( watch?v=SbQ8vi2bK6A)
(Con la música sonando se vio el pie de Camilo ajustar su zapatilla golpeando la punta en el suelo y se le vio levantar el rostro con una mirada decidida, para posterior mostrar la imagen de cada miembro de los peleadores y sus compañeros Bakugan en círculos con sus respectivos colores de atributo, hasta que un destello mostro el titulo del fic)
¡Hey! Yo quisiera brillar como lo hace el sol ardiente.
(Dan y Drago caminan hasta un barranco, viendo salir el sol).
(¡Adelante sigue avanzando!)
(En secuencia rápida, se ve a Shun saltando en ramas con movimientos ninjas, Marucho en la computadora del Interespacio y Snow en entrenamiento, corriendo seguido de un H en bicicleta).
¡Ve! Y con la frente en alto ¡siempre debes estar listo!
(Serena termina de escribir unos papeles y suspira aliviada, para luego ver como como el Sabio Alfredo dejo una pila más de papeles y ella suspira rendida, mientras Elright la ve a su lado con una sonrisa nerviosa)
(¡Nadie me detendrá! ¡Seré más fuerte!)
(Serah ayudando a Julie con unas cosas y Page y Rafe ordenándole a sus compañeros Bakugan atacar).
Aquellos sentimientos que nos unen sincronizaran, porque nuestros lazos irrompibles se harán.
(Camilo estaba sentado arriba de un estanque con una rodilla levantada y la otra pierna estirada y Leonidas en su forma esfera estaba frente a él. En el fondo en donde estaban, por un lado se vio a Dan y Drago lanzar una llamarada para desvanecer la imagen y mostrar en el otro lado a Marduk y Vladitor lanzar un rayo de energía).
¡Fuertes hay que ser! ¡Debemos continuar! ¡Juntos los dos!
(Leonidas se dio la vuelta y Camilo se levanto para intentar tomarlo, pero cuando iba a hacerlo, Leonidas se desvaneció en el polvo. Camilo apretó sus manos y una lagrima se deslizo por su mejilla hasta caer al estanque, donde se emitieron ondas y se pudo ver en el reflejo a Camilo y Leonidas volverse uno en energía y mostrar a Zangetsu).
¡Vamos ya! Esta batalla ardiente se volvió ¡Vamos ya! Pues rendirse no es una opción.
(Leonidas atacaba con sus garras a Iron Dragonoid, quien lo intentaba atacar con sus rayos que eran evadidos, hasta que Leonidas cargo un relámpago en su boca y lo lanzo contra su enemigo).
¡Vamos ya! Y siempre invertir el resultado aunque este contra ti.
(Anubias, en su forma Gundaliana, ordeno a su Bakugan, aunque este igualmente fue golpeado por el ataque de Leonidas. Mientras Camilo activaba otro poder, se vio en un espacio oscuro a Leonidas avanzar en sus distintas etapas evolutivas; desde la primera forma, luego Omega, Lumino y al saltar, se vio su actual forma de Blazar, crear una espada de luz y chocar con el cuerno de Iron Dragonoid, creando una explosión de humo).
¡Vamos ya! Mi sueño nunca voy a abandonar.
(Unas manos fueron tras Dan y Drago, y ambos tenían un extraño circulo en el dorso de su mano y encima de su pecho respectivamente; pero Drago quemo esas manos con sus llamas).
¡Vamos ya! Con firmeza lo podré alcanzar.
(Se ve en lo más alto de una roca a Goodwin, peldaños más abajo de él están Anubias y Sellon, más abajo de ellos sus compañeros Bakugan y delante de todos ellos aterrizaron cuatro Mechtogans, todos delante de Dan y Drago).
¡Vamos ya! Tu mano extenderás para así tu meta al fin lograr alcanzar.
(Una mano se poso en el hombro de Dan y al ver, se trataba de Mira que le sonreía, él también sonrió y junto a Drago canalizaron energía y crearon un portal en el cielo donde aparecieron Zenthon y Titan Zenthon detrás de ellos).
¡Ve! Sigue luchando (con energía y pasión).
(En medio de un campo de flores, se vio al encapuchado de blanco que observaba todo lo que hacían los peleadores con una sonrisa misteriosa).
¡Si! Debemos ir para alcanzar los sueños que hay en nuestro corazón.
(Camilo atrapo una carta poder que cayo del cielo y tomando sus cosas, camino hacía en dirección a una parte de Nueva Vestroia. La música termina mostrando una imagen de Camilo caminando, Dan de lado sonriendo desafiante y detrás de él, a una Claire decaída).
Capitulo 22: Búsqueda del Alma
Después de que Camilo y Leonidas ingresaron al interior de la cueva, habían caminado algunos minutos. La cueva no era completamente oscura, habían unos pequeños agujeros y espacios abiertos en el cielo y paredes para iluminar un poco además de la luz de los soles que llegaba por la entrada de la cueva; pero a medida que más se adentraban, la luz se hacía más escasa.
A Leonidas le daba escalofríos mientras más se adentraba, nunca lo admitiría, pero le tiene cierto miedo a la oscuridad desde siempre. No poder ver bien tu entorno, no saber si hay alguien cerca tuyo... sentirse vulnerable y solo, era algo que odiaba sentir, por eso dormía siempre en la mesa de noche en la habitación de Camilo, confiaba en que él si estaría a su lado como siempre.
