Capítulo 3: El Emperador de la Oscuridad.
Gasper estaba haciendo una corrida matutina en el parque cercano a su casa. Teniendo una cola de caballo corta por su pelo largo que solo le ha dejado crecer. Corría haciendo varias vueltas en rápida sucesión con apenas sentir cansancio, mantenerse en buen físico era un requisito que mantuvo los días de su vida pasada, incluso en tiempos de paz no podía darse el lujo de que su poder se disminuyera por algo que pudiese ocurrir sin más.
Siempre había peligros con los remanentes de Khaos Brigade y la Alianza del Infierno pululando a sus anchas sin más. Aun así mantuvo a su familia el reacondicionamiento físico y el continuo practicar de sus habilidades mágicas u otras habilidades que tuviesen para mantenerse frente a la necesidad de defenderse en su máxima aptitud.
Tomo un poco de agua al detenerse de su corrida normal, mirando cómo las cosas parecían aclarar en su mente sobre lo que hacer con el objeto que poseía en sus manos y estaba guardado sin más en un sitio que solo él conocía por razones de seguridad que Walter desconocida, y estuvo de acuerdo ante no saber.
Suspiro de satisfacción por el agua que bebió, y lo refresco un poco. El Sol se suponía que saldría dentro de poco tiempo, así que se alistó para regresar a casa cuando notó a un dúo de chicas, una pelicarmesí y una peliblanca, ambas que estaban haciendo ejercicio a esta hora de la mañana.
Trayendo recuerdos de su pasado de ciertas féminas que recordó de su tiempo como demonio bajo el ala de Rias. Siendo la del pelo carmesí la que le recordó de cierta forma a su ex ama. Negó esos recuerdos al fondo de su mente. No valía la pena recordar cosas que no eran de este mundo, mantuvo un ojo en Kuoh por si las cosas seguían como debían de ser como en su mundo, y eran en su mayoría iguales excepto por minúsculas diferencias que no cuadran con sus recuerdos.
Así que lo dejó de lado, se preparó para recoger su mochila que dejó en un banco cercano y marcharse a ducharse y prepararse para la escuela que comenzaba en solo un par de horas más. Pero una voz lo interrumpió.
"¿Vladi-san?".
Tsubaki se acercó a Gasper, caminaba de regreso a casa luego de completar una tarea de limpieza solicitada que le llevó un poco de tiempo cuando encontró a su compañero de clase en este parque.
"Shinra-san, buenos días" saludó Gasper mientras que se secaba parte del sudor de su frente, sentía sus músculos un poco adoloridos, el cuerpo joven que poseía aún se acostumbraba al poder que podía ejercer, no podía desatar toda su fuerza pero no significaba que esté indefenso ante los peligros que rondaba estas islas.
Noto que Tsubaki no decía nada más, la miró con la cabeza inclinada en confusión al notar que estaba sonrojada y desviaba la mirada al mirarlo, más específicamente su cuerpo desarrollado que estaba desarrollando músculo.
Suspiro internamente, no dejo que las neuronas y pensamientos comunes de la pubertad se le saltaran a la mente y erigió sus barreras mentales para lidiar con eso luego.
"Fue bueno verte, Shinra-san. Nos vemos en la escuela", y sin más se marchó del parque, dejando a una apenada Tsubaki que se despidió en voz baja y también se fue a su casa para alistarse para la jornada de estudios del día.
Mientras que Gasper corría de regreso a su casa, sintió como si una mirada estuviese enfocada en su persona. Hizo el amane de ver a los lados cuando cruzo la calle para llegar a casa para ver si alguien lo seguía, no fue el caso. Así que pensó, y usó sus sentidos para ver lo que el ojo común no podría ver sin más.
Notando enseguida por su experiencia una presencia familiar que lo estaba viendo por medio de un círculo mágico bien escondido que hubiese pasado desapercibido para los demás pero no para alguien que sabía lo que buscase como él.
'¡La firma del círculo parece familiar! Pero no recuerdo ahora de donde lo he visto antes. Bueno, no es que sienta emociones negativas de quien me esté observando o algo por el estilo, lo mejor sería seguir sin que notase que lo he visto. No necesito más problemas con los ya que tengo'.
Regreso a casa por fin, dejando su mochila en su cama y metiéndose en la ducha enseguida mientras que Walter se enfoca en hacer el desayuno y alistar el almuerzo de su señor.
