Nimbus no se consideraría la persona más suertuda por obvias razones, sin embargo tiene que admitir que no ser sentenciado a juicio es algo bastante bueno.
Ha pasado ya casi un mes desde que fue metido en la cárcel y la verdad no fue del todo incómodo ya que ha hecho verdaderos amigos allá adentro e incluso, si se atreve a decirlo, ha cambiado la vida de varios de ellos para mejor así que no puede decir que todo ese tiempo fue perdido,
Lamentablemente va a tener que ponerse a entrenar de nuevo a pesar de los combates que él y Luna han tenido frecuentemente en sus espacios mentales estos solamente mejoraban la capacidad analítica y de reacción ya que el cuerpo onírico y el físico no estaban realmente conectados por lo que cualquier ganancia comilla física comilla no era transferible.
Aunque sinceramente él podía ver el porqué no fue enjuiciado, varios de los ponis encarcelados e incluso El guardia con que se hizo amigo, el cual incluso hasta ahora todavía no sabía su nombre, le habían dicho que era él exactamente; un alicornio la , supuesta, mezcla perfecta de las razas pegaso, unicornio y terrestre.
Él sin embargo era otra clase de alicornio siendo la combinación de las razas thestral, Will o wisp y Laycan, razas que Nightmare Moon creo.
Dejando de lado el desastre político, esto sinceramente explicaba la razón del por qué era tan malo volando él no tenía la ventaja genética que tenían los pegasos para controlar su magia de viento naturalmente
Por supuesto que Luna al ver su predicamento le enseñó la magia por lo que ahora que podía volar como y cuando quisiera, por supuesto que su estilo aún era un poco amateur pero progresaba lentamente.
Y si todo lo demás fallaba siempre puede ser una escoba como una especie de tabla voladora.
Ahora sí tan solo él fuera capaz de invocar a Elizabeth la motocicleta voladora de Sirius.
Nimbus no tenía pruebas pero tampoco dudas de que la máquina era al menos en parte consciente por lo que honestamente se sentía mal al dejarla acumulando polvo ya que estaba seguro que la llave para encenderla fue obliterada cuando fue transportado a este mundo.
El único otro gran evento que ocurrió fue que Nimbus conoció a la hermana mayor de su cita para la gala.
Y contrarió a lo común, ella fue la que no dio una buena primera impresión.
Nimbus le mandó una ceja alzada a Luna quién, para su crédito, ocultaba bien sus nervios.
El mago sin embargo podía ver a través de ella y lo que vio fue un manojo de nervios con la forma aproximada de un pony.
"Luna, relájate un poco, actúas como si me fueras a presentar a tus padres o algo."
Parecía que la yegua le iba a explotar en la cara debido a su gran cantidad de estrés, antes de considerar sus palabras, sacudir su cabeza y lanzar un refinado pero pesado suspiro.
"Tienes razón, tienes razón, simplemente estoy sobre pensando las cosas, de nuevo, aunque tu broma no estaba muy alejada de la realidad, Celestia..., mi hermana, bien podría haber sido una madre para mí, siendo ella quién nos crio …, cuando nuestra progenitora nos abandonó."
Si Nimbus no hubiese tenido un súper oído de murciélago él no hubiese sido capaz de escuchar eso último ya que la princesa de la noche lo dijo en un tono muy, muy bajo.
El semental aún no acostumbrado realmente a las costumbres de efecto pony, rodeo lo mejor que pudo la espalda de la afectada yegua con su ala cuidadosamente, dándole el equivalente humano a un abrazo de lado.
Por un momento la princesa se congeló en su lugar y un pequeño y momentáneo pánico se instaló en el pecho del mago creyendo que había hecho algo mal, sin embargo parece ser que es un movimiento fue el correcto ya que la princesa, aprovechando que estaba en un lugar donde solo los dos estaban presentes, decidió dejar caer su máscara real, al menos ligeramente, y dejarse reconfortar en el abrazo de quién sin saber le robó el corazón.
También fue afortunado para los dos que esa clase de afecto físico significará lo mismo para ambas especies.
Ambos se quedaron quietos, disfrutando secretamente del calor del otro hasta que escucharon un sonido extraño.
Con sus orejas girando intentando enfocarlo ambos guerreros se despegaron mutuamente de forma lenta, reclusos pero alertas.
