¡Saludos, queridos lectores!
Ya que había anunciado que no haría actualizaciones el resto del año mas que a finales de cada mes, entiendo que esta actualización podría tomarlos por sorpresa, sin embargo, el motivo de que hoy haya capítulo nuevo de esta historia, es gracias a Lixy-chan, quien fue de las primeras personas que comenzó a seguirme en , quién me invitó a integrarme a un grupo de fans del SasuKarin en facebook, y con quién, si bien no hablamos constantemente, aún hay contacto.
Para celebrar su cumpleaños, le permití elegir alguna de mis historias para actualizar, y ese sería mi regalo de cumpleaños para ella. Como pueden intuir, esta fue la historia elegida, y lo habría subido el día de su cumpleaños, de no ser que fue entre semana, y por ser fin de año, los días han sido más pesados de lo habitual. Sin embargo, hoy con mucho gusto subo nuevo capítulo de historia, la cuál le dedicaré a ella.
Querida Lixy-chan, de verdad espero que hayas tenido un hermoso día cumpliendo un año más, y que sigas teniendo muchos días alegres. Un gran abrazo y mis mejores deseos para que sigas cumpliendo muchos años más. De no ser por tu existencia, dudo que hubiese encontrado más personas en aquel entonces que les gustara el SasuKarin, y quizá, no habría escrito tanto como lo que he hecho hasta ahora.
Linda, espero que disfrutes el capítulo y que la historia siga siendo de tu agrado n.n
Por supuesto, no dejo de lado al resto de mis lectores, porque ustedes siguen siendo parte importante de que constantemente me sienta animada a seguir con cada una de mis historias. Por desgracia, aquellos que dejan comentarios sin una cuenta, no me hes posible responderles directamente, pero sepan que los he leído y les agradezco de todo corazón el tiempo que se dan para leerme y dejarme sus comentarios.
No haré más larga la introducción, así que los dejo con el capítulo de hoy n.n
Cuando Sasuke volvió al hospital con las cosas que Karin le había encargado, se encontró con que Hyuuga ayudaba a la pelirroja a comer, y ya que ella parecía receptiva al gesto, sólo pudo intuir, que habían arreglado el desacuerdo que habían tenido durante la llamada.
—¿No fue a trabajar, señor Uchiha?
—Traje lo que me encargaste —Sasuke ignoró a Hyuuga para dirigirse a la pelirroja.
—Gracias. No olvidaste de atender a nue.. a mi bebé. ¿Verdad?
—Tiene suficiente agua y comida para dos días —respondió Sasuke y notó enseguida que la fémina parecía renuente a hablar, algo extraño, teniendo en cuenta que siempre se aseguraba de que el felino estuviese bien.
—¿Estás bien? —preguntó Hyuuga preocupado, porque además, su mirada se veía apagada.
—Si te duele algo, llamaré…
—No, estoy bien. No me duele nada —Karin detuvo al azabache, pero hizo una pausa antes de decir más— Sasuke, ¿puedo pedirte otro favor? —él asintió— ¿Puedes cuidar de Ónix hasta que regrese a casa?
El azabache echó una mirada discreta a Hyuuga, a quién se le dibujaba una sonrisa.
Sí, era de esperarse que ella al final fuera cuidada por su prometido, después de todo, sería demasiado raro e incómodo que otro hombre cuidara de ella, y aunque era lo más sensato, él no podía evitar sentirse un poco decepcionado.
—Sí, cuidaré de él.
—Gracias. ¿Puedo pedirte un favor más? —ella preguntó y él asintió— ¿Podrías dejarnos a Neji y a mi a solas?
—Quizá sólo debo irme —sugirió el azabache.
—No, por favor. Me gustaría hablar contigo después de hacerlo con Neji —pidió Karin— Aunque entiendo si no tienes tiempo. Podemos hablar después en todo caso.
—Esperaré —respondió Sasuke para salir de la habitación ante la mirada confundida de Hyuuga.
No, Sasuke no tenía la menor idea de lo que Karin hablaría con Hyuuga y mucho menos lo que quería hablar con él, pues si bien podría pensar que se trataba del asunto de quién y dónde la cuidarían, por la mirada que ella tenía cuando le hizo la petición, él pudo darse cuenta que había algo más.
