Un nuevo año y comiezo para Marcy.

Las vacaciones de verano habían terminado recientemente y los alumnos de la secundaria Saint James iniciaban ese día su regreso a clase, algunos más animados que otros como era lógico, cada quien con su grupo de amigos o amigas.

Si, sin duda era hora de un nuevo semestre para aquellos jovenes, aunque en aquel momento Marcy Regina Wu caminaba por la acera algo decaída y a que se debía todo esto, pues a una serie de cuestionamientos que la joven taiwanesa se había hecho desde haca tiempo y se hacían cada vez un hueco más profundo en su cabeza.

¿Como una amistad tan larga puede terminar de repente? ¿Porqué ya no se sentía tan comóda con Anne y Sasha sus amigas de toda la vida?

Podría decirse que "la gota que derramo el vaso" fue cuando teniendo una de sus acostumbradas pijamadas, otra vez Anne y Sasha se quedaron dormidas en medio de una de las películas favoritas de Marcy. Si bien esta y otras situaciones ya habían sucedido con anterioridad la verdad es que esto empezaba a cansar a Marcy.

No era la primera vez que no entendían o trataban de entender sus gustos o que por alguna razón se sentía "alejada" de ellas, como si algo en su amistad ya no funcionara.

Si bien al principio cuando se conocieron siendo niñas muy pequeñas no hubo gran problema con los gustos de cada una, era obvio que al crecer estos se acentuarían y notarían más.

Tanto Sasha y Anne eran del tipo más deportivo, Sasha era una líder nata, mientras que Anne era más compasiva y agradecía lo mucho que la llegaba a cuidar pese su torpeza.

Pero entonces porque sentía una especie de tristeza, porque sentía o no entendía que rumbo podía seguir teniendo esta amistad, valía la pena seguir con esto.

En ese momento Marcy se sorbio la nariz y limpiaba algunas lágrimas.

-Ay no otra vez- dijo al tiempo que con el dorso de la manga de su uniforme tallaba sus ojos, agradecía que al menos la calle estuviera sola, lo último que le faltaba es que la gente se fijará en una adolescente llorando en plena acera.

-¿Acaso estoy pasando por un cuadro depresivo?- se preguntaba Marcy.

Y es que como lo dicho anteriormente no era la primera vez que le pasaba al pensar en Anne y Sasha tanto una mezcla de recuerdos felices como tristes llegaban a su mente y estos a su vez le hacían reflexionar una pregunta importante.

-¿Mi amistad con Anne y Sasha sigue valiendo la pena?

Una parte de ella le decía que aquello era una cuestión peligrosa que podría llevarla a un punto sin retorno o también a nuevas oportunidades.

Debería entonces buscar nuevas amigas, cambiar sus gustos en favor de Anne y Sasha, cambiarse de escuela, de look.

-Ahhh- Se sobaba la cabeza mientras un montón de pensamientos se juntaban en su cabeza, tenía sus desventajas ser tan inteligente y en su caso sobre pensar las cosas.

Aunque algo era seguro y era que ese día no tenía ánimos para encontrarse con Sasha y Anne, al menos en el camino a la escuela, por lo cual decidió tomar otra ruta a pie. De todos modos tendría que lidiar con ellas en clases.

-No había notado que caminar un rato sola me ayuda a despejar mejor mi mente, al menos por ahora- decía Marcy mirando el cielo despejado de aquella mañana.

Y es que también algunas cosas habían estado cambiando en Marcy, pues si bien seguía amando los videojuegos, ya no se la pasaba todo el día distraída con ellos, incluso en clases como solía hacer. Ahora lo hacía después de clases y tras terminar sus deberes, empezaba digamos a tener una mejor organización, este cambio paulatino también tanto sorpredió como agrado a sus padres, ya no estaba tropezando cada cinco minutos (o menos) con cualquier cosa.

Necesitaba tiempo para pensar bien las cosas y necesitaba bajar un poco las distracciones y esto a la larga le fue ayudando aunque fuera un poco a no estrelllarse contra los cubos de basura, dejar abierta su mochila con todo cayendosé o cosas más peligrosas.

-Poner atención en mi camino me ha ayudado a evitar accidentes vergonzosos- recordando como incluso más de una vez termino prendiendosé fuego.

-Y Anne no siempre va a estar ahí para mi, a veces siento que me volvía más bien una carga para ella, soy una tontita no es así- rió para sí misma.

Pero bueno era momento de dejar un poco de lado la auto compasión y seguir el camino a la escuela, quien sabe quizás aquel semestre traería cambios o sorpresas para Marcy Wu.


Al entrar al salón de clases saludo a sus amigas como siempre y algunos compañeros con los que se llevaba bien. También hubo la sorpresa de que algunos alumnos nuevos se integraban a partir de ese año.

