Aclaraciones:
Narración
-Diálogo-
-Pensamiento-
- Pensamiento inner Sakura-
-"Recuerdo de algún diálogo pasado"-
&&&& Cambios de escenarios/
( N.A. Notas de la autora)
Naruto no me pertenece, los personajes e historia son una creación de Masashi Kishimoto.
CAPÍTULO 6
Sasuke era orgulloso, pero sobretodo testarudo, y si alguien lo sabía con certeza ese era Naruto, pero si Uchiha era testarudo más lo era Uzumaki; y esa tarde, después de estar tras él durante quien sabe que tantas horas, siguió con su rutina, con la fuerte convicción de no darse por vencido hasta lograrlo.
-Vamos Sasuke, tienes que ir.
-Tsk, cómo molestas.
-Y tú como la….-Naruto suspiró tranquilizándose y recuperó su semblante alegre –anda vamos, no te vas a arrepentir, ¡de veras! No seas amargado anda- el rubio tomó el control de la televisión y apagó el aparato, Sasuke giró, con su rostro enojado y por primera vez encaró al jinchuiriki.
-Dame eso- pidió.
Uzumaki negó con la cabeza y cruzándose de brazos dijo –no, hasta que me digas que iras-
-Sabes que no lo haré- dijo incorporándose colocándose frente al rubio.
-Entonces no te lo daré- dijo con igual pose decidida.
Naruto y Sasuke se miraron fijamente, Sai sólo permaneció sereno, observando el reloj de la pared y pensando que ya se les estaba haciendo terriblemente tarde.
Los ojos negros de Sasuke miraron a su mejor amigo, pero estos permanecieron impasibles indicándole lo que desde hace tiempo sabía, que su amigo Naruto hacía bastante que le había perdido el miedo y que definitivamente era un terco y fastidioso de lo peor.
-Tsk- bufó, sentándose de nuevo en el sillón – haz lo que quieras- dijo con fastidio.
Naruto junto sus cejas molesto ante la terquedad de su compañero y estaba por hablar cuando una tercera voz lo interrumpió.
-Es tarde.
-Por quinta vez Sai ¡ya lo sé! - dijo con un tono levemente molesto y suspiro – perdona, ya voy –el pintor simplemente suspiró y permaneció en la puerta pesando en la increíble persistencia del rubio – sólo un intento más, sólo una oportunidad más… anda vamos, es importante y…
- ¡Quieres dejar de fastidiarme! - exigió desde el sofá con su paciencia por completo desecha.
Su mejor amigo lo había estado acosando desde hacía bastante para que asistiera a esa tonta reunión de su maestro y de Sakura, tenía días y días negándose, pero el insistía e insistía hasta hastiarlo, y había sido benevolente con él, hasta se había controlado un poco para no parecer tan grosero, pero todo tenía un límite, ¿acaso Naruto era tan tonto como para no darse cuenta de que él no quería ir y verles las caras a esos dos?
Después de todo sino aceptó ir con él cada domingo después de que fuera con Hinata, ¿por qué sería hoy distinto?, porque ellos (Yamato, Sai, y el resto de los chicos) iban a verla cada fin semana, como mínimo, cosa que no le importaba, lo que lo molestaba era como Naruto lo trataba de convencer para ir a pesar de saber que no quería, pero el rubio era tan terco e ingenuo como para pensar que esta vez sería distinto.
-¿Acaso eres tan idiota que no te das cuenta que no quiero ir?- preguntó.
-Y ¿acaso no te das cuenta de que queremos que vayas?
-Tsk,- bufó –sí claro, como si fuese hacer falta, como si no fueran a ir otros.
Naruto negó con la cabeza –¡tú eres el idiota! – exclamó, Sasuke lo miró con desdén desde su asiento – sí Sasuke, lo eres, hasta el más tonto se da cuenta de que si te insisto tanto y si te aguanto tu carota no es por puro gusto, ¡ no!, no soy tan tonto o estúpido como crees, ni tu desplantes son tan lindos como para aguantarlos de a gratis, te crees el mejor de todos pero no eres lo suficientemente listo como para darte cuenta de que si te he soportado todo esto es porque queremos que vayas, porque aunque otros vayan para ella es importante que vayas tú, porque tus amigos siempre te esperan, porque siempre están para ti, porque para eso son los amigos.
Sasuke sonrió con desdén y regresó su vista a la pantalla oscura –claro, lo había olvidado, mis amigos…, tus amigos…, no puedo creer como es que vas a verlos sabiendo lo que te hicieron, sabiendo que Kakashi sensei te quitó a Sakura y a ella no le importo ese estúpido amor que tanto le profesaste, ¿dónde quedó la dichosa "amistad" que tanto dices cuando esos dos se revolcaron?, crees que pensaron en ti, ja, creo que no soy el único ni el más idiota aquí.
-Sasuke, cállate- dijo terriblemente enojado.
-Te duele la verdad ¿no?- sonrió – yo no te creo, no creo que seas sincero cuando dices eso, no te creo, me das pena- lo miró de soslayo, sonriendo cínicamente.
Sai permanecía sereno y a la expectativa pensando que la discusión pronto terminaría y que tal vez tendría que estar listo para intervenir ante una pelea, pero ante su sorpresa las cosas no adquirieron el rumbo que esperaba.
Naruto arrojó el control a un costado del Uchiha y suspirando pausadamente giró encaminándose hacia la puerta con Sai, el pintor se sorprendió al ver como Naruto lucía extrañamente tranquilo.
