CAPÍTULO 16
ESPERO LES GUSTE EL NUEVO CAPITULO
GRACIAS POR SUS COMENTARIOS
Albert estaba feliz de quedarse solo con Candy, la tendría solo para él el fin de semana ya se imaginaba todo lo que harían sin la vigilancia constante de su tía
Llegaron Lakewood y Elroy se despidió de ellos diciendo, mañana te veo en el desayuno George para ir a hacer las diligencias que tenemos pendientes
George llevo a Dorothy a la casa de su padre, claro está no sin antes besarse hasta perder el aliento, ya quiero que seas mi esposa Do no quiero estar lejos de ti ni un minuto decía el bigotón a su joven prometida
Llegaron por fin al hogar de ella y el padre de Do le invito a pasar a George, quería hablar con el sobre ese compromiso tan arrepentido y saber sus intenciones con su hija, pues una cosa era clara no eran del mismo estatus social y no quería ver a su hija decepcionada
Una vez dentro le ofrecieron un trago a George y este lo acepto porque sentí un aire de desconfianza en la familia de su novia
Dio un gran trago a la bebida pues sabía que tenía que contestar algunas preguntas
Bueno señor Johnson, quiero preguntarle algunas cosas, mi hija me dice que le sábado pedirán su mano en matrimonio usted y la señora Elroy
Así es señor, contesto George con aplomo
Dígame por que una familia tan impórtate se toma la molestia de hacer todo esto con nosotros que en realidad no somos… como decirlo… una familia como ustedes
Antes que nada señor permítame decirle que la señora me acompaña porque viene en representación de un hombre que me dio la mejor oportunidad en esta vida. Vera yo no soy un Andrew como lo sabe mi nombre es George Johnson y para mi suerte tuve la gracia de toparme con un hombre como pocos
Por él es que estoy viviendo esta vida y tener una familia por así decirlo
Yo soy francés, tenía 6 años cuando en parís me encontré con una niña un año menor que yo, vestida como muñeca y llorando
Estaba perdida, había salido del hotel en donde sus padres se habían hospedado. Yo la encontré un par de horas después de haber salido del hotel. Recuerdo que me dijo que tenía hambre y frío, yo era un niño que vivía en las calles la mayor parte del tiempo pues mis padres habían muerto y no tenía a nadie que viera por mí
Ella me dijo su nombre y que venía con sus padres pero que se había perdido y no sabía cómo regresar al hotel, era muy inteligente para su edad porque recordaba el nombre del hotel en donde estaba su familia
Yo sabía dónde estaba ese hotel y así nos dispusimos a caminar y llegamos cansados y más hambrientos que nunca. Recuerdo como al verla su madre corrió y la tomo en brazos y lloro de la emoción al ver a su hija sana y salva
Yo estaba a punto de dar media vuelta e irme pero unos brazos fuertes me detuvieron y al igual que a ella me levantaron y me dieron un abrazo como yo no tenía recuerdo de uno hasta ese día, gracias jovencito por traer a mi Rose a nosotros, dijo un hombre bastante alto y rubio
Recuerdo que no supe que decir ante tal circunstancia, pues yo solo era un huérfano solitario que… me da pena decirlo a ustedes que pretendo que me acepten como el esposo de hija o hermana… bueno pues tenía la necesidad de robar para poder comer no era fácil la vida para nadie en aquella epoca
Pero ese hombre cambio esa tarde mi destino, recuerdo que lo primero que hicieron fue sentarnos a comer, pan con queso y carne, estaba sentado en la misma mesa que la hija de aquel hombre y me sirvieron lo que les pedía, fue el mejor día de mi vida hasta aquel entonces dijo el bigotón dando un trago a su bebida
Me bañaron y me dieron ropa limpia y de mi talla, a la hora de la cena nos dieron pan tostado con miel y leche tibia, dormí por primera vez en una cama esa noche. Me dieron un abrazo y un beso tanto el padre de la niña como la mamá
Dormi como nunca, seguro, limpio y calientito entre las mantas y el cariño de esa familia
