Cincuenta años de matrimonio
El Potterverso es de Rowling
Este fic participa en la dinámica "Duelos entre Potterheads" del foro "Hogwarts a través de los años"
Acepté el desafío de Dani H. Danvers sobre "Una fiesta en la Madriguera celebrando algo". Dani, espero que te guste
La Madriguera se ha llenado de risas y no es para menos, Arthur y Molly Weasley cumplen cincuenta años de matrimonio.
Todos los hijos Weasley están allí con sus respectivos cónyuges, junto a todos sus hijos. Menos mal, que la fecha del aniversario de bodas es en verano y todos ya han vuelto de Hogwarts.
Molly está en la cocina preparando la comida. Algunas de sus nueras, sus hijos y su yerno quieren ayudarla; pero ella se ha negado. No quiere que nadie invada su cocina. Además, quiere preparar ella misma los platos. Para Molly Weasley cocinar para su familia es su forma de repartir el amor que siente por sus seres queridos. La única ayuda que ha aceptado es la de Andromeda Tonks. Teddy y ella siempre han sido como de la familia.
Mientras tanto, Arthur decora la carpa con sus hijos y yerno y las mujeres ponen la mesa.
Andromeda prepara el guiso junto a Molly mientras la mira de reojo. Les está bastante agradecida a los Weasley por haberla aceptado a ella y a Teddy en su familia, pero, a veces no puede evitar sentir cierta envidia. Es cierto que ellos también perdieron a un hijo, pero han podido ver crecer a sus otros hijos junto a sus parejas. Además, la guerra no le ha arrebatado a ningún Weasley ningún cónyuge. Bueno, a Verity Weasley sí, pero solo conocía a Fred desde hacía unos años, no llevaban toda una vida juntos como Ted y ella. Sí es cierto que tuvo que criar a cuatro bebés ella sola y eso era muy duro, pero… Andromeda no quiere comparar el dolor de ambas, aunque a veces no puede evitarlo…
— Es en días como este… — Andromeda interrumpe sus pensamientos para fijarse en Molly Weasley, tiene lágrimas en los ojos, mientras remueve el guiso. — Que desearía que mi hijo Fred estuviera aquí; o mis hermanos, Fabian y Gideon. Se llevarían de maravilla con mis nietos.
Andromeda se queda sin palabras.
— Seguro que estén donde estén, estarán felices de la bonita familia que has formado y no querrían que estuvieras triste en este día tan especial.
— Lo sé, pero es duro. Muy duro.
Andromeda suelta el cuchillo con el que está cortando la carne y la abraza.
….
— ¿Vendrá el primo de mamá? — pregunta George a su padre mientras cuelgan las guirnaldas en la fiesta.
— No, sus hijos tienen vacaciones y han vuelto del extranjero. Así que, estará con ellos. — le responde su padre. — Aun así, hemos quedado para ir a tomar algo.
Molly y su primo segundo squib, Conrad Prewett, retomaron el contacto tras años sin hablarse. Fue después de la Segunda Guerra Mágica, cuando Percy les contó que se había encontrado con una niña llamada Mafalda Prewett en el campo de refugiados donde estuvo. Investigando descubrieron que era la hija del primo de Molly. Aunque al principio no fue fácil porque Conrad no perdonó los desplantes y abandono de su familia mágica, al final acabaron manteniendo una relación cordial.
— Casi mejor. Solo Mafalda es bruja y está casada con un mago. Si tenemos que esconder nuestra magia de sus hermanos pequeños y sus parejas e hijos sería un incordio. — agrega Charlie.
— Hablad por vosotros. Yo he vivido mis primeros once años de vida sin magia. — les rebate Harry divertido.
— No nos lo recuerdes. Que sepas que los Weasley jamás perdonaremos a los Dursley lo que te hicieron por mucho que ahora te lleves bien con tu primo y tu tía. — le suelta Ron con aire amenazador.
Todos los Weasley asienten estando de acuerdo.
— Bueno, parece que esto ya está. — sonríe Percy.
