ADVERTENCIAS
1- Estos personajes pertencen MASASHI KISHIMOTO. Yo solo soy autor de la trama ficticia.
2-Estos personajes los profundice en específico a Hashirama Senju quien en el anime tiene estados de ánimos variantes y le di una connotación psicológica.
3-El personaje de Sakura más allá de ser fiel a su personalidad desarrollada en el anime, aunque poco a poco volverá a su personalidad anticipó que tiene limitante psicológicos debido a su amnesia. Sin embargo, se formará una Sakura más profunda y madura, sin mencionar el nivel de confusión que tendrá al tener amnesia.
4-POR FAVOR LEER ESTA ADVERTENCIA HABRÁ TEMAS MUY FUERTES COMO LA VIOLACION, MISOGINIA, ABUSO, VIOLENCIA E INCLUSO VIOLENCIA DE GÉNERO, HUMILLACIONES Y LENGUAJE FUERTE, HABRÁ TRAMA BASADO EN TRASTORNO LÍMITE DE PERSONALIDAD, SOLEDAD EN MUJERES Y SERÁ EXPLÍCITO (LEMMON)
5- La pareja principal es de Sakura/Hashirama la de fondo Sakura/Naruto.
6-En este fic Sasuke muere, si eres amante Sasuke y Sakura lo lamento.
7- Se tratará temas de empoderamientos femenino, auto superación.
8- Los días de publicación son los días Viernes. avisaré cuando cree un lugar donde puedan enviarme, donde publique ideas e imágenes o avisos importantes.
CAPITULO 1
Complejos del espejoEra terrible el dolor de cabeza todo le daba vueltas, se giró antes cuando sintió un líquido golpear con fuerza su garganta al vomitar violentamente. El sonido de pájaros canta turrando era audible, ¿Dónde estaba? Los árboles eran enormes, miro al su alrededor ¿bosque? Por la forma colosal de los árboles, parecía más una selva tropical, su cabello rosa rosa cayó hacia adelante ¿Dónde estaba? ¿Por que estaba aquí sola? Se levantó mientras se limpiaba la boca con dorso de su mano, sin embargo solo caminó dos pasos antes de apoyarse en un árbol cercano en el cual terminó por resbalarse nuevamente hacia el suelo, apoyo su cabeza en el árbol de alguna manera algo no estaba bien, un dolor inmenso se encontraba en su pecho una angustia la corroía como ácido sobre madera, de alguna manera estaba nerviosa pero también triste cómo si hubiese perdido algo. Apretó los dientes se tanteó dándose cuenta que tenía una cantimplora de agua, se enjuagó la boca para quitarse el sabor amargo y escupió antes de beber seriamente, pero decido racionar la poca agua que tenía no sabía donde estaba no habría próximas reservas que supiera, se sentía débil e igualmente vulnerable si quería hacer esto debía tener fuerzas y para hacerlo bien tenía que permitírselo no conocía lo que había sucedido pero algo estaba claro en sí misma, el sentimiento de pérdida, de vacío y abandono.
Ser permitió llorar y gritar, había algo que faltaba, como si quisiera gritar un nombre pero nada no sabía cual nombre o su nombre está tan perdería y asustada ¿Se había perdido así misma? No lo sabía, ignoro ñ cuánto tiempo pasó mientras lloraba histéricamente. Ahora más calmada y en silencio, mientras cálidas lágrima resbalaban por su rostro miró al cielo, el sol parecía estar en el más al este, determinó que apenas estaba amaneciendo eso le daba tiempo de armar un plan de supervivencia, era como si aunque no recordaba su persona había algo que le indicaba que hacer apretó los labios confirmando sus miedos.
