Conversaciones conversaciones

En cuento Terry termino de leer la nota del periódico, lo soltó sin poderlo creer, las manos le temblaban, sentía que comenzaba a sudar frio, repitiéndose internamente, esto tiene que ser una mentira, estuvo así por unos segundos, ignorando la molesta voz de Susana, hasta que convencido de que necesitaba explicaciones, tomo su saco, saliendo casi corriendo de su hogar

Terry condujo a toda velocidad su automóvil, en poco tiempo llego a la estación de trenes, donde compro el primer boleto que había con dirección a Chicago, sin importarle el costo o la comodidad, durante todo el camino que duró varias horas, se repitió a sí mismo, es una mentira, una cruel mentira de Albert, no Albert no podía ser capaz de eso, lo más probable era que fuera de Archí, con tal de asustarlo y alejarlo de la rubia, el periódico solo debió salir en NY para que él lo viera, alguna sensata justificación tendría que haber para ese obituario

Por otra parte, al día siguiente de que Terry tomo el tren, Albert se encontraba sentado en su oficina tratando de leer unos contratos, sin lograrlo, solo tenía en menta la última vez que vio a la rubia

Cuéntame, como esta Mia y mi princesa, por el cambio de turnos no las he podido ir a ver- dijo Candy sentada frente al rubio

Ambas se encuentran bien, claro la princesa más grande cada vida, aunque déjame decirte que ellas también te extrañan mucho – dijo Albert tranquilo bebiendo un café

La princesa te tiene loco – dijo Candy divertida comiendo un bocadillo- te prometo que pronto las iré a ver, ruego porque ya me cambien los horarios, me gusta más la mañana y tratar con niños

Lástima que nunca regresaste- pensaba Albert dando un manotazo en el escritorio, aun no podía soportar el dolor de no tener a Candy en su vida, ella durante mucho tiempo fue la única persona que lo había sonreír, amaba sus tardes charlando o los desayunos improvisados en el hospital, asimismo no dejaba de tener en mente el tiempo que vivieron como hermanos

Albert estaba metido en sus pensamientos hasta que su secretaria toco la puerta, trayéndolo a la realidad

Adelante – dijo él molesto

Disculpe señor, hay una persona que quiere verlo – dijo la secretaria nerviosa

Te dije que no estoy para nadie, por eso cancele todas mis citas hasta la próxima semana- dijo Albert furioso mirándola intimidantemente

Lo se señor, solo que el caballero dijo que no se ira hasta hablar con usted – dijo la secretaria temerosa, puesto que ella había visto una trasformación en su jefe, pasando de uno alegre y cordial, a uno molesto y frio, desde que Candy se fue y solo dejo una carta

No importa quien sea, no estoy para nadie y si quiere esperarse en la recepción que lo haga, pero no estoy para nadie – dijo Albert yendo a su mini bar para prepararse un wiski, desde la muerte de Candy había bebido mucho

Albert paso toda la mañana y tarde distraído en sus memorias, consciente de que nadie lo distraería, le había dado a Archí la semana para que estuviera con Anni, quien no se había sentido bien después del sepelio de Candy

Al atardecer Albert tomo sus cosas, salió de su oficina, se despidió de su secretaria quien era la que estaba llevando lo asuntos mientras él estaba superando la muerte de la rubia, él iba a tomar su camino cuando escucho la voz que más odiaba en ese momento

Albert – dijo Terry levantándose, yendo hacia el rubio

No obstante, el escucharlo, Albert tiro su maletín y sin que ninguno de los presentes lo esperara le dio un puñetazo a Terry derribándolo, el actor al instante sintió metal en su boca, lo cual significaba que le había sangrado el labio

Terry no podía creer lo que estaba pasando, por eso se quedó en el suelo por unos segundos hasta que Albert lo levanto tomándolo de las solapas con furia, terminándolo recargándolo en la pared, diciendo – maldito infeliz, por tu culpa por tu miserable existencia es que Candy está muerta, ¿Por qué jugaste con ella? ¿Por qué la ilusionaste? Eres un imbécil

¿Entonces es verdad está muerta? – dijo Terry sintiendo que su mundo se venía abajo ante la confirmación de sus mayores temores

Por supuesto que está muerta, por tu culpa, dime ¿Por qué si eres un hombre casado, en la espera de un hijo, viniste a ilusionarla? – dijo Albert sin soltarlo, viéndolo amenazadoramente, ante la mirada de su secretaria que nunca había visto a su jefe de esa manera – lo único que me reconforta es que ahora vivirás con la culpa, ya que ella fue a buscarte a NY, muriendo en el accidente de trenes