— Sí, ¿os parece si vamos a ver qué hacen nuestras señoras? — pregunta Bill.
Los demás están de acuerdo.
….
Mientras tanto, las muchas señoras Weasley, junto a la señora Potter, ponen la mesa.
— Este septiembre Hugo y Lily se van a Hogwarts… — susurra Hermione nostálgica.
— ¡Los pequeños de la familia! — exclama Ginny.
— ¿Cuándo ha pasado tanto tiempo? O sea, mi Freddie va a empezar quinto. — exclama Angelina.
— Y mi Dominique séptimo. — Fleur se lleva las manos a la cabeza. — Pgonto tendgé dos hijas fuega de Hogwagts.
— Es mejor que sea así, de forma gradual. Imagínate tener que despedirte de dos hijas a la vez. Se nota el nido vacío. — le contesta Audrey.
— Charlie y yo te superamos. Cada año tuvimos que comprar tres útiles a la vez. — le suelta Iggy.
— Yo os gano a todas. Cuatro. — le rebate Verity.
— Pero tú ya no cuentas. Los tuyos se han graduado. — le recuerda Ginny.
— Pero cuando iban.
En ese momento, llegan los hombres de la familia, quienes se sitúan al lado de sus esposas.
A Verity se le encoge un poco el corazón al ver esas escenas. Ella es la única viuda de los Weasley. A veces desearía que Fred estuviera con ella o que no hubiera sido él el Weasley que falleció. Pero se siente tremendamente culpable cada vez que tenía esos pensamientos porque nadie merecía lo que les arrebató la guerra.
Arthur se puso a su lado. Él no tiene un hijo político favorito, a diferencia de Molly con Harry, pero ambos sienten debilidad por Verity y ganas de cuidarla y protegerla por ser la única viuda y madre soltera de la familia.
— ¿Habéis terminado? — pregunta Arthur.
— Sí. — responde su hija. — Vosotros también por lo que veo.
— Me alegro. Voy a ver si la comida ya está lista. — Arthur se despide y se va.
— Estábamos hablando de lo rápido que crecen los niños. — les explica Hermione.
— Habéis destapado el melón. — se ríe Harry.
— Pero es verdad. ¿Cuándo han crecido tanto? — le reprocha Angelina.
— Ellos y nosotros. — ríe Ron.
— Ellos crecen, nosotros envejecemos. — suspira Percy.
— Cállate, que Bill, Iggy, Audrey y yo somos mayores que tú. — le echa en cara Charlie.
Todos ríen e Iggy apoya la cabeza en el pecho de su marido.
— ¿Cuándo llegará vuestra nuera? — les pregunta Verity a Bill y Fleur.
— Alexia llegará en un rato. Tenía unos compromisos. — le contesta Bill.
….
Mientras tanto, los nietos Weasley juegan algunos con la escoba y otros en el suelo.
— ¿Cuándo llegará mi cuñada, Dominique? — le pregunta Victoire queriendo hacer rabiar a su hermana.
— Cuando termine sus compromisos. — le responde su hermana con la cara del mismo tono de rojo que su cabello.
— ¿A ella también la amenazasteis con lastimarla si te hacía llorar como hicisteis conmigo con Victoire? — pregunta Teddy fingiendo enfado.
— No es lo mismo, Lupin. — George Weasley II. — Tú eres mayor que Victoire y Dominique y Alexia son de la misma edad.
— ¡A mí me conocéis desde que éramos niños a diferencia de a Flint!
— No es lo mismo. Victorie había pasado por una mala relación a diferencia de Dominique. — le reprende Arthur Weasley II.
— Cambiando de tema. ¿Cuándo traeréis vosotros una pareja? Sois mayores que Domi y yo.
— Tranquila, prima. — levanta las manos Levin fingiendo rendición. — Ahora nos estamos centrando en nuestros trabajos y Archie en reunir el dinero para abrir su tienda de anticuarios. Ya llegarán los amoríos.
