Un Trato Dulce y Placentero Capítulo 2
En una universidad se podía ver a varios estudiantes de diferentes edades yendo y viniendo por uno de sus pasillos. Entre todas esas personas se encontró a Naruto, quien mostró una expresión animada, usando audífonos en ese momento.
Luego de caminar unos metros, el joven rubio giró hacia unos escalones, bajándolos, perdiéndose en sus pensamientos. …
Después de unos minutos, Naruto salió a uno de los jardines solitarios de la Universidad, sosteniendo una manzana en una de sus manos.
Naruto caminó hacia un árbol cercano, temblando por el frío del día, dejando su mochila en el suelo, apoyada contra el árbol. Con su mano libre, Naruto se quitó los auriculares, guardándolos en el bolsillo de su chaqueta, sacando su celular.
-¡Guau! Aunque es enero, todavía hace demasiado frío- dijo Naruto.
El rubio miró la pantalla de su celular, dándole un mordisco a su manzana. Pero en ese momento, unos brazos pasaron por los costados del rubio, terminando por abrazarlo.
-¡Hola! ¿Cómo has estado Naruto-san?
El susodicho miró en dirección a su hombro derecho, viendo el rostro de una mujer, siendo alguien muy hermoso, de largo cabello negro azabache, ojos color ónix, pestañas largas, labios rosados y piel clara y suave.
-¿Eh? ¿Qué? ¿Sa-Satsuki-san? ... ¿Q-qué estás haciendo? Nos verán- dijo Naruto con un gran sonrojo en su rostro.
-¿Y qué importa si me ven abrazando a la persona que me gusta? No hay nada de malo en eso, dijo Na-ru-to-san- Satsuki con voz suave.
Naruto se atragantó con su manzana al escuchar lo que decía el moreno, quien soltó al rubio dando un paso atrás, siendo observado por Naruto con nerviosismo.
Satsuki vestía un vestido azul claro, con un cinturón blanco alrededor de su cintura, llevaba una bata blanca encima, medias negras y botas blancas de tacón alto. …
-Por favor Satsuki-san, ya te pedí que no dijeras ese tipo de cosas, no está bien- dijo Naruto al ver al moreno suspirar.
-Si quieres verlo como una broma, está bien por ahora- dijo simplemente Satsuki.
Naruto se llevó una de sus manos a la nuca, recordando lo que pasó hace unos días con Kurumi. Satsuki se acercó a Naruto, quitándole la manzana, sacando de sus pensamientos a la rubia, quien la vio morder su manzana. Ante esto, Naruto dio un paso atrás, haciendo que Satsuki mostrara una sonrisa coqueta.
-Entonces, ¿qué planeas hacer para el proyecto?- Preguntó Satsuki.
-¿Eh? ¿Te refieres al vídeo? Bueno, realmente no tengo nada en mente, estaba planeando ver algunas referencias de los superiores. Tal vez solo haga un video corto de animación- explicó Naruto, apartando la mirada de Satsuki.
-Entiendo. Entonces está decidido, haré el proyecto contigo, así será más fácil- dijo Satsuki, dándole el último mordisco a la manzana de Naruto.
¡En otra parte!.
En el salón del Manga Café, Kurumi fue encontrada recostada en un sofá, comiendo unas patatas fritas y manteniendo una mirada feliz. Al otro lado de la habitación, en otro sofá, se vio a Samui bebiendo una taza de té.
La hermosa rubia miró con cautela a Kurumi, escuchando las tranquilas risitas de alegría de Kurumi. Samui colocó su taza de té en una mesa frente a ella, tosiendo y frunciendo el ceño ante el rostro concentrado de la pelirroja. …
-¿Qué te pasa Kurumi-san? Has estado actuando muy extraño durante los últimos 3 días- dijo Samui con voz impasible.
-No creo que deba decirte por qué soy así. Sabes perfectamente cuál es el motivo, respondió Samui-Kurumi mientras se llevaba otra fritada a la boca.
-Veo. Entonces has seguido adelante, ese no era el plan- dijo Samui con un suspiro.
-El plan era actuar después de que hubieran pasado 3 meses, respeté esa regla para no abrumar a Naruto-san- explicó Kurumi mientras dejaba de sonreír.
Samui no pudo responder a lo que dijo Kurumi, sacando su teléfono celular de su bolsillo, mirando la fecha del día en él. La rubia se llevó un dedo a la barbilla, perdiéndose en sus pensamientos, mientras Kurumi se levantaba, tomando asiento en el sofá, dirigiendo su mirada hacia Samui, quien había guardado su teléfono.
-Dejando ese tema de lado, ¿qué vas a hacer con tu familia? ... ¿Estás pensando en regresar a Tokio? - preguntó Kurumi con un poco de intriga.
