CAPÍTULO 18


HOLA A TODAS, LES DEJO EL NUEVO CAPITULO ESPERO LES GUSTE. SALUDOS A TODAS Y GRACIAS POR SUS COMENTARIOS


La semana paso rápidamente, entre la organización para la boda de George con Dorothy, los cursos de Candy y todo el trabajo que había en el banco llego el viernes por la tarde y todos partieron hacía Lakewood

Llegó tarde pero eso no impidió que George fuera a visitar a Dorothy un momento, besarla y decir que la había extrañado muchísimo

A la mañana siguiente todos fueron hacían el hogar de pony, Albert se sintió nervioso pues ese día quedaría echo el compromiso con la rubia que amaba como a nada en su vida

La rubia iba feliz de regresar a su hogar, tenía muchas ganas de ver a la señorita Pony ya la hermana María y poder darles la gran noticia de que Albert y ella eran por fin novios, además quería galletas de mantequilla con té que tanto le gustaban

Lo que no sabían los rubios es que ese día estaban preparados todos para darle una noticia que esperaban tomaran ambos con calma

Elroy se había comunicado con el mayordomo de Lakewood en la semana dando instrucciones para que llevaran al hogar de pony lo necesario para hacer una comida y festejar el compromiso de los rubios, además le había dado indicaciones para que les dijera a la señorita pony ya la hermana María sobre que aprovecharían ese día para hablar con Candy

Llegaron y vieron que ya los esperaban todo estaba ordenado, los niños estaban felices de recibir a la rubia que los cuidaba, atendía y sobre todo les daba siempre cariño a cada niño del hogar

El fotógrafo también ya estaba pero él estaba en la colina de pony como Albert le había dado instrucciones esperando por los rubios para inmortalizar el momento con una buena fotografía

Era el medio día y Albert pidió a la rubia que le concediera una caminata por la colina para recordar viejos tiempos

Llegaron a la cima de colina en donde estaba el padre árbol, ambos se recargaron en el grueso tronco, Candy cerro sus ojos y respiro profundamente aquel aroma que la llenó de recuerdos, sin duda era su lugar favorito en todo el mundo, allí había sido tan feliz, siempre había encontrado paz en ese lugar y ahora después de tanto tiempo volvía a estar con su príncipe de la colina y todo había mejorado esta vez era su novio por Dios era suyo y lo podía besar, abrazar, sentir su aroma tan varonil

Ella estaba pedida en sus pensamientos y Albert la observaba muy atentamente, le gustaba verla jamás se cansaría de ver ese hermoso rostro, esas pecas hermosas, esos labios tan tentadores todo absolutamente todo le gustaba de esa mujer que lo cautivo desde que era una niña, claro que aquella vez cuando ella era una niña lo cautivo por la forma tan madura de afrontar su tristeza, verla subir corriendo la colina y ponerse a llorar cuando ella pensó que nadie la veía

Eso lo ayudo a ver las cosas diferentes, a enfrentar la vida con la certeza de que no era el único que sufria que siempre habia problemas pero sin importar nada tenia que seguir viviendo por las personas que lo habian amado como sus padres, su hermana y su sobrino

Sonrió al ver que la rubia se ruborizaba, sin más planto una rodilla al suelo y saco el anillo de su bolsillo al ver que el fotógrafo estaba listo para tomar las fotografías

Candy, pequeña mía que me ha acompañado a lo largo de mi vida, has estado en el momento que más te necesita y sin vacilar me brindaste tu ayuda, la mujer que tiene mi corazón desde ya no sé desde cuándo, la mujer que amo como a nada en este mundo, con la cual sueño noche tras noche quiero proponerte que seas mi esposa, mi compañera de vida y la madre de los hijos que tengamos

Al escuchar a Albert Candy abrió sus ojos para encontrarse con un Albert con una rodilla al suelo, un hermoso anillo en sus manos y una mirada tan cristalina que la conmovió hasta el alma

Atenta escucho las palabras del rubio que tanto amaba y con una sonrisa que iluminaba el mundo del Albert contesto: SI AMOR acepto ser tu esposa, compañera y todo lo que quieras que seamos

TE AMO Albert Andrew con todo mi corazón y todo mi ser dijo la rubia feliz de la vida

