She-Ra y Las Princesas del poder no me pertenecen.
Capítulo 13
La primera canción termino el publico gritaba extasiado, todo había salido mucho mejor de lo que la banda había pensado. Catra hablo al publico mientras se limpiaba el sudor de la frente.
-uffff eso fue intenso, que bueno que los helicópteros los refrescaron, desde el escenario parecía que soy Nerón viendo a Roma arder.
El publico respondió con vitoreo a la banda. Catra empezó a hablar a sus compañeros mientras el público estaba expectante.
-de acuerdo chicos ya saben como sigue esto. Lonnie te toca tomar el toro por los cuernos. ¿Lista?
Lonnie levanto su pulgar en señal de aprobación y se dirigió al frente del público, pero algo estaba pasando, algo que solamente Lonnie podía ver…bueno eso les diría si Lonnie pudiera ver, pero debido al speedball ahora estaba sufriendo los efectos de la droga, solamente que ella estaba muy acostumbrada por lo que podía disimularlo casi bien pero ahora estaba llegando a un límite. Ella miraba al público, pero su visión era borrosa, a duras penas distinguía los bordes, empezó a reír mientras empezó a hablarle al público.
-vaya, no puedo ver una mierda…pero eso no importa, ustedes nos tienen que ver…y para asegurarme de que no se decepcionen…
Tomo de su bolsillo una pequeña tira de LSD y la llevo a la boca, no dejo que se disolviera, directamente la mastico como si fuera un chocolate. En ese momento, aquel limite que les mencione finalmente fue cruzado, algo malo iba a ocurrir, pero en ese momento todo lo que importaba era la música.
Lonnie dijo unas últimas palabras el micrófono antes de comenzar, su mirada ahora era desquiciada, su cuerpo comenzó a moverse como si no pudiera contener la energía desbordante que la recorría.
-tuvimos un empate pero ahora…¡Este es el segundo round, niña rica!
Dijo con una sonrisa oscura, mientras un aura que nadie podía percibir empezaba a rodearla.
-Vamos a ver si puedes aguantar esto.
La banda comenzó a tocar "Sir Psycho Sexy" de los Red Hot Chili Peppers, un tema cargado de sensualidad, caos y energía. Desde el primer acorde, Lonnie parecía entrar en una especie de trance, moviéndose con una mezcla de fuerza y deseo, su cuerpo contorsionándose al ritmo del bajo que ella misma tocaba.
A long, long, long, long time ago
Before the wind, before the snow
Lived a man, lived a man I know
Lived a freak of nature named Sir Psycho
El efecto de las drogas en su sistema era evidente: Lonnie no solo cantaba, tocaba y se movía, sino que lo hacía como si su cuerpo estuviera siendo invadido por una fuerza incontrolable. Sus ojos estaban vidriosos, su visión borrosa, pero la música la poseía. Cada vez que rasgaba las cuerdas del bajo, su cuerpo respondía de una manera que parecía casi sexual, como si estuviera entrando en un éxtasis extremo.
Psycho, sexy, that is me Sometimes I find I need to scream...
Lonnie dio un potente grito, parecía un demonio sexual, la potencia era tal que podría haber destruido su micrófono, por suerte el micrófono resistió y ella podía continuar con su "performance". La canción avanzaba, y Lonnie gritaba las letras con un placer casi perverso, sus movimientos hacían que pareciera que estuviera dándose autoplacer en el escenario. Pero detrás de esa energía estaba el demonio de sus vicios, las drogas hacían estragos en su cuerpo, pero la mantenían en pie, funcionando a un ritmo frenético. Glimmer miraba desde el tejado de su casa y con ayuda de unos binoculares, sintiendo una mezcla de incomodidad y rabia, como si estuviera siendo desafiada en un terreno completamente nuevo, uno donde Lonnie era la reina del caos y la autodestrucción.
Deep inside the garden of Eden
Standing there with my hard on bleedin'
There's a devil in my dick and some demons in my semen
Good God, no, that would be treason
Las palabras de la canción, cargadas de lujuria y violencia, resonaban con más fuerza por la forma en que Lonnie las entregaba. Era como si estuviera enfrentándose no solo a Glimmer, sino a todos los que alguna vez dudaron de ella, toda la sociedad que la veía como una chica problemática de un barrio olvidado por Dios. Pero en ese momento, Lonnie estaba en control, o al menos lo parecía.
Lonnie se retorcía y balanceaba al ritmo de la música, como una serpiente en plena posesión demoníaca. El sudor corría por su cuerpo, y aunque su visión estaba más borrosa que nunca, su instinto musical no fallaba. Tocaba el bajo con una precisión mecánica, automática, como si sus manos supieran exactamente qué hacer, aunque su mente estuviera perdida en un laberinto de alucinaciones.
