Ashley no pudo desayunar absolutamente nada. Sentía que se le había formado una pelota de puro nervio que daba botes en su estómago. Sentía que, a pesar de las palabras de Kat, no había hecho tanto como podía hacer y eso la mantenía molesta.

_ Cariño, todo irá bien. _ La reconfortó Jessica. _ Confía en Kat, y en tu padre.

Ashley asintió, pero le resultaba complicado dejarlo ir y simplemente dejar que el resto se ocuparan. Cuando salió fuera, se encontró con Mia, que se había hecho una coleta alta. Sabía que ella tampoco había dormido bien, pero parecía mucho más descansada. Y, junto a ella, Sayoko.

Se había cortado el pelo... incluso se lo había teñido. Ashley no pudo evitar recordar que su madre lo solía llevar así. Se preguntaba cuándo habría sacado tiempo para hacerlo. La veía radiente, mucho más viva.

Dudaba que estuviera al cien por cien, pero decididamente se la veía andar con más soltura. Ashley se percató de cómo sonrió cuando sus miradas se cruzaron. Nunca había visto a alguien sentirse tan viva como lo estaba ella en aquel momento.

_ Buenos días, Ashley.

_ Buenos días, mamá. _ Ashley no pudo evitar sonreír.

_ Es mejor que no me llames así hasta que se resuelva todo, ¿De acuerdo? _ Le expresó Sayoko. _ No quiero que la gente se altere más de lo necesario.

_ ¿No tendrás que decirlo en tu declaración? _ Intervino Mia.

_ Probablemente. _ Admitió Sayoko. _ Pero prefiero que sea un secreto hasta entonces. ¿Prometido?

_ Entendido, Gina. _ Ashley asintió. Llevaba quince años sin su madre, podía pasarse un poco más de tiempo.

Jessica salió en ese momento de casa, vestida de traje y con expresión severa. Estaba claro que también estaba afectada ante la perspectiva de que su hermano estuviera pendiente de un juicio por intento de asesinato.

_ Jessica. _ Saludó Sayoko, extendiendo la mano. _ Es un placer volver a verte.

_ Ah... eras, Gina, ¿Verdad? _ Jessica extendió la mano. _ Siento mucho lo que te ocurrió.

_ No te preocupes. _ Sayoko negó con la cabeza. _ Ya estoy mucho mejor.

_ Nos veremos en el juicio. _ Terció._ Vámonos, Ashley.

Jessica se mostró fría. Era lógico. Que ella supiera, Gina era una completa desconocida, alguien que había metido a su hermano en un lío. Ashley se preguntaba cómo habría reaccionado de saber que se trataba de Sayoko.

Sospechaba que no tendría que esperar demasiado para averiguarlo. Los juzgados estaban concurridos. Ashley imaginó que, en un pueblo pequeño como aquel, un caso de intento de asesinato destacaría por encima de las habituales rencillas vecinales que se tratarían allí.

Sin embargo, hubo dos personas que llamaron especialmente su atención. La primera fue una mujer vestida con un traje pantalón... con un látigo al cinturón. No sólo por el látigo o por la enorme presencia que parecía tener, sino también porque era la primera persona de cabello blanco aparte de sí misma que había visto siendo tan joven.

Pero si ella destacaba, la mujer con la que estaba hablando, no era para menos. Era de piel mulata, increíblemente alta y con el cabello de un vivo color rosa, en un corte tipo "Bob", que le quedaba bastante bien. Sus ojos parecían del mismo color, por lo que Ashley asumió que usaría lentillas tintadas.

_ Ashley. _ Jessica la sacó de su ensimismamiento. _ Vamos dentro... el Juicio va a empezar.

Ashley tenía una sensación extraña cuando se sentó junto a Kat. Jessica le había dicho que se fuera con ella entre el público, pero ella insistió en sentarse en el banco de la defensa, impulsada por un presentimiento.

Y, frente a ellas, en el banco de la acusación, la fiscal Von Karma estaba en completo silencio, de brazos cruzados, en una postura que resultaba extrañamente intimidante.

_ Buenas tardes. _ El juez era un hombre calvo, de barba cana y aspecto severo. _ En el día de hoy, se inicia el proceso contra Richard Robins, acusado de intento de asesinato. ¿Están la defensa y la acusación listas?

_ La defensa está lista, su señoría. _ Kat tenía una mirada felina en aquel momento, pero Von Karma no se dejó amilanar.

