Era el ocaso en el enorme y espeso ecosistema conocido como el reino del bosque, dentro de las profundidades se escuchaban ruidos salvajes, ruidos de pokémon. De repente de las sombras montones de pokémon provenientes de un lado y de otro colisionaron y comenzaron a atacarse de manera inmisericorde, había toda clase de criaturas, de todos los tipos, tamaños y especies. Los más pequeños o ajenos a la pelea buscaban apartarse del campo de batalla huyendo despavoridos.
Desde un peñasco no muy lejos una Gardevoir miraba de manera analítica la batalla cuando siente algo y usa teletransportación evitando una hoja mágica, para volver a aparecer en otra parte del peñasco y ver a su atacante, una Florina adulta que caía del cielo, con cabello y vestido largo. Ambas criaturas se miraron con desdén y prosiguieron a atacarse con bola sombra y energibola chocando ambas en una explosión…
Capítulo 37: la guerra del reino del bosque
Una aeronave de considerable tamaño sobrevolaba los alrededores de un inmenso bosque, dentro del lujoso avión Ash, Serena y Pikachu observaban desde la ventana cachete con cachete impresionados de la vasta inmensidad del área verde, Honey por su parte revisaba su inventario y equipo, si bien estaba algo nerviosa por las historias del reino del bosque su lado intelectual saltaba de alegría por toda la información pokémon que podría recopilar en la expedición, sobre todo al conocer al pokémon legendario.
Jake: ¿nerviosa?
Honey: la verdad, un poco… pero también estoy emocionada. Esta es una oportunidad única y si realmente quiero ser una científica pokémon debo aprovecharla.
Jake: eres una chica muy fuerte, linda
Honey: gracias, Jake –sonrió ruborizada-
Robert: estamos a punto de aterrizar, caballeros. Señoritas
Jake: gracias Robert
La pareja confirmo esto al ver que se acercaban al campamento designado a la incursión de Queengela el cual había mucho movimiento mas no por la investigación. En dicha área muchos estaban empacando sus cosas y otros simplemente ya se iban, ahí se encontraba nada más y nada menos que la guardiana de Cd. Flumendale, Felicia White… y se veía nerviosa y preocupada.
Felicia: ¡por favor, no pueden hacer esto!
Random 1: ¡lo siento, pero ya no puedo arriesgar a mi personal!
Random 2: ¡llevamos meses y no hemos avanzado nada!
Random 1: ¡y 4 investigadores desaparecieron en la última expedición!
Dama Random: ¡si los rumores son ciertos, esa guerra pokémon dificulta más el proyecto!
Felicia: pero… ¿y mi nieto?
Random 2: no quiero sonar egoísta, pero también tengo familia
Dama Random: y yo una pequeña de 7 años. Ya perdió a su padre, no puedo darme el lujo de que me pierda a mi también… lo siento
Random 1: lo lamento, Sra… suerte
Y así sin más, la dejaron a su suerte. Por más que quisiera ellos también tenían razón, eran gente con familia y no podía pedirles sacrificar eso por su causa sobre todo con la desaparición de esos 4 exploradores, claro que eso no la exentaba de sentirse mal. Entonces vio como la nave de la fundación Phoenix se acercaba, un leve rayo de esperanza por lo que corrió hacia su zona de aterrizaje. La nave descendía de manera vertical y aterrizo suavemente por completo, Felicia por fin llego a recibir a los recién llegados y el primero en salir fue el asistente de la familia, Robert.
Felicia: por favor, dime que traes buenas noticias
Robert: no sé si sean noticias más bien pero traigo a alguien que puede encontrar a Queengela
Felicia: ¿en serio?
Jake: Sra. White, mucho gusto.
Felicia: ¿tú eres…?
Jake: Jake Wheeler a sus órdenes
Felicia: ¿el hijo de George y Bella?... por favor, dime que traes información clave
Jake: mejor aún. Sé cómo y dónde encontrarlo
La sola frase dejo impactada a la guardia creando una mezcla de esperanza y escepticismo dentro de ella. Adentrándose en el campamento el grupo pudo ver como muchos empacaban y otros simplemente ya se iban así como así.
Jake: ¿paso algo malo con la expedición?
Felicia: podríamos decir que si
Respondió en un tono deprimente que daba mal rollo, finalmente llegaron a la tienda principal el cual había una mesa llena de documentos, pizarras con información y fotos mal tomadas, gráficos y demás. Además de que había una guardabosques, una dama azabache que a pesar de tener al menos 40 años tenía un cuerpo atlético tirando a fortachona.
