Waaah… Bien, esto ya me aburrió." Dijo Discord bostezando y acercándose mucho para ver cara a cara a Dusk. "Ya te divertiste, ahora largo de mi pueblo."

Tronando sus dedos, Discord hizo que Dusk desapareciera de allí, sin darle tiempo siquiera para poder reaccionar. Al ver que Dusk ya no estaba, las cinco yeguas y Spike levantaron sus cabezas y vieron con terror como Discord se levantaba y alzaba malvadamente sus garras, burlándose y riendose malvadamente, luego de haber destrozado la última esperanza de salvación de los ponies.

# Fin del capítulo 4