¡HOLA MIS BELLAS! Aquí estoy, por fin, con un capi nuevo.
Capi, cargadito... ya os lo digo ;-)
Me han comentado que añoráis mis agradecimientos, así que hoy que tengo un poco más de tiempo... Aquí van:
phoenix1993: Me alegro que te encantara. Espero seguir leyéndote. Gracias por comentar. ¡Bienvenida!
Indignada24213: Gracias por leer y comentar. Siento mucho hacerte esperar, pero aquí tienes el capi. ¡Bienvenida!
RINI CHIBA: Si, Bella le dio una gran lección a Elish, la cual, como explicó Rose, no está acostumbrada al "no". Tranquila, no tendrás que pagar nada por leer esa escena... Os la daré gratis, ¡jeje! Gracias por comentar. Y ¡bienvenida!
magic love ice 123: Edward se enteró de como fue el accidente de Bella... Su madre la tiró, no a propósito, por las escaleras. Lo del bebé... se sabrá, pero no os cuento cómo. Lo dejo en el misterio. Gracias por comentar y estar en mis otros fics.
Ninacara: Me alegro de que te gustara y te divierta, de eso se trata. Gracias por comentar.
Mapi13: Gracias a ti por comentar y... gracias por estar en todos mis fic's.
Wenday 14: Si, en solo un fin de semana, han creado lazos. Ha sido muy intenso. Gracias por comentar y estar en mis otros fics.ç
Maribel 1925: ¡Jajaja! Si, están en una lucha de titanes. Pero siiiiiiii... lo que los hace pelear es ese deseo que no quieren dejar salir. Gracias por comentar y ¡Bienvenida!
alicecarolina11: ¡Oh, si! Edward encabeza esa lista... La mía también. Este, es el Edward más "desagradable" que he escrito. La relación entre Bella y Elish es preciosa e intensa. Gracias por comentar y estar ahí, en mis fics. AQUÍ TIENES LOS SALUDOS ;-)
Maryluna: Gracias a ti por comentar.
Jade HSos: Gracias a ti por comentar y estar ahí en mis demás fics. El capi de "La Protegida" está en realización. Estoy con el final del capítulo, en cuanto tenga tiempo para terminarlo y pulirlo lo subo, no te preocupes.
Adriana Molina: ¡Ohhh... EXCELENTE! Mil gracias por la expresión. Mil gracias a ti por un coment tan bonito. Gracias por comentar y estar en los demás fics.
Adriu: La relación de ambas se ha creado rápido e intensamente. Os encantará la complicidad que tendrán pronto. Mil gracias por comentar y estar en el resto de fics. Un beso para ti también, desde España.
Diana Sabate: Gracias por eso de "recuperar mi esencia". Me ha llegado al alma. Espero no volver a perderla, y si lo hago, espero que me lo vuelvas a decir. Me alegro que te encante y que sigas leyendo. Gracias por comentar y estar en mis otros fics.
jupy: Elish no le va a poner las cosas difíciles a Bella a "mala fe"... Solo que la lleva a situaciones, para Bella, algo tensas ya que quiere que se integre en la familia. Edward es un sufridor nato... ¡jajaja! Pero este Edward se sale ;-) jajaja. Gracias por comentar y que estés en mis otros fics.
ivanayazu: GRACIAS por las felicitaciones y porque estés obsesionada... jajaja. Eso es un gran pago para las que escribimos. Gracias por comentar y por tus preciosas palabras.
Aunque me encantaría hacer esto cada vez que publico, hoy como he sacado un ratito y la niña se me ha dormido relativamente pronto... y una de mis seguidoras me lo ha pedido... Otras veces, pondré solo algún comentario suelto. Según como vaya de tiempo... ¡Ufff que strés del demonio! (jajajaja)
**Recordemos que en el anterior capi acaba con que Bella y Elish pidieron comida al bar de Mou, la única hamburguesería de Forks. Y Jake tuvo que poner en su sitio a Mallory, el cual tiene una vieja rencilla con Edward.**
CAPÍTULO 8
Tal como habían conspirado, hicieron a Jake "tragarse" la película de "La Bella y la Bestia". Aunque al final, le gustó ese rato juntos los tres, por mucho que no lo fuese a reconocer jamás.
A parte de que consiguió sacarle las risas a las dos chicas, con sus comentarios sobre la película.
Comentarios que solo él, podría soltar y hacerlas reír de esa forma.