_ La acusación está lista, su señoría. _ Respondió Von Karma, apenas cambiando su postura. _ ¿Podemos llamar a nuestro primer testigo?

_ Proceda.

_ Señorita Howard, si es tan amable.

Ashley se percató de que la mujer que subía era la mujer negra que había visto en la entrada. En la entrada no se había fijado, pero en aquel instante vio que llevaba una placa de policía en la solapa y una cadena en el cinturón.

_ Agente, indique a la sala su nombre y profesión. _ Von Karma parecía muy segura, siguiendo el protocolo.

_ Mi nombre es Akira Howard. Soy inspectora de policía. _ Dijo, remarcando su rango, aparentemente molesta por el uso de la palabra "agente".

_ Inspectora... cuéntenos su implicación en el caso.

_ Por supuesto. _ Akira sacó unas gafas de su bolsillo.

A Ashley le extrañó cómo se ajustó las gafas pues, en lugar de presionar sobre el aro sobre el puente de la nariz, presionó sobre el lateral derecho de las mismas.

_ Nos llamaron a eso de las ocho de la tarde. Un altercado en el laboratorio de JC Valley. Aparentemente, una agresión, sin víctimas mortales que lamentar. Gina Barnes, sin embargo, recibió una potente descarga eléctrica.

_ ¿Sabe cómo la recibió?

_ Bueno, la descarga provino del dispositivo Another. El suelo estaba encharcado de líquido refrigerante. Es muy conductor. La electricidad debió cruzarlo y atravesar el cuerpo de Gina.

_ Testigo… _ Interrumpió Kat. _ Por lo que describe hasta el momento… ¿Qué es lo que descartaría un accidente?

En el silencio de la sala, la pequeña risa que se le había escapado a Von Karma provocó que a Ashley se le escapase un escalofrío.

_ Por favor, señorita Katrielle Layton. No se ponga en ridículo. Testigo, continúe.

_ ¿Te acaba de llamar por tu nombre completo? _ Preguntó Ashley.

_ No… afortunadamente no sabe que tengo segundo nombre. _ Katrielle sonrió.

_ Bueno, si se me permite continuar. _ Akira tomó la palabra. _ El estado del dispositivo Another deja patente que fue destruido de forma violenta. Encontramos un bate de hierro en la escena del crimen con las huellas del acusado y la víctima.

_ La fiscalía presenta el bate como prueba. _ Señaló Von Karma.

Kat examinó el bate con detenimiento, observándolo en silencio durante unos instantes.

_ Encontraron huellas del acusado y de la víctima en el bate. _ Corroboró Kat. _ ¿Pueden indicarnos la posición?

_ Las huellas del acusado se encontraron en el mango del arma. _ Respondió Akira. _ Y las de la víctima en la parte superior. Se resistió y por eso no lograron golpearla.

_ Me cuesta imaginar a mi padre intentando golpear a alguien con un bate… _ Susurró Ashley. _ Me sorprendería verlo golpear una pelota con él, la verdad.

_ Le sorprendería la fuerza que uno puede desatar en una situación límite, jovencita. _ Respondió Von Karma.

_ Me gustaría examinar ese bate si se me permite.

_ La defensa puede proceder. _ Indicó el juez.

Kat tomó el bate y lo estuvo observando durante un buen rato. Ashley notó que el RAS estaba reaccionando. Parecía tener una función de escaneo completamente nueva.

_ ¿Puedo echarle un vistazo? _ Preguntó a Kat.

_ Sí, claro.

Ashley examinó el bate usando el RAS, que le mostró las huellas, como ya le había indicado la fiscal. Efectivamente, las huellas de su padre y de Gina estaban claramente marcadas en el objeto, pero eso no era lo único que podía ver con claridad.

Había marcas en el bate, claramente producidas por el impacto contra el acero, pero fue la posición de las marcas lo que realmente llamó la atención de Ashley.

_ Kat… las marcas están en el mago del bate… _ Señaló Ashley.

_ Entiendo. _ Kat alargó la sonrosa. _ Su señoría, dada la posición de las marcas de desgaste... y teniendo en cuenta la posición de las huellas que nos ha mostrado la fiscalía...

Kat se detuvo un momento, provocando que se formase cierta tensión en la sala. Sólo Von Karma parecía imperturbable.

