Capítulo 13: Bakugo
No podía ser cierto lo que le doctor le estaba diciendo, era algo surrealista para ella, no podía ser que estaba embarazada y de gemelos. Pero a la vez tenía sentido de cierto modo, si hubo varias noches que lo hizo sin protección, pero según ella...las pastillas le funcionaban.
Después de aquel primer susto comenzó a tomar un método hormonal, para prevenir eso.
—Las pastillas pueden funcionar si no tomas varias—Menciono el doctor cuando le menciono eso.
Pero no lo recordaba, en ese momento no recordaba nada sobre su método hormonal. No recordaba si había usado condón, no recordaba si había usado las pastillas, no recordaba nada.
—Su novio se pondrá muy feliz—Menciono el doctor nuevamente.
—Por favor...no les comente nada, a Katsuki y a Eijiro...yo...yo quiero darles la noticia —Dijo Uraraka algo preocupada.
—Está bien, pero tendremos que empezar con el control prenatal a la brevedad, debido a que sufriste una operación—El doctor le mostraba un folleto que en letras rosas y azul pastel decía "Mi bebe y yo"
Era una guía detallada de que pasos tenía que seguir para agenda sus citas y tener un carnet de maternidad. Además de que al ejercer la profesión de héroe tendría que pedir su baja por maternidad desde ese instante ya que no podía arriesgar su salud en un combate.
Después de eso, el doctor permitió pasar a Bakugo y a Kirishima, pensando que simplemente uno de los dos seria su novio y el otro su compañero de trabajo. Ambos estaban muy asustados y abrazaron a Uraraka en frente del doctor, ambos se turnaron para darle un beso en los labios, y ahí comprendió el doctor que había una posibilidad de que cada bebé tuviese su propio padre.
Pero simplemente no comento nada y se retiró de ahí, dejando a los tres chicos solos para que conversaran.
—Nos asustaste mucho, fresita—Dijo Kirishima tomándola de la mano.
—No fue mi intención—Uraraka menciono con la mirada baja.
—¿Qué demonios paso? Como es que te viste involucrada en esa pelea—Bakugo pregunto.
—Olvidé recoger un pastel que había pedido para celebrar nuestro aniversario, y fui jalada al callejón, no conocía a esos tipos, y comenzaron a atacarme—Uraraka dijo preocupada.
—Esos tipos son parte de la organización que desmantelaste hace tiempo. Una pequeña célula rebelde—Bakugo menciono molesto—Best Jeanist lo dijo hace poco.
—Entonces me estuvieron cazando—Uraraka menciono preocupada llevando instintivamente sus manos a su vientre.
—Best Jeanist dijo que nos mudaremos, nos pondrán en un edificio de seguridad. Por si hay más involucrados—Kirishima dijo, para después abrazarla.
—Iremos al departamento lo más pronto posible para guardar las cosas, los de la mudanza llegaran mañana temprano.
—Te dejaremos un tiempo sola, pero vendremos por ti—Kirishima dijo con voz dulce.
—Estaremos aquí toda tu recuperación—Bakugo dijo para después revolverle los cabellos.
—¿Cuánto tiempo estaré aquí?
—Al menos cuatro semanas—Kirishima dijo un poco preocupado.
—Tres meses—Susurro la castaña aun tocando su vientre. Ambos chicos se le quedaron viendo.
—No tontita, un mes—Kirishima dijo dándole un beso en la mejilla.
—Si...digo...tres meses...podre estar en incapacidad—Dijo nerviosa Uraraka.
Los chicos estuvieron ahí con ella un tiempo, hasta que decidieron irse para empacar las cosas de su departamento. Al llegar a casa, se dieron cuenta de que la policía aún seguía en la escena del crimen, y querían hacerles preguntas sobre Uraraka y su relación con esa banda de traficantes. Investigaron el departamento, pero no había nada fuera de lo usual.
—¿Cuánto tiempo crees que nos estuvieron vigilando? —Pregunto Kirishima mientas guardaba en cajas la ropa de Uraraka.
—Tal vez meses, si no como sabían que ese día ella estaba sola—Bakugo menciono también guardando cosas en cajas.
Kirishima estaba preocupado por Uraraka y por cómo habían sucedido las cosas. Bakugo pensaba de la misma manera, tenían que ser más precavidos ahora.
La mudanza comenzó temprano, no tenían muchas cosas realmente, solo pocos muebles que habían comprado y muchas cosas personales que esas las llevaron en maletas. Un auto de la agencia fue por ellos para llevarlos a su nuevo departamento, desde que habían salido de la academia se habían mudado ahí, y ahora se les hacía muy extraño mudarse.