Ese rato juntos, consiguió unir un poco más a Bella y a Jake; le había parecido un gran chico, a parte de muy gentil al subirla y bajarla de la reserva, pero no habían compartido más que esos ratos en el coche.
Pero aunque su opinión era buena respecto a él, la relación un tanto "empalagosa" con Elish no acababa de convencerla demasiado.
"La Bestia me recuerda al "Señor Ogro". A lo mejor la película está basada en él" Pensó con gran sarcasmo. "Yo siempre soñaba que era "Bella"... ¿Mi bestia será Edward? - palpitación - ¡Joder! Sácate esa idea dela cabeza, ¡pero yaaaaa!"
El pensamiento entró en la mente de Edward, que como el resto, estaba pendiente de la tarde de Disney y risas de las chicas.
No supo si le había molestado o hecho gracia; puede que un poco de ambas partes. Pero esa palpitación del corazón de Bella, y su autoriña lo habían dejado desconcertado.
·
Cuando acabó la película, Emmet hizo acto de presencia en el piso de Bella. Tras picar y darle acceso, la cara simpaticona del enorme vampiro, se asomó por la puerta.
- Vengo a salvar a Jake… ¡jajaja! ¿La película ya acabó?
- Ahora mismo - Contestó Elish.
"Ni que hubieses estado contando los minutos y los segundos…"
- Vengo a proponeros jugar a la Wii - Emmet observó como los ojos de Bella se agrandaban y llenaban de ilusión. - ¿Sabes lo que es? - Preguntó con inocencia.
- ¡Claro! Me encanta. ¿Qué juegos tenéis?
- Todos. - Respondió el vampiro contagiado del ánimo de la chica.
- ¡Genial! Hace tiempo que no jugamos todos juntos. - Elish comenzó a dar brincos en el sofá, ante las risas de Jake.
- Si… la última vez, recuerdo el trágico final que sufrió la consola - Le recordó Jake entre risas.
- ¿Tienes mal perder, Cullen? - Lo retó Bella. Por los ojos de Emmet cruzó un brillo malicioso.
- Prepárate a morder el polvo. - Bella le sonrió arrogante.
- Dame dos minutos y bajo. - Pidió Bella, saltando del sofá cargada de energía.
- Emmet… recuerda que Bella es humana y puedes matarla - Le susurró Elish acercándose a su tío, una vez Bella se metió en su dormitorio.
- Si, Emmet, que te veo muy emocionado. - El vampiro movió una mano, restándole importancia.
·
·
Cuando llegaron al salón, todos estaban mirando para Emmet con ojos de desaprobación.
- Emmet… - lo llamó Carlisle condescendiente. - Ten cuidado… Si le das un golpe a Bella que no controles, puedes herirla.
- O matarla. - Añadió Alice.
Elish jadeó, ganándose las miradas de todos.
- Creo que no es buena idea jugar a esto. - Los nervios de la niña eran más que evidentes.
- ¡Oh, vamos! Tendré cuidado… - Rodó los ojos.
- Querido… - Rose le clavó la mirada con un deje de advertencia.
- Si. Tendré cuidado. - Dijo, ahora si, en serio.
- ¿Tendrás cuidado, con quién? - Preguntó Bella entrando en el salón casi como un caballo al trote.
El reto del juego había sacado su carácter más genuino y todos los Cullen, tras el pequeño susto de que entrara sin que se percataran de su presencia, rieron divertidos.
Se había puesto una coleta bien hecha y se cambió el fino suéter por una camiseta de licra. Preparada para jugar.
- No dejes que te riñan, Emmet… No soy tan delicada - alzó las cejas divertida - Solo… - se mordió el labio - Ten cuidado con mi rodilla. - Mientras lo decía, se frotó su rodilla derecha.
- Carlisle nos comentó que te habías operado de ella. - Le comentó Jasper. - ¿Te duele?
Bella apretó la mandíbula con fuerza. Eso era un tema que no le gustaba tratar.
- A veces… - Casi susurró. - Aunque me la operaron dos veces, no quedó bien.
- A Bella no le gusta hablar de eso. - Soltó en voz alta Elish. - Tuvo que dejar de bailar por eso. - Bella no pudo más que sonreír, al verla saltar en su defensa.
- Bueno… no tardaría en verme obligada a dejar de bailar. Por lo menos ballet. - Se inclinó de hombros. - Pero… - frunció los labios en un gesto exacto a su Tío Charlie. - me limitó a muchas otras cosas. - La cara de Bella se volvió infranqueable; el tema, realmente, no le gustaba nada.