-Tú eres el que me da pena – dijo con tranquilidad – me das pena Sasuke, aún no lo comprendes, después de tanto aún no aprendes - Uchiha apretó la mandíbula al sentir la mirada triste y decepcionada de Naruto en su nuca, el rubio terminó por encaminarse a la puerta – y no te preocupes que a partir de hoy te dejo en paz, no volveré a fastidiarte, no vale la pena.
Lo último que escuchó fue el sonido de la puerta al cerrarse, tomó el control y encendió el televisor; pero fue inútil, no podía concentrarse, las palabras y la mirada decepcionada de Naruto no lo dejaban tranquilo.
Gruñó y apagó el televisor –¡maldito dobe! - tiró el control contra la pared no importándole en lo más mínimo el hecho de que tendría que comprar uno nuevo –estúpido Naruto- escupió al dejarse caer en el sillón, mirando el girar del abanico de techo.
Suspiró –"me das pena Sasuke, aún no lo comprendes, después de tanto aún no aprendes"- las, aparentemente difíciles de entender, palabras de Uzumaki resonaban en sus oídos, claro que las entendía, claro que sabía a qué se refería con esas oraciones, y entonces recordó.
-"Sasuke kun"- Sakura lucía feliz, tranquila, cansada, agotada, hasta herida y sucia, pero completamente sincera y contenta –"bienvenido a Konoha"- Sakura sonrió –"a tu hogar"
En esos momentos la tranquilidad y alegría de ella se transmitió hacía su cuerpo inundándolo de una completa calma y paz, sonrió con sinceridad como desde hacía mucho tiempo no.
Y fue así como asintiendo y apoyándose en los hombros de la chica y de Naruto, y sabiendo que Kakashi los esperaba dentro, entró por las grandes y majestuosas puertas de Konoha.
Al parecer para ella no importaba que había hecho, no importaba si él alguna vez estuvo a punto de matarla, y que gracias a Dios Kakashi evitó a tiempo, no importaba el rencor, la ira, el cinismo y la fría mirada que el odio y la venganza habían acentuado en su rostro, ni como habían oscurecido su alma, al parecer para ella no importaba nada, porque ahí, parada en la puerta de Konoha, sus ojos verdes lo seguían viendo con aquella alegría y cariño con que lo viera siempre, con tanta tranquilidad y esperanza que supo que todo había terminado y que de ahora en adelante todo estaría bien, que ya podía estar en calma, en paz, porque aunque no tenía padres, ni hermano, ni clan, ahora tenía a sus amigos, siempre los había tenido.
Se llevó una mano a la frente y suspiró ante los recuerdos.
–"Buen trabajo Sasuke"- el ninja copia sonrió arqueando su pequeño ojo negro colocando una mano en su hombro, él no dijo nada, sólo sonrió de medio lado contento, orgulloso al presentar, junto con Naruto, dos exámenes en dos días, chunnin y jounnin, y obviamente aprobar.
Aún recordaba ese sentimiento de orgullo y satisfacción que sentía al saberse aprobado y al escuchar las palabras de su mentor. Aún rememoraba cómo a pesar de saber que esa oportunidad se le había dado al ex–renegado de la villa había sido gracias a Kakashi y a Tsunade, a sus negociaciones con el consejo, siempre supo que se lo debía a él, a pesar de que nunca comento nada, ni esperó un agradecimiento de su parte, agradecimiento que obviamente nunca le dio, al menos no con palabras.
También sabía como muy probablemente le debía mucho más que eso, como la aceptación de su regreso a la aldea, porque él no era estúpido y sabía que para poder regresar a Konoha se necesitaba mucho más que haber ayudado en la derrota de Madara.
Y aún recordaba cómo fue que después de recibir el "buen trabajo" no se sintió tan mal como esperaba al no tener ni a sus padres, ni a su hermano, ni a su clan con él en esos momentos tan importantes para un shinobi, porque a pesar de no tenerles, a pesar de que no era como siempre lo soñó, como lo añoraba desde niño, aún así no se sentía tan mal, tan triste al no tener a ningún familiar junto a él, porque sabía que los tenía a ellos, su nueva "familia", tenía amigos, siempre los había tenido.
–"… ¡tú eres el idiota!" … "porque, aunque otros vayan para ella es importante que vayas tú, porque tus amigos siempre te esperan, porque siempre están para ti, porque para eso son los amigos…"
-Estúpido Naruto…- sonrió abriendo los ojos, se incorporó y suspiró –maldito Dobe, me debes un control remoto- sonrió y se encaminó a la salida, justo al llegar a la puerta paró mirándola largamente como si se tratará de un gran enemigo, suspiró y con decisión tomó -0-0-0-0-0-
Sakura tocaba con ligereza el pequeño moño que reposaba en uno de los regalos que estaban sobre la mesa de la sala, era de un precioso listón dorado. Suspiró tocando la tela de su camisón.
-Es muy considerado de su parte- escuchó a su costado.
-Si- Sakura asintió tranquilamente y colocó la mano en su abultado vientre –él es muy bueno – susurró.
Kakashi tomó la pequeña tarjeta que decía "Felicidades Sakura" y sonrío al ver la firma "Uchiha Sasuke" –, debe ser un buen regalo para que digas eso de Sasuke.
