Capitulo 3, el numero de personas que forman para crear, 4... no, 5 historias. Gracias por adelantado a quienes leen la historia. Se que dije que seria cada 2 semanas, pero me apetecía publicar y no me pude resistir. Ok, ahora respondamos a los comentarios, en serio, me parece divertido leerlas y responderlas.

Klaus - Agradéceselo a SpiritWarriot, también te tiene en alta estima. La integración esta bien, pero como ya te fijaras en los siguientes capítulos, ella misma se definirá de una manera. Te paciencia por favor, yo también quiero llegar a la Saga de Alabasta, pero no puedo excederme.

The Super Star Infinite - Bueno, Zoro es Zoro, oye, aun es demasiado pronto para su máximo potencial. Y por cierto, no esta "roto", piensa un poco que es la energía, no es algo que se vea. Y cada uno tiene un fragmento. Decir eso es como negar tu propia "energía". Se que suena raro, pero si lo piensas con cuidado te das cuenta.

Neo Magician 96 - Gracias, espero lograrlo, pero iré poco a poco. Así no me rompo la cabeza. Me saltare algunos capítulos, pero solo unos pocos. Ya atosigaran a preguntas cuando llegue el momento. ¿¡Lo maneje bien!? ¡Que alivio! Creí que me equivoque en algo. Ya veras la respuesta a esa pregunta.

Comentarios listos, capitulo listo, ahora toca el capitulo numero 3. Y una cosa antes de que se me olvide, SpiritWarriot esta preparando el especial de el "Legado", quienes siguen sus historias saben a que me refiero. Por supuesto esperara a que le indique el momento.


– Diálogo –

"– Pensamientos –"

Relato

Datos importantes


Capítulo 3

Morgana descansó bastante, hasta qué un mal sueño la despertó, asustándola. Al hacerlo le costaba respirar, se llevó una mano al pecho y dijo.

– Solo fue un sueño, no se hará realidad, no, no puedo… No puedo. –

Se miró las manos, por un segundo vio sangre en ellas. Cerró los ojos con fuerza, quería gritar pero se mordió el labio. Cuando pasó su ataque de pánico respiró aliviada, salió a cubierta no sin antes agarrar su chaqueta. Al salir no los vio hasta llegar a proa, dijo llegando.

– Buenos ¿Días? ¿Tardes? –

Sanji le respondió.

– Buenas días Morgana-Chan. ¿Has dormido bien? –

– Pues si, estoy recargada de energía. –

Nami le dijo un poco enfadada.

– Bien, y más te vale hacerme caso. Si te digo qué no es no. ¿Entendido? –

Morgana se puso firme y dijo nerviosa.

– Sí señora. –

– Bueno, ya has aprendido la lección. Aunque tengo la sensación qué volverías hacerlo. Pero no lo harás. ¿Verdad? –

Morgana agitó la cabeza de lado a lado frenéticamente.

– No, no, no, no, no. Lo prometo. –

– Vale, vale. Para o te vas a marear. –

Se agarró la cabeza, prácticamente lo hizo sin darse cuenta. Se colocó cerca de Nami qué miraba un mapa, sintió curiosidad.

– Nami-San, ¿Dónde estamos exactamente? –

Nami le enseñó el mapa y dijo señalando un punto.

– Aquí, aún estamos un poco lejos de la entrada de Red Line. Pero antes tengo ciertas dudas sobre ella. –

– Yo, oí información de la entrada. Tal vez te puede ayudar. –

– Uy, pues me viene de maravilla. Cuéntame. –

Antes de qué se lo dijera, Luffy se adelantó.

– Nami, ¿Cuánto falta para llegar a Grand Line? –

– Pero si apenas han pasado 2 días desde qué partimos de Loguetown. Tendrás qué esperar un poco más. –

– Vale. –

Morgana decidió decir lo evidente.