No entiendo porque lo hizo, yo le dije que regresaría para estar con ella, yo no sabía que Susana estaba embarazada, mi plan era regresar a NY, divorciarme y ser feliz con Candy – dijo Terry entre lágrimas sintiendo como una gran culpa lo consumía

Albert se debía sobre decirle el motivo por el cual ella fue a buscarlo, sin embargo, prefirió callar, era un secreto que solo sabrían Archí y él, Terry no merecía saber la verdad, aunque con eso lo destruiría aún mas

Eres un miserable, espero no volverte a ver nunca, ya confirmaste que Candy murió, ahora lárgate- dijo Albert de pie, mirándolo con un odio desmedido

Terry sin decir nada se puso de pie, saliendo del lugar convencido de que toda su vida se había venido abajo, ya no habría ninguna razón para ser feliz

Albert continuaba furioso, por lo que se encerró en su oficina, ahí esperaba hasta que su mal humor disminuyera un poco e ir a su hogar a lado de su esposa y su hija

De esta forma transcurrió un mes desde el accidente de trenes, el cual dejo una gran huella en la cuidad, puesto a que fallecieron demasiadas personas, todos lo que perdieron a un familiar tuvieron que acostumbrarse a una vida sin ellos

Por otro lado, en una pequeña cuidad que se encontraba entre chicago y NY, había un gran hospital que trataba con todo tipo de pacientes, entre ellos varios de los afectado por el accidente de trenes, ya que todos los hospitales de la región se llenaron con esos casos

Un día uno de los pocos psicólogos con que contaba el hospital regreso a él, luego de un gran periodo de ausencia

Vaya, que alegría de tenerte de regreso – dijo Nathan el mejor amigo del psicólogo-aunque para ser sincero no pensé que regresarías a trabajar

Créeme que yo pensé lo mismo, vi muchas alternativas antes de tomar una decisión, pase por la docencia, la practica por fuera, vivir de la herencia de mi padre, dejándome morir lentamente, ninguna me convenció, por eso estoy aquí – dijo el psicólogo cabizbajo, no podía ocultar la infinita tristeza y soledad que era su vida

Debo agradecer que no vayas tomado la última opción que mencionaste – dijo Nathan preocupado, él había estado con su amigo durante varios meses hasta que el psicólogo lo alejo

La única razón por quienes no lo hice, fue por las personas que amo – dijo el psicólogo dando un suspiro nostálgico

¿Puedo preguntar cómo te encuentras? – dijo Nathan aprovechando que estaban solos en su oficina, en lo que esperaban que limpiaran la del psicólogo

Es evidente como me encuentro, pero si quieres una descripción más detallada he llegado a la conclusión de que mi vida está llena de pérdidas de las personas que quiero, comenzando por mi padre, mi hermana, mi esposa y mi pequeña princesa, durante todo este año no he podido sacar de mi cabeza la imagen de la primera vez que la sostuve en mis brazos, ni de la última que lo hice, fueron seis meses maravillosos hasta que la perdí – dijo el psicólogo viendo cómo se movía el café dentro de su taza

Lo siento mucho, sé que no hay palabras correctas en este momento, más bien tu eres el experto en este sentido, por eso solo quiero decirte que cuentas con todo mi apoyo – dijo Nathan siendo sincero con su amigo

Te lo agradezco, muchas veces el silencio puede ser un gran aliado, por eso trate de alejarme de todos y de todo, no tenía cabeza para nada – dijo el psicólogo recordando los últimos meses como había logrado sobrevivir

Creo que estar aquí y distraerte un poco te puede ayudar a despejar la mente – dijo Nathan con la intensión de darle ánimos

Ese es mi propósito, luego de una ardua batalla conmigo mismo, pensé que lo mejor era despejarme, no estar encerrado entre cuatro adelante, hacerlo por las personas que amo y ya no están conmigo – dijo el psicólogo terminándose el café que tenía – ya no hablemos de cosas complicadas, mejor cuéntame cómo está todo por aquí, el director del hospital dice que puedo volver a mis antiguas funciones de acompañar a los pacientes en sus procesos

