Capítulo 40: haciéndote amiga de tu miedo
Tras haber derrotado a la guardiana de Cd. Flumendale y ganar su 4to escudo, Ash y compañía se dirigen a Sunnytown donde Serena buscara ganar su última gema de la princesa. Pero por ahora decidieron parar un momento tras caminar un poco a través del bosque.
Ash: muy bien, salgan todos
Serena: ustedes también, chicos
Jake: hora de jugar, traviesos
Todos, incluyendo Honey habían sacado a sus pokémon, entonces vieron a la nueva integrante del equipo, justamente a Rabbidash. La curiosidad era evidente y Rabbidash se sentía nerviosa y apenada por ser el centro de atención.
Ash: chicos, ella es Rabbidash. Es Honoby quien ha evolucionado
Pikachu lo segunda y Rabbidash saluda sonriendo nerviosa de manera introvertida. La primera en saludarle amistosamente fue Lopunny, no paso ni un segundo para que los demás se unieran… todos menos Beedrill, porque la verdad es que Honey no la había sacado. De hecho tenía la pokebola del bicho en su mano.
Serena: ¿no piensas sacarla, Honey?
Honey: b-bueno, yo…
Jake: tarde o temprano tienen que llevarse bien
Honey: supongo –dijo no tan confiada-
Ash: animo. Recuerda, los pokémon son amigos
Honey: los pokémon son amigos –se dijo buscando convencerse-
A pesar de sus nervios finalmente saca a la abeja quien apareció a cierta altura mas no tardó mucho en bajar cerca de su entrenadora, ambas se miraron por un breve tiempo hasta que finalmente Honey se desmaya así como así ante una confundida Beedrill, solo se veía a su espíritu (o su fantasma, supongo) saliendo de su boca ante la mirada atónita de sus amigos.
Mientras los pokémon jugaban alegremente exentos de lo sucedido, Honey era atendida tras pasar el shock, sentada en el piso con un paño mojado en la cabeza. Honey no sabía si se sentía mal por el susto o por el hecho de que ni siquiera hizo el más mínimo intento de soportar.
Serena: ¿te sientes mejor?
Honey: eso creo
Jake: fue un buen intento –dijo haciéndola sentir mal sin querer-
Ash: no te preocupes. Ya verás que en poco tiempo tú y Beedrill serán buenas amigas
Honey: eso espero
Honey solo volteo a ver a la abeja quien jugaba con los pequeños plantita, se podía ver la frustración por no poder interactuar debidamente con Beedrill, después de todo no es culpa de la criatura. Mientras tanto en el cielo una vez más la burra al trigo.
Jessie: bobos… salga a jugar –coreo mientras buscaba con los binoculares-
Meowth: podríamos haber intentado capturar una vez más a Queengela
Jessie: ¿tras todo lo sucedido? Tenemos suerte de haber salido vivos de ahí
James: y ahora el reino del bosque está más vigilado que nunca
Jessie: por eso volvemos al plan de siempre. Robar a Pikachu
De vuelta con nuestros héroes estos preparaban la comida para sus criaturas, las primeras raciones ya habían sido servidas para los más pequeños y era turno de los grandes, Honey intentaría otro acercamiento al darle su tazón en mano, aunque era más fácil decirlo que hacerlo ya que la aspirante a científica temblaba más que gelatina a medio cuajar. Beedrill se le acerco provocando más nervios y miedos en su entrenadora, lentamente la abeja extendió sus manos con la intención de tomar el tazón y estaba a punto de completar el acto pero una vez más sus miedos pudieron más que ella y con un grito arrojo accidentalmente el tazón al aire, afortunadamente Rabbidash hace uso de su gran velocidad y salta para atraparlo, aunque eso no evito que unas cuantas croquetitas se salieran del plato y cayeran en Beedrill quien miro a su entrenadora temblando "oculta" detrás de Jake agachada y con las manos en la cabeza (ya saben, típica pose asustada), la pobre abeja solo se entristeció, tomo el tazón y cabizbaja se retiró a comer.