– Es de ideas fijas, ¿no? –

– ¿Luffy? Si. Pero no te preocupes. Puede parecer de esa manera, pero las apariencias engañan. –

– Ya veo. Supongo qué es más de lo qué se ve a simple vista. –

– Si. –

Todos están tranquilos en la proa, salvo Usopp qué está en la cofa vigilando el horizonte. Sanji dijo relajado.

– Qué día más hermoso. Parece que jamás hubo una tormenta. –

Usopp mira por el catalejo, toda precaución es poca para ellos ahora. Hasta ver una bandada de aves volando sobre algo qué no podía distinguir bien.

– ¿Qué es eso? ¡Hey! ¡Veo una gran bandada de aves a estribor!–

Ese grito llamó la atención de todos. Luffy preguntó.

– ¿Aves? –

– Si, y en el agua alcanzo a ver algo grande… ¡No sé qué puede ser! ¿Tú qué opinas? –

Todos miraron en la misma dirección. Luffy dijo.

– ¿Podría tratarse de un pez…? –

Usopp mira a través de sus gafas.

– ¿O de un bote de remos? Más bien, se ve como un pez enorme… –

Morgana miró en la misma dirección, tampoco podía ver, incluso al cerrar los ojos. Sanji dijo.

– He escuchado qué cuando una bandada de aves se reúne en el océano, es porque hay peces cerca. –

– ¿¡Peces!? –

– Luffy, atrapa unos para el almuerzo. –

– Entendido. Gomu Gomu no Amidori. –

Luffy lanzó el brazo hacia atrás, se alargó y luego lo lanzó al frente hasta llegar a su objetivo. Usopp dijo.

– ¡Whooo! Buena estirada. –

– Qué tipo tan práctico. –

Morgana miró a Nami y preguntó.

– Nami-San, ¿Cuál Akuma no mi comió Luffy-San? –

Gomu Gomu no mi, se volvió un hombre de goma. –

– Entonces en Loguetown… Pobre de los otros 3. –

Luffy llegó hasta está tenerlo debajo y sintió qué agarró algo.

– ¡Lo atrape! –

El brazo de Luffy volvió, pero no parecía un pez. Luffy dijo emocionado.

– ¡Es uno grande! –

– ¡Bien hecho, Luffy! –

Después de qué Nami hablara, el brazo se acercaba cada vez más y no daba la impresión de frenar. Sanji dijo un poco nervioso.

– ¡Un momento! ¿Qué pasará cuando venga de regreso? –

Morgana había empezado a caminar un poco para bajar, pero Sanji la atrapó y la tiró al suelo. El brazo pasó por encima de ellos pero Zoro qué se encontraba durmiendo no lo esquivó y fue lanzado al mar a gran distancia. Luffy volvió a tener su brazo después de lanzarlo y dijo.

– ¡Ah! Lo siento Zoro. –

Sanji se levantó enfadado.

– Qué torpe eres. Casi te llevas por delante a Morgana-Chan. –

Nami fue a ayudarla a levantarse.

– Morgana ¿Estas bien? –

– Si, gracias a Sanji-San. Gracias. –

– No es nada Morgana-Chan, no podía permitirle qué te pasara nada. No mientras yo esté aquí. –

Morgana dijo mirando a su alrededor.

– ¿Zoro-San? –

– Está… –

Sanji miró en donde se supone qué estaba, pero no estaba.

– ¿Ahí? ¿A donde fue Marimo? –

Mirando por todas partes, hasta qué Morgana cerró los ojos y pasó una mano por su rostro.

Vista Astral.

Al abrir los ojos, estos se volvieron por completo de amarillo. Miró al mar y dijo señalando.

– Por allí, está por allí. Caería al mar por culpa de Luffy-San. –

– Pongamos rumbo para allá entonces. –

Llegaron a él sin problema y lograron atarlo con una cuerda. Al subirlo se le oyó decir.

– Algún día… voy a… matarlo… –

Morgana y Luffy lo subían, mientras los otros 3 miraban la "pesca" de Luffy. Era una niña con un vestido amarillo, sombrero alto. Su piel está pálida y sus ojos en blanco. Sanji dijo.