Siguieron caminando más al interior, donde alcanzaron a ver un pequeño haz de luz más adentro, lo siguieron, llegando una parte ancha de una cueva que estaba llena de cristales hermosos clavados en todas partes.
-Guau...- Camilo se asombro de tan hermosa vista, vio el cielo de donde estaban y sus ojos prácticamente brillaron. -Es como un cielo estrellado...-.
Arriba, que era tan alto que apenas se veía el techo de la cueva, habían más cristales que brillaban en conjunto, sumado a la oscuridad de la cueva, parecían imitar un cielo nocturno lleno de estrellas.
A Camilo siempre le han gustado las estrellas, es un gusto que agarro cuando vio por primera vez un cielo estrellado con sus padres cuando fueron a la playa de vacaciones cuando tenía 10 años, debido a las luces de la ciudad eran imposible de verlas, pero al estar aquí, en Nueva Vestroia, las noches están llenas de estrellas acompañadas por las dos Lunas.
Camilo le pidió a Leonidas que lo bajara, y una vez en el suelo camino viendo alrededor... la cueva si que era inmensa, probablemente era la cueva más grande que haya visto o verá, probablemente porque la formas rocosas del planeta son más adecuadas al tamaño de los Bakugan que a la de un diminuto humano.
Se acerco a un cristal que reflejo su rostro al acercarse. Con una idea, saco de su mochila una lija y la enterró debajo de un pequeño cristal que estaba alado, usándola como palanca para sacar el cristal y tomarlo en la mano. Observo la piedra preciosa: era de un tamaño que podría ser usado como una joya y era de un bonito blanco que brillaba con luz propia. Cualquier joyero desearía una así.
La guardo en el bolsillo de su pantalón.
-Parece que te gustan las joyas, ¿o es para una joven dama que esperas en casa? Fufufu-.
Camilo volteo hacía adelante, encontrando a una mujer joven que parecía tener veintitantos de cabello rubio hasta la mitad de la espalda y ojos azules que usaba un vestido blanco que se parecía esos vestidos de sacerdotes de una película.
-¿Otra humana en Nueva Vestroia?- Pregunto Leonidas sorprendido.
-¿Quién eres? ¿Qué haces aquí?- Pregunto Camilo con intriga, acercándose a la mujer, pero se detuvo cuando ella levanto la mano.
-Quién soy: me puedes llamar Kiara, y sobre lo que hago aquí... se puede decir que soy tu oponente-.
Al decir esas palabras, la cueva tembló, los muros se movieron y se alejaron de ellos, dejando un campo liso que era del tamaño de una arena de cancha de futbol juvenil.
-¿Qué significa esto?- Pregunto Leonidas.
-Soy su primera prueba, la que representa el pasado- Kiara levanto su mano, mostrando el dorso de una carta portal que seguramente no sostenía antes. -¿Empezamos?-.
-No entiendo lo que pasa, pero tal vez se refiera a lo que dijo ese anciano- dijo Leonidas. -¡Pero nunca digo no a una batalla!-.
-De acuerdo, Leonidas. Este tipo de pruebas son las que me gustan- declaro Camilo.
-Veamos si puedes seguir diciendo lo mismo. ¡Carta portal lista!- Lanzo la carta al centro de la arena, donde brillo y se camuflo con el suelo al mismo tiempo que se extendía. -¡Préstame tu ayuda, Anchorsaur Haos!-.
Una roca atrás de Kiara se deslizo a un lado, y entro un Bakugan Haos con cara de dinosaurio y cuerpo semi-humanoide de colores blanco y amarillo con un escudo en cada hombro.
-¿Un Bakugan de 400G? Me puedo comer a uno de esos como desayuno- no era del todo arrogancia, Leonidas sabía cuan fuerte era, siempre lo supo. Incluso en su primera forma podría derrotar a un Bakugan así.
Pero Kiara no hizo ningún gesto de molestarse, aunque Anchorsaur le gruño molesto a Leonidas por ese comentario.
-Solo si, pero cuando esta acompañado, es más difícil. ¡Carta portal abierta: Batalla Triple!-.
-Conozco esa carta, ahora puedes agregar a un segundo Bakugan a tu lado del campo- dijo Camilo, esa carta portal había sido una de las clásicas en los combates antes del conflicto contra Naga.
Kiara chasqueo los dedos, y del mismo lugar donde salió Anchorsaur, apareció un Bakugan idéntico a él, solo que este tenía los escudos en equipados en las manos.
-Este es Hammersaur Haos, el hermano de Anchorsaur- presento la rubia al segundo Bakugan.
-Como sea. ¡Terminemos esto!- Leonidas se lanzo precipitadamente contra Anchorsaur.
-¡Poder activado: Protección de Chispas!-.
El puño de Leonidas fue contra Anchorsaur, pero una barrera de rayos se puso en medio, deteniendo el puño de Leo, quien hacía presión en la barrera, hasta que esta se derrumbo y separo a los dos Bakugan Haos hacía atrás, aunque a Leonidas no le afecto nada.
