-Esta es una adaptación de la película "Avatar" de 2009, escrita y dirigida por James Cameron. Los personajes pertenecen por completo a Masashi Kishimoto, más los personajes de carácter secundario, las modificaciones a las personalidades, los hechos y la trama corren por mi cuenta y entera responsabilidad para darle sentido a la historia. Les sugiero oír "Far From Home" de Sam Tinnesz para Sasuke, "Because You Know" de Becky Shaheen para Sakura, "Genie In a Bottle" de Christina Aguilera para Dan & Tsunade, y "Bad Liar" de Imagine Dragons para Kakashi.

1-Diálogos en cursiva para el idioma "nativo".

2-Dialogo normal para "español".

3-Breves textos en cursiva para pensamientos.

4-Texto con dialogo en cursiva par flashbacks


Luego de aquel tenso encuentro o roce en la antigua escuela del Hatake, el grupo se internó en la espesura del bosque sin tratar de separarse entre sí por los peligros que asechaban como el peligris había dado a entender, mas incluso Suigetsu se mostraba más tranquilo y resignado con el ambiente en que se hallaba y siguiendo los pasos del peligris hasta un claro en que este pareció hallar las plantas perfectas para su análisis, arrodillándose en el suelo y por lo que el Hozuki hizo lo mismo dejando su mochila en el suelo desplegando el instrumental que habían traído desde Hell's Gate junto a aquel que habían obtenido en la ruinosa escuela. Como siempre, Suigetsu se mostraba sumamente entusiasta por colaborar con las investigaciones del doctor Hatake, sosteniendo una pantalla monitor de mano en que llevó registro de la respuesta sensitiva de las pantas mientras Kakashi inyectaba una aguja conectada inalámbricamente al monitor en una de las raíces y volviendo la mirada hacia el Hozuki tan pronto como el monitor que sostenía comenzó a registrar la respuesta de las raíces a su intrusión, no tenían intención de dañar ni destruir sino que solo estudiar. Para Kakashi aquella reacción sistémica, que cruzaba velozmente las raíces de una planta hasta conectarse con las de otras y el suelo que parecía un enorme conductor en que ellos pisaban, no era nada nuevo—de hecho siempre intentaba profundizar en ello en sus investigaciones—pues llevaba años estudiando ese curioso sentido u orden de las cosas pero nunca dejaba de resultarle fascinante haciéndolo apreciar aún más esa tierra y la libertad que se respiraba mientras observaba la reacción del Hozuki.

—Wow, ¿tan rápido?— jadeó Suigetsu absolutamente obnubilado con lo que veía a través del monitor de mano.

—Impresionante, ¿no?— afirmó Kakashi viendo al peliceleste asentir velozmente. —Esta es la transducción de la señal, de esta raíz a la raíz de al lado— señaló teniendo toda su atención. —Deberíamos tomar una muestra— sugirió para estudiarla mejor.

Los experimentos científicos no eran algo que interesase a Sasuke quien bufó discretamente por lo bajo apartando la mirada de Kakashi y Suigetsu, acomodando su fusil contra su brazo izquierdo y dirigiendo sus pasos hacia la espesura del bosque en busca de otro lugar donde pudiera ocupar su mente, llegando a otro claro rodeado de plantas muy diferentes a las que estudiaban el Hatake y el Hozuki, enormes y en forma de espiral de un brillante color naranja, de múltiples tamaños y que iban de lo metros de altura. Sorprendido por la visión de aquellas plantas y teniendo métodos menos científicos con los que proceder, Sasuke se acercó a una de las pantas hasta tocarla con uno de sus dedos y ante lo que toda la estructura se retrajo de forma defensiva como si fuera una planta carnívora, haciendo sonreír ladinamente al Uchiha que no pudo evitar replicar la acción con una segunda planta, pero tan pronto como pensó en hacerlo con una tercera a modo de juego, todas las demás plantas se replegaron casi al unísono despejando el claro y exponiendo a un gran búfalo que estaba pastando pero que alzó la cabeza al escuchar como las plantas se replegaban. Tan pronto como vio al búfalo bufar y enfocar su atención en él, Sasuke lo apuntó velozmente con su fusil, sin saber qué es lo que esa criatura haría o si lo atacaría, asombrándose con las dimensiones de esta y ajeno a los agiles pasos de Kakashi y Suigetsu que corrieron velozmente en su busca tras haber escuchado el poderoso bufido, el Hatake oprimiendo el botón en el comunicador alrededor de su cuello para ser oído por el Uchiha y ocultándose tras un árbol con el Hozuki cerca suyo.

—No dispares— instó Kakashi con voz seria. —No dispares, lo enfurecerás— insistió pues lo último que necesitaban era llamar la atención con una muerte.

—Yo creo que ya está enfurecido— masculló Sasuke oprimiendo el botón de su comunicador en respuesta y difiriendo mucho en opinión.

—Sasuke, su cuerpo es demasiado grueso, créeme— volvió a asistir el Hatake y ante lo que el azabache bajo su fusil. —Está definiendo su territorio, no corras o te atacara— explicó mientras veía al búfalo golpear el suelo con sus patas.

—¿Y qué hago?, ¿Bailo con él?— cuestionó el Uchiha sin escuchar una solución que fuese de ayuda.

—Solo quédate donde estas— indicó el peligris mas dócilmente un instante antes de que el búfalo bufara y acercara velozmente sus pasos hacia el Uchiha.

—Ni hablar— aunque fuese una locura, el azabache imitó el actuar del búfalo al que confrontó con un grito viéndolo paralizarse sorprendido por la reacción del Uchiha. —¿Qué esperas?, ¿Qué vas a hacer? No te tengo miedo, imbécil— determinó viendo al búfalo retroceder lentamente y volverse hacia su manada a varios metros y hacia cuyo grupo corrió. —Eso es, corre, eres un cobarde— obvió sonriendo ladinamente.

Si Suigetsu ya se había mostrado asustado tanto en su nombre como en el de Kakashi que era tan bueno ocultando sus emociones, lo hizo todavía más cuando una enorme figura hizo acto de aparición en el claro y emergiendo lentamente tras Sasuke quien parecía demasiado concentrado en su "triunfo" enfrentándose al búfalo como para pensar en voltearse y ver que el peligro no había pasado. Volviendo la mirada hacia Suigetsu y Kakashi quien por cierto protegió al Hozuki con su brazo ocultándolo tras de sí a modo de escudo y teniendo una expresión de temor, Sasuke se sintió enormemente confundido mientras se volteaba y veía un enorme felino exactamente tras suyo y que rugió estruendosamente antes de saltar pasando sobre él que retrocedió lo más rápido posible mientras torpemente lo apuntaba con su fusil. En una ocasión y siendo pequeño había visto una noticia mientras su hermano estudiaba, en que se decía que el tigre de véngala considerado extinto había vuelto a aparecer por crías nacidas en cautiverio, algo que sonaba increíble, pero en ese momento el Uchiha sintió que esa antigua noticia era un eufemismo ante el enorme felino que lo observó con apetito, relamiéndose el hocico y ahuyentando a la manada de búfalos que escapo velozmente...no era un tigre, sus rayas eran demasiado difusas y su pelaje era de un color arena semejante a un león pero no tenía melena y era el doble de grande, de la altura de un animal para montar pero enormemente intimidante mientras regresaba su mirada al Uchiha a quien rugió intentando amedrentarlo solo que Sasuke esta vez no dudo en apuntarlo con su fusil mientras intentaba no demostrar miedo.

—¿Qué hago con este?, ¿Corro, no corro o qué?— interrogó Sasuke alzando la voz y sin molestarse en emplear el comunicador.

—¡Corre, definitivamente!— respondió Kakashi si de milagro conseguía sobrevivir.