Luego de unos buenos diez minutos Gasper sale y se viste, pero siente la vista de su observador en su persona todo el tiempo, no se molestó en poner un hechizo de ilusión sabiendo que quien estuviese era un experto en magia. Tendría que buscar entre sus conocimientos un hechizo de los antiguos libros que había leído en su exilio durante la Tercera Guerra de los Dragones Malignos.
Una vez terminado salió de su habitación para dejar la ropa en la canasta de la ropa sucia, yéndose hacia la primera planta de la casa. Viendo a su mayordomo sirviendo el desayuno que eran huevos revueltos, tocino, una tajada de pan tostado y jugo de naranja para una buena comida por la mañana.
Sentándose y comenzado a saborear su comida con gusto. Walter dejó su manto colgado y se sentó enfrente de su señor para comer también. Comen en relativa calma mientras que siguen en un silencio tranquilizador.
"Gasper-sama- lo llama Walter, Gasper lo mira curioso de lo que diría- en el reciente incidente en el bosque causada por esa luz carmesí, he pedido algo de ayuda extra para asegurar su bienestar como el último de su Casa, y como Lord Vladi. Me disculpo por no mencionarlo, pero su seguridad es mi principal preocupación como su tutor y sirviente".
Walter agacho la cabeza en disculpa mientras que Gasper dejó su tenedor y golpeó el dedo en su mesa pensativo. No culpaba a su mayordomo por buscar ayuda en asegurar su bienestar, por lo que solo suspiro de cansancio e hizo la pregunta.
"¿A quién pediste ayuda para cuidarme?".
"A la asociación de magos dirigida por Mephisto Meles-sama. Han mandado a uno de sus mejores magos para ayudar en su protección mi señor. Ya debe estar en la ciudad según sea, por lo que lo cuidará de cerca mientras esté en la escuela".
"Nombre",
"Lavinia Reni".
….
La última clase del primer periodo ha finalizado y la hora del almuerzo ha llegado, Gasper saca de su mochila el almuerzo que Walter le preparó. Había pocas personas aquí, incluida Tsubaki. Michael había ido a comprar en la cafetería, dejando al dúo comiendo solos entre ellos.
Hablaban de cosas triviales de la escuela y la vida, no hablaron de casi nada sobrenatural, excepto del matrimonio entre los Phoenix y Gremory pronto a ocurrir según sabían ambos. Antes de que Tsubaki continuase su diatriba sobre la sociedad demoníaca, cuando una voz suena por el sistema de megafonía.
"Estudiante Gasper Vladi, por favor reportarse a la Oficina de la Facultad".
Tsubaki miró a su compañero y nuevo amigo curiosa de lo que podía haber hecho para que lo llamasen. Pero el Dhampir negó diciendo que no ha hecho nada de lo que valga la pena llamarlo a la oficina de los profesores, así que deseo un buen almuerzo a su amiga y se fue del salón para ver qué querían de él.
Camino por unos buenos minutos hasta llegar a la sala de profesores, toco la puerta y le abrió uno de los profesores. Dejándolo pasar sin más, indicando que se siente mientras que le dice que quien quería hablarle vendría enseguida, Gasper percibe el deseo lujurioso del hombre al oír eso, suponia que seria una mujer que lo vendría a ver, asi que solo se quedo mirando en su celular mientras esperaba a la profesora.
Al poco rato la puerta se abrió de nueva cuenta y pasó la persona que Gasper, sabiendo que lo protegerá, no esperaba que estuviese directamente con relación a su labor de estudiante.
Lavinia Reni estaba frente a él, ganándose la mirada del profesor que le abrió antes. Ignorando olimpicamente la mirada de bobo idiota que le daba aquel hombre, la hermosa maga rubia se acerco a Gasper, quien guardo su celular para prestar completa atención a la nueva profesora que era la maga.
"Buenas tardes, Gasper. Soy Lavinia Reni, y seré tu nueva profesora particular a partir de hoy" se presentó la hermosa rubia, mientras que Gasper hacía lo posible para no palmear su frente e ignorar la mitad asesina y celosa del hombre que le daba en la nuca.
'Tal parece que ya sea en Japón o en Estados Unidos para que la mente humana siga siendo la misma' pensó para sus adentros el Dhampir mientras que exteriormente estaba sereno.
