Capítulo 10 – La primera lección de amor

Una vez a la semana, Dusk Shine y sus cinco amigas se juntaban a desayunar. Una tradición que habían empezado desde que se habían conocido, y que cumplían sagradamente semana tras semana. Sin embargo, esta vez era diferente. Esta vez no eran seis amigos compartiendo juntos un rico desayuno, sino que ahora dos de ellos eran distintos... ¡Dos de ellos eran pareja! Y eso era un cambio tan radical dentro de ese grupo, que, aunque todos se hubieran reunido como siempre, hacía imposible que todo fluyera de manera normal entre ellos.

Los seis habían llegado al Café de Ponyville casi al mismo tiempo, y luego de pedir su desayuno, habían permanecido en silencio por varios minutos, sin que ninguno de ellos se atreviera a hablar. Pinkie Pie, Fluttershy, Rainbow Dash y Rarity miraban incomodas de un lado para otro a Dusk y Applejack, quienes se habían sentado en lados opuestos de la mesa para estar lo más alejado posible entre ellos. Y a diferencia de sus amigas, la nueva pareja se mantenía con la mirada baja, como si quisieran evitar a toda costa cruzar sus miradas con las de sus amigas.

¡BOOM! Repentinamente todos saltaron del susto al escuchar el ruido de un fuerte cañonazo. Entonces todos se voltearon y vieron que había sido Pinkie Pie, quien había activado su famoso cañón de fiesta, causando que toda la mesa quedara cubierta de serpentinas y confeti.

"Y yo que creía que esto sería incómodo." Dijo Pinkie Pie con una enorme sonrisa.

"Huff… Pinkie Pie tiene razón, deberíamos estar más relajados… ¡En especial ustedes dos!" Dijo Rainbow Dash, apuntando a Dusk y Applejack.

"Es… Es solo que… bueno… ustedes… se ven algo tensas." Dijo Dusk nervioso.

"Sí, es bastante obvio que se sienten incómodas con… 'todo esto'." Agregó Applejack, mirando de reojo nerviosa a sus amigas.

Al escuchar el comentario de la nueva pareja, las cuatro yeguas abrieron sus ojos con sorpresa, luego se miraron entre ellas y bajaron sus cabezas apenadas.

"Bueno… Se siente algo raro saber que ahora ustedes son… pareja." Dijo Fluttershy con una leve mirada triste. "Pero solo es algo a lo que debemos acostumbrarnos."

"Es cierto, es algo que debemos arreglar poco a poco." Dijo Rarity, mirando apenada a Dusk y Applejack. "Eso fue nuestra culpa, pero lo que no es nuestra culpa es que ustedes también están actuando raro entre ustedes." Agregó la unicornio, mirando seriamente a la pareja.

"A… ¿A qué se refieren?" Preguntó Dusk sonrojándose levemente, pese a que en el fondo sabía a qué se refería su amiga.

"Ugh… Supongo que si vamos a seguir con esto, debemos hacerlo bien, ¡Y eso los incluye a ustedes dos!" Dijo Rainbow Dash rascándose la cabeza molesta. "Si van a ser novios, ¡Actúen como tal!"

En ese instante las cuatro yeguas se levantaron de sus asientos, y Rarity usó su magia para retirar los asientos que estaban entre Dusk y Applejack. Entonces Pinkie Pie y Rainbow Dash se pusieron al lado del asiento de Applejack, y con sus cabezas empujaron el asiento hasta que Applejack quedó pegada al lado de Dusk. Ante aquel gesto, Applejack y Dusk se miraron mutuamente, y ambos desviaron inmediatamente la mirada, sonrojados. Instintivamente alejando un poco sus cuerpos del otro, para que no se tocaran.

"Si queremos ver qué tan fuerte es nuestra amistad, nosotras debemos aprender a verlos juntos, y ayudarlos como pareja." Dijo Pinkie Pie con una sonrisa algo melancólica. "Y ustedes deben actuar como verdaderos novios. Y pensándolo bien, de hecho lo son, ya que oficialmente están casados." Agregó Pinkie Pie, sonriendo más naturalmente, riéndose al recordar la boda express del día anterior.

Ante las palabras de Pinkie Pie, pareció que sus demás amigas también se relajaron más y finalmente dejaron atrás la tensión inicial que habían sentido. En tanto que, al ver que sus amigas se esforzaban tanto para que aquello funcionara, Dusk y Applejack se miraron mutuamente y se forzaron a relajarse un poco más, causando que sus costados se tocaran levemente al estar sentados tan cerca uno del otro.

"¡Bien! Ahora que todos estamos más relajados, hay algo muy importante que tenemos que decirle a Dusk." Dijo Pinkie Pie, poniendo una mirada muy seria. Mirando fijamente a Dusk. "Te diremos las reglas de este noviazgo."

"¿Las reglas?" Preguntó Dusk confundido.

"Así es. La princesa Cadance nos dio esta idea, para que tú fueras el novio de todas. Pero nosotras decidimos hacer reglas para que esto… fuera más justo para todas." Dijo Rarity, mirando a Dusk y luego a Applejack de reojo.

"¿Y cuáles son esas reglas?" Preguntó Dusk, esperando que no hubiera una regla loca que sumara más complicaciones a ese acuerdo del novio temporal, que de por sí ya era una locura.

"Son tres reglas." Dijo Pinkie Pie, levantándose y actuando como un maestro de ceremonias para darle más teatralidad a aquel anuncio. "Primera regla: Tanto Dusk como quien sea su novia de turno, tendrán que actuar todo el tiempo como novios. Hasta el momento que terminen su noviazgo, ellos serán cien por ciento novios en todo momento."

"Eso es una forma de presionarme para que me tome esto más en serio... Para que deje de ver a Applejack como amiga, y la empiece a ver como una verdadera novia." Pensó Dusk, dándose cuenta de la verdad tras aquella primera regla.

"Segunda regla…" Dijo Pinkie Pie, mirando fijamente a Dusk. "Está prohibido querer ser DEMASIADO cariñosas con Dusk."

"¿Eh? ¿Demasiado cariñosas? ¿A qué te refieres?" Preguntó Rainbow Dash confundida. Sabiendo que todas habían conversado previamente sobre las reglas, pero Pinkie Pie había cambiado algunas palabras, que lo hacían más enredado de entender.

"Demasiado cariñosos…" Murmuró Fluttershy pensativa, hasta que repentinamente se acordó que, justo en esa época del año, los conejitos del campo eran MUY cariñosos entre ellos. Lo que provocó que adivinara lo que quería decir Pinkie Pie en verdad. "¡Oh! ¿Te refieres a la regla sobre aparearse?" Dijo Fluttershy, sonriendo al descubrir la respuesta.

Al levantar su vista, Fluttershy se sorprendió de ver que todos la miraban con sus rostros sonrojados. Entonces Fluttershy se dio cuenta de lo que acababa de decir, y se puso roja como un tomate. Causando que ella rápidamente cubriera su rostro tiernamente con su melena, completamente avergonzada.

"¡Ahem…! Sí, a eso me refería. Está prohibido que cualquiera de nosotras cinco quiera tener intimidad con Dusk." Dijo Pinkie Pie luego de toser un poco nerviosa, para volver al tema principal. Entonces ella sacó un libro que había traído consigo, y lo puso sobre la mesa. Un libro titulado: 'Ponysutra'. "Están prohibidas las cincuenta posiciones sexuales tradicionales, incluyendo la yegua sedienta, la montura al revés, la herradura torcida, la-"

"¡PINKIE!" Gritó Applejack roja de la vergüenza, lanzándose para taparle la boca a su amiga.

Con toda la charla de la segunda regla, todos los presentes estaban rojos de la vergüenza. Eso era algo normal, ya que los seis jóvenes ponies justamente estaban entrando a la edad adulta y ninguno de ellos tenía aún experiencia en ese misterioso campo. Sin embargo, en el caso de Dusk Shine, él no solo estaba rojo por la charla sobre 'intimidad' que estaban teniendo, sino por un gran detalle que al parecer solo él había notado.

"Algo anda mal… Pinkie Pie pudo haber dicho 'está prohibido tener intimidad', pero lo que dijo fue 'Está prohibido QUERER tener intimidad' " Pensó Dusk, repitiendo en su mente lo que había dicho Pinkie Pie. "Además, dijo que esa regla aplicaba para ellas cinco… Acaso… ¿¡Está dejando a propósito un vacío legal!? ¿¡Qué pasa si soy yo quien insinuara que quiero tener intimidad con alguna de ellas!? ¿¡Me está dando a entender que en realidad no está prohibido mientras yo lo quiera!?" Pensó Dusk, rojo de la vergüenza.

Entonces Dusk miró de reojo a Pinkie Pie, quien seguía riéndose por lo roja que estaban sus demás amigas. Sin embargo, al notar que Dusk la miraba, Pinkie Pie también lo miró fugazmente y sonrió coquetamente.

"Sabía que lo entenderías." Pensó Pinkie Pie, sabiendo que ahora tendría una pequeña ventaja al saber ese pequeño vacío legal en sus reglas.

Aquel pequeño truco de Pinkie Pie, pasó inadvertido para Rainbow Dash, Applejack, Fluttershy y Rarity. Sin embargo, a diferencia de las primeras tres, la última de estas notó que Dusk había puesto una mirada muy pensativa luego que Pinkie dijera la segunda regla, y tras analizar por varios segundos las palabras de Pinkie Pie, palabra por palabra, finalmente Rarity descubrió el truco que su amiga había usado.

