… y fue como se despertó, y así volvió.
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camilo navas. Vienen las mejores batallas y sí, Hakurei es más calmado y analiza mejor las cosas que Sage que es algo más gruñón jaja. ¡Saludos!
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nadaoriginal. Sí, esta parte del anime me sacó más de alguna lágrima, en especial por la muerte de mis dos Caballeros favoritos. Pero bueno, veremos qué pasa aquí. ¡Saludos!
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Ronaldo Ma Rru. Tenma no se anda con rodeos, ahora es donde se pone fuerte. ¡Saludos!
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Vamos con la segunda parte de la Guerra Santa.
Sin más, comencemos…
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El Lienzo perdido, la pintura que elimina todo rastro de la Tierra sigue apareciendo a través del cielo en forma de un enorme lienzo.
En estos momentos, en el castillo de Hades, se encuentran los dioses gemelos, Consejeros del Dios Hades, esperando a Tenma, el Caballero de Pegaso.
En estos momentos, Sasha estaba viendo el cielo desde los pies de la estatua de su figura. Esta se hallaba con una mirada algo seria mientras veía el lienzo perdido.
Tenma, amor mío. Pelearé a tu lado, y veré como mi hermano Alone realiza esa horrible pintura. Pero… ¿escuchará todo lo que quieras decirle? Pero… no sé porque, pero siento que un horrible cosmos se dirige hacia Tenma, no sé dónde lo he sentido antes, pero creo que es…
Sasha se detuvo un momento ya que sabía de quien se trataba dichos cosmos y eran dos presencias sumamente poderosas, además… parecían ser gemelas.
La Guerra Santa… entró en un nuevo capítulo.
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En un lugar lejano, se veía a un chico saltar por unas montañas y este chico de cabello negro llevaba su Armadura en su caja de Pandora.
Llegó un momento en el que se detuvo para descansar mientras solo veía al frente.
- ¿Cómo es posible que vaya tan rápido? – preguntó el peli negro – Tenma y Yuzuriha son igual de precavidos y muy adelantados, incluso… ¡no te des malas ideas Yato!
El peli negro se maldecía a sí mismo mientras solo pensaba en cómo era que sus compañeros fueran tan lejos.
Unos minutos después, el Unicornio llegó junto con los otros dos que estaban suspirando un poco luego de tan largo recorrido.
- ¿Cansado Tenma? – dijo Yato riéndose un poco – porque si lo deseas podemos quedarnos a descansar un poco.
- Cállate – el castaño le reprochó – el que no puede dar un paso más eres tú, solo mírate.
- ¡Cierra la boca! Yo estoy bien.
- Claro que sí Yato, en la cara se te ve – Tenma hizo sonrojar al peli negro el cual se veía bastante sudado y se evidenciaba que estaba agotado.
- ¡¿De verdad?! – el chico comenzó a frotarse la cara como queriendo saber si era cierto.
- ¿Lo ves? Tenía toda la razón.
- ¡Eres un maldito idiota! – Yato y el Caballero Pegaso comenzaron a pelear y Yuzuriha solo se alejó riendo un poco.
- ¿Ya van a pelear? A la diosa Athena no le gustaría verte con un ojo morado Tenma.
- Ya lo sé – Tenma se alejó de Yato y se fue con Yuzuriha.
- ¡Esperen! No me dejen – Yato fue el último en irse.
Mientras iban, Tenma no dejaba de pensar en Sasha y en cómo se reencontró con ella luego de varios días de no saber nada de ella. Pero el encuentro del día anterior lo dejó más que sorprendido, incluso a Yato y Yuzuriha.
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Flashback
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Los 3 chicos estaban impresionados de ver a la diosa de la guerra parada frente a ellos, más cuando Yato la quedó viendo, Yuzuriha estaba callada, pero el más feliz por obvias razones era Tenma.
El castaño solo sonreía ante esto. Unos minutos más tarde, la peli lila tuvo una conversación con Yato el cual no dejó de escucharla en todo momento, estaba completamente anonadado con la belleza de Sasha.
Luego de eso, la diosa habló con la Caballero de Plata la cual solo quedó emocional con lo que le decía la peli lila.
Por último, el Caballero de Pegaso se acercó a su amada, la cual solo estuvo más que encantada de tener a su amado castaño con ella de nuevo. Ante la mirada de los dos chicos, Sasha se acercó a Tenma y lo abrazó, acostando su cabeza en el pecho del chico, el cual la abrazó de la cintura y solo se fue a darle un beso en la frente.