Albert se levantó, tomo la mano de la rubia y puso la sortija en su dedo anular y sin más tomo sus labios

La rubia respondió efusivamente al beso y sus brazos se colgaron del cuello de Albert

Albert que sabía que no estaban solos detuvo ese beso, pues sabía perfectamente que esos besos iban siempre un poco más allá, le dijo al oído pequeña no quisiera romper el momento de esta manera pero tenemos compañía

Al escuchar eso Candy se dispuso a buscar a cierta compañía y grande fue su sorpresa de ver al fotógrafo

Hicieron varias tomas más ahora ya conscientes de que eran fotografiados

Regresaron al hogar de pony y fueron recibidos con algarabía, brindaron con champaña y los pequeños brindaron con soda, las fotos siguieron durante todo el día

Entraron todos los implicados a la oficina de la señorita pony y se llevo a cabo oficialmente la pedida de mano de la rubia

Elroy tomo la palabra y pidió a las dos mujeres la mano en matrimonio de Candice White, las mujeres felices dieron su consentimiento y felicitaron a la pareja de rubios y volvieron a bridar por la felicidad de ambos

Al salir de la oficina ya estaban todos esperando por los rubios, George con Dorothy, Tom y Jimmy acababan de llegar y todos degustarían un festín que Elroy les había mandado preparar

Así llego la tarde entre risas, bromas, recuerdos de las travesuras de la rubia con Tom y demás anécdotas

Solo 4 personas sintieron un desasosiego en echar a perder esa tarde tan maravillosa para los rubios

Señorita Pony, la hermana María, Elroy y George tienen un nudo en el estómago. George al ver la felicidad de los rubios abogo por que ese dia no dieran la noticia, que esperaran a la mañana siguiente. Es mejor que disfruten su dia

Y así fue su día, fue maravilloso en compañía de las personas que más querían solo faltaba Archi pero estaba en la universidad a punto de terminar sus estudios

Ya habría tiempo de comunicar las buenas noticias, además le mostrarían las fotos de ese día

Llego la noche y Candy se quedó a dormir en el hogar de pony, Albert, la tía y George regresaron a la mansión y Dorothy con su familia

Esa noche fue difícil conciliar el sueño en especial a los rubios, estaban emocionados, enamorados y con un futuro muy prometedor

Albert quería quedarse en el hogar de pony, cerca de la mujer que amaba pero sabía que no sería bien visto, además tenía que llevar a su tía a la mansión pues George llevaría a Dorothy a su casa

Llego la mañana siguiente y la rubia despertó con una sonrisa y con una felicidad como nunca antes la había sentido

La rubia ayudo a preparar el desayuno y después fue a levantar a los niños del hogar y ayudo a los más pequeños a vestirse

Al medio día llegaron Tom y Jimmy para llevar a los pequeños al rio a pescar y a nadar un rato, la rubia se quería unir a la aventura pero la señorita Pony le pidió que se quedara pues tenían una charla con ella

Albert no entendió por qué su tía y George iban con él al hogar de pony, no era necesario

Pero también era muy perspicaz, me van a decir que es lo que pasa dijo el rubio viendo a sus acompañantes en el auto y deteniendo abruptamente el coche

Elroy y George se miraron y el bigotón fue el que rompió el silencio

William dijo George viendo a su muchacho a los ojos, tenemos noticias sobre quiénes posiblemente son los padres de la señorita Candy, es una noticia grande y queremos que estés en compañía de Candy cuando le demos la notica

El rubio abrió grandes los ojos ante las palabras de su mentor, pero no me habían dicho a mí esa información porque reclamo el rubio

Veras hijo dijo su tía Elroy, esta información es reciente, aproveche la semana pasada para venir y hablar con la señorita Pony y la Hermana María sobre esta situación y descubrí cosas importantes hablando con ellas y viendo algo que llego con Candice cuando la dejaron a las puertas de la casa hogar

No quise contarte esto porque estabas muy feliz de pedir la mano de esta niña y no quería echar a perder su momento, además no hubo tiempo y la verdad es que no sabía cómo afrontar el tema, además también del echo que tenías que guardar silencio ante la rubia, pues la señorita Pony y la hermana María me pidieron estar presente cuando se diera la noticia