Una mirada rápida a los ojos del otro bastó para saber lo que pensaban y con cautela siguieron el sonido, con cuernos calientes y hechizos en lengua.
Siguieron el sonido hasta una parte algo oculta de los jardines reales, ambos se escondieron detrás de un gran y decorado arbusto.
"... Eso es ?" .- Se preguntó Nimbus, incredulidad pintando su voz.
Luna resoplo de furia antes de lanzar un gruñido de lobo.
"Masticación, Si.".- La princesa apagó su cuerno y pisoteo de forma audible mientras salía detrás de la planta.
"CEEEEEEEEEEELY".- Nimbus alzó una ceja pero la siguió de cerca.
Luego tuvo que usar todo su auto control, entrenamiento de Oculmancia y memorias no tan bonitas para no estallar en carcajadas.
Por que quien hacia ese sonido era la Diosa gobernante, la deidad solar, la Asesina del gran Kukulkán, una entidad de milenios de antigüedad y sabiduría.
Esta imponente pero amable figura estaba actualmente atiborrándose de un pastel extra grande de capa quadruple de chocolate mientras lo comía cual bestia salvaje.
La yegua blanca se congelo a medio mordisco, su cara estaba completamente cubierta de glaseado el cual se derretía rápidamente debido a su alto calor corporal.
Pero por mas que se quería mover no podía hacerlo debido a la paralizante mirada que su hermana pequeña le dirigía.
"hey, … Lulú, … que tal?".- Dijo lastimosamente Celestia, antes de terminar su mordida.
"NADA DE LULÚ, QUE EN NOMBRE DE LOS SIETE CIRCULOS DEL TARTARUS CREES QUE HACES.".- El grito iracundo de Luna podría haber levantado a un muerto.
Su hermana simplemente se rio nerviosamente antes de levitar un trozo al rostro de su hermana.
"¿Hum? ¿Quieres?".- La inmortal y sabia gobernante, dejo escapar un pequeño chillido cuando vio una vena palpitar dolorosamente en la cabeza de su hermana pequeña.
El rechinar de los dientes de la princesa nocturna era bastante audible y el gruñido que surgía de lo mas profundo de su garganta solo podia ser catalogado como animalístico.
"¿cuantos?".- Pregunto Luna en una exhalación.
"Cuantos, um, que?".- Celestia trago saliva ante la letal mirada que recibió por su pregunta, el cuerno de la alicornio mas pequeña empezaba a brillar listo para ser usado en cualquier momento.
"Cuantos, pasteles …, al día?".- Su voz era engañosamente calmada, solo el mas mino sub-tono de furia controlada era notable.
La alicornio mayor iba a decir algo, una excusa seguramente, pero su hermana pequeña se lo impidió dando un fuerte paso afrente mientras extendía sus alas a toda su envergadura.
"CU,AN,TOS!".- Esta vez no fue una petición.
"SIETE, AVESES ONCE".- La atemorizada princesa chillo mientras daba un pequeño salto atrás.
Silencio callo en el jardín mientras dos oji-verde intentaban comprender tal absurda cantidad de azúcar, harina y diabetes.
Luego sin previo aviso el parpado izquierdo de Luna empezó a temblar antes de que on un rugido digno de un dragon esta se abalanzará sobre su hermana.
Nimbus solo pudo morderse la lengua mientras intentaba no reír con todas sus fuerzas, ala vez que las veía rodar por el suelo en una maraña de miembros y pelo.
"ASI QUE AQUI ES DONDE TODO EL PRESUPEUSTO DEL CASTILLO SE VA, EH?!".- Anuncio Luna antes de darle un buen bofetón al gran trasero de su hermana, el cual fue increíblemente sonoro.
"OI! NO ES MI CULPA QUE TU SIMPRE ESTAS TAN DELGADA QUE TE CONFUNDEN CON UN LAMPARA!".- Grito de regreso Celestia mientras le intentaba dar un golpe el delgado estomago de su hermana solo para retroceder con un pequeño grito ala vez que acunaba su pesuña.
"AL MENOS AMI NO ME LLAMAN "SU GLUTEOX MAXIMUS" A MIS ESPALADAS, CADA VEZ QUE ME DOY LA VUELTA".- Regreso Luna mientras sometía a su hermana baja una extraña llave de estrangulamiento.
Celestia reacciono rodando por el suelo intentado que su hermana la suelte, sin querer embarrando a las dos con lo que quedaba del pastel.