Sakura sonrió levemente y giró mirando como Naruto y Hinata conversaban animadamente junto al resto de los novatos –no me refería a él, sino a Naruto- Kakashi sonrió girando igual, colocándose a su costado.
-Lo sé- suspiro y metió las manos a sus bolsillos –hasta se molestó con una tarjeta.
-Sí, esta vez dijo que no pudo venir porque tenía una misión importante…, -Sakura suspiró y sonrió –me da pena decirle que no le creo, que se que son mentiras, que simplemente Sasuke aún no…- dijo con tristeza -así que sólo le dije que estaba bien, que yo comprendía.
Kakashi suspiró y mirando la tristeza de Sakura la tomó de ambos hombros provocando un sobresalto en ella y un sonrojo tenue que contrastaba con su blanca piel –está bien, él comprenderá, sólo dale tiempo, sabes que es lento con estas cosas.
Sakura asintió y con nerviosismo llevó una mano a su hombro colocándola sobre la de él –si…, lo sé- dijo nerviosa al verlo tan cercano.
Kakashi no se mostró nervioso ante el contacto de la chica ni a su cercanía y confianza, desde hace tiempo, desde hacía unos meses, especificamente desde que sintiera al bebé en aquella ocasión donde Naruto los visitó, esa clase de trato ya era más cotidiano entre ambos, como si fuese algo natural, lo cual no evitaba sentir ese cosquilleo extraño y confortable ante su tacto, ni la tranquilidad que ella le daba.
A Sakura, por su parte, le pasaba igual, sólo que para ella además de sentir las cosquillas o mariposas en el estómago, a las cuales ya estaba acostumbrada, se sumaban los nervios y cierta timidez que no la dejaba tranquila, ni disfrutar al cien por ciento de la dicha que el tacto del ninja copia le daba; todo porque le daba miedo despertar de ese hermoso sueño, cada vez más y más, volviéndolo sumamente angustiantemente.
-…es sólo que…- Sakura giró un poco el rostro, mirando a Naruto –, me gustaría que fuera pronto…- suspiró –por él.
-Hum…- Kakashi suspiró –Naruto estará bien.
-Eso espero.
Ambos shinobis miraron hacía su amigo y compañero, Uzumaki lucía alegre y entusiasmado, como siempre, incluso su resonante y fuerte voz se escuchaba por sobre las demás, hablando de cada cosa que se le ocurría tratando de lucir alegre ante los ojos de todos, pero Sai, Sakura y Kakashi sabían que dentro de él la preocupación no lo dejaba disfrutar de la reunión al pensar en su amigo Uchiha.
La "reunión" en realidad se estaba transformando en algo más que simplemente eso, al parecer la palabra "fiesta" vendría mejor para definirla.
Tsunade suspiró satisfecha al ver como sus ninjas convivían armoniosamente, lo había planeado pensando que a todos les vendría bien un descanso, algo con que pasarse el estrés del mundo ninja y olvidarse por un momento de misiones, guerra, postguerra, enemigos y muerte; ¿qué mejor excusa que una pequeña "reunión" en casa del vago (para no pagar local) con motivo del embarazo y próximo nacimiento de su "nieto"?
Como era de esperarse inicialmente Sakura se negó, a pesar de ello la quinta la ignoró magistralmente y organizó esa especie de "baby shower", y era "especie", por qué esa definición tampoco era la más correcta.
Si, Haruno se negaba por el hecho de saber que no tendría el suficiente número de mujeres para organizar un evento de esa magnitud, no era que no conociera a muchas mujeres de la aldea, porque las conocía, pero sabía que debido a los prejuicios ellas no asistirían, al parecer buena parte de los aldeanos aún estaban algo sorprendidos por la inusual pareja, sin embargo, a pesar de sus argumentos no se le tomó su parecer y su madre y su maestra hicieron todos los preparativos, dejándola de lado haciéndola sentir una inútil y desplazada.
Al final las cosas salieron bien, después de todo sino tenía la suficiente cantidad de invitadas para la fiesta de su bebé, si tenía el suficiente número de compañeros ninjas para llenar la casona Hatake de risas, felicitaciones y una que otra canción de cuna entonada por Lee y Gai.
A la reunión habían asistido muchos shinobis, no todos, pero si los más conocidos e importantes para ella, los anteriormente llamados novatos (su generación ninja, que de novatos solo quedaba el nombre por nostalgia), el equipo Gai, Kurenai sensei, Shizune, Iruka, Kotetsu, Genma, en fin, sus más allegados amigos, ¡hasta Temari y Kankruo vinieron de Suna!, el pobre Gaara no porque estaba demasiado agobiado de trabajo, pero eso no evito mandarles sus más sinceras felicitaciones y buenos deseos.
No había sido cualquier baby shower, no en todos hay hombres, no en todos hay ninjas, y no en todos hay alcohol, petición de Tsunade, obviamente.
En fin, francamente muchas y agradables sorpresas tuvo ese día, cómo el hecho de saber que por fin las cosas se habían arreglado entre Shizune y sus dos pretendientes, donde la chica decidió quedarse con Iruka, y donde al pobre Kotetsu no le quedaba de otra más que aceptarlo y tratar de superarlo, así que sólo daba continuas y discretas miradas de resignación ante la pareja, lo bueno era que contaba con el apoyo de su siempre fiel amigo Genma.
También estaba esa gran sorpresa que Gai les dio al presentarse frente a ellos, con la que logró aliviar el momento de tensión ante la inusitada proclamación que hizo que todos se quedaran estupefactos por un momento.