Dejando pasar aquella mirada. Miro a Lavinia, con la pregunta en su mente:"¿Clase particular de qué exactamente, Lavinia-Sensei?".
Así Lavinia comenzó a explicar la clase que le daría a Gasper a partir de ahora sobre temas antiguos. Cosas que Gasper había estudiado bajo la tutela de su esposa Rossweisse en su vida pasada para entender fluidamente sin magia a socios de otros Panteones.
Un escalofrío le recorrió su espalda al recordar lo que habían sido los castigos cuando él no prestó atención. Era algo que no le gustaba recordar del todo, pero el anhelo en su corazón por su presencia, su toque; Es lejano, en otro mundo. Otro tiempo. Otro Universo.
Pero ya no había nada de lo que podía hacer, esta era una segunda oportunidad, no pedida de su parte pero sí que ahora estaba viviendo, a pesar de lo que quería regresar, no había nada de lo que podía hacer para verlas de nuevo.
Todo eso solo duró pocos segundos, en los que Lavinia lo miró intrigada por su silencio prematuro. Se aclaró la garganta y hablo:"Gracias por las clases, Lavinia-sensei" agradeció Gasper a la hermosa rubia que solo sonrió encantadoramente a su nuevo alumno, y ganándose más la envidia del profesor random que los veía con celos saliendo como chispas de sus ojos.
Con esto terminando, Gasper sale de la oficina de profesores. Yéndose al salón para terminar de comer la comida que pueda antes de que termine la hora del almuerzo. Mientras caminaba entre los pasillos de la escuela, no noto a los demás alumnos que van a sus aulas o el baño, en su reojo nota como un par de cabelleras roja y blanca se pasan más allá del otro lado del pasillo.
Su mente hace conexiones subconscientes en recuerdos de los días pasados. Habiéndose visto antes en sus entrenamientos matutinos, no les prestó más atención, pero sintió un par de miradas en su espalda. Pero lo dejó de lado para regresar a su salón.
Una vez allí, noto a Tsubaki que estaba leyendo un libro mientras que su almuerzo estaba ahí, caliente aún. Noto los leves rastros de la magia de Tsubaki en su comida, sonrió a su amiga que solo lo desestimó y siguió con su lectura diaria.
Gasper se sentó y retomó su comida donde lo había dejado. Luego de unos minutos terminó, y apenas cuando el timbre sonó y los demás comenzaron a ingresar para reanudar las clases del día.
Siguiendo las clases con normalidad, pero para el Dhampir sintió como alguien lo observaba. Miro fingiendo ver el paisaje por las ventanas cuando uso un hechizo que aprendió de los textos antiguos.
Visio spiritualis.
Usando sus ojos reforzados con magia, que parecían a algo similar a un pentagrama en cierta forma. Miro a donde podía ver en verdad en espectros invisibles para el ojo común de una persona, y ahí estaba. Un círculo mágico de vigilancia, noto por los caracteres de que se trataba de un círculo angelical. Y solo se podía venir a la mente alguien que podría interesarse por verlo de forma furtiva.
Gabriel.
Eso fue lo que pensó Gasper mientras que sólo del contacto fue de apenas cinco segundos pero fue notado por Tsubaki, que estaba a su lado. Dejándola curiosa de lo que su compañero miraba por la ventana.
…
Sexto Cielo.
En el cielo, donde residen los Ángeles, los Hijos e Hijas de Dios, Elohim. Siendo que nos enfocamos en el Sexto Cielo, donde los Serafines, los Ángeles de más alto rango que existen, viven.
"Hhmmm~. Hhmmm~".
La voz angelical de una cierta serafín resonó en la habitación mientras que miraba por un círculo mágico a aquel joven medio vampiro que ayudó a su subordina, siendo su As Irina Shidou.
La dueña de la voz era una mujer alta de unos muy enormes pechos, su cabello era de un color tan dorado que el oro parecía basura si se comparara a el pelo de esta mujer, tenía caderas bien definidas y también piernas que eran sencillamente hermosas, su piel era clara y sin ningún tipo de imperfección sus ojos eran de un color verde claro y llenos de inocencia. Llevaba puesto un vestido blanco de una pieza que estaba conectado con collar dorado, además de un escote que dejaba poco a la imaginación.
Gabriel era un serafín y uno de los más fuertes luchadores del cielo.