A la mañana siguiente llego Rose a mi cama, me despertó y me llevo a la recamara de sus padres, ellos tenían un ritual ella brincaba encima de ellos y así los despertaba los fines de semana. Recuerdo estar de pie en la puerta viendo la escena y viendo como recibieron a la niña con abrazos, cosquillas y mucho amor
Hasta que su padre me hizo la seña y me invito a incorporarme a la diversión, recuerdo que al llegar a la cama el abrió sus brazos y yo subí a la cama y me unieron al ritual de ellos
Ese hombre fue William C. Andrew el padre del joven William Albert, hermano de la señora Elroy. Ese hombre cambio mi vida para siempre me llevaron con ellos a Escocia y me dieron la familia que no tenia. Él me enseño todo lo que sé, maneje sus inversiones, sus propiedades en fin me crio como si en verdad hubiera sido su hijo
Así que espero eso resuelva sus dudas y vea que lo que tengo en realidad fue un golpe de suerte pero no soy mejor persona que ustedes, pude en otra realidad no ser nadie y quién sabe si seguiría vivo
Soy un hombre de palabra y prometo hacer todo lo que este en mis manos para hacer feliz a su hija, sé que es muy arrepentido el compromiso pero como vera no soy un joven y quiero hacer lo mejor para ella y para mí
Siendo así señor feliz estoy por mi hija y claro que por usted y tenga por seguro que es bienvenido en esta familia
Dorothy salió a despedir a George y le dijo amor nunca me hubiera imaginado tu historia, te amo muchísimo y espero poder amarte siempre
A la mañana siguiente llegó un auto al hogar de pony, las mujeres salieron para ver quién era su visita, vieron descender a George y se preocuparon por Candy pues no les había enviado ninguna carta desde que se había ido y ahora veían llegar el auto con la insignia de los Andrew, pero mayor fue su sorpresa al ver descender a una mujer del auto que no tenían ni la menor idea de quien era
Los rubios estaban en el cuarto oscuro revelando sus fotografías, estaban muy contentos con los resultados se habían tomado fotos uno al otro y cada quien pedía que posara de tal o cual manera. Al revelarlas y secarlas vieron que tenían en buenas tomas Candy quería poner en su habitación una foto de Albert con sus lentes negros viendo como atardecía, se vio sumamente guapo, Albert había fotografiado a Candy observando unas lindas flores y en otras aspirando su aroma, había captado su perfil en unas buenas tomas, sus pecas su nariz y esos labios hermosos los tenía en una buena imagen y así había un montón de fotos de ellos, cada uno tenía sus favoritas
El jueves sabían que no tenían que volver temprano a la mansión pues no estaba la tía ni George, Albert dio la instrucción que no irían a cenar esa noche y aprovecharían que podrían estar cómodos en el magnolia
Llevaron todo para cenar sin faltar el postre claro, Albert llevo una botella de champagne y unas fresas para brindar por el éxito de su curso de fotografía
Candy no estaba muy acostumbrada a tomar más de unos sorbos de alcohol y con la felicidad que sentía al estar tan carca del amor de su vida y con bastante intimidad se le hizo fácil preguntar al rubio que era lo que más le gustaba de ella
Eso es fácil de responder pequeña, todo absolutamente todo me gusta de ti
La rubia rio con esa risa tan cristalina y cantarina que la caracterizaba, mmm eso es trampa Albert, a mi también me gusta todo de ti pero me encantan tus brazos pues en ellos me pierdo en tu aroma y en tu calorcito dijo rubia un poco sonrojada aunque ya no sabia si era por el champagne o por lo que acababa de decir
Albert rio al escucharla decir que era lo que le gustaba de él, se levantó y pidió su mano, la llevo al sofá que tenían y daba hacia la ventana. Tomo asiento y ella se sentó junto a él, después de un momento él la acomodo entre sus piernas, la espalda de ella se quedó en el pecho de él
Así Albert le empezó a decir muy cerquita de su oído, todo Candy todo me gusta de ti pequeña