-Oh, Kakashi- dijo el cejotas acercándose a la pareja y provocando que el cálido tacto que ambos compartían se perdiera ante el efusivo abrazo que Gai le diera al desilusionado ninja copia – muchas felicidades, francamente nunca te imagine como padre, ni siquiera como esposo…
-Hum… gracias, creo.
-Oh, Sakura- y estaba por abalanzarse sobre la chica cuando Kakashi lo tomó del cuello –lo sé, lo sé, seré cuidadoso, vamos, que exagerado has resultado… - dijo recuperando la compostura, ya más tranquilo la abrazó sin tanto entusiasmo – felicidades niña, en verdad que Kakashi ha tenido mucha suerte de que seas su mujer.
-Gracias Gai sensei- dijo avergonzada ante ese "su mujer", estuvo a punto de estornudar ante el roce de los negros y gruesos cabellos de la bestia verde.
-Lee, Lee, ¿dónde demonios esta mi alumno? - preguntó obviando que las copas de sake ya estaban haciendo su efecto.
-Acá estoy, Gai sensei- apareció de la nada por un costado.
-Oh, mi apreciado y joven alumno, míralos- y señaló a la pareja que comenzó a sentirse terriblemente incómodos ante esos dos – ¿ves?, te lo dije, hacen una linda y feliz pareja – posó una mano en el hombro de su alumno y comenzó a llorar con su tradicional cascada de lágrimas –, puedes estar tranquilo, la bella y preciosa Sakura está en buenas manos, mi eterno rival la hará una mujer muy dichosa.
-Si, Gai sensei- dijo moviendo su cabeza de un lado a otro llorando sin poder evitarlo, o intentarlo si quiera–; usted tenía razón, ahora estoy más tranquilo – Rock Lee se inclinó y abrazando a Sakura dijo –muchas felicidades Sakura san, - luego giró y reverenció con mucho respeto ante Kakashi –Kakashi sensei, felicidades, es una gran mujer – el ninja copia asintió –hágala feliz.
-Si- dijo con una sonrisa sincera, Sakura también sonrió.
Después de la bochornosa escena donde Lee dejó finalmente por completo cualquier posibilidad de romance correspondido por la kunoichi, tomó a su maestro del brazo, cargándolo porque Gai empezaba a sentirse un poco mareado por el alcohol y las lágrimas.
-Lee— dijo Sakura – no vayas a tomar, por favor.
-No te preocupes, Sakura san- dijo con seriedad aun con unas pocas lágrimas, – se lo prometí a Gai sensei, además lo tengo que cuidar- sonrió y se encaminó a otra parte de la sala de la casa Hatake.
-¡Espera Lee!- gritó Gai haciendo que ambos tambalearan a punto de caer – deja, deja, yo puedo solo- agregó al soltarse de Lee, el alumno hizo caso pero permaneció a su costado atento ante cualquier muestra de descoordinación –, además, esto lo tengo que hacer por mi propia cuenta-, como pudo Gai se plantó frente a un sorprendido Kakashi, quien solo suspiro ante lo que sea que haría el hombre –¡escucha esto, mi eterno rival, escuchen todos!- todos callaron y vieron como Gai subió su brazo y continuó –yo, Maito Gai, proclamo que no me has de ganar tan fácilmente – y subió su pulgar y con voz resonante agregó – ¡yo, Maito Gai, te prometo que no me dejare vencer y pronto te superare, así que disfruta tu corto tiempo de gloria, porque pronto te alcanzaré! – y sonrió con su deslumbrante brillo –, pronto le daré alguien con quien compita- y sus ojos brillaron con entusiasmo y alegría al imaginar todo lo que le esperaba, las nuevas oportunidades y el futuro.
Kakashi sólo suspiró sin saber que decir, el resto de los invitados permanecía con un gesto de interrogación al no entender las palabras del ninja de mallas verdes.
-¡Gai sensei!- Lee dejó de llorar ante lo emocionado que se sentía por la proclamación de su maestro, porque él si sabía a qué se refería, y tuvo que enfocarse en "atrapar" a su héroe antes de que cayera al suelo.
-Oh, Lee, llévame al baño- pidió llevándose una mano a la boca – no me siento muy bien…
-Si, Gai sensei.
Prácticamente Lee salió corriendo al escuchar la ubicación del sanitario, pero justo antes de desaparecer por la puerta de la sala paró y Gai con todas las fuerzas que pudo reunir sonrió y empuñó el pulgar hacia Anko, quien quedó más confusa que nunca y que, al ver la sonrisa y mirada extraña del ninja, tuvo la extraña sensación de que su voz interior le decía que era mejor no seguir bebiendo, aunque al fin y al cabo no la obedeció.
Y fue así como se encaminaron de nuevo al baño ante el susurro constante de Maito que repetía –el futuro, Lee, el futuro.
-Esto… Kakashi sensei- Naruto se acercó sigiloso y pronunció las palabras que todos querían decir, pero que nadie se atrevía - ¿a qué se refería Gai sensei?
Kakashi suspiró y llevándose las manos a los bolsillos perezosamente dijo –, bueno, ya sabes que siempre ha competido conmigo en todo, hasta en esto – y señaló a Sakura, más específicamente a su pancita –, ya se había tardado-
Los pocos que alcanzaron a escucharle abrieron los ojos y sonrieron extrañados.
-¿Y eso qué significa…?- preguntó Naruto al no comprender.