Pérdida de memoria selectiva, por más que trataba de recordar cómo llegó aquí, ¿Quiénes eran sus padres? ¿Quiénes eran sus amigos? ¿tenía enemigos? Tal vez ¿esos enemigos la habían traído aquí? ¿Qué caso tenía dejarla viva? ¿Qué hacía para ganarse la vida? ¿Quién era ella? No había nada… apretó los labios ni si quiera tenía un nombre, ese hecho le resquebrajó el pecho, para terminar finalmente a la última pregunta ¿si quiera tenía un hogar? ¿Un hogar a donde volver? La última pregunta los acompaño con un par de lagrimas hirvientes bajar por sus mejilla y indiscutible sonido de algo romperse dentro de si misma, se permitió tomar aire, lo mantuvo y exhaló, dejó su mente en blanco y repitió el proceso, hasta que no hubo más que el sonido de aves cantando, permitió que esto le embargara.
Abrió los ojos, de alguna manera supo que se había enfrentado a la etapa más difícil de todas, su cuerpo estaba débil pero poco a poco pareció estar recuperando fuerzas, aún así estaba en medio del bosque o selva, poco a poco vinieron ideas a su mente lo cual le sorprendió tenia cierto conocimiento así que como pudo, dio el primer paso que era tratar de conseguir un refugio.
Al cabo de un tiempo consiguió caminar varia horas ya el sol estaba en lo alto, sin embargo lo más importante era conseguir comida y refugio. Busco terreno elevado y aunque todo lucía igual, noto pequeños cambios en el follaje, trato de interpretar la humedad mientras más se adentraba los árboles eran más densos y frondosos, había un río cerca tragó y mojó sus labios con agua, estaba haciendo mucho calor, de vez en cuando descansaba, noto que traía un bolso con una cápsulas rara ¿debería comer una? Estaba hambrienta, si las traía consigo debían ser buenas o ¿esos enemigos de la pusieron para envenenarla? Apretó la mandíbula, la verdad está agotada y muy hambrienta, la mastico y dio un trago de agua, mientras la adrenalina la recorría y de repente se sintió mejor, una fuerza vital la inundó hasta la punta del dedo, su hambre de sació y lloró.
Estaba tan estresada, agobiada de sí misma con la paranoia, ahora se sentía mejor hizo un cateo de todo lo que tenía a la mano, para su tranquilidad tenía 20 píldoras milagrosas, consigo un pergamino extraño en sus ropajes, colgaba firmemente en su cadera, era grueso. Lo abrió e instintivamente lo activo otra acción que le brindó conocimiento, asegurándole que su pérdida de memoria era sin duda cuidadosamente selectiva, noto que habían diferente armas, municiones y algunas provisiones de campamento, material clínico, para su tranquilidad había botellas de agua, era un pergamino de almacenamiento, rio de felicidad sea quien sea que fuese agradecía lo minuciosa y preventiva que era, de alguna manera esto era como pequeñas piezas del rompe cabeza de quien era y se alegró mucho, tal y cómo pensaba era alguien analítico y bastante preventivo tomó una cuchilla y la aseguró en su mano, ato firmemente el pergamino a su cadera con una confianza renovada y de alguna manera la moral en los cielos.
Aunque era tonto que ese pergamino le dio fuerzas, y la animara de formas inimaginables. Ahora sin hambre y con mucha energía, se abrió paso decidida en el espeso bosque, el primer paso era conseguir un refugio improvisado, que serviría como su hogar temporal, por ello debía contar con un río o lago cercano que garantizaba su supervivencia, estos lugares siempre estarían atrayendo animales para su beneficio como peses y osos. No estaba segura de sus capacidades de caza pero en el peor de los casos, aprendería.
Noto que ya el sol estaba bajando pero aún no era nada cercano al atardecer quizás pasaba del medio día, se sitio a descansar en una raíz, para tomar agua y descansar los pies, ¿Y si quizás conseguía un pueblo? Sin embargo, en los pueblo u aldeas hacen preguntas, ella ni siquiera sabía cómo se llamaba, suspiro debía ponerse un nombre. Resoplo y trato de concentrarse en escuchar los pájaros y el agua … ¿Agua?