"Esa tramposa… Encontró una forma de evadir nuestra regla sin que las demás se dieran cuenta." Pensó Rarity molesta. Sin embargo, un segundo pensamiento hizo que la unicornio blanca se sonrojara al darse cuenta que no solo su amiga podía tomar ventaja de aquello.

En ese momento, tanto Dusk como Rarity pensaron fugazmente que deberían decirle a sus demás amigas lo que habían descubierto. Sin embargo, aquello implicaría que cerrarían la puerta a aquella ínfima pero real posibilidad de que 'algo' pudiera suceder entre ellos.

"Quizás… No sea mala idea dejar una pequeña puerta abierta para ciertas posibilidades…" Pensaron al mismo tiempo Dusk Shine y Rarity, sonrojándose al darse cuenta que, aunque no lo dijeran en voz alta, en la mente de ambos cruzaron ideas bastante sugerentes sobre tener intimidad.

"Y… ¿Y cuál es la tercera regla?" Preguntó Dusk luego de sacudir su cabeza para alejar aquellos pensamientos impuros y volver a ser el potro inocente de siempre.

"Oh, la tercera regla es secreta." Dijo Pinkie Pie sonriendo. "Es una regla que tenemos entre nosotras cinco." Agregó Pinkie Pie, mirando a sus amigas. Quienes entendieron a qué se refería Pinkie Pie y también pusieron miradas serias.

Al escuchar aquello, Dusk se llenó de curiosidad, queriendo preguntar sobre aquella regla oculta. Sin embargo, finalmente Dusk desistió de aquella idea, pensando que si sus amigas no querían contarle, seguramente era por su bien. Además, ya suficiente tenía con aquello del novio temporal y las dos reglas que habían inventado.

Una vez terminaron de hablar de las reglas que tendrían Dusk y sus amigas en ese nuevo juego llamado 'amor', nuevamente todos se quedaron en silencio, como si nadie supiera de qué más hablar.

"¡Ugh! No vuelvan a ponerse incómodos… ¡Actúen como verdaderos novio! ¡Lo soportaremos!" Dijo finalmente Rainbow Dash, molesta al ver que Applejack y Dusk parecían estar volviendo a sentirse incómodos por estar sentados tan juntos, sin siquiera mirarse mutuamente.

Notando que todas sus amigas estaban haciendo un gran esfuerzo por ellos, Applejack y Dusk suspiraron y se miraron mutuamente, listos para comenzar oficialmente su primer día como novios.

"Yo…" Balbuceó Applejack sonrojada.

"Yo…" Balbuceó Dusk al mismo tiempo.

"¡Ha-Habla tú primero!" Dijo Applejack torpemente, luego de hablar al mismo tiempo que Dusk.

"N-No… por favor, habla tú primero…" Dijo Dusk, igual de nervioso.

Entonces ambos se volvieron a quedar callados, muy nerviosos, sin estar seguros de qué hacer ni de cómo actuar como novios.

"¿¡Qué te pasa!? ¡Deja de actuar como un tonto! Las chicas tienen razón, ¡Solo dile que quieres pasar el día con ella!" Pensó Dusk, molestándose consigo mismo. Entonces Dusk abrió su boca para finalmente decir lo que sentía.

"AppleJAAACK-" Alcanzó a pronunciar Dusk, justo antes que algo chocara contra su espalda e hiciera que su cabeza se golpeara contra la mesa.

"Ups, lo siento… ¡Hola Applejack!" Dijo súbitamente Derpy, quien había sido la que había chocado con Dusk y ahora se ponía de pie.

"H-Hola Derpy… Q-Qué tal…" Dijo Applejack, sobresaltándose con la sorpresiva aparición de la pegaso gris.

"Ayer me divertí mucho con la competencia de jugo de manzana. Tanto que se me olvidó repartir el correo, jeje…" Dijo Derpy, riéndose torpemente. Entonces ella levantó un gran bolso que llevaba consigo, y depositó un montón de carta en la mesa, frente a Applejack. "Estas son para ti." Agregó Derpy, siempre sonriente. Entonces la pegaso gris se despidió de todos, y salió volando tan rápido y torpemente como había llegado.

"¿Qué son todas esas carta?" Preguntó Rainbow Dash.

"No lo sé, pero…"Dijo Applejack, quien repentinamente abrió grande sus ojos con miedo, tomó rápidamente una de las cartas y la abrió. "No, no, no, no, no…." Dijo Applejack asustada, abriendo velozmente cada una de las cartas, y con cada una que abría, más espantada se veía. "Son demasiados… ¡Y todo para mañana!"

"Son… ¿Invitaciones?" Preguntó Dusk, luego de recuperarse del golpe de Derpy. Mirando una de las cartas que Applejack había abierto.

"Esto es malo. Pensé que nadie había confirmado, pero es todo lo contrario. ¡Todos confirmaron!" Dijo Applejack asustada. "¡Debo avisarle a la abuela! Lo siento, debo irme." Agregó Applejack, poniéndose rápidamente de pie y dándose la vuelta para irse.

"E-Espera Applejack." Dijo rápidamente Dusk, viendo que Applejack se veía algo asustada. "No sé lo que pasa, pero, ¿Hay algo en lo que pueda ayudarte?"

"Oh... bueno…" Respondió Applejack, poniendo una mirada pensativa y luego mirando de reojo a Dusk. "S-Supongo que puedo incluirte. Después de todo… ahora eres… p-parte de la familia…" Agregó Applejack sonrojada. "Ven mañana a la granja, ahí lo entenderás."

"E-Está bien." Dijo Dusk sonriendo, sintiéndose feliz que Applejack quisiera incluirlo en fuese lo que fuese que estuviese planeando. "Entonces, nos vemos mañana."

En ese momento, Dusk debería haberse dado la vuelta para volver a la mesa junto a sus amigas. Sin embargo, al igual que Applejack, ambos se quedaron de pie frente al otro, mientras Dusk pensaba: 'Ahora que somos novios, ¿¡No deberíamos despedirnos de otra forma!?'

Al ver que Applejack parecía estar nerviosa y pensativa, Dusk acercó lenta y torpemente su cabeza a la de Applejack, pensando que, siendo novios, lo lógico sería despedirse con un beso. Sin embargo, al no estar seguro de cómo reaccionaría Applejack, hizo que en el último instante Dusk se detuviera y desviara su rostro, completamente sonrojado.

"¡No seas cobarde! ¡Solo hazlo!" Pensó Dusk cerrando con fuerza sus ojos.

Entonces Dusk giró velozmente su cabeza para volver a encontrarse con el rostro de Applejack. Pero con lo que no contó, fue que Applejack también había girado su cabeza rápidamente hacia él, causando que en vez de un anhelado beso, ambos se golpearan fuertemente sus cabezas.

"¡Ouch! Yo… C-Creo que ya debo irme…" Dijo Applejack luego de sobarse su cabeza. Girándose rápidamente con sus mejillas rojas de vergüenza, y luego salió corriendo de allí.

Por su parte, al ver que había arruinado su primer beso oficial como novio, Dusk golpeó su rostro avergonzado, sintiéndose humillado.

"Tranquilo, no pudo ser tan malo." Pensó Dusk, intentando quitarse la vergüenza que sentía. Volteándose para mirar a sus amigas, que sin duda lo apoyarían.

Lo que no se esperó Dusk, fue que al ver a sus cuatro amigas, todas lo veían con miradas de lástima, como si hubieran visto lo más humillante del mundo.

"Cielos… Supongo que fue bueno no ser la primera novia de Dusk." Dijo Rainbow Dash, viendo a Dusk con una cara de lástima.

"Sí, ese intento de beso fue tan vergonzoso de ver…" Dijo Pinkie Pie, llorando por la vergüenza ajena de ver a Dusk siendo tan torpe.

"¡Y-Ya basta! No es como si fuera tan fácil." Dijo Dusk rojo de vergüenza.

"Si mañana vas a ver a Applejack igual de nervioso que hoy, tu cita estará condenada al fracaso." Dijo Rarity suspirando, sintiendo pena por su pobre amiga campirana.

Dusk sabía que Rarity tenía razón. Él nunca había tenido una novia, y le era muy difícil saber cómo actuar frente a Applejack. ¡Todo eso era nuevo para él! ¿Acaso Rarity tendría razón? ¿Su primera cita oficial estaría condenada al fracaso?

"Chicas… Ustedes… ¿P-Pueden ayudarme?" Preguntó Dusk tímidamente, mirando suplicante a sus cuatro amigas.

Ante la petición de Dusk, las cuatro yeguas se sorprendieron y se miraron entre sí, con miradas inseguras. Ayudar a Dusk en su cita con Applejack, implicaba que estaban ayudando a una rival, que de por sí ya tenía una enorme ventaja, al ser novia oficial de Dusk por un mes. Sin embargo, antes que rivales, todas eran amigas, y esa era precisamente una de las pruebas que tenía que afrontar su amistad para prevalecer.

Finalmente las cuatro amigas de Dusk lo miraron y sonrieron, dispuestas a dar lo mejor de sí para apoyar a su querido Dusk a mejorar sus torpes habilidades como novio.