-No es un asunto que interfiera con mis estudios y con este trabajo, al que solo vengo 4 días, puedo ir y volver en unas horas. Y mi traslado será más rápido, ya que estoy pensando en comprarme un auto- dijo Samui mientras se levantaba.
"Te recomendaría que consigas una motocicleta", dijo Kurumi con desdén.
-Bueno, todavía tengo tiempo para tomar una decisión al respecto- dijo Samui.
Kurumi escuchó sonar su celular, sacándolo de su bolsillo, y en un segundo, gimió al ver una llamada, leyendo el nombre en la pantalla.
-Mi turno terminó Samui, así que te dejo el resto por el resto del día, aunque es una pena porque no veré a Naruto-san- dijo Kurumi con un suspiro.
-Cuando muestras esas expresiones sutiles que resultan imperceptibles para los demás, sé que es porque vas a ver a tu familia. Ellos tampoco están de acuerdo con que estés lejos de ellos, ¿verdad? - dijo Samui con cautela.
"El viejo nunca se entrometerá en mis asuntos", dijo Kurumi sin importancia.
Kurumi se levantó, colgó la llamada sin más y caminó hacia la salida de la habitación. Samui caminó detrás de la pelirroja, mirándola abrir la puerta, saliendo de ese lugar, sin embargo, Samui giró en otra dirección del Manga Café.
-Por cierto Samui, si no tomas la iniciativa con Naruto-san, ese Uchiha se nos adelantará otra vez- dijo Kurumi mirando por encima del hombro.
Kurumi sonrió con picardía a la hermosa rubia, quien solo sacudió la mirada, continuando con su respectivo trabajo, teniendo una expresión pensativa.
¡Momentos después!.
Habían pasado unas horas y Naruto terminó sus clases en la Universidad. Luego de irse, el rubio se dirigió a trabajar al Manga Café con Satsuki, compartiendo algunas anécdotas en el camino, pero ambos se despidieron en la estación de metro.
Naruto caminó tranquilamente hacia el trabajo, manteniendo una expresión alegre, tarareando una melodía, sonriendo mientras cerraba los ojos por momentos. …
Con una caja en la mano y su uniforme puesto, Naruto caminó por uno de los pasillos del Manga Café, llegando a un área con máquinas de bebidas y snacks. Naruto se acercó a una barra, sobre la cual colocó la caja en sus brazos. …
-Debería llamar a Inuzuka-san, para que llame al reparador- murmuró Naruto.
La rubia abrió la caja, sacando otras cajas pequeñas, esta era de café. Naruto se acercó a una máquina de café y abrió un compartimento en ella.
-Lo bueno es que las chicas siempre me ayudan a limpiar las máquinas- dijo Naruto.
Haciendo un par de movimientos dentro de la máquina, Naruto introdujo la primera caja de café, continuando con una segunda caja. El rubio mostró una mirada concentrada mientras hacía su trabajo, luego, en un instante, extendió su brazo hacia la caja a su lado.
-¿Eh? ¿Qué es esto? ...¿se siente como algo suave?- Dijo Naruto en un susurro.
Naruto miró a su lado con curiosidad. Y en ese momento. Al lado de Naruto, encontró a Samui confundida, mirando la mano de Naruto en uno de sus pechos. El rubio se quedó en blanco, tratando de procesar lo que vio.
-¿¡Qué!?. ¡No!, ¡lo siento mucho Samui-san!, ¡no fue mi intención hacer eso!- exclamó Naruto presa del pánico, saltando hacia atrás rápidamente.
Samui miró su pecho por un breve momento, esbozando una sonrisa imperceptible, luego giró su mirada hacia un Naruto temeroso y nervioso.
-No tienes que preocuparte Naruto-san. La verdad es que no me importa si lo haces- dijo Samui acercándose un poco más a Naruto.
El encantador rubio se paró frente a Naruto, quien se llevó una de sus manos a la nuca, siendo observado por los fríos ojos de Samui. El rubio parpadeó un par de veces ante lo que escuchó, sin entender del todo lo que dijo Samui.
-Bueno, me disculpo de nuevo Samui-san- dijo Naruto tímidamente.
-No te preocupes, no lo pienses más Na-ru-to-san. Y dime, ¿por qué estás haciendo el trabajo que debería hacer el jefe?- preguntó Samui mientras miraba la máquina.
-¿Eh? Eso es porque Inuzuka-san me dará una recompensa monetaria por reparar esta máquina, aunque solo necesita rellenar las cajas de café, está un poco distraído cuando se trata de esto- dijo Naruto con una sonrisa burlona.
-Ya veo, pero ahora mismo, ambos deberíamos estar en el cajero automático y el jefe aquí, haciendo su respectivo trabajo- dijo Samui con un suspiro.
