Sean todos bienvenidos, otra vez.
De momento, no tengo nada que decirles, así que solo puedo pedirles que lean, y disfruten.
Aftermath II: Edición Veteranos
—¡Bienvenidos a una nueva transmisión de su programa de variedades favorito! — iniciaba Francisco efusivamente desde el afamado sillón de presentadores —. Esto es… ¡el Aftermath de Total Drama Hollywood Challenge! — anunciaba y el público estallaba en aplausos y alaridos.
—Lamentamos la demora desde nuestro episodio pasado…vaya, se siente como si hubieran pasado como siete años, ¿no? — preguntaba Miri con las manos en la cabeza, y la audiencia reía —. Tuvimos que posponer nuestras grabaciones mientras uno de nuestros amados competidores se tomaba un tiempo para… resolver ciertos asuntos — guiñaba el ojo la chica a la cámara, y varios en la tribuna de los perdedores miraban curiosos.
—¡Esto es genial! Mi primera vez viendo un Aftermath completo desde la tribuna de los perdedores. ¡Mi primera vez como perdedor! Esto es tan emocionante, ¡debo capturarlo para mis seguidores! — hablaba con rapidez Michael al lado de Riaya, y sacaba su celular para tomarse una selfie con la chica, quien miraba con desagrado.
—No te conozco, pero estoy segura de que no debe ser tu primera vez— reponía la muchacha, luego de propiciarle un golpe al chico, que caía de la tribuna.
—¿Podemos empezar de una buena vez? Tengo asuntos pendientes que resolver con una persona en específico…— se frotaba las manos Lay, ansioso.
—Alguien tiene muchas ganas de reencontrarse con cierta rubia cabeza hueca… — reía Liz al lado de Sam y Terri, sus amigas de la temporada pasada.
—¿Tú también quieres? — le preguntaba el chico seductor, alzando las cejas, y la chica ponía semblante serio.
—Sin más preámbulo, ¡iniciemos con nuestros invitados de hoy! — continuaba Miri y todos aplaudían —. Y genuinamente, hoy tenemos invitados de lujo…
—Parece que nuestros veteranos tuvieron una racha difícil, casi todos los eliminados formaron parte de la temporada pasada…— señalaba Francisco y en la pantalla se mostraban fotos de las fogatas de los últimos capítulos.
—¿Por qué no me sorprende? — bufaba Rebeca, una perdedora de la primera temporada, fingiendo aburrimiento.
—Y aquí viene nuestro primer invitado, un chico que esta temporada, pese a no haber permanecido por mucho tiempo, nos dio MUCHO de qué hablar…— comenzaba Miri y se escuchaban alaridos estruendosos en todo el auditorio —. Un chico que logró llegar lejos la temporada pasada, y si bien inició fuerte en la competencia, parece que sufrió algunos percances a lo largo del camino… — señalaba luego nerviosa, y algunos reían.
—¿Percances? — preguntaba Heather desde la tribuna.
—Siendo siempre la persona más prudente de la competencia, el chico atractivo y dulce por el que todas las chicas mueren… ¿quién escribió esto? — preguntaba Francisco inconforme, viendo sus tarjetas guía —. Al inicio de la competencia, era novio de nuestra queridísima Paula, la hermosa chica finalista de Total Drama Countdown, quien también nos honrará con su visita en unos momentos… — decía esto último en un susurro, mientras varios se emocionaban.
—Pero como en todo reality, la felicidad nunca dura, mucho menos cuando existen chicos malos que se interponen en el camino…— reía Miri maliciosa y una foto de Marcos aparecía en pantalla, ocasionando alaridos de muchas fanáticas —. Parece que la convivencia entre Paula y Marcos no le vino bien a Kyu, lo que ocasiono que al final simplemente…perdiera la cabeza — decía la chica y señalaba su propia cabeza, a lo que Francisco se le ponía enfrente.
—No olvidemos que la salud mental es importante — decía con seriedad, y luego sonreía —. Luego del reality, nuestro invitado consideró prudente tomarse un tiempo para "auto reflexionar y aprender la correcta gestión de sus emociones" — leía Francisco desde unas tarjetas que un interno le pasaba en el momento, inseguro.
—¿Eso significa que fue al loqu- …? — comenzaba a preguntar Rocío en un susurro a Jessica, pero en eso un micrófono ambiental la golpeaba en la cabeza.
—¡COMO DECÍAMOS! — interrumpía Miri, y la cámara la enfocaba nuevamente —. Desde algún lugar sin acceso a llamadas telefónicas 'no indispensables', el coreano más tierno, GameKyu, el extranjero más amado del reality… ¡Démosle la bienvenida a KyuHyun!
En eso, el chico entraba desde bambalinas y la cámara se acercaba a él, a lo que simplemente hacía un gesto de saludo con propiedad y se dirigía al sillón de invitados, mientras cientos de fanáticas clamaban su nombre, gritando con emoción. Cuando el chico estaba por sentarse, tanto Miri como Francisco se echaban hacia atrás, con los pies prácticamente encima de su respectivo asiento, temerosos.
—Hola…— saludaba el chico serio ante la actitud de los conductores, quienes se estremecían ante la voz del chico —. ¿Puedo sentarme? — preguntaba confundido, señalando al sillón de invitados.
—Claro que puedes…— sonreía Miri y se recomponía, con Francisco que prácticamente había subido encima de la chica, con temor.
—Gracias — respondía el chico, suspirando y sentándose en el sillón de los invitados, mientras Miri y Francisco retomaban su postura.
—Y, ¿cómo has estado, Kyu? — preguntaba Miri luego de un silencio incómodo, y el recién mencionado tragaba saliva.
—Pues, bastante bien he de admitir…— decía y accidentalmente en la pantalla se proyectaba un video de él hecho un ovillo, con mirada perdida en el medio de todo su equipo, quienes lo miraban con pena —. He estado peor — respondía luego tras ver las imágenes.
—QUITEN ESO — pedía Miri intentando cubrir la pantalla con su cuerpo, y alguien maldecía tras bambalinas —. Nos da gusto saber que te encuentras mejor… — reponía luego con una risa incómoda.
—¿DÓNDE ESTUVISTE? — preguntó Terri desde la tribuna y sus amigas le daban un golpe en la nuca, mientras todos parecían muertos por saber la respuesta.
—Bueno, ya que preguntas…— respondía Kyu calmo, aunque incómodo ante las miradas de todos —. El día que me eliminaron de la competencia, no fue mi mejor momento, y por eso al salir, decidí alejarme de los medios un tiempo. Ya saben, las noticias, la gente acampando fuera de mi casa…no era el lugar más apropiado para recuperar la cordura. Es por eso que opté por tomar un tiempo de reflexión, me retiré a la naturaleza y realicé meditación, entre otras cosas para volver a entrar en contacto con mi antiguo yo — explicaba sereno, y terminaba respirando armoniosamente, mientras todos miraban asombrados.