Felicia: chicos, ella es Irma. La guardabosques de esta zona
Ash: soy Ash. Y este mi compañero Pikachu
Serena: mi nombre es Serena, mucho gusto
Honey: soy Honey: gusto en conocerla
Jake: soy Jake. Un placer
Irma: mucho gusto, bienvenidos al reino del bosque
Jake: y bien. Que tenemos
Felicia: nada, tristemente nada. No hemos podido avanzar es estos últimos días
Ash: ¿paso algo malo?
Felicia: malo es quedarse corto. Si bien sabíamos que los pokémon en el reino del bosque eran muy reacios con los humanos, al menos de alguna forma nos las ingeniábamos para avanzar más.
Irma: pero ahora corre el rumor que dentro del bosque se está llevando a cabo una especie de guerra Pokémon
Ash: ¿guerra pokémon?
Honey: ¿eso es posible?
Serena: esto parece como aquella ocasión en el pantano de Goodra, ¿recuerdas Ash?
Ash: sí. Tienes razón
Honey: increíble
Jake: pero porque hay una guerra ¿hay algún humano involucrado?
Irma: no sabemos, pero testigos dicen haber visto como dos grupos de Pokémon se atacaban entre sí de manera feroz. Aun peor, 4 de nuestros exploradores desaparecieron en un fuego cruzado
Serena: Santo cielo
Felicia: lo cierto es que la gente ha desistido, por eso se están yendo. Trate de convencerlos para que no se fueran, incluso aumente la recompensa pero… -soportaba las ganas de llorar-
Jake: no se preocupe. Traeré a Queengela y a los exploradores –dijo posando la mano en su hombro-
Felicia: ¿seguro? –Pregunto un poco escéptica-
Jake: no pierda la esperanza… tres días. Solo necesito tres días para hacerlo –exclamo serio pero seguro-
Felicia: ¿solo tres días?
Honey: Jake, ¿estás seguro?
Jake: totalmente. Me juego la vida en esto… literal.
Todos estaban sorprendidos ante la declaración de éxito del joven, y más al ver que su rostro denotaba seriedad pero a la vez confianza, como si el supiese algo que los demás no (y así era)… -"entonces… que Arceus te guarde. Esperare tu llamada"- exclamo la guardiana para estrechar su mano a lo que Jake asintió. Paso un rato y Jake junto al asistente de la familia daba los últimos preparativos antes de meterse al espeso bosque.
Robert: tiene todo, joven Jake
Jake: equipo, suministros, kit de primeros auxilio, mis pokémon, la Lopunnita y…
Jake saco la Masterball encogida pero la puso a tamaño normal y la miro detenidamente, al parecer tenía dudas sobre esto. Tras mirarla por un breve tiempo se aplicó y la guardo, no había tiempo de dudar, era hora de actuar.
no habia mucha zona donde pasara la luz del dia
Jake: Tengo todo, solo me falta…
Robert: aquí tiene, el localizador –dijo entregándole un pequeño aparato-
Jake: cuando encuentre a Queengela activare el localizador para que sepas dónde buscarme
Robert: también puedo activarlo a distancia… por si acaso
Jake: no te preocupes, no será necesario… te veré en tres días
Robert: suerte, joven Jake
Con todo listo se acercó a la orilla del bosque y se tomó un tiempecito para estar prepararse mentalmente. Detrás de él Ash y compañía se le acercan para acompañarlo, también estaban dispuestos a ir, como los buenos amigos que son.
Jake: bueno… última oportunidad, banda… ¿están seguros de esto? –Honey le da un amistoso golpe en el brazo- auch. Vienes golpeándome desde que salimos de casa. ¿Cuánto más lo vas a hacer?
Honey: las veces que sean necesario hasta que entiendas que no vamos a dejarte solo –lo golpea otra vez- tonto
Ash: tiene razón –también lo golpea-
Jake: ¡ahh, oye!
Serena: cierto –también lo golpea
Jake: ¡Auch! ¡Serena! –Pikachu también lo golpea- ¡ah! ¡Pikachu! ¿Tu también?