Aquella hermosa mujer chasqueó los dedos y un archivo salió volando a sus manos, lo abrió y revisó su contenido. En él estaba toda la información acerca que poseían del Lord Vladi de la Casa Vampirica.
"Hmm" tarareo para sí misma, y dejó el archivo a un costado, mientras siguió mirando hacia su prometido.
No sabia el por que su Padre le designó como prometida de alguien que no había nacido, pero solo le dijo que debía de estar de su lado para lo que resurgió de las sombras. No comprendió del todo a lo que se refería su amado y fallecido Padre, pero aun con la duda en su corazón aceptó este asunto con tranquilidad, siendo que solo Michael sabía acerca de tal asunto por ser el Líder del Cielo y los Ángeles cuando Dios murió.
"Espero verte pronto, Gasper-kun" dijo en un susurro apenas audible la Serafin mientras que seguía viendo a su Prometido salir de la escuela.
Gabriel deshizo el círculo de magia pero antes de que lo hiciera lo evita en el último momento cuando nota algo cerca de Gasper. Amplía la imagen, viendo que era algo más que no reconocia, puede que sea inocente pero tenía un amplio conocimiento acerca de las criaturas del mundo sobrenatural.
Pero esta criatura, no parecía a nada de lo que había visto hasta el momento en todos sus años de vida. Noto cómo esta criatura acechaba en las sombras, siendo que Gasper parecía completamente ajeno a lo que lo seguía.
Se quedó observando como Gasper se iba caminando por las calles mientras aquel ser lo seguía en las sombras. Estaba gritando por el círculo que se alejara, cuando pasó.
La extraña criatura capturó en sus tentáculos a Gasper que no se esperaba tal ataque por la cara de sorpresa que tenía en su rostro juvenil. Intentó zafarse como podía pero la fuerza del agarre era demasiado fuerte para él, por lo que fue jalado hacia el interior de un callejón entre dos edificios que estaba alejado del ojo público
Sin tardar un segundo, Gabriel se transporta de inmediato cuando sucede tal acto. Apareciendo en el callejón cuando Lavinia aparece de igual forma al sentir que la firma de Gasper desapareció por completo.
Reconociéndose levemente pero ambas se adentran en la oscuridad del callejón, donde Gasper fue visto por última vez. Vieron con horror la sangre roja en el piso de concreto con algunas telas pequeñas del uniforme de Gasper en el suelo al lado de la sangre aún fresca.
Sin más, Lavinia usa su magia para rastrear usando la sangre de Gasper para saber dónde fue llevado. Mientras que Gabriel usó su magia sagrada para analizar el resto [Etherico] que no parecía ser de aquí. Si no algo más que no reconoce pero que no es normal y peligroso, como lo ve cuando una sola pizca la toca y siente una punzada de ardor enorme apenas la siente que carcome su piel, usa rápidamente su poder sagrado para sanar, pero lo que fuese aquello retrasa su sanación mucho más allá de lo que puede hacer naturalmente.
"¡Está a varios kilómetros al este de la ciudad!" Dijo Lavinia mirando a Gabriel terminando de sanar su quemadura.
"Supongo que eres su protectora, portadora de Absolute Demise. Vamos juntas y luego hablemos sobre esto" aplico Gabriel y Lavinia asintió. Y así las dos rubias hermosas emprendieron el viaje hacia el rescate de Gasper mientras que un par de ojos dorados se veían desde la oscuridad más profunda de Terra.
…..
Gasper comenzó a abrir sus ojos, sintiendo sus párpados pesados y sus muñecas atadas por algo metálico. Intentó zafarse pero lamentablemente estaba bien atado. Sin más abrió sus ojos mientras que se acostumbraba a la oscuridad que parecía consumir la débil luz presente en donde estuviese.
¿Dónde rayos estoy? Mis sentidos están nublados. Sólo sé que lo que sea esa cosa que me trajo aquí. Era del Abismo. No tengo la menor duda al respecto.
Mientras se acostumbraba a su nuevo entorno, por suerte temporal. Un sonido de algo siendo arrastrado se pudo oír muy cerca de él. Su vista mejorada de vampiro no le permitía ver más allá de donde estaba.
Pudo ver levemente las figuras oscuras de lo que reconoció como una de las criaturas del Abismo. Arrastrando lo que parecía ser una persona inconsciente con su cuerpo siendo llevado por aquel ser no perteneciente a la Tierra.