En la sala de espera, Sasuke se mantuvo pensativo sobre aquello que Karin le diría, pero no pudo pensar en nada más que en el asunto de su cuidado. Quizá, ella quería convencer a Hyuuga de dejar que él la cuidara o quizá un trato extraño para que ambos vieran por ella. Sin embargo, la verdad estaba muy lejos de ese tema.
—Ella te espera —Hyuuga le dijo cuando se cruzó con él. Este no parecía nada contento y de hecho, salió del hospital.
Inquieto y presuroso, Sasuke fue a la habitación de Karin, quién parecía querer llorar, pero sin duda lo contenía.
—¿Por qué no tomas asiento? —ella lo invitó.
—¿Qué ocurre? ¿Estás bien? —preguntó Sasuke preocupado acercándose a su cama.
—Hay algo importante que debo decirte, pero de verdad sería mejor si te sientas —ella le pidió casi en súplica y Sasuke sólo se sentó para que ella empezara a hablar— No frunzas el ceño de esa forma, ya siento que me odias y aún no te he dicho nada.
—¿De qué hablas? —preguntó el hombre confundido.
Karin le dedicó una sonrisa triste y tardó unos instantes en hablar.
—¿Cuántos años estuvimos juntos por las noches? ¿Dos años? ¿Dos y medio?
—Tres años —respondió Sasuke tenso y confundido de que planteara el tema en ese momento.
—Sí, cierto. No fuimos muy cuidadosos, especialmente al principio. ¿Verdad?
—¿Qué quieres decir? —preguntó Sasuke muy confundido y aunque algo ya venía a su mente, se sentía incrédulo.
—¿Recuerdas que hace como dos años te fuiste por tres meses a Iwa por negocios? —él asintió— ¿Y recuerdas que al primer mes de que te fuiste te dije que no me había bajado?
—Tu…
—Estuve embarazada de ti una vez —dijo Karin a modo de confesión y sus ojos vidriosos y labios temblorosos no le permitieron seguir hablando.
—¿Qué pasó? —preguntó Sasuke cuando pudo salir de su estado de estupefacción, pues no esperaba una confesión como esa y menos en un momento como ese.
—Nunca hablamos de qué haríamos si de verdad quedaba embarazada alguna vez y cuando lo confirmé… tuve miedo del futuro. Sin embargo, debía decírtelo —ella aún trataba de no llorar— Esa no era una noticia que pudiera darte por teléfono y tampoco podía esperar a que regresaras, así que decidí ir a buscarte a Iwa para informártelo en persona y…
La voz se le quebró y ella comenzó a llorar.
Sasuke aún trataba de asimilar la noticia, pues sí, en esos años en que intimaron, no habían sido del todo cuidadosos sino hasta que él había regresado de Iwa.
No, a él no le pareció extraño, pues desde el principio, Sasuke le había pedido a Karin que le avisara si tenía algún retraso y si este persistía, usarían una prueba de embarazo, pero nunca hablaron de qué pasaría si daba positivo.
Poco antes de irse a Iwa, ellos estuvieron varias noches juntos y después de su partida, ella le habló del retraso. Empero, aunque ella sí le había dicho que la prueba casera había salido positiva, posteriormente Karin le había dicho que en el ginecólogo le habían indicado que había sido un falso positivo que había resultado en una infección que la dejó fuera del trabajo una temporada.
Cuando regresó de su viaje, fue a verla un par de veces, pero ella decía estar bien y después de ello, Karin se volvió muy estricta con la protección porque ella había tenido un grave susto de embarazo que no quería repetir.
No la cuestionó porque él también se había sentido algo inquieto con la noticia de la prueba casera, y tampoco dudó de su palabra porque no había motivo para que ella le mintiera, o eso creyó él en ese momento, y porque sabía desde la escuela que ella quería llegar lejos en su carrera antes de pensar en tener una familia.
—Karin, ¿acaso tú…?
—No, no iba a tomar esa decisión yo sola, primero quería hablar contigo, pero… Estaba en el aeropuerto cuando un ladrón que huía me empujó para abrirse paso y…
Karin lloraba al hablar, pero no pudo seguir diciendo más, aunque no era necesario para que Sasuke entendiera lo que ocurrió.
Uchiha, por su parte, aunque quería abrazarla y consolarla, se abstenía porque no sabía qué decirle y porque temía lastimarla. Sin embargo, le dolía verla llorar de esa forma y no podía quedarse con los brazos cruzados.
Él, que estaba sentado en la cama a su lado, estiró su mano hacia ella y acarició su mejilla limpiando algunas de las lágrimas que caían descontroladamente.