Fue en este momento cuando las dos princesas se congelaron apunto de arrancarse sus largos y flotantes pelos a mordiscos ya que escucharon a alguien riéndose a su maxima capacidad pulmonar.
Las mejillas de Luna se prendieron en puro horror y vergüenza sabiendo muy bien a quien le pertenecía la risa.
Y efectivamente cuando ambas alicornios miraron hacia donde venia la risa observaron a Nimbus Firebolt el cual se estaba apoyando lo mejor que podia en un arbusto mientras se reía tan fuerte que había empezado a llorar.
Notando sus miradas el semental se intento calmar, solo para redoblarse con mas fervor al verlas cubiertas de cuerno a pesuña de glaseado de chocolate.
Ahora el pobre mago se sujetaba el estomago, deleitándose de sus rostros sonrojados por la vergüenza.
"Celestia …"
"Si? Luna"
"Creo que te odio.".- Luna dijo esto con un tono monótono y objetivo, lo que solo provoco a Nimbus reírse aun mas fuerte.
Después de que las dos se limpiaran las presentaciones empezaron, aun que el pobre semental estaba a un chiste de volver a derrumbarse a carcajadas.
No pudiendo evitar sobreponer los rostros avergonzados y cubiertos de pastel de las hermanas cuando estas intentaron recuperar sus decoros.
Realmente fue una suerte que ningún guardia fuera investigar al jardín donde un semental desquiciado se estaba riendo a muerte por cerca de 15 minutos.
Otra cosa a mencionar fue la inspirada vista de una tal Twilight Velvet.
"A si que la madre de Twilight Sparkle... , hm, dime Luna como fue que ella se entero de que estaba en el castillo?".- Pregunto Harry a Luna telepáticamente mientras se dirigían a encontrarse con la yegua.
La princesa de los sueños sacudió la cabeza mientras una expresión confusa apareció en su rostro.
"No sabría decirte Harry, ella no aparece en ninguno de los archivos del militarizado, aun que su hijo es un capitán en el imperio de Cristal, o es una de los míos así que el echo de que su pudiera de tu existencia en primer lugar es desconocido y que ella supiera de tu localización actual es aun mas extraño. Esto no parece una trampa … pero … ".- La duda y paranoia era algo que el mago entendía bien.
Este sin embrago calmo a la diosa al rodearla con un ala antes de decir.
"Tal vez lo sea, tal vez no, pero en mi experiencia la mejor forma de encontrar una trampa es activarla. Además sabes que solo necesito mirarla a los ojos para saber si hay algo mas oculto.".- Esto pareció funcionar ya que la princesa tomo una profunda respiración y dejo escapar una pesada exhalación antes de asentir ya mucho mas calmada.
"Pero si quieres puedes decirme lo que sepas de ella para que no valla a ciegas".- La princesa le dirigió una sensación de agradecimiento, consiente de su intento de aliviar sus nervios pero acepto su propuesta de todos modos.
Por lo que la princesa pudo reunir en tan poco tiempo Twilight Velvet era una empresaria exitosa la cual dirigía una modesta empresa de textiles, su esposo por otro lado era Night Light un exaltado entrepreneur el dirigía el mas exitoso club para Caballeros de todo Canterlot, ubicando a la pareja como de clase Alta-media.
La mente analítica de Harry corría a toda marcha analizando la información y llego a una extraña conclusion.
"Luna, amiga mía voy a ser franco".- La seriedad de la voz de su amor secreto hiso a la princesa tensarse, esperado una noticia desagradable.
"Sabes bien que no soy un pony o al menos no siempre lo fui, no cresi con vuestra cultura o costumbres, por lo que hay muchas cosas que descubro día a día y luego hay otras que simplemente parecen ridículas, una de esas cosas es … ".- Aquí el mago se tomo su tiempo buscando la palabra correcta, mientras la ansiedad de Luna se disparaba cual cohete.
Al final el semental dio un resoplido antes simplemente decirlo.
"Es en lo en tu cara que vuestros nombre son!".- Luna parpadeo realmente no esperando eso.
"Discutiremos esto mas tarde, mi amiga pero preguntante a ti misma ¿Cuantos nombres únicos existen y por que la mayoría caen perfectamente con el talento, personalidad o destino que fueran a obtener?".- Con eso el semental se encontró con la madre de la pony fallecida, dejando a una pensativa princesa atrás.