- ¿Por qué? - Preguntó inocente y curiosa. Bella se mordió el labio y se sonrojó.
Rosalie soltó una carcajada, porque había adivinado el porqué.
- Elish - intervino Esme - No seas curiosa. - La regañó.
- Mi físico no encajaba. - Contestó Bella, negando hacía Esme, de que no riñera a la niña.
- ¿Qué? Pero… si te he visto en los videos y eras súper delgada.
- Pero luego ya no era tan delgada… - Bella la miraba apretando los labios, y sintiendo como se sonrojaba al darse cuenta de que iba a tener que decirlo en voz alta.
- Porque tenía demasiado pecho, Elish. - Rosalie le evitó a Bella el decirlo; pero no por eso, evitó los coloretes que le salieron a la chica.
Elish pestañeó varias veces, confusa. Sus ojos se quedaron "pegados" a esa parte concreta de la anatomía de su tutora.
Se había fijado en que el tamaño de los pechos de Bella, era mayor que el de cualquiera de las mujeres de su familia, y eso le desató una gran curiosidad.
Ella no fue la única que se quedó mirando hacía esa "parte concreta" del cuerpo de la señorita Isabella, ya que la camiseta de lycra con la que se había ataviado, resaltaba su busto de una forma imposible de obviar.
- ¡Oh, vaya! - Exclamó. - ¿Por eso deberías haber dejado de bailar? - Preguntó con el ceño fruncido.
- Si. Una bailarina de ballet, debe ser… - Bella alzó los ojos, buscando una expresión que la niña entendiera; cuando volvió a girar la mirada hacía Elish, se encontró con Alice. - Como tu tía Alice. Muy, muy delgada, y… con poco pecho. Incluso menos que ella. Sin ofender - Se disculpó ante Alice, la cual movió al cabeza disculpando a Bella. - Otro día, te pondré videos de bailarinas, adultas, para que veas sus cuerpos. Algunas, fueron compañeras mías en la academia donde me formé.
- ¡Oh, si! Me encantará. - Elish cambió su gesto facial, a uno de curiosidad no resuelta. - Bella… ¿Te van a crecer más los pechos? - Bella abrió los ojos de golpe.
Toda la sala se quedó pasmada ante semejante pregunta, mirando de hito en hito entre Elish y Bella, suponiendo que a esta última, no le gustase la indiscreción de la niña; pero como venía siendo habitual, Bella volvió a sorprenderlos, estallando en carcajadas.
- ¡Jajajaja! No… O eso espero… ¡jajaja! ¡Cómo para que me creciesen más! - De forma inconsciente y totalmente inocente, Bella se señaló los pechos, haciendo a la fauna masculina mirarla embobados.
Habían sido discretos y Bella no había "pillado" ninguna mirada "directa" hacía sus pechos; suponía que se los habían mirado… ya estaba acostumbrada, pero esa vez, los pilló a todos. Inclusive a Carlisle.
- Vamos… Son solo tetas. - Soltó de forma chistosa, haciendo a Emmet estallar en atronadoras carcajadas.
- Si, pero menudo par…
- ¡Emmet! - lo reprendió Esme, evitando que soltara lo que tenía en la boca. Rosalie meneó la cabeza con diversión.
Era conocedora de la "pasión" de su esposo por esa parte de la anatomía femenina. Nunca le tenía en cuenta esos comentarios, porque sabía que lo decía como un adolescente, y que jamás le faltaría al respeto; era una curiosidad casi obsesiva por esa zona concreta.
Bella se rió con Emmet y Esme, y se agachó a la altura de Elish.
- Tus tías y tu abuela, son mayores que yo, y estoy segura de que llegadas a una edad, tampoco les crecieron más. - Bella se acercó más a Elish, casi hablándole al oído. - Creo que tendrás unos bonitos pechos, y seguramente tendrán un buen tamaño.
- ¿A sí? ¿Y tu cómo sabes eso? - le dijo con pucheros la niña.
- Tu madre, Amelia, tenía el pecho grande y su madre, también lo tiene grande… Y eso, suele heredarse. - Le guiño un ojo.
- ¿En serio? - La pregunta pilló desprevenida a Bella.
·
"¿Elish no ha visto fotos de su madre? ¿Qué coño pasó con ella? Hay tanto secretismo… Es como si no se pudiera ni mencionar su nombre."