Se levantó cómo un resorte siguiendo el sonido comenzó a caminar en dirección, se encontró con una pequeña laguna superficial de menos de un pie de profundidad frunció el ceño estaba estancada pero aún escuchaba el agua, colocó una hoja sobre el agua y está comenzó rápidamente a ir en una dirección, feliz comenzó a seguirla casi corriendo mientras ganaba más velocidad, casi agitadamente retozó y finalmente iba dirección abajo más fuerte se escuchaba el agua y finalmente se topó con un arroyo casi grito de felicidad, era pequeño sin duda pero era una ramificación débil de un río contenta sin esperar se arrodilló y lavó su cara se refrescó sus brazos se sentó a descansar el arroyo la llevaría al río, había caminado cerca de 8 horas seguidas, gracia a la píldora no tenía nada de hambre, se recompuso y caminó durante varias horas.
Finalmente consigo el rio, casi feliz pero agotado y cansada, ya el sol se escondía entre las montañas, tenía cierta hambre, saco su pergamino para armar su campamento solo por hoy descansaría de esta manera, tomo agua y encendió una fogata, el río se enfriaba con cada hora y para su pesar no logro agarrar ningún pez. Hambrienta y agotada decidió poner sus pantalones a secar y acostarse en su saco, tan cansada que se durmió muy rápidamente.
Pudo ver un una persona corriendo, un cabello brillante, ella gritaba algo tratando de alcanzarle, esta persona se giró pero de alguna manera solo pudo ver la parte inferior de su rostro, acompañado de una sonrisa cálida, todo era muy brillante, esa persona dijo algo.
-No te escucho - gritó desesperada.
Le sonrió en respuesta y murmuro algo más.
-Espera- se levantó de golpe, estaba sudando hacia un frío agonizante, su cara está grasienta y sudada bañada de lágrimas. Sin más se permitió estar en silencia la fogata se había apagado. Pero a lo lejos una tímida franja violeta y rosada, saludaban entre las montañas indicando que el sol pronto se asomaría.
Era muy temprano, pero estaba hambrienta y sedienta, decido comer una píldora y tomar agua.
Mentalmente comenzó armar y porcionar sus provisiones por los próximos siete días, construiría una casa o conseguiría un refugio para acomodarse, por lo pronto era más factible que caminar errante en el bosque, descansaría un tiempo mientras emocionalmente y mentalmente se estabilizaba, su amnesia era aislada, no afectó sus conocimiento generales lo cual era muy positivo dentro de lo negativo, debía crearse un nombre e inventarse una historia creíble para el público se levantó y se alistó para cuando el sol terminó de salir, ya tenía una hora caminando río arriba, no estaba nada cansada eso le indicó que poseía una buena condición física.
Para cuando el sol se alzó por todo lo alto finalmente consiguió la última cascada, era alta e imponente. De alguna manera también se sintió familiar había dejado varias cascada atrás pero está, le gusto para que fueses ocasionalmente su hogar. Escogió un terreno justo a pie de la cascada y se quitó su ropa hasta quedar en ropa interior, tomó un kunai y comenzó a pescar en el río alejado de la caída del agua sonrió tal cómo pensó. Habían varios peces, cazó varios pescados, estaba feliz de bañarse tener varios pescado alzándose en la fogata y bañándose tranquilamente, siguió nadando descubriendo así una cueva detrás de la cascada era muy amplia, rocosa había bastante espacio para vivir tranquila era fría y húmeda pero muy bien oculta, se subió y explotó finalmente noto un agujero negro claramente había más que explorar pero decidió que luego de comer iría.
