Estoy de regreso con el fanfic, espero hayan disfrutado el capitulo anterior. Ahora sí, retomemos la historia.

Capítulo 7: Un Nuevo Día

Poco antes del amanecer, la pareja ya se encontraba despierta, terminando de arreglarse, para así salir de su nuevo hogar y dirigirse al departamento que el omega compartía. El camino fue tranquilo, sosteniendo una charla amena mientras el sol se hacía presente, hasta que por fin llegaron al edificio donde residía Subaru.

-Muchas gracias por traerme.

-No ha sido nada, fue un placer.

-Entonces, ¿Te veré después del trabajo?

-Eso quiero encanto, pero por desgracia recibí una solicitud de trabajo. Encontré la carta en la puerta esta mañana, la revise poco antes de que saliéramos, no es nada del otro mundo, pero creo que me tomara un poco de tiempo. Así que puede que no te vea hasta bien entrada la noche, sino es que hasta mañana temprano.

-¿Es uno de esos trabajos de cobrar deudas?

-En efecto, un tipo que tiene varias deudas con diferentes negocios, me han solicitado para su captura y entrega a las autoridades.

-Comprendo, solo ten cuidado por favor. No quiero que vayan a lastimarte.

-Aww mi lindo omega se preocupa por mí. Jaja, no tienes de que apurarte mi tierno Subaru, estaré mas que bien, es un simple humano, nada que no pueda manejar.

-Aun así, siempre está la posibilidad de que salgas herido.

-Soy mucho mas fuerte de lo que imaginas, te aseguro que capturarlo no será un problema, es mas que nada el encontrarlo lo que me tomara tiempo.

-Solo prométeme que no te confiaras. Por favor, solo quiero que estes bien.

-Si te hace sentir mas seguro, lo prometo, tendré mis precauciones, amor.

-Gracias, estaré esperando para verte.

-Igual que yo, pero antes de irme, agáchate un poco.

Subaru lo hizo y sintió como Garfiel lo tomaba de la camisa para así darle un beso, este lo correspondió al instante. Al separarse, ambos se dieron una sonrisa alegre, para luego ir por caminos separados. Subaru entro al edificio, subiendo al segundo piso, toco la puerta del departamento, el cual pronto se abrió por Otto, el cual se alegro al ver a su amigo, apurándolo a entrar para ponerse al día. Otto preparo un ligero desayuno en la pequeña mesa de la sala, mientras Subaru buscaba sus vestimentas para el trabajo, dejándolas en su cama antes de regresar con su amigo.

-Cuéntame, ¿Cómo estás? ¿Qué sucedió? Cuando no regresaste inmediatamente pensé lo peor, pero entonces pensé en otra posibilidad y me tranquilicé, pero luego pensé en otro escenario negativo y ahora estaba pensando si debía ir a buscarte o darte mas tiempo.

-Tranquilo, no paso nada malo, ningún escenario negativo como podrías imaginar, al contrario, creo que fueron uno de los mejores días de mi vida, pase unos momentos tan agradables. Garfiel y yo pudimos conocernos mejor, pasar tiempo juntos, hablar de nuestro futuro, el hogar que ahora será de ambos. Puedes creerme Otto, en verdad siento que las cosas están sucediendo de forma increíble, es como si todo el miedo y las dudas que tuve al principio cuando nos conocimos, se hubieran disipado. Ah, ahora apenas puedo esperar para vernos de nuevo.

-¿No vendrá pronto?

-Tiene un trabajo que atender, tal vez regrese mañana por la mañana.

-Comprendo. Cielos, en serio que esto es sorprendente, hace poco estabas muriéndote de miedo y ahora lo extrañas y solo dejaran de verse por un día. Vaya que todo ha cambiado.

-No solo eso, hay algo importante que debo decirte.

-Anda, no me dejes con la duda, cuéntame.

-Me iré a vivir con Garfiel dentro de poco.

-¿Cómo? ¿Ya tan pronto?

-Si, tome la decisión.

-Entonces… ¿Te iras?

-Si, lo siento, se que esto es repentino y seguro te causare problemas por esto.

-Bueno, no es la noticia que esperaba, pero supongo que debía tenerla en cuenta tomando en cuenta la situación.

-No pienso irme mañana ni al día siguiente, podrían ser unos días, dos semanas tal vez, puede que más, no quiero dejarte con problemas del departamento, la renta, los gastos, además aun debo pagarte las cosas que destruí el otro día cuando estaba nervioso.