Se preguntó qué harían. Pero entonces lo pudo oír desde la oscuridad. El sonido de los latidos. Miro a lo que parecían ser capullos en la penumbra de su visión.
¿Qué demonios son estas cosas?.
La criatura abrió uno de los capullos vacíos y sin cuidado alguno metió sin más a la persona que estaba arrastrando dentro. Cerrándose en silencio sin más.
Una membrana conectada a una especie de cristal o lo más parecido a lo que era de la versión de los Abismos de lo que se dio cuenta Gasper al ver como ¿Serpientes? Nadando dentro de ese cristal.
Parecían estar creandolas por medio de la fuerza vital de estas personas, por lo que podía sentir Gasper.
"Has despertado, Emperador" dijo una voz decrépita, haciendo que Gasper se mirara hacia uno de los pilares del sitio, donde estaba un sujeto con una capa que la cubría su rostro y sostenía un bastón, pero Gasper no lo subestimo solo por su estado de viejo.
Sentía que sus instintos le decían que tuviese cuidado con él y sus sentidos hormigueaban por la inmensa cantidad de Nether que emanaba. Y le hacía difícil respirar en este entorno, sintió sus pulmones quemandose por tal sobrecarga del elemento que estaba en el aire de este sitio oscuro.
"¡¿Emperador?! No soy un Emperador, señor. Nunca lo he sido" aclaró Gasper haciendose el tonto para ganar algo de tiempo.
El viejo decrépito se ríe de buena gana de la falsedad de Gasper. Lo mira atraves de su capa, con sus ojos cubiertos pero que el Dhampir sentía de que emanaban una sabiduría de milenios de antigüedad que él no podía empezar a comprender del todo. Por lo que espero a lo que dijera el viejo a continuación.
"Claro, claro. Te creo joven.- se burló el viejo y camino, con los golpes de su bastón resonando por el suelo de cemento del sitio-Pero admito que darias mas resistencia al ser capturado, veo que tus poderes están debilitados o no los posees del todo, no importa igualmente una vez que completemos nuestro plan igualmente" dijo acercándose al círculo debajo del cristal.
¿Plan?- miro al círculo, usando magia para mejorar su visión pero el Netherite en el aire dañaba su vista mientras más se esforzaba-Las runas no son algo que haya visto antes pero logró reconocer un poco de lo que los caracteres son, gracias Rossweisse por las clases que me diste, amor. Ahora me sirven ahora mismo.
No se que harán exactamente pero no será nada bueno para estas personas, eso es seguro.
Intentó zafarse una vez más pero vio mejor de las runas de restricción que estaban talladas en las esposas que lo sostenían en la pared. La risa suave del viejo se podía oír en sus oídos como burlándose de sus intentos.
"No te molestes. Yo mismo hice esas cerraduras para ti. Emperador. Ni uno de sus Super Devils podría liberarse tan fácilmente de ellas. Fueron hechas para lidiar con los de tu clase, después de todo" admitió el viejo y con la punta de su bastón presiono en el círculo para este comenzar brillar de un rojo enfermizo que hizo sentir enfermo a Gasper.
Lo que fuese lo que harían, no le sienta bien al Dhampir.
Comenzando los jadeos de lamentos de los capullos mientras que las membranas comenzaron a drenar la energía vital de las víctimas humanas hacia los cristales sin más. El Viejo miró tranquilo como las ¿serpientes? Se fortalecen por la energía que les era dada de comer de los humanos.
Gasper intentó zafarse de nueva cuenta pero las runas solo lo apretaron más a la pared sin más. Apretó los dientes de impotencia ante la visión que tenía frente a él. En su interior comenzó a arder un deseo de poder hacer algo pero su impotencia era más fuerte ante su situación actual.
Solo un poco, por favor. Deja que venga a mí, te lo pido.
Rogando en su corazón a aquel ente que lo trajo a este mundo para que le permitiera ayudar a esas personas.
Un fuerte BOOM sónico se oyó por todo el sitio y ese se sacudió un poco, oyendo el sonido del concreto siendo perforado. El viejo estaba por decir algo pero una poderosa luz morada-rojo lo interrumpió, la espada [Loto Carmesí] apareció frente a Gasper con un brillo espectral que quemaba la Nether del aire cercano, permitiendo a Gasper respirar con normalidad, más que antes.
