Entre Líneas

Capítulo 18

Lo mio es amar en silencio

Disclaimer: Los personajes de Naruto son propiedad de Masashi Kishimoto, esta historia es de mi total autoría no está permitida su publicación en otros sitios sin previa autorización. -Azulen-

Summary: ¿Qué harías si pudieras volver a empezar? Sasuke despierta de un largo sueño a punto de tomar una decisión que podría cambiar el destino de todos. SasuSaku. Fluff Romance. Lemmon.

Dedicado a hamzeluzu

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Despertó pestañeando repetidamente acostumbrando a sus ojos como jades adormecidos a la escasa luz que ingresaba por la ventana y se encontró a sí misma en pijama, aletargada tocó sus partes privadas comprobando que sus cómodas braguitas de algodón estuvieran en su sitio.

¿Qué? ¿Es de noche?

Comenzó a reír histéricamente, tuvo un sueño muy loco y ahora le dolía la cabeza y tenía unas insoportables nauseas como si hubiese bebido con Tsunade otra vez, se sentía confundida y resacosa, pero suponía que simplemente había dormido demasiado recordaba tomarse un par de copas en el despacho de su maestra, estaba trabajando de más en el hospital eso seguro.

-Si… estoy trabajando demasiado, vaya sueño…- rio sola en la oscuridad rascándose los despeinados cabellos- Si claro… Shisui y yo… sexo JAJA… que asco… - masculló y una sombra sentada al pie de la cama llamó su atención justo cuando estaba a punto de gritar la sombra se movió rápidamente cubriéndole la boca y conteniendo su grito al tiempo que encendía la luz de la mesita revelando su identidad.

-¿¡Sasuke!?- su exclamación murió ahogada contra la cálida palma masculina sus ojos le observaban serenos, carentes de emoción y con la madures de un hombre que ha superado incontables batallas antes de soltarla con cautela.

Su presencia había adquirido un aura de guerrero duro que la estaba poniendo demasiado cachonda.

-No fue un sueño- declaró él fríamente quitándole la mano que cubría su rostro- te desmayaste de ebria en el pasillo fuera del despacho de la Hokage y esa bruja me ordenó traerte aquí, aunque lo habría hecho de todas formas…- sus ojos viajaron por su habitación analíticos- entonces cambiaste los muebles y te acostaste con el maldito de Shisui ¿Algo más que deba saber?- su mirada entrecerrada le hizo sentir juzgada y a la defensiva, estaba por saltarle al cuello pero se contuvo devolviéndole el gesto acusador.

-No solo los muebles.

No solo el peinado

-Ya lo veo- sonrió ladinamente familiarizado con esa respuesta.

No había cambiado tanto después de todo.

Sasuke suspiró profundamente y el aura a su alrededor pareció relajarse, precavida lo observó pensativo como si buscara las palabras correctas para explicarle lo que estaba pasando y Sakura notó que había cambiado su ropa de ermitaño sexy por una muda más cómoda y normal, una camiseta azul profundo que dejaba entrever cada esculpido músculo de su torso y unos holgados pantalones grises.

-Te dejaste crecer el cabello- señaló en voz baja visiblemente incómoda y sin saber que acotar para no matarlo, tenía que reconocerlo en el fondo aunque todo haya resultado como una mierda no podía negar que le había extrañado, él asintió en silencio y tomó un rosado mechón de cabello entre sus dedos delicadamente como antaño ruborizándola.

-Lo cortaste- evidenció el cabello que le llegaba hasta la mitad del pecho recogiéndose en suaves ondas rosadas que aportaban volumen y cuerpo dándole a su existencia un aire absolutamente angelical y sexy al mismo tiempo.