-Hey Subaru, calma, calma, no debes preocuparte por todo eso.

-¿Cómo no? Acabo de decirte que me iré, siempre nos hemos dividido los gastos y también…

-Tranquilo, no pienses en todo eso.

-¿No estas molesto conmigo?

-En absoluto, Subaru, estas por comenzar una nueva etapa en tu vida y parece que las estas comenzando de la mejo forma. No te imaginas cuanto me alegro por ti, ahora puede que esto si me tomara algo desprevenido, pero de ninguna forma pienso reclamarte.

-Pero entonces ¿Qué es lo que harás?

-Sabes, la verdad el trabajo de mercader es mas sencillo cuando estas viajando constantemente. No me malinterpretes, es genial tener un lugar al cual volver, pero mi trabajo deja más ganancia sino tengo que estar pagando un alquiler constantemente, en especial cuando puedo estar fuera por semanas y apenas aprovecho el lugar. Sera mas sencillo estar pagando posada por una noche o un par de días según el caso.

-Entonces, piensas estar de nómada a partir de ahora.

-Podría decirse, no es un mal estilo de vida, en realidad me gusta acampar y poder pasar la noche junto a una fogata. Una vez que tenga suficiente dinero, puede que busque un lugar propio, cuando llegue ese día, ten por seguro que te invitare a que pasemos tiempo juntos como ahora.

-Ah, Otto, ten por seguro que aceptare esa invitación. Sabes, hay una habitación disponible en mi nuevo hogar, debo hablar con Garfiel antes, pero estoy seguro que podrás quedarte con nosotros cuando vengas a la ciudad.

-Genial, entonces si tendré un buen lugar a donde volver.

Los dos jóvenes tomaron su desayuno, posteriormente Subaru fue a cambiarse, una vez que estuvo alistado. El y Otto salieron, subiendo a la carreta de Otto, este tenía una serie de entregas en la ciudad, por lo que podía llevar a su amigo de paso a su trabajo sin problema alguno. Mientras se acercaban a la mansión, su platica continuaba sobre los cambios en sus vidas y como seguirían a partir de ahora.

-Ya estamos por llegar.

-Si y creo ver a Reinhard detrás de la reja, seguro se ha preguntado por mi ausencia.

-Debe haberse preocupado como yo, estoy seguro que una vez que le expliques la situación se calmara por completo.

-Cierto, hay mucho que tengo que decirle ahora.

-Bien, aquí estamos, que tengas una buena jornada, puede que me tarde con las entregas, así que no te sorprendas sino he vuelto para cuando regreses al departamento.

-No hay problema, gracias por el viaje -bajando- te vere mas adelante entonces. Por cierto, dijiste que pensaste en otra cosa en mi ausencia, una más tranquila, ¿Qué era con exactitud?

-Hay tu ya sabes, bien dijiste que tu celo se iba a adelantar.

-¡Oye! ¡No saques ese tema!

-Entonces si sucedió ¿Cierto?

-Agg, Otto. -avergonzado-.

-Descuida, no indagare, en cualquier caso, parece que la debes haber pasado bien. Eso es genial, espero tener sobrinos próximamente.

-¡Hay, ya cállate y vete a trabajar!

-Jajaja nos vemos Subaru, nos vemos futuro sobrino.

-¡No, estoy! ¡Agth! ¡Aun es muy pronto!

Subaru fue hacia la entrada de la propiedad y al abrirse la reja se topo con su amo el cual se veía preocupado, relajándose un poco al ya tenerlo frente suyo.

-Hola Reinhard.

-Subaru -acercándose- que bueno es tenerte de vuelta.

-Perdona, es solo que han pasado varias cosas tan repentinamente. Me encantaría contártelas mientras preparo la comida ¿Te parece bien?

-Claro, quiero escuchar todo.

Ambos entraron a la mansión y el pelinegro comenzó a relatarle a su amo lo acontecido, este prestaba atención mientras tomaba pequeños bocados de la comida ya lista sobre la mesa. Interrumpiendo ocasionalmente para hacer preguntas.

-Entonces… ¿Tu y él?

-Si, pasamos mi celo juntos. Este fue muy rápido, seguro porque se adelantó.

-Es posible, he escuchado de algunos casos como ese. ¿Te sentiste bien?