—¿Por qué no me lo dijiste antes? —le preguntó, pero no en un reproche, sino que verdaderamente quería entender por qué hasta ahora ella se lo decía.
—Sólo teníamos sexo, así que sé que era mejor para ambos que no hubiese un bebé de por medio —decía gimoteando— No pensé que te fuera a importar demasiado, especialmente porque ya había perdido al bebé, por eso…
Sasuke veía cómo con cada palabra ella se destrozaba y no pudo aguantarse más a abrazarla. Era difícil ser cuidadoso de no lastimarla cuando quería tomarla con fuerza para que no siguiera desbaratándose.
Ella se aferró a él y lloró un largo rato, y ninguno dijo nada, porque ella sólo necesitaba sacar ese dolor que pensó que ya había drenado por completo, y él porque aún si mucho tiempo después se enteraba de que en algún momento pudo haber sido padre, sentía que estaba de duelo por ese hijo no nato.
¿Habría podido darse cuenta de lo que sentía por Karin por sí mismo si se hubiese enterado de ese hijo en su momento? ¿Ese niño habría sido la diferencia para que ellos dos pudieran estar juntos? ¿Karin le había contado esto a Hyuuga y por eso estaba así de enojado?
No, no creía que Hyuuga fuera capaz de comportarse de esa forma tan mezquina por algo que había pasado un par de años atrás. Estaba seguro que él tendría que saber que Karin había estado con otros hombres y con ello, existía el riesgo de un embarazo no deseado. Entonces, ¿por qué se veía tan enfadado?
Quizá sólo fue su primera reacción porque confirmaba de alguna manera que ellos dos tuvieron algo qué ver en el pasado.
—Hay algo más… —habló Karin cuando se sintió más fuerte y lo miró a los ojos aún con algunas lágrimas.
—¿Hubo otro? —fue la primera pregunta que a Sasuke le vino a la mente, pues con tantos descuidos, no le sorprendería que fuese así. Sin embargo, la mirada de la pelirroja se ensombreció, lo que lo hizo arrepentirse de haber dejado que se le escapara la pregunta, pero al mismo tiempo lo hacía preguntarse qué podría haber.
—Yo… cuando perdí al bebé… me dijeron que me sería muy difícil volverme a embarazar si no es que nunca podría volver a hacerlo —decía con la voz entrecortada— Debía hacerme unos estudios para confirmarlo, pero… la verdad es que he tenido miedo de hacerlo. Tengo miedo que de verdad no pueda elegir tener hijos —ella gimoteaba— Debes pensar que soy una idiota si siempre he dicho que no me agrada la idea de ser madre, pero es que duele que te arrebaten la posibilidad de decirlo.
Karin volvió a llorar y Sasuke siguió abrazándola, porque aunque ella le había explicado cómo se sentía, él la conocía lo suficiente para saber la respuesta antes de que ella se lo explicara. De la misma forma, él podía entender, acertadamente, que la obsesión de la pelirroja por la protección después del incidente, no era únicamente por miedo a quedar embarazada, sino que la falta de un embarazo respondería la pregunta que ella no se había atrevido a indagar.
Por otro lado, Sasuke podía imaginar que quizá el motivo por el que Hyuuga se había ido tan enojado, era porque Karin recién le había informado de ese problema, y ya que la descendencia era importante para las familias viejas, aunado a que ella no le dijo nada cuando se comprometieron, debió enfadar al hombre bastante.
La pregunta que ahora invadía a Sasuke era: ¿por qué Karin no le contó de ese problema a Hyuuga cuando se comprometieron?
Independientemente de lo que exigían las costumbres de las familias viejas, era un dato importante que debía informarse, al punto de que Sasuke estaba seguro que si Hyuuga le hubiese ocultado algo parecido a Karin, ella se habría enfurecido. Entonces, ¿por qué lo mencionó hasta ahora? ¿O es que Karin si le había hablado de su problema y antes de hablar con él, le dijo algo más a Hyuuga?
—Le he dicho a Neji sobre esto antes de hablar contigo y se ha enfadado muchísimo… —confesó ella como si supiera lo que él estaba pensando— Lo entiendo, porque sé que debí decírselo desde que me pidió que nos casáramos, pero… —sus ojos volvieron a llenarse de lágrimas— Lo intenté, pero su familia llegó emocionada pensando que ya le había contestado y… no quería hablar de eso frente a toda su familia —ella suspiró— Y por lo que me dijiste de las costumbres, creo que me habrían echado de inmediato si lo mencionaba.