Naruto asintió ante las palabras de su compañero rubio, volviendo su atención a la máquina, mirando por el rabillo del ojo a Samui.
¡2 horas después!.
Luego de unas horas, tanto Naruto como Samui terminaron sus demás obligaciones laborales, luego se hicieron cargo de la caja registradora de la tienda, recogiendo y ayudando a los pocos clientes que iban llegando.
De esta forma, la noche fue poco a poco haciendo presencia en la ciudad, con lo que el número de clientes fue disminuyendo a esas horas. …
-¡Gracias por tu compra, vuelve pronto!- Dijo Naruto con una mirada amable.
Al recibir su cambio, el cliente al que Naruto servía se inclinó levemente, se dio la vuelta y se dirigió hacia la salida. Detrás de la caja registradora del Manga Café estaba Naruto, acompañado por Samui a unos metros de distancia.
Naruto miró a su alrededor por un momento, suspirando al no ver más clientes, frotándose uno de sus hombros, girando su cuello de un lado a otro. …
-Veo que estás tenso, Naruto-san. ¿Quieres que te haga un masaje en los hombros?- preguntó Samui con voz tranquila.
Naruto miró a su lado con las cejas levantadas, viendo la mirada relajada de Samui, quien dio un par de pasos hacia el rubio, quien lucía dubitativo.
-No, quiero molestarte con algo como esto- dijo Naruto con una sonrisa nerviosa.
Antes de que pudiera decir otra palabra, Naruto dio un grito ahogado inaudible, sintiendo las manos de Samui masajear sus hombros. La rubia se encontró parada detrás del rubio, moviendo sus dedos en círculos sobre los tensos hombros de Naruto.
-Deberías relajarte de vez en cuando Naruto-san. Estar así de tenso no es bueno para tu cuerpo- dijo Samui, usando un tono de voz suave.
-Sí, lo sé. …pero no es fácil relajarse. … Tengo muchas cosas en qué pensar, cada día d- dijo Naruto, sintiendo el cálido aliento de Samui en su cuello.
Samui presionó su pecho contra la espalda de Naruto, todavía masajeando los hombros de Naruto. Naruto tragó saliva ante lo que había sucedido, sus mejillas se pusieron de un rojo cálido. La hermosa rubia sonrió sutilmente, dejando de mover sus manos para deslizarlas lentamente por los brazos de Naruto.
-¿Sa-Samui-san? Ya terminaste, ¿ves-no?- preguntó Naruto con nerviosismo.
-¡Cálmate Naruto-san! Solo te estoy ayudando para que te sientas relajado, así que no te preocupes- susurró Samui al oído del sonrojado rubio.
Una de las manos de Samui se colocó sobre el abdomen de Naruto, acariciándolo en círculos. Por otro lado, la segunda mano de Samui se deslizó hasta la entrepierna de Naruto, haciéndolo jadear. Se vio a Samui colocando su barbilla en el hombro derecho de Naruto.
-S-Disculpe Samui-san, creo que ahora me siento mucho mejor- dijo Naruto.
-¿En realidad? ... Bueno, tu amigo de aquí abajo parece necesitar ayuda para aliviar su estrés- dijo Samui, lamiendo suavemente el cuello de Naruto.
Samui quitó sus manos del rubio, alejándose de él, quien parecía aliviado, sin embargo, Naruto abrió mucho los ojos. La sexy rubia se inclinó lentamente, arrodillándose en el suelo, quedando oculta gracias a la caja registradora.
-"¿Qué? Está pasando de nuevo... Hace unos días, pasó algo similar, con Kurumi-san"-pensó Naruto, quien lentamente bajó la mirada.
En ese momento, Samui gateó un par de centímetros, colocándose frente a las piernas del rubio. Samui levantó la mirada, mostrándole una sensual sonrisa a Naruto, quien la vio ponerse ligeramente de rodillas, colocando sus manos en la entrepierna del rubio.
-¡E-Espera, Samui-san! ¡No podemos hacer algo como esto aquí, alguien podría vernos!- Dijo Naruto, mirando a su alrededor.
-¡Déjame encargarme de todo, Na-ru-to-san!- susurró Samui.
La rubia bajó la cremallera del pantalón del rubio, metiendo una de sus manos dentro, tocando la polla de Naruto. En un par de movimientos, Samui sacó la dura polla del rubio, observando cómo terminaba de crecer hasta 11 pulgadas.
Samui se frotó las piernas al ver la inmensidad de la polla de Naruto, sintiendo lo caliente y dura que estaba en su mano, dirigiendo su otra mano hacia ella.
-"¡Mis manos no son suficientes para cubrir toda tu polla!"-pensó Samui.