-En realidad, fue maravilloso. Pero por favor no me hagas entrar a detalles, son cosas personales y preferiría que la mayoría de eso fuera solo asunto de nosotros.

-Perdona, no era mi intención entrometerme. Imagine que debía ser lo que estaba pasando, además, tu aroma te delata.

-¿Qué?

-Hay, siempre se te olvida que un alfa es muy perceptivo a estos temas.

-¿Un segundo? ¿Dices que mi aroma me delata? ¿Huelo diferente? ¡Alto! No me digas que acaso ya estoy…

-¿Esperando? Es demasiado pronto, tonto. Lo que intento decir, es que tu aroma esta mezclado con otro, el de Garfiel por lo que entiendo.

-Ah ya, te referías a eso jaja ya me estaba preocupando.

-Si, hay dos escancias en ti ahora, si en las próximas semanas, no tienes otro cambio, deduzco que no estarás esperando.

-Eso espero, porque la verdad, me gustaría dejar pasar más tiempo antes de tener un hijo.

-¿Qué dice tu alfa?

-También quiere tiempo para nosotros.

-Entonces es sensato, no olviden que un bebe no es cualquier cosa.

-Lo tengo muy presente.

-Ah, bueno mis dudas ya están despejadas, debo ir a atender algunos pendientes, te dejo para que continúes con tus tareas.

-Claro, te veré mas adelante. ¡Alto! ¡¿Te comiste todas las galletas con cubiertas de queso?! ¡Vuelve aquí! Esto es injusto, ahora deberé preparar más.

Subaru rehízo las porciones, para luego llevar los platillos al comedor principal con ayuda de otros sirvientes. Posterior a eso, comenzó con sus demás tareas en la mansión, realizando limpieza general, así como jardinería. Una vez terminado, regreso a la cocina, tomando sus cosas y despidiéndose del reemplazo de la tarde. Mientras dejaba los terrenos de la mansión, vio a Reinhard realizando sus practicas con la espada, despidiéndose a la distancia. Dejando la mansión, comenzó a tomar su camino hacia el departamento, por alguna extraña razón, el recorrido le pareció demasiado rápido, estando ya frente al edificio que llamo hogar durante mucho tiempo. Una vez dentro, se tomo un momento para apreciar el lugar, dentro de poco lo dejaría, Otto se iría, nuevas personas ocuparían el departamento, pero los recuerdos de los buenos momentos que paso aquí, serian algo que se llevaría con el a su nueva vida.

Mientras realizaba limpieza en el departamento, su mente divagaba en el futuro que les esperaba. Estaba seguro de que aún había muchas cosas por descubrir en su nueva relación, sin embargo, ahora mas que nervioso se sentía listo para enfrentar lo que pudiera encontrar. Garfiel se había abierto a el al confesarle de su problema con la transformación, un detalle como ese podía ser peligroso si llegaba a las personas equivocadas. Ahora confiaba en que, estando juntos, podría ayudarle a superar ese problema y tener total control del cambio. Él también se había abierto al mencionarle sobre como otras alfas solían referirse a él, causándole sin que hubiera querido aceptarlo, un problema de inferioridad. Ahora las palabras de Garfiel resonaban en su mente, ayudándole a curar esas heridas poco a poco, haciendo que volviera a recuperar autoestima perdido.

Continuo en sus deberes, procediendo a dirigirse a la cocina, al asomarse por la ventana noto que la tarde ya se estaba marcando muy bien en el cielo, el día se le había ido rápidamente y él ni siquiera había almorzado, por lo que se puso a preparar comida, la cual terminaría siendo cena para cuando acabara. El joven cocinaba con entusiasmo, mirando ocasionalmente por la ventana. Internamente, esperaba que Garfiel llegara en cualquier momento para que pudieran aprovechar una cena juntos antes de que Otto volviera. Mas cuando termino de preparar la cena para todos, su pareja no apareció, se afligió un poco por el hecho mas se dio un par de palmadas en la cara para recomponerse, no podía deprimirse por un asunto tan trivial, en especial porque su alfa bien le había informado que podría llegar hasta el siguiente día. Llevo la comida al pequeño comedor en la sala, para tomar parte de lo preparado y ponerlo en su plato, dio un primer bocado sintiéndose alegre por el sabor, quería compartir su pensamiento hasta volver a percatarse de cierto detalle.

-Cierto… estoy solo… vaya, si que es extraño, ha pasado algo de tiempo desde que no tengo a nadie a mi alrededor. Ha, prefiero comer acompañado.