—Hablando de eso, ¿qué pasó ese día antes de tu eliminación? ¿Por qué te fuiste? — continuaba Francisco.
—No estoy seguro. Para entonces no me encontraba en buena forma, pero no pensé que ese día perderíamos, y mucho menos que sería por mi culpa — respondía el chico.
—Es difícil pensar con claridad cuando se está loco — susurraba Terri cuando todos se callaban, y la miraban molestos, a lo cual se escondía sus hombros.
—Lo que quiero decir, es que…— continuaba el coreano, luciendo molesto por un segundo — de haber podido hacer las cosas de otra manera, no hubiera roto el frasco que ocasionó que mi equipo perdiera, y por ende, terminara fuera...
—Ah, si…el frasco de la sangre Turner del desafío de piratas — recordaba Francisco —. Creo que es buen momento para decirte que, parece ser que tú no fuiste culpable de la derrota de tu equipo, y aquí tenemos la prueba de ello.
En eso, Miri apuntaba a la pantalla detrás de ellos, donde se observaba un video de Stephen en el confesionario de la isla.
Confesionario
—Y al final, mi compañero Kyu se fue. Fue conmovedora su partida, puesto a que era mi último compañero del género masculino en el equipo. Una lástima…pero, en fin. La competencia es dura. Él no podía ganar, al parecer. Es más, pareciera que era el destino. Como si ese frasco hubiera estado roto todo éste tiempo — comentaba Stephen en el confesionario de forma política, aunque con una mirada siniestra, y muchos en el público suspiraban de asombro.
Fin del confesionario
—¿Stephen? — preguntaba Kyu luciendo sorprendido, pero sin perder la compostura —. No tiene sentido, tanto él como Jasmine parecían ser los más decididos a ganar los desafíos.
—¡Les dije que era malvado! — interrumpía Liz molesta, mirando a la pantalla con odio.
—No durará mucho, de todas maneras. ¿Lo han visto? Es un enclenque — señalaba Courtney, sin darle importancia.
—Pero el chico es inteligente, es lo que importa — retrucaba Harold, viendo al chico con seguridad, y varios asentían.
—Espero que Jasmine lo descubra antes de que sea demasiado tarde — finalizaba Kyu, manteniendo la calma.
—Y hablando de ese momento final de tu eliminación… ¿qué ocurrirá con Paula ahora que tampoco sigue en la competencia? — preguntaba Miri y todo el mundo miraba fijo ante la respuesta del chico, quien miraba sorprendido de repente.
—¿Paula fue eliminada? — preguntaba asombrado y con un brillo de esperanza en sus ojos, pero se recomponía rápidamente —. Bueno, creo que ella tomó su decisión. No sé si haya mucho de qué hablar — decía esto último, luciendo indeciso, ante la mirada de todos.
—Muchas gracias por acompañarnos, GameKyu. Ya que hemos corroborado que sigues con vida y mejor que nunca, te invitamos a la tribuna de los perdedores, por segunda ocasión — finalizaba Francisco y el chico se levantaba sin decir más y subía a la tribuna, no sin antes saludar a Liz, quien lo abrazaba contenta.
—Es hora de pasar con nuestra siguiente invitada, y vaya que la estábamos esperando. Pese a haber competido en la temporada pasada, es la primera vez que estará pisando este set como una perdedora del reality — anunciaba Miri con una risita cómplice con su compañero conductor —. ¿Pueden adivinar de quien se trata? — preguntaba y entonces el público estallaba en alaridos.
—¡NO PUEDE SER! Este debe ser el mejor día de mi vida — se emocionaba Michael, al borde de su asiento, y Liz arqueaba una ceja ante la imagen del muchacho.
—Debes haber vivido una vida muy desafortunada hasta ahora…— susurraba la chica escéptica, y detrás Kyu hacía una mueca.
—La gran villana de la temporada pasada, quien este año al parecer no corrió con tanta suerte. Eso, en parte porque se la pasó suspirando por cierto rubio de la competencia, sin mucho éxito — describía Miri y Francisco bufaba.
—La mente maestra, sexy pelirroja vaquerita de Playboy, una de las grandes villanas de Total Drama, aquí viene… ¡Carly! — presentaba Francisco y el público prácticamente aclamaba el nombre de la chica al unísono, quien tardaba en salir —. ¿Qué sucede? — preguntaba luego cuando desde tras bambalinas se escuchaban quejidos y lo que parecía ser una pelea, y al cabo de unos segundos salía la chica con el mentón en alto, siendo cargada en los hombros de dos miembros del staff, como reina de Egipto.
—Lo menos que merezco es una entrada decente — decía ella cuando ambos chicos la depositaban con delicadeza en el sillón, evidentemente temerosos de la actitud de la chica —. Y dile a Austin que puede despedir a estos lacayos.
—Ningún McLean tiene poder en este programa, solo nosotros — corregía Miri de mala gana, viendo a la rubia —. Podría empezar diciendo que es un gusto tenerte por aquí, pero esa solo es una verdad a medias, así que vayamos al grano. ¿Qué se siente perder, Carly? — preguntaba maliciosa y varios campistas de la temporada reían.
—Primero, no creas que me dirigiré a una estúpida entrevistadora de cuarta, yo no rindo cuentas a nadie que no tenga su programa en horario estelar. Segundo, no estoy aquí por gusto, sino por un contrato que me obliga. Tercero, para tu información y no es que me importe que lo sepas, pero no perdí la competencia, decidí retirarme voluntariamente — enumeraba la pelirroja en cara de Miri, dirigiéndole una mirada de desprecio.
—¿Sí? ¿Y por qué eso? — preguntaba la conductora, revoloteando los ojos.
—Sencillamente no me apetecía más continuar conviviendo con idiotas — respondía ella fingiendo desinterés, arreglando sus uñas —. En especial con la estúpida rubia teñida de Sarah.
—Claro, tu aliada que finalmente terminó traicionándote de la misma manera que tú lo hiciste en la temporada pasada, y además hermana gemela del idiota de Sean — señalaba Francisco diciendo esto último con odio, y captando la atención de Carly.
—¿No eres tú aquel patético nerd que estaba enamorado de Mireya? — preguntaba la chica, acercando su rostro al de Francisco con interés, mientras el chico lucía confundido y ofendido a la vez —. Eso pensé. Si tan solo fueras una milésima de carismático como yo lo soy, esa aburridísima castaña se hubiera fijado en ti, y así no hubiera molestado a mi precioso Sean — le reprochaba ella con rencor en su voz, y llevándose las manos al pecho, con ojos enamorados.