-Significa que si yo fuera Anko dejaría de beber- rió Tsunade, el resto asintió y Anko, ajena a todo, solo estornudó y siguió bebiendo.
-Pobre de Anko sensei- enunció Ino.
-No sabe la que le espera- susurró Ten Ten y el resto de los presentes sonrieron.
Las cosas siguieron relajadas y alegres hasta que una presencia hizo que de nuevo los susurros callaran y toda la atención se centrara en un solo punto.
Sakura sintió su corazón latir más aprisa y sus ojos se abrieron más de lo normal al verlo ahí, no podía creerlo, era casi un sueño, ahí, en el umbral de la puerta el último de los Uchiha estaba parado sin saber muy bien que hacer.
Naruto sonrió ampliamente y miró a Hinata quien solo asintió contenta.
Por un instante las voces callaron, pero al verlo entrar y encaminarse calmadamente rumbo a Sakura y Kakashi reiniciaron su cuchicheo, claro que no sin estar a la expectativa.
Sasuke llegó donde la pareja y permaneció quieto y serio, sin saber mucho que hacer, Kakashi y Sakura permanecieron a la espera de algo, pero al igual que Sasuke no sabían muy bien por dónde empezar.
-Estas gorda…- habló por fin.
Sakura abrió su boca sin emitir sonido alguno, pestañeo y sonrió asintiendo – es lo que pasa con el embarazo…- agregó un poco molesta y un poco alegre tocándose el vientre.
Como el mismísimo rayo Naruto llegó, recordándole a Kakashi a su sensei Minato –Sasuke, Sasuke, terminaste tu misión a tiempo, que bueno, de veras.
-¿Misión?- susurró el Uchiha al verlo a su costado.
-Si, tu misión- dijo Naruto mirándolo a los ojos.
-Ah…ah si…si- dijo no tan convencido.
- Que bueno que estas aquí- dijo Sakura divertida ante los esfuerzos de Uzumaki – gracias por el regalo.
-¿Regalo?- susurró.
-Hey, Teme-, exclamó contento Naruto, interrumpiendo -¿no vas a felicitarlos?
-Naruto- susurró Sakura al pensar que ya era bastante pedirle a Sasuke ir a verlos como para encima tentar a la suerte con eso.
Sasuke sonrió con ese tinte irónico que les daba a sus labios –si, por qué no- se acercó a ella y ante la sorpresa de la chica le extendió los brazos rodeándola por completo –felicidades- dijo simplemente.
Ella estaba tan conmovida que no podía creerlo, había esperando tanto para eso que luchó por detener las lagrimas que llegaban a sus ojos y sólo asintió –gracias.
Sasuke se separó más relajado, después de todo con ese abrazo no sólo Sakura se había quitado un peso de encima, él también; posteriormente miró de soslayo y se encontró con el ninja copia, dio un paso, Sakura y Naruto no respiraban, Sasuke miró de pies a cabeza al que fue su maestro, estaba sereno y despreocupado, como siempre.
Sasuke se paró frente a él y estiró la mano, Kakashi la tomó y sostuvo el saludo –felicidades- murmuró.
-Gracias- pronunció Hatake con el mismo tono bajo de Sasuke.
Fue más que un apretón de manos, obvio que el Uchiha no le daría un abrazo efusivo o cariñoso, eso no era Sasuke, pero con ese saludo era suficiente para dejar atrás los conflictos, empezarían de nuevo, una vez más, porque para eso es un amigo, para estar siempre contigo.
-Ven Sasuke-, dijo Naruto tocándole el hombro – Hinata hizo un pastel bien rico, te va a gustar, de verás.
Sasuke se dejó llevar por su amigo no importándole el hecho de aclararle y recordarle que no era muy aficionado a los postres, no dijo nada porque decidió acatar cada petición y cada comentario que su amigo le hiciera ese día, después de todo Naruto se lo merecía.
-Ah…por cierto- susurró Naruto una vez que estuvieron lejos de la pareja – me debes un regalo…
Sasuke sonrió de medio lado – y tú me debes un control remoto, estamos a mano.
-¿Eh?- Naruto se quedó parado sin saber que decir –¡hey Teme, el regalo es más caro!
Y así paso un poco más de tiempo donde el cual las risas y conversaciones no se hicieron esperar, donde Sakura sonrió y donde se sintió satisfecha por tener a todas las personas importantes cerca de ella.
Bueno, cierto que su padre no había asistido, pero no se podía quejar, ya era mucho que Sasuke Uchiha asistiera y con eso estaba más que satisfecha.
-Hacen una bonita pareja, ¿no crees? - preguntó Kakashi al observar cómo Sakura miraba desde hace tiempo a Hinata y Naruto.
-Si…- suspiró.
-¿Y ese suspiro?- sonrió él – ¿no me digas que estas celosa?- preguntó medio en broma, medio en serio.
Sakura sonrió con un dejo de nostalgia – a decir verdad, un poco- Kakashi permaneció sereno ante la respuesta de la chica –, no es lo que cree, es que… digo, es extraño, Naruto es como mi hermano – dijo ella sonriendo haciendo que Hatake se relajara más –, es que… es diferente, siempre supe que Naruto no era para mí, o yo para él, y que haría su vida con otra chica, pero es un poco raro hacerse a la idea de tener que compartirlo.
-Ah, ya va, ya entendí. La hermanita está celosa, ¿eh?
