Hecho, está hecho…
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Ronaldo Ma Rru. Hablamos sobre el sueño que tuvo Tenma en el capítulo 20 cuando Sasha le dice que quiere tener hijos jaja. ¡Saludos!
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camilo navas. Pues sí, era yo, es que fue de un fic en el que la mayoría cree que solo puede haber parejas yuri y como metí un personaje masculino, se me vino la avalancha, pero de ahí no me importó y sigo publicándolo, se llama "Días fríos y cálidos" es de unas Mahou Shoujo, ahí lo tengo en mi muro. Dejando eso a un lado, Tenma tendrá una batalla dura contra Morfeo, pero apuesto que sabrás que poder oculto activará. ¡Saludos!
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nadaoriginal. Tenma lucha con todo y más cuando se trata de Sasha, bien dicen que un hombre enamorado es capaz de mover cielo y tierra por su amada jaja. El Cid es mi ídolo, por eso es mi Caballero favorito, veremos cómo le va. ¡Saludos!
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Sin más, comencemos…
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Mientras Tenma y Morfeo luchaban, el Cid de Capricornio seguía en su lucha contra el dios Ikelos, pero esta vez estaba aún más atento, pero incluso estando así, el dios siempre lo tomaba desprevenido y lo dejaba más lastimado.
- ¿Qué pasa Caballero? ¿Este es el límite de los humanos? – sin previo aviso, el dios logró darle en la espalda a Cid – los humanos y los dioses vivimos en distintos niveles.
- Mierda.
- No me digas que intentas escapar… ¡Ya es tarde!
- No es así – dijo en voz baja el Cid mientras esparcía la sangre de su herida por el campo de batalla – este instinto asesino que me dice mi brazo, hace que mi espada se…
- Idiota – Ikelos apareció detrás del Cid listo para darle el golpe final - ¡te mataré y no dejaré ni rastro de tu asqueroso cuerpo.
- Un poco más – la sangre que el Cid derramó hicieron que las cuerdas cuánticas de Ikelos se rompieran – afílate ahora.
- ¿Qué? – Ikelos sintió unas heridas, como si se tratase de un filo pasando delicadamente por la piel y lo hirió por primera vez - ¿Qué mierda fue eso?
- Tenías razón en algo Ikelos, nosotros los humanos tenemos un límite que no podemos traspasar – el Cid elevó su cosmos – pero si nos esforzamos, podemos alcanzar ese límite.
- M-Miserable – el dios solo pudo ver cuando el Caballero de Capricornio usaba su sangre en forma espiral y lograba de una vez darle un golpe al dios, incluso logrando destruir parte de su Sapuri – S-Si serás maldito, acaso derramaste tu propia sangre para revelar las fisuras de las dimensiones que usé, ¿fue eso? P-Pero si solo eres un humano…
Finalmente, un corte en el cuello de Ikelos, acabó con su vida y le dio la victoria al Cid.
Solo quedaban dos dioses del sueño.
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El ataque de Morfeo dio de lleno en Pegaso y lo mandó a dormir como antes de que se liberara, pero había varias cosas que le preocupaban al dios del Morfía.
- Y como le explicaré esto a mi señor Hypnos, primero Fantasos y luego Ikelos, pero creo que deberé encargarme yo mismo – mientras el dios se iba, se miró a Tenma que no renunciaba a la lucha contra el dios del sueño, pero el castaño se miraba como enredado en lianas con flores.
- Espera Morfeo… esto aún no termina.
- Tu cuerpo y alma se pudrirán en este sitio Pegaso, dentro de poco morirás – Tenma notaba como las enredaderas crecían más a su alrededor y eso le quitaba gran parte de su cosmos.
- Maldición…. Estas flores crecen demasiado rápido, no me… puedo concentrar – el castaño perdía la vista y sus fuerzas abandonaban su cuerpo y a eso sumándole las flores que crecían con él - ¿Q-Que le hizo a mi cuerpo?
Morfeo solo veía el espectáculo y notó como su ataque hacia efecto y finalmente, Tenma cayó rendido ante el poder del dios del sueño.
- ¿No lo sabes? Esas son las flores del Inframundo, por cada amapola que crezca en ti, perderás cada uno de tus emociones, convirtiéndote en un cascaron sin emociones, finalmente, te llevaré a un sueño eterno en Morfía. Nunca más, volverás a sentir felicidad o tristeza… Caballero de Pegaso.