_ Resulta imposible que el acusado fuese el que golpease el dispositivo Another. _ El público empezó a cuchichear.

_ Protesto_ Respondió Von Karma. _ Se han encontrado marcas de desgaste en todo el bate.

_ No lo dudo. Después de todo, un bate tiene como principal uso el golpear pelotas. _ Kat negó con el dedo. _ Pero las pelotas de cuero no dejan marcas de pintura blanca... ¡Como si lo haría la pintura del dispositivo!

Von Karma titubeó.

_ Estoy completamente segura de que, si se comparan los restos de pintura hallados en la empuñadura, encontrarán que encajan a la perfección con el dispositivo another.

_ Entonces... Debo asumir que su teoría es que la víctima fue la que golpeó el dispositivo another, ¿Correcto?

_ Es lo único que tiene sentido, ¿No cree? _ Kat la señaló con un dedo acusador. _ Las huellas de mi cliente se hallaban en el lado opuesto del bate... Por tanto, insisto, no pudo golpear el dispositivo Another.

_ Creo que la defensa tiene razón, señorita Von Karma. _ Admitió el Juez. _ Si los análisis confirman su teoría, me temo que no tendrá caso.

_ Protesto, su señoría. _ Von Karma no perdió la compostura, de hecho, sonreía. _ La fiscalía sostiene que en caso de ser la víctima la que golpeó el dispositivo Another... Lo hizo contra su voluntad.

_ Contra... ¿Su voluntad? _ Kat tragó saliva.

_ Testigo. _ Durante la conversación, Akira había estado jugueteando con la cadena que llevaba en el pantalón. _ ¿Podría aportar su visión del tema?

_ Por supuesto. _ Akira dejó su cadena y se recompuso. _ Como ya habíamos establecido, la víctima se resistió. Por si hay dudas al respecto, hemos encontrado signos de lucha en la escena, y el informe médico nos indica que, si bien no recibió contusiones por el bate, hay rasguños que indican que hubo un conflicto previo a la descarga.

_ Me gustaría adjuntar el informe médico como prueba. _ Sentenció Von Karma, deslizándolo sobre la mesa.

_ El tribunal acepta la prueba. _ El juez asintió _ ¿Y bien, señorita Layton?

_ La defensa está lista para interrogar a la testigo, si se me permite. _ Ashley la observó, que se mantuviera decidida le daba ánimos.

_ Pensaba que ya la tenías... _ Suspiró.

_ Esto sólo acaba de empezar, Ashley. Pero confía en mí, saldrá bien. _ Kat le guiñó un ojo.

_ Puede proceder con el interrogatorio. _ Sentenció el juez.

_ Inspectora Howard... _ Kat colocó la mano sobre la mesa. _ ¿Cómo cree usted que se produjo el ataque?

_ La víctima se hallaba ya en la sala cuando llegó el acusado, sentada sobre el dispositivo another. El acusado traía el bate consigo cuando entró en la habitación. Tras una discusión, trató de apartarla de la máquina y entonces comenzó el forcejeo. Podemos presumir que, durante el mismo, la acusada golpeó el dispositivo y esto provocó la fuga de refrigerante que la electrocutó.

_ Si no atacó a Gina... ¿No debería exculparlo? _ Preguntó Asley.

_ Sigue siendo el responsable de todo lo sucedido. _ Kat negó. _ Aún si no golpeó directamente, fueron sus acciones las que llevaron a Gina al estado en que se encontraba. El caso sigue siendo por intento de asesinato...

_ Pero estoy segura de que Papá no quería matar a Gina... No le he visto hacer un esfuerzo tan grande para nada que no sea ayudar a otra persona.

_ ¿Tiene algo más que decir, señorita Katrielle Layton? _ Franziska la miraba con una gran sonrisa en sus labios.

_ De hecho, sí. _ Se cruzó de brazos. _ Pero no te va a gustar, Von Karma.

_ Pruébame. _ Von Karma dejó el látigo sobre la mesa.

Kat estaba a punto de tirar un triple. No tenía nada para sustentar lo que estaba a punto de decir. Pero no sería la primera vez, y desde luego no la última, que se lanzaba a la piscina de esa manera.

_ La defensa va a demostrar no sólo que el acusado no quería matar a la víctima, si no que, de hecho. _ Golpeó la mesa y señaló a Franziska con el dedo. _ Lo único que buscaba era salvar su vida.