Si, Sakura siempre había sido preciosa, podía entender e incluso justificar ese largo historial de pretendientes que iban tras ella y realmente se sintió mal consigo mismo por haberla abandonado, se sintió una basura por haberla hecho sufrir así y romper su corazón, sus preconcepciones acerca de "la forma de ser de Sakura" no le habían permitido ver que de hecho ellos no eran iguales y por muy grande que fuese su lealtad Sakura no iba a esperarlo el resto de su vida, desde luego no la merecía pero era lo suficientemente egoísta como para desear fervientemente recuperarla a toda costa.

-Solo un poco- sonrió con suavidad sintiéndose repentinamente triste y avergonzada, entonces era real.

Su mega revolcón con Shisui.

Su sesión de embriagarse con su maestra.

El regreso de Sasuke.

-Tu ropa estaba sucia, vomitaste sobre tu camiseta y tuve que asearte y cambiarte de ropa, me preocupaba que no despertaras ni siquiera cuando te metí a la ducha- carraspeó al ver la mirada de Sakura clavada en él a punto de volver a desmayarse de vergüenza- no te toqué indebidamente y evité… ya sabes… mirar…- aclaró sintiendo el calor subir por la parte trasera de su cuello hasta sus orejas tratando de espantar ese recuerdo de sus senos que había robado de la mente de Shisui- es solo que… tus padres no estaban en casa, pero no creí que quisieras que tu madre te encuentre así…- explicó sintiéndose un poco más dispuesto a hablar, aunque visiblemente avergonzado mientras respiraba con pesadez.

"Tu cuerpo ha cambiado" deseó agregar, pero se mordió la lengua por lo inapropiado del comentario, por supuesto que había cambiado, ella ya no era una niña.

Sakura asintió en silencio sintiéndose patética, solo estaba ahí para cerciorarse de que no estuviera en coma etílico o algo así.

-G-gracias- susurró azorada que más podría decir ella se había humillado sola- ¿Tienes hambre? N-no he comido en todo el día y si quieres yo… puedo preparar algo para agradecerte- ofreció visiblemente incómoda con la situación, pero aun así vio a Sasuke asentir despacito con una pequeña sonrisa nostálgica en su rostro perfecto.

-Siempre fuiste buena cocinando, eché de menos tu comida cuando estuve lejos- señaló él sentado en un taburete y tamborileando con los dedos sobre el mesón mientras la veía moverse por la cocina visiblemente nerviosa, al menos ya no estaba enojada con él pero odiaba verla incómoda y triste.

Un aura peligrosa rodeaba a Sasuke aunque por fuera se veía tan sereno como el mar en calma y no se sentía especialmente dispuesta a pelear ahora, así que poniendo un plato de fideos con verduras y pollo nutricionalmente equilibrado frente a él inquirió:

- ¿Necesitas algo más?

- Solo hablar y que me perdones por no escribirte en estos años, te escuché… todo lo que le dijiste a Itachi y reconozco que es culpa mía el que estés así, realmente lo siento… te debo una explicación- parecía genuinamente arrepentido y tanteó con su mano la mesa hasta tocar tímidamente la suya con sus dedos- no quiero que sufras más, déjame compensártelo Sakura.

- Ya no importa, fue hace años y todos hemos seguido con nuestras vidas, no es como si me hubiese quedado sentada esperándote como una viuda así que no asumas que sufro porque desde luego ya no lo hago- mintió aflojando el agarre y recibiendo en respuesta otra de esas adoloridas miradas suplicantes de Sasuke que aún no se acostumbraba a ver.

-Se que es mi culpa que lo que teníamos esté roto…pero si sirve de algo… Y-yo no te he olvidado, Sakura- admitió con sinceridad- estuviste en mis pensamientos todos los días y en cada momento- susurró jugueteando con los palillos en los fideos distraídamente- y quiero dejar claro que no he estado con nadie más… en todo este tiempo.

La declaración instaló un peso abrumador en la boca de su estómago provocándole nauseas otra vez, ahí estaba él, sonrojado y melancólico, pidiéndole perdón por no escribirle una carta explicando su situación y admitiendo en efecto haber esperado todo ese tiempo pacientemente solo pensando en ella, porque Sasuke Uchiha… era Sasuke Uchiha.