Cada acorde, cada nota, parecía empujarla más hacia el abismo, pero en ese abismo, Lonnie encontraba placer. Catra la miraba de reojo, con una mezcla de preocupación y asombro, pero no era el momento para intervenir. Lonnie estaba canalizando toda su energía autodestructiva en esa actuación, y el público, aunque confuso por momentos, no podía apartar la vista de ella.
El público se movía con la música, gritando y saltando, mientras Lonnie continuaba con su show casi orgásmico. Pero Glimmer y Lonnie sabían que algo iba muy mal, más allá de la provocación y los juegos de poder. Lonnie no solo estaba desafiándola; se estaba empujando al límite, forzando su cuerpo y mente a una zona peligrosa.
He's a freak of nature
But we love him so
He's a freak of nature
But we let him go
El bajo de Lonnie rugía como si fuera una extensión de sus emociones más oscuras, y mientras la canción llegaba a su clímax, Lonnie gritaba con una mezcla de dolor y placer, moviéndose como si su cuerpo estuviera siendo consumido por el fuego de su propia destrucción.
La banda seguía tocando a su alrededor, pero Lonnie estaba en su propio mundo. Cada acorde, cada línea, la llevaba más profundamente en su trance autodestructivo. Su visión era borrosa, apenas podía distinguir los contornos de las cosas, pero el público estaba ahí, vitoreándola, sin darse cuenta del infierno que Lonnie llevaba dentro.
Finalmente, la canción llegó a su punto culminante, y Lonnie, con una última descarga de energía, rasgó las cuerdas de su bajo como si estuviera sacando los demonios de su cuerpo. Su respiración era rápida, descontrolada. Todo el escenario parecía vibrar a su alrededor.
Sin embargo, en medio del caos, su mente buscaba a una sola persona.
Con los ojos entrecerrados y su visión distorsionada por el efecto de las drogas, Lonnie intentó enfocar hacia la casa de Glimmer, donde estaba convencida de que ella estaría observando. No podía verla con claridad, pero no necesitaba verla; sabía que estaba ahí. Su boca se torció en una sonrisa maliciosa, pero lo que se dibujó en su rostro fue algo mucho más oscuro. Para cualquiera que la viera, esa sonrisa era casi monstruosa, deformando su rostro como si fuera una criatura salida de una película de terror. Su sonrisa de satisfacción no solo era perturbadora, sino que llevaba un mensaje claro, uno que Lonnie estaba segura que Glimmer entendería.
-Supera eso, niña rica
Murmuró para sí misma.
Su mirada, aunque vacía por el estado en que estaba, lo decía todo. Era un desafío silencioso, una declaración de guerra personal.
Pero Lonnie no había terminado. Mientras respiraba pesadamente, con el bajo aún colgando de su cuerpo sudoroso, miró hacia el público. Otra vez, su visión no era clara, pero el sonido de los aplausos y los vítores llenaba el aire, y ese ruido comenzó a inflar su ego más de lo que ya estaba.
¿Les gustó?
Pensó Lonnie, sonriendo mientras las luces del escenario la cegaban por momentos. No podía ver los rostros, solo sombras y siluetas, pero eso no importaba. Sabía que estaban ahí, gritando su nombre, alabando su actuación.
Un pensamiento oscuro cruzó su mente. Lonnie sentía que podía hacer cualquier cosa en ese momento. Por un momento, cerró los ojos y dejó que las sensaciones la recorrieran. El bajo colgaba de su cuerpo, pero lo que estaba sintiendo iba mucho más allá de la música. Su ego se había inflado tanto que Lonnie se sentía como si pudiera devorar el mundo.
Los aplausos continuaban, y aunque su cuerpo estaba exhausto, su mente aún bullía con ideas destructivas.
Soy indestructible
Pensó, con la misma sonrisa deformada.
Lonnie sabía que no había ganado del todo, pero en ese momento, se sentía invencible. Glimmer no podía igualarla, al menos no en ese terreno, y ese pensamiento era suficiente para que su ego siguiera alimentándose, incluso mientras su cuerpo ya mostraba los primeros signos de agotamiento y autodestrucción. En ese momento se dio cuenta de algo, algo ocurría en sus pantalones.
Siento…¿humedad en mis pantalones? ¿me orine encima? O acaso…..jejeje creo que yo disfrute mas mi show que la gente…..soy un caso perdido y ¿saben qué? Me encanta.