Ash: pobre Beedrill
Jake: ¿estás bien?
Honey: no –respondió aun en su pose-
Y no era para menos, no es que estuviese asustada… mucho, era el hecho de que una vez más la había arruinado e hizo sentir mal a Beedrill quien simplemente comía cabizbajo mientras los demás pokémon lo acompañaban buscando hacerla sentir mejor… tiempo después…
Honey: no puedo seguir así
Jake: no estarás pensando en darte por vencida ¿o sí?
Honey: ¡no!... bueno... No lo se
Ash: no te rindas tan fácilmente, Honey
Serena: ya verás que muy pronto se llevaran bien
Honey: tengo miedo, pero… me siento peor al saber que estoy lastimando a Beedrill
Ash: mmm… oigan ¿y qué tal una batalla Pokémon?
Honey: ¿Cómo?
Serena: Ash, esto es muy serio. No creo que sea momento para una batalla –protesto tranquila-
Jake: aunque pensándolo bien… una batalla podría ayudarles a conectarse. Ya saben, como un equipo
Honey: supongo que… tienen razón. Pero ¿a quién me enfrento?
Jake: Ash queda fuera
Ash: ¿eh? ¿Porque?
Serena: eres el más experimentado del grupo. Posees una enorme ventaja ante una novata como ella
Ash: sí, creo que tienes razón
Jake: yo igual creo que quedare fuera por lo mismo
Serena: de acuerdo. Déjenmelo a mí –sonrió confiada- Vamos, Honey.
Sobra decir que Honey no estaba muy cómoda con todo el asunto pero debía hacer el intento. No paso mucho tiempo para que ambas chicas estuvieran en su posición, Serena lucharía con Pancham y denotaban autoestima, caso contrario con Honey… y Beedrill parecía estar en las mismas.
Serena: ¿lista, Honey?
Honey: eso creo
Jake: vamos, linda. Animo… ¡ojo de Incineroar!
Ash: den su mejor esfuerzo chicas
Serena: adelante, Honey. Te dejare hacer el primer movimiento
Honey: de acuerdo –dijo nerviosa- ahm. Beedrill, usa misil aguja
Serena: esquívalo
Beedrill dispara como si tuviera metralletas en ambas manos pero Pancham logra evadirlos con relativa facilidad haciendo uso de su talento en los concursos, Serena ordena roca afilada y por los nervios Honey apenas logro ordenar que esquivara, cosa que Beedrill hace por poquito.
Ash: ¡sigan así, chicas! (¡Pika Pika!)
Serena: muy bien. Pancham, usa pulso oscuro
Honey: ¡ehhh! ¡Beedrill, esquívalo! –La abeja obedece con dificultad-
Jake: no te limites solo a esquivar. Ataca también
Honey: eeesta bien. ¡Beedrill, usa hiperrayo!
Serena: ¡cuidado, Pancham!
Ahora fue el turno del pandita para sentirse presionado, logra evitar el rasho pero con dificultad, Jake le dice a Honey que presione y la nerviosa chica ordena ataque furia, Serena ordena defender con brazada y las criaturas se enfrentan en un intercambio de aguijones y manazos. Pancham la tenía más difícil debido a la agilidad del tipo bicho por lo que Serena ordena salir del rango de ataque, el panda obedece y salta donde abre fuego con pulso oscuro una vez más dando en el blanco derribándolo.
Para empeorar las cosas como que Serena se puso en modo Ash y se fue con todo ordenando roca afilada antes de que Beedrill pudiera reincorporarse recibiendo el golpe y cayendo encima de su aterrada entrenadora, ni Serena ni Ash se dieron cuenta de lo que había pasado y simplemente la pelimiel saltaba y gritaba de júbilo
Ash: ¡bien hecho serena!
Jake: ahm, chicos… creo que tenemos un problema
Serena: que pasa… ¡KYAAA!