—Hasta donde sabemos, Sean te rechazó porque sigue enamorado de Mireya, lo que te hizo perder los estribos y llevar así a tu equipo a la derrota — corregía Miri, y se proyectaba en pantalla el momento exacto en el que Sean le gritaba a Carly, y la cara de la pelirroja se descomponía.
—¿Qué dices, Paty Chapoy? — preguntaba Carly malhumorada, y Miri presionaba un botón en su control remoto, reproduciendo así un video de Sean en el confesionario.
Confesionario
—No sé cómo explicar esto que siento, porque nunca me había sucedido. Es decir, en la secundaria no salí con muchas chicas, ya que pasaba todo el tiempo con Sarah… — explicaba Sean un poco apenado al final, visiblemente inquieto —. Pero nunca había conocido a alguien como Mireya, y debo confesar que ella me vuelve loco, en todos los sentidos — explicaba el chico luego con las manos en la cabeza y una sonrisa se plasmaba en su rostro —. Y Carly, bueno…ella solo me saca de quicio — suspiraba frustrado.
Fin del Confesionario
Para cuando se terminaba de reproducir el video, se observaba el set del programa hecho un caos, con una luz apenas colgando de los cables, la mesa volteada, un micrófono ambiental partido en dos, y el sillón de cabeza, con Carly parada delante de él, siendo evidente que había sido ella la causa de aquel destrozo.
—Como última pregunta, Carly, antes de que termines por destrozar el resto del set…— preguntaba Miri con Francisco al lado suyo, intentando permanecer serenos, mientras que aserrín del techo caía en sus cabezas —. ¿Qué te espera ahora que has salido de la competencia?
—Bueno, seguramente una muy productiva plática con Sean cuando él salga…— respondía la pelirroja aparentando una sonrisa, pero con un tic nervioso muy evidente en el ojo.
—¿Y qué hay de Michael? ¿No piensas darle una oportunidad? — preguntaba Francisco y el recién mencionado se asomaba de la tribuna donde varios se habían escondido.
—¿Quién? — preguntaba la chica arqueando la ceja, y Kyu le daba una palmada al chico, para darle ánimos.
—¿Y qué hay de mí, Carly? — preguntaba Mark con brillo en sus ojos, aquel gordito de la primera temporada del que la pelirroja gustaba en ese entonces.
—Ow, Mark…— respondía la chica, aunque visiblemente sin mostrar interés.
—Bueno, si bien tu tiempo ha terminado, no te vayas muy lejos Carly, porque estoy seguro de que querrás saludar a nuestra siguiente invitada — reía Francisco mientras la pelirroja forzaba a unos internos a cargarla hasta la tribuna de los perdedores.
—Nuestra siguiente invitada también compitió en Total Drama Countdown, siendo una de las villanas de la temporada por excelencia, solo para ser eliminada por la mismísima mente maestra del reality, nuestra 'querida' Carly — decía Miri irónica, y la cámara captaba a Carly, quien para entonces ya se había puesto su cámara portátil en la cabeza e intentaba hacer zoom al acné en el rostro de Terri, quien la apartaba molesta —. Nosotros tampoco lo entendemos.
—Finalmente, estuve esperando este momento por semanas…— se frotaba sus manos ansioso Lay, y tanto Liz como Kyu miraban consternados.
—La gemela malvada, mejor amiga de Carly, amante de Lay y de algún modo novia de Sean, quien es también su hermano…— reía Francisco y luego hacía una expresión de asco —. La última eliminada de los Microfonistas, ¡que entre Sarah!
En ese momento, la rubia entraba con la frente en alto, y esperaba a que los miembros del staff reacomodaran el sillón para poderse sentar.
—Tengo la impresión de que tú tuviste todo que ver en esto — decía Sarah cruzada de brazos, mirando a Carly, quien la saludaba burlona desde la tribuna, y la rubia finalmente tomaba asiento.
—Dinos, Sarah… ¿cómo has estado? ¿Te has curado del resfriado? — preguntaba Miri burlona, y la rubia la fulminaba con la mirada.
—Créeme que no disfruto estar aquí en lo más mínimo… QUITA ESO — le gritaba repentinamente al camarógrafo, cuando acercaba demasiado su cámara, empujándolo a otro lado.
—¿Qué se siente haber perdido el desafío y luego ser eliminada por una gripe? — preguntaba luego Francisco, y la chica revoloteaba los ojos.
—Pésimo, ¿cómo crees que se siente? Los estúpidos de mis compañeros de equipo no tuvieron el criterio suficiente para darse cuenta de que eliminarme terminaría siendo un error, pero tarde o temprano caerán en el juego. Jasmine, por haberse aliado con un nerd estúpido, y Stephen simplemente porque está destinado a ser patético por el resto de sus días —señalaba la chica, y en eso el público se dividía en gritos, queriendo todos decirle algo a la rubia.
—Claro, es que ella aún no lo sabe — interrumpía Francisco a los fanáticos, y la chica arqueaba la ceja, confundida.
—¿De qué hablan? — preguntaba la rubia, y todos miraban atentos a la pantalla.
—Creo que te gustará ver esto — le decía Miri, y comenzaba a reproducir el video.
Confesionario
—Contrario a lo pronosticado luego de que analizar a profundidad todos los episodios de la temporada pasada, debo admitir que los Microfonistas cayeron más rápido de lo que mis cálculos pudieran haber previsto — señalaba Stephen con propiedad, acomodando sus anteojos sobre su nariz —. Claro, hasta cierto punto eso no es sorpresa, considerando lo frágiles y emocionalmente inestables que resultaban ser varios de ellos...Sarah, en particular. Dejando de lado que estoy seguro de que proviene de una familia disfuncional, con dinámicas familiares poco saludables, y un complejo de narcisismo y superioridad más que evidentes, los eventos de la temporada pasada no hicieron más que volverla… ¿cómo dicen? Un blanco 'fácil' — citaba el muchacho, haciendo comillas en los aires —. Su constante preocupación por la opinión de su hermano acerca de ella, su paranoia creciente al tener a Carly en el mismo equipo, y no se diga de su evidente odio hacia Selene… Solo hacía falta un pequeño, eh, empujón…para que las cosas siguieran su rumbo natural. Y nada como un coctel de medicamentos sorpresa del gabinete del Chef, para volverla una completa inútil — sonreía siniestro el chico, sosteniendo un frasco con distintas pastillas frente a la cámara.