Edward se tensó ante el pensamiento de Bella; pero era normal que se diese cuenta de ese detalle.
Ella había mencionado más a Amelia, en 30 horas que llevaba en la casa, casi que ellos en dos años.
·
- Bueno… ¿vamos a jugar, o qué? - Intervino Emmet al ver que Edward se ponía tenso.
- ¡Oh si! - Bella se alzó de un salto. - Casi había olvidado que vas a perder, Cullen. - Bella miró hacía Emmet alzándole las cejas de manera retadora.
Todo pensamiento ajeno al juego, quedó en el olvido.
De primeras, optaron por un juego "familiar": El Pictionary".
Era "tranquilo" y divertido. Bella, pese a ser la única humana, no se quedó atrás en las pruebas e iba de las primeras.
Como de costumbre en esos juegos, Edward y Alice eran los ganadores indiscutibles.
Emmet estaba comenzando a aburrirse y llenarse de ansiedad, por no poder jugar a algo que retara, algo más… agresivo.
Pero pronto su aburrimiento se vio paliado ante una salida de tono de una enfadadísima Bella, que veía "injusto" como Edward y Alice lo ganaban todo.
- ¡Oh, vamos! - Exclamó airada, dirigiéndose a Edward directamente. - ¿Qué me lees la mente, o qué? - Le soltó mirándolo envenenada - ¡No puede ser que lo ganes todo! - Su voz se alzó un par de octavas, dejando más que claro su enojo.
Edward se quedó pasmado ante semejante reacción.
"Con lo que me jode perder… y más contra ti"
Todos los presentes se quedan enmudecidos, solo Emmet tenía cierta guasa en su cara, pero se mantenía callado, esperando la reacción de Edward.
Jasper y Carlisle estaban atentos por si tenían que mediar, en el caso de que Edward respondiera mal y aterrorizara a la chica.
Pero las cosas no sucedieron así, si no que él alzó una ceja mostrando una superioridad y arrogancia exageradas, casi rozando lo cómico.
- ¿Qué pasa Srta. Isabella? - le dijo con un claro deje de guasa - ¿No te gusta perder? - La miró fijamente. Ella, esa vez, no apartó los ojos de los suyos.
- No. Nunca. En nada. - Separó con claridad cada palabra.
- Pues deja que te de una lección de vida - Edward usó un tono condescendiente más que exagerado; a propósito. - Siento decirte, que en la vida, no se puede ganar siempre.
- ¿Qué tu me vas a dar a mí, lecciones de vida? ¡Vamos! - Soltó con desdén, meneando la cabeza altanera. - Ni que tuvieras una experiencia en la vida tan amplia - Edward le sonrió de lado, pero su sonrisa arrogante.
- A lo mejor te sorprendería. - Contestó con la voz profunda y sus ojos fijos en los de ella.
- Puede que te sorprendiera yo a ti… Pero... - Alzó la cabeza vanidosa - Yo soy poco más que una adolescente, según tu, claro. - Lo miró con los ojos achinados; encarándolo. Casi retándolo. - ¿Qué experiencia puedo tener en la vida, verdad? - Su voz cambio a una angelical, extremadamente fingida.
- ¿Qué tal si cambiamos de juego? Lo digo antes de que vayáis a mataros.
Ambos giraron sus cabezas hacía Emmet, y cuando volvieron a mirarse, ahora con la "ira" más despejada, se dieron cuenta de que se habían inclinado el uno al otro mientras discutían.
Edward permaneció en su posición con gran dignidad, pero Bella se sonrojó furiosamente y se quitó de un brinco.
- Yo… - El pecho de Bella comenzó a subir y bajar de forma nerviosa - Lo siento… Me he dejado llevar, sin pensar. - Meneó la cabeza, a modo de auto-regaño.
"Pero, Bella… ¿Estás tonta, o qué te pasa? Es tu jefe… Pero, ¡Dios! Este hombre me desquicia."
- Venga… busquemos otro juego. - Emmet que se ya se había levantado, le tendió la mano a Bella para ayudarla a levantarse.
- Si, será lo mejor… - murmuró Bella mirando hacía un sonriente Emmet.
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Gracias a que le tenía la mano tendida no calló de bruces contra Edward, ya que al apoyar su rodilla mala, esta le falló al tenerla doblada en mala posición durante tanto rato.
