Capítulo XI: La Mañana Final (Parte III)- Revelando la verdad y mostrando las verdaderas emociones...ligeramente

Mientras que los allí reunidos celebraban en "The Lane" por las futuras dos niñas de las familias de Kevin y Nazz, en la Casa de Doble D se podía ver al chico del gorro negro y Ami sentados en el frente del domicilio, con las piernas estiradas sobre el césped verde, conversando acerca del día en el que se habían conocido. Él había terminado de explicarle sobre el contexto vivido allí, ya que pensaban que él era el chico más rudo de la escuela, lo que llevó a que se produjera una pelea en "La Fosa".

- Y cuando nos dirigíamos a buscar nuestras mochilas antes de que se las llevaran, te vimos caer del Cielo.- De ahí ambos empezaron a reírse.- Todos pensábamos que era un meteorito. Tenías que ver la cara de Eddy en ese momento cuando se decepcionó.

Ami le acompañó, aquella risa era contagiosa.

- Bueno, yo hubiera pensado lo mismo.- Señaló la peli azul, secándose las lágrimas por aquellas carcajadas que le había causado ese momento tan cómico para, acto seguido, lanzar un suspiro.- "Me pregunto hasta cuándo durará esta paz aquí hasta que llegue el enemigo".- Se cuestionó para sus adentros, preocupada.- "Solo espero que, cuando eso ocurra, nadie resulte herido...muera".- Llevó sus manos hasta el pecho, cambiando esa expresión a una de suma preocupación por lo podía llegar a pasar en aquel vecindario de esa pequeña localidad de EEUU.

- ¿Tienes algún pensamiento que te preocupa, Ami?.- Miró Doble D a su amiga.

- Bueno, es que...- Se detuvo un segundo y respiró hondo.- Estaba pensando en lo ocurrido con esos ataques de aquellos monstruos sumamente extraños.- Dijo, como respuesta, pero, desde lo más profundo de su alma, ella tenía que decirle la verdad sobre Sailor Mercury.

Eso llevó a que Doble D enarcara una ceja ante esa revelación.

- ¿En...serio?.- Quiso saber el chico.

- Sí...Y...solo espero que nadie resulte herido o peor. No me lo podría perdonar si algo les pasa a ti, tus amigos, tus vecinos...Yo...Yo quiero protegerlos a todos ustedes.- Lo decía como si se estuviera quitando de encima un enorme peso en su espíritu, algo que alertó al chico a su lado.-

- Espera, Ami, ¿de qué estás hablando? ¿Protegernos? ¿Qué quieres decir con eso?.- Pidió el muchacho a ella, por lo que su amiga lanzó un suspiro y lo miró a los ojos.

- Doble D.- Su tono de voz resaltaba preocupación y más al tratarse de que ya no podía ocultarlo más.- Hay algo que necesito decirte.- Dijo, mientras que él sentía como una serie de escalofríos le recorrían la espalda, bajando hasta el final mismo de su cuerpo pero él se mantenía firme, como un Capitán de Navío ante la tempestad de altamar.

- S...Sí, Ami...¿Qu...Qué es?.- Preguntó con un cierto tartamudeo en su tono de voz.

- Necesito que esperes aquí por unos segundos.- Pidió ella, levantándose del césped, buscando algo en sus bolsillos de sus pantalones en el lado derecho, logrando sacar un secreto que mantenía oculto: Se trataba de un Cetro de color azul bebe junto a una Joya de esa misma tonalidad pero oscura que se hallaba en la parte superior. Tenía dos Alas a ambos lados de la Piedra Preciosa y grabado, en dorado, el signo astrológico de Mercurio en el frente de la Joya. Esto no pasó desapercibido por Doble D al notar ese extraño artefacto en poder de su amiga.- Estoy segura de que tú sabes bien qué significa este signo.- Reveló ella lo que traía consigo, dejando al otro sin palabras.

- Sí...Es el signo astrológico del Planeta Mercurio.- Respondió el chico con la garganta seca, tratando de controlar esas emociones que se desbordaban como un río embravecido tras las lluvias que lo alimentaron. Y pronto fue uniendo todas las piezas del rompecabezas, uno por uno, el contexto, todo lo vivido desde el primer día.- ¡¿Podría ser...?!.- Se detuvo, el corazón le latía a más no poder contra su pecho.- Ami...¿Tú eres Sailor Mercury?.