Por eso cuando escuche que pediría su mano aquí en su hogar te alenté y así mataríamos dos pájaros de un tiro pues sería su compromiso y aparte hoy daremos la noticia a la rubia

El rubio cerró los ojos y se concentró en analizar la información de su tía

Cuando sus ojos se abrieron, volvió a preguntar

Tía no soy un niño y sé que hay más información que no me quieren dar, se me hace muy raro su silencio ante un tema muy importante tanto para Candy como para mí

El silencio de hizo de nuevo en el coche

George le dijo a su muchacho, vamos William ya vamos retrasados y es mejor que empieces a manejar

Te prometo que en cuanto lleguemos al hogar de pony e iniciemos el tema responderemos a todas tus preguntas

Albert no tuvo más remedio que iniciar de nuevo a manejar hacia el hogar de pony, pero por su mente pasaron muchas preguntas y él que era muy perspicaz sabía que había algo que no cuadraba y que no le gustaría escuchar a él o ella al amor de su vida

Pero la protegería de cualquier cosa de eso estaba seguro, él tenía el poder y el dinero suficiente para hacer lo que fuera por Candy. Se alegró por primera vez en mucho tiempo de contar con su apellido y su estatus social

La rubia por su cuenta vio algo preocupadas a las mujeres que la habian cuidado y le habian brindado su amor

Es tan grave lo que quieren platicar conmigo, las veo bastante afligidas y eso me pone nerviosa, acaso no quieren que me case con Albert, dijo lo último con un nudo en la garganta y unas lágrimas asomándose en esas esmeraldas que tanto amaba Albert

Las mujeres abrasaron a la rubia y le dijeron: nada de eso Candy estamos felices por ti y por el joven Albert, su matrimonio nos hace muy felices mi niña dijo la señorita Pony

Así es Candy continuo la hermana María, nos alegra que por fin sus sentimientos sean correspondidos

Entonces porque las veo preocupadas continúo la rubia

Tenemos una noticia importante que darte mi niña, dijo Pony pero necesitamos que lleguen nuestros invitados para poder hablar contigo, no es malo ciertamente pero puede que cambien algunas cosas en tu vida, claro está que tú serás la que tendrá la última palabra

Danos unos minutos Candy y prometo que contestaremos todas tus dudas o al menos trataremos de hacerlo dijo la hermana María

George veía tenso a William y sabía que se pondría más tenso al saber lo que ellos le dirían a la rubia

Llegaron por fin al hogar de pony y Candy salió disparada a la salida para recibir a Albert lo había extrañado mucho y más ahora que sabía que algo le dirían a sus madres, pero se sorprendió al ver a George como a la tía Elroy

Y supo enseguida que ellos eran los invitados para hablar de cierto tema que tenía la señorita Pony como a la hermana María con los nervios de punta

Adelante dijo la hermana María pasen por favor

Todos entraron a la oficina de la señorita Pony y tomaron asiento

Albert dijo la rubia tu sabes que es lo que esta pasando

El rubio la miro y le dijo, muy poco Candy me acaban de dar solo una pista mi tía y George hace unos momentos, pero veamos que nos tienen que decir

Estaban en silencio, las mujeres se vieron unas a otras y ninguna quería iniciar la charla

Albert y Candy estaban sentados en un pequeño sillón, él tomo la mano de la rubia y su corazón pálpito con fuerza al sentir que Candy portaba el anillo de su compromiso, apretó la mano de la rubia para infundir en ella valor

Que es lo pasa dijo al fin la rubia al ver que nadie hablaba, solo se veían unos a otros

Todas las mujeres dirigieron su mirada hacia el bigotón que estaba sentado cerca de la ventana, ellas sabían que George era la persona adecuada por varias razones, conocía la situación y sabría cómo manejarla total el hombre cerraba negocios millonarios y tenía el temple necesario

En cambio ellas tenían un nudo en la garganta pues no sabían cómo reaccionarían tanto Candy como Albert

George tomo aire y luego lo expulso de sus pulmones

Bien señorita Candy lo que pasa es que hace unos días con la visita de la señorita Elena Duncan a la mansión de Chicago se dieron algunos comentarios sobre usted