¡Ni siquiera tenía la cara de decir que era raro!

¡Era absolutamente tierno!

¡Tierno y malditamente sensual!

-No te mentiré, me recordé diariamente que te estabas follando a la mitad población femenina del país del hierro solo para lograr superarte- admitió seriamente- así que no me digas que eso no fue así.

-No fue así- admitió rápidamente y la observó ofendido- Sakura… ¡Te dije que nunca habría nadie más para mí que tú! - le reprochó – lo decía en serio, no estaba bromeando cuando te dije que los Uchiha solo amamos una vez…

-¡Dijiste eso a los doce años!- exclamó incrédula.

-¡¿Y?!- replicó repentinamente indignado.

-¡¿Realmente creíste que seguiría creyendo en esas palabras cuando ni siquiera enviaste una carta!? Desapareciste durante meses y en esa estúpida nota que dejaste ni siquiera dijiste que me amabas… solo dijiste que esa estúpida misión tomaría dos años… todos … todos se rieron de mi por esperarte como una imbécil…- susurró dolida respirando con más intensidad de la necesaria para no llorar frente a él- ¡Hasta Neji se mofó de mi desgracia! ¡Incluso consideré por un momento hacerle caso a Naruto!

La declaración se sintió como un puñetazo en la boca de su estomago.

-No creí que necesitaras escucharlo, pensé que tú… ya lo sabías…- admitió avergonzado y casi con sorpresa vio a Sakura engullir sus fideos con las lágrimas escurriendo por sus ojos formando una estampa que daba tanta risa como lástima - por supuesto que te amo Sakura, lo hice siempre, todo el tiempo… soy un shinobi, lo mío siempre fue amarte en silencio- confesó profundamente avergonzado- creí que eso estaba claro desde que tú y yo… y-ya sabes…eso.

La pelirrosa le miró herida y conmovida por sus palabras se llevó una porción enorme de fideos masticándola con fuerza a consciencia sorbiendo su nariz y tragó de una manera que a Sasuke no le pareció muy humana.

La culpa trepando por sus piernas como una enredadera apretujándole el estómago casi al grado de provocarle arcadas.

Maldijo el nombre de Tsunade Senju en lo profundo de su corazón, esa vieja tendría que encontrarse otra insulsa para que le ayudase con el papeleo porque desde luego ella no seguiría siendo su idiota, se hundió en la silla sin entender por qué su maestra se había empecinado en que olvidara a Sasuke envenenándole la cabeza, siempre le hizo sentir que sabía algo que ella no, insinuando maliciosamente como Sasuke estaba casado con una samurái de grandes tetas.

-¡Déjame comer en paz! ¡Tu dulzura está haciendo que sienta asco de mí misma! – exclamó en medio de un sollozo y volvió a engullir fideos bajo la preocupada mirada del pelinegro que temía que ella comenzara a atorarse por la cantidad de comida que estaba llevándose a la boca.

Si, se sentía una basura.

Una basura que Sasuke había amado mucho más de lo que ella misma merecía, mucho más incluso de lo que ella le había amado al parecer.

Imágenes de su candente sesión sexual con Shisui se filtraron en sus adoloridos y culpables pensamientos sintiéndose absolutamente arrepentida de no haber sido solo un poco más paciente, por eso el rencor era malo, por eso asumir era malo, no podía regresar el tiempo atrás, odiaba que su primer encuentro haya sido tan agresivo cuando todo lo que quería era lanzarse a sus brazos y quedarse ahí por siempre.

Pero ya nada podía borrar su patético y completamente innecesario intento de olvidarle.

Sasuke guardó silencio mientras comía visiblemente a gusto con cada bocado y en el mismo sepulcral silencio la siguió de vuelta a la habitación como una sombra deslizándose discretamente por el pasillo.

