Antes que nada, tengo una pregunta para ustedes. ¿Reciben mis respuestas a sus reviews? Como sea, los leo siempre, solo que acostumbro a contestarlos ya cuando subí el nuevo capítulo. Sin más, que disfruten la actualización.

Los personajes originales de la "Saga de Crepúsculo" no me pertenecen, son propiedad de Stephenie Meyer y Summit Entertainment.

CAPÍTULO 19 - CAMBIO DE PLANES

- Pasajeros del vuelo A113, favor de ir al área de abordaje. - Se escuchó una voz femenina en un altoparlante. - Pasajeros del vuelo A113, favor de ir al área de abordaje. - Repitió para confirmar a los dueños del vuelo que ya era su turno.

- Es nuestro vuelo. - Carlisle tomo la mochila de Bella, mientras ella se levantaba de su asiento. Después del encuentro con los Vulturi, decidieron ir a Londres, para así continuar con la mentira hacia los padres de Bella. Además, deseaban un tiempo a solas, apreciaban la compañía de los demás; pero Carlisle tenía que fingir demasiado, cosa que le estaba incomodando debido a consumir alimentos innecesarios, su cuerpo se lo estaba reprochando al sentir una sed más molesta.

- Nunca creí que viajaría a Europa, al menos no a mi edad. - Comento Bella emocionada, porque conocería la ciudad de origen de su pareja. - Mucho menos con el ser más guapo del universo. - Carlisle sonrió ante esas palabras y la abrazo de un costado. Disfrutaba de esa cercanía, más aún por la fragancia que tanto le fascinaba.

- Me quitaste las palabras de la boca. - Sonrió con alegría. - No podría tener mejor compañía que la tuya. - Sintió las miradas de la gente. - Aunque los demás lo duden. - Bella solo asintió divertida.

Llegaron a la entrada, donde el encargado esperaba a los pasajeros. - Hola, buenas tardes, sus boletos por favor. - Carlisle le entregó los boletos. - ¡Oh! Primera clase. - Sonrió emocionado el encargado. - ¡Les deseo un fabuloso viaje! -

- Gracias. - Contestaron al mismo tiempo; se miraron discretamente debido a lo ocurrido.

Después de abordar el avión, Bella se quedó dormida apoyada en el hombro de Carlisle; y él, decidio dejarse llevar por su calidez y cerro sus ojos. A veces deseaba quedarse dormido, y así desconectarse de la realidad como ella podía hacerlo. Aunque su imaginación podía compararse como un sueño; ya que, en ocasiones se imaginaba un escenario donde él podía leer los pensamientos de Bella; la curiosidad de lo que ella pensaba se le hacía interesante; aunque sabía que eso sería imposible, porque ni Aro que tenía ese don, lo pudo hacer. También llego a imaginar en uno donde la situación era a la inversa, que ella fuese la vampiresa y él un simple humano; aunque Bella no habría necesitado nada para que él cayera rendido a sus pies, de eso estaba seguro; porque así se sentía en esos momentos, ella lo doblego, aunque todos pensaran que fuese al revés.

Era por eso que sabía que ella le quería de verdad, porque a pesar de las diferentes pruebas que hizo por petición de Aro, Bella se mostró firme en sus palabras de genuina devoción. Ni el tiempo de su ausencia, ni las amenazas de una posible muerte, ni el miedo a la perdida de todo su mundo fueron suficientes para hacerla titubear en el amor que le profesaba. Y por esa razón, él se sentía como un imbécil total; pero las palabras de Aro le hicieron dudar de ese cariño, él había pasado por eso una infinidad de veces; solo se le acercaban las mujeres y uno que otro hombre por las herramientas de su naturaleza, nada más. Y ese fue el motivo que lo orillo a seguir ese plan sugerido por el Vulturi.

Pero ahora todo estaba aclarado, jamás dudaría de Bella de nuevo; él demostraría ser digno de su amor y cariño. Era lo menos que podía hacer, para recompensar a la mujer de su existencia.