Probablemente salir huyendo no fuese lo mejor para él que no era ese tipo de persona y fuese el momento perfecto para que el enorme felino pudiera atacarlo, sin embargo Sasuke no dudo en correr lo más rápido posible mientras sentía el eco de las patas del felino contra el suelo y sus gruñidos acercarse mientras el Uchiha se internaba en la espesura del bosque usando el ambiente para intentar perder al felino aunque también para ser un desafío y alejarlo tanto de Kakashi como de Suigetsu, dándoles tiempo de irse y rápido, escuchando los arañazos de las zarpas del felino contra los árboles, él corriendo para saltar por troncos y ramas caídos en su camino, buscando donde esconderse sin dejar de correr para ganar tiempo. Viendo a lo lejos un árbol con prominentes raíces que podían obrar cuando menos temporalmente como guarida, Sasuke corrió aún más rápido, escuchando como el felino—al que ni siquiera pensó en voltear a ver—destrozaba árboles y ramas a su paso, y por lo que él se arrojó al piso arrastrándose para ocultarse bajo el árbol y jadeando mientras recorría el exterior con su mirada buscando una estrategia sobre como atacar ya que dudaba que esas raíces aguantaran y mantuvieran a esa cosa a raya lo suficiente. Un segundo después el felino se estrelló contra las raíces destrozándolas con su fuerza y dientes, furioso y ansioso por tomar la vida de su víctima, pero Sasuke no era presa fácil y por lo que disparó inmediatamente al felino que supo mover la cabeza para evadir las balas, gruñendo y buscando un nuevo ángulo entre las raíces hasta apresar con sus fauces el fusil que el Uchiha sostenía entre sus fauces y arrojándolo lejos, desarmándolo.

Retrocediendo mientras intentaba pensar pero no teniendo otro remedio que seguir huyendo ya que necesitaba tiempo para extraer cualquier elemento de la mochila en su espalda, Sasuke se apoyó en las raíces para salir de la estructura del árbol para frustración del felino que esperaba un bocado más dócil y aunque le gustaba el desafío esto era una exageración pero el enorme gato no dudo en volver a perseguir al Uchiha, buscando atraparlo con sus enormes fauces. Aunque correr fuera algo que disfrutara en exceso el correr ahora que podía volver a hacerlo en su cuerpo de Avatar, Sasuke tuvo que reconocer que necesitaba descansar pero ese no era el momento y por lo que forzó esta resistencia que apenas estaba descubriendo, sintiendo los ruidosos ecos de los pasos del enorme felino contra las ramas caídas y los troncos de los árboles, dejando en claro la persecución. Como un gato persiguiendo a un ratón, el felino dio un salto tan poderoso que al aterrizar exactamente tras él hizo tambalear al Uchiha, moviendo sus mandíbulas hacia él y apresando su mochila entre sus dientes, elevándolo del suelo pero Sasuke pronto pudo liberarse abriendo el seguro que la mantenía abrazada a su torso, aterrizando en cuclillas y volviendo a correr de nueva cuenta mientras el felino se encontraba entretenido. Corriendo de frente y sin pensar en voltear, Sasuke contuvo un jadeó al ver que el suelo llegaba a su fin en una caída a la que no dudo en arrojarse pese a no tener claro la altura de esta hasta que vio una gran cascada que desembocaba en un enorme pozo, replegando sus brazos para acelerar su caída y escapando así de las mandíbulas del felino.

La forma en que se arrojó al agua y aceleró su caída hicieron que el Uchiha fuera al fondo del río inmediatamente, apoyando sus manos en el suelo de roca mientras contenía la respiración, apreciando solo entonces la resistencia de su cuerpo de Avatar y que superaba la de cualquier humano promedio mientras nadaba hacia la superficie, inspirando aire profundamente y admirando la enorme caída que perfectamente hubiera sido fatal para cualquier otra persona...debería estar agradecido, había escapado de las fauces de aquel enorme felino que era lo importante y a quien vio rugir desde lo alto al haber perdido a su presa, pero nada dejaba atrás la desesperada persecución a la que se había visto sometido. Nadando hacia la orilla y que se tornó enormemente lejana fatigado como estaba por la persecución pese a que la corriente de la cascada lo empujase hacia allá, Sasuke se detuvo ante las ramas de un árbol que sobresalían entre las aguas y en que se apoyó para recuperar el aliento, sobresaltándose al escuchar otro gruñido del enorme felino pero que ni siquiera intento acercarse...aparentemente no le gustaba el agua. Estaba en una gran desventaja si se detenía a pensarlo, no olvidaba al advertencia de Kakashi sobre que los "nativos" siempre estaban observando todo lo que pasaba—habría agradecido que lo salvaran de morir comido por un tigre o león súper desarrollado—y por lo que no podía volver a descuidar su seguridad desarmado como se encontraba, pudiendo concentrarse solo en solo en sí mismo al haber alejado a ese enorme gato de Kakashi y Suigetsu, al que escuchó gruñir mientras maldecía por lo bajo.

Estaba a salvo pero solo también.


Tras salir del agua e internarse nuevamente en el bosque para ocultarse de cualquier depredador y sin saber lo que pudiera asecharlo, Sasuke palpó sus bolsillos dando únicamente con un cuchillo de caza y una caja de fósforos que lo hizo bufar por lo bajo, mas era todo lo que tenía...analizando las distintas ramas caídas sobre el suelo, eligiendo una lo suficientemente grande como para cargarla como un arma, el Ucchiha de sentó en el suelo tallando velozmente uno de los extremos para poder defenderse con ella, manteniendo sus sentidos muy atentos a cualquier sonido hasta estar satisfecho con su trabajo, continuando con su camino y manteniéndose en guardia, confiando en que su ropa se secaría al sol mientras caminaba…aunque no estaba solo. Invisible a la vista del Uchiha y ligeramente recostada sobre una de las altas ramas de un árbol como un leopardo o pantera por encima del azabache se encontraba una bella mujer de cabellos rosados que lo observaba atentamente, siguiendo cada uno de sus movimientos y apoyada contra la rama para camuflarse, con una pierna a cada lado y recargando su peso en sus brazos para enderezarse lentamente pero permaneciendo sentada para no emitir el menor sonido. Vestía una camiseta roja sin mangas cerrada por una cremallera desde el cuello en V con un círculo blanco en la espalda, continuando en mallas negras y encima un corto faldón gris claro como sus coderas, sus esbeltas piernas se veían resaltadas por largas botas de cuero como los guantes que cubrían sus manos, y su largo cabello rosado estaba recogido en un moño tras su nuca por un peine en forma de flor de cerezo despejando su rostro.

Como la hábil cazadora y guerrera que era, no fue difícil para Sakura ser sigilosa mientras llevaba una mano al carcaj en su espalda para tomar una flecha y con un movimiento fluido colocó la flecha en su arco, preparándose para disparar, apuntando a la espalda del "extranjero", justo a la altura del corazón para asegurarse que se tratara de un golpe fatal; no tenía nada contra él mientras lo observaba, perdido, deambulando y pisando sonoramente, sin ningún cuidado porque era un "extranjero", pero ser consciente de esto despejó cualquier duda en su mente, el objetivo era simplemente perfecto y ella no tenía por qué dudar. Sin percibir otro sonido más que el lejano eco de animales o insectos revoloteando, Sasuke se detuvo y volvió la mirada a su derecha y luego a su izquierda como si se sintiera observado pero sin detectar la presencia de nadie que pudiera significar un peligro, oportunidad que Sakura no desaprovecho, tensando su arco y preparándose para disparar en cualquier momento y tomar la vida de aquel "extranjero"…pero entonces y cruzando el aire en silencio se hizo presente una pequeña semilla de diente de león en apariencia pero que provenía del llamado Vitraya Ramunong o Árbol Sagrado, el lugar más significativo y sagrado en tierra para los nativos, una señal del mismísimo Kami y que se posó sobre la punta de su flecha. Sakura quiso creer que era algo fortuito pero la semilla no se levantó de la punta de su flecha haciéndola contener un jadeo mientras lentamente bajaba su arco y lo desarmaba con cuidado para no espantar a la semilla que solo entonces volvió a elevarse y desparecer, dejando a Sakura repleta de preguntas.