Los demás cuatrillizos asienten.
George y Arthur (o Archie, para diferenciarlo de su abuelo tocayo) trabajan en Sortilegios Weasley mientras que Levin ha pasado el año anterior en Brasil trabajando de aprendiz en varias reservas de criaturas mágicas, una de ellas en Castelobruxo, donde fue el aprendiz del profesor de Cuidado de Criaturas Mágicas de la escuela brasileña. Mientras tanto, el más joven de los cuatrillizos, Reginald, trabaja en el Departamento de Artes Oscuras del Ministerio. Ha heredado el gusto por la magia oscura de su familia materna, aunque Verity nunca se lo inculcó como hicieron con ella de niña.
— Por otro lado… Lottie, ¿vas a hacer la competencia a los Ollivander? — Georgie se acerca a su prima morena. Charlotte Weasley lo aparta de un manotazo.
— Nunca ha sido mi intención. Además, ya veremos si trabajo como creadora de varitas aquí o en Rumanía.
— Oh, te nos vas a ir… — Arthur abraza su prima.
— Si llevamos viviendo allí desde siempre. Lo que pasa que quisimos ir a Hogwarts. — responde Vladimir.
— Sí, menos mal que vosotros os quedasteis en la librería de la tía Iggy de Diagon. — Levin abraza a sus primos Vladimir y Nadia, otro Gryffindor y la única Hufflepuff de los Weasley hasta la fecha.
— Pero si estuviste todo el año en Brasil. — le rebate Vladimir.
— Además, queríamos estar cerca de Lottie.
— Oh. — Charlotte abraza a su hermana.
…..
Mientras tanto, en las alturas…
Hugo y Fred son los guardianes y Lily, James, Roxanne y Rose juegan como los cazadores. Los hermanos Potter contra las primas Weasley. Albus es el encargado de encontrar la snitch; cuando lo haga, contarán cuantas quaffles ha marcado cada uno para decidir el equipo vencedor.
— ¡Pásame la quaffle, Lily! — le grita su hermano.
Lily obedece, pero la pelota es interceptada por Rose, quien corre a toda velocidad a donde está Hugo, quien desde niño ha jugado siempre como guardián y se le da muy bien pese a ser de los bajos y delgados.
Rose lanza la quaffle, pero su hermano para el golpe y tira la pelota a Lily.
Lily corre a toda velocidad hacia el aro donde está Fred y tira la quaffle, pero es interceptada por Roxanne antes de que llegue a los aros. Fred es golpeador no guardián. Así que, por mucho que sea mayor que Hugo está en desventaja contra él.
En ese momento, Albus encuentra la snitch.
— Chicos, ¡ya está! ¡Contad los puntos que tenéis!
— ¡30! — grita el equipo de Roxanne.
— ¡40! — grita Lily.
— ¡Bien! — celebra James. — Todo gracias a nuestro pequeño guardián. — empieza a moverle el pelo a su primo pequeño cuando pisan tierra.
— ¿Dónde están las gemelas? — pregunta Rose. Ahora que han bajado de la escoba, quiere leer un poco con Molly.
— Las he visto con el balón de fútbol en un árbol por ahí.
En ese momento, Harry se dirige a ellos para decirles que la comida está lista y vayan a la mesa.
…..
Bill se dirige dónde están sus hijas y sus sobrinos mayores.
— La comida está lista. Id a la mesa. Imagino que Alexia vendrá enseguida. — le dice a Dominique para tranquilizarla.
Todos los jóvenes obedecen.
…
Molly y Lucy están jugando al fútbol. Oh, bueno, lo máximo que pueden hacer jugando dos personas, intentando quitarle el balón a la otra y marcar en el espacio que hay entre dos árboles. Ambas se han quitado los zapatos y juegan descalzas, van en vestido y sandalias y no es muy cómodo. La pasión que tiene el resto de sus primos por el quidditch la tienen ellas por el fútbol. Además, no se les da bien montar en escoba, al igual que a sus padres. Estuvieron en el equipo femenino del colegio muggle antes de entrar en Hogwarts, pero tuvieron que dejarlo cuando llegó la carta del colegio mágico. A sus primos, ese deporte muggle no les interesa. Es más emocionante volar en escoba.