La señorita antes mencionada, le pregunto a la señora Elroy sobre su procedencia al principio no le tomo en cuenta por lo que ella respondió que usted era bienvenida en la casa y que le debíamos mucho por haber cuidado los más importante para nosotros, dijo esto a viendo William

Candy también dirigió su mirada hacia Albert y esta vez ella apretó la mano del rubio pero lo que vio no le gusto, Albert tenía una cara de pocos amigos, se veía tenso

George sigue con su relato

Unos días después volvió a insistir la señorita Elena que su rostro se le hacía conocido pero que no recordaba de donde, para ese entonces la tía Elroy ya puso más atención a esas palabras de la invitada

Los rubios estaban en total silencio, ella ansiosa por escuchar a donde querrían llegar y Albert tenso pensando en el motivo por el cual no le habían compartido la información a él

Los días pasaron y se suscitó una mañana después del baile de recaudación de fondos un altercando entre la señorita Elena y la tía en donde la señorita Elena hacia los reclamos de que el joven William no era un buen anfitrión y en eso llego él y hubo un intercambio de palabras

Eso me platico la tia Elroy, dijo George

Bueno después eso recuerda que solo quedo la dama de compañía de la señorita Elena empacando sus pertenencias y pasarían después a recogerla un chofer de la familia

Candy asintió con un movimiento de cabeza

La tía Elroy ordeno a Lulú ayudar a la dama de compañía de la señorita Elena, ahí la dama de compañía le preguntó a Lulú por usted señorita Candy, que si sabía de dónde venía usted, porque ella recordaba a un par de adolescentes muy parecidos a usted pero que viven en Londres

La rubia al escuchar eso sus latidos del corazón latieron fuerte y sus ojos se abrieron desmesuradamente

George al ver la expresión de la pecosa guardo un momento de silencio

Continua George dijo un pasivo Albert, aunque no por eso calmado

Candy asintió con un movimiento de cabeza

Las mujeres mayores veían en silencio a los rubios y no se perdían de las expresiones de estos

Más Elroy estaba concentrada viendo a su sobrino sabía que en cuanto George soltara la palabra de Royals se abriría en su sobrino la verdad de porque no le habían contado a él sobre sus sospechas

Le dijo a lulú que esas niñas eran nietas de los reyes de Inglaterra

La rubia empezó a reír como hacía tiempo no lo hacía, aunque no sabía si era de nervios o si le querían jugar una broma todos los allí presentes

Albert siempre con su sabiduría que le habían dado sus años pregunto qué tan cierto es esto que dice George

Candy dejo de reír de inmediato al escuchar la pregunta de Albert

George miro hacia las mujeres en busca de ayuda

La posibilidad es muy grande joven Albert dijo la señorita Pony

Hace una semana llegó su tía y el señor George en busca de respuestas a algunas preguntas que tenían y llegamos a la conclusión de que Candy es hermana de esas jóvenes de las que hablo hace un momento el señor Johnson

Y como llegaron a esa conclusión pregunto de nuevo el rubio

Esta vez fue Elroy la que hablo

Veraz hijo hace muchos años conocí a la hermana de la reina y ella me contó que tenían una tradición, cada que nacia una niña en la familia le regalaban una muñeca con el nombre de Candy bordado en el pecho de la muñeca y dentro de esta colocaban un medallón con una pintura del rostro de la niña, de la madre y la abuela

Cuando la niña era presentada en sociedad sacaban el medallón y la niña o más bien dicho la dama lo usaba como el símbolo de la familia

Candy tenía los ojos tan grandes, su boca formaba una gran o y su respiración estaba desacompasada, pues ella recordaba la muñeca con la cual la habían abandonado en el hogar de pony

Y esa muñeca se encuentra en este lugar, pregunto con cautela Albert

Sí, concurso la señorita Pony

La hermana María saco de una caja la muñeca y se la entregó

Albert auscultó la muñeca y sintió dentro de ella algo pequeño, ovalado y duro, vio que tenía el nombre de Candy grabado en el pecho de la muñeca

Se la entregó a Candy la cual vio a la muñeca con cara de desconcierto

Se hizo de nuevo un silencio en la oficina

Albert estaba en shock al igual que la rubia