Samui no esperó más, acercando sus labios a la punta de la polla, dándole un breve beso. Ante tal sensación, el rubio tomó los bordes de la barra del cajero automático, cerrando los ojos, sintiendo como el rubio comenzaba a lamer su polla desde la base hasta la punta.
La sexy rubia acarició la polla de Naruto con sus 2 manos, lamiendo la punta con su lengua, y en un par de segundos, apartó sus manos de la gruesa y enorme polla del rubio, tomando la punta de su polla entre sus labios.
-"¡Aunque Samui-san está haciendo lo mismo que Kurumi-san, la sensación es muy diferente!"-pensó Naruto, sintiendo como el rubio le chupaba la polla.
-Esto se siente bien, ¿no, Naruto-san?- Preguntó Samui con deseo en su voz.
Naruto solo pudo responder con un gemido silencioso, lo que hizo sonreír a la rubia, quien dirigió sus manos a los botones de su camisa.
Desabrochándose la camisa, Samui mostró su sostén naranja, mientras continuaba moviendo su cabeza hacia adelante y hacia atrás sobre la extasiada polla de la rubia.
-¡Te haré sentir aún mejor!- Dijo Samui mientras detenía sus movimientos.
Samui sacó la enorme polla de Naruto de su boca y Naruto respiró aire fresco. Samui, por su parte, deslizó su sujetador debajo de sus redondos y enormes pechos, que tomó con ambas manos, levantándose aún más sobre sus rodillas.
Con una sutil sonrisa, Samui separó ligeramente sus tetas, colocando la dura polla de Naruto en medio, aplastándola, haciendo que Naruto se estremeciera.
-¡Oh Samui-san! ¡Tus senos se sienten tan suaves! ¡Me gusta ese sentimiento!- Dijo Naruto bajando la mirada, observando las acciones del rubio.
Samui comenzó a mover sus pechos, dándole placer a la enorme polla del rubio, quien dobló ligeramente las rodillas. La sexy rubia vio salir la punta de la polla entre sus redondas tetas, acercando su rostro a ella, lamiendo la punta. Naruto dejó escapar un fuerte gruñido ante la sensación, moviendo sus caderas lentamente.
Samui frotó su lengua en la hendidura de la polla de la rubia, yendo cada vez más rápido con sus movimientos, atrapando la punta de la polla con sus suaves labios.
-"¡Nuestra primera vez, fue algo similar a esto!"-Pensó Samui con una sonrisa.
Naruto volvió a la realidad en un instante, saliendo de su nube de placer, calmando su respiración y mirando el lugar con cautela. Samui mordió delicadamente la punta de la polla del rubio, haciendo que Naruto gritara ligeramente de sorpresa.
La sexy rubia miró hacia arriba, observando cada una de las reacciones de Naruto ante sus avances, girando su lengua alrededor de la punta de su polla.
-¡Qué bueno que puedas soportar esto, Naruto-san!- Dijo Samui con una mirada cautivadora.
Naruto detuvo el movimiento de sus caderas, viendo los ojos llenos de deseo de Samui, quien dejó de lamer la punta de la polla del rubio. Naruto quitó sus manos del borde del mostrador de la caja, para luego colocarlas sobre los hombros de Samui, lo que detuvo el paizuri que estaba recibiendo de la sexy rubia.
Naruto dio un paso atrás, levantando con cuidado a Samui del suelo. La sexy rubia no se opuso a las acciones de Naruto, apreciando su mirada extasiada.
Al encontrarse completamente de pie, y antes de que pudiera decir una palabra, Samui fue girada. Samui miró frente a la cajera, colocando sus manos en la barra, inclinándose levemente hacia adelante, entendiendo las intenciones de la rubia.
-¿Entonces quieres tener el control, Naruto-san? ¡Eso está bien para mí! ¡Puedes hacer lo que quieras!- Dijo Samui mirando detrás de ella.
-Bueno, ¡sólo pensé que sería mejor terminarlo qu-rápido!- Dijo Naruto tímidamente.
Con una de sus manos, la sexy rubia rápidamente desabrochó su cinturón, mordiéndose el labio inferior al sentir la enorme polla de 11 pulgadas del rubio presionar contra su trasero, esto mientras se desabrochaba y bajaba la cremallera de sus shorts.
Naruto tragó saliva mientras veía las manos de Samui colocarse en los bordes de sus pantalones cortos, tomándolos junto con sus bragas, quitándoselos lentamente a ambos.
En un momento, la ropa de Samui cayó al suelo sin más preámbulos, dejando al descubierto sus redondas nalgas en forma de corazón al ansioso rubio detrás de ella.
