¡Saludos, queridos lectores!

Sí, al fin toca de nuevo actualización a esta historia, la cual espero que siga siendo de su agrado n.n

Como voy un poco atrasada con las actualizaciones, no haré muy larga ni la introducción ni la despedida para que me de tiempo de ponerme al corriente el día de hoy. Sólo quiero dejar dicho que mi trabajo sigue siendo muy caótico, por lo que no sé si pueda subir en tiempo, sin embargo, esta es la última semana del mes, así que en caso de que no pueda conseguir subir en los días que son, estaré subiendo todo el fin de semana n.n

Sin más, los dejo con la actualización de la historia aunque esté en destiempo, pero que la historia completa entra en el tema del día, pues es uno que se repitió en la actividad del Día rojo/Día blanco n.n

Día 24: Primera vez SasuKarin Month Junio 2023

Lo que restó del fin de semana, Sasuke no tuvo noticias de Karin más allá de un mensaje que envió poco después de que él llegara a su casa, pero el mensaje no decía mucho sobre cómo estaba ella, pues en este, sólo le repetía su agradecimiento por estar ahí para ella y disculparse por haberle pedido que se fuera a pesar de él haber sido tan amable.

A ese mensaje, Sasuke respondió repitiendo que podía llamarlo si lo necesitaba y que entendía su petición y aunque ella lo vio, no dijo más nada.

Por supuesto, todo esto lo dejó muy inquieto, lo que era muy evidente para Itachi. Sin embargo, aunque este intentó de nueva cuenta preguntarle por lo que tenía, no importó cuánto le insistiera, esta vez, Sasuke no respondió. Además, en esta ocasión él se abstuvo de beber, lo que impidió que el alcohol le ayudara a desenvolverse un poco.

Sí, el azabache se había dado cuenta que podía contar con su hermano para guiarlo en ese camino tan desconocido para él, de hecho, por eso ya se había animado a decir un par de cosas sin estar bajo los efectos del alcohol, pero en esta ocasión, quiso reservarse las cosas, pues necesitaba reorganizar sus ideas antes de poder expresarlas, pero al llegar el lunes, por un momento se arrepintió, porque temió que Karin hubiese decidido renunciar. Por fortuna, no fue así.

O quizá no fue tan afortunado, porque el resto de la semana, Sasuke asistió al trabajo temiendo que ella presentara la carta de renuncia y no se atrevía a preguntarle porque si aún no tenía una respuesta para ella, preguntarle sería presionarla y era algo que ni siquiera Neji debía hacer.

Al llegar el viernes, él ya había hablado con Itachi, pero él no pudo darle ningún consejo más allá de lo que ya sabía: debía ser paciente y dejarla ir si eso la hacía feliz. Por supuesto, también le dio un largo y fastidioso discurso sobre no perder esperanzas en el amor aun si no siempre sale bien, el discurso de volverse a subir al caballo, que siempre habrá nuevas personas por conocer y bla bla bla… Nada que quisiera escuchar y tampoco le gustó oír sus consejos sobre cómo ir dejando la tristeza atrás, porque no era tan diferente de lo que ya hacía.

—¿Sasuke? —Karin asomó la cabeza por su oficina.

—Pasa.

Él estaba revisando algunos contratos cuando ella apareció y aunque en otro tiempo se ponía contento de verla aún si sólo hablaban de trabajo, ahora se ponía nervioso de pensar que ella renunciaría. Sin embargo, siempre procuraba actuar con normalidad.

—¿Puedo pedirte un favor?

Uchiha levantó la vista preocupado, no sólo porque era inusual que ella pidiera favores, sino por el tono tímido en que lo solicitó. No era propio de ella.

—¿De qué se trata?

—Quisiera poder salir temprano hoy —pidió sin mirarlo, pero enseguida levantó la vista y se apresuró a decir— Sólo una hora y prometo reponerla el lunes.

—Verás a Neji. ¿Verdad?

—Habría querido hablar con él desde el miércoles, pero hemos tenido mucho trabajo, así que lo postergué —respondió bajando la mirada de nuevo— Dicho esto, sé que suena innecesario salir más temprano cuando mañana es sábado, pero…

—Si aún necesitas tiempo para pensarlo, deberías decírselo —sugirió Sasuke tratando de no mostrarse agitado.

No, esta vez él no se había esforzado en llenarlos de trabajo para evitar el encuentro. De hecho, tenía el corazón en un hilo pensando que en cualquier momento ella renunciaría, así que habría preferido que dicha charla se diera lo antes posible, aún si a veces prefería que se retrasara para poder estar un día más cerca de ella, pero realmente habían tenido mucho trabajo y podía notar que ella había postergado la charla porque parecía indecisa y seguramente el salir temprano, era una forma de encubrir que no había sido su culpa que la charla no se diera antes.