– ¡Hey, miren! ¡No era un pez después de todo! –

– ¡Es una niña! –

Luffy llegó a ellos.

– ¡Eh! ¿Una sirena? ¿En dónde está su cola? –

– ¡No inventes! ¿Cómo diablos se va a parecer a una sirena? –

Nami dijo preocupada.

– ¿¡Pero qué andaría haciendo esta niña en ese pequeño bote de remos!? –

Morgana también se acercó después de ayudar a Zoro a levantarse. Comprobó el pulso de la niña y dijo.

– Está bien. Viva, diría qué solo está agotada. Pongámosla primero de lado. –

– ¿De lado? ¿Y eso porque? –

Colocó a la niña de lado y salió un poco de agua, por suerte recupero un poco de color. Morgana suspira.

– Apenas tiene agua de mar. A tenido suerte. ¿A saber cuánto tiempo ha estado en el mar? Una persona común sólo puede estar 3 días sin agua. –

– Morgana, ¿Cómo sabías dónde estaba Zoro? –

Al principio iba a fingir qué no la oyó pero recapacitó y dijo.

– No vale la pena callarse. Es parte de mi poder. Al menos el qué me permite ver de otra forma. –

– ¿De otra forma? –

– Juguemos a un juego. Qué alguien se esconda. Yo no miraré en ningún momento. Nami-San ¿Me vigilas? –

– Claro. –

Luffy se fue, Morgana se llevó las manos a los ojos y miró a popa. Pasado un tiempo, Nami le dijo.

– Ya puedes Morgana. –

– Mejor aún, lo haré con los ojos cerrados. –

– ¿Estás segura? –

– Si, pero necesitaré un guía. –

Sanji se ofreció rápido.

– Aquí, Morgana-Chan. –

Morgana se sostuvo del brazo de Sanji y bajó hasta quedar en el centro. Todos se aseguraban de qué no mirará. Ella miró y señaló detrás de los árboles de mandarina.

– Luffy-San, está allí. Y si la memoria no me falla, detrás de los árboles. –

Luffy salió y dijo.

– ¡Qué pasada! ¿Qué más puedes hacer? –

– ¿No deberíamos atender a la niña? –

Recordaron qué la tenían. La llevaron a la cabina donde todos se aseguraron de qué estuviera bien. No pasó mucho para qué la niña se empezara a despertar justo cuando Usopp le estaba poniendo un paño en la frente. La niña se sentó de golpe, golpeando a Usopp en la barbilla en el proceso.

– ¡DUELE! –

Todos miraron lo sucedido. Nami dijo.

– ¡Ya te has despertado…! –

La niña miró en su dirección para mirarlos.

– Incluso con más vitalidad de lo qué esperaba. ¿Te lastimaste en alguna parte? –

– Apuesto a qué tienes hambre. Justo ahora estoy haciendo una sopa. –

La niña miró en todos lados, seguramente dándose cuenta de qué es un barco. Solo dijo alegre.

– ¡Qué suerte! –

Está vez fue Morgana la qué habló.

– ¿Tuviste un naufragio o algo? –

Nami le tomó la palabra.

– Creo qué lo pasaste mal allá fuera… ¿Cómo te llamas? –

La niña frunció el ceño y dijo.

– Cuando le pides el nombre a una persona. ¿No se supone qué dices el tuyo primero? –

Tanto Nami como Morgana sonrieron, valor y educación no le faltaba a la niña. Nami guiño un ojo y dijo,

– Está bien, mi nombre es Nami... –

Señalo a cada uno de los qué hay en el barco.

– El chico qué está haciendo la sopa se llama Sanji. –

– Hola. –

– El tipo con cara de pocos amigos y con un haramaki verde se llama Zoro. –

– Cierra la boca. –

Zoro está sentado y recostado contra la pared de mal humor. Morgana se puso en pie y le regañó.

– ZORO-SAN. Tal vez debería no haber dicho nada de donde estabas. La próxima vez no te ayudó. –

Nami dijo agarrando un brazo de ella para qué se volviera a sentar.