Era una agradable mañana en Sweet Apple Acres y Dusk Shine caminaba muy nervioso hacia la casa de la familia Apple. Tal como le aconsejaran sus amigas, Dusk se había preocupado de llegar temprano a su cita, ya que Applejack no le había especificado hora. Así que Dusk se aseguró de ser un buen novio y estar listo desde temprano para fuera lo que fuera que Applejack quisiera hacer ese día. Además del horario, Dusk intentó seguir todos los demás consejos que sus amigas le dieron el día anterior. Sin embargo, sin que se diera cuenta, mezclar todos esos consejos, no generó el resultado esperado.

Rarity le había aconsejado que para su primera cita, debía verse elegante; además, debía preocuparse que su ropa combinara con la de su pareja. Así fue como la mente lógica de Dusk optó por vestir una elegante corbata de moño de color naranja, la cual efectivamente combinaba con el pelaje de Applejack, pero para nada combinaba con su propio pelaje color lavanda. Por su parte, Rainbow Dash le había sugerido que se hiciera un peinado 'cool', por lo que Dusk se había hecho un alocado peinado hacia arriba, que contrastaba horriblemente con el look elegante que pretendía tener. En tanto que Fluttershy, le había aconsejado que llevara flores a su primera cita. Un muy buen consejo, si no hubiera sido porque justo ese día la florería estaba cerrada. Por lo que Dusk, siempre excesivamente lógico, simplemente tomó un ramo de flores silvestres, que no se veía para nada elegante. Finalmente, Pinkie Pie le había aconsejado que siempre sonriera, otro gran consejo, que hubiera funcionado si Dusk no se sintiera tan nervioso por estar en su primera cita, lo que hacía que pusiera una enorme sonrisa forzada, casi espeluznante. Completando así el peor look de un potro para su primera cita.

Al acercarse finalmente a la casa de Applejack, Dusk se sorprendió al ver que frente a la casa habían varias carretas, e incluso un pequeño dirigible. Además, toda la entrada estaba llena de varias decenas de ponies de todas las edades.

"¡Allí está el novio!" Gritó repentinamente una yegua dentro de la multitud, viendo a Dusk. Al hacerlo, todos en esa multitud se giraron y miraron hacia donde estaba Dusk, quien por su parte, se congeló al ver que todos lo veían.

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Antes que pudiera reaccionar, una docena de ponies se acercó rápidamente hasta Dusk y lo rodeó.

"Espera, yo los conozco… ¡Son los primos de Applejack!" Dijo Dusk sorprendido, reconociendo a varios de los ponies que allí había.

"Así es, y esta vez no te escaparás." Dijo un potro, apuntando a Dusk con una enorme horquilla de heno por la espalda.

"¿E-Escaparme?" Preguntó Dusk, muy confundido y nervioso.

"Sí, como la última vez que nos vimos." Respondió seriamente otro potro, mirando cara a cara a Dusk.

Luego de unos segundos, Dusk recordó finalmente de qué era de lo que estaban hablando esos ponies. La última vez que los había visto, había sido para supervisar los preparativos del banquete de la Celebración del Sol de Verano. Aquella vez, la familia de Applejack se había confundido y creyeron que Dusk se casaría con Applejack, y cuando Dusk les dijo que no, todos salieron persiguiéndolo, intentando cazarlo para que tomara la responsabilidad.

Sin que Dusk Shine tuviera más tiempo para pensar, el pony tras suyo lo empujó con la horquilla para que empezara a caminar. Entonces, sin ver opción de huida, comenzó a mirar hacia todos lados para ver si encontraba a Applejack. Finalmente, Dusk vio que esos ponies justamente estaban guiándolo hasta donde estaba Applejack, quien estaba debajo de la puerta del granero, el cuál había sido adornado con muchas flores y listones blancos. Pero lo que más impresionó y asustó a Dusk, fue ver que Applejack no vestía su acostumbrado sombrero, sino un velo de novia.

"¿Q-Qué es lo que está pasando…?" Preguntó Dusk pálido, luego de llegar empujado por la horquilla junto a Applejack.

"La abuela le contó a todos en la familia que estamos oficialmente casado." Dijo Applejack, sonriendo amorosamente. "Pero todos ellos querían ver una boda, así que decidimos hacer una ceremonia oficial, para que todos pudieran asistir."

"¿¡EH!? ¿N-No crees que es algo exagerado…?" Tartamudeó Dusk, viendo asustado a los primos de Applejack, quienes seguían amenazándolo con la horquilla.

"Claro que no. Después de todos somos esposo y esposa." Respondió Applejack, mirando con ojos de enamorada a Dusk. "¡Oh! ¿Esas flores son para mí? ¡Qué lindo! Ahora tengo el ramo de novia que me faltaba." Agregó Applejack, tomando el ramo de flores silvestres que había traído Dusk. Entonces miró a Dusk, cerró los ojos y estiró su cuello, poniendo sus labios en posición de beso, para que Dusk la besara.

Ante la amorosa actitud de Applejack, Dusk se sintió aún más confundido. Luego miró de reojo hacia su lado y vio que toda la familia de Applejack lo miraba amenazantemente, esperando expectantes que besara a su novia.

Aquella demostración de afecto frente a tantos ponies, hizo que Dusk se pusiera aún más pálido, sintiendo el verdadero peso de estar en una verdadera ceremonia de bodas.

"¡Pftt! ¡Jajaja! L-Lo siento… No puedo contenerlo más." Dijo repentinamente Applejack, bajando su cabeza y estallando en risa.

Entonces todos los demás ponies también estallaron en risas, riéndose de la aterrada cara de Dusk, mientras el pobre potro lavanda se quedó paralizado, sin entender nada de lo que sucedía.

"Lo siento Dusk, jaja… Fue idea de mis primos, querían jugarte una broma." Dijo Applejack, sacándose el velo de la cabeza y secándose una lágrima de risa.

"¿De verdad creíste que te haríamos casarte por la fuerza? ¡Jajaja! Somos ponies de campo, pero no somos unos salvajes, jeje." Dijo riéndose el mismo potro que había estado amenazando a Dusk con la horquilla. "Pero te lo tenías bien merecido por lo de la última vez."

"Applejack ya nos explicó todo." Dijo una de las primas de Applejack, acercándose a Dusk y mirándolo con una sonrisa. "Nos dijo que se casaron por error. Pero de todas formas, ¡Bienvenido a la familia!" Agregó la yegua, dándole un abrazo a Dusk.

Luego de aquella yegua, uno por uno los primos y tíos de Applejack se acercaron a Dusk y lo felicitaron por su pequeño noviazgo express con Applejack, divertidos con esa loca situación y aún más divertidos con la broma que le habían jugado. Por su parte, Dusk aún se encontraba mareado por toda esa situación, dándose cuenta muy lentamente que todo había sido una broma muy bien elaborada.

"Sé que no nos llevamos bien cuando nos conocimos, pero pensé que habíamos hecho las paces. ¡Al menos pensé que me invitarías a tu boda! ¡Jaja!" Dijo repentinamente una voz al lado de Dusk, una que reconoció de alguna parte.

Al voltearse, Dusk se sorprendió al ver a Braeburn, el primo de Applejack. Y quién estaba junto a él, era nada menos que Little Strongheart, la joven búfalo que los había ayudado en Appleloosa.

"Ustedes… ¿Qué hacen aquí…? ¡Y juntos!" Preguntó Dusk sorprendido.

"Nuestro pueblo volvió de las laderas del Oeste, y decidió quedarse una temporada en Appleloosa." Respondió Little Strongheart sonriendo. "Justo cuando llegamos, Braeburn nos dijo que debía viajar a Ponyville, así que quise venir un par de días para conocer más sobre los ponies y sus costumbres."

"Nah… Es solo una excusa, porque esta pequeñita no se quiere separar de mí." Dijo Braeburn, guiñándole un ojo a Dusk.

"¡Eso no es cierto! ¡Tú prácticamente me rogaste que te acompañara!" Dijo Little Strongheart molesta, comenzando a discutir con Braeburn. Entonces Dusk recordó que esos dos siempre actuaban así, discutiendo, pero siempre queriendo estar cerca del otro.

"Vaya, ¡Eso es genial! Creo que es estupendo que los ponies también conozcan a otras razas y sus costumbres." Dijo Dusk, feliz de escuchar lo dicho antes por la pequeña búfalo. "Lo que sí me sorprende, es ver que el gran jefe te dejara venir sola aquí con Braeburn."

"Hmm… Bueno…" Dijo Little Strongheart avergonzada, apuntando con su vista a un rincón del granero. Entonces Dusk miró hacia allí y vio que justamente ahí estaba el gran jefe Thunderhooves, bebiendo felizmente junto a un par de tíos abuelos de Applejack. "Al parecer, se ha hecho adicto a la sidra de manzana."

"¡Escuchen todos!" Gritó repentinamente la abuela Smith, utilizando un megáfono para hacerse escuchar. "Ya nos divertimos, ¡Ahora es hora del desayuno para comenzar con nuestra esperada reunión!"

Todos los ponies presentes gritaron de alegría y siguieron a la abuela Smith fuera del granero, dejando solo a Dusk y Applejack.

"Qué pasa con esa cara, ¿Creías que solo Pinkie Pie y Rainbow Dash son buenas para las bromas?" Dijo Applejack sonriendo, al ver que Dusk seguía algo pasmado por todo lo sucedido. Golpeando el costado de Dusk y poniendo una gran sonrisa.