Entonces entre todos le comienzan a dar leves golpecitos que a pesar de todo si dolían un poco causando las risas de todos, incluso del golpeado alivianando la situación, una vez ya calmadas las cosas…
Jake: gracias, chicos
Ash: estaremos bien si nos mantenemos juntos
Serena: tendremos éxito, no nos rindamos ahora
Honey: estoy lista
Jake: muy bien… en marcha
Ya era pasada la una de la tarde y nuestros héroes ya habían recorrido un buen tramo, el bosque era profundo, los arboles eran gigantescos y no había mucha zona donde pasara la luz del día. Jake era quien guiaba con Tablet en mano, ese era su mapa.
Honey: cómo vamos, Jake
Jake: vamos bien… es por aquí
Serena: vaya, no era broma cuando dijeron que este bosque era inmenso
Ash: me recuerda al bosque verde allá en casa… aunque creo que aquí es mucho más grande
Honey: en verdad es un gran ecosistema. Un lugar ideal para pokémon salvajes
Ash: hablando de ellos, no hemos visto ninguno aun
Serena: ¿estarán ocultos?
Honey: posiblemente. Tal vez los rumores de esa guerra sean ciertas
Ash: porque creen que hubiera una guerra
Serena: cuestión territorial, quizás
Honey: tiene sentido… por cierto, Jake. ¿Seguro que 3 días será suficiente?
Jake: ten fe, mi bella… ten fe.
Sin embargo la respuesta no solo fue insatisfactoria para la aspirante a científica, sino que generaba ciertas dudas. Lo presentía en su ser, sentía que el muchacho les estaba ocultado algo… otra vez.
El sol no tardaba en ocultarse y la expedición no podía seguir por los peligros de la oscuridad por lo que decidieron acampar, con las tiendas levantadas y la cena siendo preparada Jake hacia cálculos sobre lo que habían recorrido.
Jake: bueno, según mis cálculos hemos recorrido una cuarta parte del camino
Serena: ¿solo una cuarta parte?
Jake: bueno. Considerando que salimos al medio día, no está mal
Honey: no me siento muy animada
Ash: no te preocupes, ya verás que tendremos éxito
Serena: hay que ser optimistas. Recuerda que lo hacemos por una buena causa
Honey: sí, creo que tienen razón
Tiempo después ya degustaban su cena, lo que ellos no sabían es que eran observados por un trio de aves regionales, siendo un Taillow, un Starly y un Fletchling. Tras vigilar un rato se fueron volando, mas al parecer fueron sentidos por Birdhoe. Ash le pregunto si pasaba algo más el ave no sabía si realmente había pasado algo o no. Tras una deliciosa cena…
Ash: ahh. Delicioso, como siempre
Serena: *risitas* siempre tan gourmet ¿no, Ash?
Ash: he he he… creo que después de esto caeré rendido
Honey: hablando de eso. ¿Creen que sea seguro?
Jake: haremos guardia. Yo hare la primera ronda y Ash la segunda
Los demás no estaban tan seguros de dejarlo por su cuenta pero al final accedieron y se dispusieron a ir a dormir mientras el explorador seguía "analítico" con su Tablet, aunque antes de entrar Honey le dio una última mirada de preocupación.
Ya había pasado un buen tiempo e increíblemente Jake seguía vigilante como si nada… o al menos eso parecía. Sus pensamientos dadas sus experiencias recientes le carcomían el cerebro. Más algo lo saco de su trance, era Honey quien había salido de su tienda (nunca lo mencione pero su pijama asemejaba la de Clemont pero en blanco y sin gorrito)
Jake: ¿problemas para dormir?
Honey: no. Solo desperté por un vaso de agua… ¿estás bien?
Jake: descuida, aun aguanto
Honey: no… me refería a eso –se sentó a su lado-
Jake: *suspiro* no fue muy agradable ¿cierto?... verme de esa manera
Honey: ese cazador tenía razón, había algo que te hacia ser tan agresivo con aquellos que maltratan a los pokémon. Pero… nunca pensé que pensaras en traspasar esa línea
Jake: la verdad yo… yo tampoco. No busco justificarme pero… ver a todos esos pokémon ser sacados gravemente heridos… verlos tan vulnerados… solo sé que cuando vi a ese viejo, quería golpearlo… no. Creo que "golpearlo" es quedarse corto… y luego ver como poco a poco la luz de una de esas criaturas se va apagando, hasta que… -se detuvo-
Honey: realmente no puedo saber a ciencia cierta cómo debiste sentirte, Jake. Y a riesgo de ser discrepada, debo decirte que eso no va a arreglar nada… eso no la va a traer de vuelta
Jake: …lo se… -respondió cabizbajo-
El silencio se apodero del lugar, parecía que no había más que decir. La joven simplemente recostó su cabeza en el hombro de su amigo y le hizo compañía frente al fuego en lo que duraría su guardia.