Almorzó y casi gimió al poder saborear comida real, devoró tres peces. Finalmente, se vistió y exploro la cueva junto con una lámpara de aceite que traía en su almacenamiento, se adentró en agujero que había en la roca, sin soltar un kunai como protección pero al entrar casi se le cae la boca era enorme, muy rocosa y filosa rocas, el techo era muy alto, siguió caminando frunció el ceño tal vez debería volver, llevaba rato caminando casi se infarta a ver enormes murciélagos volar sobre su cabeza cuando sin pensar le iluminó por accidente, gritó tratando de huir de ellos. Cayó en una empinada, rodó y se lastimó un pie, gruñó y maldijo entre diente la lámpara cayó lejos ella y su kunai a unos pasos, luego de evaluar su casi torcido tobillo se quedó sin aliento, ahí había un río subterráneo era hermoso había luz natural de una grieta enorme e irregular que a su paso traía vegetación hasta tocar levemente el suave río que fluía hasta el otro lado de cueva, casi chilló era agua potable. Podría beber de esta agua, a simple vista no se veía donde desembocaba el agua, por lo tanto debía haber un desagüe interno que atravesaba internamente el agua por los suelos, gateó riendo y hundió su envase y bebió experimentalmente agua dulce, de muy de buen sabor. Definitivamente bendijo su capacidad de elegir la cascada como hogar, era muy complicado hacer una casa aquí era muy rocoso e inestable, y definitivamente tenía terrible mascotas con esos murciélagos gigantes como protectores, lleno sus reservas de agua . Totalmente decidida se enfocó de equipar y humanizar el liso espacio detrás de la cascada, las noches eran frías pero proporcionaban una casa segura y muy difícil de divisar algo le dijo que debía mantener en discreción total, pasaron varios días y se mantuvo ocupada en ambientar y recrear una cocina en el fondo que era cubierto por una pared rocosa impidiendo de tal forma, que durante la noche se vislumbrar luz a través del la cascada y pudiera mantener cálida la cueva, cosa que logró crear unos días después, para cuando terminó tachó la línea número 24 en la pared de su casa, 24 días sin vislumbrar ni un alma aunque era triste, casi está a punto de enloquecer de soledad y tristeza, era verano así que su meta más cercana era cazar un oso, y animales grandes para usar sus pieles en el invierno. Debía prepararse.
Pasaron semanas y comenzó a acumular pieles, cazar un oso de dos metros fue todo un proceso, donde descubrió que sus heridas se podía curar a sí misma como si lo hubiese hecho ciento de veces anotó eso en el fondo de mente, había logrado crear un mapa durante sus expediciones, y pero acumular carne de verdad era imposible, el invierno era largo durante esos días los alimentos eran escasos por no decir imposible, pero no había manera de guardar la carne para después, hasta que tuvo una epifanía de deshidratarla para almacenarla.
Se preparó, su vida consistía en salir a explorar cazar, comer, bañarse y dibujar en el mapa, cada día que pasaba se alargaban resultado de alguna manera desalentador ¿acaso era la última en el mundo? Finalmente llegó el invierno, fue cómodo en los aspecto de provisiones y las varias pieles que se encargó de limpiar y mantener lista para entonces, sin embargo vivir en la humedad era agonizante pero fue un consuelo el montón de pieles con que se envolvió y la cocina nunca le faltó leña seca donde aquella esquina al tener una pared de por medio se comenzó a calentar, era mejor que nada en absoluto así paso su invierno comiendo carnes deshidratadas acurrucada en una esquina de la cueva cerca del fuego, por que ni loca metía ni un dedo en el río por un pez.
Eran finales del invierno cuando tachó 158 días en la pared, habían días fáciles y día como estos, donde de alguna manera no sentía que avanzaba y estaba frustrada, salió de la cueva enojada y sintió una energía en su interior que buscaba desembocar dirigiéndola a sus puños golpeó un árbol cercano y para sus sorpresa este cedió a su puño y se desplomó, anonadada le vio caer bajo su monstruosa fuerza, ese día tuvo varios sueños sin parar, donde ella aprendía de niña, donde hablaba con compañeros, caminaba por calles abarrotadas, y se divertía con …amigos durante trozos de recuerdos discordantes, muy abstractos descubrió que poseía chakra y que era una especie de estudiante de medicina pero era muy difuso, cuando se despertó bañada en sudor supo que el día 159 tampoco sería un buen día y lo acepto con amargura.
Habían pasado siete meses exacto, para descubrir que habían tiempos de guerras, había salido a explorar en inicio de primavera, cuando divisó una carretera, al principio no sabía a donde ir pero decidió en ir de subida. Cuando noto una pequeña aldea desde lo alto de una colina, casas ardiendo en fuego, personas corriendo a esconderse en el bosque, junto a un pequeño grupo no más de cien personas gritando en una pelea, era un panorama horrible. Sus ojos se humedecieron.