Sakura rió y tomó el refresco que Kakashi le ofrecía –sí, algo así, - dio un sorbo al vaso - espero y pronto estén juntos.
Kakashi asintió y siguió mirando el ir y venir de los ninjas pensando que no fue tan caótico como pensaba el que sería el festejo, sonrió y se admiró de que sus perros estuvieran en la reunión y que se comportaran mucho mejor que algunos de sus compañeros, lo cual era algo que lo hacía sentir orgulloso, aunque eso se debía más a la influencia de Sakura que de él (les había advertido que se comportaran sino no les dejaría estar mucho con el "cachorro").
-Oye Sakura, ¿no crees que…- pero las palabras murieron en la boca de Kakashi al ver como la antes sonriente cara de la kunoichi había cambiado a una de tristeza, haciendo pucheros y estando a punto de llorar -¿qué pasa, te sientes mal?- Sakura negó con la cabeza mirándolo al ojo -¿quieres algo?- nuevamente negó –entonces, ¿qué te pasa?-
-Es...es que…- sollozaba –yo... yo- Kakashi esperaba paciente y atentamente -¡estoy gorda!- y ya no aguantó más, lloró.
Hatake estaba admirado y abrumado, dejó el vaso en la mesa y se acercó un poco más a Sakura –ya te lo he dicho, no estás gorda…tu…-
-¡Lo estoy!- bramó Sakura borrando la cara de tristeza a una de enojo que puso más nervioso al ninja copia –Sasuke lo dijo- y el enojo se convirtió en llanto una vez más.
-Hum…Sasuke, bueno, Sasuke… ese Sasuke... ya sabes cómo es, es Sasuke, no hagas caso.
-Pero me dijo gorda- y se señaló el estómago – y es cierto, estoy gorda, y fea, y…
Kakashi sonrió y colocó una mano en la cabeza de la joven –ya, ya, no estás gorda- Sakura se calmó un poco pero no dejaba de hacer pucheros que hacían sonreír al ninja copia –estas embarazada, tú misma lo dijiste ¿no? –asintió no muy convencida – si te vez así es porque estas embarazada, no porque estés…
-Gorda, si, lo sé- y de nuevo sollozó –es que... yo… lo sé, pero no puedo dejar de pensar que me veo gorda y fea…
-No estas GORDA – corrigió Kakashi agradeciendo a todos los cielos por darle tanta paciencia – estas embarazada.
-Pe...pero es igual...- Kakashi colocó un dedo en sus labios, silenciándola y sonrojándola.
-No, no, no es lo mismo- dijo, después levantó su dedo y lo movió de lado a lado – y no, definitivamente no te ves fea – sonrió al ver el sonrojo de Sakura, lucía tan adorable, tan hermosa, a pesar de los continuos cambios de humor, que a veces no eran tan fáciles de sobrellevar y corregir – de hecho, te ves más hermosa que nunca.
-¿De verdad lo cree? –Sakura bajó la mirada y se sonrojó más – ¿lo dice en serio, Kakashi?
El ninja copia sonrió para sus adentros sintiéndose sumamente contento al escuchar una vez más como la chica ya lo llamaba sin el "sensei", aunque le seguía hablando de usted.
-Por supuesto- tocó un mechón de la chica y lo colocó tras su oreja – ¿nunca has escuchado que la mujer luce más hermosa cuando está en ese estado? - Sakura asintió sonrojada –pues tu eres uno de esos casos, así que no te preocupes, ¿de acuerdo?
-De acuerdo- susurró Sakura sonriendo ligeramente.
A unos cuantos metros, Tsunade y la madre de Sakura contemplaban la escena.
-Se ve que se quieren mucho, ¿no es cierto? - la voz de Mebuki la distrajo de sus cavilaciones.
-Eso parece- dijo Tsunade tomando un trago de vino.
– Kakashi la trata muy bien, nuestra niña no tiene de que quejarse con él- siguió Mebuki sonriendo, luego se retiró al escuchar cómo su Sakura le hablaba –ella es feliz- susurró antes de irse y despedirse de Tsunade.
-Sí, eso parece – susurró tomando otro sorbo de ese delicioso y majestuoso vino.
La quinta pensó que tal vez era que ya se estaba volviendo vieja y suave de carácter, tal vez era que se sentía nostálgica al ver como su "niña" estaba ya en sus últimos meses antes de dar a luz, o tal vez era que los efectos del vino ya le estaban nublando la mente, pero fuera lo que fuera la idea de que Kakashi no era tan mal prospecto para su alumna, y de que quizás verlo al lado de su niña no era tan malo, y de que a pesar de todos los obstáculos, personas y dificultades que Hatake había pasado desde aquel día que se confesó como padre del hijo de su amada Sakura, muchos de los cuales ella misma se lo puso, los superó constante y satisfactoriamente, todo esto hacían que la quinta reconsiderara la idea de hablar de nuevo con el consejo y de retomar la propuesta de Hatake como su sucesor.
Y es que, después de todo, Hatake era buena opción, y aunque los ancianos del consejo le habían cerrado todas las posibilidades a Hatake por esa "aventura" con su alumna (decisión que Kakashi no refutó y que por supuesto Sakura ignoraba), ella era Tsunade, la quinta Hokage de la aldea escondida entre las hojas, una kunoichi difícil de ignorar y con un gran poder de convencimiento.
-¡Que los abra, que los abra!- empezaron a corear.
Sakura sonrió y miró a Kakashi quien solo asintió.