No podía entenderlo, ¿Por qué Kami mostraría semejante señal de afecto o favor para con un "extranjero", el enemigo? Siguiendo con la mirada la semilla del Árbol Sagrado hasta verla desaparecer de su rango de visión, Sakura se reprochó por pensar así y por lo que dejo de preguntarse esas cosas, ¿Quién era ella para cuestionar la voluntad del Gran Padre? Como futura Tsahik—líder espiritual del clan—su deber era obedecer y es lo que haría aunque este individuo no le inspirara la menor confianza, volviendo a enfocar su mirada en él y siguiendo sus pasos con su mirada, no tenía otra opción porque si Kami lo había elegido por una razón, era su deber protegerlo de la muerte para su desgracia. ¿Qué hubiera hecho Sasuke de haber sabido lo cerca que había estado de morir por—literalmente—un disparo por la espalda? Probablemente nada ya que ni siquiera podía ver a su bella enemiga y que si bien tenía una clara vista de él desde su posición, no lo vio más que como un enemigo en quien no podía confiar, pero regida por una autoridad superior y que le decía que no podía matarlo, lo que ella respetaría por encima de cualquier otra cosa, viéndolo internarse en la espesura del bosque pero sabiendo que no podía dejarlo solo, por lo que la Haruno descendió de la rama de un ágil salto, aterrizando en cuclillas y siguiendo los pasos del "extranjero", guardando la debida distancia y sabiendo ocultarse con los árboles en su camino para que él no la detectase. Si Sasuke se sintió asechado u observado, no lo demostró ni pareció interesarle, siguiendo con su camino pese a no tener claro a donde iba pero necesitando moverse en tanto hubiera luz de día que le permitiera avistar el peligro…


Durante horas el helicóptero Sansón 16 recorrió la espesura del bosque intentando trazar cada sector en que el Uchiha podría haberse internado siguiendo las indicaciones de Kakashi y Suigetsu que se encontraban en la parte de atrás junto a Sakon quien solo observaba como los dos científicos intentaban localizar inútilmente al Uchiha viendo a través de unos binoculares, inútilmente porque el Ukon ya lo daba por muerto alzando la mirada al cielo tinturado de naranja por el atardecer evidenciando todas las horas empleadas en buscarlo. Pero ni siquiera Karin daba tregua, observando el inmenso bosque con sus lentes oscuros, mas dejando libre un suspiro al caer en cuenta de que no podían continuar, no porque no quisiera porque sí que estaba preocupada por Sasuke sino porque su cadena de mando se lo impedía. Los ligre—el felino que había perseguido a Sasuke—eran animales muy territoriales, insistentes y mortales cuando elegían una presa y sobradamente, eran un hibrido resultante de la unión entre un león y una tigresa, de ahí su nombre, pero increíblemente hoy era una raza separada de ambos felinos pues de alguna forma la madre naturaleza no los había hecho estériles y abundaban en los territorios de los nativos siendo el carnívoro predominante y más grande…Kakashi no quería ser pesimista, mientras apartaba los binoculares de sus ojos al no ver ni rastro del Uchiha, pero habían muy pocas posibilidades—por no decir nulas—de que pudiera sobrevivir solo y menos a un ligre. Por muy talentoso que Sasuke hubiera sido como militar en el pasado, ni siquiera el mejor de sus conductores de Avatar habría podido con algo como esto.

—Tenemos que regresar, no podemos volar de noche por órdenes del Coronel— determinó Karin apesadumbrada por tener que retirarse, mas no tenía otra opción. —Lo siento, doc, pero tendrá que esperar hasta mañana— agregó intentando darle esperanza y ella misma aferrándose a creer que Sasuke estaría bien por su cuenta.

—No va a llegar a mañana— respondió Kakashi con tristeza, dudando de la capacidad de supervivencia del Uchiha.

Había leído toda la documentación que Homura le había entregado antes de la llegada del Uchiha a Hell's Gate, antes del fatídico accidente en pleno campo de batalla y que lo había relegado a su silla de ruedas, Sasuke había sido uno de los militares más talentosos de su generación, era un buen líder de guerra pese a su posición como un simple cabo y sin intención de ascender pese a su talento natural, era muy inteligente y podía sobrevivir en circunstancias difíciles, su entrenamiento le daba esa actitud de que podía enfrentarse al mundo sin importar lo que pasara. Pero eso había sido en el pasado, Sasuke era muy inteligente pese a su actitud de imbécil arrogante pero Kakashi había vivido para ver a grandes guerreros morir a manos de un ligre y no hablaba de miembros del Programa Avatar sino de miembros del clan Konoha y que evitaban meterse en el camino de ese enorme felino, ¿Por qué Sasuke habría de sobrevivir entonces? Sin tener palabras ni fundamentos con los que contrariar a Kakashi, Suigetsu se dejó caer pesadamente en su asiento y apartando la mirada a diferencia de Sakon quien se mantuvo imperturbable con su actitud distante y seria, algo que Karin deseó poder emular desde su lugar en la cabina, teniendo que apartar la mirada y sintiéndose mortalmente culpable, deseando poder permanecer ahí y dar todo de sí para encontrar a Sasuke tanto como querían Kakashi y Suigetsu, pero permanecer siquiera diez minutos en espacio aéreo enemigo era peligroso por la respuesta que los diversos animales y aves podían tener, ni se diga de noche donde el peligro no podía ser avistado fácilmente, y por lo que quedarse no era una opción.

Esperaba que todos estuvieran equivocados y Sasuke pudiera sobrevivir.


Cuando el sol comenzó a ocultarse, Sasuke respiró más tranquilo al encontrar un árbol que goteaba savia y por lo que el Uchiha eligió permanecer ahí, envolviendo uno de los extremos de la rama con que cargaba formando una especie de colchón o nudo y que pasó por la savia mientras sostenía entre sus dientes una caja de fósforos que se apresuró en encender escuchando gruñidos acercarse y que llevaba percibiendo por varios minutos, conteniendo un escalofrió de nerviosismo mientras el sol finalmente se ocultaba sumiendo todo en la oscuridad al mismo tiempo en que él finalmente consiguió encender el fosforo y el extremo de su rama que se convirtió en una antorcha. Tan pronto como la antorcha se encendió, iluminando el claro en que se hallaba, el Uchiha se volvió hacia lo que sea que lo estuviera asechando rebelando con la luz a una manada de caninos que gruñeron mientras sus ojos eran iluminados por los destellos de la antorcha, de orejas puntiagudas, patas delgadas y cuerpo mediano que no deberían ser una gran amenaza, pero los filosos colmillos en su boca decían lo contrario y por lo que el Uchiha los amenazó con la antorcha mientras retrocedía hacia la espesura del bosque. Los caninos eran muy inteligente, la mitad de ellos subiendo a las ramas de los árboles y asechando a su presa en manada pero ello no amedrento suficiente a Sasuke que no dejo de observarlos para no bajar la guardia, mas teniendo en determinado punto que darles la espalda y correr para intentar encontrar un lugar donde no pudieran atacarlo de todos lados, siendo abordado por parte del grupo de caninos que se negaba a dejarlo escapar, gruñendo al cerrarle el paso.

—No tengo toda la maldita noche— obvió Sasuke en voz alta y a punto de perder la paciencia. —¿Qué esperan?, ¡Vamos!— instó amenazando a los caninos que solo gruñeron envalentonados por el reto de una presa difícil.

Uno de los caninos saltó con las fauces abiertas hacia el Uchiha pero este lo golpeó con su antorcha aturdiéndolo ligeramente, un segundo intentó replicar el actuar solo que fue lo bastante inteligente para apresar la antorcha entre sus dientes y forcejeando lo suficiente para hacerlo caer al suelo, lo que el canino aprovechó para saltarle encima solo que Sasuke estaba preparado para ello, sujetándolo fuertemente para que no lograra morderlo. Siempre había tenido una habilidad inigualable para meterse en problemas y ahora lo estaba, luchando con uno de aquellos caninos y que identifico—al tenerlo tan cerca—como un coyote que trataba de morderlo desesperadamente en tanto el Uchiha gruñía para evitar que el animal le arrancara la garganta; en medio de ese forcejeo, el canino se puso rígido permitiéndole a Sasuke quitárselo de encima, notando entonces una flecha que el animal tenia incrustada en el costado y volviendo la mirada por sobre su hombro buscando identificar el origen de aquella arma, viendo emerger de entre la arboleda una grácil figura femenina que apareció en su rescate y para dispersar a los tercos caninos. Grácil y elegante en sus movimientos como siempre pero interiormente molesta por tener que intervenir pese a no desearlo, Sakura se abalanzó contra los coyotes a los que golpeó con su arco como elemento disuasorio, lamentando la flecha que había dispararon contra uno de sus hermanos animales para salvar a este "extranjero" y esperando que ellos entendieran y huyeran, lo que afortunadamente ocurrió haciendo que los caninos corrieran asustados y aullando mientras se alejaban velozmente entre la espesura del bosque.

No puedo creerlo…— ya a solas, la Haruno volteó a ver al "extranjero", entornando los ojos ante la antorcha encendida que yacía sobre el suelo, —esto es una burla— masculló recogiendo la antorcha y aproximándose al arroyo presente en aquel claro.

—Espera, no— el Uchiha trató de protestar, mas ella lo ignoró y arrojó la antorcha al agua extinguiéndola al instante. —Genial— gruñó por lo bajo y sin poder evitarlo.