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- ¿Estas bromeando? - Soltó Bella sorprendida cuando bajaron del vehículo que rentaron. - ¿Una mansión? - Miraba el precioso lugar que contaba con un extenso terreno como jardín. Los muros de la mansión eran de piedra, similar a las de un castillo; contaba con varias ventanas de madera obscura. La hierba cubría parte de los muros, pareciendo que se fusionaban con la madre naturaleza; era como en un cuento de hadas.

- Si, una mansión. - La tomo de los hombros. - Bienvenida a mi primer hogar. - La condujo dentro del sitio, ella se impresionaba con cada mueble, cuadro y decoración que se encontraba a su paso. - Como te dije, mi padre era un importante Pastor anglicano, ya supondrás que eso le trajo muchos beneficios. - La gente con buena posición ante la iglesia era la más beneficiada a final de cuentas.

- ¿Cómo es que conservaste el lugar? - Si él había sido dado por muerto, suponía que Carlisle había perdido cualquier derecho de una herencia.

Carlisle puso una expresión de concentración. - Si no mal recuerdo, fingí ser un sobrino lejano de mi padre, para en ese entonces, si no había nadie más en la línea sanguínea, el familiar más cercano se quedaba con las propiedades. - Bella mostró una cara de indignación con un poco de incredulidad. - Lo sé, algo injusto, pero, por derecho, es mi casa. - Dejo las maletas en el suelo. - Luego tuve que desaparecer cada cierto tiempo, y regresar como el nuevo heredero de la propiedad. - Era un poco tedioso, pero así se aseguraba de no levantar sospechas.

Bella observo que todo se veía extremadamente limpio. - ¿Cuándo fue la última vez que viniste aquí? - Se acercó a un mueble, no había ningún rastro de polvo.

- Hace 40 años. - Respondió con precisión.

- Entonces. ¿Por qué el lugar no está en malas condiciones? - Para ella no tenía sentido, a menos que alguien más viviera en el lugar.

Carlisle finalmente noto los mismos detalles que Bella, se había concentrado tanto en ella; que no había captado los aromas extraños en la casa. Ni tampoco los sonidos anormales del ambiente.

De pronto, 2 personas hicieron acto de presencia en la habitación, a una velocidad que Bella no fue capaz de percibir. Pero Carlisle sí, así que cubrió a Bella con su cuerpo en forma de defensa y soltó un sonido de advertencia a los recién llegados.

- Tranquilo, somos amistosos. - Hablo una joven de baja estatura que le daba aspecto de duendecillo; demasiado delgada y con rasgos pequeños y finos. Su cabello siendo de un negro intenso, muy corto y apuntando en todas las direcciones de la habitación. Estaba siendo acompañada por un joven rubio; alto y delgado; tenía cicatrices que cubrían completamente su piel, las más notables eran las de su cuello y mandíbula. - Espero hayan tenido un buen viaje, limpiamos el lugar para ustedes. -

Carlisle les observó con detenimiento, el otro chico le daba menos confianza debido a la cantidad de cicatrices que cubrían su rostro. Sin quererlo, bufó en señal de advertencia. - ¿Quiénes son ustedes? - Bella se inclinó hacia un lado para mirar a los vampiros que compartían algo con su pareja, ojos dorados.

- ¡Oh, cierto! - Sonrió por su descuido. - Mi nombre es Alice. - Amplio aún más su sonrisa.

- Mi nombre es Jasper Whitlock, para servirle señor. - Contesto con más formalidad, como un joven cadete.

Carlisle seguía en alerta, había observado sus ojos, pero eso no explicaba su presencia en su casa. - ¿Por qué están aquí? - No quería ser grosero, pero no esperaba esta situación.

Jasper fue quién respondió. - Discúlpenos, no quisimos incomodarlos ni asustarlos. - Sentía las emociones negativas que emanaban Bella y Carlisle. - Pero mi esposa insistió demasiado en conocerlos al fin. - Y era verdad, ella ya estaba en un estado bastante impaciente.

- Así es, Carlisle, Bella. - Eso provoco sorpresa a los mencionados. - Vi que venían hacia aquí, y nosotros estábamos de paso; ya no soportaba la espera. - Se acercó a ellos con una gracia total. - No había tenido una visión tan clara de ustedes hasta ahora. - Afirmo como si estuviese hablando de un tema tan casual.

