— Gray-sama no ignore a Juvia — suplicó casi a punto del llanto — Juvia dice la verdad.

Gray le miró con enojo, era la primera vez que mostraba una cara como esa a la maga de agua, pero la situación se estaba agradando.

— Deja de bromear con eso — fastidiado zafa con brusquedad su brazo del agarre de Juvia.

Juvia miró con ojos aguados como su amor platónico se alejaba de ella.

— Juvia dice la verdad — llevo ambas manos a su vientre.

Las nubes se acumularon sobre el cielo, advirtiendo que vendría una tormenta.

Y fue más pronto de lo que varios del gremio temieron.

— ¡Gray! — el susodicho tembló al escuchar el sonoro llamado de Erza— ¡¿Qué hiciste a Juvia?!

— ¡Por tu culpa no podemos salir a las misiones! — soltó otro miembro del gremio.

— ¿Qué has hecho cubito de hielo? — pregunta Natsu aunque realmente no le importaba, solo quería matar el aburrimiento ya sea con una pequeña pelea con Gray. Aunque él y los demás fueron ignorados por el mago del hielo.

No era su culpa, Juvia era bastante intensa en varias cosas. Sabía que él tenía la mayor parte de la culpa de que fuera así, le había permitido tanto acercarse. Pero, sea lo que tenían, debía poner un límite.

Su seguridad murió cuando fue jalado de su camiseta y pronto se encontró con la furiosa mirada de la pelirroja, muy cerca de su rostro.

— ¡¿Qué has hecho?!

— ¡N-nada! — titubea sin medir el volumen de su voz, el temor infantil había dominado su yo casi adulto — Juvia simplemente está confundida — aclara con nervios.

Erza miró desconfiada.

— Vamos chicos, calmemonos — pidió la rubia — ¿Qué tal si vamos por Juvia? — Luci creyó que sería la forma más sensata de arreglar la confusión, pero Gray no estaba de acuerdo:

— ¡No! Ella solo va enredar las cosas — sus palabras captó la atención de todos. Gray maldijo internamente.

— Hablando de Juvia — Cana busco con la mirada — ¿Dónde está?

— Ni siquiera está Gajeel — se escuchó decir y el murmullo opacaron la voz de Gray que intentó tranquilizar el revuelo dentro del gremio.

— Más te vale que no le hayas hecho daño — advirtió Erza antes de soltarlo.

La pelirroja a pesar de la lluvia salió del gremio para buscar a Juvia, Lucy con una sombrilla fue detrás de su amiga.

— Eres hombre muerto — Happy lo dijo con una risa maquiavélica.

...

A pesar de que la lluvia aumentó, Gray continuó con su búsqueda, debía encontrarla antes que cualquiera del gremio lo hiciera primero. Debía hacer que ella pare está tontería, al menos que quería que muera en manos de la pelirroja.

La ventaja es que tenía una idea de dónde podría estar. Todo empapado entró a la clínica, ignoró la mirada de la recepcionista.

— Se encuentra alguien de nombre Juvia Lockser.

— Lo siento, eso es información confidencial.

Gray maldijo internamente, suspira.

— Soy su pareja — espero que con eso fuese lo suficiente para que responda su petición — me urge acompañarla.

La mujer parecía dudosa de creerle.

— Por la fuerte tormenta, las citas han sido canceladas — responde el ginecólogo listo para irse a casa.

— Pero antes de la lluvia ¿Alguien con ese nombre vino aquí?

— lo siento, es confidencial — repitió la trabajadora — le pido que se retire.

Gray más tarde que temprano salió de la clínica, no sin antes obtener lo que había buscado, detrás suyo ambos trabajadores estaban congelados.

— En una hora estarán descongelados.

Tendría que ir a todas las clínicas que había en la ciudad, con el mismo método, hasta encontrar la que fue Juvia.

— Me hubieras ahorrado todo esto, si hubiera aceptado acompañarla desde un principio — agotado busco en la lista el nombre de ella, sonríe complacido al hallarlo — fue antes que comenzará a llover — analiza, miró al doctor, que estaba tenso dentro de un bloque de hielo. lo descongelo, solo la cabeza.

— Por favor, no nos haga daño — Gray solo usaba su lado malvado que aprendió en su misión en casos necesarios, como en este caso.

— ¿Cuál fue el resultado de la señorita Juvia Lockser?

— Eso es algo — la mirada severa del mago provocó que chillara, sintió que nuevamente el hielo avanzó, lentamente hasta su barbilla, puesto decidió hablar — ¡le diré, le diré!

—Habla.

— ¡Gray! — Erza interrumpió derribando la puerta — ¡Eres hombre muerto!

Su papel de malvado se esfumó al verla desfundar la espada.

— ¡Espera! ¡Decidimos hablar antes! — Lucy solo sintió el golpe del aire cuando alzó la espada, decidió atacar.