-¿Hm?- Pero al ver a Anchorsaur… noto que el otro Bakugan no estaba. Rápidamente vio alrededor, encontrando a Hammersaur detrás suyo e intentando darle un golpe, pero sus reflejos y velocidad eran superiores, por lo que se movió un poco de lado, evitando el puño de Hammersaur y tomándolo de la muñeca, girando mientras lo sostenía y mandándolo a chocar con su hermano.
-Buenos reflejos, se nota que tu Bakugan tiene mucha experiencia- elogió Kiara.
-Leonidas ha peleado mucho para llegar hasta aquí- dijo Camilo.
-Sin duda pero... ¿esa fuerza es realmente suya?-.
-¿A que te refieres?-.
-Ya lo descubrirás. ¡Doble poder activado: Borrador de Poder + Arco de Luz!-.
Los escudos de Anchorsaur se pusieron delante de los hombros y dispararon rayos que golpearon a Leonidas, mientras que Hammersaur apunto sus garras adelante, que brillaron y dispararon puntas de energía que golpearon y levantaron humo al impactar con Leonidas. Los dos Bakugan Haos sonrieron arrogantes ante lo que creyeron una victoria fácil.
-¿Eso es todo?- Pregunto Leonidas entre el humo. Con un movimiento de su ala derecha, quito el humo y los rayos que envolvían su cuerpo. -Por que no me hicieron nada-.
Los dos Bakugan dinosaurio retrocedieron un paso, sorprendidos de que el otro Bakugan Haos este intacto.
-Poder activado: Voltaje Veloz- activo Camilo.
Leonidas disparo bolas de electricidad desde su boca a Anchorsaur y Hammersaur: los dos Bakugan fueron mandados contra la pared, ese ataque fue suficiente para dejarlos derrotados.
-Y yo que pensé que podría durar un poco más. Que pena- sonrió Kiara con resignación, mientras la roca en la que llegaron los dos Bakugan se deslizaba. -Pueden seguir avanzando-.
-Espera, tengo preguntas que hacer- dijo Camilo, tenía varias dudas sobre esto.
-Y yo tengo una pregunta que hacerte antes- dijo Kiara. -:¿Qué es lo que más les importa a los dos?-.
Leo y Camilo se vieron confundidos. ¿Cuál era el sentido de esa pregunta? No tenían razón para responder y todo se les hacía sospechoso... pero algo dentro suyo les impedía irse sin responder esa pregunta antes.
-Ese es su subconscientes diciéndoles que deben responder para seguir con la prueba- como si les leyera las mentes, Kiara hablo, sorprendiendo a ambos por haber adivinado. -El lazo entre peleador y Bakugan puede ser tan profundo, que los pensamientos de ambos pueden llegar a ser iguales, ustedes tienen una gran "solidaridad" o como lo llaman en la Tierra, "amistad"-.
-¿Qué estas haciendo? ¿Qué es este lugar? Obviamente no es una cueva ordinaria- pregunto Leonidas.
-Para responderles, primero tienen que responderme a mi; ¿Qué es lo que más les importa a los dos?- Volvió a reiterar la pregunta.
Leonidas frunció el ceño, la paciencia nunca fue su fuerte, fueron pocas las veces que se mostró paciente en cualquier cosa; pero en esta circunstancias si que tenía razones. Primero un viejo Bakugan los atrae a una cueva rara y luego llega esta humana (que tal vez no lo sea por como habla) y les hace enfrentar a dos Bakugan para luego hacer esta pregunta.
-Como quieras- si significaba avanzar y salir, por él bien. -Lo que más me importa es Camilo y mi lazo con él. ¿Feliz?-.
Kiara sonrió. -A pesar de tu tono, no hubo mentira en tu respuesta, en verdad eres un Bakugan muy amable- la rubia miro a Camilo. -¿Y tu, joven?-.
-Leonidas también es lo más importante para mi, pero no solo él: mis amigos que he conocido a lo largo de mi vida y mi familia lo son- respondió Camilo.
-Ya veo... ese corazón bondadoso, pero al mismo tiempo fuerte, fue lo que te permitió desaparecer la furia que sintió tu compañero alguna vez, y te permitió enfrentar los peligros en la otra dimensión y contra el malvado emperador del universo...-.
-¡¿Cómo sabes de eso?!- Exclamo sorprendido Camilo.
-Les dije que esta era su prueba que representaba el pasado, todo lo que han pasado los ha llevado hasta lo que son ahora: una amistad tan fuerte que incluso supero las barreras de la muerte. Algo digno de alabar-.
-Gracias... supongo-.
-Ahora responderé alguna de sus preguntas- ambos prestaron peculiar atención. -Sobre este lugar, no es una cueva ordinaria como ya habrán notado, esta es una cueva sagrada que esta conectada al centro del mundo. Se había desvanecido cuando Vestroia se dividió hace décadas, pero cuando el Heredero del Genesis volvió a unir al mundo, esta cueva se restauro-.
-¿Al Núcleo Perfecto? ¿Cómo es posible?- Pregunto Leonidas.
-No es raro que existan lugares que estén conectados al centro de los planetas, estoy seguro que en la Tierra también existen, solo que no los han encontrado, o no saben que están conectados- respondió Kiara. -Y sobre lo que hago, tenía la misión de ser la primera en ponerles una prueba. Ahora tienen que avanzar, aun les quedan dos pruebas más: las del presente y del futuro no serán tan fáciles de superar como lo fui yo-.