Bella se preocupó debido al ser vigilada todo ese tiempo. - ¿Vernos? - Esa fue la cuestión que se hizo Carlisle, no había notado ninguna presencia de algún inmortal en todo el camino.

- Si, verlos. - Respondió Alice con simpleza. - Tengo el don de ver el futuro, por así decirlo. - Luego añadió. - Aunque Eleazar describe mi don como un médium entre la infinidad de posibilidades que pueden tomar las personas, siendo capaz de saber cuáles son las más probables, y ver el futuro creado en base a sus decisiones. - Alzo sus hombros en señal de desinterés.

- ¿Solo están ustedes aquí? - Fue Bella quién pregunto esta vez, alejándose de Carlisle debido a tener más confianza. Se sentía emocionada por la revelación de otros vampiros con el mismo estilo de vida que su prometido.

- Si, el resto de nuestra familia está en Denali. - Contesto Jasper, mientras inundaba la habitación con tranquilidad.

- ¿Denali? - Dijo Carlisle recordando las palabras de Laurent, por todo el asunto de los Metamorfos y los Vulturi; su mente había dejado totalmente ese tema de lado. - ¿Quieren decir que son parte de ese clan? -

- Por supuesto. ¿No sabías antes de nosotros? - Cuestiono Alice con incredulidad.

- No, hasta hace poco, un inmortal de nombre Laurent me hablo de ustedes. - Eso provoco una mueca de desagrado por parte de Alice. - Supongo que lo conocen. - Esperaba no haber tocado un tema delicado debido a las expresiones de Alice y Jasper.

- Si, es el compañero de nuestra hermana Irina. - Jasper respondió con seriedad. - Se unió hace poco a nuestro clan, por perder a sus viejos compañeros. - No les agradaba del todo, era por eso que decidieron darse unas vacaciones en Europa; hasta que se sintieran listos para convivir con el nuevo integrante.

- James y Victoria. - Soltó Bella con molestia al unir los puntos de la situación. - Ellos intentaron matarme. - Mostró su brazo con la cicatriz provocada por la mordedura de James. Ese era su recordatorio del día que casi perdió a su mitad, y no era que se alegrara, pero en ese aspecto se sentía bien al saber que ellos perecieron en el enfrentamiento con los Quileute.

- ¿Tú acabaste con ellos? - Pregunto Jasper mientras analizaba a Carlisle, no concebía que él pudiera lograr esa proeza. Visualizo las marcas en su rostro y cuello, hechas por Jacob.

- No, fueron los Metamorfos. - Eso provoco que Alice chillara de sorpresa.

- ¡Era por ellos que no te vi antes! - Parecía que había recibido la revelación absoluta. - Tuve una visión breve de ti ante los Vulturi hace unas semanas, pero luego dejé de verte como si hubiera borrones en tu destino. - Ella dijo ignorando el hecho que los lobos mataron a la pareja. - Pero luego te vi aquí junto con Bella. - Miro a Bella. - Y a ti no te había visto hasta ahora. - Todo tenía sentido en esos momentos. - Por esos mestizos no los había visto a ustedes con anterioridad. -

- ¿Quieres decir que nos pudimos conocer desde mucho antes? - De haber sabido la influencia de los Metamorfos en su futuro, se habría ubicado en otro lugar y así ser visto por los Denali desde hace décadas. - Todo este tiempo fui invisible para ustedes. - Pero no se sentía tan mal por ese hecho, ya que, si los hubiera conocido, jamás habría encontrado a Bella; o tal vez si, por el don de Alice.

Bella tomo la mano de Carlisle. - Pero eso ya no importa. - Carlisle le miro con cariño. - Al fin nos encontraron. - Jasper asintió contento.

Alice sonrió satisfecha. - Bien, aclarado todo. - Se acercó a Jasper. - Queremos llevarlos a nuestra casa y así conozcan al resto de nuestra familia. -

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Gracias por leer el capítulo, me es de mucha ayuda. Cualquier review es bien recibido.