– Está muchacha es Morgana. De hecho ella fue la qué se aseguro qué estabas bien. –

– Gracias. –

– Un placer. –

– Y el chico mentiroso qué está ahí inconsciente, se llama Usopp. Y el…–

– Me llamo Luffy. –

La niña lo miró, Luffy está con una sonrisa en la cara y dijo alegre.

– El capitán de este barco pirata. –

La niña no solo se asustó, también palideció y gritó.

– ¿¡PIRATAS!? –

Morgana pensó para sí al llevarse una mano a la cara.

"– De ideas fijas no… De sin cerebro… ¿Debería arrepentirme de pedirles qué me lleven? –"

Morgana se levantó, no quería saber qué pasaría ahora, no era parte de ella y dijo.

– Nami-San, vigilare la cubierta por si hay más náufragos o algún barco en la distancia. –

– ¿Eh? Vale. Avisa si ves algo. –

– Ok, usaré mi poder. Así miraré más allá por si acaso. –

Cuando sale solo piensa mientras se dirige a la cofa.

"– Si algo le pasa a esa niña, yo misma la llevaré a su hogar si es necesario. A pesar de qué le prometí a Nami-San de qué no los atacara. Pero también hay límites. Luego hablaré con ellos. –"

Al subir se quita la chaqueta y agarra los prismáticos para vigilar el horizonte. Ahora qué estaba sola podía ordenar sus pensamientos. Ya había almorzado mientras la niña estaba inconsciente, la soledad era necesaria en ese momento. Se quedó arriba hasta qué Luffy la asustó, como estaba casi sentada en el borde cayó del susto. Por inercia agarró su chaqueta, cerró los ojos, esperaba el impacto contra la madera de la cubierta pero Zoro la atrapó, cuando los abrió él la bajó pero las piernas le fallaron. Zoro gritó a Luffy al verla caer.

– Luffy. Casi haces qué Morgana tenga un accidente. Piensa un poco las cosas. –

– Perdona, perdona. –

Morgana recuperaba el aliento, se dio cuenta qué tenía las marcas al aire, se puso de nuevo la chaqueta y dijo levantándose.

– Gracias Zoro-San. A saber qué hubiera pasado. No lo culpes solo a él, yo estaba sentada en el borde. Fue mi culpa principalmente, me relaje de más. –

Se alejó, quería seguir sola, le estaban pasando por la mente recuerdos de cómo fue desterrada y también del plan qué tenían para ella.

(Flashback - Comienzo)

Morgana está recogiendo las pocas cosas de su habitación. También fue al despacho de su maestro para coger la baraja qué le prometió y una Eternal Pose sin nombre. Ya se iba hacia el límite del pueblo cuando oyó una conversación de Proditor y Casandra.

Casandra. ¿Seguro qué funcionara eso? –

– Por supuesto, durante años Merliska y yo hemos investigado si el rumor es cierto, Y hemos descubierto qué lo es, al menos en parte. ¿Seguro qué quieres el de ella? Es poco comparado con otros seres. –

– Por supuesto, es un Luniara. A pesar de ser una niña, tiene más poder qué el resto de su familia. Solo qué todavía no lo sabe. –

Casandra parecía interesada y le preguntó.

– ¿Qué poder puede tener esa aberración? –

– Te lo diré, si me dices porque la llamas "Aberración". Solo se lo dices a ella. –

– Muy bien, recuerda qué tengo el poder de ver el futuro. Normalmente solo puedo ver el mío, pero desde hace días puedo ver el de quienes deseo. Sentí curiosidad por el de ella y vi su futuro. Creí qué estaría muerta, pero se volvió una hermosa mujer y bastante poderosa. Superior a muchos otros, incluso me atrevo a decir qué incluso podría superar al "Guardián", ya me metí antes con ella. Tan joven y tiene la mitad del control de sus poderes. Se tardan más de 10 años en controlar la mitad, pero ella en poco lo logró en apenas 3 años, yo tardé 5 y se me considero la mejor. No podía permitirme esa humillación, una Luniara, mayormente tienen varones. Y esa mocosa los superó a todos, no merece ese apellido. –

– Por una humillación. Qué mentira me has contado antes, qué ella sería mi perdición y la de mi destino. Pero ya tengo claro qué haré con ella. –

La cara de Proditor cambió de una neutral a una sádica.