-¿Cómo que pruebas del presente y futuro?- Pregunto Camilo, pero Kiara empezó a retroceder. -¡Oye!-.
-Cualquiera puede ser amable, joven; pero no cualquiera puede seguir siendo amable por mucho tiempo. No lo olvides- el cuerpo de Kiara brillo, para desaparecer.
-Eso... fue extraño- Leonidas no encontró mejor palabra para describir. -Bueno, no estoy interesado en lo que ese viejo quiere, así que me devuelvo-.
Cuando Leonidas dio la vuelta para irse, noto que el agujero por donde habían llegado ya no estaba, probablemente tapado por un muro cuando se movieron para hacer el campo. Chasqueo la lengua al notar que no podría hacer un agujero para salir sin colapsar toda la cueva, y si era cierto que este era como un lugar sagrado preferiría no destruirla, hasta él tiene cierto respeto por lugares así.
-Supongo que tenemos que seguir adelante- Camilo empezó a caminar hacía el lugar... luego tendría mucho de que hablar con ese Dragonoid.
Caminaron un largo camino, esta vez no estaba tan oscuro como el que caminaron hasta llegar al de los cristales. Caminaron por lo que parecieron diez minutos hasta llegar a otra zona donde la cueva era bastante amplia, aunque esta era diferente a la anterior.
Mientras la otra tenía hermosos cristales pegados a la pared, esta zona amplía de la cueva tenía pequeños lagos cayendo de un agujero alto en la pared mojando el suelo, haciéndolo un pequeño estanque. Al momento de que entraron, las suelas de Camilo y Leonidas sintieron el tacto del agua, parecía que el agua solo era superficial; pero habían aprendido que las apariencias engañan.
Una burbuja de agua se elevo del agua al aire al otro extremo de donde estaban, y al estar a cierta altura exploto: cayendo de rodillas un hombre con armadura medieval con bordes de piel de un animal y una espada enfundada atada a su cintura, cabello castaño oscuro con barba desprolija y ojos café. Parecía estar entre los treinta o cuarenta.
-Un gusto conocerte, joven guerrero. Mi nombre es Alron, seré tu oponente en la prueba que representa el presente- se presento de manera educada el adulto, ahora reconocido como Alron.
-No se de donde salen ustedes, pero no nos interesan sus pruebas, tenemos nuestros propios problemas- dijo Leonidas.
-¿Cómo saber lo que les falta para volver a ser fuertes?- El caballero sonrió al notar la cara de sorpresa de los dos. -La fuerza no es algo que se consiga fácilmente, requiere de muchos sacrificios y dolor. La verdadera no esta en puños o armas, ¿saben cual es?-.
-El corazón, ¿verdad?- Respondió Camilo.
Alron asintió. -Efectivamente; pero saber que es la verdadera fuerza y tenerla son dos cosas diferentes. Ahora veremos cuanta fuerza tienen. ¡Sal Gilford Aquos!-.
Del agua salió una figura Bakugan en una burbuja que se rompió, revelando al Bakugan: era uno de aspecto de caballero con armadura en su cuerpo y una gran espada colgando en su espalda, su boca era recta y usaba una mascara que cubría sus ojos, dejando dos visores de color celeste y su cabello era celeste.
-Nunca había visto ese Bakugan antes- declaro Camilo sorprendido.
-Es normal que no lo conozcas, este Bakugan no esta en esta época- dijo Alron.
-¿Qué quisiste decir con eso?-.
-¡Poder activado: Corte de Vivian!-.
En vez de responder su pregunta, Alron empezó la batalla. Gilford tomo con ambas manos su gran espada, que era casi de su tamaño, y lanzo un tajo al aire que libero un corte de energía Aquos que golpeo a Leonidas, haciéndolo retroceder un poco.
-Ok... ese ataque si estuvo bueno- Leonidas se trono el cuello... hora de pelear. -¡Explosión Salvadora!-.
Leonidas genero tres esferas eléctricas en su garra derecha que lanzo hacía Gilford. El Bakugan Aquos dio un corte vertical... cortando las tres esferas en dos que explotaron antes de golpearlo.
-Presumido...-.
-¡Poder activado: Campo Di Hank!-.
La punta de la espada de Gilford toco el agua debajo de sus pies, produciendo ondas que se extendieron por todo el campo. Del agua se levantaron gran cantidad de burbujas a la altura de los Bakugan y quedaron quietas en el aire.
-Cuidado Leonidas, esas burbujas no pueden ser buenas- dijo Camilo. -¡Poder activado: Tornado Lunar!-.
Viento se arremolino en las alas de Leonidas, que con un batido de ellas, hizo explotar las burbujas con una ráfaga de viento.
-Usaste el viento para destruir mis burbujas en vez de atacar a lo tonto o usar un poder que podría ser perjudicial. Muy astuto, chico, muy astuto- elogió Alron.
-Gracias. Tenemos bastante experiencia en esto- respondió Camilo.
-Sin duda, a pesar de su mala racha han sabido recuperarse; pero a pesar de todo ignoran lo más importante-.
-¿Lo más importante?-.
-¡Poder activado: Impacto de Neptuno!-.