- ¿Te has enamorado de Shisui? - le preguntó casi temeroso por su respuesta sentándose a su lado- ¿C-cuanto tiempo llevas…

-Nada- le cortó- no fue na-da- recalcó irritada- en serio, solo fue… un arrebato de estupidez de una mujer cachonda y despechada con un profundo miedo a quedarse esperando al amor de su vida sin saber si quiera si algún día regresaría… ¿Lo entiendes? ¡¿Sabes cómo me dolió pensar que quizás algún día regresarías de la mano de alguien más y lindos bebes Uchihas en carriolas caras?! ¡Estaba desesperada Sasuke! ¡Yo tengo necesidades! ¡Ya no sabía que más hacer para dejar de pensar en ti!

Tan desesperada que se había acostado con Shisui, si, lo pasó muy bien pero su cerebro a penas empezaba a procesar el peso de sus acciones haciéndole cuestionarse seriamente su cordura.

Se sintió un poquito zorra.

Sasuke contuvo una risita.

- ¿Entonces aún me amas? - sin poder ocultar más sus ansias por sentirla entre sus brazos la rodeó y la atrajo a su pecho al instante Sakura se acomodó en su regazo acurrucándose casi empezando a ronronear como un gatito, sus cuerpo encajaban como dos piezas de rompecabezas, suspiró e inspiró su aroma masculino casi con necesidad.

Dios, cuánto había extrañado estar entre sus brazos.

-Más que a mi vida, Sasuke-kun- sollozó sintiendo las lágrimas corriendo como ríos por su rostro genuinamente arrepentido- perdóname, soy un asco de persona… - finalmente se quebró con sus ojos atormentados dejando caer sus lágrimas hasta empapar su camiseta- no tenía idea… yo… Sasuke-kun, te fui infiel, me acosté con Shisui- confesó repentinamente abrumada como si acabara de darse cuenta de que había cometido el peor error de su vida- ¿Soy una basura?

-Por supuesto que no- susurró escondiendo la cabeza en el hueco de su cuello e inspirando ese aroma que tanto había extrañado y que no había cambiado en absoluto pasen los años que pasen- olvida eso, dijiste que no fue nada significativo ¿no? Y yo no estaba aquí, no sabías que seguíamos juntos, al menos en mi mente así era… así que no fuiste infiel…- acarició su mejilla con los dedos- vamos a llamarlo el polvo de la venganza… Shisui no va a recordar nada así que no te preocupes por eso, si llega a recordar algo de ti voy a golpearlo hasta dejarlo en coma- prometió risueño besando la punta de su nariz con amor- extrañé esa cara llorona- rio.

- ¿Sabes? - sorbió por la nariz- Yo realmente llegué a pensar que estabas muerto y que nadie quería decírmelo… además… ¿Cómo se supone que borre de mi memoria una cogida como esa? – prácticamente vomitó aquellas palabras y Sasuke la apretó un poco más entre sus brazos con un visible tic en su ojo derecho.

-Creo que yo puedo hacer algo para ayudarte con eso- sonrió arrogante y malicioso, sus ojos jade brillaron emocionados había extrañado esa expresión más de lo que creía, él acarició su cintura dándole un suave beso en el hombro que encendió una llama en su interior.

- ¿Cómo? - ella se separó un poco para mirarlo ansiosa, malinterpretando sus palabras como un "Te voy a dar la verdadera mejor cogida de tu vida"

Sasuke contempló la lujuria encenderse en sus ojos verdes y nuevamente esa intrusiva imagen de sus pechos rebotando y su rostro sonrojado suspirando de deseo se apoderó de su mente haciendo que se arrepienta de haber mirado en los recuerdos de Shisui al menos por una fracción de segundo.

Se sintió incómodo.

