-Vamos cariño, nos vamos a divertir.

Esa era la tercera vez que una mujer despampanante le ofrecía ir a un lugar privado, a "divertirse", hasta ese momento las había ignorado deliberadamente, hablando con su amigo Naruto como si ellas no estuvieran ahí. Naruto se divertida por como su amigo era molestado, creía que se lo merecía, por haber ignorado los sentimientos de su amiga. Aunque estaba seguro de que explotaría en cualquier momento.

- ¿Por qué se están tardando tanto?

Estaba fastidiado, habían llegado hacia media hora, aún cuando la cita había quedado planeada hace veinte minutos.

-Seguro ocurrió algo.

Fue la escueta respuesta de Naruto, mientras se entretenía con una rubia de curvas pronunciadas quien lo llamaba para que bailara con él. Siendo rechazada con amabilidad, aunque aquella mujer seguía insistiendo.

-Lo siento, pero él no esta disponible.

Ambos rubios dirigieron su atención a una mujer recién llegada, Sakura, con su bien cuidado cabello rosa y ojos color esmeralda, a los ojos de Naruto se veía hermosa. La mujer rubia solo se alejó de ahí sin decir palabra alguna, pero con una evidente mueca de desagrado. Mientras Sakura saludaba efusivamente a Naruto, y dándole un amigable "hola Sasuke-kun" al azabache, quien no respondió el saludo porque ya estaba de pie, acercándose a la mujer que venía con ella.

-Lo siento-. Hinata se le veía apenada, llevaba el cabello suelto, ocultando un poco el vestido que llevaba puesto.

- ¿Por qué te disculpas?

Sasuke tomaba entre sus manos la cintura de la que era su novia.

-P-por llegar tarde.

No podía alzar su mirada perlada hacia la azabache, siempre se había sentido timida ante su mirada.

-No tienes que disculparte por cosas insignificantes-. Hinata sentía aquella mirada intensa sobre su cuerpo, desvió la mirada cuando este le tomo de la barbilla para que lo mirara. -Te ves preciosa.

Vio como el rostro de su novia se volvía rojo intenso y fijaba sus hermosos ojos color luna en los suyos. Se acerco para tomar sus labios con los suyos.

-Deseaba tanto probar tus labios.

Se separo completamente de ella y le tomo de la mano para dirigirla hacia el bar en aquel restaurante. Al llegar a la barra le ofreció un asiento a su chica, para sentarse al lado de ella.

-Quiero dos copas de champagne.

Le pidió al bar tender, para después fijar su mirada en su novia, la cual tambien lo veía con curiosidad.

-Vamos a festejar que tengo a la mejor novia del mundo.

Le explico, su tono de voz era demasiado tranquilo, provocando en la contraria una expresión de enternecimiento. Se acerco tímidamente a él y unió sus labios en un toque que el azabache intensificó.

-Yo quiero festejar que tengo al mejor novio del mundo.

Al terminar la oración recibió una de esas sonrisas que le encantaban. Le dedico una sonrisa igual que la de ella, le encantaba verla feliz y sonriendo. Se había encargado de que su sonrisa no se apagara, desde que se habían conocido ese había sido su propósito, se lo había prometido.

No muy lejos de ellos estaban sus amigos, Sakura y Naruto, quienes estaban sentados en la mesa en la que antes estaban los dos chicos y en la misma que cenarían esa noche.

-¿Quién iba a pensar que Sasuke estaría de esa manera con una chica?

-Es cierto, trata a los demás como una mierda, pero a ella la trata como si fuera un diamante.

-Pero hay que aceptar que ha cambiado Sakura-chan, ya no insulta a cada persona que se le acerca, ahora solo las ignora, además, Hina-chan es una mujer que se puede comparar como un diamante, es única, fuerte, amable, brilla cuando sonríe, es la persona adecuada para Sasuke, puede ser que sean todo lo contrario, pero yo creo que se complementan.