Yato y Yuzuriha eran un manojo de preguntas las cuales no podían ser respondidas a menos que alguno de los dos dijera algo, pero la de rango de Plata no dijo nada ya que no quería arruinar el momento de ambos. Por palabras de Tenma, le contó que ellos se conocían de jóvenes tenían una relación cercana, pero nunca le dijo que tan cercana.
- ¿Dónde has estado? Te extrañé mucho – le dijo en voz baja la peli lila la cual no quería separarse del abrazo.
- Estuve alejado, no quería que te sintieras mal por mi culpa.
- No te preocupes, nunca estaría mal contigo.
- Yato, vámonos.
- ¿Por qué? Es que…
- ¡Que nos vamos! – sin más, Yuzuriha se llevó a Yato del sitio ya que sabían que hacían mal tercio en el reencuentro de ambos chicos.
Una vez que estaban solos, Tenma y Sasha debían ser breves, el castaño partiría pronto y debían saber lo que pensaban en ese momento.
- ¿Son tus amigos? – preguntó la chica.
- Sí, Yuzuriha de Grulla era la chica con la que estaba mi otro amigo, Yato de Unicornio.
- Se ve que son buenos amigos – en eso, la peli verde le echó una mirada rápida y entrecerrada - ¿no has hecho nada malo con ella verdad?
- ¿Qué? – Tenma se puso nervioso – c-claro que no, solo es una amiga, nada más.
- ¿Seguro?
- ¡Seguro! – la afirmación del castaño le bastó a Sasha ya que sabía que su amado no le mentiría.
- Bien, te voy a creer.
- Gracias amor – el chico solo se inclinó a sus labios - ¿puedo hacerlo?
- Eso no se pregunta – la peli lila fue la que dio el paso y lo besó, cosa que fue correspondida ya que tenían tiempo de no tener ese tipo de contacto. Unos segundos después, ambos se separaron algo sonrojados – prométeme que volverás sano y salvo.
- Lo haré. Ya no será como la última vez, esta vez volveré a tu lado.
- Eso espero – Sasha solo se separó un poco y lo vio a los ojos – siempre cumples tus promesas, así que lo esperaré con ansias.
- Sí, no demoraré mucho.
- Eso sí – la chica se acercó mucho al rostro del castaño mientras sonreía de forma malvada – eso sí, si le haces algo a esa chica o alguna otra… tendremos que hablar seriamente.
- N-No le haré nada a ninguna chica, lo prometo.
- ¿En serio?
- Sí.
- ¿Qué tanto me amas?
- P-Pues… Sasha…. No sé si deba decírtelo, pero para que mires cuanto pienso en ti, resulta que… - el castaño se acercó al oído de la chica y le susurró algo que duró algunos segundos para luego separarse, pero está vez algo sonrojado – m-más o menos eso.
- No lo creí de ti Tenma, pero igual no me molesta.
- Bueno, creo que debo irme amor, Yuzuriha y Yato me esperan.
- Bien, cuídate amor, solo una cosa más.
- ¿Qué pasa Sasha? – el chico notó como la diosa de la guerra se le acercaba al oído para susurrarle algo.
- No creas que eres el único, yo también me masturbo pensando en ti – Sasha se separó un poco del castaño para verlo al rostro y esta estaba más rojo que un tomate.
- B-Bueno… nos vemos – el castaño le dio un beso rápido en los labios y se fue del sitio lo más rápido que pudo, estaba avergonzado, pero igual de feliz por haberse encontrado con su amada peli lila.
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Fin Flashback
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Mientras tanto, los tres solo seguían su camino rumbo al castillo de Hades.
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En el Santuario…
Dohko había llegado a la prisión en el que estaría prisionero Tenma, pero al llegar, no encontró nada en el sitio, ni rastros de su hermano menor.
- ¿A poco él se…? – Dohko no quería creer que Tenma se hubiera escapado y desertado, pero esto no lo dejaba en paz y solo buscó en las ruinas cercanas a la prisión en busca de alguna señal de su alumno.
- ¿Sabes? Tu alumno me está causando muchos problemas – dijo una voz arriba de una casa llamando la atención del Caballero de Libra.
- ¿Manigoldo? Responde, ¿conoces el paradero de Tenma?
- De hecho, estoy a punto de partir a Italia, quieren que vaya y cuide de esos niños.