Naruto se acercó a la rubia caliente, mirando sus piernas, que estaban cubiertas por sus medias. El rubio colocó sus manos en la cintura de Samui, alineando la punta de su polla en los pliegues húmedos de la intimidad de Samui.
-¡Aunque no sé cómo terminé en esta situación! ¡No puedo negar que hacer algo como esto me excita!-pensó Naruto con una mirada lujuriosa.
Samui agarró firmemente los bordes de la barra, dando un suave gemido cuando sintió la punta de la polla de Naruto entrar en su coño. La rubia no se detuvo, empujando centímetro tras centímetro dentro de Samui, quien soltó un gemido ahogado.
Samui se inclinó aún más hacia adelante, apoyando sus enormes y redondos pechos en la barra, sintiendo la polla de Naruto profundamente en su coño.
-Naruto-san, tú puedes, empieza, ¡Ah, jodeme!- pidió Samui con mucho gusto.
El rubio asintió sutilmente, sacando su polla, dejando solo la punta en el coño de Samui. Sin perder más tiempo, Naruto comenzó sus movimientos de ida y vuelta, empujando poco más de la mitad de su polla dentro y fuera del coño de Samui.
Naruto dio algunos gruñidos, sintiendo lo apretado y caliente que estaban las entrañas del rubio, yendo cada vez más rápido con sus penetraciones.
Los gemidos de Samui fueron reprimidos por ella, mirando a su alrededor por un breve segundo. Naruto miró hacia abajo, viendo como la mitad de su polla desaparecía al entrar en el coño de la rubia, sonriendo lujuriosamente en ese momento.
-Aaa, aaa, aaa, M-Muévete Mucho, aaa, ¡Más Rápido, Naruto-san!, ¡Ven, aaa, Incluso, Más Profundo, En Mí!- Samui gimió apasionadamente.
-¡Está bien, Samui-san! ¡Pero su coño se está apretando, mi-mi polla!- gruñó Naruto.
El rubio agarró con fuerza la cintura de Samui, quien soltó un gemido ahogado debido a las rápidas embestidas de Naruto, dando varios gemidos sin poder contenerlos más.
La rubia ardiente miró detrás de ella, sonriendo mientras observaba el rostro sonrojado y lujurioso de Naruto, que parecía ir cada vez más rápido con sus embestidas.
Los choques piel con piel resonaron con fuerza en esos momentos, sin embargo, el rubio detuvo sus movimientos. Samui respiró hondo ante eso, alzó las cejas con curiosidad y luego jadeó. Naruto dio un paso atrás, girando a Samui, colocándola frente a él, mirándose a los ojos con deseo.
Samui se apoyó en la barra detrás de ella, observando a la rubia acercarse a ella. Naruto tomó una de las piernas de Samui, levantándola hasta su cintura con cuidado.
El ansioso rubio volvió a introducir su polla en el coño de la ardiente rubia, quien puso sus manos sobre los hombros del rubio. Naruto reanudó sus rápidas penetraciones, siendo seguido por los melodiosos gemidos de Samui.
-Aaa, E-Esto ¡Se-Se siente tan G-G-Gr-ing bien!- gimió Samui con una suave sonrisa.
Naruto acercó su rostro al de Samui, uniendo sus labios con los de ella, compartiendo un beso, esto sin dejar de follar el coño de la ardiente rubia.
Samui gimió durante el beso, permitiendo que la lengua de Naruto entrara en su boca, quien realizó una danza erótica con la lengua de Samui. La punta de la polla de la rubia rozó el punto G de Samui, lo que la hizo retorcerse ante la placentera sensación.
Conforme pasaron los segundos, ambos se separaron de su apasionado beso, quedando unidos por un fino hilo de saliva, sintiendo el cálido aliento del otro.
Naruto golpeó el clítoris de la rubia caliente con la punta de su polla, obteniendo una reacción instantánea de Samui, quien levantó la vista ante tal acción.
-Aaa, aaa, No te vayas, Ah S-Para, aaa, ¡Follándome, Na-Naruto!- Preguntó Samui.
Naruto dio un fuerte empujón al caliente coño de Samui, quien bajó la mirada gimiendo placenteramente. El rubio apreció los redondos pechos de Samui, viendo sus pezones rosados, hecho que hizo sonreír a la ardiente rubia.
-Na-ru-to, Vámonos, aaa, Still Place, aaa, ¡Pri-Privado!- Dijo Samui con deseo. …
Habían pasado unos minutos desde el inicio del apasionado encuentro entre Samui y Naruto, tiempo en el que ambos abandonaron la caja registradora, ingresando al almacén de Manga Café, donde continuaron con sus actividades.
Dentro del almacén se encontró lleno de los placenteros gemidos de Samui y los gruñidos de esfuerzo de Naruto, junto con los sonidos de piel golpeando contra piel.