—También lo pensé, pero… creo que sea lo que sea que él tenga que decirme sobre la discusión, debería ser suficiente para tomar una postura —respondió la pelirroja— De lo único que estoy segura es que no voy a poder estar junto a alguien que no confía en mi palabra, así que de ahí partiré para tomar mi decisión.

—¿Vas a estar bien?

—Sí, no es nada por lo que no haya pasado antes —respondió Karin— Digo, me refiero a tener una charla tensa con un novio o ex, no sobre tener la plática que tendré —soltó un suspiro para luego recuperar su compostura— Entonces, ¿me darías el permiso de salir temprano?

Él asintió en silencio y cuando notó que ella iba a decir algo, se le adelantó a hablar.

—Llámame si necesitas algo. Incluso si es sólo compañía para beber. Sabes lo peligroso que es que te emborraches sola.

—Gracias —respondió ella con una tímida sonrisa y se fue.

Sasuke la vio perderse por la puerta y estuvo muy al pendiente de ella hasta que se fue de la oficina, pues estaba tenso con respecto a ese encuentro.

¿Ella podría arreglar las cosas con Neji? ¿Terminaría la relación definitivamente? ¿Por qué se sentía tan inquieto con pensar en ello?

Bien, la respuesta a esa última pregunta era muy obvia, porque aunque él le deseaba todo lo mejor a ella, no podía negar que en el fondo, Sasuke quería que ellos dos terminaran. Si lo hacían, después de un tiempo, cuando él pudiera deshacerse de Sakura y ella se recuperara de su ruptura, podría tratar de hacer las cosas bien con ella. Sin embargo, al pensar esto último se sentía muy egoísta, porque para que eso pasara, ella tendría que sufrir más de lo que ya lo hacía.

—¿Sasuke-kun? —Sakura había llamado a la puerta de la oficina y al no recibir respuesta, abrió y se asomó tímidamente. Hasta ese momento, fue que el azabache reaccionó.

—¿Qué haces aquí? —preguntó el azabache que no se había dado cuenta que ya había pasado una hora desde que Karin se había ido.

—Pues… se supone que tendríamos una cita.

—Dejémoslo para otro momento. No estoy de ánimo —respondió Sasuke, quién en realidad, quería estar libre para ir a buscar a Karin si ella lo llamaba.

—¿Qué tienes? —preguntó Sakura preocupada— ¿Te sientes mal?

—Sólo no estoy de humor para fingir una cita —decidió seguir con el trabajo, aún cuando no había mucho por hacer si el resto de los empleados ya se estaba yendo.

—No tienes que fingir, Sasuke-kun. Simplemente podemos salir a cenar —respondió Sakura dolida, pues si bien sabía que todo aquello era una farsa, no se imaginaba que él estuviera fingiendo algo en sus salidas cuando en realidad, él no hacía nada dulce o romántico.

—Estoy esperando un mensaje.

—¿De quién? ¿Para qué? —preguntó confundida.

—Estaré trabajando mientras espero. Será mejor que te vayas y reprogramaremos esto en otra ocasión —respondió evitando las preguntas que ella le había hecho.

—Pero… Sasuke-kun…

—Quiero terminar con la farsa lo antes posible e imagino que tú también, así que hablaré con mi asesor para ver si se puede hacer algo que apresure las cosas. No quiero seguir quitándote el tiempo.

—No me quitas el tiempo. Para mí, esta es una oportunidad para tratar de enamorarte y…

—¡Sakura! —la interrumpió. La chica quedó perpleja— Ya tengo a alguien.

—¿Qué…?

—Deja de perder el tiempo conmigo —pidió serio y los ojos de la chica comenzaron a cristalizarse.

—¿Y quién es?

—Estoy ocupado, por favor, vete. En cuanto tenga noticias de mi asesor, te llamaré.

Sakura quiso insistir en saber, preguntar si realmente no tendría oportunidad o si había algo que pudiera hacer, pero él ni siquiera la volteaba a ver y le pedía que se fuera como si la conversación que tenía no fuera nada. Esto la afectó tanto que sólo pudo irse así sin más.

Por su parte, Sasuke estaba inquieto y preocupado de no tener noticias de Karin. Es decir, eso quería decir que quizá las cosas iban bien con Neji o quizá, por el contrario, iban muy mal.

En cuanto Sakura se fue, consideró en llamarla, pero si lo hacía en un mal momento, sólo iba perjudicarla.

No fue sino hasta cuarenta minutos después de que Haruno se fuera, que Sasuke al fin recibió noticias de Karin. Ella le había mandado un mensaje.

"Todo está bien. Iré a casa. Gracias por todo."

Definitivamente eso no decía mucho sobre lo que ocurrió en la charla. Que todo estuviera bien, podría significar que regresaron o que terminaron en buenos términos y por supuesto, él quería saberlo. Incluso, consideró preguntarle directamente, pero podría ser insensible hacerlo si las cosas no salieron bien.