- No es que haga falta, pero si te incomoda recordarlo puedo borrar tus recuerdos con mi sharingan prometo no mirar… no quiero que el daño sea irreparable para mi- bromeó sonando sarcástico y Sakura se sintió entre la espada y la pared, repentinamente sucia repasando mentalmente y con cuidado los pros y contras.

Sasuke había vuelto y la amaba tanto como siempre lo hizo lo que significaba que seguramente su pene estaba suplicando ser atendido, atendido por ella, es más casi podía apostar a que una de las primeras cosas que planeaba hacer al verla era pedir que atendiera a su amiguito, pero dadas las circunstancias el estaba aguantando un poco más o quizás no tanto se estremeció sintiendo los labios de Sasuke en su cuello y sus manos traviesas deslizándose por debajo de la camiseta del pijama acariciando su espalda baja, se estremeció, su respiración le hacía cosquillas, un suspiro escapó de sus labios dándole más acceso a su piel sintiendo los labios que tanto había extrañado deslizarse delicadamente hasta el lóbulo de su oreja.

Porque él la había esperado.

Oh por Dios ¡Sasuke seguía siendo técnicamente virgen también!

Sus cachondos pensamientos hicieron que involuntariamente mordiera la cara interna de su labio inferior separándose para mirarle directamente a los ojos color carbón y su mirada viajó por su hermosa existencia, era tan… Dios… Estaba considerando la seria posibilidad de lanzarse sobre él y arrancarle la ropa y deslizar sus manos por ese cuerpo que parecía forjado en acero, pero… no le parecía muy prudente, incluso si sus ojos oscuros estaban gritando que él deseaba que ella diera luz verde a todas las perversiones que había estado guardando en su mente.

A la mierda la prudencia, estaba demasiado caliente como para pensar.

Se ciñó sobre él atrapando sus labios con necesidad, los ojos de Sasuke se ampliaron ligeramente asombrados, pero pronto le correspondió con la misma ferocidad, sus respiraciones agitadas entremezcladas con sus besos, Sakura se aferró a su rostro casi temerosa de que volviera a desaparecer y gimió cuando el mordió sensualmente su labio inferior dándole acceso a su lengua encontrándose con la suya, suspiró en el dulce alivio de su boca y se dejaron caer contra el colchón.

Una risilla divertida escapó entre sus labios cuando en un segundo Sasuke ya la había despojado de su pijama y se desnudaba frente a ella sin ningún tipo de pena, mordió sus labios gateando sobre el colchón frente a él, detuvo las manos de Sasuke que se disponían a retirársela ropa interior bajándosela ella misma, el la observó expectante con sus ojos entrecerrados por el placer y tomó su miembro en su mano derecha bombeando suavemente, le escuchó jadear y emitir un suave gemido cuando ella susurró sobre la punta:

-Hola cariño… te extrañé- con un risilla simplemente lo engulló... ah… cuánto lo había extrañado…

Sasuke rio suavemente con sus palabras trató de plantarse firme en su posición para que no le temblaran las piernas por la oleada de placer que recorría su cuerpo, tantos años reprimiendo aquellos instintos le hacían sentir a punto de explotar, se aferró a los cabellos de Sakura con un poco más de soltura indicándole con leves tirones el ritmo que le gustaría moviendo sus caderas sugerentemente como si follara su boca, la separó de él cuando sintió que estaba a punto de correrse y Sakura rio cuando la empujó sobre la cama de una forma un tanto salvaje.

Se detuvo un momento a ver sus ojos jade jubilosos y lleno de amor, la lujuria brilló en sus orbes cuando se encontraron con lo suyos y realmente sintió amarla, la amaba incluso más que antes, tal vez si que era un poco raro…

Tal vez estaba un poquito obsesionado con ella…

Pero ¿Cómo culparlo? Reparó en los labios rosas de ella entreabiertos invitándole a besarla y su sonrisa se expandió cálida por su rostro ruborizado antes de besarla despacio, sin poder aguantar más sus deseos por volver a sentirla suya separó sus piernas con su rodilla y ella comprendió recargando sus muslos en sus caderas rozando su intimidad con su miembro desde su posición perdidos en sus propios sonidos de placer sin apartarse de sus labios se deslizó en su interior y ella gimió con fuerza tironeándole de los cabellos.