Con los primeros rayos del sol encima el equipo continuo con su exploración, la determinación de Jake lo mantenía totalmente despierto a pesar de haber dormido tarde, en contraposición con Ash quien aún mostraba cansancio por haber hecho guardia por lo que Serena le había preparado un café para remediarlo pero parecía que no estaba funcionando, Honey era un intermedio entre ambos chicos.
Jake: vamos bien, equipo. Si seguimos a este ritmo puede que lleguemos a nuestra meta un día antes de lo planeado –dijo con optimismo-
Ash: *yawn* eso suena genial –exclamo aun adormilado-
Sin embargo fueron emboscados con varios ataques random que detuvieron su paso, se vieron rodeados de muchos pokémon de todo tipo, incluyendo las 3 aves regionales antes mencionadas.
Honey: ¡estamos rodeados!
Serena: ¡porque nos atacan!
Jake: creo que la fama de ser agresivos con los humanos es cierta
Honey: ¿y qué hacemos?
Ash: creo que no hay opción. Debemos pelear
Jake: traten de no lastimarlos. Recuerden que solo pelean por defender su hogar
Buscando reducir el daño todos los pokémon del grupo fueron llamados. Un Luxio ataco usando carga salvaje más fue detenido y superado por el ataque rápido de Pikachu. Birdhoe estaba lidiando con sus contrapartes regionales esquivando una embestida de Taillow, un picotazo de Fletchling y supera un aletazo de Starly con ala de acero mandándolo al suelo.
Un Houndurr, un Heatmor y un Pignite atacan con lanzallamas pero son detenidos por las mismas de Braixen y Honoby, Pancham aprovecha y los derrota con roca afilada. Un Aipom y un Chimpimp intentan golpear a Sylveon con megagolpe y cola de hierro más son mandados a volar por viento de hada.
Un Vigoroth aparece corriendo alocadamente para atacarlos más es detenido por el psíquico de Psyfrog y mientras levitaba en el aire es rematado por el ataque centrado de Lopunny en toda la cara.
Un par de Skorupy tratan de rematar a Hileaf y Florita pero estos saltan usando látigo cepa y los bombardea con bala semilla y hojas navaja haciéndoles bajar la guardia para luego ser golpeados por Purrgeist cuyo cuerpo se convirtió en garra de sombras.
A pesar de tener ventaja numérica palidecían ante la diferencia de poder y experiencia de la expedición, más los locatarios se reusaban a rendirse. Por desgracia otro grupo de pokémon volvió a caerles a palos incluso al primer grupo, un Swampert que cayo haciendo terratemblor causando daño, un Scizor ataca con doble rayo, el primer grupo contraataca lo que obligo a nuestros héroes a separarse para no quedar en el fuego cruzado, Ash con Serena y explorador y erudita por su cuenta.
Para mala suerte del Jake este era seguido por unos cuantos del segundo grupo a lo que no tuvo más remedio que defenderse usando fuerza bruta. Ash y Serena lograron apartarse lo suficiente para ocultarse.
Honey se había alejado lo suficiente y junto a Hileaf recuperaban aire de forma graciosa (abriendo la boca de más y todo eso), cuando por fin se recuperó se dio cuenta de que se habían separado de los demás y graciosamente comenzó a mirar por todos lados.
Honey: ¿eh? ¡No, no, no, no, no! ¡Ash!... ¡Serena!... ¡Jake!... ¿Dónde están? –casi quería llorar-
Entonces escucho unos ruidos extraños por lo que escondió detrás de una roca, poniéndose aún más nerviosa al ver que se trataban de un grupo de Beedrill. Con todas sus fuerzas busco controlar sus nervios esperando a que se alejaran, cuando finalmente los perdió de vista se sintió aliviada. Pero no se dio cuenta de que otro de ellos, uno que se había quedado atras apareció de repente por lo que quedaron cara a cara (literalmente) por unos segundos.