Ignorando adrede al "extranjero" y creyendo que no merecía su tiempo, Sakura prestó mayor atención al quejido del coyote al que había disparado y que había sido el único miembro de su manada en quedar atrás, agonizando sobre el suelo del bosque que lentamente comenzó a iluminarse como cada noche, especialmente bajo los pasos de la Haruno que se acercó velozmente al canino para arrodillarse junto a él mientras desenfundaba la daga de su cinturón y con la que le cortó la arteria principal en un solo movimiento, murmurando una oración durante todo el proceso; te veo, hermano, y pido tu perdón, perdóname...una lagrima se deslizó por su mejilla, lamentando tener que hacer aquello pero Kami había dado una señal y ella no podía ignorarla. Por otro lado y ajeno a la preocupación de su bella salvadora, Sasuke sacó la antorcha ahora inservible del agua soltando un sonoro suspiro que se difumino en el aire a causa de la impresión medida que el Uchiha veía como las plantas comenzaban a brillar llenando la espesura del bosque de luz; eran bioluminiscentes, por eso la bella pelirosa había apagado la antorcha, al final no había sido necesario el fuego después de todo. Cayendo en la cuenta de su error, Sasuke regresó sobre sus pasos hacia el claro en que se encontraba su salvadora arrodillada junto a uno de los coyotes que lo habían atacado, murmurando lo que parecía ser una oración, quizás al final ella ni siquiera hablara o entendiera el español pero Sasuke sentía que debía agradecer su ayuda. Observándola mejor, el Uchiha notó que de hecho era una mujer muy hermosa, ligeramente menor que su cuerpo de Avatar y mucho menor que su cuerpo real.

—Sé que seguramente no vas a entenderme, pero...gracias— se expresó Sasuke hablando lentamente, pero ella lo ignoró prefiriendo continuar con su oración sobre el coyote muerto. —Gracias— repitió si es que ella no había escuchado. Molesta por su agradecimiento, Sakura extrajo su flecha del cadáver del coyote, regresándola a su carcaj. —Eso fue impresionante. Estaría muerto si no hubieras llegado, fue…— elogió el Uchiha, mas Sakura solo arqueo una ceja antes de levantarse, dar media vuelta e internarse en el bosque, a lo que Sasuke no dudó un instante en seguirla. —Espera, no vayas tan rápido— llamó sin éxito pues ella no detuvo su grácil andar, —solo quería darle las gracias por matar a esas cosas— nada más decir eso, la bella pelirosa se volteó y lo golpeó con su arco enviándolo de golpe al suelo.

—No me agradezcas— contrarió Sakura apuntándolo con el extremo de su arco, —este no es un motivo por el que se deba agradecer— el "extranjero" se mostraba visiblemente sorprendido mientras la observaba. —Esto es triste, solo es algo muy triste— se esforzó por no demostrar sus sentimientos, no le daría ese placer.

—Okey, okey, lo siento— intentó sosegar él, sorprendido de que ella hablara español y muy fluido, —no sé qué hice pero lo siento— se sentía como un tonto por disculparse.

—¿Por qué no me sorprende?— preguntó ella al aire esbozando una sonrisa carente de humor mientras dejaba de apuntarlo. —Esto es tú culpa, ellos no tenían por qué morir, era innecesario— aclaró señalando el claro en qué había ocurrido todo.

—¿Mi culpa?— repitió el Uchiha demasiado perdido o ella muy confundida, mientras él trataba de no parecer demasiado embelesado por su dulce y cadenciosa voz. —Ellos me atacaron, ¿Cómo es mi culpa?— discutió levemente divertido por la acusación.

—¡Lo es!— insistió la Haruno golpeándolo en el pecho con el extremo de su arco

—Tranquila— sosegó Sasuke en voz baja, empujando suavemente el arco de la bella pelirosa antes de erguirse lentamente y sin apartar sus ojos de ella. —Bien, si amas a tus amigos del bosque, ¿Por qué no dejaste que me mataran?, ¿Cuál fue tu lógica?— preguntó viendo como la ira disminuía del semblante de ella. —¿Por qué me salvaste?— cuestionó si ya de por si no era lo suficientemente claro, aunque dudaba que fuera así porque ella hablaba el español con total soltura.

—Porque...— Sakura titubeó al pensar bien lo que iba a decir, —no tienes miedo, eres de corazón fuerte— apreció sinceramente y viéndolo arquear una ceja con curiosidad ante su elogio. —Pero estúpido e ignorante como un niño— agregó antes de dar media vuelta y no queriendo darle a entender que le simpatizaba, porque no era así.

—Si soy como un niño, tal vez...deberías enseñarme— sugirió el azabache intentando alcanzarla lo más rápidamente que le fue posible.

—Los extranjeros no aprenden, no pueden ver— contrarió la pelirosa pues ello sería una pérdida de tiempo, sin dejar de caminar por el placer de verlo intentar alcanzarla.

—Entonces enséñame a ver— insistió el Uchiha, siguiéndola mientras avanzaba por lo que parecía un gran árbol caído a modo de puente entre dos barrancos.

—Nadie puede enseñarte eso— se opuso la Haruno sin necesidad de voltear a verlo.

—Ay…— Sasuke se detuvo un instante, viendo la profunda caída bajo el árbol antes de volver a seguirla. —¿Por qué no te detienes y hablamos?— sugirió entusiasmado porque ella hablara español. —¿Dónde aprendiste el español?, ¿En la escuela del doctor Hatake?— al decir esto último, Sasuke perdió el equilibrio y habría caído si ella no hubiera volteado y lo sujetara del brazo para estabilizarlo.

—¿Ves? Eres como un niño— señaló Sakura apartando la mirada al probar su punto, —no puedo creerlo…— murmuró para sí pero en un claro español.

—Necesito tu ayuda— pidió él no teniendo nadie a quien recurrir salvo a su salvadora.

—No, lo que necesitas es irte— corrigió Sakura sin pensarlo, —no deberías estar aquí para empezar— insistió señalando el camino por el que él había venido.

—Llévame contigo— insistió Sasuke, siendo igual de terco de lo que era ella.

—No, vete cuanto antes— contrarió la pelirosa dándole la espalda antes de suspirar al escucharlo seguirla, —¿No me oíste? Dije que te fueras— volteó marcando las distancias al situar una de sus manos sobre el pecho de él con una mirada más dura, pero pronto algo la detuvo; una semilla del Árbol Sagrado y que lentamente se pozo sobre la cabeza del Uchiha que alzó la mirada junto con ella, viendo un gran número de esas extrañas semillas flotar lentamente hacia él y que apartó con ligero manotazo. —¡No!— intentó frenar Sakura, sobresaltando al azabache que volteó a verla. —Ellas son...— deseó gruñir cuando de todas formas él alejó otra de las semillas golpeándola con la mano izquierda. —¿Quieres quedarte quieto y escucharme?— regañó sujetándolo del brazo y siendo más clara, a lo que él se quedó inmóvil, dejando que las semillas flotantes aterrizaran lentamente sobre sus brazos y torso.

—¿Qué son?— preguntó Sasuke, dejando que una de esas cosas se posara sobre la palma de su mano.

—Semillas del Árbol Sagrado— contestó la Haruno visiblemente sorprendida, —espíritus muy puros...— murmuró intentando entender el significado de esto, viendo como más semillas de las que hubiera visto nunca cubrían el torso y cabeza del Uchiha permaneciendo estáticas por varios segundos antes de finalmente volver a elevarse, dispersándose para sorpresa de la Haruno y el Uchiha.

—¿Qué fue todo eso?— preguntó Sasuke intentando entender lo que acababa de pasar.

—Una señal…— susurró Sakura para sí misma, regresando su atención hacia el "extranjero". —Ven, rápido— indicó sujetándolo del brazo para que la siguiera.