Aun con la intervención de Emmet, sujetándola firmemente por su mano, Edward tuvo que alzar la suya y sostenerla del codo ya que se iba de bruces, directa encima de él.
Y lo que menos necesitaba para su "mente calenturienta" era tener el cuerpo de Bella sobre el suyo.
- ¡Joder! - Masculló entre dientes Bella, mostrando un gesto de dolor.
- ¡Bella! - Elish se levantó de un brinco, un "poquito" más rápido de lo debido.
Por suerte, Bella estaba más atenta a su rodilla que a la niña.
Todos miraron hacía la niña con los ojos desorbitados ante su reacción poco cuidadosa.
Obviando las miradas reprobatorias de la familia, se acercó a Bella y la agarró por su ante brazo. Edward seguía con su mano en el codo de Isabella.
Carlisle se levantó acercándose a Bella, sumamente preocupado.
- ¡Dios! ¿Estás bien? - La preocupación de Elish hizo apretar los ojos a su tío Jasper.
- Claro cielo… No te preocupes - la miró Bella con gran dulzura.
- ¿Bien dices? Tu no te viste la cara. - Elish bajó la mirada hacía la rodilla de Bella. - Te duele mucho más de lo que dices. - Bella se mordió el labio, sobrepasada por los puros y gentiles sentimientos de Elish.
- Un poquito más - Inclinó los hombros restándole importancia.
Bella se enderezó, y observó como los dos varones Cullen la tenían sujeta; uno por la mano y el otro por el codo, a parte de la manita de Elish en su antebrazo.
- Bueno… Creo que no había posibilidades de que cayera, con está super sujeción que me ha salido en los brazos - Rió.
- Es que te vi inclinarte hacía el suelo… y no lo pensé. - comentó Emmet mirándola con un gran cariño y preocupación. Como un hermano mayor cuando te haces daño. Bella le devolvió el gesto tierno.
Bella giró para el otro lado, mirando primero la mano nívea y helada de Edward y luego a él, a la cara. A los ojos.
El instante fue eso… Un instante, pero lo suficiente para que ese segundo, fuese intenso. Pudo jurar que en el punto donde la mano de Edward estaba tocando su piel, quemaba.
- Si querías atentar contra mí, por ganarte, podías ser un poco más sutil, ¿no? - Le dijo Edward fingiendo decirlo en serio; quedaba clara su broma ya que casi se le escapa su sonrisa torcida. Se quedó en un pequeño alzamiento de sus labios.
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Alice que estaba atenta, como el resto, se percató que era la segunda vez que a Edward se le escapaba "su" sonrisa.
Dos años y medio sin verla y ahora… dos veces en el mismo día (aunque se quedara en un amago) y dirigida a la misma persona: A la misma mujer.
Alice y Jasper se lanzaron una mirada de entendimiento.
El empático, también había estado pendiente de los sentimientos de su hermano y había notado algo "raro" en ellos cuando iban dirigidos hacía Bella.
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- Si quisiera hacerte algo, no lo haría delante de tantos testigos. - Le contestó ella sonriéndole traviesa y una ceja ligeramente alzada.
- ¿Sin testigos? - Respondió él de vuelta. Bella asintió.
- Por supuesto… un trabajo limpio… como dice la mafia… ¡jaja! - Al final, Bella no pudo aguantar más y se le escaparon las carcajadas.
- Bella - Carlisle acortó los pasos de distancia entre él y la chica, y la miró con clara preocupación.
- ¡Uy! Creo que se avecina momento doctor - Soltó ella con vocecita infantil, llena de broma. Carlisle la miró a los ojos, inclinando su cabeza; casi como un regaño.
- Me gustaría examinarte esa rodilla. - Declaró directo. Bella suspiró.
- Carlisle, me han operado dos veces, y han sido unos post operatorios terriblemente dolorosos - Suspiró - No voy a pasar una tercera vez por quirófano a no ser, que llegue el día en que no pueda caminar. - Su voz cargada de seguridad.
- No te estoy hablando de operaciones. - La contradijo - Te hablo de examinarla. De hacerte una resonancia. Eso, señorita contestona y quejica - Ambos sonrieron a eso - no duele. Además, me gustaría, si no te molesta, que me autorizases a mirar el historial sobre esas operaciones…
- ¡No! - Bella no lo pudo evitar, y casi interrumpiendo a Carlisle, alzó la voz, negándose.
Todos se quedaron asombrados por semejante reacción. No les pareció mal, si no que se sorprendieron ante tal rotunda negativa.