- E-Entonces… Tenma se…
- Tan solo verlo me causa mucho enojo – decía el peli azul – su pueblo natal fue destruido por la Guerra Santa, creo que exagera. Pero esto pasa en las Guerras. Bueno, me voy, el anciano se molestará si fallo.
- ¡¿El Patriarca lo sabe?! – eso impresionó a Dohko - ¿sabe que Tenma va al Castillo de Hades?
- Él solo conoce algunos detalles, tu alumno es muy amigo del Rey Hades, eso lo hace muy valioso para nosotros – eso molestó a Dohko y Manigoldo se asustó por eso – tranquilo viejo, solo bromeo. Creo que te preocupas mucho por él Dohko… pero que importa, me voy.
Sin más, el Caballero de la cuarta casa se fue del sitio dejando a Dohko solo en el lugar.
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De vuelta con Tenma, Yato y Yuzuriha…
Los tres llegaron al pueblo natal de Tenma en Italia, el cual estaba totalmente destruido. Esto le trajo muchas emociones a Tenma el cual solo estaba reflexionando y recordando los momentos que pasó junto a sus múltiples amigos y camaradas.
Luego de eso, llegarían a un sitio el cual les traería muchos problemas. Era un lugar el cual parecía ser una especie de bosque.
El sitio era lúgubre y daba mala sensación.
- ¿Por qué hay un bosque aquí?
- Oye Tenma, ¿no sientes ese horrible olor? Como si algo se pudriera – decía Yato tapándose la nariz, pero en eso, notó que el Caballero de Pegaso estaba algo asustado viendo al frente - ¿Qué mierda es eso?
Alrededor de las cuencas de los árboles, en las ramas, había un gran número de cuervos, pero estos tenían la cabeza sin ningún tipo de piel, solo se veía el cráneo en todos ellos. No solo eso, todos tenían los ojos rojos brillando, incluso uno de ellos parecía tener dos cabezas.
En un parpadeo de ojos, estas se dirigieron hacia los chicos que se cubrieron para evitar algún golpe con estos, pero uno de los animales rompió la cadena de Tenma, el cual solo siguió al ave separándose de sus dos amigos.
Cuando Yato quiso detener a Tenma, este se alejó algo de Yuzuriha y esta fue atacada por cuervos y de la nada, desapareció, dejando al peli negro solo.
- ¿Q-Que pasa aquí? – la cara de Yato estaba azul del miedo - ¡¿Por qué se fueron ambos?! ¡Yuzuriha, ¿A dónde te fuiste?!
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Tenma estaba siguiendo al cuervo que se había llevado su cadena, pero para no perderse, este marcaba los arboles con una seña para no perderse y justo a tiempo, recuperó la cadena, pero cuando se iba a marchar, notó que el árbol al que marcó, no llevaba la seña de que había puesto.
- ¿Qué pasa? Recuerdo bien que marqué este árbol – en eso, el chico sintió como alguien lo llamaba y al ver hacia el frente, no creyó la imagen que veía. En una casa abandonada, se veía a tres chicos que miraron al castaño.
- ¡Es Tenma! ¡Tenma! – una chica se dirigió al castaño el cual estaban que ya lloraba.
- No puede ser, son los niños. Dios… están vivos – el Caballero de Pegaso recibió a una en un fuerte abrazo y las lágrimas cayeron de sus ojos – aquel día… pensé que habían muerto y…
De la nada, el chico sintió algo cerca de su cuello y supo que había sido.
Un chorro de sangre salía de ahí y al ver al frente, notó como los rostros de los chicos ahora eran demacrados y con aspecto terrorífico.
- Tu sangre es cálida Tenma, no como la nuestras que es fría – la chica frotaba un poco de la sangre de Tenma en su rostro.
- Tu si estás vivo Tenma, no como nosotros – dijo otro chico.
- Tenma, nos da mucho gusto que estés vivo, pero…
- ¡Nos das envidia!
- Maldición – el chico golpeó con fuerza el suelo - ¡MALDICIÓN! ¡HADES, HIJO DE PUTA!
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Una persona con vestimenta Dorada veía todo el sitio desde un edificio abandonado.
- Oh no. Parece que han entrado en ese bosque. No es ordinario ya que apesta a muerto por doquier, pero… - el peli azul sonrió – pero es bueno para mí. Realmente necesito que el anciano me respete, solo me dice protege a Pegaso, cuida a Pegaso, has esto, has lo otro, en fin… ¡Aquí voy!