-Muy bien- dijo la festejada y se colocó tras la mesa y tomó la primera caja que destrozó en unos cuantos segundos –¡ah!, es muy bonito- dijo alzando la pequeña prenda ante todos.
Kakashi pronto se vio rodeado por todos los invitados que se aglomeraron alrededor de la mesa para ver la apertura de los obsequios.
Hatake se admiró un poco al pensar como a pesar de estar tan apretujado entre los shinobis no se sentía incomodo, a diferencia de las mayorías de las veces cuando estaba entre mucha gente que hablaba y gritaba, esta vez se sentía bien, y sabía porque, era por ver como ella sonreía y reía finalmente con seguridad y sinceridad como desde hacía meses no lo hacía, el ver como Sakura era feliz entre sus amigos, entre las personas que tanto quería y apreciaba le hacía más fácil todo, sobre todo el ver su casa llena de gente, cuando antes solo estaba él.
Porque si Sakura era feliz todo estaba bien, porque él era feliz si ella lo era.
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-No, espere, no…
Sakura no terminó de hablar, una mirada gélida y distante la calló instantáneamente, nunca pensó que esa mirada de odio que en raras ocasiones daba el ninja copia sería dirigida hacia ella.
-No, Kakashi…
Hatake la miró de pies a cabeza y con rencor negó con la cabeza dando media vuelta y alejándose de ella. Sakura sintió una terrible opresión en el pecho, él se alejaba, él la dejaría; la dejaba y ella simplemente no podía soportarlo, era demasiado doloroso, demasiado insoportable.
-¡No, espere, Kakashi!, por favor – las pocas fuerzas que tuvo le ayudaron a correr tras él, tenía que detenerlo – no…- colocó una mano en su hombro, él paró, ella sonrió esperanzada y suspiró con la respiración entre cortada por tanto correr –no se vaya, no me deje.
-Me mentiste- dijo él en respuesta, la voz gélida y cortante de Hatake le dolió más que cualquier kunai.
-Yo… yo…
-Me mentiste – Hatake dio media vuelta y retiró la mano de su hombro con repulsión y presteza – no te perdonaré, nunca lo haré – Sakura dio un paso hacia atrás, soportaba muchas cosas, pero no el odio y el rencor reflejados en los impares ojos del ninja copia – me mentiste- y él dio media vuelta y ella estuvo a punto de hablar cuando él le miro de soslayo y dijo – te odio.
Fue entonces cuando las pocas fuerzas la abandonaron, ni siquiera logró sostenerse en pie y cayó al suelo sentándose, alzo la vista y vio como la silueta se volvía cada vez más lejana, cada vez más distante.
-Kakashi, no me deje, no…
Entonces el eco de la voz de Kakashi resonaba en sus oídos a la vez que repetía el "me mentiste" y el "te odio" continuamente.
Comenzó a llorar, pero el llanto no la consolaba, esta vez no la tranquilizaban, esta vez nada parecía ayudarla.
-No me deje- susurraba viendo la silueta lejana de Kakashi –no me deje… por favor…
Él se iba, se alejaba, cada vez más, y ella solo podía llorar.
-¡NO!
Sakura despertó sobresaltada, sudaba continuamente, había sido un sueño, no, había sido una terrible y horrible pesadilla, aún nerviosa y asustada comenzó a respirar forzadamente y llorar copiosamente.
Una luz la cegó y miró como Kakashi entraba sin tocar esta vez la puerta.
-Sakura, Sakura- la llamaba, se colocó a su costado –Sakura ¿qué pasó, estas bien? Te oí gritar, ¿estas llorando? ¿Qué pasa?
—Nada, es que… —Sakura tomó sus manos y empezó a sollozar –Kakashi yo..yo…
-Sshh... sshhh…- Kakashi conocía esa reacción, cuando era todavía su alumna y una niña muchas veces la consoló cuando dormía con mal sueño y pesadillas, o en las noches de tormenta, cuando los rayos no la dejaban dormir, se sentó junto a ella y la abrazó –tranquila, tranquila, sólo fue una pesadilla, es todo, tranquila.
Sakura comenzó a respirar menos entrecortadamente, tratando de tranquilizarse, pero como aún escuchaba las palabras que Kakashi le decía en el sueño no podía dejar de sollozar.
Hatake tomó el rostro de ella y Sakura pudo ver la cara de ternura y paz que él siempre le daba cuando pasaban ese tipo de cosas –tranquila, todo está bien- dijo él y le secó las lágrimas –solo fue una pesadilla.
-Si... si- Sakura asintió y aceptó recostarse, Kakashi la tapó con la manta haciéndola sentir como una pequeña niña, como aquellas noches de tormentas y malos sueños –, sólo una pesadilla- dijo una vez más, susurrando para ella misma.
Hatake se sintió un poco más tranquilo al verla cerrar poco a poco sus verdes ojos y al sentir como la respiración se normalizaba, lo único extraño era que ella parecía no dejar de llorar entre cada "solo una pesadilla" que daba.
-¿Te sientes mejor?
-Si- dijo ya tranquila, sin llorar.
-Que bien, descansa – una vez seguro Kakashi se incorporó yendo hacia la puerta y apagando la luz –descansa, Sakura chan.
-Kakashi.
-¿Si?- dijo con la manija en la mano, girando levemente.