"No hace falta que averigües que mi lesión de rodilla fue provocada porque mi madre me tiró por las escaleras de casa. Aun puedo sentir como me zarandeó mientras discutíamos porque quería cursar secundaria en otro sitio, salirme de aquella academia… Se que no quería tirarme a propósito, pero… empujarme de aquella manera…"
Edward abrió los ojos, incluso la boca, y soltó un bajo jadeo ante semejante descubrimiento. Entonces entendió porque Bella no quería hablar sobre su rodilla y el porqué de su negativa a Carlisle.
Siendo discreto, movió la cabeza hacía Carlisle, indicándole que no la presionara.
- No te preocupes… Olvida lo que he dicho. - Se disculpó el patriarca.
- No… - Gimió Bella, apretando los ojos con pesar. - Lo siento. Siento mucho mi salida de tono. - Carlisle negó con la cabeza, pero Bella no se detuvo. - Este tema, es difícil de tocar para mí, fue un… accidente que no me gusta recordar. - Los ojos cargados de súplica, hicieron enternecer al vampiro.
- Solo quería ayudar.
- Lo sé. Si quieres, podemos hacer esa resonancia, pero… por favor, no indagues más, ¿de acuerdo?
- Por supuesto.
Carlisle no pudo evitarlo, y acortó los dos pasos que los distanciaban; sin más, rodeó a Bella por los hombros con uno de sus brazos, dándole un ligero abrazo. Gesto que Bella agradeció, suspirando con ternura.
No estaba acostumbrada a ser tratada con tanto mimo. Desde que su padre falleciera, incluso antes ya que estuvo enfermo meses, no había recibido tales atenciones afectivas y por muy dura que quisiera ser, o aparentar, no podía evitar llenarse de ternura ante ellas.
Y con Carlisle en concreto… Era tan paternal. Tan cercano, dulce y gentil… No, gentil no; cariñoso. Así era el patriarca Cullen con ella.
"Te pareces a mi padre tanto… Él era así. De apariencia un tanto seria, pero con una mirada dulce y tierna. Porque era así… Y tú, eres igual."
El pensamiento iba cargado de tanta sinceridad y cariño hacía su padre, que Edward tuvo que controlar no dejar escapar un suspiro al escucharlo.
Elish se arrimó a su padre y ambos se miraron con afecto.
"Creo que Bella ha sufrido mucho en su corta vida. ¿A qué si?"
Edward miró para su hija y asintió con un discreto movimiento de cabeza.
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- ¡Eh, eh! No nos pongamos ñoños - Intervino Emmet muy acertado.
- Si. Elijamos otro juego. - Añadió Jasper acercándose.
- ¿Estás mejor de la rodilla? - Alice se acercó también a Bella mostrando su preocupación. - ¿Prefieres tumbarte un rato? ¿Poner la pierna en alto?
- No, no… Estoy bien. Simplemente que no me he dado cuenta de que la tenía retorcida y al apoyarla… Me ha fallado. - Ladeó los labios en un gesto pillo. - No es que quisiera "atentar" - recalcó - contra nadie. - Edward no pudo evitar sonreír ante eso.
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"Hubiese sido divertido verte reaccionar si Bella… o mejor dicho, "La Señorita Isabella", llega a caer sobre ti, hermano"
El pensamiento jocoso y cargado de malicia (divertida) de Rosalie, hizo a Edward rodar los ojos.
Él mismo lo había pensado en el mismo momento en que vio a Bella abalanzarse sobre él, al perder el equilibrio. Por supuesto que ella no hubiese tocado el suelo, eso estaba fuera de contemplación, pero el tenerla tan cerca… Entre sus brazos…
El simple pensamiento lo puso ansioso y su rostro comenzó a descomponerse en una mueca rozando la ira.
Elish a su lado, le alzó una ceja regañando a su padre, el cual cambió su gesto a uno más tranquilo.
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- Bueno… ¿Qué juegos tenéis? - La voz de Bella hablando con sus hermanos, lo sacó de sus pensamientos y angustias.
Emmet, Jasper y Alice se pusieron junto con Bella a mirar la infinidad de juegos que tenían, dejando a Bella alucinada.
Esme, Carlisle y Rosalie se acomodaron en los sofás, ya que preveían que les iba a llevar bastante tiempo el mirar y decidirse por otro juego. A parte de que los patriarcas, optaron por ojear una revista de decoración que Esme quería enseñarle a su esposo para unas pequeñas reformas.