Entre ellos una chica rubia que le llamo la atención pues se parecía un poco a Sasha, vestía el mismo uniforme escolar con falda gris un poco más larga que la media que le llegaba un poco más allá de las rodillas, un brazalete de lo que parecía plata en la mano derecha y era de notar también sus ojos verde esmeralda.

-Les presento a su nueva compañera Nicole Lambert- dijo la maestra presentandola.

-Y bien Nicolle puede decirnos algo sobre ti a la clase- sugirió la maestra amablemente.

-Pues me gusta la esgrima y la historia, mis padres y yo nos mudamos hace unos pocos meses a California y están por abrir un restaurante de comida francesa, "La Trufa Otoñal" y perdón si suena a comercial pero la inaguración será este fin de semana por si gustan ir, puede consultar conmigo la dirección- termino diciendo con una amplia sonrisa y una reverencia en que tomo los pliegues laterales de su falda, como una Dama de una Antigua Corte.

Además esa chica emanaba tal carisma que los murmullos de la clase resultaron en una recepción positiva.

-Oye es muy bonita y educada- dijo un chico.

-Comida Francesa que elegancia- agrego una chica.

-Esgrima eso suena genial- dijeron otros.

-Vaya es todo un personaje esa chica- pensó Marcy con admiración.

Finalmente se sentó a unos cinco pupitres del suyo y comenzó la clase, y claro para alguien como Marcy eso era hasta divertido y más cuando se trataba de una clase de Ciencias o Matemáticas, para una alumna sobresaliente como ella eso era pan comido.

El resto de las clases transcurrió con normalidad hasta la hora del almuerzo, ahí estuvo platicando un rato con Anne y Sasha sobre su día y otras cosas como siempre.

Vio como rápidamente mucha gente se acercaba a Nicole en la cafetería, sin duda esa chica tenía todo para ser aceptada.

-Ojalá yo tuviera ese nivel de confianza- suspiro Marcy.

-Pasa algo Marcy- inquirió Anne mientras comía un sandwich.

-No estoy bien Anne solo estaba un poco pensativa- respondió Marcy.

Sasha arqueó una ceja con duda mientras bebía despreocupada una cajita de jugo de naranja.

Terminado el almuerzo Anne fue a su práctica de Tennis, Sasha a la de Porristas y Marcy a estudiar un rato en la Biblioteca.

Cuando recorría los pasillos y al ir algo distraída chocho con otra chica, esta era de aspecto asiático como ella pero más marcado, se disculpo rápidamente por aquello y vio como se le cayó algo y se ofreció a darselo.

Aunque no tardo en quedarse viendo aquel objeto con gran curiosidad y sorpresa, pues se trataba de un manga y no de cualquiera sino de uno de sus historias de los videojuegos favoritas: "Crónicas de Vagabondia".

-¡Oye creo que se te cayo esto!- le aviso rápidamente a la chica pues esta en cuanto se puso en pie comenzó a andar rápidamente.

Cuando la chica se volteo su expresión cambio a uno de alarma y miedo, tomando rápidamente de las manos aquel manga.

-Por favor no digas nada, mi familia no comprendería- dijo en voz baja.

-Oh ok- respondió Marcy un poco extrañada por la situación.

Continuo su camino a la biblioteca y después de tomar unos cuantos libros se sentó en uno de los tantos escritorios vacíos sin embargo pudo escuchar que no estaba del todo solo, pues escuchaba el constante sonido de lápices rasgando el papel en aquel casi absoluto silencio del lugar.

Alzó la vista en busca de la fuente de aquel sonido, y menuda sorpresa era aquella chica con la que chocó.

Sigilosamente se acerco lo más que pudo a un lado de uno de los estantes para enfocar mejor la vista y ver lo que estaba haciendo aquella chica.

Estaba dibujando uno de los personajes de su manga con buena habilidad, se podía notar que llevaba tiempo practicando.

Pero como siempre aquel sigilo no le duro mucho a Marcy pues con su torpeza innata al tratar de seguir acercandose choco con uno de los carritos para llevar libros, alertando a la chica. Por lo cual cerró abruptamente sus cuadernos con un ligero sonrojo.

-Se te ofrece algo o acaso me estas siguiendo- inquirió a la defensiva.

-No, no, no era eso- respondió alarmada Marcy.

-Es solo que me gusto ese dibujo que hacías de Crónicas de Vagabondia, es mi historia de videojuegos favorita.

Y Marcy haciendo una seña de "que le diera tiempo", saco rápidamente su consola Switch y le mostró que decía la verdad.

Eso calmo la actitud aprensiva de la otra chica y aún con algo de dudas se acerco a Marcy comprobando lo que decía aquella torpe chica de cabello negro.

Su semblante cambio a uno de genuino interés y cierta alegría al encontrar otra persona que le gustaba lo mismo que a ella.

Se sentaron y se presentaron formalmente.

-Me disculpo por mi sobresalto anterior, pero digamos que no soy muy abierta a mostrar mis gustos a desconocidos... o a la gente en general o a mis padres- susurró esto último apenada.