La pesada espada cayó al piso cuando el mago lo esquivo, el polvo de los escombros se disipó revelando el cerámico del piso partido.

— No en mi consultorio — lloriqueo el prisionero.

Gray supo que Erza ya conocía la versión de Juvia, debía aclarar el asunto.

— ¡Espera! — Gray esquivó otra estocada, la pelirroja estaba decidida a no escucharlo.

Creó un muro de hielo, y corrió hacia la salida. La lluvia golpeó su cuerpo, aún Juvia estaba emocionalmente mal. Maldijo internamente.

Escuchó detrás suyo su nombre, conjuntamente con el cristal de hielos romperse.

Creó tantos obstáculos como pudo con tal que su amiga no lo rebane. Una luz detrás suyo le llamó la atención, en el aire la pelirroja apareció con nuevo traje, y una lanza muy filosa en su mano, la cual no dudo en lanzarlo.

Gray creó un grueso muro para frenar la lanza, pero está penetró toda la capa de hielo, tuvo que hacerse aún lado en el último segundo.

— ¡Erza detente! — escucha el grito de Lucy, fue tan diminuto debido al ruido de su combate y la torrencial lluvia.

La pelirroja estaba decidida a acabar con el que hizo daño a Juvia. Detrás suyo aparecieron varias lanzas, sus puntas brillaban, tan filosas.

Gray sabía que no tenía a dónde huir. Usó su poder de Devil Slayer del Hielo, un aire frío lo envolvió provocando que su cabello se pusiera en punta, haciendo notorio su marca en la frente, y en su brazo se fue apoderando de un tatuaje oscuro. Tenía pensado congelar toda la lanza, y estaba en duda si también a Erza.

Aunque dejo de pensar cuando las lanzas bajaron en su dirección, y estás fueron partidas por varios látigos de agua, la lluvia se detuvo o mejor dicho, se reunió para retener a la pelirroja.

— ¡Juvia! — la voz de Lucy contenía una alegría esperanzadora, ser espectadora de que casi matan a uno de sus amigos, había provocado un enorme escalofrío en ella.

— Juvia siente mucho el problema que creo — Juvia aparece materializada en una imagen de agua, enfrente de Gray. Sus ojos irradiaban la culpa — Gray-sama tenía razón, Juvia no está embarazada. Juvia tenía deseo de estarlo pero... — sus ojos se volvieron acuosos, y un nuevo torrente de lluvia cayó.

— Juvia — Gray se tenso, miró detrás de ella, observando que aún Erza estaba siendo retenida, la maga de agua era bastante experta en su magia. Necesitaba calmarla antes que inundara la ciudad —, era de esperarse — Juvia arrugó el ceño, evidenciando su tristeza. Suspira, era tan malo consolando —, es decir, aún no estamos juntos.

— Pero estuvimos durmiendo juntos, Juvia lo recuerda — señala materializandose, sus mejillas estaban rojas por decirlo en voz alta. En otra ocasión, ella estaría restregando sobre a cara de Lucy.

— Solo compartimos cama — suspira, debió de haberse negado, aún no se encontraba preparado para tener una relación con ella, debía volverse más fuerte para poder protegerla, y aprender a ser más afectivo —. Lo que dije está mal, no debí de usar esas palabras — deja caer sus manos en los hombros de ella —, realmente me siento culpable, y debí de acompañarte, no tenía porque dejarte sola en esto.

Juvia aún no se sentía capaz de alzar la mirada, de verlo. La vergüenza que sentía era mucha, casi provocan que mataran a su Gray, si no fuese porque encontró a Happy que le dijo de una manera macabra que Erza quería matarlo, y Cana aumentando más su temores.

Sintió unos fuertes brazos y pronto el frío pecho de Gray. Su sorpresa fue mucha, incrédula subió la cara. Se veía tan cerca, estaban a la luz del día tan cerca el uno del otro. El corazón de ella se disparó.

— Lo siento Juvia, no volveré a dejarte sola.

Sus palabras fueron un plus, sonriente lo abrazo.

— Juvia es la que debe disculparse Gray-sama — aun así recordaría este momento.

...

— Un falso embarazo — Erza sintió un fuerte bochorno, estaba pensando que Gray rechazo al hijo de Juvia. Tan equivocada.

— ¿Juvia quiere saber cómo supo que ella pensó que estaba embarazada? — pregunta muy interesada — Juvia no le dijo a nadie.

— Es que — Lucy ríe nerviosa — encontramos rastro de hielo en clínicas específicas, la lluvia constante — ríe.

— Juvia lamenta su comportamiento, no volverá a ocurrir — se inclina mirando a todos, sintiéndose muy culpable por el drástico cambio del clima y por el revuelo hacia Gray.

— Menos mal que las cosas se aclararon, o serías enterrado —Gajeel golpea con rudeza la espalda de Gray que suspira agotado.


Gracias por llegar hasta acá. Espero que hayan sido de tu agrado los one-shots que escribí de ellos.