En ese momento, Lucy consigue hacerle una finta a su hermana y marcar.
— ¡AAAHH! — grita alguien.
Molly y Lucy corren hacia esa persona preocupadas por si la han lastimado.
— ¿Estás bien? — preguntan preocupadas.
Se dan cuenta de que es Alexia Flint, la novia de su prima Dominique.
— Estoy bien. El balón solo me ha rozado la cabeza.
— Ah, Hola, Alexia. — la saluda Lucy con una sonrisa.
— Dominique está sentada en un árbol en la otra punta de la casa. — le informa Molly.
— Oh, gracias.
Justo cuando Alexia se dirige hacia allí. Un pelirrojo se dirige hacia ellas.
— ¡MOLLY AYREEN Y LUCY CONSTANCE WEASLEY! ¡¿POR QUÉ VAIS DESCALZAS?! ¡MIRAD COMO LLEVÁIS LOS PIES! — Percy les limpia los pies con un movimiento de varita. — ¡ID A GUARDAR EL BALÓN, LAVAOS LAS MANOS E ID A LA MESA! ¡LA COMIDA ESTÁ LISTA! — les dice. Después le sonríe a la recién llegada. — Alexia, bienvenida. La comida ya está lista. Así que, ya puedes ir a la mesa. Dominique ya debe ir hacia allí.
— Gracias, señor Weasley.
— Llámame Percy. Esta casa está llena de señores Weasley.
…
Louis se ha quedado a un lado leyendo un libro de Artes Oscuras, cambiando la tapa por el de una novela para camuflar lo que leía. A la familia ya le ha sorprendido que a Reginald le gusten las Artes Oscuras; pero piensan que se debe por sus antecedentes maternos y eso que la tía Verity nunca ha mostrado un libro de magia negra a sus hijos.
Louis no tiene ningún antecedente familiar que lo relacionara con las Artes Oscuras, ni por los Weasley ni por los Delacour. Le atraen porque es algo que está prohibido y sus ansias de conocimiento de Ravenclaw le obligan a informarse de ellas.
— Louis, cariño. La comida está servida.
— Ya voy, abuela.
Pone el marcapáginas, guarda el libro en su mochila y sale al jardín.
….
Alexia se sienta en la mesa al lado de su novia y Dominique le da un abrazo. La besaría, pero hasta ella tiene sus límites y besarse con su novia en la casa de sus abuelos delante de sus padres y tíos es uno de ellos.
— Lena estaba con unos amigos y mis padres trabajando y no podía irme sin que alguien se quedara con Irene. — explica la recién llegada.
— ¿Cuántos años tiene la pequeña cuñada de Domi? — pregunta Victoire.
— Un año y medio.
Molly sale con la cazuela y Andromeda levita todos los platos.
Empiezan a servir.
— Alexia, cariño, gracias por venir. — la saluda Molly. — Estás muy delgada. La próxima vez deberías traer también a tus padres y hermanas. La pequeña tendrá mucho espacio donde jugar. — empieza a servirle.
— Gracias, señora Weasley. Ya se lo comentaré.
— Bien. — Molly ya ha servido a su invitada y ahora se pone a repartir la comida. Primero a Lily, la menor de la familia. Una vez todos están servidos, se sirve su plato y se sienta.
— Cincuenta años ya… — susurra Arthur.
— Sin contar los años de noviazgo. — responde su esposa.
— Deberíais hacer algún viaje, abuelo. Para celebrarlo. — le propone Lucy.
— Ya lo hemos pensado querida. Quizás nos pasemos por el París mágico a visitar a la familia de Fleur.
— Sí, lástima que los Delacour no hayan podido venir. Pero nos han dicho que nos invitaban a su casa si queríamos viajar. — sonríe Molly.
