Cuando llegaron a la playa, Kari no pudo evitar soltar un grito de emoción al ver el Digimon que les esperaba, se trataba de Whamon, no se contuvo, y al igual que el resto saltaron al agua para abrazar al enorme compañero de la niñez, se sorprendió que ni incluso el frío Matt se contuvo y se unió al resto.

- Es una enorme alegría verte- dijo Genai mientras estés acariciaban a su amigo- me alegra ver que en el mar habita más Digimon y no solo los secuaces de Dragomon.

- No es fácil- reconoció Whamon- lamento informar que somos muy pocos y la mayoría de nuestra especie, como podemos sumergirnos a tanta profundidad logramos pasar inadvertidos, aunque allí tampoco estamos a salvo en algunos casos…

-¡Estoy tan emocionada de verte!-chillo Mimi con los ojos anegados-después de la última…- ya no fue capaz de contenerse y dejo que las lágrimas corrieran por su hermoso rostro, que había recuperado toda su hermosura después de su incidente, Kari imagino que era un revulsivo después de lo que había pasado con Ogremon.

-Yo también niños-dijo el Digimon con su profunda voz-aunque supongo que ahora sois jóvenes elegidos más que niños.

Kari salió del agua un momento, se dio cuenta de que Gatomon la seguía pero solo ella, estaba agradecida por aquello, se sentó sobre la fría y oscura arena mientras excava con sus dedos en la suave arena para intentar serenarse, era evidente que no podía posponer más la batalla, su batalla, tenía miedo de no estar lista para lo que esperaba en lo más profundo del mar, pero jamás le daría la espalda a Agumon y a Gabumon.

Estaba igual de emocionada de ver a su amigo Whamon como el resto, pero llegó a su mente que Whamon era el camino para llegar, pero la meta solo era el enfrentamiento que debía tener ella con ese ser, era consciente que era su batalla y la de nadie más, pero de daba un enorme pavor, no se sentía preparada para llevarla a cabo y llevar a Gatomon a tal nivel como lo habían realizado Sora, Joe e Izzy.

-¿Tu también estás asustada?-preguntó de pronto T.K. a su espalda, no se había dado cuenta de que él la seguía también.

Kari miró a sus ojos claros, durante una fracción de segundo quiso mentirle, pero se dio cuenta que era una tontería intentarlo, ya que esa inseguridad se la devolvía él con su mirada, no se había dado cuenta que una pequeña parte, era también la lucha de T.K.

-Estoy muerta del miedo, no me siento preparada-le confesó en un susurro Kari mientras notaba la arena hundirse a su lado bajo el peso de la persona que amaba… se sonrojo al pensar en ello, y se sintió un poco inmadura al pensar en T.K. de la misma forma que lo hizo de niña, más en esa situación, pero no podía evitarlo, ya que T.K. había confesado que no estaba dolido por la ruptura con su novia.

-Yo también estoy preocupado y no se si estaré preparado para ayudar a luchar a Patamon-dijo de forma pensativa T.K.- pero pienso en las veces que hemos luchado antes y estoy casi convencido de que venceremos-añadió con aplomo, Kari no puedo evitar sonreir, no había nadie mejor que T.K., para el emblema de la esperanza- incluso aún después de conseguir vencer en la batalla, tengo algo en mente que me asusta más…

-¿Después de la batalla?- preguntó Kari con una sonrisa, ella era incapaz de ver más allá de la batalla-¿Eres capaz de pensar en algo más?

-Si estoy pensando en lo que haré después de que me mudé a Japón para continuar con la carrera, me gustaría saber si tendría alguna oportunidad…-explicó T.K. a la mitad, Kari le miró esperanzada.

-¡¿Vuelves a casa?!-le preguntó en un medio grito Kari, T.K. solo le sonrió con nerviosismo.

-Claro, tenía intención de abandonar París-dijo simplemente T.K.- no tengo ninguna motivación para seguir en Francia, todas mis motivaciones y pensamientos solo estaban en Japón pero he sido muy tonto de no haberme dado cuenta antes...