—¿De verdad fue capaz de dejarte por la posibilidad de no poder tener hijos? —preguntó Sasuke sorprendido, ya que pensaba que Hyuuga sería menos inquisitivo.
—Supongo que hay algo de eso, pero creo que lo que verdaderamente le molestó, fue que se lo dijera después del compromiso y que ese bebé fuera tuyo —respondió la pelirroja limpiándose las lágrimas— No me dijo nada sobre que quizá yo no pueda tener hijos y por cómo se fue, creo que tiene mucho que pensar al respecto. Quizá al final termine conmigo.
—No…
—Si hubiese sabido antes lo importante que era para Neji y su familia que le diera hijos, no habría aceptado casarme con él —ella no lo dejó continuar y de vez en cuando las lágrimas volvían aunque ella intentara controlarlas— Habría sido más fácil rechazarlo y llorar la ruptura que tener que abrir todas estas viejas heridas de nuevo. Ahora debe odiarme.
—Tu lo dijiste, tiene mucho qué pensar, pero si en verdad te ama…
—Sasuke —lo interrumpió llamándolo y aunque sus ojos seguían llenos de lágrimas, ella le sonreía— Gracias.
Sasuke se sintió confundido.
—¿Por qué?
—Por no odiarme a pesar de no haberte dicho la verdad en ese entonces. Pensé que estarías incluso más enfadado que Neji. Por favor, perdóname por no habértelo dicho antes.
¿Cómo iba a odiarla? Pensando en cómo habían dejado las cosas ambiguas, en las nulas señales que él le había dado de apoyo y que ni él mismo indagó más, podía entender que ella no le dijera nada.
El hecho de que ella hubiese ocultado un dolor tan grande, también hablaba de lo mal amigo que había sido, porque si ella le hubiese tenido suficiente confianza, la habría apoyado en esos momentos tan difíciles.
No, no podía odiarla, pero sólo podía seguir reprochándose a sí mismo.
—Perdóname a mi por ser tan indiferente —respondió él— No es algo por lo que debiste pasar tu sola.
—Tu no sabías nada y…
—Debí hacerte sentir confianza para decirme las cosas. No importa si sólo era sexo, antes que todo, somos amigos.
Ella le sonrió y lo soltó.
—Has cambiado mucho.
—Intento apoyarte.
—No te estoy reclamando, de hecho, te estoy elogiando —respondió ella limpiándose las lágrimas— Pienso que Sakura debió influir mucho para ese cambio.
—No digas estupideces.
—Llevo años conociéndote y sólo hasta que saliste con ella es que te has vuelto más atento como amigo —señaló la pelirroja— Aún si no la amas, influyó mucho sobre tí. Ella y sus amigos —ella comenzó a reír— Supongo que al final tus padres tenían razón cuando decían que éramos mala influencia para ti.
Uchiha soltó un gruñido de descontento, no sólo porque ella le diera el crédito a Sakura de algo que, aunque le doliera admitir, tenía más que ver con su hermano señalándole sus sentimientos y aconsejándolo, sino también porque no quería admitir que estaba siendo más abierto con sus sentimientos.
No quiso ahondar en ese tema con ella, al menos no en ese momento porque sentía que podía hablar de sus sentimientos hacia ella y no creía que fuera lo más oportuno, así que optó por cambiar el tema, especialmente porque a su parecer, había algo más importante qué tratar.
—¿Ya te han hablado del alta?
—¿Qué? No, aún no.
—Iré a preguntar al respecto para pedirle a Juugo o Suigetsu que vengan a ayudarme a llevarte a tu departamento —respondió levantándose de la cama— Hoy me quedaré contigo ya que es algo repentino, pero si prefieres que alguien más cuide de ti, entonces…
—Está bien si tú te quedas, pero si no tienes ganas de atenderme, lo entiendo. Sé que no eres del tipo enfermero y tampoco has descansado bien, así que tampoco te presiones.
—Iré a preguntar por tu alta.
A Karin iban a darle el alta muy pronto, pero debido a los abrazos repentinos por la confesión del embarazo mal logrado, la herida se le abrió y tuvieron que coserla de nuevo, lo que le extendió veinticuatro horas más en el hospital.