Al llegar se dieron cuenta de que era un condominio un poco más modesto de lo que estaban acostumbrados, pero el interior era muy similar a su departamento. Se dieron cuenta de que había otros héroes de otras agencias, llegando a ser con ellos tres 10 héroes en el edificio y por lo tanto estaba más resguardado que el otro edificio.
Se dieron cuenta de que uno de los héroes que vivía en ese edificio era Tsuyu, la mejor amiga de Uraraka, quien compartía departamento junto con Hagakure la chica invisible. Kirishima se alegró por ellas, y se alegró de que Uraraka estuviese con sus amigas un poco más cerca. A Bakugo no le gustaba eso ya que sentía que esas dos iban a estar metidas en su departamento todo el tiempo, como lo hacían cuando estaban en la escuela.
—No te preocupes Bakugo-Kun nos robaremos mejor a Ochako-chan kero—Tsuyu menciono en el lobby del edificio.
—Y a todo esto ¿Dónde está? —Hagakure menciono dudosa.
Kirishima les conto lo que había pasado la noche anterior preocupando mucho a las dos chicas.
—Cuando vuelva a casa en nuestros días libres la cuidaremos—Dijo la chica invisible.
—¿De verdad? —Pregunto Kirishima entusiasmado—Escuchaste eso Katsuki, no tendremos que preocuparnos si la mochi de fresa está sola o si se tomó las medicinas.
—Eso incumple lo que acabas de decir, dijiste que no estarías metida en mi departamento día y noche—Bakugo dijo con una mirada retadora a Tsuyu.
—Solo será cuando ustedes no estén, kero.
—Katsuki no seas así, ellas nos quieren ayudar.
—Más les vale—Bakugo menciono algo molesto.
Lo que había aprendido en ese año era de que Tsuyu, Midoriya e Iida, aceptaban demasiado bien esa relación, y que no se interpondrían para nada, salvo algunas ocasiones donde iban a comer o a cenar con la castaña, pero fuera de eso ellos no hacían comentarios al respecto a su relación.
Cuando se enteraron los demás de la clase A, no todos compartían su felicidad, pero la toleraban, Ojiro y Hagakure eran parte de esos, que no estaban de acuerdo en las relaciones poliamorosas, pero si Ochako y ellos eran felices, no tendrían que tener problemas. La única que se interponía, aun después de un año era Mina, quien ahora no le dirigía la palabra en absoluto a la castaña. Incluso supo por la misma Uraraka que sus demás amigas intentaron hacer una intervención por las dos, pero la chica de cabellos rosados no accedió para nada, teniendo una "discusión" en la mesa del restaurante.
Su vida había cambiado, realmente, pero se sentía bien con ese estilo de vida, y si llegase a terminar estarían contentos porque esa era una experiencia maravillosa.
Uraraka llego al departamento nuevo varios días después, en el hospital, aunque le hubiesen dicho que cuatro semanas vieron que su evolución era muy favorable dejaron que fuera a casa a las dos semanas.
—Se ve algo diferente—Menciono Uraraka solo al entrar.
—Tenemos solo dos habitaciones ahora, y la cocina es un poco más chica—Menciono Eijiro.
—Para que quieres tres habitaciones si dormimos los tres juntos. De hecho, se me hace una pérdida de espacio esa segunda habitación.
—¿Y dónde pondría mi equipo de entrenamiento con una sola habitación? —Kirishima pregunto.
—En la sala o en el balcón—Menciono Bakugo algo molesto por el equipo de entrenamiento.
—Se me hace más acogedora—Dijo Uraraka con una sonrisa.
Bakugo tuvo un ligero sonrojo al escuchar eso de la castaña.
—Te tenemos una sorpresa—Kirishima dijo muy contento—Como no pudimos celebrar nuestro aniversario, decidimos recrear la comida que tu hiciste esa noche y celebrar hoy.
Los tres entraron al comedor, era un poco más chico, solo para cuatro personas, y la mesa estaba con los mismos platillos recreados por Kirishima y Bakugo. La castaña se sorprendió demasiado, ya había olvidado por completo su aniversario. Su mente estaba en otra cosa, pero se le hacía demasiado bonito que se esforzaran tanto.
—También te trajimos un regalo—Bakugo menciono.
—No...no pudimos dártelo ese día, pero ahora si—Kirishima mintió, después de que se mudaron, y cuando no estaban en servicio o cuidando a Uraraka en el hospital se dedicaron a buscar el regalo.