Tanto Beedrill como Honey estaban totalmente nockeadas, la criatura por el ataque recibido y la aspirante a científica por el golpe producido de que le cayera un pokémon de casi 30 kilos… o tal vez por el shock por el contacto con el pokémon de sus fobias. Ya pasado todo Honey hacia pucheritos de querer soportar las ganas de llorar.
Serena: lo siento mucho, Honey… creo que me deje llevar –se disculpó apenada con una reverencia-
Jake: cielos. Y eso que fuiste tú, si hubiera sido Ash quizás hubiera sido peor... eres una mala influencia, Ash
Ash: ¡oye!
Honey: esto no está funcionando
Jake: no te des por vencida todavía. Si tú te sientes mal, mira cómo se siente Beedrill
Ante el comentario todos vieron no muy a lo lejos a la abejita deprimida siendo consolada por las demás criaturas, esta volteo levemente hacia donde los humanos donde la mirada de entrenadora y pokémon triste se cruzaron, sobre decir que eso fue más que suficiente para ponerla aun peor.
Ash: y… ahora que hacemos
Jake: creo que será mejor ir a un centro pokémon y planearlo mejor
Serena: veamos… -consulto su navegador- Mapletown está cerca y hay un centro pokémon
Mapletown era un pueblito campestre que subsistía a base de los productos del campo y del poco turismo que recibía de gente buscando un lugar relajante lejos del ajetreo citadino donde realizar actividades de campo, poseían también un riachuelo el cual ayudaba al sistema de riego en los campos y cuyo cauce se unía al rio Elena. Mientras los pokémon eran revisados los chicos seguían pensantes como solucionar el dilema de Honey.
Jake: intentamos acercamiento breve, intentamos trabajo en equipo… ¿alguna otra idea?
Serena: no se me ocurre nada
Ash: igual
Jake: que dilema
Honey: no tengo remedio –exclamo cabizbaja-
Jake: vamos, Honey. No te desanimes… algo se nos ocurrirá
Enfermera Joy: disculpen, sus pokémon ya están recuperados
Ash: gracias, enfermera Joy
Enfermera Joy: ¿pasa algo malo? –Noto cabizbajos a nuestros héroes-
Serena: bueno. Nuestra amiga atrapo un Beedrill pero… les tiene miedo
Enfermera Joy: ya veo, un caso de pokefobia
Serena: ¿puede ayudarnos?
Enfermera Joy: recuerdo que en la academia Joy nos enseñaron a intentar una interacción entre el entrenador y el pokémon
Jake: ya lo intentamos, incluso con una batalla pokémon… no funciono
Enfermera Joy: mmm… quizás debemos ser más agresivos al respecto
En las orillas del campo de batalla a lado del centro pokémon las chicas se encontraban con Honey y los muchachos con Beedrill, ambos grupos se mantenían a cierta distancia para "mayor comodidad". Tristemente Honey no mostraba estar en las mejores condiciones, si bien quería intentarlo, realmente quería intentarlo, su cuerpo prácticamente le fallaba. Por otro lado Beedrill comenzaba a sentirse aun mal, su corazoncito no soportaba no agradarle a su amiga y prácticamente no quería molestarla más.
Enfermera Joy: muy buen, nos iremos acercando poco a poco ¿de acuerdo?
Jake: ok
Serena: muy bien, Honey. Solo relájate
Honey: ok… tu puede, Honey. Tú puedes –se decía así misma-
Y así dieron comienzo, paso a paso (si, la abeja también caminaba) Serena y Joy en cada hombro de la dama y los muchachos por detrás del pokémon. Con cada acercamiento Honey hacia un esfuerzo sobrehumano para no perder la cabeza, poco a poco y sin prisas se iban acercando, Honey comienza a sentir tensión mas no se detienen. Ya casi estaban cerca, parecían que iban a lograrlo… y la tragedia paso.