— ¡Ah, que bien! Quizás coincidamos. Nosotros también visitaremos a los abuelos Delacour en verano. — responde Victoire.
— Sí, pego hay que espegag a que a papá y a mí nos den vacaciones.
— Quedan unas dos semanas y ya. — celebra Bill.
— Tengo ganas de ir a Marsella… — cuenta Louis soñador. La cantidad de aventuras que puede tener un chico vella y mago en esas playas.
— Que guay… — ríe Teddy. — A ver si podemos visitar a Harold. Trabaja de embajador en el Ministerio mágico de España.
— Sí. Mis padres han ido a visitarle. Por eso no han podido venir. — se disculpa Hermione.
— No te preocupes, querida. Es normal. — le sonríen sus suegros.
— Me sorprende que Harold no quiera trabajar en este Ministerio. Su hermana es la Ministra de Magia. — dice Lily.
— Por eso, Lily. Mamá ha dejado el listón muy alto. — le responde su primo.
— ¿Estáis impacientes para ir a Hogwarts? — les pregunta Ron.
— Sí.
— ¿Ya sabéis a que casa queréis ir?
— No. Pero queremos ir juntos. — Hugo abraza por los hombros a su prima.
— Claro, siempre estáis juntos.
— Bueno, Lucy y yo siempre hemos estado juntas y hemos terminado en casas diferentes. — responde Molly II.
— Sí, hemos conocido otras personas y hecho otras amigas. Molls en Gryffindor y yo en Ravenclaw. Pero seguimos haciendo cosas juntas.
— Como leer y estudiar en la biblioteca, jugar al fútbol, comer en los jardines cuando hace buen tiempo, charlar… — ambas gemelas se terminan las frases la una a la otra.
— Lo mismo con Lottie, Nadia y yo. Al principio, estás un poco desubicado y te sientes perdido, pero después ya haces amigos y estás bien. — le dice Vladimir.
Los pequeños asienten, aunque algo confundidos.
— ¿Estás contenta con la Academia de Medimagia, cariño? — le pregunta Molly a Victoire.
— Mucho, abuela. Estoy muy contenta.
— Era lo que querías hacer. — le sonríe ella.
— Los abuelos y los primos se van a Francia… — enumera Rose.
— Y papá, mamá y yo a Rumanía. — le sonríe Charlotte. — Pero tranquila, todos estaremos en tu cumpleaños.
— ¡Es que mira que nacer ese día, Rose! — se burla James.
— ¡Cállate!
— Fred y yo nacimos el mismo día, pero con un año de diferencia. — ríe Roxanne.
— Es cierto. Es… divertido y extraño. — responde su hermano.
— No fue hecho aposta. Lo juro. — se añade su padre a la conversación.
— Pero es divertido. — le ríe Angelina.
— Lo importante es que estemos todos el 31 de agosto para celebrar el cumpleaños de Rose. — señala Albus.
— Siempre, cariño. Y si no podemos estar todos, al menos, la mayoría. — le secunda su padre.
— ¿Lo celebrarás con tus amigas también? — le pregunta Percy a su sobrina.
— Sí, iré con Evanora, Madeleine y Marlene en el mundo muggle. O eso tengo pensado.
— También tenemos que celebrar el cumpleaños de Percy el 22 de agosto. — dice Audrey.
— Por supuesto. Nosotros tenemos pensado llegar al veinte de ese mes. — responde Arthur.
— Nosotros también llegaremos antes. Hay que comprar los materiales de Louis y Dominique. — responde Bill.
— Nosotros iremos a Rumanía en septiembre de vacaciones. No podemos cerrar la librería en verano, que es cuando hay más clientela. — responde Nadia. — Pero Lottie, papá y mamá vendrán para celebrar los cumpleaños de Rosie y el tío Percy.
— ¡Es que siempre tenemos celebraciones en esta familia! — se ríe James. — ¡Como somos tantos!
Georgie lo mira con las cejas alzadas.
— Si no fuéramos tantos, nos aburriríamos.