– Confieso qué me gusta Morgana, es la única qué logra cumplir sus promesas aunque tarde tiempo. Por eso querías desterrarla, deseas su desesperación. Tengo una idea. Para todos solo sabrán qué fue desterrada, pero entre tu y yo, la encerramos y haremos una cosa… Aunque ya sabes qué es... –

Casandra sonrió y dijo también con un rostro sádico.

– Y yo pensando qué Merliska te manipulo, supongo, ¿Qué habló antes contigo? –

– No exactamente, intento manipularme si, pero, recuerda mi poder. Es uno poco común qué incluso el de Borondón-Sama, por supuesto para ello necesito algo también poco habitual… Pero ahora mismo lo qué necesito es… –

Tanto Morgana como Casandra se asustaron por la siguiente palabra, Morgana estaba a punto de gritar pero unas manos la hicieron callar. Al ver quien era se sorprendió.

Gaia, ¿Qué haces…? –

Hizo callarla Morgana y dijo en voz baja.

– Shhh, tranquila. No estoy con ellos. Recuerda qué fui yo quien te hizo las marcas. Yo quiero qué cumplas tu meta. Eres especial Morgana, Borondón-Sama lo sabía y me lo contó. Quiero qué vayas allí pero antes debes saber algo. Recuerda siempre qué no hay peor enemigo qué el "Falso Miedo". ¿Entendido? –

– ¿"Falso Miedo"? ¿Qué es eso? –

Tiró de ella hasta llegar a los límites del pueblo y le dijo.

– Recuerda bien esto, hasta la más mínima chispa de luz, puede iluminar la oscuridad y la sombra más pequeña ennegrecer la luz. Recuerda qué se necesita un equilibrio y tú puedes hacerlo. Y ahora vete, vete ya. –

Morgana corrió lo más rápido qué podía… Y no pararía hasta llegar allí.

(Flashback - Final)

Morgana estuvo ausente casi todo el día, no se sentía cómoda, hasta qué llegó la noche, Nami tuvo qué ir a buscarla. La encontró en la popa, sentada en el suelo mirando la estela del barco. Nami habló con ella.

– ¿Estás bien? Parece qué has estado en otro sitio durante todo el día. –

– ¿Eh? Hola Nami-San. Son solo recuerdos, quería estar sola y pensar, eso es todo. ¿Qué haréis con la niña? –

– Luffy dijo qué le pensaría mañana. ¿Te preocupa? Tranquila, no le haremos nada, pero queremos saber qué quiere. –

– Confieso qué me preocupe un poco. Sois piratas y… –

– Tranquila, lo entiendo. Pero nunca haríamos lo mismo qué otros. No somos como los demás piratas. –

Morgana solo la miró, Nami le puso una mano en el hombro y dijo.

– Venga, ¿Echamos una partida de cartas? Con apuesta está vez, si gano vas a la cama y si pierdo harás guardia. ¿Vale? –

Morgana sabía qué intentaba animarla, decidió seguirle el juego.

– Vale, y si quieres usamos otra baraja. –

– Ya verás cómo pierdes. –

– De eso nada. –

Las dos estuvieron jugando a las cartas, los chicos también las miraron y de nuevo Nami perdió. Pero está vez decidió no hacer guardia, no quería sobrecargar su cuerpo y decidió descansar, hasta qué Nami la despertó horas después siendo aún de noche.

– ¿Pasa algo? –

– Oí un ruido. ¿Vienes? –

– Te sigo. –

Las dos subieron y se encontraron con Zoro y Usopp, entraron en la cabina y se encontraron con Sanji, la niña y Luffy, la niña parecía más alegre y comiendo, aunque Luffy también estaba comiendo. Nami dijo.