-Ah… Sakura…- gruñó su nombre comenzando a embestirla deseoso- venga, te quiero arriba- susurró en su oído ella asintió y sin salir de su interior intercambiaron posiciones.

Si decía que no al lavado de cerebro cortesía del sharingan él podía interpretarlo como una señal de que a ella le había gustado acostarse con Shisui y que estaba dispuesta a repetirlo y hasta hace… esa misma mañana… sí que estaba dispuesta a repetirlo ¡Por Dios! ¡Que se había resignado a no volver a ver a Sasuke jamás! Sus pensamientos intrusivos la invadieron y cerro los ojos echando su cabeza hacia atrás cabalgándolo gustosa solo dejándose llevar por sus cuerpo, moviéndose profundamente volvió a besarlo consciente de que esta era por fin la primera vez en la que realmente él le hacía el amor y no podía sentirse más extasiada por sentirlo dentro de ella.

¿Era tan malo si no quería olvidar?

Sus caderas se movían en sincronía con las de la pelirosa que había etiquetado un día como el amor de su vida, el sonido húmedo de sus sexos unidos le resultó tan erótico que aun estando ella arriba se posicionó mejor iniciando un vaivén algo frenético, estaba siendo un poco rudo, lo sabía aunque ella no parecía disgustada con aquello, gemía susurrando en su oído cuánto lo amaba haciendo que sin resistirlo más se corriera en su interior llevándose uno de sus generosos senos a su boca mordiendo y succionando con suavidad pronto sintió el sensual gemido de Sakura y las contracciones de sus paredes interiores anunciándole que había alcanzado su propio climax.

Exhausta se derrumbó en su pecho.

Respirando agitado la abrazó protectoramente y besó su coronilla.

-No sabes cuánto necesitaba esto…- rio cerca de su oído.

-Lo sé…- suspiró- yo también te extrañé Sasuke-kun…- tomó la camiseta azul que había aterrizado cerca de la cabecera de la cama poniéndosela para decepción del pelinegro cubriendo su desnudez, le quedaba enorme y evidenció de esa forma lo mucho que se diferenciaban sus estaturas en la actualidad, viéndole ponerse los boxers y meterse bajo las mantas a su lado simplemente se acurrucó y deslizando su mano en una tierna caricia asintió pronunciando- Bórralo todo- Sasuke le observó con una pequeña sonrisa casi como si estuviese aliviado- bórralo todo e implántame la mejor película porno que podamos protagonizar- repitió cortando de tajo a sus traicioneros pensamientos que le decían que no era necesario y Sasuke se sonrojó ligeramente observándole embelesado.

Sakura había cambiado.

Hablaba tan abiertamente sobre sexo que estaba comenzando a intimidarlo y encantarlo a partes iguales, pero no podía permitir que eso lo pille con la guardia baja, eran adultos y Sakura… ahora era una mujer… experimentada, realmente había visto las estrellas hace a penas unos segundos y aún tenía en mente demasiadas cosas que le gustaría hacerle pero ella lucía genuinamente exhausta.

Ya tendrían toda la vida para hacer experimentos.

¿Lo habría hecho bien? ¿Y si en el fondo ella en realidad no quería olvidar lo que hizo con Shisui? Shisui era mayor y más experimentado por supuesto que no la había defraudado, pero ¿Él?