La Haruno se sentía en shock aunque sujetara del brazo al "extranjero" y le indicara que la siguiera, moviéndose a ligero trote por el resto del árbol que obraba como puente hasta cruzar al otro barranco, escuchando los pasos de este seguirla velozmente pero con esfuerzo ya que no era tan rápido como ella, mas no le intereso; no podía creerlo, era impensable pero ahora la señal de Kami era aún más clara, una sola semilla podía ser malinterpretada pero no más de cuarenta de ellas y eso que no las había contado, nada podía negar lo que habían visto sus ojos, porque Kami había hablado y ella no podía desatender sus deseos. Necesitaba llevar a este "extranjero" al hogar de su clan en el Árbol Madre, sabía que su padre y Olo'eyktan no estaría feliz de que ella rompiera sus reglas pero Kami había hablado, y ella tenía que salvar a este "extranjero" y guerrero. Aunque confundido por todo lo que había pasado y sin acabar de entenderlo, Sasuke simplemente siguió a su elegante y bella salvadora lo mejor posible, era una mujer tremendamente inusual, diferente a cualquiera que hubiera conocido antes, era la mezcla perfecta entre belleza y fuerza, delicada pero feroz, veía un volcán incandescente en esa intensa y profunda mirada esmeralda…era como contemplar a un ángel, pero no uno frágil que solo componía su imagen con belleza, sino más bien uno que era hermoso pero que a la vez sostenía una espada. Solo contemplarla resultaba lo más fascínate del mundo y bien podría haber continuado haciéndolo de no ser por la labor que se le había asignado cumplir y que él no pretendería olvidar solo por una cara bonita, sin importar que fuera la mujer más hermosa que hubiera visto en toda su vida…


—¿A dónde vamos?— cuestionó Sasuke intentando no mostrarse embelesado por el bello ambiente luminiscente que cruzaban en su desconocido camino.

—Solo sígueme— protestó Sakura volviendo la mirada brevemente por sobre su hombro. —Rápido, no te quedes atrás— apremió reprendiéndolo como a un niño y regresando su vista al frente, saltando a la rama de un gran árbol que les permitiría cruzar más rápido, sintiendo los pasos del "extranjero" tras ella.

—¿Cómo te llamas?— preguntó el Uchiha esta vez, cada vez más interesado en ella.

Concentrado como estaba y fascinado con su salvadora a quien intentaba seguir lo mejor posible, seducido por el reto y teniendo alguien que conocía el inmenso bosque, Sasuke no notó la boleadora que cruzó el aire hacia él, girando para envolverse alrededor de sus tobillos haciéndolo perder el equilibrio y caer del tronco del árbol al duro follaje bajo este soltando un quejido por lo bajo; escuchando que los pasos del "extranjero" ya no la seguían, Sakura se volvió dejando libre un jadeo de sorpresa al advertir el motivo de su desaparición antes de correr hacia donde el Uchiha se encontraba lo más rápido posible. Sentándose sobre el suelo en que había aterrizado, Sasuke extrajo el cuchillo de caza sus pantalones y cortó la boleadora para liberar sus tobillos, alzando la mirada para escanear el área en busca de peligro, viendo aparecer entre las sombras tres imponentes caballos que dirigieron sus pasos hacia él y cuyos jinetes armados con arcos se prepararon para dispararle. Rodeado y únicamente armado con un cuchillo de caza, Sasuke no era tonto para no comprender la desventaja numérica en la que se encontraba, tensándose en espera de que harían sus atacantes, retrocediendo un paso y pretendiendo voltearse para huir, mas siendo sorprendido por otros tres guerreros que salieron del bosque a pie y lo apuntaron fieramente con sus armas; hombres y mujeres por igual, ahora sí que tenía todas las de perder y por lo que alzó las manos en señal de rendición. Pero nuevamente y como un ángel guardián que le permitió respirar, la bella pelirosa aterrizó ágilmente a su lado y se enfrentó a los guerreros presentes con una expresión cargada de ira.

Calma todos, manténganse atrás— sosegó la Haruno recorriendo con la mirada a todos los presentes antes de volver su atención al líder del grupo de caza y que bajo de su caballo para confrontarla. —¿Qué crees que estás haciendo, Gaara?— cuestionó molesta por su abrupta interferencia.

Sabes que los extranjeros están prohibidos aquí— recordó el Sabaku con un gruñido.

Vi una señal— espetó Sakura no queriendo pero debiendo rendirle explicaciones. —Este es un asunto para la Tsahik— estableció sonriendo ladinamente pues esto escapaba del control de él, afortunadamente.

Tráiganlo— consintió Gaara finalmente y no teniendo otro remedio, volviéndose hacia su caballo.

—¿Qué ocurre?— preguntó Sasuke no entendiendo el idioma en que hablaban.

No necesitaban decírselo ni demostrarle evidencias a Sasuke, era evidente para él, digiriéndole una mirada al grupo de guerreros y en especial a su líder, que este lo veía como una amenaza con sus ojos negros; vestía una larga chaqueta rojo oscuro de cuello alto y cerrado con mangas ceñidas a las muñecas, larga cola abierta en A frontalmente bajo el abdomen, con un chaleco o armadura gris en diagonal desde el hombro izquierdo y que envolvía su torso y cintura como un cinturón, y debajo de la chaqueta vestía pantalones y botas negras, destacando por su corto y rebelde cabello rojo, con un símbolo ilegible para el Uchiha en el lado izquierdo de la frente de color rojo. En otras circunstancias, Gaara habría discutido más pero no podía desafiar lo que su prometida consideraba importante porque un día él sería el Olo'eyktan y ella la Tsahik, y debían respetarse el uno al otro, pero ahora simplemente lidero el grupo de guerreros de regreso al Kelutral o Árbol Madre, halando ligeramente la crin de su caballo que galopó en respuesta mientras seguía el ya conocido camino al hogar del clan Konoha seguido de los otros jinetes, dejando a los guerreros que iban a pie la labor de encargarse del "extranjero". Sin recibir una respuesta por parte de la pelirosa quien apartó la mirada fingiendo ignorarlo, Sasuke pronto entornó los ojos y suspiro sonoramente cuando dos guerreros se acercaron para desarmarlo quitándole el cuchillo de las manos y procedieron a atarle las manos tras la espalda mientras un tercero y un cuarto lo apuntaban con sus flechas para asegurar que no hiciera nada imprudente. Como si pudiera pensó Sasuke absteniéndose de entornar los ojos.

¿Es que todo podía ponerse peor?


Sin un traductor del que ayudarse—pues evidentemente su salvadora no iba a responder a ninguna de sus preguntas—, Sasuke no tenía idea de que estaba ocurriendo y no iba a intentar huir de sus captores por lo que prefirió dejar que estos lo guiaran por el bosque en lo que parecía un camino por demás conocido para ellos y que se abrió para—cuanto más caminaban—revelar un árbol colosal, más grande que cualquier otro que hubiera visto en su vida, y comprendió que lo estaban llevando hacia él. Sus preocupaciones o dudas se aplacaron ligeramente al ver que Sakura se ponía al frente del grupo haciendo que todos los habitantes que se hallaban en el interior le permitieran el paso tras cruzar el umbral, siguiendo un camino recto a la base central del árbol donde se hallaban Gaara y su padre quien volvió la mirada en su dirección con un gesto tanto serio como inescrutable. En su camino Sasuke observó con sorpresa a los habitantes dentro del árbol; madres con bebés, parejas, hombres, mujeres, ancianos y jóvenes cazadores...no se veían muy diferentes de las personas que él había visto en cualquier ciudad del mundo, e incluso puede que fueran más pacíficos en apariencia observándolo entre sorprendidos, boquiabiertos y desconfiados, así como hostiles en el peor de los casos pero en silencio mientras sus captores finalmente se detenían y le desataban las manos entregándolo a la pelirosa que lo sujeto del brazo para guiarlo hasta detenerlo a una prudente distancia de dos individuos, a uno ya lo conocía como el líder de los guerreros que lo habían tomado prisionero, pero no al individuo a su lado y que parecía tener autoridad.

Padre, te veo— saludó Sakura realizando el ceremonial gesto e inclinando la cabeza ante su progenitor.

Apartándose del lado de Gaara quien era su sucesor en el cargo de Olo'eyktan o líder del clan, Dan se volvió hacia su hija con andar lento y pasando su mirada de ella al individuo que la acompañaba, un "extranjero", su atuendo lo delataba así como el aroma de elementos con que no se relacionaban los nativos y que formaba parte de su mundo "civilizado", ¿Por qué estaba ahí en su presencia? Su hija conocía las reglas y lo que él pensaba respecto de los "extranjeros", ¿Por qué traerlo entonces? Gaara no había sabido darle una respuesta alegando que solo Sakura podía hacerlo, y esperaba que así fuera. Sasuke no supo que pensar, no entendió las palabras que salieron de los labios de la pelirosa ni el gesto que realizo al presentarse al hombre que parecía estar a cargo en el lugar y que luego centró su mirada en él que solo inclinó ligeramente la cabeza en respuesta por temor a hacer algo equivocado; el hombre no debía tener mucho más de treinta años, y si lo hacía no los aparentaba, era un hombre alto, de largo cabello color azul pálido hasta la mitad de la espalda y ojos verde oscuro, vestía una camiseta negra de cuello alto y cerrado con mangas subidas has los codos y encima un chaleco verde musgo sin mangas de cuello cuadrado completamente cerrado, pantalones negros y una corta capa trasera azul con círculos blancos en la parte inferior. Sonriendo ladinamente con falsa cordialidad al "extranjero", Dan regresó la mirada a su hija en espera de una explicación, si bien en su infancia ella e Izumi habían acostumbrado a traer animales heridos a casa, esto superaba cualquier precedente, especialmente porque los "extranjeros" eran sus enemigos.