-¿Y por qué Japón?- le preguntó sin más Kari, si no recordaba mal, la madre de T.K. trabajaba en la BBC londinense, allí es donde estaba la otra parte de la familia además de Japón.

- Porque le pregunté a Sora y ella me confirmó que el año que viene tú estarás en Japón también-dijo T.K. con un tono seguro, pero Kari percibió algo más en su rostro y un leve rubor.

-¿Te mudas por mi…?-le preguntó Kari en un susurro tratando de contener su emociones que estaban a punto de desbordarse.

-Si-dijo sin más T.K. y dejó que unos segundos de silencio se instalarán entre ellos donde había más cosas por decir, pero ella no era capaz de recobrarse de la sorpresa-pero la verdad… -añadió él mismo mirándola, Kari le miró, tenía miedo que sus ilusiones se hicieran añicos una vez más-no sé… bueno… si tu, en fin -balbuceaba T.K. ahora se mostraba desconcertantemente inseguro- te gusta la idea de que una vez que esté instalado… si no tienes inconveniente de que... quedemos los dos… solos…

-¿Qué… ?- le preguntó Kari con un hilo de voz, el corazón parecía a punto de estallar en su pecho, pero se resistía a creer que T.K. le estuviera pidiendo una cita, tantas veces lo había soñado, que ahora no podía creer que fuese real.

- Se que me has dejado de hablar y respeto tus motivos- añadió al momento T.K., no voy a volver a preguntar por ellos... puede que no te interese salir conmigo… -dijo T.K. un tanto triste- pero cuando te volví a ver, desde el primer momento, esta idea está en mi mente… pero me gustaría saber si tu quisieras… bueno, salir conmigo y ver si podemos tener algo más… ser algo más que solo amigos…-ahora T.K. estaba totalmente ruborizado, pero el corazón de Kari explotó de júbilo y ya no se contuvo más.

-El motivo por el que deje de hablar contigo es que estoy perdidamente enamorada de ti - le confesó Kari mientras cerraba los ojos para no ver la reacción de T.K. y durante esos instantes reflexiono sobre si misma, se sintió completamente liberada, como si se deshiciera de un peso, una verdad que estaba luchando por salir y en vez de sentirse mal, solo se sintió reparada - era joven, tu me decias que te habías enamorado de otra chica y no supe gestionar ni mis emociones ni mi frustración… me siento liberada-le confesó Kari y así era, estaba liberada de la carga no se sintió ruborizarse, pero T.K. le devolvió la miraba de hito en hito por la sorpresa se sintió sonrojar un poco ante su mirada.

-No lo sabía… -dijo con gran asombro, sin dudas T.K. nunca había sospechado de que aquel era el motivo- perdóname…-dijo con real arrepentimiento-por no ser más listo ni más intuitivo…

-No pidas perdón T.K.-le dijo Kari sin más mirándole con dulzura, su sonrojo ya había pasado, pero no el de T.K.

-Entonces… ¿te gustaria estar conmigo?-le preguntó una vez mas T.K., Kari simplemente se ruborizo un momento y asintió con la cabeza- Kari…-ella alzó la mirada a los ojos de T.K.- yo tambien estoy enamorado de de ti…-dijo sin mas T.K., Kari solo le miro con ternura a sus ojos claros pero su vista se deslizó hacía sus labios, labios que soñó con besar y que por fin estaba cerca de los suyos- necesitaba que tú también lo supieras…-y ella no reprimió la más grande de las sonrisas.

Y al fin se besaron…

Durante esos dulces segundos el mundo real y digital habían desaparecido, pero un grito ahogado la hizo volver a la realidad para ruborizarse más si cabe.