—Si fue a casa, quizá se separaron —comentó Itachi, pues había visto el mensaje cuando Sasuke se quedó sentado en la sala mirando la pantalla, pues después de recibirlo, él se había ido a casa.

—O se fueron juntos —dijo Sasuke con los dientes apretados.

—No pienses demasiado en eso. Aún si tienes razón. ¿Qué puedes hacer al respecto? Porque ir y hacer una escena, aunque es una opción, no te hará ganar nada.

—¿Crees acaso que pienso en eso por elección? —gruñó el menor— Y no quiero hacerle una escena. Es innecesario.

—Vas a estar bien —dijo Itachi dándole unas palmadas en el hombro.

El fin de semana, Sasuke no pudo sacarse de la mente las múltiples preguntas sobre el resultado de aquella plática, y lo único que lograba tenerlo con cierta calma, era recordar que ella le había dicho que estaba bien. La verdad, es que eso tendría que ser suficiente, pero a veces le asaltaba la duda de si en realidad ella estaba bien.

¿Y si sólo le dijo que estaba bien para no preocuparlo? Eso era lo que verdaderamente le carcomía la mente, al punto, de que no estaba seguro cómo había logrado evitar ir a buscarla a averiguarlo.

¿Por qué no la buscó? Había muchas razones, empezando porque ella sabía que si lo necesitaba, podía llamarlo y él iría, así que de cierta forma era innecesario, por otro lado, ella podría haber regresado con Neji, e ir a verla podría interrumpir su reconciliación, y aunque le hirviera la sangre con la idea, no significaba que fuera la mejor acción a seguir.

Otro factor para no buscarla, era que sin importar si había regresado con él o no, quizá ella necesitaba tiempo para estar sola. Seguramente tenía muchas cosas qué pensar, pues si habían terminado definitivamente, ella iba a necesitar tiempo para sanar, pero si habían regresado, quizá parte del acuerdo, era que ella renunciara.

¿Y si el lunes ella presentaba su carta de renuncia?

Sasuke llegó a creer que ya había pasado ese miedo, pero ahora iba a tener que lidiar con él hasta que tuviera la oportunidad de preguntarle a ella, pues al ser algo relacionado con el trabajo, no estaría mal preguntarle. ¿Verdad?

El lunes, en cuanto ella llegara al edificio, le pediría hablar.

—¿Has sabido algo de Karin? —preguntó Itachi poco después de entrar a la oficina de Sasuke.

—Ya no debe tardar en llegar —respondió mirando el reloj. Apenas eran cinco minutos más de la hora en que se suponía que ella debía llegar, aunque para Sasuke, el tiempo se sentía como cien veces más.

—No me refería a su llegada al trabajo. Hoy no vendrá. Me refería a…

—¿Cómo que hoy no vendrá? —preguntó el menor exaltado y enseguida abrió su bandeja de entrada— ¿Mandó algún correo de renuncia?

—No, no ha renunciado. Sólo solicitó el día por enfermedad y claro que podría ser que sólo necesite un tiempo para ella, pero recursos humanos no sabe del drama, así que lo registró como tal —respondió Itachi— Pensé que ella te habría dicho algo, por eso vine a preguntarte si ya habías hablado con ella y saber qué te dijo y… admito que también para saber si no la habías cagado.

—No he sabido nada de ella desde ese mensaje —respondió enojado, pero ya estaba sacando algunas conclusiones que lo hicieron hundirse en su silla.

—Crees que pasaron el fin de semana juntos reconciliándose —Itachi aseguró al ver el gesto tan duro de su hermano.

—Ni siquiera lo menciones —dijo apretando la mandíbula, pues aunque ella le había dicho que no habían intimado, no podía descartar que en algún momento eso fuera a cambiar.

—Pensé que al menos habrías superado eso.

—Si se reconciliaron, ella va a renunciar.

—Entiendo que es lo que más te duele, pero tú mismo se lo dijiste: trabajar en otro lado puede beneficiarle más que si se queda.

—No voy a impedir ni interferir en su renuncia, pero si después de que se vaya ya no la veo…

—Seguirás viéndola. Por lo menos mientras sigas con la farsa de Sakura, ya que los amigos en común los reunirán —Itachi le recordó— Además, si va a trabajar para Hyuuga Corp. en un puesto similar, podrás verla en el trabajo de vez en cuando.

—No será lo mismo.

—Pero te ayudará a dejarla ir poco a poco —respondió el mayor y después de unos segundos de silencio, su hermano volvió a hablar.

—¿En serio hay un fin para lo que siento ahora?

—No eres la primera ni la última persona en tener el corazón roto y aún así, la gente se recupera y encuentra nuevos amores.

—No quiero volverme a enamorar —gruñó descontento.