Honey comenzó a desconcentrarse, a temblar y ponerse nerviosa, una parte de ella busco resistir y cumplir su cometido pero su subconsciente dominaba, empezó a resistirse y a murmurar "no" mientras Serena y la enfermera buscaban forcejear un poco para acercarla. Cuando ya estaban muy cerca la bomba explotó, Honey grito y con gran fuerza sobrehumana no solo logró zafarse de las féminas, sino también derribarlas. Corrió graciosamente despavorida hasta que se agacho cerca de los arbustos cubriéndose.
Jake: ¿están bien? –Pregunto ayudando a la enfermera-
Enfermera Joy: si, gracias
Ash: esto tampoco funciono
Serena: ¿Beedrill?
Cuando todos voltearon a ver a la abeja esta tenía los ojos como charcos de agua, su tristeza era inminente, tanto así que ya no pudo más y dio media vuelta. Al mismo tiempo Honey volteo a ver a los demás justo en el momento que Beedrill les dio la espalda, logro ver como las lágrimas de la pobre criatura brotaban (efecto dramático y todo) en ese momento el miedo se fue dando paso a la estupefacción. Finalmente Beedrill se aleja de todos a pesar del llamado de Ash y compañía, Honey simplemente soltó una lagrima y un murmuro… -"Beedrill"-
No muy lejos de ahí escondidos ridículamente entre los arbustos, cierto conocido grupito de malos malosos amados por muchos habían sido testigos de esta telenovela pokémon. Una oportunidad más se les había presentado.
James: oh, pobrecita Beedrill –dijo empático-
Meowth: tiene su corazoncito roto –secundo junto con Wobbuffet-
Jessie: si, una gran pena. Pero no es momento para llorar, esta es una oportunidad de oro
James: a que te refieres, Jessie
Jessie: oh vamos, piensenlo. Esta es la parte donde los bobos irán a buscar a Beedrill para arreglar las cosas, pedir perdón, hacerse amigos y blah blah blah blah. Así que haremos esto, atraparemos a Beedrill y lo usaremos de carnada para atrapar a Pikachu
James: no es mala idea
Meowth: si, podría funcionar
Jessie: bien, andando. Debemos encontrarla antes de que los bobos lo hagan
Y con plan ideado era hora de laburar. Como era de esperarse y tal como predijo Jessie el crew fue a buscarla adentrándose al bosque y gritando su nombre con la esperanza de ser respondidos y/o que apareciera. Honey quien iba detrás de los demás callada y cabizbaja definitivamente estaba totalmente destruida, decir que se sentía realmente mal era quedarse corto. Jake se dio cuenta por lo que se acercó a ella y poso su mano en su hombro con una dulce y empática sonrisa, Honey no pudo más y se arropo en los brazos de su amigo.
Honey: Lo siento –dijo ocultando su triste rostro en el seno del explorador-
Jake: lo se
Honey: yo no quería…
Jake: lo se… no te preocupes. Todo va a salir bien
Honey: solo espero que no le pase nada malo
Jake: no digas eso. La encontraremos y ya verás que todo esto será un mal recuerdo
Honey: *sniff* solo quiero disculparme
Honey soltaba de a poco lo que sentía, los demás se entristecieron y solo podían empatizar con ella, apoyarla y brindarle esperanzas. No muy lejos de ellos en una pequeña cascada se encontraba el pokémon perdido bebiendo un poco de agua, por supuesto que aún no superaba la amarga experiencia recién vivida, incluso se le vino a la mente su viejo hogar y la idea de volver con sus viejos amigos.
Por desgracia algo la saco de sus pensamientos y eso fue un grupo de Wolverage (los de hace 2 episodios) quienes no dudaron en atacarla con sus garras, afortunadamente Beedrill logra evitarlas y huye tomando algo de altura, aun así los Wolverage no la dejarían ir tan fácilmente por lo que abrieron fuego con toda clase de ataques elementales las cuales evadía con dificultad obligándola a responder con misil aguja apartándolos más pudo ser alcanzada de un lanza rocas dañándole un ala lo que le dificulto mantener vuelo. Beedrill dispara un hiperrayo creando una cortina de polvo desorientando a sus agresores y dándole tiempo a escapar los más lejos que el ala dañada le permitiera.