— Te aburrirías mucho, Jamie. Nadie podría ver tus payasadas.
— Cállate, Archie. — le saca la lengua su primo.
— ¡James! — le regañan sus padres.
— Este septiembre volveré a Brasil. A seguir con mi formación de magizoólogo. — les dice Levin.
— ¡Qué bien! — celebran toda la familia.
— Volveré para Navidad. No os preocupéis. — aclara.
— Más te vale. — le riñen su madre y su abuela.
— ¿Tú estás contento con tu trabajo en el Ministerio, Reginald? — le pregunta Andromeda.
— Sí. Mucho. Me gusta mucho el ambiente de trabajo, aunque sea un departamento con mala fama. Ya sabes Artes Oscuras… hijos de mortífagos…
— Lo que piensen los demás no importa. — Andromeda es una Slytherin orgullosa. Ella sabe que ser una serpiente no es igual a ser mortífago.
— Bueno, ya que estamos hablando de buenas noticias. — Georgie mira a su tío tocayo y se levanta. — Vamos a abrir una tienda de Sortilegios Weasley en Estados Unidos. Yo la llevaré.
— ¡Oh!
— ¡Qué bien!
— ¡Qué callado os lo teníais! — Ginny mira a George Weasley.
— También volveré a casa para Navidad. — Georgie mira a su madre y hermana.
— Bien.
— Entonces, solo me quedaré en casa con Arthur y Reginald. — Verity mira a sus hijos.
— Siempre, mamá. — le sonríe Arthur.
— Nos convertiremos en tus hijos favoritos. — Reginald pone una sonrisa inocente.
— No sé si sois tan buenos. — ríe Ginny. Arthur se hace el ofendido, mientras que Reginald se encoge de hombros.
— ¿Tenéis ganas de terminar Hogwarts y empezar vuestras aventuras? — pregunta Audrey a sus hijas.
Lucy se encoge de hombros y Molly hace un gesto de "más o menos".
Ginny abraza a George contenta por su progreso en la tienda, el sueño de ambos gemelos. Después, hace lo mismo con Ron, quien lleva las finanzas.
Terminan la comida y Arthur y Molly sacan una tarta de vainilla y nata que pone "Cincuenta aniversario".
Ambos cortan la tarta y reparten los trozos para cada uno.
Después, llenan las copas de champán, zumo para los menores de edad, y Arthur y Molly exclaman:
— ¡Por muchos años casados más!
— ¡Por muchos años casados más! — repiten todos.
Beben.
Se me ha alargado un poco el fic. Siento que todos los personajes hablen poco, pero es que la familia Weasley es una familia muy numerosa.
Alexia Flint es una OC, novia de Dominique, podéis leer sobre ellas en La golpeadora de Gryffindor y la buscadora de Slytherin, Hogsmeade y tienen un drabble en ¿Podrá cumplirse?
Verity es un personaje del que solo se sabe el nombre. Es la trabajadora de Fred y George en Sortilegios Weasley. Podéis leer su historia de amor con Fred en Amor en Sortilegios Weasley, salen sus hijos y sus sobrinos trillizos al final. También sale con sus hijos en Drabbletober 2023 y sus hijos salen como personajes secundarios en Dulce Hogar cumple un año. También es una de las protagonistas en El bando perdedor tras la guerra.
De las amigas de Rose, solo he escrito sobre su amistad con Evanora en varios drabbles de Anécdotas del día a día y Vivencias, mis recopilaciones de fics de Harry Potter.
Siempre pensé que Arthur merecía un nieto con su nombre al igual que su esposa y sus consuegros Potter. Pero no cambiando el nombre a Albus Severus, sino como un hijo para Charlie o un hijo póstumo de Fred. He buscado y hay varios diminutivos: Art, Archie, Artie o Bear (el significado del nombre de Arthur). El que más me ha gustado es Archie.
Espero que os haya gustado, en especial, a Dani, por ser quien pidió el desafío.
Hasta la próxima