Por instinto se ocultó en el bosque, ¿Qué podía hacer ella? Apretó los labios, tenía vagos sueños que supuestamente eran recuerdos de ella batallando o practicando defensa, pero no estaba segura. Pero trato de concentrarse, quizás no podía ayudar a estas personas cómo pensaba pero si podía salvar, sin más. Se comenzó a llevar esa energía a sus pies; sin perder la concentración corrió en el bosque.
Cuando llego a la ladera del bosque cercana a la aldea, se topó con una mujer con un niño en brazos. Ella le entregó al niño.
-Sálvalo por favor- pidió entre lágrimas mientras en su costado ya hacía un corte sangriento.
-No - se giró - súbete a mi espalda te llevare a un lugar seguro y te curare.
-Sera imposible escapar para entonces - la pelirosa negó- confía en mi sube y sujétate fuerte- la joven débil subió a la espalda- las fuerzas enemigas penetraron los inició del bosque pero la kunoichi se disparo a través en el bosque con largas zancadas, mientras dejaba atrás los sonidos desgarradores de la muerte y ruegos silenciados, sin embargo ningún chinobi divisó su presencia.
A pesar de que corría como alma que lleva al demonio, se aseguró de conseguir un refugio en lo alto de una ladera, el bebé lloraba desconsoladamente mientras lo posicionó al lado de su madre dentro de su manta, la pelirosa actuó por inercia, revisando su pulso y nerviosamente siguió sus instintos, colocando ligeramente sus palmas paralelo al cuerpo agonizante, empujó delicadamente su chakra en sus palmas pero nada, se suponía que lo estaba haciendo igual que en sus sueños, el llanto del bebé era desesperante alebrestando más sus nervios, ella de verdad quería ayudar a esta chica desesperada y temblando intento por segunda vez y la decepción la mello noto como la joven inconsciente perdía color en el rostro, pero se calmó respiro profundo se concentró e intentó por tercera vez y ¿¡Lo logró!? ¡lo logró! ¡Lo logró! Realizó por primera vez, un chequeo médico general como chinobi, comenzó analizar la situación divisando que la puñalada había perforado su vaso y tocó ligeramente el estómago.
Finalmente comenzó a usar su chakra curativo, para cerrar sus heridas recordando en proceso, cómo coser la herida interna con agilidad aumento el flujo del chakra para a la aceleración de producción celular, en su mente podía ver cómo si fuese un libro abierto la anatomía humana y los componentes del mismo, cómo también el manejo preciso de su chakra en el proceso como si hubiese repetido la acción miles de veces en su vida.
La chica comenzó a recuperar la vitalidad, su temperatura se Régulo. Al cabo de una hora todo había pasado, la mujer recuperó levemente la consciencia, la chinobi la ayudó apoyarse mientras le acercaba un poco de agua a su labios que bebió rápidamente.
-Mi bebe- se quejo.
—necesito que bebas todo el agua que puedas ahora mismo, voy ayudar a subir tu hemoglobina, tu bebe está aquí mira- para estas altura el bebé se había calmado, la mujer se giró a verle débilmente- estará bien, le cuidaré mientras tú estés descansado - le aseguró la joven asintió mientras bebía todo el agua posible.
La kunoichi procedió a colocar sus palmas y comenzar curar, aceleró el proceso de glóbulos rojos y bajo los niveles de estrés en su cuerpo induciendo a un estado de recuperación y la joven cayó en sueño profundo.
Totalmente cansada, casi sin aliento se permitió relajarse sintiendo que caería de cansancio, por fin oyó un suave balbuceo corto y repetitivo. Alzó sus ojos al lado derecho de la mujer recién atendida. Se choco con grandes ojos azules, cabellos oscuros y piel pálida, el bebé le lanzó una fugaz sonrisa sin dientes haciéndola sonreír, haciendo estallar en carcajadas al bebé y ella también le robó una risa en el proceso.