Fin del confesionario
—Estúpido nerd pelirrojo, patética excusa de existencia. ¡Eso debe ser ilegal! —se levantaba la chica enfurecida, y los conductores se hundían en sus hombros —. Procederé con acciones legales en su contra. ¡Te exijo el número de tus abogados! — le reprochaba a Courtney, quien solo la miraba con desdén.
—¿Quién diría que Stephen sería capaz de lograr todo esto? — se sorprendía Kyu, y Liz volteaba a verlo, ofendida.
—¡Yo se los dije!
—No puedo creer que me haya aliado con él para eliminar a Carly, y no me hubiera dado cuenta — relataba la chica genuinamente sorprendida, y Carly le sacaba la lengua —. Juro que en cuanto salga…
—Afortunadamente para todos, y desafortunadamente para ti, él sigue en el juego y tú no, así que creo que no es momento de hacer amenazas— la interrumpía Miri y la chica volvía a sentarse, furiosa —. Finalmente, y antes de que puedas pasar a tu lugar en Perdedorlandia, preparamos un segmento especialmente para ti, titulado "50 Sombras de Lay" — anunciaba y la rubia abría los ojos como platos, pero antes de que pudiera levantarse, el chico ya estaba debajo de la tribuna, justo delante de ella.
—¡Mi sexy chica dorada! No sabes cuánto ansiaba que volviéramos a estar juntos — la saludaba efusivo, y tomaba su mano para comenzarla a besar, recorriendo rápidamente su brazo, mientras la chica miraba con asco.
—¿Volviéramos? — preguntaba Sam con asco, mientras el resto observaba la escena entre risas.
—Sarah debe haber pasado demasiado tiempo sola, o de lo contrario se habría resistido — señalaba Dylan, riendo con Jessica y las amigas de ella, cuando se observaba a Lay salir volando gracias a una patada propiciada por la rubia en su estómago.
—Me encanta cuando te haces la ruda — ronroneaba el chico, y el resto de las chicas cambiaban su expresión a una de asco.
—Te daremos oportunidad de reconciliarte con Lay en un momento…— decía Miri mientras empujaba a la rubia fuera del plano, y volteaba ansiosa a la cámara —. Y ahora, una de las invitadas que más hemos estado esperando esta velada, una auténtica veterana de la competencia — anunciaba la chica con emoción y la tribuna se observaba ansiosa.
—Y que, además de Carly, es la única chica en la competencia que nunca tuvo que pasar por una ceremonia de eliminación — relataba Francisco, y el set estallaba en alaridos de fanáticos, que estaban a punto de tirar las vallas de seguridad.
—¿Nervioso? — codeaba Tomás a Kyu de manera burlona, quien simplemente hacía oídos sordos, y meditaba silenciosamente.
—Esta chica fue el centro de atención de uno de los triángulos amorosos más dramáticos de la temporada, y aunque pareció tener un final feliz, al menos para ella…— relataba Miri y enseguida se observaba arrepentida, cuando todos volteaban a ver a Kyu, y éste miraba incómodo —. La situación tomó un giro inesperado cuando la chica fue eliminada de la competencia ¡por su propio novio!
—Espera, ¿qué? — preguntaba Kyu confundido, y Liz volteaba a verlo.
—¿No hay televisión en Corea del Sur? — preguntaba la chica extrañada.
—La dulzura de los Dobles, la gran finalista de Total Drama Countdown, démosle una calidad bienvenida a ¡PAULA! — anunciaba Francisco emocionado, y el público estallaba en aplausos.
En eso, la chica entraba al set, visiblemente confundida entre todos los alaridos y gritos de los fanáticos, de los cuales uno incluso alcanzaba a rozar su brazo antes de ser tacleado por un guardia de seguridad, a lo cual ella solo observaba sorprendida.
—Pensé que este era el camino al baño…— confesaba ella ante la risa del público y algunos de sus compañeros, por la dulzura de la joven.
—Toma asiento, queridísima Paula — pedía Miri dedicándole una sonrisa a la chica, quien hacía caso y se sentaba luciendo muy femenina —. Nos da gusto tenerte por aquí.
—Me gustaría decir lo mismo, aunque eso implica que me alegro de mi derrota — reía la chica nerviosa, y luego hacía una mueca extraña.
—¿Qué se siente estar sentada en el sillón de los perdedores por primera vez? — preguntaba directamente Francisco, y ella fruncía la nariz.
—Debo confesar que no lo esperaba… — respondía ella sigilosa, arqueando la ceja.
—Nosotros tampoco nos esperábamos esa impactante eliminación orquestada por nada menos que tu novio. ¿Qué tienes que decir al respecto? — preguntaba Miri con rapidez y el foro se sumergía en un silencio total, mientras todos observaban a la chica, ansiosos de escuchar su respuesta.
—Ustedes no se caracterizan por ser sutiles, ¿cierto? — preguntaba ella, visiblemente molesta —. Bueno, admito que no me imaginaba ganar esta temporada, dado que fui finalista de la primera… Pero, es cierto también que la traición de Marcos fue sorprendente para mí. Jamás imaginé que sería capaz de hacer algo así.
—Nosotros también nos sorprendimos mucho. Es decir, desde la temporada pasada todo el mundo sabía que estaba loco por ti — recordaba Miri, mientras se proyectaban imágenes en la pantalla de la temporada pasada, con Marcos mirando de reojo a Paula, o coqueteando con ella —. ¿Quién hubiera dicho que el mal vencería en esta ocasión?
—Entonces, ahora que sabes que él también fue eliminado de la competencia, ¿qué sucederá con Marcos? ¿Le darás oportunidad de explicarse? — preguntaba Francisco, y todos lucían intrigados.
—Creo que sus acciones hablan por sí solas — respondió la chica, cruzada de brazos, con firmeza en su voz —. Y está de más decir, que me tomaré un descanso de los chicos malos — agregaba luego, ante la mirada atenta de los fanáticos, quienes no dejaban de susurrar.
—Como si tuvieras otra opción — intervenía Carly con ligereza, ocasionando que la chica frunciera la nariz.
—Por último, Paula… ¿qué pasará con Kyu? — interrumpía el momento Francisco, y la chica abría los ojos, nerviosa, y en eso volteaba a la tribuna, desde donde bajaba el recién mencionado, con expresión calma y la mirada atenta en la muchacha.
—Kyu…— lo llamaba ella, con la mirada fija en el extranjero, hasta que el chico se detenía justo frente a ella.
—Paula…— la nombraba él y hacía un saludo muy propio y seguro, mientras ella se estremecía al escuchar su voz
—Te ves…bien — decía la chica sorprendida, y con una sonrisa en su rostro, mientras Kyu se limitaba a asentir.