Gilford tomo con sus dos manos su espada y en la punta de la espada se creo una esfera de energía Aquos que disparo contra Leonidas, quien la esquivo elevándose en el aire. Gilford continuo disparando a Leonidas que las esquivaba volando, hasta que su cabeza choco con el techo, llegando al máximo de lo que podía elevarse dentro de la cueva, oportunidad que aprovecho el Bakugan Aquos para disparar una esfera de energía más concentrada que las otras que golpeo a Leonidas y lo estrello contra la pared.
-Hug…- se quejo por el golpe, ese si le dolió. -De acuerdo, se acabo el Leonidas bueno- se despego de la pared. -¡Camilo, hagamos que salgan chispas!-.
-Ya rugiste. ¡Poder activado: Trueno Estelar!-.
-¡Poder activado: Coraza de Cáncer!-.
Camilo salto a una roca al mismo tiempo que Leonidas disparo un trueno al suelo, por el agua que había se electrocuto todo el suelo, volviéndolo un campo estático. Pero antes que el rayo impactara en el suelo, un domo de energía se creo alrededor de Gilford, haciendo que no sea afectado por las descargas que ahora llenaban el campo.
Alron, como estaba en un extremo donde el agua no llegaba, no le pasaba nada. Pero vio la complicada situación que ahora estaba: si usaba un poder se desvanecería el domo, lo que expondría a Gilford a una serie de descargas que podrían dejarlo fuera de combate.
-Aun tengo una última carta que jugar. ¡Poder activado: Furia de Océano!- Alron usa su última carta.
Gilford empezó a girar su espada en la mano, atrayendo toda el agua del suelo y que salía de los agujeros de las paredes. El agua se concentro alrededor del arma, que empezó a girar sola mientras levitaba encima de la mano del Aquos. Leonidas estaba haciendo un esfuerzo por mantenerse en el aire, ya que también empezó a atraer viento.
Camilo apenas podía sujetarse de la roca... ese ataque era demasiado poderoso... pero parecía que requería tiempo para lanzarse... no sabe si puede pero...
-¡Leonidas, hay que ser rápidos!-.
-¡Tu solo dilo!- Leonidas tuvo la misma idea que su compañero.
-¡Doble poder activado: Blazar Omega + Explosión Salvadora!-.
Todo el cuerpo de Leonidas brillo de un intenso amarillo y voló hacía adelante, dejándose llevar por la corriente de atracción, en su garra derecha creo tres esferas eléctricas que eran más grandes que las anteriores.
Gilford abrió los ojos al comprender lo que haría. Giro y extendió el brazo hacía adelante, chocando la espada que estaba rodeada de un anillo de agua y viento con las tres esferas en la garra de Leonidas.
El choque de ambos ataques causo una gran explosión que debió sacudir toda la cueva y mando a cada Bakugan a chocar al otro lado de su pared respectiva. El humo que se levanto por el choque de poderes impedía ver.
Camilo tosió un poco. -¿Ganamos?-.
El humo de repente fue cortado y se desvaneció, producto de Gilford que sostenía su espada que estaba cerca del suelo. Leonidas salió del muro y dio un paso al frente. Aun tenía energías para seguir luchando.
El Bakugan Haos y Aquos se sostuvieron la mirada por unos segundos tensos... hasta que el Aquos cerró los ojos y se hinco, con las manos apoyadas en el pomo de su espada.
-Felicidades, ustedes ganaron este combate. Gilford ya no tiene energía para seguir luchando- declaro Alron. -Parece que la edad le paso factura... no... una excusa como esa no sirve, ganaron honorablemente-.
-Gracias, igual la pusieron difícil- respondió Camilo, limpiándose un poco la ropa. -Como atacabas con esa espada y atrajiste toda el agua... si hubiéramos tardado un segundo más, tal vez hubiéramos perdido-.
-Pero tomaste la decisión correcta en el momento justo... tal como se hace las cosas en el presente-.
-¿Ah?-.
-Una persona siempre tiene que tomar decisiones. Cuando tiene que elegir, no existe el pasado ni el futuro, solo el ahora y lo que decidas, lo que sea que pase después de esa decisión ya es para el futuro- Alron empezó a caminar hasta pararse al centro del campo delante de su Bakugan. -Díganme algo: ¿tienen algo que les haga sentir vivo en el hoy y ahora?-.
Otra pregunta que les hacía sentir que tenían que responder. Esta situación los confundía más, pero igual respondieron.
-:Lo que me hace sentir vivo son las batallas Bakugan. Como cualquier Bakugan, lo que más me gusta son las batallas-.
-:No se si tengo algo que se ajuste a lo que dices, pero creo que tener batallas con Leo y pasar momento con mis amigos es lo que me hace feliz en el ahora-.
Las respuestas de Leonidas y Camilo parecieron ser suficientes, ya que una roca se deslizo detrás de Gilford, mostrando unas escaleras que descendían.
-El ahora siempre es importante: lo que hacemos ahora, como vivimos... todo eso define el futuro de todo ser vivo. No lo olviden, jóvenes guerreros-.
Al terminar de decir esas palabras, Alron y Gilford fueron rodeados por un pequeño huracán y desaparecieron.
-¿Otra vez? Al menos quisiera preguntarles quienes diablos son- se quejo Leonidas.