Tras asustarse mutuamente Honey junto a su plantita corren despavoridos siendo perseguidos por el bicho quien abrió fuego con misil aguja el cual fue contrarrestado por la bala semilla de Hileaf, la abeja dispara un hiperrayo haciéndolos caer y en el proceso tirando algunas cosas de la bolsa de Honey. Recuperándose del golpe vieron horrorizados como la abeja se les acercaba por lo que en un acto de valor Hileaf intentaba golpearlo con látigo cepa a su vez que Honey arrojaba rocas de manera desesperada (y graciosa) mientras repetía que se alejara. A la criatura le dificultaba esquivar todo eso hasta que en una de esas es golpeado por el látigo, a su vez Honey tomo una de las pokebolas del suelo y la arrojo dándole en la cabeza y por ende atrapándola, Honey habría poco a poco los ojos por lo asustada que estaba hasta que se dio cuenta lo que había pasado.
Honey: O.O lo… ¿atrape?
Tras una breve pausa se escuchó un gran grito en todo el bosque asustando a las aves. En otra parte Ash y Serena tomaban aire estando a salvo, sus pokémon apenas mostraban haber sufridos daños así que estaban bien.
Ash: ¿están bien todos? –pregunto sin darse cuenta de los demás
Serena: yo estoy bien… ¿y Honey? ¿Y Jake?
Ash: ¿no están? ¡Honey! ¡Jake!
Serena: ¡¿Dónde están?!
Por otro lado unos pokémon random huían, habían sido repelidos por Jake y sus muchachos más no tardaron mucho en darse cuenta de que se habían separado lo cual lo frustro y asusto por lo que se puso a buscar.
De vuelta con Honey ella caminaba algo nerviosa con la pokebola que contenía su "nueva captura" en ambas manos, no podía creer que haya atrapado a otro pokémon, y peor aún a la criatura que le da tanto miedo.
Honey: mmm, que voy a hacer… no es precisamente mi pokémon favorito… podría liberarlo, supongo. Pero…
Sin darse cuenta habían llegado a la orilla de una colina, mas fue el ruido de los pokémon que la saco de su trance. En el pequeño campo abierto vio como dos grupos de pokémon se enfrentaban en una encarnizada batalla y ninguno de los dos bandos cedía a pesar de las evidentes heridas y muestras de cansancio que mostraban. Lejos de espantarse, Honey estaba impactada por la crudeza de la batalla, no podía creer que los pokémon pudieran tener ese comportamiento tan parecido a los humanos.
Para fortuna; por así decirlo, dicha batalla había terminado y ambos bandos abandonaron el lugar. Desgraciadamente habían varios pokémon heridos que no tenían la fuerza suficiente para irse, aun peor habían sido dejados a su suerte.
La humanidad de Honey no pudo evitar buscar atender a todas las criaturas y se puso manos a la obra, los pokémon a pesar de ver una humana ni siquiera mostraron interés debido al cansancio y al dolor por lo que no opusieron resistencia en lo que eran atendidos.
Lo que Honey no se dio cuenta es que no muy lejos de ahí estaba siendo observada por la Gardevoir del principio junto con un Machamp y un Krokorok. Vio detenidamente como la aspirante a científica atendía a los pokémon y estos con suficientes fuerzas restauradas lograban irse por su cuenta, no muchos agradecían pero el ver que podían andar era más que gratificante para la fémina.
Mientras atendía a los últimos el pokémon psíquico/hada hizo acto de presencia junto con sus dos guardaespaldas, Honey estaba de rodillas mirando con nervio (mas no miedo) al pokémon quien a su vez miraba a la humana con autoridad. De vuelta con la pareja ellos seguían buscando a sus amigos junto con sus criaturas, a su vez el explorador hacia lo mismo y afortunadamente lograron encontrarse.
Jake: ¡chicos! ¿Están bien?
Ash: sí. Estamos bien
Serena: ¿has visto a Honey?
Jake: ¿no está con ustedes?
Serena: ¿Qué hacemos ahora?
Para su mala suerte nuevamente fueron emboscados por otro grupo de pokémon mas a diferencia de la última vez estos demostraban tener heridas que aún no parecían haber sanado. Un Electabuzz intento atacar con puño trueno más acabo cayendo torpemente por sus heridas.
Jake: detente, por favor. No estás en condiciones
Jake se acerca y a pesar de la negativa del eléctrico logra acercarse, Pikachu da su fe al comunicarse vía electricidad convenciéndolo por lo que se deja atender ante las miradas atónitas de los demás pokémon.