—He estado bien. Bueno, mejor que antes — admitía el chico calmo, ocasionando una risa involuntaria de la chica, mientras el resto del cast y la audiencia contemplaban la escena.
—¿No debería seguir…? — comenzaba Sarah preguntando inconforme, pero era callada inmediatamente por Liz y Sam.
—Lamento mucho como me comporté en la competencia. Tú no merecías nada de eso, y sé que debí estar ahí para ti — se disculpaba el chico ante la mirada tierna de la chica, quien se veía conmovida por sus palabras —. Te aseguro que no volveré a interferir contigo y tus deseos. Desde que te conozco, sé lo asombrosa que eres, y solo quiero que seas feliz, así que te deseo mucha suerte.
—Gra…gracias — apenas respondía la chica, sorprendida y un tanto triste, y el chico asentía con la cabeza, con propiedad.
—¿Por qué no pueden ser todos como ellos? — preguntaba Miri entre lágrimas, mientras Francisco soplaba en un pañuelo, también conmovido, ambos acurrucados en su sillón de presentadores.
—¿Por qué estoy llorando? — preguntaba Terri prácticamente deshecha en lágrimas, al lado de sus amigas, quienes también tenían ojos llorosos —. ¿He estado sola tanto tiempo?
—Como si tuvieras otra opción — retrucaba Sarah abajo en la tribuna, y la chica la pateaba "accidentalmente".
—Por favor, Kyu, no te vayas …— le pedía Miri con ojos amables tomables mientras tiraba del brazo del muchacho —. Porque creo que querrás encontrarte con nuestro siguiente invitado.
—Un chico atractivo, fuerte, que en esta temporada llegó con dos objetivos: ganar el millón de dólares…y el corazón de Paula — describía Francisco volviendo a su pose de presentador, y Kyu abría los ojos, sorprendido.
—Y si bien logró conseguir eso último, al final lo perdió todo por la maldad, y porque ninguna chica puede tener tanta suerte…— decía esto último Miri con algo de rencor, y Paula tragaba saliva.
—Hermano de Mireya, enemigo de Sean, amante de Paula, luego pasó a ser enemigo de Kyu, novio de Paula, y ex novio de Paula. ¡Démosle la bienvenida a Marcos! — anunciaba el anfitrión y el público se dividía entre quienes morían de emoción por ver al chico, y los que lanzaban insultos al aire, dirigidos al muchacho en cuestión.
En eso, el chico entraba al set rápidamente, con semblante molesto.
—Bien, terminemos de una buena vez con est- — comenzaba a decir cuando de repente sus ojos se encontraban con los de Paula, quien lo miraba sorprendida al lado de Kyu —. ¡Paula! — gritaba con emoción y se aproximaba a la chica para darle un abrazo, a lo que ella lo apartaba con severidad de un manotazo —. ¿Y qué hace el idiota aquí? — preguntaba entonces cuando observaba a Kyu detrás de la chica, quien únicamente le dedicaba una mirada de enojo, más no respondía.
—Después de este emotivo encuentro, creo que es hora de hacerte unas preguntitas, y empezando por la más obvia…— interrumpía Miri detrás del trío, y su expresión repentinamente cambiaba a una de enojo —. ¿Por qué eliminaste a Paula?
En eso, el set de grabación se sumergía en un profundo silencio juzgador, mientras todas las miradas se posaban en el chico, quien se veía nervioso por un momento, pero luego regresaba a su expresión antipática de siempre.
—No tengo porqué rendirle cuentas a ninguna chica…— le restaba importancia el chico, dándole la espalda a Miri, y luego volteaba hacia Paula —. ¡Lo lamento tanto, Paula! Fui un idiota, no sé qué estaba pasando por mi cabeza, debí saber que podría seguir siendo malvado contigo a mi lado — se disculpaba atropellando las palabras, mientras se hincaba delante de la chica, tomando su mano, quien la retiraba rápidamente.
—Eso escaló bastante rápido…— miraba Riaya sorprendida al muchacho, quien nunca se había dejado ver así.
—Para tu información, no tengo el más mínimo interés en salir con un villano y patán como tú — interrumpía la chica, con el mentón en alto —. Y, por último, quiero que sepas que éstas son las últimas palabras que planeo dirigirte, ya que no pienso hablar contigo nunca más — finalizaba indignada, dándole la espalda.
—¿Qué le dijiste? — preguntaba Marcos desafiante, golpeando el hombro de Kyu, quien lo miraba calmo, pero visiblemente irritado.
—No le he dicho nada. Pero creo que es mejor que los deje solos, así arreglan sus diferencias…— se disponía a irse el chico, ante la mirada satisfactoria de Marcos, y la decepción de Paula, cuando Francisco los interrumpía.
—¡Para nada! Deben saber que son los invitados que hasta ahora han traído más rating al episodio en vivo, por lo cual les pedimos que se sienten en los lugares apartados por ustedes por allá — decía, enseñando varias gráficas de datos, y luego señalaba tres lugares de la tribuna con un cartel en mal estado con los nombres del trío —. Y les otorgaremos un camarógrafo personal — añadía luego, chasqueando sus dedos hacia uno de los camarógrafos, ante la mirada molesta de los tres —. Lo siento, chicos.
—Bueno, creo que mi ardua investigación de preguntas para Marcos sobre sus antecedentes penales no sirvió de nada…— bufaba Miri, mientras tiraba sus tarjetas guía —. La buena noticia es que el siguiente invitado nos asegura mucho, mucho drama — se refregaba las manos ansiosa, y Francisco rodaba los ojos.
—Sí, claro…— decía el conductor irónico —. El siguiente invitado es un chico para nada memorable, mucho menos atractivo, simpático, inteligente, hilarante, y no creo que siquiera valga la pena entrevistarlo… — narraba el chico con apatía, cuando una cámara portátil volaba y lo golpeaba en la cabeza.
—¡Más vale que presentes a mi hombre con dignidad! — le ordenaba Carly con los ojos llenos de cólera, y Sarah fruncía la nariz ante el apodo.
—Tú lo has dicho…— reponía Miri, observando a su compañero con mirada reprobatoria —. El siguiente invitado fue uno de los villanos más emblemáticos de la temporada pasada, sin embargo, su relación con cierta pelirroja ocasionó que perdiera la vista del premio, y terminara por unirse a la tribuna de los perdedores — reía la chica ante esto último —. El otro gemelo malvado del programa, potencialmente rubio oxigenado, enamorado de Mire-… ¡Carly! — corregía rápidamente ante la mirada amenazante de la pelirroja —, enemigo de todos, especialmente de su propia hermana, y amigo únicamente de Carly, ¡SEAN!