– Así qué finalmente se ha dejado convencer. –

– Nami-San. –

Los cuatro se acercaron, Nami le preguntó a Luffy.

– Luffy, ¿estás comiendo otra vez? –

– Pero si no quedé satisfecho con el almuerzo. –

Morgana preguntó asombrada.

– ¿¡Estas de broma!? –

– Te comiste lo qué había en dos vasijas completamente llenas. –

– ¿De veras? –

Nami se acercó a la niña.

– Te asustaste cuando oíste qué éramos piratas, ¿no es así? –

– Bueno… –

– Está bien, creo qué ha sido una reacción normal en estos días. –

– ¿No me van a vender? –

Morgana esperaba esa pregunta, pero Usopp se adelantó.

– ¿Crees qué lo haríamos? –

– Todos se asustaron un poco, ¿eh? –

Lo qué dijo Zoro ofendió bastante a Usopp, Morgana se alejó viendo venir una pelea.

– Con está cara, ¿crees qué tienes el derecho de hablar? –

Ambos empezaron a pelear, los demás solo miraron. Pero por alguna razón se sentía el ambiente más calmado. Mientras dejaron a la niña comer, el resto preparan el barco. Cuando el sol ya había salido una explosión sono y humo negro sale de la cabina. Sanji gritó desde la cofa justo cuando la niña salía por la puerta.

– ¿Qué demonios pasa allí abajo? –

La niña miró a Sanji y dijo alegre.

– Estoy preparando el desayuno. Todos a desayunar. –

Luffy dijo alegre.

– Ah, el desayuno. –

Zoro se preocupó.

– ¿Qué clase de comida será? –

Morgana llegó a su lado, también preocupada.

– No lo sé. –

Todos fueron y encontraron unos trozos negros, por desgracia no podían saber qué era. Cada uno mirando su plato con un poco de temor, salvo Luffy. Nami preguntó.

– ¿La has hecho tú sola? –

– Si. –

– Tiene una… apariencia muy peculiar. –

– Qué aproveche. –

Mientras Luffy comía, la niña habló.

– Es por haberme salvado la vida y darme de comer.. ¡De ahora en adelante, ayudaré en lo qué pueda! –

Nami y Morgana estaban nerviosas pero lograron hablar.

– Es agradable oír eso. –

– No es necesario, pero gracias. –

Zoro se encontraba entre ellas y dijo lo qué piensan todos.

– ¿Están seguros qué esto es comestible? –

Ambas se enfadaron, Nami le piso y le metió la comida en la boca, Morgana le pegó en la cabeza para hacerle cerrar la boca.

– ¡Deja de comportarte como un crío y cómetelo! –

– ¡Así no dices tonterías! –

Usopp dijo mirando su plato.

– ¿Pero crees que está bien comerse esto? –

Luffy lo estaba comiendo y les dijo qué estaba bien comerlo, Sanji dijo dándole la razón.

– Tiene razón, la apariencia no le da el sabor. –

Todos comieron un trozo, solo pasó "1" segundo para qué cada uno pusiera mala cara y gritarán todos de golpe. Cada uno bebía agua con avidez. La niña dijo extrañada.

– ¿Qué pasa? ¿No está bueno? –

La niña comió un trozo, también puso mala cara y dijo.

– Como pica… En vez de azúcar eche pimienta. –

Sanji se rio y dijo animando a la niña.

– No pasa nada, todos cometemos errores. Solo hay qué aprender de ellos. –

Miró a los chicos y dijo serio.

– Hey, está niña puso su cerrazón y espíritu en la comida, no dejen ni una pizca. –

Zoro y Usopp lo miraron asustados pero no cambió de idea.

– Ha callar. No van a herir los sentimientos de está niña por haber hecho su primer plato… Por cierto… ¿Cómo te llamas? –

– Apis. Me llamo Apis. –

– Apis-Chan nos ha preparado su primer plato, así qué no quiero qué dejéis ni una migaja.. –

Se acercó a Nami y dijo.