Recordó su vida antes de todo esto. Recordó cuando su padre aún vivía con ella y su madre. Aunque eran pobres, había momentos de unión en su familia. Podía ver claramente la figura de su padre, con su vieja guitarra, enseñándole a tocar los primeros acordes. Era una época sencilla, pero llena de pequeñas esperanzas.
Pero luego, él se fue. Abandonó a su madre, y con él, la poca estabilidad que les quedaba. Lonnie vio cómo su madre se hundía en una depresión profunda, una sombra de la mujer que solía ser. Su madre dejó de vivir, apenas se movía entre el trabajo y la cama, sin prestar atención a su hija, actuando como si Lonnie no existiera. Para Lonnie, el mundo se volvió un lugar vacío.
Luego, recordó el primer momento en que sintió algo diferente, algo que le hizo sentirse viva de nuevo: el sexo. Su primer novio, el primer contacto íntimo, y cómo esos estímulos encendieron una chispa en su interior que no había sentido en mucho tiempo. Pero esa chispa no duró, y el vacío regresó. Las drogas fueron lo siguiente. Recordó la primera vez que las probó, y cómo ese subidón la hizo sentirse más viva que nunca, más incluso que el sexo. Era un estímulo más intenso, más duradero, algo que la hacía olvidar todo... por un rato. Entre los aplausos que recibía la banda algo extraño ocurrió, por los parlantes empezó a sonar una canción, pero no era una canción cualquiera, era "Closer" de "Nine Inch Nails", era la favorita de Lonnie.
You let me violate you
You let me desecrate you
You let me penetrate you
You let me complicate you
Lonnie seguía mirando al público, bueno solo podía ver un montón de manchas y contornos borrosos, pero ahí estaban y no paraban de aplaudirla era como si ella no estuviera en el escenario, era como si estuviera en su trono y la audiencia eran sus súbditos cumpliendo sus caprichos.
Si, asi, no se detengan.
Lentamente los pensamientos de Lonnie comenzaron a escalar junto con el avance de la canción.
¡Soy la reina del mundo y ustedes me adoran!
¡Debería lanzarme al publico y dejar que me alaben, que sientan el honor de tocar mi cuerpo!
I broke apart my insides
(Help me) I've got no soul to sell
(Help me) the only thing that works for me
Help me get away from myself
¡NO! ¡DEBERIA LANZARME AL PUBLICO, PERO DESNUDA, QUE PASEN SUS MANOS, ¡SUS LENGUAS!
¡Debería dejar que me golpeen, que hagan lo que quieran conmigo!
Lentamente sus psicópatas pensamientos se estaban convirtiendo en una posibilidad
¿qué me detiene? ¡Estoy a pocos metros, con un buen salto caería encima de mi sequito!
Y también….debería gritar como un animal, ya no debería hablar solo emitir ruidos guturales!
La adrenalina recorría su cuerpo, era demasiada estimulación, sentía que si no hacia algo pronto iba a estallar por dentro. No solo ella estaba fuera de sus cabales, la audiencia también estaba enloquecida, si ella llegase a lanzarse sobre el público el resultado serio incierto.
¡Debería después de eso correr en 4 patas como un animal por toda la granja!
I wanna fuck you like an animal
Nadie se había dado cuenta, pero ninguna canción estaba sonando por los parlantes, solo ocurría en la cabeza de Lonnie, las drogas llegaron a un punto tal que estaba sufriendo alucinaciones auditivas, pero al mismo tiempo había algo más, el demonio de las vicios aquel ser que se presento frente a Lonnie la primera vez que ella había probado las drogas, el era algo así como el diablo, cuyo objetivo era destruir el espíritu de las personas, el la acompaño desde que ella era adolescente, el era muy inteligente sabia que la paciencia era útil, debía estar cerca de Lonnie y esperar a que ella bajara la guardia por completo y este festival era la oportunidad perfecta, pero y esto hay que aclararlo…el nunca forzó a Lonnie a nada, solo la persuadía, la decisión final siempre fue de ella, en otras palabras el demonio de los vicios no era responsable por los actos de Lonnie, si, tal vez él le dio un pequeño empujón, pero ella tenía permitido resistirse si quisiera él se presentaba ante ella en forma de la canción "closer", pero no manejaba a Lonnie como una marioneta…todavía no. El problema era que, en su estado actual, ella era capaz de cualquier cosa y en este momento estaba por quedar claro.
A la mierda el festival, a la mierda la banda, a la mierda todo, solo quiero divertirme, solo quiero los estímulos…¡NO! ¡NECESITO ESOS ESTIMULOS!
Lonnie flexiono las rodillas buscando tomar el impulso necesario para saltar hacia la audiencia.
¡AQUÍ VOY!