Tras ello, el rubio salía al escenario ante los aplausos del público, y con mirada apática y las manos en los bolsillos, procedía a sentarse en el sillón de invitados.
—No tardaron nada con el anterior, ¿acaso Paula ya le pateó el trasero? — preguntaba cuando a lo lejos vislumbraba al trío que recién había tomado su lugar uno al lado del otro, y les lanzaba un beso cínicamente, hasta que observaba a Carly del otro lado lanzándole besos con ojos enamoradizos, y se detenía, nervioso.
—Mejor cuéntanos de ti, idiota — interrumpía Francisco brusco, y Sean arqueaba las cejas —. ¿Sorprendido por tu eliminación? Porque a mí no me parece ninguna sorpresa.
—No tengo la menor idea de quién eres, por lo que asumiré que tu actitud se debe únicamente a que me consideras superior a ti y eso te molesta…— analizaba el rubio mirando fijamente al conductor, quien solo se molestaba más y más —. Y claro que mi eliminación me resultó sorprendente, considerando que era el miembro más valioso de mi equipo, y aún si ese no hubiera sido el caso, había uno mucho menos valioso, en este caso, Marcos — finalizaba, señalando al chico quien solo lo miraba molesto, mientras varios asentían.
—¿Qué crees que pasó? ¿Cómo fue que terminaste siendo eliminado de la competencia? — preguntaba luego Miri, y el chico se encogía de hombros, molesto.
—¿Cómo voy a saberlo? Hasta donde sé, no me había hecho de muchos enemigos en esta última temporada, salvo por el idiota gótico amigo de Mireya, por lo que es evidente que, si alguien tuvo algo que ver, tuvo que ser él… — acusaba de inmediato, y los recién entrevistados miraban incrédulos, mientras que el resto de los asistentes secreteaban entre ellos, y los conductores sonreían.
—Hasta donde sabemos, eres de los pocos que conocen el secreto de Kit…— agregaba Miri cautelosa, y Paula fruncía el ceño.
—¿Qué secreto? — preguntaba la chica, y Sean rodeaba los ojos.
—Hay que ser muy idiota…— empezaba el rubio visiblemente frustrado, cuando un micrófono ambiental le pegaba en la cabeza, a orden de Francisco.
—Para los recientes eliminados, creo que este video esclarecerá las cosas — explicaba el conductor, y todos miraban a la pantalla, una escena en el Confesionario.
Confesionario
—Bueno, ya que esto está diseñado para confesar cosas que no puedo confiarles a mis compañeros de equipo…creo que tengo algo que decir — entraba Kit apresurado, quitándose el casco de stormtrooper del desafío de Star Wars, con su rostro lleno de sudor y luciendo cansado —. Padezco trastorno de personalidad múltiple — confesaba con semblante serio, y luego rascaba su nuca —. Por lo general, soy capaz de mantener a mi doble personalidad bajo control…pero, con un millón de dólares en juego, quien sabe qué sería capaz de hacer.
Fin del confesionario
—Un momento, ¿el gótico raro es el nuevo Mike? — preguntaba Marcos confundido, mientras el resto de los recién eliminados miraban atónitos la pantalla.
—No sólo eso. Al parecer, su alter ego malvado ha sido el responsable de sabotear el juego de muchos de sus compañeros. Tan solo en el desafío de la Masacre en Wawanakwa, él fue quien guio a Cory a encontrar al resto de los competidores — relataba Francisco, ante la mirada sorprendida de todos, mientras el recién mencionado asentía, confiado.
—Comencé siguiéndolo a él, hasta que me di cuenta de que estaba consciente de mi presencia y comenzó a guiarme hacia el resto, para atraparlos y que perdieran el desafío — contaba el chico, y Liz se tomaba la cabeza, sorprendida.
—¡BASTARDO! — gritaba Carly enfurecida, y Sarah simplemente miraba impresionada.
—También saboteó la victoria de su propio equipo en el desafío de los Piratas del Caribe, haciéndole creer a todo el mundo que había sido Tamara quien había perdido la moneda que necesitaban para ganar el desafío — continuaba Miri, y los antiguos Dobles miraban cada vez más sorprendidos —. Aunque de todas maneras los perdedores fueron los Microfonistas…
—¡Ah, claro! Fue cuando nos deshicimos de aquel japonés loco de remate, ¿no? — preguntaba Carly hasta debajo de la tribuna de perdedores, y tanto Paula como Kyu que se encontraban más arriba fruncían el ceño, mientras Marcos reía.
—Y no olvidemos que le dio una paliza a Sean en el desafío de boxeo…— mencionó Francisco burlón, mientras se proyectaban imágenes de la pelea, y varios ex cinéfilos y campistas reían.
—Tenía la guardia baja…— se defendía el rubio, cruzándose de brazos.
—Además de que saboteó de nueva cuenta a sus compañeros en el desafío de la persecución de autos…— revelaba Miri, cuando se proyectaba un video de Kit chocando el auto de Prince y Zack, con un Stephen aferrado de su asiento a su lado.
—No puedo creerlo…Kit no sería capaz de eso — se rehusaba Paula, sorprendida, y Sean rodaba los ojos.
—Es evidente que estuvieron más ocupados en salir con todos sus compañeros de equipo, que no se dieron cuenta de lo que tenían bajo sus narices…— criticaba Sean y la mayoría de los ex cinéfilos lo miraban de mal modo, a excepción de Carly que reía malévola —. Ese idiota planea ganar el millón de dólares. Utilizará a las personas que sean necesarias para cumplir su propósito, y aplastará a quienes intenten meterse en su camino.
—Suena familiar, ¿no? — preguntaba Paula y el rubio se hundía en sus hombros, mientras Sarah lo miraba con odio.
—Bueno, de eso se trata esta competencia, la supervivencia del más fuerte. Si el niño gótico planea utilizar a Mireya para sus propios fines, pues bien por él — decía Sarah con semblante aburrido, cruzada de brazos, y Liz reía.
—No me sorprende que en ninguna de las temporadas hayas quedado como finalista — retrucaba Liz, y la rubia achinaba los ojos.
—Pero recordemos que todo esto no es culpa de Kit… es su personalidad malvada — defendía Celyan a su amigo —. Todas esas cosas que ha hecho no ha sido su intención hacerlas, simplemente no lo puede evitar.
—Eso no lo excusa de todo el mal que está causando — negaba Bridgette con las manos en el pecho —. No durará mucho en la competencia, una vez los demás se den cuenta de su verdadera naturaleza.
—Espero que no tarde mucho…— suspiraba Sean con recelo.
