My Hero Academia pertenece a Kohei Horikoshi.
Las Vengadoras y X–Women pertenecen a Marvel (una división de Disney).
Camino al más grande
62: Nishimura Yoshio vs Naratai
Nishimura Yoshio, era un asesino del E.A.M, en consecuencia, era un Mukōsei, pero con armamento avanzado. Y estaba dispuesto a matar al futuro más grandioso héroe de Japón: Arashi Izuku A.K.A Naratai. Y para eso, él tenía que vigilar día y noche, la U.A, conocer al mocoso, saber lo que hacía y cuando estaba solo. ― "Si mato al mocoso, no solo tendré una fortuna." ―Nishimura sonreía, mientras usaba su Kōsei de puntería, pero solo para vigilar al muchacho ― "Sino que… el futuro será nuestro" ―el adolescente no podía salir de la U.A, pero fueron atacados, así que la lógica decía: Que si atacaba la U.A, lo haría salir al frente de la Academia y podría matar al chico. Podría vengar a sus compañeros caídos. Lo pensó mucho y comenzó a tomar notas de todo lo que veía, de todos los que lo acompañaban, escribiendo en una libreta, toda la información de aquellos alumnos que se acercaban a Izuku. Pero entonces, uno de esos días de vigilancia, vio algo que le hizo helar la sangre. ― ¿Cómo es posible que un simple mocoso de una Academia, tenga un contacto tan cercano con las Vengadoras y las X-Women? Maldita sea, esto no va a ser para nada fácil de lograr. ―Tomó entonces un par de flechas incendiarias y las arrojó al interior. Luego agarró una esfera blanca y la puso en la punta de una flecha, que también disparó, pero antes de caer dentro del campus, liberó un extraño humo y se abrió en el aire, dejando caer varios galones de magma. Repitió el proceso y arrojó más flechas con magma en el interior, mientras que las alarmas sonaban. ―Yo tengo mis flechas y tu… ―tomó otra flecha, la punta de la flecha, era cristal y en su interior, había un gas violeta, apuntó, mientras que los maestros y alumnos de tercer año salían del interior de la Academia ―tu solo tienes esos poderes, con los cuales has nacido y sin ellos… ―disparó la flecha y cuando los maestros y alumnos salieron, no tuvieron nada que les impidiera oler el gas liberado por la flecha, en forma de humo, ocasionando que los nanobots en su interior, intervinieran con sus factores de Kōsei, volviéndolos Mukōsei. Él disparó otra flecha, ahora hacia un edificio y este liberó una cuerda, permitiéndole deslizarse por la flecha en rapel, hasta el interior del edificio. ―Ya es demasiado tarde ―disparó una flecha explosiva, que mandó a volar a los maestros y alumnos de tercer año. Los alumnos se acercaron a él, para enfrentarlo y él analizó sus Kōseis, antes de emplear flechas, que funcionaban, no solo contra uno, sino contra varios: Gas de la risa que les impidiera moverse libremente, gas somnífero, flechas de golpe eléctrico, flechas explosivas, entre muchísimas otras. La luz del sol se fue por un instante, antes de que él subiera la mirada y viera a quien tanto había estado buscando ―Te saludo… bestia. ―y disparó una flecha, la cual liberó una red ―Esta red está hecha a partir de uno de los metales más pesados, que vas a encontrar… ―una ola de ácido casi lo alcanza, pero él lo esquivó y le disparó a Mina, una flecha que disolvió el ácido. Les disparó a los alumnos que estaban con Denki una red de metal y todos los que estaban cerca o que fueron capturados junto a Denki, fueron electrocutados.
Naratai se sacó la red de encima, ahora en su modo Savage e hizo girar la red, antes de arrojársela a su atacante, quien no se esperaba eso y solo pudo correr, para esquivarla. Le arrojó al rostro una flecha que liberó una potente luz, pero eso obligó al Naratai Savage a usar su oído y olfato, pudiendo así encontrar al arquero y lanzarle varios puñetazos y zarpazos, sin retroceder ante los gases lacrimógenos, las flechas que liberaban alto voltaje, ni ante las explosiones o los ácidos que disparaba su enemigo.
Pero solo lo lograba, gracias a su deseo de no rendirse y de no abandonar a sus compañeros y con un aplauso, mandó a volar a su enemigo, antes de lograr recuperar la vista, aunque todavía guiándose por el oído, siguió al arquero, quien lo atrapó con tres flechas que liberaron una altísima cantidad de pegamento, pero él golpeó el pavimento, para así dejar de estar atrapado al suelo y usó los escombros, para arrojárselos al arquero, quien tuvo que esquivar la munición de su oponente y las flechas apenas y lo ayudaban a deshacerse de los proyectiles de su enemigo, hasta que Izuku dio un segundo aplauso, mandándolo nuevamente a volar. Pero Izuku saltó, volvió a la forma Assault, lo atrapó en el aire con los tentáculos y le golpeó en el rostro, envueltos en fuego blanco, hasta lograr que hablara y le contara quien era él, antes de dejarlo caer y que fuera arrestado por la policía.