Este individuo, ¿Por qué lo has traído aquí?— cuestionó Dan, no queriendo dudar del juicio de su hija.

Debo confesar que iba a matarlo, padre— inició Sakura imaginando la reacción de su progenitor, —pero presencie una señal de Kami...— se justificó, mas siendo interrumpida en el acto.

¡Les he dicho decenas de veces que cualquier señal en un extranjero no tiene relevancia!, ¡Sea como sea continúan siendo nuestros enemigos!— recordó el peliazul lamentando alzar la voz con su hija. —Su conducta "civilizada" es molesta— agregó apartando la mirada del "extranjero" y haciendo reír a algunos de los presentes.

—¿Qué está diciendo?— preguntó Sasuke en voz baja y cada vez más confundido.

—Mi padre está decidiendo si va a matarte o dejarte con vida— tradujo la Haruno sencillamente antes de ver que él pretendía dar un paso al frente, posiblemente para presentarse como hacían los "extranjeros". —Ni siquiera lo pienses— detuvo en seco con un bajo gruñido, sujetándolo de la muñeca y haciéndolo permanecer en su sitio.

Atrás todos— se anunció una portentosa voz femenina, descendiendo por el entramado de la estructura en forma de espiral, —yo seré quien juzgue a este individuo y el sentido de la señal— declaró dirigiendo una mirada a su esposo y Olo'eyktan.

—Ella es mi madre, la Tsahik, es quien interpreta la voluntad de Kami— aclaró Sakura en voz baja ante el evidente desconcierto y confusión de su invitado.

—¿Quién es Kami?— inquirió el Uchiha entre dientes y sin tener claro de que se refería, mas la pelirosa solo entornó los ojos al escuchar su pregunta.

Aquella mujer poseía una gran belleza comparable a la de su hermosa salvadora, solo que de ojos miel en lugar de jade y largo cabello rubio recogido en dos coletas bajas con dos mechones enmarcando su rostro en que exhibía una marca violeta en forma de rombo sobre la frente, vestía una camiseta gris de estilo kimono sin mangas, ceñida bajo su prominente busto por un fajín purpura resaltando todavía más sus atributos, encima una chaqueta verde jade con margen salmón y que permanecía abierta, pantalones oscuro y botines de tacón. Pese a gozar de autoridad casi ilimitada como Tsahik o líder espiritual en un sistema en que los deseos de Kami estaban por encima de todo lo demás, Tsunade jamás osaría ir en contra de los deseos de su esposo, entendía que ambos debían complementarse para que el clan pudiera tener un futuro y estaba conforme con ello, pero si esto era verdaderamente una señal, ella debía juzgarla personalmente. Tsunade procedió a estudiar al "extranjero", rodándolo y alzando una de sus manos para palpar su rebelde cabello azabache con reflejos azulados, luciendo como uno más de los nativos pese a su atuendo. Removiéndose incomodo al ser el centro de atención, Sasuke apartó la mirada ante el análisis de la Tsahik como había dicho la pelirosa y que lo observaba con una expresión amistosa aunque idéntica la de un juez que otorgaba la pena capital. Usualmente Tsunade se sentía confiada con respecto a las personas, había aprendido a leer las intenciones a través de las miradas, pero extrañamente este hombre, este "extranjero"…tenía un velo en los ojos, impidiéndole ver o saber qué es lo que realmente pensaba.

—¿Cómo te llamas?— preguntó Tsunade en español y con un tono elegante pero con marcado acento.

—Sasuke Uchiha— se presentó el azabache manteniendo la frente en alto. La rubia le dio una mirada más antes de extraer una pequeña daga de su fajín, enterrándosela rápida y muy superficialmente en el pecho. —Ay— se quejó el Uchiha, desconcertado al verla llevarse el filo a los labios para probar su sangre.

—¿Por qué viniste aquí?— interrogó la rubia, limpiando su daga y regresándola a su fajín.

—Para aprender— contestó Sasuke sin dudarlo aunque no fuera del todo cierto.

—Hemos intentado enseñar nuestra forma de vida a otros antes que a ti— menospreció la Senju sin creerle del todo, —es difícil alimentar a alguien que ya ha sido saciado— comparó por experiencia.

—Pues yo estoy hambriento, créame— discutió el Uchiha sin dudarlo, —se lo dirá el doctor Hatake; no soy un científico— sonrió ladinamente ante la idea de ser comparado con uno.

—¿Qué eres entonces?— cuestionó Tsunade genuinamente interesada y sosteniéndole la mirada.

—Era militar antes de venir aquí— contestó Sasuke, pero pronto compendio que quizás ellos no lo entenderían del todo, —un guerrero del clan Jarhead— aclaró, aunque ese había sido el nombre de su escuadrón en el ejército en el pasado.

¿Un guerrero?— afirmó Gaara en voz alta al escucharlo. —Podría matarlo fácilmente— aseguró dando un paso al frente, pero su Olo'eyktan se lo impidió.

No— acalló Dan con una mirada severa que hizo obedecer al Sabaku. —Es el primer extranjero de este proceder con el que tratamos, y hemos de considerar que sea diferente— señaló en voz alta para que todos los supieran. —Necesitamos comprender mejor con que tratamos— era una oportunidad única y debían aprovecharla.

Hija mía— llamó Tsunade dando un paso más cerca de su heredera. —Tú te encargaras de enseñarle nuestra forma de vida; a hablar caminar, vestir y ser como nosotros— delegó viendo a su hija apartar la mirada con disgusto.

¿Por qué yo?— inquirió Sakura no queriendo aquella responsabilidad. —Sí, lo traje aquí pero no quiero hacerlo. Que se encargue alguien más…— intentó protestar pese a saber que sería inútil.

Es una orden, no una sugerencia— acalló la Senju haciendo que su hija bufara por lo bajo. —Está decidido, mi hija será tu mentora y te instruirá en nuestras costumbres— estipuló acercándose al "extranjero" que a partir de hoy conviviría con ellos. —Aprende bien, Sasuke Uchiha...así veremos si tu locura se puede curar— sonrió carente de humor y poniendo nervioso al azabache.

Una parte de ella quería que este individuo se quedara, veía en él una posibilidad de curar la influencia "extranjera" de su ser, viendo en sus ojos parecía tener un buen corazón, puro—Kami no lo habría elegido de otro modo —, así como un espíritu fuerte y en que no parecía haber miedo o no el suficiente para hacerlo bajar la cabeza o exteriorizar lo que sentía; la parte compasiva de Tsunade le dijo que debía cuidar a este niño abandonado y triste que necesitaba formar parte de algo más aunque quizás ni siquiera el mismo comprendía cuánto, y solo el tiempo probaría si ella tenía razón o no. Aunque no pensara ser el individuo más cuerdo, Sasuke tampoco creía estar loco pero sabía cuándo callarse y por lo que únicamente asintió para aprovechar lo más posible esta experiencia observando en los ojos críticos y calculadores de la mujer cuya profundidad lo sobresaltó, sin dimensionar todo en lo que se había involucrado, por un lado tendría una fuente constante de información al quedarse en la sede de este clan de nativos por quienes ya sentía fascinación y por lo mismo no podía evitar sentirse abrumado por el peso del reto, el primero que había tenido en años. Por su parte Sakura dejo libre un suspiro bajo a causa de su frustración no pudiendo llevarle la contraria a su madre quien la observó severamente acallando cualquier protesta y ante lo que ella asintió resignada, si esto sería por el bien del clan ella sabría tragarse su disgusto y no intentar arrancarle la cabeza a este "extranjero" llamado Sasuke Uchiha, apartando la mirada cuando los orbes ónix de él se centraron en ella…