—Bueno, ya sabemos que no tuviste suerte en desenmascarar a Kit en la competencia — señalaba Miri, y el rubio arqueaba una ceja —. Y, al parecer, tampoco tuviste suerte en recuperar el amor de Mireya, y todo gracias a Kit — continuaba y el chico se molestaba más y más.
—¿Tu punto? — interrumpía el chico brusco, y la conductora fruncía la nariz.
—¿Algo que quieras agregar para finalizar? — preguntaba ella, y el chico la miraba serio.
—Solo espero que el idiota gótico no se atreva a lastimar a Mire — confesaba y Paula veía sorprendida desde la tribuna de perdedores —. De todas maneras, me encargaré de él en cuanto sea eliminado del estúpido programa — finalizaba y los fanáticos aplaudían, aprobando.
—Muchas gracias por tus respuestas, Sean. Te invitamos a tomar asiento entre tu ex novia Carly, y tu hermana gemela y ex novia Sarah, personas a quienes ni siquiera te molestaste en mencionar en algún punto de esta entrevista — señalaba Francisco con una sonrisa, cuando hacía espacio entre ella y Sarah, haciendo ademanes con efusividad para que el chico se sentara a su lado.
—Bien — accedía el chico, visiblemente molesto, y cuando se dirigía a sentarse en el lugar designado, Sarah lo empujaba molesta, mientras Carly lo jalaba al lado suyo y comenzaba a llenarle de besos el rostro, maniaca.
—Y pasando con invitados mucho más interesantes — continuaba Francisco ante la mirada molesta de Sean —, nuestros siguientes tres invitados, además de ser los últimos eliminados de la competencia, son los únicos de este segmento que no estuvieron en la temporada pasada.
—Nuestra siguiente invitada nos dio mucho, MUCHO drama…— se refregaba las manos Miri —. Se trata de la nueva pelirroja que destronó a Carly de su puesto, una chica sexy, atrevida, quien, en lugar de intentar ganar por sus propios méritos, consideró que sería mejor si manipulaba a algún idiota que hiciera el trabajo por ella. Lamentablemente, eso no resultó, sorpresivamente gracias a nuestra querida Penny — y en eso la tribuna nuevamente estallaba en alaridos, mientras Carly veía ofendida.
—¡QUE ALGUIEN TRAIGA A ESA MALDITA PERRA DE UNA BUENA VEZ! — gritaba con los ojos llenos de cólera, mientras DJ y Owen trataban de detenerla.
—Finalmente, algo interesante — reía por lo bajo Sarah, y su hermano alcanzaba a escucharla y volteaba verla —. ¿Qué miras, idiota? — preguntaba molesta, y el chico solo bufaba, dándole la espalda.
—La colorada malvada, nueva roba novios designada, destronando con ello a Gwen y, sorpresivamente, a Jasmine…— leía Miri entre risas, y tanto Gwen como Liz miraban molestas —, la nueva pelirroja vaquerita de playboy… ¡aquí viene Mel!
La chica entonces entraba al set con un andar soberbio, moviendo las caderas de forma sensual mientras muchos chicos en la audiencia la vitoreaban mientras observaban detenidamente sus piernas kilométricas, y varias chicas la insultaban.
—Esa sí es una chica linda — sonreía Duncan con la mirada fija en la pelirroja, y Courtney y Gwen se hacían muecas de asco.
—Bienvenida al Aftermath, Mel…— la saludaba Francisco cuando tomaba asiento en el sillón de invitados, y ella lo miraba con desprecio —. ¿Cómo te encuentras?
—En primer lugar, mis ojos están aquí, nerd pervertido…— señalaba ella cuando el chico ni miraba sus piernas —, en segundo lugar, verás que me encuentro de maravilla después de haber sido saboteada y, por lo tanto, ¡NO HABER GANADO UN MILLÓN DE DOLARES! — gritaba histéricamente, levantándose de su asiento e inclinándose sobre el chico, quien temblaba ante la rudeza de Mel —. ¡ME MEREZCO UN PRIMER PLANO, MALDITO CAMARÓGRAFO! —gritaba luego cuando un camarógrafo que la grababa se veía con intención de alejarse —. Como sabrán, sigo conmocionada de que las cosas no hayan salido como debían.
—Eso vemos…— asentía Miri frunciendo la nariz, y Mel la miraba despectivamente.
—¿A qué crees que se debe tu derrota en la competencia? — interrumpía Francisco, sintiendo la tensión entre ambas chicas, y Mel parpadeaba rápidamente.
—Obviamente, si perdí en el desafío de la persecución de autos, fue todo culpa de ese estúpido nerd — escupía ella cruzándose de brazos, y Miri rodaba los ojos —. Y en cuanto a mi eliminación, debí imaginar que la rubia de pote Jasmine y su estúpida amiguita rubia cabeza hueca de Penny formarían una alianza para deshacerse de mí. Parece que ambas se sentían amenazadas por mí, y no las culpo…pobrecitas — fingía pena la pelirroja, observándose las uñas y sonriendo maliciosa.
—Claro, debiste estar muy ocupada robándole el novio a Jasmine como para darte cuenta, ¿cierto? — preguntaba Miri desafiante, y la chica reía cínica.
—Oye, yo no obligué a Zack a hacer nada que no quisiese… no es mi culpa que todos los hombres mueran por mí — se defendía la chica con las manos en el pecho —. Al final, Zack terminó siendo una ayuda inútil, dado que no fue capaz de evitar que la mayoría votara por mí, estaba tan distraído intentando arreglar las cosas con su estúpida ex novia.
—¿Por qué habrá sido? Oh, no sé, quizá porque… ¡besaste a su novio en televisión nacional! — gritaba Miri, cuando Francisco proyectaba en la pantalla la escena del beso, y Miri le arrebataba el control del televisor de la mano, mientras Mel miraba maliciosa.
— De todas formas, todo el mundo sabe que esa relación estaba destinada al fracaso y todo gracias al imbécil de Zack y sus estúpidos sentimientos infantiles— narraba la chica y tanto Paula como Liz miraban escépticas desde la tribuna.
—Vamos, Mel…— interrumpía Francisco, intentando apaciguar las aguas, puesto que el auditorio lucía bastante alterado —. Sé que eres… ¿linda? — empezaba a decir y todas las chicas le lanzaban miradas fulminantes —. Como sea, no creo que Zack tuviera sentimientos por ti — finalizaba, a lo que la chica ladeaba la cabeza, y mantenía su sonrisa maliciosa.