S tragó el dolor que sintió con aquel patético pensamiento y se limitó a observarla fijamente acurrucada en su pecho como antaño, quizás Shisui tenía más experiencia pero viendo su rostro pacíficamente relajado y su pequeña sonrisa satisfecha supo que jamás habría alguien mejor que él para ella, porque sus cuerpos se buscaban como imanes y encajaban como dos piezas perfectamente diseñadas para estar juntas, acarició los cabellos rosas ligeramente ondulados y se la atrajo acurrucándose del todo con ella removiéndose inquieta y confundida a su lado observándole con esos grandes ojos verdes que tenían el poder de hipnotizarlo como ningún dojutsu podía.

-Está bien, borraré tus recuerdos antes de dormir…- comenzó acariciándole el rostro con suavidad- y perdóname por no escribirte, estábamos infiltrados y no podíamos permitir que nuestra comunicación con la aldea fuera interceptada así que enviábamos mensajes encriptados a través de un mercader de libros que trabaja para la aldea.

-Oh…

La bruma de placer se dispersó dando a la culpa un poco más.

Sasuke notó la tristeza que cubrió los ojos jade y le acarició los cabellos con cariño sin despegar sus ojos carbón de los suyos.

- ¿Ya no trabajas en la división de criptoanálisis? Noté que tienes habilidades medicas ahora dime, Sakura… ¿Pensaste en mí? – rio y sus manos se deslizaron a lo largo de su espalda relajadamente y Sakura se dedicó a sentir el vibrar de su voz profunda resonando en su pecho contra su oído y el latido suave de su corazón arrullandole.

-Entrené con la quinta y me convertí en ninja médico, estás viendo a la nueva jefa del departamento de cirugía- sonrió de oreja a oreja contra su pecho abrazándole como hace tanto tiempo había soñado con volver a hacerlo.

El la observó cálidamente con ternura y ella elevó su vista para perderse en esa mirada penetrante que la contemplaba como a lo más hermoso que hubiese visto en el universo y no se percató de lo mucho que realmente había extrañado tener esos ojos mirándola así, con tanto amor y sintió la calidez de las lágrimas deslizarse por sus mejillas otra vez, él la observó apenado y volvió a acunarla sollozante entre sus brazos.

-Sasuke-kun…-hipó- te esperé por mucho tiempo… llegué a pensar que ya no volverías y Tsunade no me decía nada… solo decía que te estabas acostando con mujeres y que habías abandonado la vida shinobi para casarte con una rubia de tetas enormes como ella- protestó como una niña y Sasuke la observó como si le hubiera salido otra cabeza antes de empezar a reír casi a carcajadas como hace demasiado tiempo no lo hacía.

Maldita vieja.

Le había comido la cabeza a su dulce Sakura.

-Eso me es más familiar- rio acariciándole los cabellos- sigues siendo tan molesta…- sopló en su cuello con cariño como solía hacerlo siempre que estaban solos y Sakura rio entre lágrimas sintiendo las cosquillas- en serio te extrañé tanto…

- ¿Me perdonas mi amor? – sintiendo las manos de Sasuke limpiarle los rastros de lagrimas de las mejillas con una caricia mientras asentía despacio.

-¿Tú vas a perdonarme?- ella asintió despacito con una tímida sonrisa asomando y sus ojos brillantes robándole un suspiro- entonces finjamos que lo de Shisui fue solo una pesadilla, no volverá a recordarlo, se lo he dejado más que claro- besó el dorso de su mano despacito y se acomodó mejor en la cama llevándose a Sakura consigo.

- ¿Realmente estás bien con esto? - le acarició los cabellos.

- ¿Tú estás bien con esto? Aún puedo ir y matar a Shisui si así lo quieres…- murmuró somnoliento contra su piel escuchando el suave "Aja" afirmativo de Sakura con un asentimiento -Entonces todo está bien- se acurrucó tras su espalda y pasando su brazo por su cintura posesivamente como tanto había estado anhelado hacer.

- ¿N-no te doy asco? - cuestionó insegura.