Sasuke estaba muy enfadado consigo mismo por no haber tenido más cuidado, y en parte porque Karin no le mencionó nada, pues sólo se dió cuenta cuando al volver de preguntar por su alta, vio la ropa y las sábanas manchadas.
Esa noche, Sasuke volvió a quedarse a cuidar de la pelirroja, y por un largo rato no se dijeron mucho, por un lado porque él estaba enojado por el asunto de la herida, y por el otro, porque aunque ya habían desahogado parte del dolor, aún seguía latente la herida de ese niño del que ella le habló.
Cada uno estaba respetando el dolor y pensamientos del otro, pero Sasuke ahora percibía que ella podría sentirse con mayor confianza de apoyarse en él.
—La administración está en su hora de comida, cuando vuelvan, iré a tramitar el alta —Sasuke le informó a la pelirroja mientras regresaba a la habitación.
—¡Perfecto! Ya quiero irme de aquí. La comida es horrible, todo huele a desinfectante y sobre todo, extraño a mi pequeño bebé —comentó Karin verdaderamente feliz con la idea de salir del hospital, pero en cuanto mencionó la palabra "bebé", hubo un silencio entre los dos. Sin embargo, fue la propia fémina la que rompió el silencio— ¿Sabes? Cuando apareciste con Ónix aquella noche y lo vi, fue como si me hubieses traído un pedacito de nuestro bebé.
—No es lo mismo —señaló Sasuke, pero no en el tono duro que usualmente usaba cuando le señalaba que era absurdo que tratara al felino casi como a un humano, sino de una forma apagada.
—Para mi no fue casualidad que lo trajeras aquella vez a mi casa —ella le sonrió con tristeza— Nuestro bebé habría nacido un día de ese mes de noviembre.
¡Ah! Ese era el motivo de ese apego tan grande que ella tenía por Ónix.
Si lo pensaba bien, a él no le molestaba que ella tratara al felino como a un bebé, más bien, detestaba saber que ese gato podía robarle la atención de ella si él se lo proponía.
—¿Hay alguna tumba? —preguntó Sasuke temeroso de afligirla aún más, pero era algo que necesitaba saber.
—Un nicho. Si quieres, te llevaré allí cuando me recupere —Sasuke asintió en silencio— Pero si quieres ir solo, puedo darte la dirección y…
—Te esperaré.
Quedaron en silencio algunos minutos más y tras ver el reloj, Sasuke se levantó de la silla que había estado ocupando en su estadía junto a ella.
—¿Qué ocurre?
—Son cinco para las tres. El personal administrativo no debe tardar en volver —le respondió con suavidad.
—Quizá deberías llamarle a Suigetsu antes, para saber si no se le hizo tarde —señaló Karin con un gesto de enojo, pero al final forzó una sonrisa.
El varón asintió forzando la sonrisa con la que respondió, pues ambos eran conscientes de que intentaban no dejar que la noticia los sumergiera por completo en la tristeza, principalmente para poder actuar acorde al hecho de que Karin estaba herida y no repetir lo del día anterior.
—¿Quieres o necesitas algo? Se lo pediré al llamarle —comentó Sasuke mientras sacaba su celular.
—Sólo que no empiece a joderme —respondió Karin, que si bien lo decía con disgusto, sentía que comenzaba a aparecer cierta normalidad.
Cuando Suigetsu contestó el celular, llamaron a la puerta, y Karin hizo pasar a quien estuviese afuera pensando que se trataba de algún doctor o alguna enfermera. Sin embargo, cuando la puerta se abrió, Neji fue quien entró.
¿Esperaban esta noticia que Karin había ocultado todo ese tiempo? ¿Qué dirá Neji ahora que ha regresado después de meditar la noticia que Karin le ha dado? ¿Aún habrá boda? ¿A dónde terminará yendo Karin a pasar su convalecencia? ¿Karin podrá tener hijos? Si no, ¿Neji romperá el compromiso únicamente por ese hecho? ¿Qué otras preguntas les han nacido al leer el capítulo?
Me encantará leer sus teorías y dudas en los comentarios n.n
Hoy he actualizado esta historia en honor a Lixy-chan, pero sigo trabajando para darles tantas actualizaciones como pueda para el fin de mes y de año n.n
Sin más por el momento, me despido, esperando que Lixy-chan y todos los que siguen la historia, sigan al pendiente de ella n.n
¡Hasta la próxima actualización!