Edward y Elish quitaron el juego de la video consola, mientras observaban entretenidos como Bella estudiaba los juegos, eligiendo uno nuevo.
- ¡Oh, Dios! ¡Este! - Gritó Bella, casi asustando a los presentes. La chica tenía la caja de un juego entre sus manos y daba brinquitos emocionadísima.
- ¿Ese? - Emmet sonreía igual que un niño pequeño. - ¿En serio quieres jugar contra mí, a ese juego?
- ¿Y por qué tenemos que jugar uno contra otro? Lo guay es jugar juntos y pasar misiones. - Le contestó la chica dejando a Emmet sin palabras.
- ¿Juntos? - Repitió él casi en shock. Nadie quería jugar con él a nada, por lo competitivo que era. Bella asintió moviendo la cabeza igual que si le hubiera dado un tick nervioso.
- ¿Qué juego has escogido para entusiasmar tanto a tío Emmet? - Preguntó Elish acercándose a Bella. - ¿En serio te gusta ese juego? - Le preguntó riéndose.
- No me lo digas… Has elegido el de matar zombies. - Rosalie miró hacía Bella. Su rostro siempre con ese toque arrogante, ahora observaba a Bella con atención y… aprecio.
El que esa chica hubiese ilusionado a su esposo así, la había enternecido.
- ¡Oh, Dios! Mi pobre salón. - el lamentó de Esme tenía una parte teatral, y otra bastante realista. Solo esperaba que Emmet se contuviera al ser Bella humana.
- Tranquila Esme, cuidaremos de tu salón - le contestó Bella mirando divertida hacía Esme.
- Yo también juego - Se unió animada Alice. - Movamos algunos muebles.
Alice tomó una mesa, que parecía bastante pesada y, fingiendo esfuerzo, comenzó a moverla, mientras Emmet movía otro mueble.
"Debería ir a ayudar a Alice, pero… la ginecóloga dijo que nada de pesos en al menos 4 semanas…:
"Aunque dejes de manchar y te encuentres fuerte, no tomes pesos ni hagas esfuerzos e semanas. Tienes muchos puntos internos tanto en tu cuello uterino como en la arteria. Un sobre esfuerzo antes de tiempo, podría causarte una fuerte hemorragia y morir en cuestión de minutos" Las palabras de la cirujana obstetra entraron en la mente de Bella como un huracán.
El recuerdo de esa conversación, dejó a Bella clavada en su sito, con la cara pálida y la respiración agitada.
El que se quedó también pasmado, fue Edward.
¿Qué significaba eso? ¿Qué problema, con lo joven que era, habría tenido para necesitar una operación, por lo que parecía, tan delicada y grave? ¿Eso tendría que ver con sus pesadillas?
Edward, siendo muy discreto, se acercó a su hermana, y entre ellos, se lanzaron una mirada cargada de complicidad.
Al pasar al lado de Bella, Edward le habló casi como si no fuese directamente para ella:
- Aunque no lo crea, Sta. Isabella, soy todo un caballero.
Edward frunció el ceño, confuso; no entendía porqué le había dicho eso; porqué le había dado esa explicación a la chica. Salió de sus labios sin darse cuenta, hasta que lo había dicho en voz alta.
- No lo he dudado en ningún momento - Contestó Bella en un susurro, el cual no debía ser escuchado por Edward, si fuese humano. Pero sus finísimos oídos pudieron oírlo sin ningún problema.
·
·
Tras algo más de una hora, Carlisle tuvo que ponerle fin a la partida regañando tanto a Emmet como a Bella.
Ambos se habían metido en el juego como pareja, y no dejaban de darse gritos el uno al otro, cual comando militar. Alice se rindió de seguir jugando, ya que la ignoraban y no la dejaban meter baza.
Elish no podía parar de reír, primero de observarlos jugar y después, con caras de corderitos ante la regañina del abuelo.
Jasper sonreía y meneaba la cabeza de vez en cuando; él captaba los sentimientos puros de felicidad y diversión, incluso los de sincera aceptación mutua entre su hermano y la humana.
Y Edward, no pudo aguantar la sonrisa, incluso soltó alguna tímida carcajada que intentó disimular.
Entre Bella y Emmet habían llenado el salón de risas y diversión, pero también de gritos descontrolados.