– Más tarde os preparo algo para Morgana-Chan y para ti, Nami-San. –

– Gracias. –

Apis se disculpó y comentó qué la comida no era su fuerte, Sanji le dijo qué no pasaba nada pero qué se lo dejara a él. Más tarde, mientras Sanji secaba los platos, Morgana le preguntó.

– ¿Qué te pasó? ¿Un naufragio o algo así? –

– No, me había escapado de un barco de los Marines. –

– ¿Un barco de los Marines? –

– Fue durante la tormenta de hace 3 días. –

– ¿Estuviste en la tormenta en ese pequeño bote? Debes de haber pasado por muchos problemas. –

– Has tenido suerte de qué te encontráramos. –

Zoro dijo algo necesario.

– Ahora dinos porque estabas ahí. –

– ¿Eh? –

– Me refiero porque te escapaste. Los Marines no llevan a cualquiera y menos como invitado. –

Morgana pensó qué tenía una opción qué no le gustaba.

"– Zoro-San tiene razón, si no encontraba barco, no tendría más remedio qué hablar con los Marines. –"

Al pensar en esa última opción, empezó a temblar un poco, Usopp preguntó al verla.

– Oye, ¿Estás bien? –

– Si, no es nada. –

Apis no parecía tener la intención de decirlo, Sanji se adelantó a todos, prácticamente protegiendo a Apis.

– Ya basta todos, si no quiere contarlo. No la agobien por ellos. Cada uno tenemos nuestro pasado. –

Nami sonrió y dijo.

– Es verdad. ¿Pero al menos nos puedes decir de donde eres? –

– Si, soy de la isla Gunkan. –

– ¿Isla Gunkan? –

Usopp le preguntó a Nami.

– ¿La conoces? –

– No, déjame ver. –

– ¿Y a ti Morgana? –

– No, no me suena. Y eso qué recorrí parte del East Blue. –

Nami empezó a mirar en el mapa. Mientras Luffy le preguntaba el motivo del nombre, Apis explicó qué era porque tenía la forma de una barco de guerra. Nami dijo señalando el mapa.

– ¡Aquí está! –

Todos miraron el mapa, Usopp dijo.

– Está justo al lado de Grand Line. –

Nami explicó qué estaban en ruta a Grand Line y qué si ella quería podían llevarla. Apis no quería molestarle y qué si le acercaban a otro barco seria mejor, asi no se desviaban. Pero Nami explicó qué para un barco pirata era difícil acercarse a otro barco sin llegar a una pelea. Y qué no les importaba llevarla, cosa qué Luffy estaba de acuerdo ya qué quería ver la isla. Eso alegró mucho a Apis, alegrando también a todos. Pero Nami recordó algo.

– ¡Ah! Morgana, perdona. Te olvide por un instante… –

Morgana levantó una mano y dijo.

– No tienes qué preguntar, no tengo prisa realmente. Llevamos a Apis a su hogar. –

Apis se extrañó y preguntó.

– ¿Por qué la preguntas? ¿No es de la banda? –

Morgana respondió por todos.

– En realidad soy pasajera de este barco. –

– ¿¡De verdad!? ¿Por qué? –

– Por una promesa. Es todo lo qué te puedo contar. –

– Ah, vale. Lo entiendo. –

Estuvieron charlando un poco del rumbo para asegurarse. Pasó un poco el tiempo hasta qué Usopp salió para vigilar en la cofa. Nami salió tiempo después por la puerta. Al poco rato gritó Usopp.

– Se acercan barcos por la popa. Maldita sea, es un barco de los Marines. –

– ¿Marines? –

– Y no estamos hablando de uno o dos, es toda una flota. –

Ante el grito de esto, el resto qué se quedó en la cabina salieron corriendo. En efecto era una flota de los Marines. Apis parecía asustada al mirarlos. Luffy dijo todo orgulloso.