-Sé... sé que es tonto pe…pero- Sakura estaba nuevamente nerviosa y sonrojada – ¿puede quedarse…? -Kakashi giró y le pareció tierno mirarla tan nerviosa, sonrojada y asustadiza, como esa pequeña niña de hace años –, ¿usted podría?, por favor.
-Si eso te hace sentir mejor.
-Si...sí.
-Entonces si- Hatake cerró la puerta y regresó donde ella – a ver, a ver, ¿dónde? - suspiró.
-Aquí – dijo Sakura desplazándose a un costado.
Hatake se sorprendido llevándose una mano a la cabellera, muy nervioso ante esa invitación tan poco usual, era evidente que Sakura no estaba insinuando nada, simplemente se sentía asustada y quería sentirse segura, pero aun así la situación era inquietante.
Además, Kakashi no sabía cómo compartir cama con una mujer embarazada, obviamente nunca había estado en esa situación, ni siquiera cuando era niño, siempre fue hijo único.
–Ah… este… Sakura… ¿no te molesta que yo…?
Sakura negó con la cabeza un poco sonrojada y sonrió tenuemente –no.
-Pero… ¿no tienes miedo? — Sakura negó, seguía sonrojada y esta vez él también se avergonzó un poco, después aclaró —me refiero, no tienes miedo que pueda lastimarte, ¿cómo es que se duerme junto a una mujer embarazada?
Sakura hubiese reído, si es que no estuviera tan alterada —, igual que con alguien que no lo está – dijo ella son sencillez
-Puedo dormir en el piso. Es que… no quisiera lastimarlos.
-No creo que eso pase- negó ella– no se preocupe por eso, además, esta cama es muy grande – y vaya que lo era, casi cabían cinco personas cómodamente.
-Ok- dijo en un suspiro y terminó recostándose a un lado de la kunoichi.
-Kakashi- dijo Sakura después de un tiempo.
-Hum…
-¿Está molesto conmigo, por despertarlo y pedirle que se quedará aquí?
Kakashi sonrió –no, claro que no, sólo estaba preocupado al escucharte gritar, sólo me asuste un poco.
-Ah… lamento haberlo preocupado.
-Sakura- dijo él y giró el rostro acomodándose de lado para observarla a pesar de la poca luz – no tienes por qué disculparte por eso, ni por nada, anda, duerme.
-Gracias… Kakashi – por primera vez Sakura lo observó detenidamente y se percató de algo, él no traía su máscara dejando su rostro al descubierto ante la luz de la luna, no se sorprendió, ella y el resto de su equipo ya conocían desde hace tiempo su cara, claro que no la observaban muy seguido y era bastante apuesto, por supuesto –su… su máscara.
Kakashi sonrió –no tuve tiempo de ponérmela- rio cerrando sus ojos en ese gesto que tanto le gustaba.
-Lo siento- susurró acomodándose en la almohada tratando de no sonrojarse tanto.
-No importa, descansa- dijo observando cómo los ojos de la chica se cerraban aún con ese respirar entrecortado que dan los malos sueños –descansa, yo estaré aquí, contigo.
-¿Se quedará conmigo?- susurró entre dormida y despierta, tomando una de sus manos.
-Sí, me quedaré contigo- dijo regalándole un beso en la frente - duerme, descansa- Sakura se sonrojó y fue quedándose dormida poco a poco, el ninja copia sintió como el agarre de la mano de la chica desaparecía hasta que se durmió, acomodó su mano y se dispuso a dormir, -me quedaré contigo, por siempre.
La luz de la luna iluminó el rostro durmiente de Sakura, que sonrió entre sueños al escuchar las últimas palabras del ninja, Kakashi sonrió y suspiró.
Y sin poder evitarlo besó sus dulces labios sintiéndose como un ladrón, pero sin arrepentirse de ello, justo para después dormir sintiendo la respiración arrulladora, pausada y tranquila del cuerpo de Sakura.
–Por siempre.
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Saludos desde Sinaloa, México
14-12-24
Hola:
Acá la actualización de Papá Sustituto, ya cerca del final de esta corta y tierna historia.
Siempre me ha gustado esta historia, espero que también les guste. La escribí antes de todo el relajo de la guerra, así que hay cosas que no sabia que pasarían y bueno, la he dejado casi en todo igual, porque a parte de darme flojera editarla, quiero respetar eso de la historia original.
En fin.
Saludos y Dios los bendiga.
Cristo vive, reina y viene.
Nota original:
Ola que viene, ola que va, hola amiguillo ¿cómo les va?... Rectifico que ni Ned Flanders ni sus frases me pertenecen xD, solo las tomo prestadas de vez en cuando, pero son del señor Matt Groening…
Este cap. va dedicado a LUCY y Hatake-Katia (Katia) quienes se mostraron entusiastas y emocionadas con el cap anterior y que me ayudaron a querer mejorar, Gracias LUCY, KATIA…
Chicos y chicas, de nuevo me presento con este sexto capítulo, chan chan chan (redobles), pronto, pronto se acerca el final de esta historia, chan chan chan, dos capítulos más es lo que tengo más o menos planeado, si, estoy emocionada…..
Ojala pueda cumplir con mi plan y pueda actualizar pronto está historia y 1, 2 y 3 que ya están en su recta final, y digo ojala porque ya ven como luego luego tardo casi un mes para hacerlo n/./n lo bueno es que ustedes son pacientes y lindos y me saben esperar….jajaja.
Creo que por el momento es todo, cuídense mucho y que dios me los bendiga.
Hasta pronto.