Amo tu cabello que huele divinamente siempre, amo cada una de tus pecas que adornan tu cara, amo esa nariz y más cuando con ella das caricias a mi cuello, tus labios me vuelven loco, el sabor de tu boca me tiene adicto a ti, esa lengua me lleva al paraíso cuando se rosa con la mía. Tu piel Candy es un afrodisiaco para mí, tu cuello, clavículas y esos pechos que se asoman algunas veces más que otras me van a volver loco, ya quiero rosarlos con mi lengua, que mis labios jueguen con ellos y mis dientes quieren hacer vagancias a esos botones de rosa que adivino tienes
La rubia pasó saliva con dificultad pues las palabras de Albert la estaban mareando más que el champagne que acababa de tomarse
Albert sintió como la rubia se estremecía ante sus palabras, quieres que sigas con mi lista de todo lo que gusta de ti Candy, pregunto el rubio con una sonrisa picara
La rubia solo atino a mover su cabeza afirmativamente
Me gusta cuando tus manos acarician mis cabellos, orejas y mi pecho, como se cuelan debajo de la camisa y dibujan senderos que me alientan a besarte y amarte más de lo que ya lo hago. Tengo unas ganas de besar tu vientre a placer y dejar caminos trazados con mi lengua y nariz hasta llegar… mordió su oreja suavemente y Candy gimió sin poder hacer nada por detener aquel ruido que salió voluntariamente de su interior
Para ese entonces Albert creyó que era bueno detenerse y volver a la mansión de inmediato.
La rubia estaba reaccionando a las palabras de Albert y el cuerpo de él estaba reaccionando igual, pues Candy se empezó a mover en su lugar, el trasero de la rubia estaba rosando la entrepierna del rubio y empezaba a despertar la intimidad del rubio
Candy en vez de asustarse al sentir esa parte de la anatomía del rubio seguidamente haciendo movimientos para sentir mejor al rubio
Estaban con las respiraciones descontroladas, ambos y la rubia exigió que continuara con su relato al rubio
Albert tomo a Candy de las caderas y la acerco lo más posible a él diciéndole, pequeña si continuo con eso voy a perder el control y voy a tomarte aquí mismo. Ve como me tienes
Sin más Albert se puso de pie y le dijo creo que es momento de volver a la mansión ya mañana venimos y limpiamos lo que dejamos
Salieron de aquel lugar el par de rubios con las hormonas al 1000
La rubia iba en total silencio, no sabia porque pero estaba molesta
Albert al ser más grande que ella comprendía un poco más las cosas, pequeña mírame por favor le dijo el rubio deteniéndose a un costado del camino para hablar con la rubia
Candy dudo por un momento el voltear a verlo, estaba dolida de que la dejara así sin más
Vamos amor por favor mírame insistió Albert de nuevo, ella clavo sus ojos en aquellos ojos azules que tanto amaba. Siento lo que paso en el… y la rubia no lo dejo continuar
Yo no Albert, no me siento mal con lo que paso en el magnolia, te amo y estoy segura de eso
También te amo Candy dijo el rubio con convicción y no es por falta de amor el que no nos entreguemos al amor Candy, sé que si cedo a mis instintos no voy a querer parar y no voy a esperar hasta la noche de bodas para tomarte de nuevo Voy a buscar cualquier momento para amarte sin límites y eso puede que nos deje lo más hermoso que deja la intimidad entre las personas que se aman, un bebé hermoso
La rubia abrió los ojos ante las palabras del rubio y su objetividad
Además Candy quiero ser en la mayor medida un contigo (aunque de sobra sé que no lo he sido estos últimos días caballero, pensó el rubio) y darte tu lugar como mi novia y mi futura esposa, no quiero que se hable de que nuestro compromiso fue rapido porque ya estaba esperando a nuestro bebe
Lo siento Albert es que me siento frustrada con todo esto dijo la rubia en un tono bajo
No te preocupes no eres la única mi amor dijo el rubio dando un beso a la mano de la rubia
Sin más llegó a la mansión y cada uno se fue a su habitación, Candy se tomó un baño pues su ropa interior estaba totalmente húmeda y ella se sintió cansada después de un día lleno de emociones