-Esta cueva sigue sin gustarme, pero creo que ya estamos terminando- Camilo miro a las escaleras. -Si dijeron la verdad, entonces lo que viene ahora es la prueba del futuro-.
-¡Ha! Que venga, no le temo al futuro- Leonidas dejo que Camilo se subiera a su garra para colocarlo en su hombro. -Ya llevamos dos de tres, la última no debería ser tan difícil-.
Así empezaron a caminar al interior de las escaleras y a bajar.
(En el Interespacio)
Anubias y Sellon estaban reunidos de nuevo en una mesa de la zona de descanso del Interespacio; pero a diferencia de otras veces, ambos tenían expresiones de descontento, incluso se podría decir que están molesto.
-No salió como debía...- Sellon rompió el tenso silencio.
Hace unas pocas horas fue la competencia de "calabozo por la bandera", donde varios peleadores y equipos se enfrentaron en una gran arena que combinada diferentes elementos de otras arenas de combate para que el primer equipo que obtenga la bandera, sea el ganador. También es el último gran evento antes del Gran Torneo.
300 peleadores Bakugan se registraron oficialmente a este torneo, ya que también permitía tener una gran oportunidad para entrar al Gran Torneo para los que aun no han entrado; entre ellos estaban todos los miembros actuales de los peleadores, Claire, y esos tres que aparecieron en medio del ataque del Mechtogan el otro día de nombre Page, Rafe y Serah, así como los miembros de sus propios equipos.
Anubias y Sellon no participaron porque no le vieron el sentido, aun con los peleadores creían que sus compañeros serían suficientes para ganarles a todos gracias al poder de sus Bakugan y los Bakunano. Les daba igual cual de sus equipos ganara, solo importaba que uno de ellos ganara, aumentando su fama y humillando más a los peleadores.
Ahora les queda claro que no participar fue un grave error.
Al comienzo de la partida, sus equipos dominaron el juego, de hecho, cuando Ben y Robin se toparon con Claire, Sabine y Serah y Cris y Soon con Marucho, Page y Rafe, y vieron como ellos "aparentemente" los eliminaron, dejando solo a Dan, Drago, Felipe, Xerxes, Snow y Onix juntos, creyeron que ya tendrían la victoria fácil, ya que Shun y Taylean perdían el tiempo peleando con cualquier peleador que se le topaba, mientras Marduk y Vladitor no parecía interesando en ganar, sino enfrentar a los Bakugan Caos, ya que ignoraban a los peleadores que no tenían esos Bakugan.
Por lo tanto, los 5 miembros de los peleadores se volvieron objetivos principales a eliminar de la mayoría de los competidores, impidiendo a los cinco avanzar a la arena donde estaba ubicada la bandera.
Pero cuando sus compañeros llegaron a la zona, les quedo claro a todo que fue una treta de los peleadores: porque Claire, Marucho y los demás que debían estar derrotados ya estaban camino a la bandera. Engañaron a todos (incluyéndolos) al pensar que habían perdido, solo para tener camino libre para ir directo a la bandera mientras Dan, Felipe y Snow se encargaban de atraer a todos los peleadores posibles y dejarles el paso abierto.
Claro que solo ellos no bastarían, pero como Marduk y Shun estaban luchando con diferentes peleadores en otras partes de la gran arena, el plan les funciono.
Y al final no solo los peleadores lograron ganar la competencia del calabozo, sino que también los humillaron, ya que Claire, Sabine y Serah derrotaron a sus compañeros como si se trataran de novatos mientras Tristar agitaba triunfante la bandera.
-Escuchen bien todos, los peleadores Bakugan no estamos acabados. Tal vez hayamos caído, pero nos levantaremos como siempre lo hacemos y pondremos orden en el Interespacio Bakugan. ¡¿Me escucharon cretinos?! ¡No dejaremos que arruinen los combates Bakugan!-.
Fue la declaración de Kuso cuando se anunciaron como vencedores.
Y por la fuerza en sus palabras y la seguridad que emanaba, lo decía en serio.
-¿Y eso que?- Exclamo Anubias. -Ganaron una batalla, ¿y? Eso no significa nada, hemos tenido muchas más victorias que ellos-.
-Creo que no entiendes la implicación detrás de su victoria. Ahora que Dan Kuso parece ya no tener dudas, los peleadores serán una poderosa fuerza a partir de ahora, una fuerza que te recuerdo, a derrotado a muchos enemigos en el pasado. Si consiguen recuperarse lo suficiente para que las personas vuelvan a apoyarlos, entonces el plan del señor Goodwin podría estar en peligro- dijo Sellon con seriedad.
-El plan es generar la mayor cantidad de combates en el Interespacio para el Dragón Carmesí, lo de poner a los peleadores contra la audiencia fue tu idea- replico Anubias. -Y por lo que veo, eso esta funcionando, una vez que comience el Gran Torneo, la energía liberada será suficiente para romper otra cadena que ata a esa lagartija-.
-Tienes razón, pero aun así...-.
-Escucha, tu ocúpate de las cosas fastidiosas, yo haré mi trabajo, que es ganarle a todos- y sin esperar a que Sellon dijera algo, Anubias se puso de pie y se alejo de ella.
-Hmph. Que falta de modales tiene, pero no puedo mucho de un Gundaliano-.