En ese momento, se podía ver a Naruto sentado en el borde de una mesa, mientras Samui estaba sentada a horcajadas sobre su regazo, vestida solo con sus medias negras. El rubio envolvió sus brazos alrededor de la cintura de Samui, chupando uno de sus pechos, mientras ella movía sus caderas arriba y abajo, apoyándose en los hombros del rubio.
La mirada de Samui se perdió en el placer, sintiendo la dura e inmensa polla de Naruto llegar profundamente dentro de ella, tocando sus puntos más sensibles.
-Aaa, aaa, T-Estás Tan, aaa, ¡Den-Dentro de Mí!- Dijo Samui apasionadamente.
Naruto soltó el pezón derecho de Samui de su boca, y en un segundo, movió su boca hacia el izquierdo, dándole un suave mordisco, y se escuchó un grito de Samui.
La ardiente rubia enterró sus dedos en los hombros del rubio, aumentando la velocidad de sus rebotes, gimiendo incontrolablemente en esos momentos.
-"¡La polla de Naruto logra tocar mi útero!"-pensó Samui con una mirada complacida.
Naruto soltó la cintura del rubio caliente, sin embargo, lentamente las deslizó hacia abajo, terminando colocándolas en el redondo y delicioso trasero de Samui, dándole un apretón y luego masajeándolos de lado a lado.
Samui dio una sutil sonrisa ante los firmes toques de Naruto, disfrutando ese momento con el rubio, dejando de rebotar en la enorme polla de Naruto.
El rubio apartó su boca del pezón de Samui, levantando ligeramente la mirada, apreciando el encantador rostro del rubio. En ese momento, Naruto se bajó de la mesa con Samui en brazos, teniendo cuidado con sus movimientos, girando lentamente.
-¡Tu cuerpo es maravilloso Samui!- dijo Naruto, manteniendo su polla dentro del rubio.
-¡Te agradezco que digas eso, Na-ru-to! ¿Pero cómo has aliviado tu estrés? ¡Me gustaría que hicieras lo mismo por mí! - dijo Samui con gusto.
-¡Está bien, Samui-san! ¡Te devolveré el favor!- Dijo Naruto con una sonrisa nerviosa.
Naruto dio un paso adelante, mirando la mesa en la que había estado, inclinándose hacia adelante, dejando a la rubia caliente sobre la mesa. Ante esto, Samui soltó los hombros de Naruto, mirándolo pararse más derecho, esto sin sacarle la polla.
El rubio colocó sus manos sobre los carnosos muslos de Samui, apreciando con detalle el estómago, ombligo, senos, pezones, cuello y rostro de la sexy rubia.
Sin esperar más, Naruto movió sus caderas a una velocidad moderada, escuchando instantáneamente los melodiosos y fuertes gemidos de Samui.
Naruto iba cada vez más rápido con duras penetraciones, sacudiendo el cuerpo del rubio. Samui cerró los ojos, gimiendo incontrolablemente, sintiendo la enorme y dura polla de la rubia rozando su clítoris repetidamente.
El lujurioso rubio acarició los muslos de Samui un par de veces, y de manera lenta, las manos de Naruto comenzaron a ascender por el cuerpo de la sexy rubia.
En apenas unos segundos, las manos de Naruto finalmente alcanzaron los redondos y enormes pechos de Samui, los cuales tomó con delicadeza, masajeándolos de un lado a otro, dándole aún más placer a la ardiente rubia.
Naruto quedó asombrado ante cada una de las reacciones de Samui, sonriendo lascivamente, tomando con sus dedos los rosados pezones del rubio, estirándolos.
-¡Aaah!, ¡Naruto!, ¡No puedo soportarlo más!, ¡Me corro!- Samui gimió en un grito.
Samui finalmente llegó en ese instante, sin embargo, su orgasmo fue acompañado por la liberación del propio Naruto, quien llegó al clímax con un gruñido.
Ambos respiraron pesadamente, mirándose el rostro sonrojado del otro con una media sonrisa. Naruto se inclinó con cuidado, presionando su torso contra los pechos de Samui, acercando su rostro al de ella, uniendo sus labios en un cálido beso.
¡Al día siguiente! ¡En Tokio!.
Ah, muy temprano en la mañana, en el centro de la ciudad de Tokio, en uno de los tantos edificios, en el estacionamiento subterráneo de éste, todavía se podía ver a un hombre trajeado bajando de un auto blanco, siendo un guardaespaldas.
El hombre caminó hacia una de las puertas traseras del auto, la cual abrió en un instante. De allí, se vio salir a una Satsuki completamente indiferente.
La hermosa cuervo dejó escapar un profundo suspiro, vestía un vestido rojo, con un abrigo largo negro encima, llevaba medias negras y tacones oscuros. …
"¿Ya llegó mi padre a su oficina?" Satsuki preguntó sin interés.