Ash: no tengan miedo. Somos amigos
Serena: solo queremos ayudar. Por favor
Las criaturas aún tenían sus dudas pero de repente alguien llama la atención, unos pokémon se hacen a un lado para dar paso a quien debía ser su líder, se trataba de la otra criatura antes descrita, la que peleaba contra Gardevoir.
Ash: que pokémon es ese
Serena: se parece a Floritta y Florina
Jake: es su evolución, Floretta.
Pokedex: Floretta, el pokémon hoja adulto y la forma evolucionada de Florina… en la época de los reyes solían ayudar a la servidumbre, sienten un gran afecto por los demás y buscara la manera de apoyarlos en todo lo posible. (Tipo planta/hada)
Por otro lado Honey fue llevada al hogar de sus "captores", parecía una civilización cavernícola llena de cuevas y todo eso. Estaba lleno de pokémon, muchos de ellos heridos por las constantes batallas que han tenido. Lo más triste era ver a unos pequeños pokémon y uno que otro bebé recargados en unas piedras tristes, casi llorando como lamentando la perdida de alguien, rogando que vuelva.
Honey: pero que pasa aquí –exclamo en voz baja-
Sin embargo Gardevoir llama su atención indicando a los pokémon heridos, básicamente le estaba pidiendo que los ayudara (por no decir ordenando) Honey tuvo que preguntar para cerciorarse de ello a lo que le asintieron.
Honey: puedo ayudarlos. Pero necesito la ayuda de mis amigos.
Lo que decía era verdad, ya casi no tenía equipo médico y la cantidad de pokémon heridos era considerable, más la Gardevoir demostró una leve ignorancia de lo que la humana quería decir. Entonces tuvo una idea aunque no la consideraba del todo buena, sacó a su reciente captura la cual le causaba miedo, saco la foto grupal de Cd. Eden y se la mostro temblorosa
Honey: eh… podrías buscar a mis amigos… ¿por favor? -Beedrill miraba confusa pero Hileaf le ayudo a entender- ¿quieres ir con Beedrill? –Hileaf asiente- de acuerdo, cuento contigo. Pero tengan cuidado.
Con todo dicho van en busca de los demás, mientras Honey se pone a atender a las demás criaturas con lo que tuviera disponible. De vuelta con los demás habían sido llevado al hogar del otro bando, a diferencia de los primeros el hogar de estos parecía más improvisado, nuevo y recién hecho. Lo único que tenían en común eran varios pokémon resintiendo heridas quienes miraban a los humanos algunos con dudas y otros con nervios.
Serena: pero que es todo esto –exclamo impactada-
Jake: el resultado de las guerras sin sentido
Floritta como la dulce criatura que es se acercó a su evolución para congeniar la cual fue recibida con dulzura, al parecer la pequeña pregunto qué pasaba a lo que fue respondida. Tras eso la florecita se acercó a su entrenador.
Jake: ¿Qué necesitan ayuda? –Floritta asiente- muy bien, vamos a ayudarles
Serena: pero que hay de Honey
Ash: si, podría estar en problemas
Jake: también estoy preocupado por ella, pero algo me dice que está bien. Además, si ella estuviera aquí no dudaría en ayudarlos
Serena: creo que tienes razón
Ash: sí. Ella es fuerte, estoy seguro de que la encontraremos
Serena: entonces hagámoslo
Como la líder les había dado luz verde los pokémon no dieron problemas para ser atendidos y menos cuando vieron como poco a poco los demás se sentían mejor que antes, fue un poco más facil ya que Floritta y Floretta sabían usar pulso sanador mas esta última lo hacía con dificultad lo que indicaba que lo ha estado haciendo todo este tiempo.
Tras un rato volando por los arboles los pokémon de Honey seguían con su búsqueda, no estaban lejos de donde se habían separado mas no sería fácil encontrarlos… o al menos así sería pero en esta historia los héroes triunfan porque YOLO. En fin, desde los cielos Hileaf avisto a los demás y le pidió a Beedrill aterrizar, en tierra Ash y compañía seguían atendiendo a los demás cuando escucharon a Hileaf.
Ash: ¿eso que suena es Hileaf?
Serena: eso parece, pero de donde viene
Jake: pero que rayos…
Ash: Hileaf esta…
Serena: ¿montando un Beedrill?