Los tres se sentaron en la mesa y Kirishima comenzó a servirle, mientras Bakugo le entregaba una cajita algo grande de joyería y al abrirla se dio cuenta de que era una bonita cadena de oro con tres piedras, una roja, una rosa y una naranja.
—Somos nosotros tres—Kirishima dijo contento, dejando un plato delante de ella.
—Es bellísima-Uraraka estaba maravillada con aquel bonito obsequio.
Kirishima dejo de servir comida y tomo aquel collar, se lo coloco delicadamente, para después darle un beso en la mejilla a la castaña.
—Te prometo, que siempre te cuidare—Le susurró al oído.
—Jamás te volveremos a dejar sola—Bakugo tomo su mano y la beso.
Uraraka se sentía más que feliz, se sentía completa y se sentía bien, se sentía segura de decirles lo que estaba pasando, de la llegada de sus nuevos bebés. Pero no podía arruinar la celebración con eso así que decidió esperar otro momento.
Esas semanas Uraraka se quedó en casa hasta sanar por completo, y como sus amigas prometieron de vez en cuando la iban a cuidar y a visitar. Los síntomas del embarazo no fueron tan evidentes como ella lo esperaba, no tuvo nauseas, pero si mucho sueño y pocos antojos.
Uraraka no encontraba el momento de decirles lo que pasaba. Pero una tarde todo cambio.
Bakugo no llego a dormir esa noche, y ambos se preocuparon un poco por lo que estaba pasando.
—Debió tener una misión—Decía Kirishima para calmar a Uraraka en sus brazos.
Ambos ya estaban en la cama, solamente esperando a su querido Katsuki.
—Siempre avisa cuando no va a venir—Uraraka mencionaba algo preocupada.
—Sí, pero tal vez se complicó la misión—Kirishima decía abrazando a la castaña.
—¿Y si está herido? ¿O si le pasó lo mismo que a mí?
—Descuida, si pasa eso nos avisaran, tenemos que esperar—Pero Kirishima presentía algo raro, Bakugo no era así siempre avisaba.
La mañana llego y no había rastros de Bakugo, Uraraka realmente estaba impacientándose, cuando comenzó a llamarle por teléfono y el no respondía.
—Algo malo paso—Dijo desesperada mientras Kirishima hacia el almuerzo.
—Tranquila fresita, termino esto y voy a la agencia a averiguar que ocurre—Kirishima le planto un beso en los labios para que se tranquilizara.
Pero él estaba igual de nervioso que ella.
Al terminar de comer, la puerta se abrió, los dos voltearon a ver y era Bakugo, Uraraka se levantó a toda prisa para recibirlo, pero él la alejo.
—¿Qué pasa? —Dijo un poco preocupada, pero él no la veía.
Tan solo Bakugo entro a su habitación y busco su maleta.
—¿Te vas nuevamente? —Pregunto inocentemente Uraraka.
—¡Cállate! —Grito Bakugo, haciendo que Kirishima se levantara y fuese al cuarto con ellos.
—¿Qué te pasa Katsuki? No tienes por qué gritarle a Ochako.
—Tú también cállate—Volvió a gritar Bakugo.
—¿Ocurrió algo? ¿Tuviste una mala noche en el trabajo?
Bakugo no respondía nada, tan solo guardaba sus cosas, pero de repente se dieron cuenta de que vaciaba sus cajones, toda su ropa, todos sus zapatos, sus colonias, todo.
—¿Qué haces? —Kirishima pregunto
—Ya no quiero esta porquería de relación—Dijo más para sí mismo que para los demás, sin siquiera verlos.
—Bakugo si tienes algo que decirnos dilo de frente—Kirishima reto a Bakugo.
—¡Que ya no quiero esta maldita relación! —Bakugo los vio con ojos cristalinos, no podía mantenerles la mirada.
—¿De qué hablas? ¿Hicimos algo? —Uraraka estaba preocupada por la reacción que tenía el rubio
—Desde que tu llegaste mi vida se ha vuelto un infierno, ya no quiero nada—Volvió a gritar el rubio empujándolos para salir lo más pronto posible de ahí.
—Bakugo espera—Uraraka salió de detrás de él. Bakugo estaba en la puerta poniéndose los zapatos, mientras los otros dos lo seguían.
—No me busquen...
—¡Estoy embarazada! —Grito Uraraka, haciendo voltear al rubio, y sorprendiendo demasiado al pelirrojo.
Pero eso no impidió que Bakugo agachara la vista y saliera de la casa, dejando a los amores de su vida, llorando tras la puerta.
Mis estrellitas, a partir de ahora sentiran un amor/odio hacia Bakugo, espero no se enojen pero la trama me llevo a esto. Los estaré leyendo