Sin más le tomo en brazos - Hola bebé, tú mamá esta descansando te cuidaré mientras tanto- hablo mientras se le calentaba el pecho, no había tenido acercamiento humano en meses y un bebé era perfecto, no hacía preguntas regalaba lo que más necesitabas sonrisas y carcajadas inesperada, de vez en cuando escuchaba atentamente o examinaba el techo como si fuese lo más interesante del mundo.
Pasaron varias horas donde la joven arrulló al bebé, feliz de escuchar balbuceos sin sentido hasta que finalmente se durmió. Estaba anocheciendo cuando escucho a la joven moverse y toser - A tu lado hay más agua bebe por favor- la chica lo hizo, notando que había una bolsa de tela con un olor distintivo - es carne debería comer.
La chica obedeció, para cuando terminó su bebé despertó llorando - debe tener hambre - finalmente se sentó frente a ella mirando al bebé comer desesperadamente del pecho de su madre.
-muchas gracias por ayudarnos - la madre susurro casi en lágrimas.
-Está bien, estoy para servir aunque me gustaría haberte conocido en mejores circunstancias - aseguro.
La madre bajo su rostro hacia su bebé con lágrimas en sus ojos - me has salvado la vida a mi y a mi bebe, para mi fue un momento más milagroso de mi vida, como un rayo de salvación enviado por Amateratsu - sonrió al levantar la mirada - fue una mala circunstancia, pero fuiste el milagro de ella muchas gracias por salvarme a mi a mi bebé y por seguirnos ayudando al darnos de tu agua y comida - incomoda pero muy feliz de hablar con alguien en meses asintió pero giró a mirar ahora la apuesta del sol, tomo un poco de agua y comió ahora que el bebé estaba con su madre - no pude ayudarlos a todos - susurró con culpa recordando el momento donde escuchaba los asesinos acribillando a los aldeanos.
—Es cierto pero… quizás no ayudaste a todas las estrellas del mar a volver al agua pero, a la que ayudaste de verdad le has dado una segunda oportunidad - aseguró - eres buena consolando - admitió la joven médico haciéndole sonreír - si eso me dicen pero esta guerra saca lo mejor y peor de las personas sin contar que las mujeres aprendimos a leer el dolor de otros a simple vista, todos perdemos alguien Valioso cada día un hermano, esposo e hijo - susurró mientras lloraba al mirar a su bebé - o un padre.
-Lo siento yo soy la que debería dar consuelo, has perdido a tu pueblo, tu vida y -
-¿y tu no? - cuestionó la joven la mujer levantando su mirada llena de lágrimas, aquella pregunta le picó antes que pudiera siquiera pensar la respuesta, un dolor dormido se despertó como un dragón hambriento, furioso como las lágrimas que se precipitaron de sus ojos, su expresión se contrajo al igual que la joven y de alguna manera ambas lloraron en un silencio consolador. La guerra era cruel y ambiciosa que les robó momentos, personas y algunos hasta su nombre.
—Que frentona, frentona, frentona - cantaron unisonó de niños se habían tomado de las manos y cantaban burlonamente con ella en medio del círculo.
Se agachó y negó - no no es así - gritó mientras tapaba sus oído.
Los niños reían, una piedra golpeó la cabeza de uno de ellos - Oigan tontos están celosos por que ella es bonita y ustedes son feos y gordos - gritó un niño la niña dejó de llorar al escuchar bonita hacia su persona
—Oye eso dolió - lloró un niño de cabellos marrones.
-Es el monstruo aléjense, aléjense te acusaremos con la matrona- todos echaron a correr, sin embargo la niña no lo hizo siguió mirando el piso blanco.
-Hace frío, ¿quieres que te ayude? - susurró el niño, una pequeña y regordeta mano apareció en su visión y sin más la tomó mientras alzaba su mirada para chocar con un azul intenso.
Trago mientras apretaba su mano, era el niño monstruo que todo señalaban en el parque, pero Para su sorpresa no se volvió de piedra cuando le miro a los ojos como todos aseguraban, ni tenia largo colmillo en sus sonrisas.
-Mi nombre es Naruto Uzumaki- sonrió amable mientras inclinaba su cabeza a un lado dándole moviendo un poco su cabello amarillo vibrante, la ayudó a levantarse con cuidado - Tu cabello es muy bonito - eso la hizo sonrojar.