Cuando T.K. comenzó a hablar se olvidó de todo y de todos, de sus compañeros Digimon, sus amigos y hermano, pero ahora todos les miraban…

Mimi daba mini saltitos de emoción mientras se tapaba la mano con la boca, Kari no necesito saber más para saber que fue ella quien no contuvo el grito, Joe y Izzy les miraban riéndose abiertamente, como la mayoría de sus compañeros Digimon, Matt cruzaba los brazos con un gesto burlón mientras miraba a Tai, que este pasaba un brazo sobre los hombros de una Sora de mirada tierna, el gesto de su hermano era a medias una sonrisa que intentaba convertir en enfado.

-¿Qué tal si dais un pequeño paseo?-le sugirió Gatomon, Kari incluso dejó de percibir la compañía de su Digimon.

-Os daremos algo de espacio-añadió Patamon mientras volaba de vuelta hacía sus amigos.

Kari y T.K. no lo dudaron y se dieron la vuelta, Kari estaba segura que T.K. se sentía tan abochornado como ella misma.

Sora se unió a Mimi para acariciar a Whamon, sonreía para sí misma mirando la contradicción mental que estaba sufriendo Tai, sabía que no aceptaba que su pequeña hermana dejase de ser tan pequeña, era algo de adultos tener novio, pero por otra parte, él adoraba a T.K., así que se mostraba disgustado de no poder odiar al novio de su hermano como había hecho con Wallace.

- Lo siento amiga, pero acaban de quitarte el puesto de la pareja más mona del mundo- dijo Mimi con una sonrisa burlona.

-Solo te dire una cosa-le respondió Sora con cierta malicia y una sonrisa burlona- tres de cuatro parejas-dijo añadiendo un guiño, ganándose las risas de todos, menos de los implicados que torcieron el gesto.

-Muy graciosa-le dijo Mimi en un susurro un tanto disgustada, Sora intercambio una mirada con su amiga.

-Perdona-dijo Sora en un susurro quedo-solo era una broma, disculpa…-dijo Sora con sinceridad.

-No seas tonta, no pasa nada-dijo Mimi con tranquilidad, pero Sora la conocía lo suficiente para saber que era algo impostado.

-¿Me vas a decir que pasa con Matt?-le preguntó directamente sin miramientos, mientras veía que los chicos estaban hablando entre sí, y no parecían prestarles demasiada atención aunque seguía notando a Tai un tanto pensativo.

-Nada realmente, solo que mi padre va ha dejar en la calle al suyo y por eso tiene que olvidar sus sueños-dijo Mimi con tristeza, pero Sora al levantar la vista se dio cuenta que no era el momento de hacer esas preguntas porque los chicos les habían escuchado.

-Ya te dije que no tenías de qué sentirte mal por eso-le contestó Matt con tranquilidad, mientras se acercaba al lado de Mimi mientras acariciaba también a Whamon, Mimi se sonrojo pero no le miro directamente a él-además jamás superaría el maldito examen de Geotecnia, el profesor Gudmundsson es imposible.

-Hans siempre ha sido extremadamente exigente-dijo Izzy con una sonrisa, sorprendiendo a todos de su intervención pero Sora noto que Joe torció un poco el gesto.

-¡¿Conoces a Hans Gudmundsson?! ¡¿El doble ganador del Nobel?!-le preguntó con enorme sorpresa Matt a Izzy, Joe soltó una carcajada mientras miraba a Izzy.

-Creo que se te olvidó mencionar algo-le contesto sin más Joe.

-Claro que conozco a Hans-dijo Izzy y Sora juraba que se estaba sonrojando-es mi marido…

-¡¿QUÉ?!-gritaron todos al unísono menos Joe, no paraba de reír ante la reacción general.

-¡¿COMO QUE ESTÁS CASADO?!-preguntó T.K. que ante la exclusiva de Izzy nadie se había percatado de su regreso.

-Pero… pero y… ¿Joe…?-preguntó Kari mirando a Joe que no paraba de reir.

-Soy el amante-dijo simplemente Joe encogiéndose de hombros, ante la cara de sorpresa de los demás.