Su respuesta vino con un asentimiento de la cabeza en su amiga.

- Sí y todas mis amigas que han venido aquí, también, ya que somos las "Sailor Senshis".- Respondió ella, dejando sorprendido al otro

- ¿Te refieres a ese grupo de chicas que protegen a Tokyo del enemigo?. Recuerdo haber leído algo de eso en un artículo del periódico.- Alegó el joven.

- Sí, esas somos nosotras.- Dijo Ami con pesar en su voz y bajando la cabeza, sintiendo tristeza por haberle ocultado algo así a la persona que fue muy amable con ella.- La razón por la que te estoy contando todo esto es...bueno, en el caso de que ocurran nuevos problemas con las "Malignas"/"Youmas", sabrás a quien pedir ayuda.

- Oh...S...Sí, por supuesto.- Reconoció Doble D esa postura. Él también quería decir algo más pero se contuvo, no podía ni tampoco deseaba mostrar sus sentimientos en un momento tan tenso como ese.

Se produjo unos segundos de puro silencio entre ambos chicos hasta que la segunda fue la que lo quebró, mirando hacia el Cielo y lanzando un hondo pero feliz suspiro, juntando sus manos. Doble D la miró por un segundos antes de desviar sus ojos por la timidez que sentía junto al rubor de sus mejillas carmesí

- "Oh, por Dios, otra vez este sentimiento en mi interior".- Pensó mientras que sentía el latir de su corazón a más no poder cuando estaba con ella.- "¿Por qué? ¿Por qué los sigo manteniendo adentro mío?".- Su mirada volvió hacia Ami antes de desviarla, nuevamente, para sacar una simple conclusión.- "No...No puede ser verdad...P...Pero yo pienso que...".

- ¿Doble D?.- Le llamó Ami a él.

- ¿S...Sí, Ami?.- Se giró rápidamente para verla.

- Hoy no he visto a mi amiga, Rei, mientras que todos los demás se encuentran en "The Lane". Estoy un poco preocupada.- Habló con aquel tono y notándose más en su rostro y eso se reflejó, también, en el otro.

- ¿Crees que todavía siga en lo de Eddy?. Tampoco lo vi desde esta mañana.- Alegó Doble D ante esas dudas que circulaban por allí.

Su "respuesta" vino en forma de una columna de humo que llamó su atención, viniendo calle abajo, justo en la domicilio de aquel domicilio y con ella vinieron más de las citadas.

- Qué extraño. ¿Por qué Eddy encendería su chimenea tan temprano en el Otoño?. Aún ni hace un frío tan intenso.- Se preguntó el intelectual con dudas en su mente.

- Debe ser Rei con sus "Lecturas de Fuego".- Dio Ami una teoría acerca de las posibilidades que estaban ocurriendo allí.

- ¿"Lecturas de Fuego"?.- Doble D la miró asombrado.- ¿Quieres decir que ella es una Psíquica?.

- Sí, así es: Rei es una Psíquica.- Respondió la otra, mientras que comenzaron a caminar.- Me gustaría saber qué estará averiguando ahora.

- Vayamos a averiguar entonces.- Le apoyó el chico, dirigiéndose ambos hacia aquel domicilio.


Hacía 15 minutos antes, Eddy se había despertado, bostezando y estirando su cuerpo. Miró el reloj que estaba sobre la pared, las 7 de la mañana, sonrió tranquilamente, pensando en alguna nueva estafa para ese día. Partió para cambiarse, vestirse adecuadamente pero cuando estaba por dirigirse hacia la cocina para hacer sus famosos Omelets, se detuvo, quedándose frío y quieto ante la figura que se hallaba en la Sala Principal: Sentada al estilo de La India frente al fuego que comenzaba a encenderse en la chimenea, descubrió a aquella chica que había salvado el día anterior, Rei.

Sintió que su corazón pegaba un brinco, preguntándose qué estaba haciendo allí, por lo que, escabulléndose, asomándose, poco a poco y sin hacer ningún tipo de ruido, notó que ella parecía estar rezando enfrente de aquel Elemento.