Sin necesidad de decir algo a la espada, esta hizo un tajo invisible al ojo y cortó las restricciones de su portador. Liberando a Gasper de su prisión, este se frotó las muñecas por la presión de las esposas.
"Atanquelo" ordenó y un par de seres Abismales se abalanzaron desde las sombras hacia Gasper, con sus garras listas para cortarlo a la mitad.
Pero fueron mandados a volar por un tajo de la espada roja que Gasper ahora empuñaba. Un aura morada rodeaba al Dhampir y sus ojos, sus ojos cambiaron a lo que fueron antes en su antiguo mundo.
[Ojos del Vacío].
Sin más se lanzó contra los Abismales, justo cuando como siguiendo a su espada atada a su alma. El techo del sitio se derrumbó ante la aparición de dos mujeres poderosas y hermosas.
Gabriel con sus alas desplegadas con dos espadas de luz en sus dos manos, y a la muñeca [Absolute Demise] de Lavinia y a la misma congelando todo a su paso. Ambas con expresiones serias en sus bellos rostros que hicieron al Viejo tener una sonrisa maliciosa.
"Matenlos a todos" dijo y se desató el infierno cuando las llamas salieron de sus dedos hacia las recién llegadas pero se salvaron por los escudos de magia que erigieron.
Gasper se enfrentó al Viejo, que bloqueó con su bastón la espada que estaba envuelta en Fuego Infernal. "No harás nada, maldito", la voz de Gasper era completamente diferente de hace un momento.
El viejo solo sonrió ante el desafío propuesto del Emperador y comenzó a liberar su propia aura, coincidiendo con la de Gasper y así empezar el combate verdadero entre los dos.
….
Eleonora Viltaria en su apartamento, mirándose en el espejo mientras que se peinaba su hermoso cabello blanco. Sus ojos rojos parecían dos rubis que podría hipnotizar a muchos de los chicos, como sabía de primera mano como lo ha experimentado durante los últimos años de su pubertad en su cuerpo y su entrenamiento.
Ademas de sus genes que heredo de su madre fallecida, que le heredo una belleza que hacia a muchos voltear a mirar del sexo opuesto. Bueno, a excepción de uno por lo que vio.
¿Quién era él? pensó recordando a un joven que había visto solo dos veces hasta el momento.
Un joven de pelo rubio platino y ojos rosados-rojizos que aunque era un poco más bajo que los demás chicos en su escuela que asistía. Lo compensaba por un aire más maduro a su alrededor, además de ser amigo del mujeriego de Michael, que era famoso entre las chicas por tener una novia nueva cada semana. Solo que sus intentos con ella y su amiga no funcionaban para nada.
Por lo que en sí mismas las dejaron como dos chicas intocables que incluso el más galán de la escuela no pudo conquistar por la visión de sus compañeros. Pero la curiosidad le picaba sobre aquel joven misterioso de la otra clase de su escuela.
Dejó el peine en su tocador y se miró, observando su belleza y sonrió cuando un pequeño temblor sacudió su apartamento. Se levantó al percibir un minúsculo pero fuerte concentración de Mana de una parte de la Ciudad. Algo que no había sentido antes.
Además de otra energía que la hizo sentir algo de temor, por algo que desconocía.
Miro por la ventana de su apartamento que tenía buena vista. Notando en la dirección de donde provino tal pico de maná suprimido y aquella otra energía.
¿Qué fue eso? se preguntó pero perdió sus pensamientos cuando su amiga Stella la llamó por el teléfono, queriendo saber si sintió lo mismo.
Así las dos hablaron y se prepararon para ir a ese sitio para averiguar más en persona.
Mientras que con Gasper, este luchaba desesperadamente contra aquel viejo, que a pesar de su apariencia que mostraba, no era para nada débil si no un monstruo de poder y habilidad. Como lo denotaba las cercanías que estaban hechas polvo y las heridas propias que Gasper poseía, pero este ni se inmutaba ante eso por entrar en su trance de Emperador de la Oscuridad.
"Jajaja. En verdad mereces el título, mi estimado joven. Con esos ojos, se nota que has visto la oscuridad de este mundo" dijo el anciano dando un revés a Gasper que esquivo solo para que un empuje oscuro lo mandase hacia atrás.
