Disclaimer: Los personajes que reconozcáis y el universo le pertenecen a Jennifer L. Armentrout.
Solo la trama es mía.
No obtengo ningún beneficio económico ni lucrativo de algún tipo al escribir este fic.
Nota: Un drabble del fandom Covenant.
Aviso: Este fic participa en el Reto #76: "Celebrando los 500,000 posts" del foro Hogwarts a través de los años.
La palabra escogida es Simulacro.
Aiden va a matarme.
Deacon corría desde la fiesta en la que había estado bebiendo. Había saltado la alarma de daimons y todos debían dirigirse al salón más grande para que los centinelas se ocuparan de la amenaza.
Había varios simulacros al año, pero según sabía, no había programado ninguno esa noche.
Se miró a sí mismo. Llevaba el pelo revuelto, su camiseta había desaparecido, y seguramente tenía varios chupetones en el cuello y torso. Su hermano iba a matarlo.
Aiden debería relajarse, en su opinión, pero nunca le hacía caso.
Se tropezó con una estúpida piedra y se sintió tan mareado que no podía levantarse.
Los que habían estado en la fiesta, se iban corriendo. Cabrones.
Unos brazos fornidos le recogieron. Deacon tuvo que cerrar los ojos por las náuseas... Y porque no quería mirar por si era Aiden.
Al menos se alegraba de no seguir besando el suelo.
-Deacon...
Sí, era su hermano. Esperaba no vomitarle encima.