Subaru continuo en silencio disfrutando de la cena mientras escuchaba el movimiento habitual en el exterior. Su mirada se fijo en la puerta principal cuando noto que esta se abría, siendo Otto quien llegaba con una sonrisa en su expresión.

-Hola, lamento la tardanza.

-No hay problema, siéntate, hay mucho para disfrutar.

-Y hablando de disfrutar, he traído algo para celebrar nuestro nuevo y brillante futuro, en especial el tuyo. ¡Mira lo que he comprado!

-¡Imposible! ¡¿Eso es vino de Kararagi?! ¡¿Dónde lo conseguiste?!

-En efecto, vino de Kararagi, lo compre esta tarde a un mercader oriundo de haya, si hubieras estado ahí te sorprenderías de la demanda que tenía, era una multitud de gente peleando por él. Quizá después podría importarlo y venderlo aquí jaja.

-No es mala idea, aunque imagino que debió costarte mucho.

-Hay eso no importa, no en esta ocasión. Hay que disfrutar del momento, como dije, toca celebrar por el futuro. Ahora deja voy por unas copas para que degustemos de esta delicia.

-Ah apenas puedo esperar a probarlo, siempre sabe tan… ¡Un momento!

-¿Qué pasa?

-Otto, no puedo tomarlo.

-¡¿Qué?! ¡¿Por qué no?!

-Acabo de pasar mi celo y se que fue recién, pero yo podría ya estar…

-Hay tonto, me asustaste, pensé que era algo serio.

-Esto es serio.

-Perdona, no me explique bien. Lo que intento decir es que no deberías preocuparte tanto, lo acabas de pasar. Estoy seguro de que puedes tomar una copa o dos sin ningún problema, no es como que mi futuro sobrino vaya a formarse en un estado avanzado en solo dos días.

-Otto, hablo de verdad.

-Igual que yo. Mira, no tenemos confirmación de si en verdad ya estas esperando. Lo cual espero que no y si es el caso, con mayor razón debes tomar ahora en este instante antes de que pase mas tiempo, créeme vas a tener que pasar una larga abstinencia de vinos y licores si hay niño en camino, así como los primeros meses de su nacimiento.

-Ag… supongo que no puedo discutir eso.

-Te lo digo, una copa o dos no te perjudicaran. Sabes que también quieres beberlo, ¿Oh prefieres esperar un año?

-… Tsk jajaja maldito tonto, bien tomare un poco.

-¡Ese es el espíritu!

Una vez que tomo asiento, Otto procedió a servir a ambos, chocaron las copas y aprovecharon para tomar un largo trago, estando muy contentos por el sabor del vino extranjero.

-Cielos, es tan delicioso.

-¡Lo se! ¡Es maravilloso!

-Ahora agradezco que me convencieras, hubiera sido un crimen esperar todo un año para probarlo.

-Te lo dije, esto vale la pena.

-Ha, me gustaría que Garfiel estuviera aquí y lo probara.

-Vaya que ahora si ese niño te tiene vuelto loco.

-¿Tu crees?

-Estas pensando en el y lo quieres a tu lado, es claro que sí.

-Bueno, no puedo evitarlo, todo esta sucediendo tan bien.

-Si soy sincero no me provoco una buena primera impresión, pero veo que te hace feliz, así que supongo que me equivoque con él.

-Estoy seguro que serán bueno amigos con el tiempo. Puede parecer muy rudo en el exterior, pero es realmente genial cuando lo vas conociendo.

-No dudo que lo sea.

-En serio, es fuerte, muy hábil, realmente valiente y su sonrisa lo hace tan radiante que… aght…

-Jajaja, veo que te tiene muy enamorado.

-Jeje disculpa me deje llevar -tomando otro trago-.

-Tranquilo no te tienes que disculpar. Pero si hay algo que quiero preguntarte -tomando vino- ¿Ya pensaron en un nombre?

-¿Nombre?

-Para su primer hijo.

-¡Otto!

-Jajaja tranquilo estoy jugando, se que es demasiado pronto jajaja.

-Jajajaja hay amigo, siempre sabes como hacerme reír jajaja.