Gasper jadeo por un poco de aire, mientras que su ropa estaba un poco deshecha, pero no dejó que eso lo detuviese. Se lanzó de nuevo a la refriega, usando su espada en una poderosa aura azul pálido que congelaba todo a su paso. Además de liberar un poco de su poder contenido en su cuerpo, lamentablemente su límite estaba llegando y pasando factura rápidamente a su cuerpo, pero lo ignoro a favor de detener a su enemigo.
El cual no había sudado aun a pesar de los largos minutos que llevaban peleando. Lavinia y Gabriel estaban luchando contra los Abismales pero el Netherite estaba dándoles problemas para poder enfrentar bien al más simple de ellos. Siendo que el aire impregnado por tal contrario del Ether las afectaba.
"Hoja Congelante: Ventisca del Norte" dijo Gasper y se abalanzó contra su oponente que recibió de lleno aquel ataque.
A pesar del aura tan fría que emanaba la espada Loto Carmesí. No pudo penetrar el cuerpo decrépito de aquel que estaba luchando, solo congelando parte de la túnica mientras que el viejo se reía de sus fútiles intentos de herirlo. Con la punta de su bastón cargado de Netherite, mandó a volar a Gasper contra uno de los pilones de cemento, partiéndolo y haciendo a Gasper escupir sangre mientras su resistencia se debilitaba rápidamente.
"Maldición" maldijo Gasper en voz baja mientras que se levanta tambaleante y herido, pero la oscuridad en sus ojos no se desvanece si no que se profundizó mucho más que antes.
Los [Ojos del Vacío] estaban cobrándole precio pero no podía dejar simplemente de que el ritual, protegido por una barrera protectora, se completará. Quien sabe que haría ese Viejo y sus esbirros con esas serpientes para en este mundo.
"Haz luchado bien, Emperador. Pero ya debo de terminar nuestra "charla" prematuramente. La próxima vez, espero que podamos charlar más. Te dejo esto de regalo" dijo el anciano y con un chasquido de sus dedos, los Abismales que estaban siendo matados por las dos rubias, de pronto retrocedieron y se convirtieron en polvo para luego con los cuerpos muertos de sus camaradas, absorberlos y convertirse en una Bestia más grande con seis ojos amarillentos y un cuerpo robusto, además de tener garras y alas en su espalda. Mirando a Gasper como su presa principal.
Sin más, el anciano se transportaba con el cristal, una vez este término de absorber la energía vital de los humanos. No dejando más que pellejos muertos atrás.
Gritando de frustración, Gasper se enfocó en el problema que tenía delante suyo. Canaliza su magia en sus pies y saltó hacia arriba cuando el ser monstruoso arremetió contra él como un toro sin más. Fue saltando de sitio en sitio cuando la Bestia comenzó a perseguirlo sin más. Claramente su objetivo era matarlo, pero no le pondría las cosas tan fácilmente.
"Polvo Dorado".
Con eso envolvió en un aura amarillenta su espada, saltando desde el techo hacia la Bestia que imitó su gesto desde el suelo. Ambos se miraron uno al otro cuando antes de intercambiar ataques rápidamente, haciéndose daño uno al otro mientras que se empujaban en el aire por encima del suelo de todo el sitio de la batalla.
Siendo vistos por las dos mujeres heridas pero aun siendo testigos de aquella pelea frente a ellas. Mirando como parte de la Bestia eran consumidas en el polvo, pero para ambas fue la marca Blade en la mano derecha de Gasper que apareció de pronto e iluminaba en un color dorado que hizo posible herir mortalmente a su oponente.
Solo que Gasper no se quedaba atrás de las heridas infligidas por el Abismal que estaba enfrentando. Pero eso no lo detuvo mientras a cada momento que pasaba, su fuerza crecía lentamente, superando sus límites y magullando su cuerpo internamente y externamente por la energía mágica que no podía soportar fácilmente.
Sus músculos estaban desgarrados pero gracias a su factor de curación, estos se sanaban pero gastaba mucha magia en eso. Por lo que debía terminar cuanto antes esta lucha si quería evitar morir.
Los dos oponentes se dieron un golpe mutuo que los lanzó al otro lado de la sala en la oscuridad, y poco iluminado por el solo que se ponía en el horizonte. Gasper salió de la pared y escupe sangre al suelo, se la limpia con su mano izquierda y mira como la Bestia estaba peor que él por el poder de Blade.