-Joe…-dijo Izzy con un suspiro-Me case con Hans apenas me gradué triple grado en la universidad, a los 19 años-todos intercambiaron una mirada de sorpresa, Izzy mencionó graduarse a esa edad como si nada, pero era más que impresionante- era mi profesor y estaba … En fin, impresionado por el doble ganador del Nobel, él me decía que tenía talento… así que todo pasó, fue un compromiso corto y un matrimonio aun más corto, era joven y Joe… -Izzy dejó muchas palabras sin decir, pero la mirada que intercambio con Joe, Sora sabía que había muchas cosas ya dichas y recuerdos en común- en resumen, creo que no llevo bien nuestra separación y desde entonces, se fue a Estados Unidos para trabajar en la NASA…

-Pues menos mal que has decidido dejar la carrera, porque si se entera de que eres amigo de Izzy no ibas a aprobar nunca-dijo Tai ,pero por la mirada que Matt lanzó a Tai, Sora sabía que le habría matado, porque T.K. estaba escuchando.

-¿Cómo que dejas la carrera?-preguntó T.K. con sorpresa mientras miraba a su hermano, cerró los ojos, aun intercambiaba miradas con Tai con ganas de matarle-¿es por lo de Papa?-preguntó al momento.

-T.K. veras… -intento decirle Matt-es difícil para Papa y Mama, contigo en París y yo en Estados Unidos, además mis notas…

-¡Voy a volver a Odaiba!-le gritó de pronto T.K.-¡Ya no voy a suponer tanto gasto para Papa y Mama!

-¿Por qué vas a volver a casa?-le preguntó Matt con curiosidad, pero Sora captó al momento una pregunta que le había hecho T.K. de camino a la playa y le pareció realmente una ternura.

-Ella-dijo sin más T.K. y Kari no evito sonrojarse.

-Aún así-dijo Matt mientras miraba divertido la contrariedad de Tai-no aprobare en la vida…

-No te preocupes por eso-añadió Izzy al momento-si me dejas ayudarte, tuve la mejor nota de toda la promoción histórica de Hans-le contestó con confianza Izzy- no soy tan mal profesor y tengo ganas de sorprender a Hans…

-Pero después de obtener tu sobresaliente ten cuidado o serás el siguiente casado-dijo Joe como una broma.

Todos no evitaron soltar una carcajada, pero Sora notaba a Matt un tanto incómodo y no apartaba la mirada de Mimi que al menos en esta parte sonreía abiertamente.

-Además tendré que obtener de una vez el divorcio-pensó para sus adentros Izzy.

-Sin dudas Izzy, eres el más callado, pero has tenido la vida más interesante de todos nosotros-dijo Mimi pensativamente-¿no tendrás hijos? ¿verdad?-preguntó con inocencia Mimi mientras sonreía- es lo que te falta.

-No, creeme que no, es completamente y biológicamente imposible-le confirmó Izzy con una sonrisa, mientras los demás también reímos.

-Se que no es el momento, pero que sepais que no os librais, me teneis que contar cómo ha surgido todo-le dijo Mimi mirando atentamente a Joe- sois con diferencia la pareja más interesante del grupo.

-¡Oye!-dijo Tai un tanto molesto.

-¡Tú y Sora habéis venido al mundo y desde entonces estáis juntos!-le gritó de vuelta Mimi, ante la cara de desconcierto de Tai-que envidia… y lo de T.K. y Kari se veía venir de lejos…-añadió Mimi con un guiño, mientras los pequeños se sonrojaron.

-Jóvenes elegidos-dijo de pronto Genai, rompiendo el momento de complicidad de todos los amigos, mientras era acompañado por todos los Digimon que les habían ayudado desde la llegada a la Isla File-es el momento-¿os sentís preparados?

- Si -dijo Kari mientras daba un paso adelante, siendo seguida por T.K., Sora agarro la mano que le tendía su novio.

Durantes unos maravillosos instantes se había olvidado de todo lo que los rodeaba, pero solo había una cosa en mente, la última batalla, esa batalla que les llevaría a casa o al final… de pronto el temor se propagó por todo su ser y apretó la mano de su novio y este le devolvió el gesto, algo le decía que no era la única persona que estaba asustada.