—Tampoco querías enamorarte de ella, pero pasó, y seguramente volverá a pasar cuando aparezca la persona adecuada. No es algo que…

—No puedo enamorarme si no conozco a nadie más.

—¿Quieres quedarte encerrado en el trabajo para evitar conocer a alguien nuevo?

—Es más fácil lidiar con el trabajo.

Itachi quería darle ánimos, decirle que esa no era una solución y que el amor era hermoso, que sólo se había encontrado en una mala situación por la forma en que manejó las cosas al no identificar sus sentimientos, pero por su rostro, sabía que no era el momento de decirle nada.

—Ya hablaremos en otro momento. Por ahora…

El celular de Sasuke sonó. Era Sakura. No iba a contestar, pero como no quería seguir hablando con su hermano, decidió tomar la llamada. Su plan funcionó porque Itachi se marchó.

—Hola, Sasuke-kun —ella esperó un saludo por respuesta.

—¿Qué ocurre? —preguntó Sasuke cuando ella no dijo nada.

—Quería saber si ya has hablado con tu asesor —preguntó con la voz temblorosa.

—No.

Se pudo escuchar un gran suspiro de alivio de parte de Haruno.

—Me gustaría hablar contigo para llegar nosotros a un acuerdo sobre nuestra relación. Pienso que sería mejor que nadie más interfiriera.

—Ya no estamos en una relación.

—Yo… lo sé, pero… —Sakura sonaba algo nerviosa, pero cuando él quiso terminar la llamada, ella se apresuró a hablar— Estuve pensando que yo acepté hacer la farsa porque creí que obtendría otra oportunidad contigo, pero si no es así, no vale la pena seguir —tomó aire antes de seguir, pero de nuevo comenzó a oírse titubeante— No tengo por qué seguir.

—¿Qué es lo que quieres? —preguntó serio.

—Quisiera que aceptaras darme otra oportunidad de enamorarte. Si lo haces, me quedaré contigo el tiempo que tu asesor nos dijo. Ese será mi límite —respondió Sakura que a veces tenía momentos de seguridad y otras titubeaba— Si no… entonces quiero terminar esta farsa aquí. Tu mismo lo dijiste, sólo estoy perdiendo el tiempo y yo no gano nada ayudándote a seguir con la farsa.

—Sakura…

—Ya sé que dijiste que hay alguien, pero no están saliendo, ¿verdad? —Sasuke no pudo responder— A menos que quieras acercarte a ella estando en esta farsa, no tienes nada qué perder con mi propuesta —señaló apresuradamente— Lo único que pido es que pongas de tu parte para considerarme.

—No…

—Por favor, Sasuke-kun. Sólo es una oportunidad más la que te pido y no tienes que hacer mucho más de lo que ya harás para mantener la farsa hasta que tengamos que separarnos —lo interrumpió— El único esfuerzo extra, es que pongas de tu parte. Sé que ya lo intentamos, pero con una oportunidad más, sé que puedo conseguir enamorarte. Ya no actuaré con ingenuidad. Lo prometo.

A Sasuke no le gustó desde el principio la sugerencia del asesor sobre la farsa, pero entendía a la perfección que no había otra manera de solucionarlo y el hecho de que Sakura amenazara con terminar la farsa a menos de dos meses de haberla reanudado, podría volver a meter a la empresa en problemas.

No, no quería seguir con engaños y tampoco estaba en el mejor estado anímico para aceptar las condiciones de Sakura, pero lo único que lo animó a tomar una resolución, fue recordar que su hermano, poco antes había dicho algo muy cierto: si Karin renunciaba, podría seguirla viendo en el trabajo y en salidas de amigos con Sakura.

Él sabía que aceptar la petición sin decirle los motivos, era mentirle, pero si le decía la verdad, causaría muchos problemas, sin mencionar que ella podría retractarse de la propuesta y causar problemas al terminar la farsa en ese mismo instante.

—Cuando acabe el periodo de tiempo, debes olvidarte de mí si las cosas no funcionan.

—Me voy a esforzar mucho para que funcionen —respondió Sakura alegre.

¿Karin terminará renunciando? ¿Sakura logrará conseguir el corazón de Sasuke en el tiempo que tiene para ello? ¿Sasuke logrará olvidarse de Karin o decidirá luchar por ella? ¿Karin realmente se reconciliará con Neji? ¿Qué otras dudas les han nacida al leer el capítulo de hoy?

Me encantará leer sus teorías y preguntas en los comentarios n.n

Espero que la historia siga siendo de su agrado, y si es así, deben saber que varios capítulos de esta semana serán para esta historia aunque ninguno de los vienen coincidirá con los temas del calendario, sin embargo, es parte de mi promesa de treinta días de SasuKarin n.n

Sin mas por el momento, me despido n.n

¡Hasta la próxima actualización!