- Rin, pyou, tou, sha, kai, jin, retsu, zai, sen.- Comenzó ella a lanzar una especie de "Canto" mientras que las llamas comenzaban a crecer, poco a poco.- Muéstrenme lo que pueda pasar este día, Oh Llamas Sagradas.- Pidió al citado que le ofreciera una visión del Futuro.

Una vez dicho eso, las mismas fueron cobrando forma e imagen: Allí se podía ver a Sailor Mars, llorando ante un joven que lucía una Armadura teñida de rojo oscuro, quien yacía pacíficamente en el suelo. No podía ver su rostro pero era como si lo hubiera conocido toda una vida. Pronto, la imagen desapareció para ser reemplazada por otra, donde se mostraba a un chico de cabello negro, ojos color rojo, luciendo un tipo de uniforme de color gris, botas negras, una capa roja en su espalda y quien reía de pura maldad.

Una vez que las llamas terminaron por convertirse en ascuas que se enfriaron, dejaron, como resultado, a una sorprendida Rei ante esos hechos, al igual que con Eddy. Ambos querían respuestas a sus preguntas.

- "¿Q...Quién era ese chico de la imagen? ¿Y por qué estaba llorando?".- Quiso saber ella con preocupación en su interior.


- "¿Por qué Mars estaba llorando así? ¿Y ese chico por el cual estaba llorando?".- Se preguntó Eddy, muy preocupado, para sus adentros.


Rei se dio cuenta de que él la estaba espiando desde el pasillo.

- Puedes salir de allí, Eddy. Sé que estás ahí.- Le habló con un tono de voz calmado, llevando a que éste se congelara al ser atrapado.

- Emm, Rei, ¿qué clase de "Hocus Pocus" es lo que hiciste?.- Se acercó con ciertas dudas y temores en su ser.

- Estaba haciendo mi "Lectura de Fuego" rutinaria, todos los días lo hago.- Le explicó ella, mientras que se levantaba de donde se hallaba sentada.

- Oh...¿En serio?.- Preguntó Eddy a ella.

- Sí, es una visión del Futuro.- Continuó explicándole al chico, quien seguía un poco confundido.- Además, no sé qué pasará, pero...si llegara a ocurrir en algún momento...- Se detuvo un instante.

- ¿Rei?.- Llamó el chico a la muchacha.

- ¿Sí?.- Sus pensamientos y temores fueron interrumpidos por esa voz, mientras que Eddy permanecía en silencio hasta que, finalmente, decidió hablar.

- Hay, bueno, algo que quisiera decirte. Umm...más bien es preguntarte.- Pidió su atención.

- ¿Qué es?.- Deseó saber Rei, alzando una ceja.

- Bueno, ummm, tú...me recuerdas a alguien...A alguien que he soñado y...- Eddy comenzó a tartamudear al estar cerca de ella.- ¿Tú...de alguna forma...uh...estás relacionada con "Sailor Mars"?.

Al dar a conocer esa pregunta que tenía consigo, pudo notar como el rostro de la chica se iba volviendo pálido al tener esa interrogante.

- ¿Cómo lo sabes?.- Deseó saber ella.

- Bueno...cuando yo fui noqueado después de salvarte de aquel coche, tuve un sueño muy raro, en donde estaban tú y alguien más en un sitio nevado, debiendo ser el "Polo Norte" o algo así.- Comenzó Eddy a relatarle todo lo que había vivido en ese momento onírico. Notó que Rei estaba más pálida, por lo que, levantando sus manos, ella fue hasta uno de los sillones.

- Yo...necesito sentarme un momento.- Pidió y lo hizo.

- ¿Es algo que dije?.- Quiso saber el chico de baja estatura, recibiendo un movimiento de cabeza por parte de la peli negra medianoche.

- No...No es eso, no eres tú.- Dijo Rei en ese momento.- Es solo que me trae malos recuerdos de lo vivido ese día.

- Espera, ¿recuerdos? ¿Quiere decir que tú estuviste allí?.- Se acercó el joven hasta ella para estar más cerca y así saber un poco más del contexto pasado. Levantó la cabeza, notando a aquel chico, quien había sido muy amable en darle un techo donde pasar la noche y no podía dejarlo sin conocer la verdad. Juntó coraje y respiró hondo, mientras que él se sentaba a su lado.