A la mañana siguiente Albert la dejo en el hospital y él se fue a las oficinas, pasaría por ella para llevarla a comer
En el hogar de pony las mujeres salieron a recibir a los visitantes, señor Johnson que alegría tenerlo por aquí dijo la señorita pony al hombre que había ido a adoptar a su niña pecosa y que tenía mucho tiempo sin verlo, espero que nuestra niña se encuentre bien dijo la hermana maría viendo con aprensión al hombre ya la mujer con la cual venia
Claro que si la señorita Candy se encuentra muy bien, está estudiando en el hospital santa Juana unos cursos de actualización dijo el hombre a las mujeres, bien les quiero presentar a la señora Elroy Andrew
Las mujeres del hogar de pony estaban en shock al ver a esta mujer precisamente en el hogar de pony cuando sabían por lo que Candy les había contado que despreciaba a aquel lugar
George que no era dado a sonreír mucho, le costó trabajo no hacerlo en ese momento pues las mujeres que tenían enfrente estaban con cara de no saber qué hacer, él sabía que esas mujeres daban la vida por la pecosa pues en verdad la amaban y sabía de sobra que ellas sabian de los desplantes de la señora Elroy a la rubia
George iba a tomar la palabra de nuevo pero Elroy lo detuvo y dijo, sé que no soy santo de su devoción señoras, sé que no porte a la altura con Candice pero…
Gustan pasar dijo la señorita pony a la imponente mujer y al bigotón, adentro podemos seguir platicando
Elroy acepto la oferta de inmediato pues tenia curiosidad por ver el lugar en donde Candice era tan feliz. Entraron los cuatro a la oficina de la señorita pony
La hermana María, salió y como buena anfitriona que era llevo té, galletas y fruta a los invitados. Total ellos dieron una gran suma de dinero cada mes al hogar
Aunque la duda le carcomía por dentro que hacía esta mujer en este lugar, la señorita pony estaba igual, llena de dudas ante esa visita inusual
Una vez que todos tenían té y comían una que otra galleta, Elroy volvió a tomar la palabra
Sé que mi vista las toma por sorpresa pero tengo varios temas que tratar con ustedes
Primero quería conocer a las mujeres que Candice considera sus madres como ella les dice y pedir disculpas a ustedes por mi comportamiento con esa rubia que tanto adoro en estos días. Quisiera regresar el tiempo atrás y ser una mejor persona con esa niña que llego Lakewood con tan solo 13 años
Pero el tiempo no vuelve y lo único que queda es cambiar mi comportamiento con ella, con ustedes
Señora dijo la señorita pony, no es necesaria su disculpa con que tratar bien a nuestra niña es suficiente, nosotras tratamos de dejar el pasado allá atrás en donde debe de estar y no guardar sentimientos de rencor hacia nadie
Gracias señorita Pony pero para mí si era necesario, también quería conocer este lugar al cual esa niña añora como a ningún otro lugar y ahora sé porque extraña las galletas de mantequilla de hornean ustedes
Un placer mandarle galletas con usted a nuestra niña dijo la hermana María Será con emoción
Este no creo que sea buena idea hermana María, dijo Elroy viendo a George
Todas voltearon su mirada al único hombre que estaba en ese momento con ellas, acabo rápidamente la galletita y dio un sorbo a su té y dijo el bigotón
Concuerdo con usted Elroy las galletas están deliciosas y también en que esta vez no podemos llevarle a la señorita Candy las galletas que tanto extraña
Las mujeres del hogar de pony se tensaron ante esas palabras pero George era experto en manejar la tensión de la gente
Insisto dijo el bigotón la señorita Candy se encuentra muy bien, lo que nos trae hoy aquí con ustedes el día de hoy es lo que ya les cometo Elroy y aparte tenemos la sospecha de quien puede ser la familia de Candy y por eso es que venimos el dia de hoy
Queremos hacerles unas preguntas y claro esta compartir la información que tenemos sobre ella con para ver si podemos obtener respuestas y así poder darle la buena noticia a la señorita