"Bueno, sí, un poco." Dijo Dusk, sonriendo avergonzado. "Pero ¿Cómo lograste que toda tu familia viniera en solo un día?"

"No lo hice. Ellos ya tenían programado venir aquí. Cada cien lunas, toda nuestra familia se reúne. Y dio la casualidad que ese día es hoy." Respondió Applejack, mostrándole a Dusk una de las cartas que Derpy le había entregado el día anterior. "Normalmente nunca vienen todos, pero las cartas de ayer eran las confirmaciones de todos. Por eso tenía que avisarle rápido a la abuela. Y por eso ahora quería pedir tu ayuda."

"¿Mi ayuda? ¿Para qué?" Preguntó Dusk.

Entonces Applejack llevó a Dusk hasta un lado del granero, en donde había un viejo baúl. Lo abrió, y sacó un enorme álbum fotográfico, para mostrarle a Dusk las fotos de las antiguas reuniones familiares que había tenido su numerosa familia.

"Nuestra familia ha organizado estas reuniones desde que se fundó Sweet Apple Acres. La abuela siempre las organizaba, pero este año, me dejó encargada a mí para que yo la organizara. ¡Y por eso quiero que sea la mejor reunión familiar de la historia!" Dijo Applejack emocionada, mientras le mostraba a Dusk fotos de sus tíos y abuelos, jugando a las carreras de patas atadas, cocinando buñuelos de manzana, cosiendo una enorme colcha, y posando todos juntos frente al granero. "Quiero que este año mi hermanita y sus primos tengan la mejor y más grande carrera de obstáculos de sus vidas. Quiero que por primera vez los buñuelos alcancen para todos, sin que algún goloso como Big Mac se los coma a escondidas. ¡Y quiero que la abuela y mis tías puedan por fin terminar esa enorme colcha familiar!"

"¿No será algo apresurado? Es decir, si es que quieres hacer todo eso en un solo día." Dijo Dusk con cara pensativa. "Necesitarás de muchos materiales, y-"

"Ayer en la tarde conseguí la mayoría de los materiales con las chicas." Interrumpió Applejack muy animada. "Lo único que falta es saber cómo organizar todo, y por eso-" En ese instante Applejack abrió grande sus ojos y desvió la mirada con pena. "Lo siento… Seguramente tú querías hacer algo más divertido hoy, en vez de estar organizando actividades para-"

"¿Estás bromeando?" Dijo Dusk, interrumpiendo esta vez él a Applejack. "¿Quieres que pase todo el día planificando actividades? ¿Haciendo un itinerario y organizando a todo el mundo…? ¡Es la mejor cita posible!" Agregó Dusk emocionado, con brillo en sus ojos. Sacando a relucir su lado maniático del orden, tan característico de él.

Ante la respuesta de Dusk, Applejack se sorprendió y luego se sonrojó, sonriendo tiernamente. Entonces Applejack comenzó a contarle a Dusk los planes que tenía para ese día, en donde Dusk vio que ella ya casi tenía todo planeado, solo necesitaba un poco de orden y hacer una lista, que gustosamente hizo Dusk, para ordenar todo correctamente. Mientras planeaban las distintas actividades y dónde las harían, ambos reían de las posibilidades que tenían ante ellos, esperando que todos disfrutaran de sus juegos, sin darse cuenta que los que más se divertían en ese preciso momento, eran ellos mismos, tan solo por estar en la compañía del otro.

"Lo de correr en parejas está bien, ¿Pero no crees que es un poco exagerado hacerlos correr hasta la colina y volver?" Preguntó Dusk cuando estaban terminando de planear la carrera de los potrillos.

"Es para que tengan más tiempo para compartir. Mira." Dijo Applejack, haciendo que Dusk lo acompañara.

Ambos fueron hasta la ventana del granero y miraron hacia la enorme mesa que la abuela había instalado afuera, en donde todos seguían comiendo el desayuno. Entonces Applejack apuntó a un extremo de la mesa, en donde estaban sentados los potrillos de la familia. Allí estaba Apple Bloom, quien parecía estar un poco incómoda, desviando la mirada. Y a su lado sentada, había una potrilla de su misma edad, de pelaje ocre y melena roja, quien se veía igual de incómoda que Apple Bloom.

"Allí está Apple Bloom junto a nuestra prima Babs Seeds." Dijo Applejack. "Ambas tienen la misma edad, ambas aún no obtienen su cutie mark y ambas son familia. Tienen mucho en común, pero por alguna razón parece que están muy nerviosas para hablar una con la otra."

"Qué extraño. ¿Por qué simplemente no hablan cosas como lo que les gusta y lo que no? No creo que sea tan difícil hacer un amigo." Dijo Dusk confundido. Entonces recordó que hasta hace un año, para él era tanto o más difícil que para esas potrancas hablar con alguien y hacer un nuevo amigo. Así que Dusk no pudo evitar sonrojarse un poco ante lo hipócrita que había sonado. Sin embargo, al instante, miró a su lado y vio a Applejack, y recordó que gracias a yeguas como ella, eso ya no era un problema.

"Por eso debemos hacer una larga carrera para que puedan confiar más la una con la otra." Dijo Applejack, dejando de ver por la ventana. "Ayúdame a llevar los materiales afuera. Debemos tener todo listo antes que terminen de comer."

Siguiendo la orden de Applejack, Dusk levitó seis grandes calderos y algunas mesas con su magia, y junto a Applejack, fueron a instalar la primera de las actividades: 'La cocina de buñuelos'. Rápidamente Dusk instaló los calderos mientras Applejack ponía los ingredientes en las distintas mesas.

"Parece que necesitan ayuda." Dijo repentinamente Braeburn, llegando junto a Little Strongheart hasta donde estaban Dusk y Applejack. Ambos llegaron cargando un montón de leña, que adivinaron, sería necesario para prender los calderos.

Agradeciendo la ayuda de su primo, Applejack y los demás rápidamente ordenaron todo ese sector, y al lado empezaron a instalar los implementos para la segunda actividad: 'Coser la colcha familiar'.

"¿¡Trajiste máquinas de coser!?" Preguntó Braeburn sorprendido,y un poco confundido al ver que su prima había traído varias de esas máquinas.

"Sí, la abuela y las tías siempre cosen solo con sus pezuñas. Pero con estas máquinas no se cansarán y por fin podrán terminar su colcha." Dijo Applejack sonriendo, pese a que su primo se vio bastante inseguro de si eso en efecto sería una buena idea.

Mientras seguían ordenando e instalando los distintos elementos que necesitarían, Dusk Shine y compañía conversaron alegremente sobre muchas cosas que les habían sucedido. Braeburn y Little Strongheart se asombraron al escuchar todo lo que Dusk y Applejack habían vivido recientemente con Discord y con los gemelos Flim y Flam. Por su parte, Dusk también se asombró al saber lo mucho que había cambiado la relación entre Appleloosa y la tribu de búfalos, y cómo parecía que Braeburn y Little Strongheart eran más que amigos, pese a que ninguno de los dos lo admitía.

"Así que… ¿Ustedes son solo amigos?" Preguntó Dusk con una pequeña risita.

"¡Ja! Quien sería amigo de un pony tan ególatra como él." Dijo Little Strongheart apuntando molesta a Braeburn. Sonrojada ante la pregunta de Dusk.

"¿Lo ves? Para todos es obvio que estás loca por mí." Dijo Braeburn sonriendo burlonamente. "Yo, por otra parte, jamás me involucraría con alguien tan mandona como tú."

Al ver que Breaburn y Little Strongheart volvían a discutir, tanto Applejack como Dusk no pudieron evitar reírse, divertidos con esa relación amor-odio que había entre esos dos. Y mientras ellos dos reían, Braeburn y Little Strongheart se miraron y pusieron astutas miradas, ambos pensando que era momento de actuar y hacer lo que realmente habían querido hacer desde que habían llegado a Dusk y Applejack.

Mientras seguían ordenando, sutilmente Braeburn empujaba de vez en cuando a Dusk, fingiendo no darse cuenta, para que él se acercara más a Applejack. Por su parte, Little Strongheart también hacia lo mismo con Applejack, fingiendo distraerse, para llevar a Applejack más cerca de Dusk.

"Es obvio que estos dos se gustan. ¡Ya no soporto verlos actuar tan tímidos!" Pensaron Braeburn y Little Strongheart. Quienes por primera vez en el día, habían estado de acuerdo en algo. Ambos querían ayudar a Dusk y Applejack a que fueran más cercanos.

Por su parte, cada vez que Dusk chocaba con Applejack o se encontraba de frente inesperadamente con ella, no podía evitar querer acercarse más a ella, después de todo, era su novia. Pero cada vez que Dusk dejaba de pensar en Applejack como su amiga, y comenzaba a pensar en ella como su novia, algo pasaba en su cabeza que hacía que se quedara en blanco y se pusiera excesivamente nervioso. Así, cada vez que Dusk sentía que quería tocar a Applejack o decirle que se veía linda, de su boca solo salían balbuceos y se ponía rojo de vergüenza.

"En serio que es un desastre…" Pensó Braeburn, sintiendo vergüenza ajena por Dusk al verlo así.