-Gracias… Naruto-kun - aquello lo ojos abrir lo ojos.
-¿Cual es tu nombre?- inquirió deseoso-
-Me llamo Sa…
Chillo mientras se levantaba de golpe, su pecho respiraba acelerado.
-¿Pesadillas? - pregunto la chica frente a ella, no respondí se limitó a mirar el cielo aún oscuro.
-¿cuánto tiempo dormí?
-Un buen rato, estoy casi segura que en una hora va amanecer todos los día Kento se despierta a esta hora tomar pecho- un balbuceo le interrumpió, la madre acomodó mejor a su bebé que parecía no estar satisfecho de alguna manera - parece que su estómago tiene su propio reloj.
Esto le hizo sonreír - Es normal para su edad, pronto comenzará espaciar más sus horas de comida aunque comerá mucho más que antes - aseguró desde sus conocimientos.
-¿Desde cuando eres médico? Sabes bastante de bebés.
-No estoy segura, pero soy más un estudiante medica chinobi aunque no sé defenderme mucho.
-¿Que? ¿Siendo un estudiante pudiste curarme así? - Abrió un poco su señaló abriendo el agujero en su kimono, donde se suponía que debería haber una herida pero la piel había cicatrizado perfectamente dejando rastro alguno en el proceso.
-Aunque lo veas así, no debes hacer esfuerzo así que descansa y come bien, si no podrías abrirte la herida otra ves.
Explicó la joven - eres muy buena, dices que no sabes defenderte pero me gustaría saber si puedes cuidar de mi y ayudarme a llegar con mi familia.
-¿Que?
-Te prometo que cuando lleguemos te daré un buen pago de compensación, verás mi familia materna es rica al igual que la de mi esposo.
-¿y donde viven ellos?
-Un poco más al Norte de estas tierras, se llegar pero una mujer… sola viajando es muy peligroso y más preocupante por mi bebe, me gustaría recibir tu ayuda.
Pareció pensarlo un rato, sin embargo esta oportunidad le brindaría lo que más buscaba… información.
-Acepto.
La chica sonrió maravillada - te prometo que serás bien recompensada por mi familia.
-Más te vale - gruño.
Por cierto, nunca me dijiste cómo te llamabas.
-yo tampoco.
-¿Que?
-Dije que yo tampoco sé cómo me llamo, sufrí un accidente me parece que caí de un árbol o tuve una breve pelea no estoy segura pero me recibí un fuerte golpe en la cabeza, solo se que desperté y no sabía quién era desde entonces viajo para conseguir información sobre mi o si hay alguien buscándome- explico secamente mientras se levantaba para colocar más leña en la fogata.
La joven escuchó atentamente el relato- ¿tienes algún recuerdo de tu infancia? ¿Al menos como lucían los paisajes? ¿Qué tanto puedes recordar?
-Cuando me fuerzo a recordar parece disolverse más rápido el recuerdo, pero a veces sueño ciertas cosas, son vagos y difusos pero recuerdo una ladera enorme con rostros de piedras y … también recuerdo que era una aldea enorme o eso… me parece.
-¿Rostro de piedra en una ladera? Vaya… Eso es muy característico, pero no recuerdo escuchar de un lugar así.
-¿Cual es la aldea más grande de tierra del fuego?
-Hay clanes establecido recintos a lo mucho, pero si hay pueblos pequeños pero recuerdo que el pueblo más grande es Tanzaku, quizás eres de allí pero nunca había visto tu color de cabello es muy diferente.
-Quizás mi padre o madre tenía el mismo color de cabello - susurró - puede que me ayude a conseguir repuestas más rápido ¿Cómo te llamas?
-Soy Naomi Hambada, mis padres son comerciantes importantes de la tierra del fuego, se establecieron en Yashamita a dos horas de Tanzaku.
-Dijiste que estabas casada ¿no es mejor ir a la protección de la familia de tu esposo?