Te contare, tus viejos pacientes se dividen en dos tipos, unos fueron dados de alta y ahora están felices con sus familias, muchas veces te han venido a buscar para agradecerte, otros de tus pacientes desaforadamente fallecieron, no obstante, sus familiares también están muy agradecidos, la mayoría dice que eres alguien que inspira paz y tranquilidad – dijo Nathan dando un breve resumen

Sabes que no lo hago por el crédito, sino porque me gusta ayudar a los demás, aunque últimamente he dudado de mí mismo, esa fue otro de los propósitos por los cuales estoy aquí, antes pensaba que mi tarea en la vida es ayudar a los demás, ahora no sé quién soy – dijo el psicólogo admitiendo esa debilidad- quiera tratar a un paciente que no fuera terminal, por lo menos por el momento, ver si aún puedo ser alguien o entender quien soy

Tu situación es compleja y te entiendo, lo que has vivido no se le desea a nadie, si decidieras dejar esto es comprensible, sin embargo, creo que hay el paciente ideal para esta situación y para ti, creo que tu experiencia la ayudaría mucho – dijo Nathan teniendo en mente a la paciente que más lo había cautivado desde que llego

¿Por qué ella? ¿Qué tiene de especial? – dijo el psicólogo sin entender la reacción de su amigo

Te resumiré, en el accidente de trenes la mayoría de los que murieron en el choque y explosión eran los pasajeros de primera clase, siendo la tercera clase la que salió menos afectada, a ella la encontramos cerca del choque con un severo golpe en la cabeza, sospechamos que era una pasajera de tercera clase que salió volando cuando el tren impacto y rodo colona abajo, solo tenía un pañuelo en sus manos, no se encontraron pertenecías, ella ha pasado en el hospital inconsciente durante tres semanas, hace una semana reacciono, pero por desgracia no recuerda nada de su vida, no si quera el nombre, el pañuelo está grabado con las iniciales T.G, eso no es lo más grave del asunto, sino que está embarazada tiene aproximadamente 6 semanas, creo que eres el indicado ya que tú también has perdido la memoria definitivamente, ayúdala está muy confundida – dijo Nathan quien ya se había hecho amigo de ella – es muy tímida

Vaya que su caso es complejo, mas estando embarazada, puede ser que su esposo la esté buscando – dijo el psicólogo comenzando a formular ideas

O haya muerto en el choque – dijo Nathan confiando más en esa teoría

Como sea, merece que la ayudemos – dijo el psicólogo interesado en el caso, lo cual alegro a su amigo

Si quieres podemos ir a conocerla, yo ahora tengo que ir a ver su vendaje, ya que ha costado que cicatrice de forma correcta por el cabello que tiene, tuvimos que casi raparlo, pero crece muy rápido y eso dificulta la cicatrización, además en una semana se le retira el yeso de su pierna, se fracturo imaginamos que al caer – dijo Nathan dando los últimos detalles

Sobre todo, hay que cuidar de su embarazo, ya es bastante sorprendente que no lo haya perdido con el golpe que sufrió – dijo el psicólogo pensando en lo que vivió con su esposa durante el embarazo

Exactamente, por eso hemos sido delicados con ella, vamos a conocerla – dijo Nathan animado de ver que su amigo por un instante volvía a ser el mismo

Minutos después ambos caballeros ingresaba a la habitación de la paciente, ella en cuento vio que su médico venía con alguien más se cohibió, algo que no pasó desapercibido para los caballeros

Hola mi paciente T, ¿Cómo estas hoy? – dijo Nathan siendo cordial

No muy bien, tengo muchas náuseas y me duele la cabeza – dijo la paciente consciente de que debía ser sincera con el medico

Miras nauseas son comunes en el embarazo, no obstante, si no comes debemos ver que no te descompenses y el dolor de la cabeza lo tendremos que ver, aunque es más o menos común en pacientes que perdieron la memoria, pero lo checaremos – dijo Nathan con voz tranquila para que ella no se asustara- por cierto, quiero presentarte al psicólogo del hospital, él te puede ayudar a comprender el proceso de perdida de la memoria

Hola es un placer conocerte, mi nombre es Anthony Brower – dijo el psicólogo presentándose a la paciente T

Continuara

Hola aquí les dejo este capítulo, espero sea de a su agrado

En esta historia quiero desarrollarla de otra forma, espero les agrade, me gustaría saber que opinan

Ahora quiero agradecer a: Carmen, fabaguirre167 , lemh2001 , Julie-Andley-00 , Mayely león, Guest Cla1969 , así como todas que las que leeen de forma anónima

Espero sus reviwes