Disclaimer: Spy × Family no me pertenece. Este fanfiction es sin fines de lucro y exclusivamente para la diversión del autor y posibles lectores

Los personajes de Spy × Family no me pertenece son propiedad de Tatsuya Endō


Capitulo 4: Un encuentro inesperado

Se suponía que ese fin de semana iba a visitar a su hermana, para quedarse unos días con ella, pero todo se había arruinado luego que un día antes había sufrido una lesión en su hombro, lesión que había sido producida luego de haber perseguido a un sospechoso de traición a la patria, cayendo desde un segundo piso con la intención de atraparlo, después se dio cuenta que no fue una buena idea haber sido tan imprudente.

Yuri no sabía como le iba explicar a su hermana como se había lesionado, luego que de supone que solo hacía trabajo de oficina, aunque su hermana no hizo mayores preguntas una vez que llegó a la casa, lo había obligado a ir al hospital a regañadientes al ver las condiciones en la que había llegado a su casa ese mismo dia.

- Pero hermana ya te dije que estoy bien - dice Yuri aguantando el dolor en su brazo lo mas posible.

- Yuri tienes una seria lesión en el hombro, apenas puedes mover el brazo - menciona Yor preocupada y alarmada por el estado de salud de su hermano.

- Tu puedes arreglarlo como lo solías hacer de pequeño - asegura el pelinegro intentando convencer a su hermana mayor.

- No creo que sea muy conveniente que lo haga - niega con la cabeza la joven de ojos carmesi sabiendo que podria pasar si ella usara sus manos" con mi fuerza descomunal tal vez le rompa más de lo que ya está"

- Aún así no era necesario que me trajeras al hospital y más en silla de ruedas - discute Yuri aun negándose ser atendido por cualquier tipo de medico.

- En la recepción me dijeron que tenías que entrar con ella - Dice Thorn Princess mirando hacia todos lados buscando alguien que pudiera ayudarlos.

- Además no confío en lo que diga algún mata sano - agrega Yuri haciendo un puchero negándose a que alguien lo vea pero no podia hacer nada mas.

Aunque había quedado en no informar la existencia de la pequeña Anya, de todas maneras su jefa se había enterado de su existencia, incluso el como uno de los mejores agente de WISE era vigilado, todo gracias a las constantes encuentros con la asesina, para evitar que algo le pasara en el trascurso de su misión.

Había logrado convencer que conservar a la pequeña niña era fundamental para el éxito de la misión, que un hombre con una hija era menos sospechoso que un hombre de 30 años sin familia, su jefa le había dado la razón siempre y cuando le informara de todos los acontecimientos a Fiona Frost.

- Tenía que traer a la niña al hospital - recrimina Fiona dedicando una fría mirada a la niña.

- Creo que la mejor forma de evitar confusiones es que la gente vea a Anya - asegura Loid ignorando las preocupaciones de su compañera de trabajo.

- ¿Papa no tienes mani aquí? - pregunta la pequeña que ya comenzaba a sentir hambre.

- Anya debes mantener un perfil bajo, no queremos llamar la atención - ordena el espía esperando que la pequeña niña pudiera desempeñar un buen papel.

- ¿Cree que podrá hacerlo? - cuestiona la mujer escéptica al respecto " No entiendo que es lo que ve en estos mocosa, no tiene ninguna cualidad"

- Ella me da miedo - murmura con temor Anya leyendo los pensamientos de la mujer de cabello blanco.

- El cuartel cree que lo mejor para pasar inadvertidos era la pequeña - responde el espía de la forma más natural posible " Oh al menos eso piensan ahora luego de convencerlos -

- Papá es genial - dice la pequeña niña con una leve sonrisa.

Loid Forg simplemente suspiro resignado, a veces la niña parecía que hablaba sola de cosas que nunca pasaban, además del hecho que Fiona no era particularmente colaborativa en ciertos aspectos mas comunes alejados de la misión, por lo que decidió salir de su oficina por un momentos, cuando se dio cuenta que la asesina se acercaba por un milisegundo se impresionó, para luego formular miles de preguntas en su cabeza de la razón de su presencia y todas las formas en las vencerla sin llamar la atención.

- Doctor necesito que atienda a mi hermano tiene una lesión en su hombro - dice Yor una vez que había visto al primer doctor libre del hospital que había encontrado.

- ¡Tu! - vocifera Yor/Loid al mismo tiempo cuando se dieron cuenta de la presencia del otro

- ¿Acaso ustedes se conocen? - cuestiona Yuri frunciendo el ceño desconcertado de lo que sucedía.

- Para nada yo no lo había visto jamás - responde su hermana muy nerviosa intentando mantener la compostura.

- Solo se díscolo el hombro puedo acomodarlo en su lugar si me lo permite - asegura el rubio metiéndose en su papel de doctor, después de todo tenía cocimientos de anatomía humana.

- Claro - acepta el pelinegro con cierta desconfianza " este doctor es muy sospechoso, está mirando de una manera muy extraña a mi hermanita"

- No podrá mover el brazo por algunos días, es para evitar alguna lesión mayor - informa Loid una vez que acomodo la articulación evitando la mirada de la asesina.

- Mi trabajo en el ministerio no me lo permite, debo estar en movimiento - alega el joven quien no podía dejar su trabajo en el gobierno.

- Hazle caso al doctor Yuri debes cuidar tu salud - menciona Yor intentando calmar a su hermano " aunque no sea un verdadero doctor eso estoy segura"

- Debe quedarse acompañado - sugiere Forger sacando una pequeña libreta de su bata médica - por cierto para el registro debo anotar su domicilio -

- Me quedaré con mi hermana unos días, después de todo eso quería desde el principio - responde Yuri cambiando su semblante de serio a uno más relajado al pensar en su hermana.

- Señorita Brier debe acompañarme a otra habitación para terminar el informe - comenta el espía dando una sonrisa dirigiéndose a la mujer.

- Que raro no le dijimos que nuestro apellido - susurra Yuri dándose cuenta de algo importante al notar como su hermana entraba a la oficina del doctor - acaso si conoce a mi hermana y están saliendo juntos -