En ese momento, finalmente el resto de la familia de Applejack llegó allí para comenzar con su día de actividades. Entonces Applejack les explicó a sus tíos y primos cómo funcionarían ese año las actividades. Las cocineras tendrían un cronómetro, para que no hubiera tiempo libre entre hacer un buñuelo y otro, y que así la cantidad de buñuelos finalmente alcanzase para todos. Por su parte, las abuelas coserían con máquina de coser, para finalmente poder terminar aquella vieja y enorme colcha.

Ante las instrucciones de Applejack, todos en su familia se vieron algo inseguros, pero Applejack les pidió que confiaran en ella. Y antes que alguno pudiera decir algo más, Applejack, Dusk, Braeburn y Little Strongheart se llevaron a los potrillos, para comenzar con la carrera de obstáculos.

Una vez todos llevaron a los potrillos a las afueras del campo, Applejack se paró frente a ellos para darles las instrucciones de la nueva y mejorada carrera de obstáculos.

"¡Muy bien! ¡Estas son las instrucciones! Primero…" Dijo Applejack llena de emoción, explicando uno por uno todos los obstáculos que tendrían en su carrera. Una larga carrera de más de dos kilómetros, en donde ella y los demás habían puesto una innumerable serie de obstáculos, desde saltar vallas, hasta hacer girar platos con palillos. "… Y finalmente, el primero que llegue a la línea de meta diciendo 'Pepe poni pica papas con un pico' ¡Ganará la competencia! ¿Alguna duda?" Preguntó Applejack, luego de terminar de dar las instrucciones.

"Hmm… Hermana, ¿No crees que es un poco-?" Dijo Apple Bloom tímidamente.

"¡No hay tiempo para dudas! En sus marcas, listas, ¡Fuera!" Gritó Applejack emocionada, sin escuchar a su hermanita.

Entonces todos los potrillos comenzaron a correr, y a Apple Bloom no le quedó más remedio que correr también, al igual que su prima, quien seguía viéndose incómoda rodeada por tantos ponies.

"No crees que Apple Bloom y su prima aún se veían algo… ¿Tensas?" Dijo Dusk, mirando a lo lejos que la pequeña prima de Applejack había empezado a correr al lado de Apple Bloom, pero poco a poco se iba alejando de ella.

"Hmm… Quizás tengas razón. Debería ir a supervisar que todo vaya bien." Dijo Applejack pensativamente.

En ese instante Braeburn volvió a mirar seriamente a Little Strongheart, y esta entendió inmediatamente lo que planeaba.

"Yo iré contigo Applejack. Dejemos aquí a los chicos para que vigilen la meta." Dijo Little Strongheart, corriendo junto a Applejack para alcanzar a los potrillos.

"En serio amigo, nunca había visto a alguien tan malo para coquetear." Dijo Braeburn una vez estuvo a solas con Dusk.

"Lo sé… soy un asco." Dijo Dusk, bajando su cabeza avergonzado. "Yo puedo hablar sin problemas con Applejack, después de todo, hemos sido amigos por mucho tiempo. Pero ahora que somos novios y se supone que debemos actuar como tal… Cada vez que pienso en que ella es mi novia, me pongo nervioso. Yo… no sé cómo acercarme a ella."

"Hmm… Creo que tu problema es que pones a las yeguas en un pedestal." Dijo Braeburn con una mirada pensativa.

"¿Eh? ¿A qué te refieres?" Preguntó Dusk, sin entender.

"¡Ey, Braeburn!" Gritó repentinamente una voz. Entonces tanto Braeburn como Dusk miraron hacia atrás y vieron que quien había gritado y se acercaba hasta allí, era Big Mac. Quien por su parte, al ver que su primo estaba junto a Dusk Shine, por alguna razón puso una mirada molesta.

"¿Qué pasa primo?" Preguntó Braeburn.

"Estaba buscando a Applejack. Creo… que hay algo que debería ver." Dijo Big Mac, con una mirada preocupada.

Al no estar Applejack, Braeburn y Dusk Shine decidieron acompañar a Big Mac para ver qué era lo que quería mostrarles. Entonces los tres potros llegaron hasta donde estaban las actividades de cocina y costura, y rápidamente Dusk entendió por qué Big Mac los había llamado… ¡Todo era un desastre!

Las tías y primos de Applejack estaban como locos en la estación de cocina. Con los temporizadores que había puesto Applejack, sus tías apenas terminaban un buñuelo y debían empezar inmediatamente a hacer otro, dándoles apenas tiempo para respirar. Mientras que todos los demás miembros de su familia veían hambrientos los buñuelos, pues habían prometido no comer hasta que todos estuvieran terminados. Así fue como el hambre hizo que todos comenzaran a ponerse de mal humor.

Algo similar ocurría en la estación de costura con la abuela Smith y sus primas. Al usar las máquinas de coser, todas habían avanzado bastante en la colcha. Sin embargo, todas se gritaban sin poder escucharse una a la otra, todo por culpa del ruido que hacían las máquinas de coser, que impedía que las ancianas yeguas pudieran escuchar otra cosa o pudieran conversar entre ellas.

"¡Oigan! ¿Por qué no se quedaron en la línea de meta?" Preguntó repentinamente Little Strongheart, acercándose hasta donde estaban Dusk y los demás. Seguida desde atrás por Applejack, que por alguna razón, venía cabizbaja.

"Applejack, ¿Sucedió algo?" Preguntó Dusk, preocupado.

"Está algo triste porque escuchó que a los potrillos no les gustó la carrera que organizó." Respondió Little Strongheart un poco apenada. "Cuando llegamos a supervisar la carrera, alcanzamos a escuchar que Apple Bloom y su prima charlaban y decían que era una carrera demasiado larga y que Applejack se había vuelto loca."

"Bueno, eso no es lo único que no está funcionando." Dijo Braeburn, rascándose la cabeza.

Al escuchar las palabras de su primo, Applejack levantó la vista y vio lo que sucedía con el resto de su familia. Así, pudo ver rápidamente cómo nada de lo que había planeado estaba resultando. De hecho, todo era un completo desastre.

"Esto… Esto no era lo que yo quería." Dijo Applejack, con una mirada triste, sintiéndose un completo fracaso. Volviendo a bajar su cabeza y cubriendo su rostro con su casco.

En ese instante Braeburn golpeó el costado de Dusk y le señaló con la mirada a Applejack. Entonces, Dusk rápidamente entendió que ahora, incluso aunque Applejack estuviera rodeada por su familia, ahora ella era su novia, y era su deber apoyarla en todo momento.

"Tranquila, aún queda toda la tarde. Podemos sacar esto adelante." Dijo Dusk, tocando afectuosamente el costado de Applejack. "Quizás nuestro error fue enfocarnos mucho en las competencias, y no en que compartieran. Debemos buscar alguna actividad en que todos puedan compartir juntos, sin presiones."

Al escuchar las palabras de Dusk, Applejack lo miró y puso una mirada más seria.

"No quiero que Dusk me vea triste. Él sabe lo fuerte que soy, ¡Le demostraré que puedo sacar esto adelante." Pensó Applejack, alejando su tristeza y llenándose de determinación.

"¡Espera! ¡Ya sé qué podemos hacer!" Dijo Applejack, levantando su cabeza de emoción. "Reúnan a todos aquí. Yo volveré enseguida." Agregó, corriendo hacia el granero.

Tal como se los pidiera Applejack, Dusk y los demás reunieron al resto de la familia Apple y esperaron a que Applejack volviera. Entonces la yegua naranja finalmente volvió, trayendo consigo una gran carreta, en donde le pidió a dos de sus primos más fornidos que pudieran jalar de ella.

"Para nuestra siguiente actividad, ¡Tendremos un lindo y relajante paseo por los campos de Sweet Apple Acres!" Gritó Applejack emocionada. Por su parte, al escuchar la palabra 'relajado', el resto de la familia Apple suspiró aliviada, pensando que por fin descansarían de las exigentes labores que Applejack había planeado previamente.

Los primeros en subir a la carreta fueron los miembros más ancianos de la familia junto a los más jóvenes, incluyendo a la abuela Smith y a Apple Bloom. Y para sorpresa de Dusk, Applejack le pidió que también subiera, ya que tenía una sorpresa especial para él.

Finalmente Applejack les indicó el recorrido a los dos primos que jalaban de la carreta, y esta comenzó su tranquilo recorrido.

"Así que… ¿Qué tan mal está resultando tu primer día de novio con Applejack?" Preguntó la abuela Smith, sonriéndole a Dusk mientras iban en la carreta.

"¿¡Qué!? ¿C-Cómo sabe que está yendo mal?" Preguntó Dusk sorprendido y nervioso.

"Solo adiviné, jejeje…" Se rio la abuela Smith. "Te pareces mucho a mi hijo. Cuando empezó a salir con Buttercup, lo mantuvo en secreto por mucho tiempo, pero para mí era obvio que estaba enamorado de una yegua, por lo nervioso que estaba."

"¿Buttercup? ¿Así se llamaba la madre de Applejack?" Pensó Dusk en ese momento, intentando recordar algo que no lograba alcanzar, como si antes hubiera escuchado otro nombre.

"Lo mismo pasó con el abuelo de Applejack." Continuó hablando la abuela. "Mi pobre marido se moría de nervios en nuestra primera cita, jeje."

"Sí, lo mismo ocurrió con el pobre Jonagold." Dijo una tía de Applejack, la también anciana Apple Rose. "A veces los potros se olvidan que las yeguas son solo eso: yeguas."