Isis se abrió en su hombro. -Si siguen peleando así, voy a pensar que se quieren-.
-Por favor. Ni aunque Anubias sea el último hombre en el Universo saldría con él, no tengo tan pésimos gustos-.
-Cierto, a ti te gustan los callados y serios-.
Sellon miro con dureza a Isis. -¿Qué quieres decir con eso?-.
-Nadaaa~. Solo que me llamo la atención que de entre los peleadores, eligieras a Shun para separarlo del grupo y no lo hayas intentado con nadie más-.
-Por favor, ya dices estupideces-.
-No escuche un "no"-.
Una vena sobresalió sobre la frente de Sellon… si así quería Isis jugar, bien. Le daría una cucharada de su propia medicina.
-¿Y que si me gusta Shun?- Comento con una sonrisa sensual, sorprendiendo a Isis. -Es guapo, de buen físico, y esa seriedad crea un aura atrayente a su persona que es difícil de resistirse. Aunque no creo que entiendas, ya que a ti te gustan los más apasionados y salvajes, ¿no? Esa descripción me recuerda a alguien...-.
-¡¿Qué quisiste decir con eso?! ¡Eres una desvergonzada!-.
-¡Tu empezaste!-.
Y mientras las dos discutían como niñas, Anubias se encontró con su equipo, más Noah, que se unió recién. Ben vio que su líder venía desde la mesa en donde estaba Sellon.
-Oye jefe, pasas mucho tiempo con ella, ¿acaso están saliendo?-.
-¡Qué mal chiste acabas de contar! No saldría con Sellon ni aunque fuera la última mujer en el Universo- replico Anubias. -De todos modos, ten- le lanzo la esfera de Horridian a Noah. -No estaré aquí por un tiempo, por lo que cuídalo hasta que vuelva-.
-¿Cómo que no estarás aquí por un tiempo? ¿A donde vas cuando falta tan poco para el Gran Torneo?- Pregunto Ben.
-Tengo que ir a recoger algo que me encargaron buscar del trabajo, tardaré unos días, pero volveré a tiempo para el Gran Torneo, no se preocupen. Intenten no causar muchos problemas mientras tanto- fue la única respuesta que dio Anubias.
En la cima de un edificio, Marduk vio a Anubias alejarse de un edificio... por un lado, le complace verlo molesto, no se espero que Dan y los demás lo usen para ganar, no se queja, fue astuto y él hubiera hecho lo mismo, además que una victoria es una victoria, sobre todo si irritada a Anubias.
Por otro...
-¿Aun lo odias?- Escucho la voz de Luna preguntarle, ella estaba atrás suyo observándolo. -Por lo que se, él fue tu amigo y compañero de equipo que termino traicionándote y envió a todos tus Bakugan a la Dimensión de la Perdición. Anubias fue la persona que cambio tu destino-.
-No hace falta que lo digas, lo se... pero ya no lo odio, en parte porque gracias a eso pude conocer a Vladitor… y también porque ya no tiene sentido guardarle rencor por algo que no fue tan importante comparado a lo que vino después... pero aun así quiero darle una humillación que no olvide por traicionarme. La traición es algo que no tolero- respondió Marduk.
Luna observo un segundo a Marduk antes de hablar. -: Pero a pesar de eso, no les dices una cosa a los peleadores sobre lo que te conté, a pesar de que eres uno de sus integrantes-.
-Ellos ya tienen sus problemas, si las peleas en el Interespacio se controlan, eso fastidiara a Goodwin, ¿no? Pues ellos son los encargados de eso. Lo de meterse a espacios oscuros y arriesgados quedan mejor para alguien como yo- Marduk observo al cielo artificial del Interespacio. -Las cosas se pondrán más movidas a partir de ahora, ¿no?-.
-Si. Casi todos los jugadores están en su lugar, solo faltan algunos que dentro de poco se unirán al tablero- confirmo Luna.
-Entre ellos Camilo y Leonidas... si que se toman su tiempo para volver- dijo Vladitor.
-¿Creen que van a volver? Considerando como perdieron el control la última vez, no sería sorpresa que tuvieran miedo de pelear- comento Selen.
-Se nota que nos los conoces... ellos no son cobardes, mucho menos débiles... definitivamente volverán. Hasta me imagino que regresen haciendo una entrada de último segundo-.
Selen y Luna observaron con disimulada curiosidad al par... a pesar de que decía que no era parte del equipo, confiaba en los peleadores y aseguraba con tanta confianza que Camilo y Leonidas volverían que uno pensaría que hablan de un amigo...
-Luna, si lo que dices es cierto, entonces debo saber la verdad. Por eso decidí ayudarte con este plan contra Goodwin- Marduk se giro hacía la chica. -Ahora, ¿cuál es el plan que tienes? Dijiste que me lo contarías después de la batalla de laberinto en el calabozo-.
-Así es, pero antes necesito que me respondas algo... ¿qué tan bueno eres bailando?
Marduk parpadeo un par de veces... -¿Cómo dices?-.
(En Nueva Vestroia)
Camilo termino de comerse el último paquete de galletas que había traído consigo a Nueva Vestroia. Leonidas ha estado bajando estas escaleras por horas, por un momento pensaron en bajar volando, pero las alas de Leonidas eran demasiado grandes para el espacio dentro de las escaleras, por lo que no tuvieron de otra que seguir a pie.