Convertirse en la mentora de un "extranjero" no había sido un prospecto en la mente de Sakura, no solo por su turbulento pasado con ellos sino por el hecho de que nuevamente su madre le imponía algo y no le quedaba otra opción que aceptar, hablando seriamente, ¿Cuándo había sido la última vez en que había podido emitir una opinión? Ni siquiera podía recordarlo y lo peor es que obedecer era lo que se esperaba de ella como futura Tsahik junto con desposarse con Gaara quien tenía ideas opuestas a las suyas. No quedándole otro remedio que cumplir lo que ya era una decisión tomada para su madre, Sakura se volvió escasamente hacia el Uchiha sujetándolo ligeramente del brazo para indicarle que la siguiera y él no protesto en lo absoluto, ambos siendo observados entre murmullos por parte de los demás habitantes de plan que no sabían que pensar pero que respetaban la decisión conjunta de su Olo'eyktan y Tsahik. incomodo por ser el centro de atención sin desearlo, Sasuke siguió resignadamente a la pelirosa cuyo nombre aún no sabía, deseando preguntarle a donde iban pero finalmente prefiriendo no hacerlo sino que solo seguirla, aprovechando el camino por el que ella lo guiaba—viendo a los distintos integrantes del clan dispersarse y volver a su rutina con gran facilidad—para observar mejor la enorme estructura del árbol, siendo soltado por su ahora mentora en el umbral de una habitación que se separaba del resto de la estructura por dos gruesas cortinas que él cruzó tras ella, dándose cuenta de que aquello era un deposito o eso parecía, viendo a la pelirosa reunir distintas piezas de ropa que parecía medir solo con su vista.

—Si va a aprender nuestras costumbres, primero debes cambiarte de ropa— habiendo seleccionado las piezas suficiente, Sakura volteó a ver al Uchiha. —Desvístete— instó sorprendiéndolo abruptamente.

—¿Aquí?— cuestionó Sasuke no sintiéndose muy cómodo en desnudarse frente a ella.

—¿Dónde más?— inquirió la Haruno antes de tener en cuenta su pudor civilizado. —Me daré la vuelta, ten— le entregó la ropa que había seleccionado, señalando con la mirada el otro extremo de la estancia donde se sentiría más cómodo.

Siguiendo la señal de la pelirosa, Sasuke se sintió como un tonto al ver una pantalla presente en la estancia y tras la cual se situó para poder desvestirse y cambiarse de ropa, esbozando una ligera sonrisa burlona en el proceso pues no debería sentirse nervioso por tener que desnudarse frente a una chica tan bella. Quitándose de la camiseta, chaqueta, pantalones y ropa interior, teniendo que vestir y aprender a ser parte de este asentamiento nativo, Sasuke palpó unos rasguños hechos por los coyotes en el bosque y que deseó atender, pero aparentemente la pelirosa ya había pensado en eso habiendo seleccionado entre su ropa unas gruesas vendas blancas que el Uchiha procedió a envolver alrededor de su abdomen, cortando el extremo con sus dientes y usando el resto para envolver sus muñecas donde también tenía rasguños similares; se abrochó los pantalones azul oscuro que se sentían asombrosamente cómodos y se ciñó unas largas botas negras similares a las que había usado en el ejército pero muy ligeras y flexibles, y finalmente por encima de la cabeza se colocó una camiseta negra sin mangas de profundo cuello en V hasta la mitad del pecho. Aunque no tuviera en lo más mínimo la intención de voltearse o molestar al "extranjero" mientras se cambiaba de ropa, Sakura no pudo evitar sonreír ladinamente mientras permanecía de espaldas y brazos cruzados a la pantalla tras la cual él se encontraba, meditando como lo haría para entrenarlo y no perder la paciencia al tener que sentirlo respirándole en la nuca, pero esta reflexión no le impidió escuchar los pasos del Uchiha acercarse a su espalda y por lo que ella se volvió hacia él.

—¿Puedes darme una mano?— solicitó el Uchiha sosteniendo una extensión de tela azul oscuro que no había sabido ceñirse junto a una cuerda morada y que la pelirosa tomó de sus manos en respuesta. —Gracias— apreció mientras la veía envolver la tela alrededor de su cintura indicándole que la sostuviera mientras ella envolvía la cuerda morada sobre esta, anudándola como un cinturón.

—Nosotros no somos ningunos salvajes incultos, todo lo que hacemos, somos y usamos tiene un propósito, incluso la ropa— mencionó la Haruno plenamente consciente de los que los "extranjeros" pensaban de los nativos. —Te aportara más movilidad que cualquier otra cosa que hallas usado antes, tenlo por seguro— tras anudar el faldón, aliso superficialmente la tela de su camisa y anudo mejor sus vendas. —Apuesto a que los extranjeros no saben eso— obvió sosteniéndole la mirada.

—Tienes un buen punto— asintió Sasuke no pudiendo llevarle la contraria y queriendo aprender de su mundo, —pero me tomara algo de tiempo acostumbrarme— la ropa era muy cómoda pero no acostumbraba a vestir así, ni no usar ropa interior.

—Sígueme, tenemos que comer— indicó Sakura como única respuesta, volviéndose hacia la salida.

El Uchiha no pudo evitar sobresaltarse tras las palabras de la pelirosa, escuchando gruñir su estómago ante la sola alusión de comida y no era para menos teniendo en cuenta el hecho de que no había probado bocado desde esa mañana poco antes de dejar Hell's Gate, pero intentó disimular su ímpetu carraspeando para aclararse la garganta y apartando la mirada más percibiendo como la pelirosa detenía su andar y arqueaba una ceja únicamente por el rabillo del ojo, habiendo escuchado su estómago a la perfección pero prefiriendo no decir nada y continuar con su camino, apartando las cortinas en su camino a la salida. Apretando los labios y sintiendo los pasos del Uchiha seguirla, resultando menos ruidoso con sus nuevas botas pero aun haciendo ruido y que ella debería eliminar al tenerlo bajo su tutela…Sakura no lo iba a admitir pero también tenía mucha hambre pues su ultimo bocado consistente había sido esa mañana y una breve merienda que había llevado para el día. Intentando que la pelirosa no lo dejara atrás con lo asombrosamente ágil que era—lo que resultaba envidiable y emocionante teniendo en cuenta que debería de aprender de ella—, y ahora pudiendo moverse mejor con su cambio de ropa y calzado, Sasuke la siguió hasta la base del árbol donde había sido presentado anteriormente a sus padres y que ahora estaba vacío, viéndola subir por la misma estructura del árbol que formaba un espiral a modo de escalinata que conducía hasta la planta superior y por la que el Uchiha la siguió intentando no parecer demasiado embelesado, ¿Cómo no estarlo?

Este lugar era como sueño y estaba ansioso por experimentarlo todo.


Al llegar a la siguiente planta por el entramado de ramas que formaban una especie de escalinata, Sasuke se sorprendió por el cotidiano y familiar ambiente que imperaba, viendo el espacio que debía ser el comedor repletó de mesas bajas compuestas por pequeñas sillas que tenían encima unas bandejas que obraban como una serie de pequeñas mesas ante las que los miembros del clan se hallaban reunidos en grupos. Sujetando del brazo al Uchiha, Sakura intercambió una silenciosa mirada con sus padres mientras elegía una mesa ante la que se encontraban sentadas Kurenai y su pequeña hija Mirai, indicándole que se sentara mientras ella se acercaba a uno de los encargados de la cocina que había reservado dos porciones de comida, una para ella y otra para el "extranjero". No habiendo visto nunca antes a un "extranjero" y sorprendida por lo parecido que se veía a cualquiera de los nativos, la pequeña Mirai sonrió y alzó una de sus manos para tocar el brazo de Sasuke quien solo arqueó una ceja y sonrió ladinamente ante la inocencia de la niña que fue ligeramente reprendida por su madre en su dialecto que él no pudo entender pero viéndola reír por lo bajo en una escena absolutamente normal, de hecho y pese a ser un "extranjero" nadie lo estaba mirando más de la cuenta o de mala manera. Cargando dos platos de lo que parecía ser greda, la pelirosa regresó a la mesa, tomando asiento a su lado y poniendo frente a él la comida que el Uchiha no dudo en probar, llevándose la cuchara con arroz a los labios, conteniendo un jadeo y apresurándose en dar un mordisco al trozo de carne...jamás había probado algo tan delicioso en su vida, era carne de verdad.

—Gracias— apreció él, cubriéndose los labios mientras tragaba. —Aún no se tu nombre— murmuró deseando saber el nombre de su salvadora y ahora maestra.