De vuelta con la banda continuaban con su búsqueda sin éxito, su camino los había llevado a una pequeña colina abierta, Ash, Serena, Jake e incluso Pikachu gritaban a todo pulmón llamándola esperando respuesta, sobra decir que no había tal y eso hacía sentir mal a la erudita, se estaba frustrando y llenándose de ira consigo misma.
Beedrill por otro lado, finalmente pudo alejarse de sus captores más su ala llego a su límite por lo que se vio obligada a andar a pie lo cual para su especie es un problema al ser dependientes de sus alas para su agilidad. La pobre estaba tan asustada al grado de desear que sus nuevos amigos, en especial aquella humana que sentía temor de ella apareciesen y le ayudasen, pero también se preguntaba como podría volver con ella sin causarle molestias.
Y entonces como si de un milagro se tratase comenzó a escuchar las voces de aquellos humanos y de ese Pikachu llamándola, apenas y podía escuchar sus voces pero sabía que eran ellos y con todas sus fuerzas corrió hacia las voces. Corrió y corrió todo lo que pudo depositando sus esperanzas en ellos, desafortunadamente debido a no estar acostumbrada a correr termino tropezando, parecía que sus esperanzas se habían esfumado, en especial porque dejo de escuchar las voces… paralelamente a eso…
Ash: no hay respuesta
Serena: que vamos a hacer
Ash: debí haber pensado en esto desde el principio, dijo sacando una pokebola
Jake: ¿Hablas de Birdhoe? Bien pensado.
Honey solo escuchaba y veía como sus amigos se preocupaban y buscaban solucionar todo esto que, según ella fue culpa suya. Todo esto la lleno de frustración que ya no pudo soportar y finalmente exploto, acercándose a la colina lo saco todo.
Honey: ¡BEEDRILLL! ¡LO SIENTO!... ¡LAMENTO HABERTE LASTIMADO! ¡TU NO TIENES LA CULPA DE NADA! ¡YO SOY LA QUE ESTA MAL! ¡NO ME HE ESFORZADO LO SUFICIENTE PARA PODER SER TU AMIGA! ¡PERDONAME!... ¡POR FAVOR, REGRESA!
Todo el bello discurso había creado eco en la zona y afortunadamente cada palabra fue escuchada por la abeja cuyas esperanzas habían sido renovadas, sus ojos se llenaron de lágrimas de alegría e hizo un último esfuerzo para reencontrarse con su entradora quen yacía de rodillas en el suelo llorando después de haber soltado todos sus sentimientos.
Serena: lo dijiste todo, Honey –dijo poniéndose a su altura-
Ash: estoy seguro de que te escucho
Jake: no pierdas la esperanza
Honey: solo quiero que este bien –dijo aun cabizbaja-
De repente Pikachu escucho unos conocidos ruidos y se los hizo saber a sus amigos, grande fue la sorpresa al ver a Beedrill salir de los árboles y correr a hacia ellos, tanto fue la alegría de todos, en especial de Honey que sin medir nada corrió feliz soltando lagrimas hacia su pokémon, parecia que nada detendría el emotivo encuentro, ni siquiera los miedos de la joven quien no mostraba un ápice de ello.
Más como era de esperarse el hermoso encuentro se vio interrumpido cuando unos cohetes con redes atraparon a la criatura en las narices de su entrenadora. El equipo rocket apareció en un enorme robot con forma de Beedrill que flotaba con dos globos, uno en cada extremo. Beedrill colgaba atrapada en la red que venía del aguijón derecho del robot que estaba abierto cual garras. Se escuchaba a los malosos regodearse y burlones a través de los parlante.
Honey: ¡Beedrill!
Ash: ¡equipo Rocket!
Serena: ¡Porque no nos dejan en paz!
Jessie: ¿preguntas que porque no los dejamos en paz?
James: supongo que les tendremos que explicar
Jessie: la joya del mal más valiosa del todo el mundo… ¡Jessie!