-Así es, señorita. Uchiha-sama ha terminado su reunión para recibirla- respondió respetuosamente un segundo guardaespaldas.
Satsuki asintió, pasándose una mano por el cabello, viendo un ascensor a lo lejos, hacia el cual comenzó a dirigirse, seguida por los guardaespaldas. …
Después de unos minutos, en el último piso de ese edificio, se vio a Satsuki caminando por un pasillo, mirando una gran puerta al final del mismo. Ambos guardaespaldas caminaron delante de la morena, abriéndole las puertas de la oficina, quien pasó junto a los dos hombres serios.
Al ver a Satsuki entrar a la oficina, los guardaespaldas cerraron las puertas. Tras entrar, Satsuki se detuvo en medio de la oficina vacía, viendo a unos metros delante de ella sólo un escritorio, y detrás de él, todavía un hombre impasible. …
-Otoo-sama. ¿Cuál es la razón por la que me llamaste?- preguntó Satsuki respetuosamente.
Fugaku miró a su hija sin ninguna expresión, con Satsuki bajando la mirada, viendo al cuervo mayor levantarse, dándole la espalda a Satsuki.
-¿Debe haber alguna razón para llamar a mi hija?- Cuestionó Fugaku con frialdad.
-Perdón por mi pregunta impertinente. ... Sin embargo, solo me llamaste para decirme algo importante- dijo Satsuki alzando la mirada al ver la espalda de su padre.
-Entiendo. Te llamé para conocer tus resultados en la Universidad, en esa carrera de Cinematografía, ya que como sabes, serás mi sucesor en la empresa. Quiero saber si piensas seguir jugando en esa Universidad. - dijo Fugaku.
"No es un juego para mí, Otoo-sama. Y como ya lo he solicitado, me gustaría que mi hermano mayor fuera su sucesor", dijo Satsuki con el mayor respeto.
Fugaku suspiró al escuchar la respuesta de su hija, volteándose, mirando el rostro de Satsuki, quien soportó la intensa mirada del mayor moreno.
-Itachi no puede hacerse cargo de la empresa, ya que es funcionario de una agencia gubernamental, pero eso ya lo sabes, Satsuki- dijo Fugaku con seriedad.
-Otoo-sama. Sé que el negocio familiar es importante, incluso desde hace cientos de años, pero no creo que sea yo quien asuma esa responsabilidad, por eso te pido que lo pienses- dijo Satsuki con una reverencia.
-¡La decisión está tomada! Y Satsuki no va a cambiar- dijo Fugaku con firmeza.
¡En otra parte!.
El placer, el olor a sexo, así como sonidos húmedos y lascivos habían dominado los cuerpos de Naruto y Samui durante horas, tomándose un breve descanso en el mismo Manga Café. Ambos continuaron con sus apasionadas actividades en la madrugada, reuniéndose actualmente en la sala de descanso del establecimiento. …
Se vio a Samui completamente desnuda arrodillada en uno de los sofás de la sala de descanso, manteniendo las manos en los bordes del respaldo, y detrás de ella, de pie fuera del sofá, todavía se podía ver a Naruto, tan desnudo como Samui.
El rubio tenía sus manos en la cintura de Samui, moviendo sus caderas hacia adelante y hacia atrás, creando un sonido rítmico e incesante dentro de la habitación. …
-Aaa, aaa, aaa, T-Ya vienes, aaa, ¡En lo más profundo!, Me a-Amor, aaa, ¡Cómo me jodes Naruto-san!- dijo un Samui sumergido en la lujuria.
-¡Tenemos que darnos prisa ya que tenemos que abrir el café!- gruñó Naruto.
-No, aaa, aaa, No-No te preocupes, aaa, ¡Na-Naruto-san!, aaa, Nosotros-Tenemos, Tiempo, aaa, ¡Suficiente, para eso, aaa!- Respondió Samui con un gemido.
Naruto bajó la mirada luego de escuchar la respuesta de Samui, quitando sus manos de la cintura del rubio caliente, y en un segundo, colocándolas en el delicioso y redondo trasero de Samui, dándoles un fuerte apretón.
El rubio quedó fascinado mientras veía sus dedos desaparecer en la suave piel de las nalgas de Samui, las cuales miraba por encima del hombro.
-Hazlo, aaa, M-Mucho Más, aaa, Fu-Strong!- Dijo Samui con una suave sonrisa.
-¡Haré lo que quiera, con tu cuerpo, Samui!- Dijo Naruto con voz profunda.
Samui se sorprendió un poco por lo que dijo el rubio, sin embargo, una ola de escalofríos recorrió su cuerpo, sonriendo gratamente.