El dúo siguió divirtiéndose durante su cena, Subaru tomo sus dos copas y dejo el vino, pero Otto siguió tomando insistiendo que tomaba en su lugar. Tras unas dos horas, Otto estando visiblemente ebrio era llevado a su cama por su compañero, una vez ahí cayo dormido casi en el acto. Subaru regreso a la sala para recoger las cosas y llevarlas al lavadero, mientras lavaba y guardaba las cosas seguía mirando por la ventana, podía escuchar aun movimiento en el exterior comprobando que era una noche activa para la gente. Sin embargo, la persona que esperaba seguía sin regresar. Tras terminar, fue a su propia habitación para disponerse a descansar, se cambio por una ropa cómoda y miro el collar que Garfiel le había regalado provocándole una alegre sonrisa, procedió a acostarse y dormir en calma.

-(Te extraño tanto).

La noche transcurrió sin problema alguno, teniendo el joven un sueño tranquilo y reparador. Cuando comenzaba el siguiente día, el joven estaba alistándose mientras en la sala, su compañero se encontraba tirado en el suelo, recargado contra un sillón, sufriendo una fuerte resaca.

-Aggg ese vino…es genial.

-Te dije que te controlaras, pero quisiste seguir bebiendo.

-No pude evitarlo, era delicioso.

-Si, pero mírate ahora, apenas puedes con tu alma. ¿Estas seguro de querer quedarte solo?

-Tranquilo, puede hacerme cargo de mí mismo.

-Bien, ya debo retirarme a trabajar. Igual tratare de volver pronto para verte.

-Gracias.

-Hay una bebida para ayudarte con la resaca, la deje en la mesa.

-Gracias hermanito. Ten un bonito día.

Subaru salió del edificio y se puso camino a la mansión. En el camino estaba absorto en sus pensamientos, haciendo su recorrido en forma automática hasta que una voz llamándolo lo trajo de vuelta a la realidad, miro hacia su lado izquierdo, viendo a unos metros suyo a aquel que ahora era su mundo.

-Garfiel.

-Buenos días encanto.

Ambos se abrazaron de forma efusiva, pues, aunque solo había sido un día, era claro que los dos deseaban seguir juntos.

-Cuanto me alegra que estes de vuelta.

-Perdona no haber vuelto antes, ese inútil fue difícil de rastrear.

-Comenzaba a preocuparme, te espere durante todo el día y tampoco llegaste esta mañana.

-Oh mi lindo omega estaba asustado por mí, pero que dulzura. Sin embargo, yo también solo pensaba en ti, por un instante casi se me olvida seguir la pista por querer regresar a tu lado. Tuve que concentrarme bien en esta ocasión y con la paga que acabo de recibir, quiero que salgamos a cenar esta noche.

-Estaré encantado, de verdad quiero pasar tiempo juntos.

-Y así será, pero por ahora, ¿Qué tal si te escolto a tu trabajo?

-Muchas gracias.

Durante el trayecto, Garfiel relato como fue el trabajo en esta ocasión, teniendo la atención de Subaru en todo momento. Justo cuando estaban por llegar a un punto importante de la historia, llegaron a las afueras de la mansión, deteniendo este el relato y dejando con la intriga al omega.

-Por favor, tienes que contarme.

-¡No! Lo hare en la noche, encanto.

-Estas siendo injusto conmigo.

-Jeje tal vez un poco.

-Bien, será como tu digas.

-Te estaré esperando en tu departamento, por ahora, ten un buen turno trabajando, amor.

Garfiel acorto la distancia entre ambos uniéndose los dos en un beso para acto seguido sonreírse. El primero se alejo mientras el otro ingresaba a los terrenos de la mansión. Ya dentro de esta y en la cocina, Subaru cocinaba con alegría y en forma eficiente, hasta que recordó un pequeño detalle que lo hizo detenerse en seco.

-Demonios, olvide decirle algo a Garfiel. A esta altura ya debe estar ahí.

Entre tanto, este se encontraba en el departamento, sosteniendo a Otto quien estaba vomitando en el baño.

-Eso es, déjalo salir (Maldita sea, Subaru, no quiero estar cuidando de este idiota).

Continuara…

Espero que hayan disfrutado de este capítulo. Próximamente veremos como comienzan a vivir juntos nuestros protagonistas, una nueva fase para la vida de ambos, ¿Qué nuevas vivencias les esperan? Lo veremos más adelante.

También voy a tratar de que esta historia avance un poco mas rápido en el sentido del tiempo, les agradezco por su paciencia. Y Muchas gracias por sus lecturas.