Con esas palabras, Dusk puso una mirada confundida, recordando que Braeburn también le había dicho algo similar.

"No lo entiendo, ¿Qué es lo que tratan de decir? ¿Que no debo ser caballeroso o algo así?" Pensó Dusk, aún sin entender a lo que se refería la familia de Applejack.

"¿Hm? Qué extraño… ¿Por qué nos dirigimos al huerto Oeste?" Dijo repentinamente la abuela Smith al notar dónde se dirigía la carreta. "No hemos cuidado de esos campos desde que todos los árboles se llenaron de..." En ese instante la abuela Smith apretó su boca para callarse, esperando con todas sus fuerzas que a su nieta no se le hubiera ocurrido la alocada idea que estaba pensando en ese momento.

Lamentablemente para la abuela Smith, Applejack estaba pensando precisamente en aquello. Ella se había adelantado a correr hacia el huerto Oeste, y justo cuando la carreta pasaba por allí, ella pateó fuerte uno de los manzanos que allí había.

Al instante, todas las copas de los árboles cercanos se agitaron, y un centenar de coloridos murciélagos de la fruta salieron volando de allí y cubrieron el cielo.

"¡Perfecto! Esta sí que será una gran postal para el álbum de fotos." Dijo Applejack emocionada, poniendo en posición la cámara fotográfica que había traído consigo, lista para fotografiar cuando el arcoíris de murciélagos pasara justo por las cabezas de los pasajeros de la carreta.

Al escuchar el ruido de los murciélago y ver a esos pequeños animales volando sobre sus cabezas, todos los pasajeros de la carreta se asustaron un poco. Pero al ver los bellos colores de los murciélagos, llenando el cielo de un peculiar, movedizo y atractivo arcoíris, todos quedaron maravillados ante tal espectáculo. O al menos así fue, hasta que los murciélagos olieron las manzanas que la tía abuela de Applejack llevaba en su sombrero.

En ese instante, todos los hambrientos murciélagos se lanzaron instintivamente contra la carreta, intentando comer de esas deliciosas manzanas, luego de haber sido despertados tan repentinamente. Entonces, lo que había comenzado como un lindo y relajante paseo en carreta, se convirtió en un cuento de terror. Con cientos de murciélagos cayendo en picada contra los pasajeros, mientras las tías, abuela y primas de Applejack, intentaban alejarlos, aterradas de los pequeños murciélagos, al igual que Dusk, que no sabía si al usar su magia dañaría a esos pequeños murciélagos o no, algo que Fluttershy jamás le perdonaría.

Tanto fue el alboroto, que los potros que jalaban de la carreta también se desesperaron, y en su pánico, soltaron el arnés con el que jalaban la carreta. Entonces la carreta comenzó a ir velozmente colina abajo sin control.

"¡Todos los ponies! ¡Salten!" Gritó Apple Bloom desesperada, viendo que la carreta saltaba sin control, yendo directo a estrellarse contra la casa y el granero.

Sin esperar ni un segundo, todos hicieron lo que les pidió Apple Bloom, con excepción de Dusk y las ancianas de la familia. Sabiendo que los viejos huesos de las abuelas no soportarían un salto y caída a esa velocidad, Dusk las esperó y usó su magia para teletransportarse en vez de saltar, y así aparecer suavemente sobre el suelo, junto a las yeguas veteranas.

"¿Están todas bien?" Preguntó Dusk, verificando que la abuela y sus primas estuvieran bien.

¡CRASH! Dusk se sobresaltó al escuchar el fuerte ruido de la carreta estrellándose. Entonces Dusk se volteó y vio con horror que la carreta había chocado contra el granero, y lo había destruido por completo.

Lentamente todos los ponies de la familia Apple se fueron acercando hasta el destruido granero, todos con cara de espanto al ver cómo una de las construcciones más antiguas de Ponyville, el pilar de su familia y punto de encuentro de tantas reuniones, había sido completamente destruido. Y una de las primeras en llegar, fue justamente Applejack, la causante de todo ese desastre.

"No…" Murmuró Applejack completamente aterrada, casi sin palabras. Entonces, toda la fortaleza que había tenido hasta ese momento, se desmoronó en tan solo un instante, y comenzó a llorar amargamente. Ella no solo había destruido el granero de su familia, que era tan importante para todos, sino que también había hecho la peor reunión familiar de la historia. Todo su esfuerzo, en vez de mejorar algo, solo hizo que todos pasaran uno de los peores días de sus vidas. Y eso la llenó de dolor.

Mientras Applejack lloraba, Braeburn había llegado junto a Dusk, y al igual que había hecho previamente, se dispuso a golpear a Dusk para indicarle que era su turno de actuar. Sin embargo, aquello no fue necesario, ya que antes que Braeburn lo hiciera, Dusk ya se estaba moviendo para consolar a su amiga, compañera y novia.

Al acercarse a Applejack, esta vez Dusk no dijo nada, simplemente se paró frente a ella y la tocó gentilmente. En ese instante Applejack levantó la vista con ojos llorosos y vio a Dusk. Ahora ella se odiaba aún más al ver que su querido Dusk la veía llorando, débil y frustrada, pero aquello ya no le importaba, lo único que necesitaba en ese momento era consuelo. Entonces ella abrazó a Dusk, y lloró sobre su pecho, aún con más ganas.

"Lo arruiné todo… Yo… Yo solo quería que todos disfrutaran de este día…" Lloró Applejack amargamente mientras Dusk la abrazaba.

Al ver a Applejack llorando con tanto dolor, Dusk no pudo evitar compartir ese dolor. Él había sido testigo de todo el esfuerzo y entusiasmo que Applejack había puesto durante todo el día para que su familia disfrutara, y todo ese esfuerzo se había ido a la basura.

"Tranquila, todo estará bien." Dijo Dusk, acariciando la cabeza de Applejack. "Quizás las cosas no resultaron como queríamos, pero al menos nosotros pudimos pasar un agradable día junto. Las cosas tampoco salieron como yo esperaba este día, pero los momentos que compartimos juntos, planeando y armando todo esto, sí que fueron divertidos."

En ese momento Applejack comenzó a recordar esa mañana. En efecto, era obvio que las cosas entre ella y Dusk no habían sucedido como ninguno de los dos esperaba. Dusk había estado muy nervioso durante todo el día, al igual que ella. Sin embargo, tal como dijera Dusk, los momentos en que ellos planeaban las cosas, sí que fueron divertidos, incluso aunque ellos mismos no hubieran participado de esas actividades.

"No había que forzarlo… No importaba la actividad, lo único que hacía falta… era compartir juntos." Susurró Applejack, abriendo grande sus ojos ante una idea que se le había ocurrido.

Applejack secó sus lágrimas y miró a Dusk con una sonrisa llena de confianza. Al ver esa sonrisa, Dusk también sonrió, viendo que su querida Applejack había recuperado su espíritu.

"Escúchenme familia, yo… lamento mucho no haberme dado cuenta antes. Lo importante de estas reuniones no son las actividades, sino compartir y generar buenos recuerdos." Dijo Applejack, mirando a toda su familia. "Si me lo permiten, quisiera proponerles una última actividad. Les prometo que no los decepcionaré."

Ante las palabras de Applejack, muchos de sus primos la miraron con recelo, dado que ya estaban hartos de las actividades de Applejack. Sin embargo, todos eran familia, y todos merecían una segunda oportunidad. Por dicha razón, todo estaba en una balanza equilibrada, y ninguno de los familiares de Applejack quiso inmediatamente aceptar o negar lo que les decía Applejack.

"Yo confío en ella." Dijo Dusk sonriendo, siendo el primero en pararse al lado de Applejack, inclinando finalmente la balanza a favor de su novia. Quien por su parte, no pudo evitar sonreír y sonrojarse al ver que Dusk siempre estaría de su lado apoyándola.

"Yo también." Dijo la abuela Smith, caminando hacia Applejack.

Luego Braeburn, Little Strongheart, Apple Bloom, Big Mac, uno por uno todos aceptaron la palabra de Applejack, y finalmente, toda la familia unida, decidió confiar una vez más en Applejack.

"¡Aún falta nuestra tradicional foto en el granero!" Gritó Applejack emocionada. Entonces ella corrió hacia unos de sus primos, que siempre cargaban sus violines y guitarras con ellos. "¡Pero para eso necesitamos un granero! ¡Yee-haw!" Gritó Applejack, haciendo que sus primos comenzaran a tocar una alegre tonada campirana.

Tras eso, Applejack comenzó a llevar el ritmo mientras cantaba una canción del corazón, cantando '¡El granero a levantar!' causando que todos comenzaran a bailar con la alegre melodía. Entonces todos entendieron lo que Applejack quería hacer: un trabajo duro y agotador, pero algo que podían lograr si estaban todos unidos como familia, como la gran y única familia Apple que eran.

Mientras la mitad de los ponies trabajaban, la otra mitad se divertía bailando, y rápidamente iban cambiando turnos, todos felices de finalmente compartir todos juntos, todos divirtiéndose mientras trabajaban para una misma meta. De gran ayuda fueron los cientos de buñuelos de manzana que ya habían preparado las tías de Applejack. En donde todos finalmente pudieron disfrutar de esos deliciosos dulces. Sumado a eso, finalmente apareció el jefe Thunderhooves, quien, junto al tío abuelo Apple Strudel, habían estado bebiendo durante toda la mañana; ambos trayendo los barriles de sidra que quedaban, animando aún más el ambiente.