James: el amo y señor de las sombras esperando el momento para atacar… ¡James!
Meowth: la mente criminal más grande que jamás haya existido, acepten su destino ante Meowth
Rocket: ¡equipo rocket, está aquí para arruinarlo todo!
Jake: y vayan que lo arruinan todo
Jessie: te lo agradezco
Honey: ¡liberen a Beedrill, ahora!
Jessie: ni lo sueñes, cuatro ojos.
Meowth: ¡nos llevaremos todo, incluyendo a Pikachu!
El aguijon de la cola se abre mostrando un cañón el cual dispara bomba lodo reteniendo a nuestros héroes, durante la confusión el otro aguijón se abre disparando una red atrapando a Pikachu, la rata intenta liberarse inútilmente, la red era aislante. Con presa en mano los globos sueltan vientos huracanados derribando a los buenos mientras escapaba pero Ash logra liberar a Birdhoe quien batallaba con las fuertes corrientes y darles carrera.
Una vez librado de los fuertes vientos Honey fue la primera en ir tras ellos desesperada ante la sorpresa de todos. De vuelta con el equipo rocket celebraban por su gran victoria cuando los sistemas detectaron problemas, vieron en pantalla como Birdhoe les pisaba los talones.
Meowth: el pájaro del bobo
Jessie: que molestia alimaña… James, encárgate
James: ¿Qué? ¿Yo?
Jessie: tienes un tipo roca, y llévate a Bugnoir de apoyo. Ahora sal y derríbalo
James: todo yo, todo yo –reprochaba-
Birdhoe se estaba acercando cuando vio como varias rocas y piquetes venenosos se dirigían hacia él y logra esquivarlos… a duras penas. James se encontraba en la cabeza del robot y abría fuego contra el ave cual antiaéreo a una aeronave.
En tierra Honey le pisaba los talones a pesar de su característica mala condición, sin embargo su dolor físico no era nada comparado con la preocupación que le carcomía el pecho, su voluntad podía más que su dolor.
De vuelta con el ave esta uso doble equipo para evitar los ataques, sus agresores destruyen los clones sin dar con el verdadero. James se preguntaba donde se había metido cuando escucho el grito de guerra del ave, mirando graciosamente por todos lados hasta ver hacia el cielo donde Birdhoe caía en picada usando as aéreo. Desesperado James grita como Rambo mientras abría fuego más fue inútil, El ave logra romper uno de los globos desequilibrando la máquina y por ende causando su caída ante la mirada atónita de Ash y compañía, en especial de Honey quien metió turbo.
El robot finalmente se estrella y el equipo rocket yacía en el suelo tras tremendo golpe quejándose, Birdhoe aterriza y con ala de acero logra liberar a Pikachu de la red más ambos fueron golpeados por lanza rocas, piquetes venenosos y bomba semilla. Ambos yacían en el suelo cuando fueron envueltos en sombras, el equipo rocket estaba aquí con redes para atraparlos a ambos con caras sonrientes aterradoras.
Jessie: ni crean que se van a escapar tan fácilmente, he he he he heee… -exclamo macabramente-
Honey: ¡Hileaf, bala semilla!
Los malosos fueron acribillados y derribados, una vez reincorporados vieron a la entrenadora del Beedrill buscando recuperar aire más decidida a rescatar a su amiga, el equipo rocket logra ponerse de pie y no estaban contentos
Jessie: sí que eres una plaga
Honey: devuélvanme a Beedrill, ahora –dijo aun agitada-
Jessie: oh, por favor. Si ni siquiera eres capaz de acercártele. ¿Y ahora esperas a que te lo devolvamos? Créeme, estará mejor en las filas de equipo rocket
Honey: jamás. Hileaf, usa bala semilla otra vez
James: Tortuguita, usa giro rápido
Tortorock obedece y repele la bala semilla sin problemas, Jessie no pierde tiempo y ordena bola sombra derribando a Hileaf, no estaba derrotado más si algo herido. Beedrill era testigo de cómo la humana hacia lo posible por salvarla, Honey por otro lado estaba nerviosa, lógicamente no tenía experiencia en batalla mas no se daría por vencida, en especial cuando Hileaf se puso de pie con todas sus fuerzas dispuesto a seguir luchando.