- Fue aquel día en el que fuimos al "Negaverso", la batalla final contra la Reina Beryl, quien había enviado a sus mejores Brujas, sus "Tropas de Élite" conocidas como las "Doom and Gloom Girls" para emboscarnos, acabar con nosotras una por una.- Bajó la cabeza ante la vergüenza de lo ocurrido.- Júpiter fue la primera en caer, luego Mercury y finalmente Venus. Solo quedábamos Sailor Moon y yo en ese momento, de pie...Hasta que yo decidí enfrentar mi destino.- Eddy sintió que se le encogía el estómago al oír esa historia cargada de muerte, tragedia, dolor y destrucción. Era como si se le hubiera caído encima una tonelada de ladrillos y lo sepultara bajo los escombros.

- No...Eso...Eso no pudo haberte pasado a ti...¿No es así?.- Inquirió con preocupación.

- Desgraciadamente, sí, eso fue lo que me pasó.- Continuó con el relato.-

Eddy quedó petrificado ante esa confirmación.

- Pero...P...¿Cómo? ¡¿Cómo es que sigues viva ahora?!.- Le interrogó, asustado porque parecía que estuviera hablando con un fantasma.

- Gracias a la valentía de Sailor Moon, salvándonos a todos, sus amigas.- Rei retomó la historia con calma.- Después de todo, somos sus Protectoras, las Guardianas de la Tierra.- Lanzó un suspiro.- Pero, si no hubiera sido por ella, tras vencer a la Reina Beryl, nosotras no hubiéramos renacido como las que somos, sino en otras personas, sin recuerdos de quiénes éramos...hasta volver a despertarlos como antes. Y eso es algo que no me gustaría volver a experimentar ahora.-

- ¿Re...Renacer?.- Eddy había prestado atención a toda la historia relatada por Rei pero aquella palabra era una que le quedaba grabada en su mente. Ahora lo podía comprender todo desde aquellas visiones que tuvo hasta el sueño de la otra noche, reflejando su Pasado como él había sido su leal Caballero. Quería saber más cuando, de golpe, el timbre de su casa comenzó a sonar, sacándolo de sus pensamientos.- Hmmm, deben ser Doble D y Ed.- Dijo el chico a Rei, dejando la Sala Principal para ver quiénes eran y abrir la puerta que no estaba lejos.

Cuando lo hizo, allí estaban Doble D, Ami, Ed y Hotaru, siendo aquella chica quien había visto, también, el humo desde la chimenea.

- Hola, chicos.- Saludó Eddy al verlos allí reunidos en el umbral de su domicilio.- ¿Qué les trae por aquí?.

- No mucho pero vimos el humo que venía desde tu chimenea.- Respondió Doble D sobre ese acontecimiento que se vio en la cuadra.

- ¿Estaba Rei haciendo sus "Lecturas de Fuego"?.- Se acercó Ami, recibiendo, como respuesta, un movimiento afirmativo de Eddy con la cabeza.

- Sí, así es.- Dijo el chico de baja estatura.

Una vez que entraron al domicilio, se pusieron a hablar de lo que estaba pasando ese día y para sorpresa de sus amigos, Eddy no hizo hincapié con hacer alguna estafa en el vecindario, algo que no pasó desapercibido en sus dos amigos.

- "Qué extraño. Él siempre tiene una idea en mente para efectuar una estafa pero ahora no. Me pregunto qué es lo que hizo mantenerse así, tan tranquilo este día".- Pensó Doble D ante ese hecho. Recordó aquel susurro que Ed le había lanzado la noche anterior, sobre el por qué estaba su amigo comportándose de esa manera tan extraña y la razón era Rei. Él sonrió.- Es gracioso, parece que nosotros, los Eds, hemos sido picados por el "Bichito del Amor". Cupido nos ha dado con sus Flechas".- Dio en el blanco aquel suceso.

Sin embargo, lo poco que ellos sabían era que aquello no era, únicamente visto desde el campo del amor, sino que, a su vez, era una prueba, tanto física como emocional. Y que todo el "Cul-De-Sac" experimentaría el dolor.