Jake: Hileaf, pero como es que… bueno, no importa. Donde esta Honey
La tarde había caído y básicamente el tiempo que habían ganado lo terminaron perdiendo, irónicamente, peor aún, habían perdido a una amiga y debían encontrarla. A su vez Jake seguía checando su Tablet para saber que tanto se habían desviado más grande fue su sorpresa al ver que iban por el camino… y hablando de ella, Honey había terminado de atender a los necesitados, estaba agotada y esperaba que sus criaturas hayan dado con sus amigos.
Afortunadamente así fue, Ash y compañía se acercaban junto con los demás pokémon heridos, cosa que puso en alerta a los del bando de Gardevoir quienes se pusieron en guardia, los de Floritta reaccionaron de igual manera aunque más a la defensiva.
Honey: ¡no, esperen! ¡Son mis amigos!
Serena: ¡qué está pasando!
Ash: no lo sé, pero no se ve bueno
Había mucha tensión en ambos bandos, sobre todo entre Gardevoir y Floretta. Nuestros héroes se interpusieron en su camino tratando de calmarlos, cosa que parecía que no estaba dando resultado.
Honey: ¡deténganse por favor! ¡Aún no están recuperados del todo!
Serena: ¡por favor! ¡No peleen!
Ash: ¡no queremos pelear! ¡Solo estamos buscando a Queengela!
Al decir el nombre del legendario todos quedaron estupefactos, nadie tenía idea de la gravedad de la situación. Muchos de los pokémon de ambos bandos miraban algo reacios y/o dudosos de las intenciones de estos humanos sobre el mencionado pokémon
Ash: porque nos miran así
Serena: no me gusta como se ve esto
Honey: Ash solamente menciono a Queengela y se pusieron así
Jake: creo que este es el hogar de Queengela… al menos eso dice mi mapa
Ash: entonces… ¿llegamos?
Serena: pero… entonces donde esta Queengela
Gardevoir seguía algo molesta pero Floretta le dijo algo y a pesar de su evidente ira decidió mostrarles por lo que les pidió a todos seguirla. No muy lejos de ahí se encontraba una cueva el cual era custodiada por una Nidoqueen y un Strongrock, dicha cueva tenía una reja hecha de ramas. Gardevoir pide abrir la reja y los lleva a dentro, no muy al fondo los chicos se sorprenden al encontrar a los 4 exploradores perdidos, más grande fue la sorpresa cuando se dieron cuenta que los exploradores eran…
-¡Equipo Rocket!- exclamaron a unísono, los cuatro exploradores era justamente Jessie, James, Meowth y Wobbuffet. Tenían sus respectivas ropas de explorador aunque algo desgarbado y sus pokémon denotaban estar débiles y algo heridos
Jessie: son los bobos –dijo esperanzada-
Meowth: ¡Alabado Arceus!
Serena: esperen ¿ustedes son los exploradores perdidos?
James: así es. Y vinieron en nuestra ayuda. Gracias, muchas gracias.
Honey: (¬_¬) ahm. No lo sé, como que hay que planteárnosla mejor
Jake: si, algo me dice que todo esto es culpa tuya
Jessie: lo juramos, en serio. Nosotros no tuvimos la culpa
Ash: no sé si creerles –afirmo escéptico-
Jake: muy bien, ya basta. Todos afuera, llego la hora de contar historias
Tiempo después todos estaban reunidos frente a una fogata, incluido el equipo rocket. A pesar de lo reacio de los pokémon optaron por la via diplomática pero los chicos cohete no podían evitar sentirse incomodos por las acusatorias miradas no solo de las criaturas sino también de nuestros héroes.