Naruto dio un fuerte empujón, empujando toda su polla en el apretado coño de Samui, haciendo que la rubia caliente gimiera ruidosamente. El rubio tomó un pequeño respiro, deteniendo sus penetraciones, llamando la atención de Samui.
Dando un paso atrás, Naruto sacó su enorme polla del coño de Samui, girando con cuidado a la rubia y levantándola del sofá. Samui dio algunos gritos ahogados ante los movimientos de Naruto, quien rápidamente se había sentado en el sofá.
La ardiente rubia se lamió los labios, mirando con deseo la enorme y dura polla del rubio, quien se encontró abriendo las piernas, dirigiendo su mirada al rostro de Samui.
-¡Muestras confianza en cada una de tus acciones! ¡Pero el rubor en tu cara te hace ver linda!- dijo Samui de manera encantadora.
Naruto rió tímidamente, rascándose la mejilla derecha con un dedo, y antes de que pudiera responder a lo que dijo Samui, el rubio la vio ponerse de rodillas. Samui se acomodó entre las piernas de la rubia, tomando sus redondas y enormes tetas en sus manos.
La lujuriosa rubia soltó un fuerte grito ahogado, sintiendo y viendo como su enorme polla era envuelta por los redondos pechos de la ardiente rubia entre sus piernas.
-Esto, es lo que estabas esperando, ¿no, Naruto-san?- Dijo Samui con deseo.
-¡Bueno, es una sensación agradable, Samui-san!- Dijo Naruto con una sonrisa.
Con una sonrisa sensual, Samui presionó sus tetas contra la dura polla de la rubia, comenzando a moverlas hacia arriba y hacia abajo. Incapaz de evitarlo, Naruto dejó escapar un gemido, dejando caer los brazos a los costados, disfrutando el momento.
La rubia caliente llevó su boca a la punta de la polla, abriéndola, dejando que la punta entrara en su boca mientras salía de sus pechos, usando su lengua en el proceso.
Naruto miró hacia el techo, cerrando los ojos, sintiendo oleada tras oleada de placer recorriendo su columna. A medida que pasaban los minutos, Samui movía sus redondos pechos cada vez más rápido, frotando su lengua a lo largo de la hendidura de su polla.
-¡Esto se siente increíble, Samui-san!- dijo un complacido Naruto.
Samui sacó la punta de su polla de su boca con un pop, dándole algunos besos, notando los sutiles movimientos de las piernas del excitado rubio.
Naruto abrió los ojos, mirando a la rubia caliente mientras ella dejaba de mover las manos y le daba un último beso en la punta de su polla. Samui apartó sus manos de sus redondas tetas, pero Samui comenzó a colocar besos a lo largo de la polla de la rubia, comenzando lentamente a moverse hacia arriba con besos de mariposa.
Al llegar a la base de la polla de Naruto, Samui usó su lengua y la pasó hasta el ombligo de Naruto. Lentamente, Samui se levantó, lamiendo y besando el torso ligeramente tonificado de Naruto.
De esta manera, Samui terminó llegando al cuello de Naruto, con sus manos colocándose sobre los hombros del rubio, quien movió sus manos hacia la cintura del sexy rubio.
Samui depositó los últimos besos en el cuello y la mandíbula de la ansiosa rubia, sentada a horcajadas en su regazo, manteniendo sus caderas levantadas.
-¿Podemos tardar una hora más en abrir?- Susurró Samui al oído del rubio.
Naruto no respondió, alineando su polla con el coño de Samui, y con un empujón de sus manos, bajó las caderas de Samui, metiendo toda su polla dentro de Samui.
La rubia caliente sonrió ante lo que hizo el rubio, gimiendo fuertemente en ese momento. Samui movió sus caderas, ayudando al rubio frente a ella, dejando que su polla tocara puntos sensibles en su coño mojado.
-¡Esto, e-es fantástico!, aaa, aaa, aaa, tu C-polla, aaa, ¡me encanta, Naruto-san!- gimió Samui, presionando sus enormes pechos contra el torso del rubio.
-"¡Creo que un descanso largo no nos hará ningún daño!"-pensó Naruto.
Samui acercó su rostro a Naruto's, lamiéndose los labios, y luego se unió en un beso lleno de deseo y pasión. Ambos movieron sus caras de lado a lado, disfrutando de ese beso, usando sus lenguas en un baile erótico.
Los brazos de Samui envolvieron alrededor del cuello de la rubia, profundizando su beso aún más mientras movía sus caderas más rápido y más rápido en el regazo de Naruto.
Samui y Naruto mantuvieron sus cuerpos presionados contra los demás, cerrándose del mundo, enfocando toda su atención en su apasionado encuentro.
Continuará