Miró un momento aquella marca que apareció en el transcurso de la batalla. Pero lo dejaré para después, por ahora solo tenía como objetivo, matar a su enemigo para siempre.
Queriendo ayudar, las dos mujeres atacaron como pudieron a la Bestia con sus respectivos ataques, que chocaron contra el costado derecho de la misma. Haciéndole tambalear un poco pero no hiriendola para nada. Solo dejando marcas de quemaduras, a pesar del poder detrás de aquellos ataques.
Mirándolas enojado, le dieron el tiempo suficiente a Gasper. El cual estaba con su espada en una llamarada-congelante que imbuye dos de sus elementos más poderosos que poseía en su arsenal de magia.
"Loto Carmesí: Llamas Infernales Abismales Congelantes", sin más se lanzó contra la Bestia que apenas tuvo tiempo de poder bloquear el ataque que quemaba y congelaba su grueso caparazón, rugiendo de dolor por el daño hecho.
Pero Gasper no terminó ahí, sino que aumentó la intensidad de su ataque para luego cortar uno de los brazos restantes de la Bestia, quien rugió de dolor y logró darle un latigazo a Gasper con su ala pero este aguanto el dolor y solo apuñaló con su espada en el pecho de la Bestia.
Para luego cortarlo en dos, congelando-quemando sus dos partes en un acto final para seguidamente, convertirlo en polvo dorado que se dispersó por el viento.
Suspirando de cansancio, el dhampir se arrodilló mientras sostenía su espada como soporte por la intensidad de las dos batallas que libró, una inconclusa y otra que ganó a duras penas.
Debo mejorar, se dijo a sí mismo el dhampir mientras sentía que Lavinia se acercaba a él y le ayudaba a levantarse, acurrucado contra su cuerpo. Su cabeza entre sus pechos, que Gasper no se quejo mientras que solo sentía el cansancio llenar su mente.
Cerró los ojos, para ser lo último que vio a la Serafín Gabriel con rostro preocupado mirándolo. Se pregunto el por que de ello pero la oscuridad por fin lo reclamó, y se quedó durmiendo, con su espada desapareciendo en un destello carmesí sin más
"Lo llevaré a su casa, de seguro que Sir Walter está preocupado por el.-Miro a la Arcángel que seguía mirando al joven dhampir durmiendo plácidamente en su pecho-Podrá aclarar las cosas con él luego, Gabriel. Por ahora, le sugiero que regrese al Cielo. Por ahora será mejor irnos de aquí. No queda más que ver aquí con nuestro propósito cumplido" dijo Lavinia y Gabriel asintió.
Preparando un círculo mágico para irse, no sin antes darle una última mirada a Gasper y desapareció de regreso al Sexto Cielo.
Lavinia hizo desaparecer su Longinus y en un círculo mágico se llevó a Gasper, pocos minutos después llegaron Eleonora y Stella, solo para ver el sitio donde se libró brutales peleas.
…
Walter miró como el círculo de Lavinia apareció en la sala de estar de la casa, saliendo una Lavinia algo mal herida. Además que cargaba en sus brazos a su maestro también herido y cansado, con manchas de sangre en la ropa y estaba desgarrada.
Suspiro de cansancio, hizo que Lavinia colocase a Gasper en el sillon. Haciendo lo solicitado, la bruja rubia hizo lo pedido antes de que Walter diera un paso y mirara detenidamente las heridas de su señor. Siendo que las internas eran mucho peor que las exteriores, por lo que sacó de su bolsillo una lágrima de fénix para casos como este.
La abrió y vertió la lágrima en los labios de su señor, haciendo que su tez mejorase un poco y parte de su heridas desaparecieron sin más. Pero aún tenía cansancio, le ofreció otra lágrima a Lavinia que la tomó y la vertió sobre ella, curando en parte.
"Gasper-sama debería descansar bien esta noche para recuperarse por completo. Hay una habitación de invitados preparada para ti. Mañana me contaras todo lo que aconteció hoy" dijo Walter cargando a su maestro en sus brazos y subiendo la escaleras con el, sergio de Lavinia para descansar y reponer energías de la intensa batalla que libró.
Gasper en sus sueños, ajeno a todo lo que pasaba en el exterior estaba en un sitio oscuro que no reconoció pero si a alguien o más bien algo.
"Ha pasado tiempo. Gasper Vladi" dijo el ente que lo trajo a este sitio en primer lugar.