- Chicos… No podéis jugar así. Parecéis salvajes. - Los reprendió el patriarca. Ambos asintieron, bajando la mirada con caras de circunstancia.
Bella estaba completamente abochornada y a Carlisle, al final, le dio pena.
- Bueno… Está bien - rodó los ojos mientras meneaba la cabeza. - Ha sido divertido veros jugar, pero para otra vez, debéis controlar un poco, ¿de acuerdo? Emmet… - lo llamó.
- Si, tendremos más cuidado. - Contestó Emmet con voz suave; en cuanto Carlisle se giró, le guiñó un ojo cómplice a Bella, la cual le devolvió un alzamiento de cejas.
- Os he hecho la cena - Comentó Esme entrando en el salón, sonriendo maternal. - Ir a asearos un poco y pasar a la cocina.
- ¡Oh, gracias Esme! Has sido muy amable. - Bella se quedó avergonzada de que Esme tuviera que hacer la cena mientras ella jugaba. - Lo siento… se me ha ido el tiempo jugando con Emmet. - Las mejillas de Bella brillaban en un intenso tono carmesí.
"¡Joder! Bella, no estás aquí para divertirte… Lo mío no tiene nombre… Pero, ¡ha sido tan divertido! Hacía muchísimo tiempo que no lo pasaba tan bien.
- Querida, tu trabajo no es cocinar. Ayer te dije que lo hicieras, pero como una actividad con Elish, no porque sea tu obligación. - Explicó la matriarca.
- Bueno… tampoco es ponerme a jugar como una niña. - Esme miró a su nieta, a la felicidad que destilaba su rostro, y volvió la mirada a la chica.
- Puede que si - Inclinó los hombros, volviendo a mirar a su nieta; Bella siguió la mirada de la señora Cullen y entonces entendió a que se refería Esme:
Elish estaba radiante.
- ¿Qué te parece si mañana buscamos un juego para ti y para mi?
- Eso sería genial. - Los ojos de Elish chispearon de emoción.
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Tras cenar, entre las dos recogieron los platos mientras charlaban sobre el baile y Bella le explicaba los sacrificios que se debían hacer para ser una bailarina profesional.
Tras un poco de sobremesa, Bella acompañó a Elish al salón y ambas dieron las buenas noches. Y no pudo evitar volver a emocionarse al contemplar el beso de buenas noches entre la niña su padre.
Ayudó a Elish a ponerse el pijama, se despidieron hasta el día siguiente, y Bella entró en su zona, cerrando la puerta, como la pasada noche.
Era un mensaje claro de que no esperaba y, no parecía querer, más visitas por ese día.
Una vez realizado sus costumbres de antes de acostarse, se metió en la cama. Como estaba espabilada, encendió un rato la televisión para que la ayudara a conciliar el sueño.
Había canales y apps para todos los gustos. Tras un buen rato, al final se decantó por una película tranquila.
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Mientras tanto, en el salón, todos estaban atentos a todos los movimientos de la chica, esperando a que se acostara para ponerse hablar.
Como sincronizados, Alice, Emmet y Esme comenzaron a parlotear a la vez.
- Ha sido un gran día. - Comentaba Esme borboteando felicidad, ante el asentimiento del resto.
- ¡Fue genial jugar con ella! - Emmet hacía aspavientos con los brazos, emocionado.
- No me queda ninguna duda, de que fue un gran acierto contratarla. - Añadió Carlisle; su esposa lo miró mientras asentía. - Es encantadora.
Edward no pronunciaba palabra, escuchando al resto; tanto sus palabras como sus pensamientos, los cuales eran un espejo de sus palabras.
Él, en el fondo, estaba igual de convencido que Carlisle, y el resto, de que era la idónea, pero no lo reconocería en voz alta.
Y ya no es que no quisiera hacerlo, que también, era que en aquel momento, no podía ponerle palabras a los sentimientos que afloraban, porque él mismo no los veía ni los comprendía.
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¿Realmente Bella querría atentar contra Edward? ¡Jajajaja! Bueno, por ganas no sería...
El momentazo entre ellos no ha tenido precio. Ella cayendo y él sujetándola como todo un caballero y esa mirada... ¡ummmm! Esos "roces y miradas furtivas" son tan ¡guauuuu... intensas, eróticas! ¿NO CREEIS?
ESPERO TANTOS COMENTARIOS O INCLUSO MÁS, QUE EN CAPITULO ANTERIOR.
¡BESOS Y GRACIAS!