-Me llamo Izumi, por cierto, Izumi Tonewaga- corrigio la chica asiática.

-Marcy Regina Wu, mucho gusto- secundó la taiwanesa.

Fue entonces que una nueva "chispa" comenzó ese día para esas dos chicas pues se pasaron casi toda una hora o más hasta que sono la campana indicando otras clases y que debían retirarse por ahora.

-Bueno mira parece que es cierto que el tiempo pasa volando cuando te diviertes- asevero la japonesa.

-Tienes razón será mejor que volvamos a clase, por cierto de que clase eres- le preguntó Marcy.

-Oh soy del salón 2-C.

Entonces Izumi le dijo de sus horarios y cuando podrían volver a encontrarse en la biblioteca nuevamente, algo que a Marcy le pareció bien.

Durante la siguiente semana se noto un cambio notable en Marcy ya no estaba tan decaída, se le veía más animada, más feliz por decirlo de forma simple.

-Es interesante ver como se manejan los viajes en el tiempo en esta historia como una segunda oportunidad, corregir los errores, salvar a otros que se perdieron en el camino y de cambiar el nefasto destino, incluso desafiando los designios de los Dioses- opino Izumi sobre la historia de Crónicas de Vagabondia.

-Los Profetas no lo saben todo y a veces cuando se busca evitar una profecía esta se cumple más- secundó Marcy llevandose una mano al mentón pensativa.

-A veces me preguntó si el camino que los héroes eligen, es algo que de verdad eligen o son solo peones de los caprichos del destino, hasta donde llega verdaderamente el "libre albedrío".

-El Hombre elige, el Esclavo obedece- reflexiono dentro de su mente Izumi.

Marcy luego le contó acerca de esa película tipo "Señor de los Anillos" que le gustaba mucho y se sorprendió pues Izumi no solo conocía la película, sino que se había visto la versión extendida de cuatro horas que explicaba todavía más a profundida el Lore y hasta los libros tenía.

-Oye no te gustaría ir a tomar algo este fin de semana, quizás podríamos ir al Cine este fin de semana que te parece aunque claro primero necesitaría que me des tu número y claro yo te daría el mío- sonó un poco avergonzada Marcy, pues sin darse cuenta de a poco había conseguido una nueva amiga.

Izumi mostró una genuina sonrisa ante eso y pensó porque se había tardado tanto en pedirlo, fue en ese momento que se dió cuenta que esa chica Marcy Wu se había convertido en la primera legítima amiga que hacía en su vida, pese a lo seria que podía ser a veces no podía dejar de expresar su buen humor ahora.

-Cla... Claro ahora mismo te lo pasó Marcy- dijo efusivamente Izumi.

-Te parece bien este Domingo, es cuando estoy libre- agrego la chica japonesa.

-Claro me parece muy bien-

Casi como un acto reflejo y antes de que se dieran cuenta ambas ya estaban abrazandosé aquello las tomo por sorpresa.

-Ay perdón me deje llevar- dijo Izumi con un leve sonrojo.

-No te preocupes, somos amigas ahora, después de todo no- respondió Marcy con seguridad como pocas veces mostraba y una genuina alegría.

El fin de semana llegó pronto y con ello un par de chicas conversaban animadamente, sobre la escuela, un poco de su familia por lo cual Marcy pudo notar que los padres de Izumi siempre estaban muy ocupados trabajando en una compañia de robótica y lo exigentes que llegaban a ser con ella.

-No es que no los quiera, solo que me gustaría que mostrarán mayor interes en mí a parte de lo académico- dijo mientras movía con su indice la pajilla de su bebida color naranja.

Marcy terminaba de beber su bebida color verde y trababa de animar a su nueva amiga dandole unas palmadas a su hombro.

En cierto modo ella también comprendía lo exigente y pesado que podría llegar a ser al tener padres asiáticos, por fortuna los de Marcy estaban mas occidentalizados por así decirlo, dandolé más libertades a la chica Wu.

Sin que se percatará todo ese tiempo estuvo siendo observada a lo lejos por cierta chica tailandesa que después de un rato continuó su camino no dando crédito a lo que veían sus ojos.

-Marcy tiene una nueva amiga, esto es... Interesante, me alegra que empiece a salir un poco más de su "caparazón", pero porque no nos había contado nada a Sasha y a mí hasta ahora-

La verdad es que pese al pensamiento inicial de sentirse feliz por Marcy una pizca de preocupación surgió en el corazón de Anne Boonchuy.


Y bien he aquí una nueva historia, veremos que sorpresas traerán las nuevas amistades de Marcy y como lo tomarán sus amigas de la infancia esta situación.

Será este un cambio para bien para nuestra Nerd algo torpe favorita o no?

Y que situaciones se desarrollarán con esta chica Izumi y próximamente con Nicole, todo esto y más en futuros capítulos. ;)