Porque la hora de invadir y destruir estaba cerca.


Capítulo 11 1/2: Preparación

[Antes que nada, les aviso que este capítulo que forma parte del primero aquí, fue subido, al igual, por la autora, Yuki Mizuno, en su reedición del 2009.].

Eran, ahora, las ocho de la mañana en la pequeña Comunidad de Peach Creek pero hacia los Bosques y el antiguo "Parque de Caravanas" junto al "Cul-De-Sac", una figura sombría iba avanzando entre aquellos árboles de aspecto siniestro y la cueva cubierta por el musgo: Allí se hallaba el Castillo de Lady Ultima y dentro de sus paredes se encontraba el Cuartel de los Generales junto a sus habitaciones correspondientes. Una de ellas, en particular, era donde discutían los planes a seguir con respecto a las órdenes dadas por la Monarca.

Allí se hallaban seis adolescentes junto a sus respectivos colores: Weiss (Blanco), Russo (Rojo), Azure (Azul), Kin (Dorado), Alani (Naranja) y Midori (Verde).

- Ok. ¿Cuáles son los pasos a seguir para atacar?.- Preguntó Russo a Weiss, quien se quedó pensativo por unos segundos hasta sacar sus conclusiones.

- Tú y yo nos haremos cargo de aquellos que están desde el Pasado. ¿Qué piensas?.- Miró a su amigo, el cual tenía una sonrisa de pura maldad.

- Sí, me parece perfecto y es justo lo que yo había pensado y vamos a necesitar a otro General allí con nosotros, en el caso de que las cosas se vuelvan un poco complicadas, ¿sabes?.- Alegó el pelirrojo.

- Correcto.- Le respaldó Weiss con un movimiento de cabeza y miró al resto de sus Camaradas.- Ok, ¿cuál de ustedes, Novatos, quiere venir con nosotros?.- Preguntó pero nadie dijo nada, por lo que tuvo que hacerlo a la "vieja usanza".- Bien: "Enny-Mini-Myni-Moe" de nuevo.

Los otros se miraron nerviosos, preocupados por saber cuál de ellos iría con ellos.

- Yo iré.- Se ofreció Midori, dando un paso al frente.- No quiero que mis amigos resulten heridos, así que yo me ofrezco.

- Muy buena elección.- Felicitó Russo a la chica.- De acuerdo, los otros Generales irán tras los demás y se harán cargo de que no hayan testigos molestando por los alrededores. Nos iremos en cuanto...

De repente, una voz siniestra retumbó por los alrededores.

- ¡Vengan a mí, "Generales de los Elementos"! ¡Los necesito a ustedes seis a mi lado!.- Exclamó la citada, mientras que ellos partían hacia el Salón del Trono.


Los cuatro Generales Novatos lanzaron un suspiro. ¿Cómo se habían enrolado con los "Soul Busters"?. Todo tenía sus comienzos en aquellos bosques, hacía dos años atrás.

- ¡Oigan, dejen de holgazanear: Lady Ultima nos está llamando!.- Se recobró Russo de ese Pasado, mientras que Weiss y él desaparecían en una brillante luz de colores rojos y blancos.

Los otros se quedaron viendo aquel suceso e hicieron lo mismo como los dos anteriores.


Y allí estaban, en el Salón del Trono, arrodillándose ante la joven Reina.

- ¿Sí, Lady Ultima?.- Preguntaron los presentes allí reunidos.

- Ha llegado la hora: El momento de atacar este patético vecindario.- Mostró la citada, en su Esfera Negra, las imágenes de dicho emplazamiento urbano junto a las imágenes de los adolescentes que estaban allí: Doble D, Eddy, Ed, Ami, Rei y Hotaru.- Mercury, Mars y Saturn serán sus primeros objetivos. Cuentan con una gran cantidad de energía en sus almas, de la que necesito para despertar mi Yo Interior.- Habló y luego hizo una pausa para volver a lo que estaba diciendo.- Y recuerden: Las quiero aquí...con vida.

- Sí, Lady Ultima.- Acataron los presentes sus órdenes para desaparecer en sus respectivos colores , dirigiéndose hacia el vecindario del "Cul-De-Sac".