- ¿Por qué me darías asco? - susurró somnoliento- Eres mi novia y te amo…

-No lo digas así- suspiró atormentada y se alejó de su brazo- Sasuke-kun tienes que dejar de dar por sentado las cosas, no puedes volver y reclamarme como si fuera un juguete que dejaste olvidado…

-Tienes razón, aún tienes que usar esa camiseta con mi nombre…- ronroneo bromeando en su oído enrojeciéndola hasta la coronilla y genuinamente sintió sus partes privadas cosquillear ansiosas otra vez, si, su vagina estaba montándole una fiesta de bienvenida.

- ¿Qué habrías hecho si yo… si yo sí…- tragó con dificultad- ¿Y si volvías y yo tenía novio o… estaba casada?

-Entonces habrías tenido que dejar a ese imbécil, divorciarte o enviudar misteriosamente- acarició su cintura despreocupado con una arrogante sonrisa- sigo conteniéndome de matar a Shisui por ponerle las manos encima a mi mujer, pero dadas las circunstancias puedo ceder a la idea de que no me corresponde reclamar nada- suspiró y rozó sus labios con los suyos suavemente- a menos que en realidad no quieras regresar conmigo… Sakura…- pronunció casi temeroso de la respuesta.

Alejó su rostro del suyo y le miró esperando su mirada tembló al ver un brillo de duda en sus ojos verdes, el rompió el contacto con su cuerpo incorporándose en la cama para mirarla directamente sintiéndose ansioso por su silencio y ella notó el brillo de preocupación instalarse en sus ojos negros cuando se encontró con sus dubitativos ojos verdes, realmente no pudo decirle que no.

¿O sí?

-Quiero que me lo pidas esta vez, ya no soy tu novia Sasuke, tú rompiste conmigo hace cuatro años el día que te fuiste dejando esa estúpida carta y ahora tendrás que convencerme de regresar y ten por seguro que soy una mujer difícil de conquistar así que ponte a la fila- sentenció y se acurrucó en las mantas dándole la espalda con el rostro sonrojado como un tomate antes de apagar la luz de la mesita y sentir la suave risa de Sasuke tras su espalda acurrucándola en su pecho.

Sonrió.

-¿En serio vas a hacerte la difícil Sakura? Pero ya nos acostamos…- rio contra sus cabellos abrazándola con fuerza atrayéndola hacia sí- Por Dios sigues siendo una dulzura…

-¡Si nos acostamos ¿Y qué?! ¡No está permitido recurrir a tu madre para convencerme! - giró sobre su espalda para estar frente a frente y le apretó la punta de la nariz con sus dedos sonriendo con ternura.

-Está bien entonces… ¿Cómo se supone que haga esto?

-Tu sabrás…

-Regresa conmigo Sakura- le ordenó entrecerrando sus ojos amenazante.

-Nop- se cubrió hasta la cabeza con las mantas ocultándose de su abrumadora mirada oscura que le hacía sentir mariposas como hace años no las sentía.

Y que sabía no podía sentir por nadie más.

-Sasuke… borra al idiota de Shisui de mi cerebro ahora- demandó firmemente sujetándole la cara entre sus delicadas manos, él le dio una sonrisa orgullosa al mismo tiempo que sus ojos se teñían de carmesí.

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Notas de la autora:

¡Ahhhhh amo cuando estos dos destilan amor! ¿Les ha gustado la reconciliación? Sakura haciéndose la difícil me da 1000 años de vida. 1000 de aura para todos.

Espero este capítulo haya gustado mucho, oficialmente el Sasusaku es reestablecido, el siguiente se llama operación recupera a la chica, por suerte hoy fue un día flojillo en el trabajo me dio tiempo a hacer ediciones pequeñas a este capi y escribir estas notas, disculpen si se me pasan algunos horrores ortográficos o palabras que parece que no van, yo también amo demasiado esta historia y me fascina escribirla, esto últimamente ocupa el 100% de mi tiempo libre, gracias por sus reviews! Espero seguir teniéndolos por aquí con su amable sintonía xD

Con cariño,

Azulen.