– ¡Apuesto a qué vienen a por mi cabeza! –

– No bromees qué son un montón. –

Apis retrocede, hasta tropezar con Morgana. Pero fue Sanji quien preguntó.

– ¿Qué pasa? –

– Esos barcos son de la octava división. Son de quienes me escape. ¿Qué haremos? –

Los cinco se miraron entre ellos. Pero antes de poder decidir una bala de cañón se dirige a ellos. Usopp grita mientras baja por la escala.

– ¡Aaaaaaah! ¡Empezaron a disparar! –

Tres balas de cañón impactaron en el agua, provocando qué el barco se agitara, Morgana agarró a Apis y Sanji a las dos. Cuando pasó la agitación Sanji le dijo a las dos mientras Luffy, Zoro y Usopp empezaron hablar.

–.Morgana-Chan, tu y Apis vayan a dentro. –

– Vale, vamos Apis. –

– Si. –

Algo detuvo a Apis antes de qué entraran, se quedó mirando unas gaviotas y dijo.

– Se acerca un viento. Un viento fuerte… –

Nami miró al cielo y dijo poco después.

– ¡Zoro, gira las velas al Sur! ¡Usopp, Sanji-Kun, giren a estribor! ¡AHORA! –

Mientras ellos siguen las órdenes de Nami, Morgana dijo a Apis.

– Apis, vamos. Mejor nos quedamos en cubierta, pero quiero qué te agarres a mí cuando llegue ese viento. ¿Entendido? –

Justo al decir eso, un viento repentino movió el barco muy rápido. Tal como le dijo Morgana, Apis se agarró a ella, el viento y la velocidad del barco la obligó agarrarse bien, si no hubiera sostenido a Apis, habría salido herida o despedida del barco. Luffy dijo asomando por la borda sosteniendo su sombrero.

– Vamos muy rápido. El viento es fantástico. –

Usopp hizo lo mismo, pero al contrario qué Luffy qué mira a proa, el miraba a popa en dirección a los barcos perseguidores. Dijo en burla.

– ¡Mira Luffy, estamos perdiendo de vista a los Marines! ¡Intenten atraparnos ahora!–

El barco llegó hasta una zona donde el viento dejó de soplar, al terminar Morgana soltó a Apis, pero se preocupo.

– ¿Estás bien Apis? –

– Si. –

Sanji las encontró, Morgana estaba sentada en el suelo apoyando la espalda en la pared.

– Morgana-Chan ¿Estas bien? –

– Si, dame una mano y tira de mi. –

La ayudó a levantarse, estiró un poco la espalda y dijo.

– Vaya viento tan repentino. –

Todos están alegres por escapar de los Marines. Morgana decidió sentarse en una de las escaleras y esperar órdenes. Salvo Zoro y Nami qué estaban en el piso superior, los demás estaban en la cubierta, festejando todo. Por alguna razón se sintió nerviosa, ignoraba todo a su alrededor. Algo en su ser le decía… "Cuidado". Hasta qué oyó a Zoro decir.

– Parece qué… el barco no se ha movido por un buen rato. –

Al igual qué Nami, ambas miraron, Morgana se asomó y vio el mar en calma. Uso su "Vista Astral" y vio algo qué no le gusto, se lo dijo a sí misma para no asustar mientras se vuelve a sentar en las escaleras.

– Por favor, qué no me vean. –

El grito de Nami alertó a todos. Luffy y Sanji preguntaron.

– ¿Qué sucede, Nami? –

– ¿Nami… San?–

La cara de terror de Nami asombró a todos y dijo histérica.

– ¡Maldición! ¡HEMOS ENTRADO AL CALM BELT! –

Morgana se quedó quieta, no quiso mover ni un músculo. Lo qué vieron sus ojos no era mentira, el miedo la estaba abrumada.


Espero que les guste el capitulo numero 3. Los siguientes capítulos serán más largos, ya que corresponderán a dos capítulos de la serie, lo preferí así ya que al escribir eran más corto. Y Decidí que fuera así. Dejen comentarios para darme apoyo y sigan la historia.