Prompt: 13 - Helsatober de la página Helsa Amor Verdadero.
Clasificación: T, Romance, Family
Nuevo mañana
Hans se despertó con los primeros rayos del sol, ligeramente molesto porque la apacible noche había llegado a su fin. Quería más horas para permanecer acostado junto a su mujer, disfrutando de la calma e intimidad que tenían en sus aposentos compartidos, antes del inicio de sus actividades en el reino.
—¡Oh, no! —expresó su esposa de repente, liberándose con brusquedad del abrazo que tenían.
Él frunció el ceño y se sentó al tiempo que ella corría a la habitación adyacente cubriéndose la boca.
El sonido de sus arcadas lo hizo maldecir en voz alta y brincar en acción, saltando de la cama hacia el cuarto de baño, donde su compañera de vida devolvía el inexistente contenido de su estómago.
Se arrodilló junto a ella y le sujetó el pelo, apretando los dientes de indignación por lo que ocurría. Sabía exactamente qué era.
No podía estar pasando de nuevo.
Dejó a su esposa continuar hasta que se sintió satisfecha y aceptó sentarse en el suelo junto con ella, hombro con hombro.
—Elsa…
—Estará bien —cortó ella con tono amable, pese al desagrado que acababa de suceder, con los restos en la vasija de cerámica a un metro de ambos.
—¡Se supone que fuimos cuidadosos! —exclamó empuñando una mano.
Elsa rió.
—¿Cuántas veces te corriste dentro? Sabes que no es lo mismo y lo olvidamos cuando hacemos el amor.
Hizo un sonido de disgusto, apartando de su mente las escenas que habían derivado a eso.
—Y no podemos quitarnos las manos de encima.
—¡No podemos tener un trece! —replicó enfadado, sin poder creer que ese fatídico número estaba ahí. —Dios, si no son gemelos otra vez… —añadió con horror.
—Hans, tú no has tenido a ninguno dentro de ti y estás exagerando.
Él cerró los ojos insultándose.
—Lo siento. —Cogió la mano de ella a ciegas. —Elsa… lo hablamos… puede ser peligroso. No quiero que tú… no quiero perderte, mi amor.
Ella le dio un apretón cariñoso.
—No lo harás, mi cuerpo ya se habituó a dar a luz y este bebé será muy bendito.
—El número trece es malo… —aseveró, por propia experiencia.
—No será como tu familia. Yo fui muy afortunada de quedarme con el hijo trece y no he podido ser más feliz.
El amor de su esposa lo colmó de calidez, aunque era muy patético que ella lo consolara si era quien padecería un embarazo más.
—Irá bien. Él crecerá amado por ti y por mí, y por sus doce hermanos mayores, así como todos nuestros hijos se quieren. No me pasará nada.
—Tiene que ser el último, no volveré a estar dentro de ti hasta que se acaben tus visitas mensuales —sentenció sin pensarlo dos veces, abriendo los ojos.
Elsa volvió a reír, menos pálida que momentos atrás.
—Quiero ver que lo intentas —se burló ella. —Pero tengo la intuición que ya no habrá más después de este chiquitín.
Al escuchar su confianza, sonrió. No sabía cómo había conseguido el amor de la mujer que en una ocasión intentara matar, mas estaba contento de que así fuese y le diera una gran familia sin la que no podía vivir.
Tranquilizando sus nervios, alargó una mano a su vientre plano y depositó su palma sobre él con el fervor de veces anteriores.
—Perdóname, te recibiré como a tus hermanos y hermanas mayores —susurró mirando a Elsa de reojo.
Ella colocó su mano encima, transmitiendo la misma ternura.
—Será un bebé muy amado y tendrá cosas buenas en su vida.
NA: ¡Hola!
Hay un par que no sabe diversificar en el sexo ;P
Para su época, ese número no es tan raro, aunque aquí Hansy no es quien presiona a su esposa por tener más, solo no pueden mantenerse quietos.
Besos, Karo.
Lucía: ¡Super! Me encanta que seas la misma, espero que te encuentres muy bien y que disfrutes las publicaciones que pueda hacer por todas partes. Estas las más sencillas que tengo. Respecto al drabble anterior, la verdad a mí me dio mucha risa pensar en un momento así, Hans se merece tener protagonismo y regresar a Arendelle.
Yuecita: A mí me divierte hacer que Hans se salga con la suya a veces, porque no finge ser bueno, sino que manipula las situaciones a su antojo y molesta a los demás, creando situaciones graciosas (ja,ja, aunque siendo yo la parte afectada no estaría contenta). Pobrecita Elsa, si ya tiene cabello casi blanco, más se le pondrá tratando de terminar ese contrato.
Yo siento que Anna nunca va a dejar de actuar como niña, haga lo que haga. Porque si lo hace se vuelve encimosa (MÁS). Y pues, me gusta que te gusten los romanticones, creo que son los más sencillos de escribir XD.
Guest: So happy you loved my idea! I hope you can enjoy others :D