Aprovechando que su familia finalmente reía y se divertía, Applejack se apresuró a salir del baile y comenzó a fotografiar a todos. Finalmente logrando sacar buenas fotografías para el álbum familiar, pero principalmente, finalmente logrando que todos pudieran hacer bellos nuevos recuerdos.

"¡Hey, Dusk! Te dejo a esta pequeña revoltosa un segundo." Dijo repentinamente Braeburn, llegando junto a Dusk. Cargando consigo a Little Strongheart, quien parecía a punto de caer desmayada. "Le dije que no podría ganar un concurso de beber sidra contra mí. ¡Ella nunca había tomado sidra antes!" Agregó Braeburn, dejando afirmada a la pequeña búfalo sobre el costado de Dusk. "Debo volver al trabajo, ¡Te la encargo!" Dijo Braeburn antes de irse. No sin antes mover un mechón de pelo de la cara de Little Strongheart, mirándola y sonrojándose un poco.

Sin que Dusk alcanzara a decir nada, finalmente fue obligado a quedarse allí de pie, sosteniendo a la joven búfalo mientras el resto de la familia Apple bailaba y trabajaba.

"¡Hic! Jeje… ¿No es lindo…? ¡Hic!" Murmuró Little Strongheart despertando levemente, mirando hacia Braeburn.

Al escuchar eso, Dusk no dijo nada, simplemente sonrió, pensando que fue necesario que Little Strongheart se emborrachara para que finalmente pudiera dejar de discutir con Braeburn y aceptara lo que sentía.

"A veces los ponies son tan complicados de entender… ¡Hic! ¡Pero definitivamente hacen buenas fiestas!" Continuó hablando Little Strongheart borracha, hablando consigo misma, como si ni siquiera se hubiera percatado que Dusk estaba sosteniéndola. "Es como esas dos potrancas… Estaban tan temerosas de acercarse la una a la otra, y ahora las dos parecen mejores amigas… ¡Hic!" Murmuró Little Strongheart, totalmente borracha.

Mirando hacia donde veía Little Strongheart, Dusk se dio cuenta que a quién había estado viendo había sido a Apple Bloom y su prima, Babs Seed. Ambas potrancas estaban conversando alegremente entre ellas mientras ayudaban a sus primos y tíos. Al parecer, toda esa incomodidad que habían sentido, se había esfumado cuando tuvieron algo en común de lo que quejarse, y ese algo, curiosamente, había sido la misma Applejack. Ella había hecho lo posible por hacer que esas dos potrancas compartieran entre sí, pero finalmente, al obligarlas a correr esa absurda carrera de obstáculos, hizo que ambas se quejaran de lo ridícula que estaba siendo Applejack. Aquello hizo que finalmente ambas potrancas pudieran conversar sobre algo en común, y finalmente expresar sus verdaderos sentimientos, pues ambas en el fondo habían querido acercarse la una a la otra durante todo el día, pero su timidez y nerviosismo se los había impedido.

"Es… Es lo mismo que con Applejack y Dusk… Es tan obvio que esos dos se quieren acercar más el uno al otro… ¡Hic!" Agregó Little Strongheart, cabeceando nuevamente, casi volviendo a caer dormida.

"¿Eh? ¿A qué te refieres?" Preguntó Dusk confundido.

"Cuando fuimos a revisar la carrera de obstáculos, Applejack me contó lo tonta que se sentía por no saber cómo acercarse a Dusk." Respondió Little Strongheart, sin siquiera darse cuenta que era con Dusk Shine con quién estaba hablando. "'¿Qué tal si no le gusta que me acerque?' '¿Qué tal si le pido un beso y me rechaza…?' ¡Hic! Tantas preguntas sin sentido… Cuando es obvio que a Dusk… también le gusta ella… zzzzz…" Murmuró Little Strongheart, antes de caer finalmente dormida por la borrachera.

En ese instante, fue como si un rayo lo golpeara, y Dusk entendió por qué Little Strongheart los había comparado a él y a Applejack con Apple Bloom y Babs Seed. Tal y como había pasado con las potrancas, Dusk también había actuado todo nervioso con Applejack, cuando pensaba que ella era su novia. Él había intentado acercarse a ella como novio, pero sus intentos habían fallado solo por sus nervios. Pero, ¿Por qué estaba tan nervioso? Por la misma razón que las potrancas habían estado nerviosas entre sí: Por no saber qué era lo que pensaba el otro. Ese era el problema de acercarse a alguien con quien se quiere entablar una relación, el pensar: ¿Acaso no le gustará que me acerque? ¿Me rechazará? ¿Se sentirá incómodo?

Para Dusk, habían sido evidentes sus propios nervios e inseguridades, pero solo ahora se daba cuenta que Applejack debía de sentir las mismas inseguridades. Y en ese instante, lo que le había dicho Braeburn sobre poner a las yeguas en un pedestal, y lo que dijo la tía abuela de Applejack sobre que los potros se olvidaban que las yeguas son eran yeguas, finalmente fue entendido por Dusk. Todo ese día, Dusk había pensado en Applejack como un ser muy distinto a él, pero ella era un pony tal como él, ni más ni menos, con los mismos sentimientos e inseguridades. Incluso, podía ser que Applejack sintiera aún más dudas que él, ya que a diferencia de él, ella se había atrevido a declarar primero sus sentimientos.

"Soy yo quien debe dar el siguiente paso." Pensó Dusk, con una mirada determinada. "Ya aprendí sobre la amistad, pero ahora, debo llevarlo más allá. Ahora debo aprender, sobre lo que es… el verdadero amor."

Con ese último pensamiento, Dusk volvió a levantar la vista y vio a su novia, quien ahora tenía una radiante sonrisa mientras fotografiaba a toda su familia, feliz de verlos a todos felices. Y tal como Dusk sintió el dolor de Applejack cuando esta lloró, verla así de feliz lo llenó de una enorme y nueva dicha, pues ella era su novia, y nada lo podía hacer más feliz que verla a ella feliz.


Finalmente llegó el atardecer, y con la ayuda de todos, la familia Apple logró terminar el nuevo granero.

Al ver el resultado, todos sonrieron al ver el fruto de su esfuerzo. Un enorme y hermoso granero, construido mucho más firme que el antiguo, y con mucho más amor, dado que toda la familia de una nueva generación había ayudado a construirlo. Luego todos se tomaron la tradicional foto frente al granero, y aunque Dusk dudó, toda la familia le pidió que estuviera en la foto, en un lugar de honor en el centro, junto a Applejack, como agradecimiento por salvar a la abuela y las tías del accidente en carreta.

Tras comer los últimos buñuelos de manzana, y compartir las últimas anécdotas, finalmente llegó la hora del adiós, y uno por uno los tíos y primos de Applejack comenzaron a subir a sus carretas para volver a sus hogares. Entre esas despedidas, hubo una con especial cariño a Braeburn y Little Strongheart, quien ya se encontraba un poco mejor de su borrachera, gracias al remedio casero contra la resaca de la familia Apple.

"Juro que nunca más tomaré sidra…" Dijo Little Strongheart, tomándose su cabeza.

"Eso pasa cuando las chicas toman sidra como los chicos." Dijo Braeburn, burlándose

"Sí claro. Es como tú cuando probaste la pipa de la paz e intentaste besar a un cactus." Dijo Little Strongheart, mirando molesta a Braeburn.

Entonces ambos comenzaron a discutir como siempre lo hacían. Sin embargo ni Dusk ni Applejack les dijeron nada, ya que sabían que en el fondo, era su forma de ser, y ambos se querían mucho mutuamente.

"Cuida a mi prima." Dijo Braeburn mientras se despedía de Dusk.

En ese instante Dusk miró a Applejack y volvió a mirar a Braeburn con una astuta sonrisa.

"Tu prima no necesita que la cuiden. Pero cuando lo necesite, yo siempre estaré allí." Dijo Dusk sonriendo con confianza. Con esa respuesta, Braeburn sonrió y finalmente se fue junto al resto de su familia e invitados de vuelta a Appleloosa.

"Aún quedan algunas primas tuyas por aquí." Dijo Dusk a Applejack, una vez terminaron de despedirse de Braeburn y miró hacia la casa familiar, en donde la pequeña Babs Seed y algunas primas de Applejack seguían dentro de la casa.

"Sí, algunos se quedarán por algunos días más." Respondió Applejack sonriendo. Entonces ella desvió la mirada y miró a Dusk de reojo, sonrojada. "Así que… ¿Le dijiste a Braeburn que siempre estarás allí cuando lo necesite?" Preguntó Applejack fingiendo desinterés.

"Así es. Siempre estaré allí para mis amigas." Dijo Dusk sonriendo. Entonces Applejack bajó sus orejas con una mirada de desilusión. "…Y en especial, estaré siempre allí, para mi novia." Agregó Dusk sonriendo amorosamente, tocando suavemente el rostro de Applejack y finalmente haciendo lo que había querido hacer durante todo el día: Besarla.

Ante el sorpresivo beso, Applejack abrió grande los ojos y se sonrojó profundamente. Entonces ella cerró lentamente los ojos y se dejó llevar por ese cálido sentimiento.