- C-Cállate – el Caballero logró recobrar el conocimiento y se levantó elevando manifestando su cosmos – no pienso volver a ese lugar de sueños horribles.
- Eres muy sentimental, aunque… – el dios notó como las flores crecían más en el cuerpo de Caballero – no te has dado cuenta, pero acabas de perder la ira.
- ¿Q-Que? – Tenma notó la verdad en las palabras del dios y su cosmos disminuía - ¿Por qué? Mi cosmos... no puedo encenderlo.
- ¿Tienes miedo? No te preocupes, esa emoción se te irá, también, la preocupación, el terror, el pánico, la frustración, la tristeza, la nostalgia, el cariño, incluso el amor. Verás cómo las fuerzas te abandonan tanto que incluso no podrías ni siquiera caminar.
- El enemigo está al frente… pero cada vez se aleja más. La verdad… es que siento que ya no me importa nada, la verdad es que ya ni sé porque sigo luchando, esto es una maldita tortura, pero la verdad… es que yo no creo que esto importe ahora.
- ¡Claro que no!
- ¿Y esa voz? – Tenma notó adentro de donde había estado encerrado en el sueño y notó como estaban dos siluetas familiares para él. Una persona de cabello lila vestida con una Armadura de origen divino color dorado y también un joven muy parecido a él, pero con su Armadura de color blanco y grandes alas.
- Estás destinado a luchar contra Hades, recuerda que eres el Caballero de Pegaso, que desde la mitología has luchado contra este dios para evitar que conquiste el mundo. Además, has estado con Athena desde el inicio de las guerras, recuerda eso Tenma de Pegaso, tienes una misión que cumplir, debes luchar con todo y proteger a Athena a como dé lugar, además, nuestros sentimientos prohibidos por la diosa de la guerra.
- Sasha – susurró el castaño y supo que debía luchar, aunque no tuviera emociones por el ataque de Morfeo, sabía que luchaba por su amada Sasha, ella era la única chica que le daba fuerzas a luchar.
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- ¿Tenma? – la peli lila estaba desde sus aposentos y sintió el cosmos de su amado a lo lejos, aunque estuviera en otra dimensión – Tenma… ¡Tenma!
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- ¿Qué es esto? – Morfeo sentía un cosmos extraño proveniente de atrás de él – las amapolas siguen floreciendo, ¿Qué tantas emociones posee el Caballero de Pegaso? No, los pétalos no poseen colores, son todas blancas. ¿Qué significa esto? ¿Qué es lo que brote de él?
Sin más, un cosmos completamente extraño emanó de Tenma, incluso apareciendo una especie de alas detrás de su espalda y en menos de un segundo, su Armadura sufrió un cambio increíble poniéndose blanca con las alas gigantes y mostrando un semblante maduro.
- ¿Qué es ese cambio? Su Armadura… ya veo – el dios finalmente comprendió el asunto – ahora entiendo todo, por eso es que el señor Hypnos tenía tanta ambición en capturarlo, esa fuerza de voluntad de levantar su puño contra los dioses, lo ha usado para levantarse y para proteger a la diosa Athena desde tiempos mitológicos. El Caballero Pegaso realmente es alguien impresionante, ¡muéstrame tu verdadero poder!
- … - Tenma no dijo nada y solo encendió su cosmos a más no poder y cargó su mejor ataque en su puño derecho y lo llevó hacia el dios manifestado en los Meteoros de Pegaso.
- ¿Cómo? ¿Cómo es que soy vencido… por un vulgar humano? – Morfeo recibió un poderoso ataque de parte de Tenma y destrozó su Sapuri y antes de fallecer, miró fijo al castaño – y-ya veo, esa emoción… ese sentimiento de amor por la diosa Athena… está incrustado en tu alma, aunque ese amor… es prohibido… maldito.
Finalmente, Morfeo cayó muerto víctima de los ataques de Pegaso, aunque justo cuando el cuerpo del dios del sueño desapareció, Tenma perdió el estado divino que poseía, pero la verdad es que no recordaba nada.
- ¿Q-Que pasó aquí? ¿Y las flores? ¿Dónde está Morfeo? – el chico estaba muy confundido, pero más cuando las columnas en los que los sueños de varias personas se comenzaron a destruir y las almas volaban y justo, aparecía el Cid de Capricornio.