De todos modos Leonidas no parecía cansado por bajar las escaleras, más bien aburrido.
-Se acabaron las escaleras-.
Camilo recupero la atención hacía adelante, viendo que como dijo Leo, llegaron al fin de las escaleras. Delante de ellos había una gran puerta de roble del tamaño de un Bakugan, algo que no debería haber en una cueva.
-Siento una extraña energía adentro... hay algo raro adentro- advirtió Leonidas, la energía que sentía era... conocida, pero no reconocía de donde. Tampoco sentía que la energía fuera malvada.
-Hay que tener cuidado entonces- dijo Camilo.
Leonidas asintió y con la garra empujo la puerta, abriéndola y entrando al interior... donde no había nada, solo oscuridad que era iluminada levemente por la escasa luz de la puerta abierta, que se esfumo cuando esta se cerró sola. La oscuridad que había no era asfixiante o muy oscura para no ver.
Enfrente de ellos apareció lo que parecía una pequeña luz de forma circular que voló alrededor de la cabeza de Leo un par de veces antes de detenerse frente a su rostro.
-¿Una luz? ¿Esa es la última prueba?- Exclamo Leonidas. La luz giro alrededor de su cabeza y avanzo, como diciendo que no se quede quieto. Que avance. -¿Quieres que te siga?- La luz brillo más en respuesta. -Debo estar volviéndome loco si estoy dispuesto a seguir a una luz que flota, pero ¿que más da? Ya llegué hasta aquí-.
-Ese es el espíritu, además que te recuerdo que en la otra dimensión, le hablaba al núcleo del planeta que solo yo podía ver- dijo Camilo.
Ambos empezaron a seguir a la luz, la cual al sentir que la seguían, comenzó a avanzar más adelante, como guiándolos por un camino que no podían ver, pero sabían que estaban siguiendo.
Mientras Leonidas seguía esa luz, empezó a preguntarse que estaba haciendo en ese lugar. Vinieron a Nueva Vestroia para controlar sus poderes y a Zangetsu, algo que consiguieron lograr después de vencer contra ese misterioso Gundaliano y su Bakugan y se quedaron unos días más para asegurarse de que podían controlarlos en verdad, lo que llevo a que descubrieran que seguía sin estar al 100%... y ahora aquí estaba, en el interior de una cueva que un viejo Bakugan probablemente loco, los hizo entrar y enfrentar a sujetos que decían cosas raras.
La luz avanzó más rápido, alejándose de ellos hasta que subió por unas escaleras... Leonidas hizo una clara queja de más escaleras, pero estas eran más cortas, ya que podían ver la puerta por la que la luz atravesó como fantasma. Subieron las escaleras y atravesaron la puerta.
Al entrar al interior, estaban en otro lugar... a Camilo le hizo recordar a uno de esos templos sagrados ocultos en cuevas que veía en algunas películas. Habían grabados en los muros y adelante estaba un tapete con el dibujo de un dragón en pintura roja que... al verlo de cerca... se parecía un poco a Drago.
-Me alegra ver que finalmente llegaran-.
El dúo Haos vio hacía abajo, viendo a una persona de tamaño humano viendo la pintura dándoles la espalda. Usaba una túnica completamente blanca con una capucha.
-Supongo que serás nuestro oponente, como con los otros dos- menciono Camilo.
-En efecto...- el encapuchado se dio la vuelta, Camilo vio que en la parte frontal de su túnica estaba un dibujo de la cabeza de un dragón cuya boca apuntaba hacía arriba. -Yo soy el Sacerdote del Combate, y seré quien les ponga la prueba que representa el futuro... para ser más exactos, su futuro-.
El tono con el que dijo lo último fue todo menos tranquilo para los dos.
N/A: Hasta aquí el capitulo, con una serie de pruebas que nuestros protagonistas están superando, pero que ahora les toca la más difícil. Esta serie de pruebas parecen relleno, pero su significado será muy importante para más adelante.
Me disculpo por tardar tanto en publicar, tuve mis últimas pruebas de semestre en las que tuve que esforzarme para eximirme de dar examen, aunque no lo logre en una, pero creo que esa me irá bien... espero.
Ahora estaré un poco más presente, ya casi termina el año. Mi primer año de Universidad, vaya. ¿Qué tan malo pueden ser los siguientes?
Y de quienes son los que colocan estas pruebas, sus identidades se revelaran más adelante, pero no esperen una gran participación más allá de esto.
También parece que las cosas en el Interespacio comienzan a moverse para bien al favor de los peleadores, ya solo falta que Shun y Marduk trabajen junto a los demás para que todo marche bien.
Tenzalucard123: Tienes razón, ya se acabaron con ser los humillados, ahora serán los que humillen.
chaosspartan: Creme, habrá mucho sobre Genesis Dragonoid y el Dharaknoid, ese fue un punto malo de la serie, que no los exploraran tanto con el potencial que tuvieron.
El Redentor 777: La fuerza del Caballero Esqueleto no es de subestimar, además que Dan sufría el daño que sufría Drago, por lo que eso se lo complico más. No te preocupes por no haber comentado antes amigo.
Sin nada más que decir me despido. Visiten y comenten el resto de mis historias por favor. CHAO.