—Sakura, hija de Dan y Tsunade, princesa del clan Konoha— contestó ella velozmente y con aburrimiento por citar su nombre, progenitores y título pero era la costumbre.

—¿Otra vez más lento?— rió el azabache por lo bajo, apenas y habiendo entendido una silaba de lo que ella había dicho.

—Sakura— minimizó la pelirosa, volviendo la mirada hacia él y sintiendo que se exponía en demasía por dejar que la tuteara.

—Sakura— repitió Sasuke deleitándose con el elegante sonido. —Mucho gusto— apreció sintiéndose mejor por saber a quién agradecer a partir de ahora.

Sonriendo ladinamente, Sasuke se preguntó que significaba el nombre Sakura para los nativos porque hasta donde su madre le había mencionado una vez de niño, era el nombre de una flor que surgía solo en primavera y que era conocida por su belleza, y el Uchiha no pudo evitar comparar ese relato con la pelirosa que si bien apartó la mirada y continuó comiendo pausadamente no dejaba de ser la mujer más hermosa que había visto en su vida, y sí que había conocido a otras mujeres pero ninguna tan resplandeciente, aguerrida, elegante e inusual en el mejor de los sentidos. Por otro lado y sin volver la mirada hacia el Uchiha pese a saber que la estaba observando y sintiendo en la nuca la mirada de Gaara que eran muchísimo más prejuicioso que ella sobre los "extranjeros" y que evidentemente detestaba al azabache, Sakura se esforzó en mantenerse indiferente pese a sentir algo curioso ya que por primera vez en mucho tiempo alguien se refería a ella solo como Sakura en lugar de como la hija del Olo'eyktan y la Tsahik, solo ella...pero no dio a entender lo mucho que eso le significó, reprendiéndose interiormente por pensar así. Cuando todos terminaron su cena, Sasuke devorando con sumo placer hasta la última cucharada de comida y que se sentía como lo más real y delicioso que había comido, todos los miembros del clan lentamente se levantaron de sus lugares mientras los encargados de turno levantaban las mesas, el momento perfecto para Sakura quien se sentía exhausta y por lo que le indicó al Uchiha que la siguiera, considerando que él también debía sentirse cansado.

—Te mostrare tu habitación, está junto a la mía por lo que no te perderás— explicó Sakura imaginando las evidentes preguntas que él querría hacerle.

Al escuchar a Sakura a quien siguió sin importar a donde sea que ella pensara llevarlo—dependiendo de ella como su mentora o maestra después de todo—, Sasuke se preguntó interiormente en que momento habían preparado una habitación para él pero teniendo en cuenta todo lo que había experimentado ese día aquel era el menor de sus problemas y por lo que eligió no hacer preguntas. Sobradamente fascinado por la estructura del árbol ahora que la cena había acabado, Sasuke siguió a Sakura muy de cerca, trepando por el entramado de ramas sin detenerse hasta llegar a la cima del "Árbol Madre" o "Árbol Casa" donde se encontraba una serie de enormes esferas que colgaban por doquier de las ramas pero no entendió realmente lo que eran hasta que Sakura lo guio hasta una de ellas que abrió sus pétalos para permitirle ingresar y a él tras ella descubriendo que se trataba de una habitación perfectamente abastecida con un futon o cama ya preparada y un inmobiliario simple compuesto por una mesa de noche, una repisa contra el lado opuesto de la estancia y una mesa baja de estudio tras la cama. La habitación era asombrosamente cómoda, familiar y minimalista en sus colores de un azul oscuro que lo hizo sentir como en casa, le recordaba su habitación en casa de sus fallecidos padres y también a parte del ambiente austero de sus días en el ejército, era como regresar a un lugar en que siempre había estado y que se sentía extraordinariamente bien, todo aquel lugar se sentía perfecto y Sakura sonrió muy sutilmente al notarlo pues era una victoria interior para su clan y los suyos conquistar el corazón de los "extranjeros", especialmente tratándose de un guerrero.

—Es perfecto, justo como en casa— suspiró Sasuke genuinamente impresionado.

—El Árbol-Madre nos conoce a todos, como Kami— asintió Sakura dándose por satisfecha. —Es hora de dormir, comenzamos mañana temprano— determinando esperando que pudiera cumplir con ello o la obligaría a ser brutal.

—Nos vemos en la mañana— se despidió él, ansioso porque llegara el nuevo día.

Sintiendo un escalofrió ante la familiaridad con que se expresaba el Uchiha pero no demostrándolo, Sakura apartó la mirada y abandonó la estancia para dirigirse a su habitación cuyos pétalos se abrieron y las flores en el umbral sonaron como cascabeles dándole la bienvenida, aislándola en su propio mundo mientras sentía los pétalos cerrarse a su espalda, quitándose el peine y deshaciendo su moño liberando sus largas ondas rosadas que cayeron sobre sus hombros, pero el Uchiha no pudo ser testigo de ello en su habitación, permitiéndole a Sakura inspirar aire sonoramente, bajando la cremallera de su camiseta y de la cual se despojó, aproximándose al cuenco sobre su tocador, humedeciendo un lienzo y con el que limpio el sudor de su piel. Por otro lado y recostándose lentamente sobre la cama, sintiéndose aún más cansado al sentir el cómodo futon bajo su cuerpo, Sasuke ni siquiera se molestó en desvestirse o meterse debajo de las sabanas mientras a su mente regresaban los acontecimientos sucedidos a lo largo del día, partiendo por la persecución de aquel enorme felino, su salto a una posible muerte en la cascada, el ataque de los coyotes, su llegada al clan Konoha y la cálida recepción, por no mencionar el haber conocido a la hermosa mujer que era Sakura Haruno, hermosa como ninguna otra, elegante y fuerte con su temple de guerrera, temperamental sin duda pero también muy inteligente como denotaba su fluido manejo del español. Sonriendo ladinamente mientras acomodaba la cabeza sobre la almohada, Sasuke decidió que iba a gustarle estar cerca de Sakura a partir de mañana, y con ese sentir cerró los ojos cayendo en la inconciencia…


PD: Saludos mis amores, prometí que actualizaría esta semana y lo cumplo, agradeciendo como siempre su apoyo, deseando siempre que mi trabajo sea de su agrado:3 las próximas actualizaciones serán "Dragon Ball: Guerreros Saiyajin", luego volveré a actualizar "A Través de las Estrellas" adaptando el largo pero emocionante de la Guerra de los Clones, y si todo sale bien nuevamente "Más Que Nada En El Mundo" :3 Esta historia esta dedicada a mi queridísima amiga Ali-chan 1966 (por apoyarme y ser mi editora personal, no sé que seria de mi sin ella y por lo que le dedico esta historia como todas aquellas desde que somos amigas), a Jeyli05, La Esposa de Castiel, Raven Nevra, Vquesada0906, jorgejonathanrs, A.L.R5, (por seguir esta historia y lo que aprecio infinitamente dedicándoles este fic como agradecimiento), y a todos quienes siguen, leen o comentan todas mis historias :3 Como siempre, besos, abrazos, bendiciones y hasta la próxima.

Personajes:

-Sasuke Uchiha como Jake Sully -Sakura Haruno como Neytiri

-Kakashi Hatake como Grace Augustine -Suigetsu Hozuki como Norm Spellman

-Karin Uzumaki como Trudy Chacón -Sakon Ukon como Lyle Wainfleet

-Tsunade Senju como Mo'at -Dan Haruno "Katou" como Eytukan

-Izumi Haruno como Sylwanin -Kami como Eywa

También les recuerdo que además de los fics ya iniciados tengo otros más en mente para iniciar más adelante en el futuro: "La Bella & La Bestia: Indra & Sanavber" (precuela de "La Bella & La Bestia"), "Sasuke: El Indomable" (una adaptación de la película "Spirit" como había prometido hacer), "El Siglo Magnifico; Indra & El Imperio Uchiha" (narrando la formación del Imperio a manos de Indra Otsutsuki en una adaptación de la serie "Diriliş Ertuğrul") :3 Para los fans del universo de "El Conjuro" ya tengo el reparto de personajes para iniciar la historia "Sasori: La Marioneta", por lo que solo es cuestión de tiempo antes de que publique el prologo de esta historia. También iniciare una nueva saga llamada "El Imperio de Cristal"-por muy infantil que suene-basada en los personajes de la Princesa Cadence y Shining Armor, como adaptación :3 cariños, besos, abrazos y hasta la próxima :3