Luego de terminar el beso, Dusk miró a Applejack y sonrió tímidamente, mientras sus mejillas seguían rojas de vergüenza por finalmente haberse atrevido a acercarse más a Applejack como novio.

"Y… ¿Y eso por qué fue?" Preguntó Applejack, también sonrojada. Haciendo el esfuerzo por mantener una mirada seria.

"Bueno, lo he estado pensado y… eres mi novia. Y… es algo que tenemos que hacer más… seguido." Dijo Dusk muy nervioso, determinado a que debía dar el siguiente paso en su aprendizaje del amor. "Ya no quiero pensar tanto las cosas… Creo que me dejaré llevar más por mis sentimientos, ahora que soy tu novio."

"Hmm… Así que, ¿Me estás diciendo que me besarás cada vez que te venga en gana?" Preguntó Applejack, poniendo una falsa mirada enojada.

"Eh… Yo… Bueno…" Dijo Dusk, rojo de la vergüenza. Pensando por un segundo, que quizás había cometido un error.

"Pfft… Tranquilo, me gusta que sea así." Dijo Applejack riéndose, haciendo que Dusk se diera cuenta que había sido solo una pequeña broma de su tierna novia. Entonces Applejack tomó de la cabeza a Dusk e hizo que su cabeza bajara a su altura, quedando cara con cara. "Pero ni se te ocurra que solo tú tomarás la iniciativa." Agregó Applejack, siendo esta vez ella la que besó dulcemente a Dusk, sorprendiendo al potro.

Tras terminar de besarse, ambos se miraron y sonrieron tiernamente. Entonces ambos comenzaron su camino de vuelta a la casa familiar, caminando muy juntos uno al lado del otro. Esta vez ya no había incomodidad alguna entre ellos. Ambos habían finalmente roto el hielo y descubierto que ambos habían querido acercarse más al otro durante todo el día. Ahora ambos sabían que el otro jamás les rechazaría un abrazo, o se sentiría incómodo si lo besaban por sorpresa. Ambos sabían que sus sentimientos eran iguales y recíprocos, y que ambos estaban profundamente enamorados el uno del otro.

Con los últimos rayos de luz del atardecer, Dusk Shine y Applejack siguieron caminando lentamente por el campo, con tanta dicha en sus corazones, que apenas sí podían aguantarse el reír. Con sus colas enganchadas la una a la otra mientras caminaban, queriendo que ese momento se congelara en el tiempo, queriendo siempre estar el uno al lado del otro.


Lejos de Ponyville, mientras Dusk Shine aprendía por su cuenta su primera lección sobre el amor, en la ciudad de Canterlot, otra yegua tenía sus propios problemas para aprender sobre aquel complicado sentimiento.

La princesa Cadance se encontraba cenando junto a Sunset Shimmer en medio del salón comedor del enorme castillo real. Las sirvientas de la cocina acababan de servirles su platos, todos finamente decorados, dignos de la cocina real del castillo.

"¡Muchas gracias Vanilla Treat! ¡Todo se ve delicioso!" Dijo Cadance, sonriéndole dulcemente a la yegua que había servido los platos.

"Muchas gracias, princesa." Respondió la yegua, feliz al ser halagada por la princesa.

Entonces Cadance se quedó mirando a Sunset y abrió grande sus ojos, como si esperara que ella hiciera algo. Por su parte, Sunset Shimmer ya había alzado su tenedor con su magia, lista para comenzar a comer su cena. Sin embargo, al ver que Cadance la veía, ella tornó sus ojos y bajó su tenedor de mala gana.

"Muchas… gracias…" Dijo Sunset de mal humor, desviando su mirada. Como si le costara mucho decir aquellas palabras. "Muchas gracias por hacer bien lo que haces todos los días." Agregó Sunset Shimmer, murmurando.

Al escuchar las palabras de Sunset, Vanilla Treat alzó su nariz indignada y se retiró, de vuelta a la cocina.

"¿De verdad era necesario ese último comentario?" Dijo Cadance, reprendiendo con la mirada a Sunset.

"Pues es la verdad, no lo puedo evitar." Respondió Sunset Shimmer, suspirando molesta. "¿Acaso quieres que mienta?"

"No digo que mientas. Solo digo que debes empezar a comprender un poco más los sentimientos de los demás, tener más empatía." Dijo Cadance, también suspirando cansada, ya que se daba cuenta de lo difícil que era enseñar empatía a una yegua tan orgullosa como Sunset.

"Lo sé… Lo sé…" Dijo Sunset, frustrada. Moviendo su plato de comida y dejando caer pesadamente su cabeza contra la mesa.

"Tranquila, no es tu culpa." Dijo Cadance un poco incómoda, intentando animar a su nueva estudiante.

Para Cadance había sido difícil dejar el resentimiento que por años había sentido hacia Sunset. Pero finalmente había entendido que no fue culpa de Sunset que ella actuara así, sino de su antiguo maestro, quien por años le inculcó que el amor, la amistad y la confianza eran solo basura.

"Por favor, no lo digas… No digas que es culpa del Archimago." Dijo Sunset, levantando lentamente su cabeza. "No puedo seguir culpando a otros por mi pasado. Yo pude haber rechazado todas las enseñanzas del Archimago, pero… en el fondo, yo también quería creer lo que él me enseñaba." Agregó Sunset con una triste mirada.

En ese instante Sunset recordó todo el mal que había hecho a tantos ponies mientras había sido alumna del Archimago. Ella había disfrutado humillando a otros ponies, creyéndose superior a ellos. Así había sido por años, hasta un nefasto día, en que el Archimago llevó las cosas demasiado lejos, y Sunset finalmente tuvo que huir de él.

"La mirada aterrada de esa yegua… jamás podré sacármela de la cabeza…" Pensó Sunset, cerrando con dolor sus ojos.

Aquella mirada de Sunset no pasó desapercibida para Cadance, quien se sorprendió al ver y sentir con su magia innata, que efectivamente Sunset estaba sintiendo empatía en ese segundo, sintiendo algún dolor del pasado que seguramente había provocado en alguien.

Tras eso, Sunset volvió a levantar la vista, y Cadance vio que la mirada de Sunset se había vuelto más cálida, como si finalmente una capa de hielo en su mirada hubiera desaparecido, al menos por un instante.

"Yo… quiero cambiar. Quiero ser una pony en quien ÉL pueda confiar." Dijo Sunset, logrando abrir su corazón.

Por su parte, Cadance sonrió al sentir que no había pizca de falsedad en las palabras de Sunset. Su nueva estudiante tenía una poderosa motivación para realmente querer cambiar, y a Cadance no le hizo falta preguntar, pues bien sabía perfectamente a quién se refería Sunset con 'ÉL'.

Justo en ese instante, al fondo del salón, Cadance vio la puerta abrirse. Entonces se asomó por la puerta la princesa de la noche, quien al ver que Cadance estaba junto a Sunset, abrió con sorpresa sus ojos, luego los cerró con tristeza, y cerró la puerta, sin llegar a entrar al salón.

Cadance había conversado pocas veces con su nueva tía Luna. A diferencia de la mayor de las hermanas alicornio, Luna era más reservada. De hecho, la mayoría de las charlas que habían tenido, había sido en la última semana, luego que Cadance descubriera en la Gran Gala del Galope, que su tía Luna también parecía albergar sentimientos hacia Dusk. Aquello había tomado completamente por sorpresa a la alicornio rosa. Sin embargo, lo que más llamó la atención a Cadance, fue el hecho de sentir día tras día que el amor que Luna sentía hacia Dusk, se volvía más doloroso. Cadance podía sentir como le dolía el corazón a Luna cada vez que ella se enfocaba en sus sentimientos.

Luego de mucha insistencia, finalmente Cadance había logrado que Luna le contara qué la traía tan acongojada, y por qué solía evitar a Sunset, ahora que ella visitaba a menudo el castillo. Así fue como Cadance descubrió que Luna se culpaba por lo sucedido con Discord y su maldición en la memoria de Dusk. La princesa de la noche no podía perdonarse haber aceptado ayudar a Dusk y ponerlo en tan gran peligro de alterar sus recuerdos a la fuerza. Si no hubiera sido por Sunset, quien encontró una manera de salvar a Dusk y los recuerdos de sus amigas, sin que ninguno de ellos saliera lastimado, quizás Dusk hubiera recibido un daño irreparable en su mente. Aquello carcomía a Luna desde dentro, y la hacía odiarse a sí misma, más de lo que ya lo hacía normalmente por todo su pasado.

"Tía Luna… Debes dejar atrás esa culpa, si no la oscuridad engullirá tu corazón…" Pensó Cadance con tristeza, luego de ver a Luna cerrar la puerta. "Tú también debes aprender sobre el amor, pero la primera lección no te la puedo enseñar… Para lograr amar a alguien, primero debes amarte y perdonarte a ti misma…"

Luego de pensar los grandes desafíos que tenía por delante, Cadance alzó la vista y miró hacia el techo, suspirando, perdida en sus pensamientos.

"La amistad ya salvó este reino una vez… Quizás el amor sea la clave para salvarlo en el futuro…" Pensó Cadance, sin darse cuenta que aquello sería un enorme presagio de lo que vendría.

# Fin del capítulo 10


**Nota del autor**

Como verán, esta vez hice solo un panel de dibujo. Esto para agilizar más la publicación, ya que últimamente estoy muy corto de tiempo ^^; De igual forma, ¡Espero les guste! :D