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Tenma estaba huyendo de los niños los cuales querían morderlo y hacerlo sangrar más. Él se hacía ilusiones pensando que todo era un sueño, pero no, era la triste realidad y los chicos que alguna vez cuidó y amó, estaban ahí atacándolo.
Se encerró en la casa en la que los había encontrado y solo respiraba un poco mientras intentaba calmar un poco su sangrado.
Cuando fue acorralado, no tuvo más opción que saltar dentro de la casa y notó lo que era. Solo había un enorme órgano (piano) en el sitio y era tocado por una persona envuelta en un manto. Y encima, había una pintura de Alone con alas.
- ¿Qué te pareció tu reunión con tus amigos Caballero? – dijo la figura levantándose del órgano y mirando a Tenma el cual no estaba nada feliz.
- ¿Quién mierda eres tú? – justo en ese momento, se escuchó como la puerta se abría y eran los chicos los cuales se les veía muy cansados y llorosos.
- Perdónanos Tenma.
- Mis niños.
- Ya lo recuerdo, no debo terminar de tocar ¿verdad? – la figura se volvió a sentar y a tocar el piano, eso hizo que los chicos gritaran con fuerza.
- ¿Qué pasó? – en eso, Tenma sintió como una de ellas lo intentó morder, eso le hizo comprender algo - ¡¿Fuiste tú el que los dejó así?! ¡Te ordeno que los liberes! ¡Ahora!
- No puedo, los traje directo del Inframundo, después de todo, debo darles un buen uso – la figura miró al castaño – no te pongas así, solo son carne podrida.
- ¡Te mataré! – la Armadura envolvió el cuerpo del castaño que estaba listo para luchar – voy a acabar contigo.
- Eso me gustaría ver – cuando el tipo tocó más el instrumento, los chicos se aferraron a Tenma mordiéndolo – eso es mis niños, sigan mordiéndolo hasta absorber toda su sangre.
El Caballero de Pegaso sabía que debía hacer algo pronto, no quería lastimar a sus niños, por lo que inmediatamente atacó el pianista, pero este ataque no sirvió de nada ya que solo logró revelar la verdad sobre aquel ser tan extraño.
- ¿P-Por qué posees una Armadura así? – el castaño por fin lo descubrió - ¿acaso tu eres…?
- El señor Thanatos me encomendó esta tarea, proteger el bosque de la Muerte. Mi nombre es Verónica de Nasu.
- ¿Un espectro?
- Recuerda esto Pegaso, un cosmos tan débil como el tuyo no logrará dañar este órgano y no solo eso, si lo haces, los amigos que tanto amaste y cuidaste… volverán a ser cadáveres. ¿Te parece correcto? – las palabras de Verónica le hacían enredarse más ya que no tenía idea de que hacer, hasta que…
- Tenma – la voz de los chicos llamó su atención y al ver sus rostros, quedó helado. De los ojos de los niños, caían lágrimas, como arrepintiéndose de lo que hacían, aunque esto era más porque estaban siendo manipulados y no querían hacerla daño a su amigo.
Aunque sus cuerpos fueran controlados, sus almas eran puras y estaban sufriendo mucho, incluso Tenma lo sintió. Si destruía el órgano, ellos volverían al otro mundo, pero no tenía opción, tampoco quería que siguieran sufriendo.
- ¡Lo haré por ustedes chicos! ¡Muerdan los más fuerte que puedan! ¡Meteoros de Pegaso! – el ataque dio de lleno en el órgano, el cual tenía una especie de barrera, pero el poder que Tenma le estaba dando era mucho.
- Será posible que él…
- ¡Vamos! – el grito final de Tenma hizo que el instrumento se destruyera y envió al Caballero y a los niños a un sitio blanco, como si fuera una especie de limbo.
Cuando el castaño abrió los ojos, miró como los chicos estaban como nuevos, pero supo que estas eran sus almas.
- ¡Tenma! Sentí por un momento el Universo. Fue grandioso.
- Lo lograste, ahora eres un Caballero.
- Adelante, Alone está esperando.
- Niños.
- ¡Adiós Tenma, nos volveremos a ver! – fue lo último que se escuchó de los tres chicos antes de desaparecer.
El Caballero miraba sus manos y solo pensaba en sus queridos niños que se habían esfumado.
- ¿Cómo es posible? Esa sangre sucia ensució mi manto – decía el espectro solo causando la furia mayor del Pegaso.
- ¡Que importa eso! – Tenma se fio vuelta quedando uno a uno con el espectro de Nasu - ¡Voy a terminar contigo!
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Continuará…