Naomi cambió su expresión a una más lamentable - La mansión principal esta más hacia el sur, tendríamos que cruzar no solo este pueblo si no dos más, teniendo en cuenta de que ellos no son neutrales y los Senju no son particularmente partidarios de los Sarutobi, sin embargo tendríamos que cruzar obligatoriamente su territorio antes de llegar con mi familia filiar.
-¿Por que estabas en esta aldea durante el ataque?
-Este pueblo desde hace mucho tiempo tiene tratados con los Sarutobi por protección, Yatonku está muy estratégicamente ubicado para hacer comercio verás es la primera aldea que limita entre Tanzaku y tierras privadas como Senju, Uchiha, Hyuga, Sarutobi e incluso el clan Shimura, son poco clanes pero sin duda prefieren evitar ir hasta Tanzaku si Yatonku posee lo que buscan, Yakontu a sido siempre territorio libre y neutro por que siempre a querido sacarle provecho a la diferencia de rivalidades de clanes al tratar de vender lo que no producen estas tierras, esto gracias a que han sido políticamente muy bueno estrategas pero lo sobresaliente es que no son chinobi, lograron un favor a los Sarutobi hace mucho tiempo lo cual lo pone en deuda y funge como protectores junto a una suave alianza con los Hyuga esto cambió para mejor al casarme con Sakuto-sama el primer hijo Sarutobi, alianza que favoreció Yatonku quienes son uno de los principales compradores de Hambada tanto de Frijoles, frutas importadas, medicina y tejidos, aprovechando su alianza con Sarutobi obtuvieron mayor alcance de variedad de productos a la hora de comprar, en menos de un año el pueblo cambió por completo, hubo mayor posibilidades de empleo, se construyó una escuela y habían cerca de 30 tiendas mayorista de telas, calzados, pieles, mobiliarios, frutas importadas y un par de restaurantes, junto a una posada, esto generó un poco de ruido para alguien que perdió algunos… Clientes fijos - Explicó con paciencia .
-Tanzaku - susurró la joven kunoichi.
-Empezaron con bandidos y algunos ataques pequeños, cosa que a mi esposo no le gustó y comenzó a poner ciertos hombres alrededor para protección civil.
Los Sarutobi son el único clan que posee una alianza con civiles, pero estas inseguridades extrañas incomodaron a los clanes como Hyuga y Senju que prefiriendo volver a comprar en Tanzaku- murmuro - sin embargo, no fue suficiente y - los ojos de Naomi se llenaron de agua - se suponía que solo visitaríamos para que yo comprara el jaguar de novia para mi hermana política, le rogué a mi esposo para que me llevara solo un día - sus lágrimas corrieron rápidamente - el no quería y por mi culpa él está muerto - está vez dejo salir su llanto.
Entendiendo su angustia apretó los labios - No es así, tal vez está bien y buscándote el sabe que no es tu culpa- Naomi negó entre lágrimas - Vi cómo le apuñalaron en su espalda- el bebé se inquietó entre sus brazos.
-Pero de algo estoy muy segura, no eran bandidos por la forma de pelear y sus maneras eran de Chinobi pero no se cual clan y es por ello que prefiero ir con mi familia, ya e cometí suficientes errores.
-Quizás Tanzaku contrato chinobis - susurró la joven médico, Naomi asintió resoplando - Si.
Ambas estuvieron en silencio tranquilo y cómodo mientras vieron el suaves azul comenzar a pintar el cielo.
-Deberías buscar un nombre.
-Ponme el que prefieras - miro entretenida el amanecer, Naomi no pudo negar la belleza etérea de la joven, su piel mostraba un palidez propia, y sus ojos eran muy poco comunes.
-Yo ¿Cómo podría?- susurró la joven apenada de ponerle un nombre a su salvadora - usted debe saber que eso lo hace su familia y-
-estuve sola mucho tiempo, así que no lo necesité usar un nombre por que no había Nadie que necesitara llamarme - se giró sonriendo amable, mientras su rosado cabello ondeaba en el viento - Estoy muy feliz que Naomi-sama me regale un nombre.
Naomi perdió el aliento de lo suave y feliz que fue ese instante y por ello le sonrió de vuelta - Para mi será un honor.
