Flufftober 2024
Día 18: Baile lento
A Yuuri no le gustaba mucho bailar en las grandes fiestas que se organizaban en el Castillo, lo evitaba lo más que podía, por suerte para él, Wolfram siempre estaba a su lado como guardián y lograba librarse de bailar con decenas de mujeres y probablemente también hombres. Aunque nunca se lo dijo, le agradecía mucho esa ayuda, aunque él solo lo hacía para que no lo engañara.
Conrart le había enseñado lo básico cuando llegó a Shin Makoku, pero nunca pulió realmente sus habilidades, al negarse incluso a bailar con Wolfram, lo cual era muy injusto para él. El rubio lo libraba de bailar con otros, ¿y ni siquiera se atrevía a bailar con él?
Así que, sin decírselo, practicó su baile durante sus estancias en la Tierra, incluso su madre lo atrapó una vez y se ofreció a ayudarlo, aunque claro, era diferente bailar con una mujer que con un chico.
Pero, ahora estaba decidido y en la siguiente fiesta que tuvieran, le pediría a Wolfram que bailara con él.
Eso sucedió un mes después, en su aniversario de coronación como Maou. No podía negar que estaba nervioso y además había olvidado todo lo que había planeado decirle a Wolfram.
Le tomó un tiempo por fin hablar con él y pedirle dicho baile.
—Oye, Wolf…
El rubio quien estaba sentado a su lado, lo miró.
—¿Qué pasa?
—Me estaba preguntando… ¿bailamos un poco?
La cara de Wolfram era un poema, realmente nunca se esperó eso.
—¿Juntos?
—¿Por qué no?
—Nunca lo hemos hecho…
—Lo sé… pero, no tiene nada de malo, ¿no?
—No sé, tú dime…
Yuuri entendía que Wolfram estuviera reacio a aceptar un baile tan repentinamente, así que mejor se puso de pie y le extendió la mano.
—Vamos, vamos a bailar.
Wolfram lo miró directamente a los ojos, Yuuri siempre se perdía en ellos, eran muy bonitos. La calidez llenó su mano cuando Wolfram la tomó, sin dejar de mirarlo a los ojos.
—Te tomaré la palabra.
Caminaron de la mano hasta la pista del salón. Yuuri puso su otra mano en la cintura y Wolfram la suya en su hombro y comenzaron a bailar.
Al principio ninguno de los dos dijo nada y ya no se miraban. Yuuri sentía que se ponía rojo, era obvio que todos los estaban mirando.
—¿Por qué? —susurró Wolfram aun viendo a otro lado—, ¿por qué tan de repente…?
—Lo siento, fui muy lento, lo sé.
Fue en ese momento cuando sus miradas se encontraron otra vez.
A Yuuri le gustaba mucho la calidez que Wolfram emanaba. Y como le pasaba desde el día en que lo conoció, reconocía plenamente que era la persona más hermosa que había visto. A veces, se sentía muy presuntuoso de que fuera su prometido.
Con el pasar de los minutos, dejó de existir toda la gente de su alrededor, su atención se centró únicamente en Wolfram.
En un impulso, lo abrazó con fuerza por la cintura. Sintió cómo Wolfram se puso rígido por unos segundos, antes de responder el abrazo. De esa manera, movieron un poco sus pies para continuar bailando, aunque más bien, solo giraban sobre su propio eje, ya que ni siquiera escuchaban la música, ese momento era única y exclusivamente para ellos dos.