El equipo rocket busca terminar con esto y caerle a palos al tipo planta ante la mirada impotente y aterrada de los presentes, tanto Pikachu como Birdhoe querían actuar pero sus heridas apenas les permitían moverse, parecía que era el fin cuando de repente varios ataques elementales los detuvieron, los refuerzos habían llegado
Jake: Honey, ¿estás bien?
Honey: si, gracias
Ash: Pikachu, Birdhoe. Resistan
Serena: ¡devuélvanos a Beedrill!
Jessie: ¡por favor! Porque son tan insistentes. Gourgeist, bola sombra
Ash: ¡Rabiddash, carga de fuego!
Rabbidash corre y salta sobre la bola sombra impresionando y aterrando a los malosos a quienes Rabbidash les cae como si usara envite ígneo, pum. Honey aprovecha y corre junto con Hileaf, Serena y sus criaturas llegan con Beedrill –"Descuida. Te sacaremos de aquí"- dijo la aspirante a científica. Empatía, era lo que podía sentir en ese momento la criatura.
El equipo rocket se estaba recuperando del ataque de la conejita de fuego y vieron que las féminas estaban salvando a Beedrill por lo que buscaron detenerlas más las criaturas de Ash, Jake e incluso las de Serena les dieron con todo haciéndolos volar, tanto en una explosión como literalmente.
Jessie: ¿es en serio? –dijo tranquila-
James: esto comienza a perder sentido –secundo igual
Meowth: falta originalidad –asintió igual junto a Wobbuffet-
Y una vez más el equipo rocket despega de nuevo hacia el horizonte, hasta el siguiente capítulo donde volverán a dar lata. Pasado el peligro Honey logra liberar a Beedrill teniendo contacto físico más increiblemente no mostraba temor, más bien alegría.
-¿estás bien, Beedrill?- pregunto sonriente aunque casi llorosa, la abeja se sentía igual. Lo último fue un gran abrazo por parte de la entrenadora quien comenzó a sollozar –"lo siento"- fue lo último que pudo exclamar, Beedrill solo pudo corresponder a sus sentimientos enterneciendo a los presentes.
Ya en la noche en el centro Pokémon las criaturas eran atendidas, afortunadamente nadie tenía nada que lamentar, solo Beedrill era la más afectada hablando técnicamente, su ala estaba lastimada pero gracias al cielo no era nada grave.
Enfermera Joy: Beedrill va a estar bien. No se preocupen, volverá a volar en muy poco tiempo
Serena: que bueno ¿verdad, Honey?
Honey: totalmente
Jake: y tal parece que al fin superaste tu miedo a los Beedrill
Ash: ¿no es genial?
Honey: pues… no sé si he superado mi temor a los Beedrill, pero… solo sé que, ya no le temo a mi nueva amiga ¿verdad?
Le dijo a su pokémon quien puso ojos vidriosos por lo conmovedor de esas palabras por lo que no pudo más y abrazo a su entrenadora causando cierto shock en ella por lo sorpresivo y en sus amigos por la aparente inminente reacción de la erudita.
Pero afortunadamente Honey logro recomponerse y con una sonrisa respondió a su abrazo –"es tan cálido"- expreso encantada, Hileaf se unió al abrazo enterneciendo a todos los presentes. Y así tras un comienzo algo accidentado finalmente Honey pudo hacer las paces con su nueva amiga.
Los que triste y graciosamente no la estaban pasando bien era el equipo rocket, estos se encontraban colgados en una rama y para empeorar las cosas un grupo de Wolverage salvajes aparecieron con ganas de fastidiar. Feroces y con mal genio amenazaban con lastimar aún más al grupito, lo último fue un grito de terror a la luz de la luna siendo obstaculizada por una nube.
TO BE CONTINUED…