Jake: muy bien Meowth, traduce. Gardevoir, Floretta… ¿quieren hablar? –Gardevoir suspiro y comenzó a contar todo mientras Meowh traduce-
Flashback:
-Este bosque ha sido refugio de los pokémon que huyen de la maldad de los humanos desde hace mucho tiempo. Desde los días de los reyes y las guerras, cuando el primer pokémon herido llego a estas tierras…-
-el pokémon estaba completamente herido, parecía que no lo lograría. Pero entonces apareció, el poderoso pokémon que cura todo los males… Queengela… con sus místicos poderes, Queengela sano sus heridas y restauro sus fuerzas-
-el pokémon estaba impresionado, se sentía como nuevo, como su nunca hubiera recibido una herida en toda su vida. Agradecido el pokémon junto una gran cantidad de comida como pago y después de un tiempo se fue-
-Más los rumores de aquel milagro no se hicieron esperar y muchos pokémon comenzaron a llegar desde muchas partes de la región para curar sus heridas. Queengela no dudo en usar sus milagrosos poderes para atenderlos a todos-
-El bosque se fue convirtiendo en un hermoso lugar para vivir, un lugar donde podían ser libres de la avaricia del ser humano. Su ventaja numérica y lo amplio del bosque mantenían a raya a cualquier humano que intentase explorar este lugar-
-los pokémon de este bosque nombraron a Queengela como su deidad y desde entonces los han formado una comunidad libre de todos los males del mundo, una comunidad donde cada criatura da la mano por el otro… o al menos así fue hasta hace unos días-
-Un día, simplemente Queengela y el viejo sabio desaparecieron, habían ido a jugar al rio pero al parecer fueron atacados por alguien desconocido, cuando llegamos era demasiado tarde-
-Poco después muchos grupos de humanos comenzaron a aparecer. Floretta sugirió refugiarse para poder seguir buscando a Queengela, pero Gardevoir dijo que debían quedarse a pelear por su hogar, que no podían permitir que los humanos se salieran con la suya y menos cuando se habían llevado a Queengela-
-pero al no ponerse de acuerdo ambas entraron en conflicto llevándolo a lo físico, por lo que Gardevoir enfadada desterró a Floretta y a sus seguidores de aquí-
Fin del Flashback
Meowth: desde entonces el bando de Floretta ha estado buscando a Queengela, pero con el grupo de exploración rondando y las constantes agresiones de Gardevoir ha sido imposible
Honey: ya veo
Ash: y ustedes como acabaron aquí
Jessie: bueno, oímos sobre la recompensa y nos unimos a la expedición
James: pero durante el viaje terminamos en medio de un fuego cruzado
Meowth: y cuando termino la batalla fuimos capturados
Jessie: Gardevoir y los demás pokémon nos culparon por la desaparición de Queengela. Por más que les decíamos que no teníamos nada que ver
Honey: deben admitir que eso es difícil de creer
Ash: sobre todo tratándose de ustedes
Jake: aunque culpables o no, eso no arregla las cosas. Queengela sigue desaparecida
Serena: cierto. Pero ustedes han estado haciendo las cosas mal –reprendió a las líderes- el pelear no resolverá nada.
Floretta se sintió mal pero Gardevoir aparto la mirada indiferente, después de toda no tenía que recibir sermones de una humana. –"míreme a los ojos cuando le hable, Srta."- exclamo Serena cual madre regañando a su hija adolescente abochornando a la de 3ra. Gen. Y causando la burla de la Fakemon.
Serena: ¿crees que todo esto está bien? Mira a tus amigos
A regañadientes la pokémon hizo caso y pudo ver a sus amigos heridos a pesar de que habían sido atendidos por los héroes, vio la tristeza de los más pequeños, en especial hacia los que podían ser sus padres. Entonces Gardevoir entendió lo que esa humana quería decirle y eso la puso triste, se dio cuenta de que ha estado presionando a su equipo y aun peor, ni siquiera había hecho el intento de encontrar a Queengela, a diferencia de su compañera Floretta.
Entonces sus manos son tomadas por la planta/hada en señal de empatía, a pesar del mal rato que le hizo pasar Floretta parecía perdonarla, Gardevoir solamente soltó lágrimas y abrazo arrepentida a su vieja amiga, todo esto ante la enternecida mirada de los presentes.
Serena: descuiden, encontraremos a Queengela. Pero debemos trabajar juntos
Ash: todo saldrá bien, ya lo verán
Honey: bueno. No quiero sonar pesimista pero… que hacemos ahora
Jake: descuida linda… algo surgirá.
Y como si de un deseo cumplido se tratara ese algo surgió, los pokémon quedaron anonadados cuando un viejo pokémon herido apareció ante ellos. Se parecía a Psyfrog pero de aspecto más viejo, tenía frubujas que emulaban una barba y un collar de bonguris, finalmente el viejo cedió ante sus heridas y cansancio quedando inconsciente.
Meowth: ese es el viejo sabio del que hablaban
Serena: está gravemente herido
Jake: hay que ayudarlos
La búsqueda de Queengela se ha complicado más debido a su repentina desaparición. ¿Qué paso con Queengela? ¿Podrán Ash y compañía resolver el conflicto del reino del bosque? ¿Podrán encontrar a tiempo a Queengela como lo prometio Jake? Descúbranlo próximamente… mientras el viaje continuo.
TO BE CONTINUED…