- Tal parece que las puertas están destruyéndose y las almas de las personas atrapadas se están yendo, parece que Morfeo fue derrotado – el peli negro fijó su mirada en una puerta que aún no había sido destruida – esa debe ser en la que está el alma de Sísifo.
Tenma buscaba una salida para ese sitio, pero cuando notó como una enorme columna de piedra venía hacia él, no reaccionó a tiempo, pero unos cortes dorados destruyeron la enorme columna y detrás de ella, apareció con elegancia el Caballero Dorado.
- ¿Una Armadura Dorada? – Tenma quedó mirando fijo al hombre - ¿eres un…?
- Soy el Cid de Capricornio, Pegaso, no pensé que te encontraría aquí.
Aunque la charla fue escasa camino a la puerta en donde estaba el Caballero de Sagitario y cuando llegaron, en la puerta se miraban imágenes de Sísifo en el pasado. Cid y Tenma miraban con curiosidad eso, en especial el castaño.
- ¿Por qué podemos ver a Sísifo en mi pueblo natal?
- Este es el sueño de Sísifo, debe ser el día que encontró a la diosa Athena – el Caballero miró hacia arriba en el que se miraba una silueta de Sísifo – aunque Morfeo haya muerto, el alma de Sísifo sigue atrapada en esta puerta de los sueños. ¡Sísifo de Sagitario, necesito que vuelvas al Santuario! ¡Te liberaré a como dé lugar!
- ¿Esa es tu misión? – Tenma notaba el cosmos elevado del Cid y más como estaba empleando el poder de su espada a más no poder y hacia cortes a más no poder.
- ¿Por qué no hace efecto? – finalmente, el Cid cayó al suelo algo débil.
- ¿Estás bien Cid?
- La espada que pudo matar a dos dioses del sueño… no puede con esta puerta. ¿Será este un sitio en el que solo los dioses pueden entrar? Estoy tan cerca y a la vez tan lejos, el alma de mi amigo Sísifo está aún atrapada.
- Ningún humano tiene la capacidad para abrir esa puerta – habló una voz la cual llamó la atención de ambos Caballeros – esta puerta fue sellada por voluntad misma del Caballero de Sagitario.
- ¿Quién está ahí?
- Me presentaré – de una puerta extraña, apareció el último de los enviados por Hypnos – Oneiros, el dios del sueño.
- ¿Por voluntad propia dices? ¿Me estás diciendo que Sísifo no quiere que entremos?
- Exacto, y debes saber cuáles son sus razones por las que hace esto ¿verdad?
- … - El Cid no respondió, pero sabía la razón exacta por la que Sísifo sufría en su mente constantemente – veo que aun te culpas por separar a Athena del Caballero de Pegaso y sus amigos. Todo por llevarla al Santuario, pero hasta el día de hoy, no sabes si existe lo correcto y ellos lo usan en contra nuestra.
- Sísifo de Sagitario deseó que su alma entrara por voluntad propia al mundo de los sueños.
- ¿De qué estás hablando?
- Lamento decirlo Capricornio, pero no hay nada que puedas hacer al respecto.
- Tal vez sea verdad, sin embargo, solo hay una persona que lo puede sacar – sin más, el Cid lanzó una ráfaga de su espada hacia el muro que encerraba el mundo de los sueños.
- Parece que estás muy débil Caballero, ni siquiera has podido darme.
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Lo que Oneiros no sabía, es que el cosmos lanzado por Cid era una especie de mensaje hacia Athena, la cual recibió mientras estaba con Hakurei en el sitio en el que el cuerpo de Sísifo estaba.
- ¿Ocurre algo diosa Athena?
- He sentido algo en el cosmos del Cid, tal parece que han derrotado a tres dioses del sueño y el mundo de estos se colapsa, además, Tenma está con él sano y salvo – esto último lo dijo con alegría ya que sabía que su amado Caballero estaba bien.
- Si alguien podía hacerlo ese era el Cid de Capricornio.
- Aunque, Sísifo se rehúsa a liberar su alma del mundo, no entiendo porque – la diosa miró al Caballero de Sagitario – no desperdiciaré esfuerzo que el Cid ha hecho, por lo que yo iré personalmente.
- Aunque el mundo de los sueños se debilite, es peligroso diosa Athena.
- Si perdemos esta oportunidad, nos será imposible recuperarlo, por lo que iré yo personalmente a salvar el alma de Sísifo.
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Continuará…