—Por más que me encanta llevarme el crédito de lo sexy y perfecta que soy, no estaba hablando de mí — explicaba ella ante la mirada inquisitiva de todos —. Obviamente, Zack está enamorado de Penny.
Los susurros a lo largo de todo el auditorio no se hacían esperar, pues tanto algunos fanáticos como ex campistas se miraban confundidos, hasta que una estruendosa risa irrumpía en el set.
—¡Vamos, Zack no está enamorado de Penny! — negaba Paula entre risas —. La temporada pasada, quedamos entre los seis finalistas y algo que aprendí, es que ellos se odian.
—No lo sé, linda… La dinámica entre ellos es demasiado tensa, y apasionada — interrumpía Marcos —. No me sorprendería si se gustasen…son como tú y yo — decía esto último con ojos de galán, a lo cual Paula se mordía el labio, y luego empujaba su cara lejos.
—Lo supe desde el momento que descubrí que fue Zack quien ocasionó la eliminación de Ash. Es decir, bastó con ver la reacción de Zack cuando se enteró del beso entre él y Penny… — narraba Mel de modo dramático, y luego hacía una cara de asco —. Y luego, cuando Penny se rehusaba a contarle la verdad a Jasmine, al principio pensé que simplemente estaba haciéndole un favor a Zack con tan de proteger mi estadía en la competencia… hasta que me di cuenta de que lo hizo para proteger su relación, porque Penny parece también estar enamorada de ese imbécil y, por lo tanto, no quería verlo sufrir…— finalizaba haciendo un ademán de llanto y luego recobrando su sonrisa maliciosa.
—Bueno…dicen que del odio al amor hay un solo paso, ¿no? — se preguntaba Riaya —. Aunque no sé cómo alguien podía gustar de Penny — negaba rotundamente con la cabeza y en ello todos guardaban silencio, volteando a ver a Fred —. Oh, lo siento amiguito…
—Olvidé que estaba con nosotros — se lamentaba Paula en un susurro, mientras ella y Kyu miraban consternados al chico, quien se encontraba callado, pero visiblemente molesto.
—¿Así que tú eres el tal Fred? — preguntaba entonces Mel, mirando al chico de arriba abajo, despectiva —. Luces exactamente como Zack te describió. Pero supongo que, si tienes una novia, no podría ser otra más que la idiota de Penny.
—Oigan, Penny es genial…— defendía Ash, con semblante relajado —. Es increíblemente inteligente, divertida, sexy… Si a Zack tenía que gustarle alguien del equipo, solo podía ser ella — finalizaba y Mel miraba ofendida.
—¿Y por qué crees que te saboteó para ocasionar tu eliminación? Y así tener el camino libre para coquetear con la estúpida peli teñida cabeza hueca — retrucaba Mel, y el set comenzaba a llenarse de más preguntas y reclamos por todas partes.
—¡Un momento! No olvidemos que hablamos de dos personas que tienen pareja. Es decir, ¡Zack quiere a Jasmine! Es bastante obvio, de lo contrario no seguiría luchando por recuperarla — interrumpía Liz cuando todos comenzaban a discutir de forma más acalorada —. Y Penny, bueno… estoy segura de que sale contigo por alguna razón — se dirigía luego la oji verde a Fred, quien se mostraba cada vez más y más irritado con la situación.
—Sí, pero Penny coquetea con todos, no me sorprendería que en el próximo capítulo besara a Rowland…— fingía Mel demencia, y tanto Paula como Marcos miraban molestos.
—Es Randy…
—¡AL MENOS PENNY NO ES UNA ZORRA COMO TÚ! — gritaba a lo lejos una fanática, quien era vitoreada por varios a su alrededor.
—¿QUIERES HABLAR DE ZORRAS? MEJOR EMPECEMOS POR JASMINE — gritaba otra fanática cuya playera tenía el rostro de Rocío impreso, más un sombrero de vaquerita.
—¡Eso es, Ronáticas! — festejaba Rocío desde la tribuna y Liz volteaba molesta.
—¡Ya estoy harta! ¡Jasmine no robó a tu novio! ¡Los hombres son unos idiotas! — gritaba a la chica, quien se observaba con ganas de una pelea.
—¿SI SON IDIOTAS ENTONCES POR QUÉ TE GUSTA CORY? — preguntaba a lo lejos una fanática, y Liz fruncía la nariz.
—¡NO ME GUSTA! — reponía ella, ante la mirada atenta del chico.
—¿O te gusta Zack? ¿Acaso por eso lo defiendes tanto? — preguntaba luego Ro, y la oji verde hacía una mueca de asco.
—¡ZACK ES UN GIGOLÓ! — gritaba otro fanático, provocando risas, en lo que alguien del otro lado se ponía de pie.
—¡SI TIENES ALGO QUE DECIR ACERCA DE ZACK, MÁS VALE QUE LO DIGAS MÁS FUERTE! — gritaba mientras lanzaba una silla al otro lado del auditorio.
—¿Esto también ayuda al rating? — preguntaba Kyu confundido, cuando ambos conductores se asomaban detrás de su sillón.
—No si tenemos que pagarlo…— miraba Francisco de mal humor.
—¿ALGO MÁS QUE QUIERAS DECIR ACERCA DE ZANNY? — preguntaba un fanático con una playera impresa del rostro de Zack y Penny en una especie de fotomontaje.
—¡BASTA! — gritaba Fred desde la tribuna de perdedores, y todos sorprendidos se detenían en el acto —. No vale la pena que sigamos desgastándonos en tontas peleas relacionadas a una competencia en la cual ya no participamos. Y tú, — decía luego, señalando a Mel, molesto — no puedo permitir que digas otro insulto más acerca de Penny. Nuestra relación no es de tu incumbencia, ni de la de Zack, así que no quiero volver a escuchar a ninguno de ustedes decir algo al respecto por el día de hoy. ¿Quedó claro? — preguntaba, y todo mundo miraba en silencio, y asentían atemorizados.
—Es lo más que he escuchado salir de su boca…— susurraba Sean, cuando tenía encima a Carly, quien asentía sorprendida.
—Bien…— asentía Mel, visiblemente molesta, y los conductores se recomponían.
—Por último, Mel, ¿Quién te gustaría que ganara la competencia? — preguntaba Francisco cuando todos volvían a su lugar, y la chica fruncía la nariz.
—No me interesa quien gane, solo quiero que Selene pierda — finalizaba la chica, y la mención de la rubia captaba la atención de Carly y Sarah.
—Estúpida rubia…— susurraban ambas chicas para sí mismas, de lo cual solo Sean se percataba.
—Gracias por tu participación Mel, te invitamos a unirte a la tribuna de los perdedores… — señalaba Miri a lo cual la chica se levantaba molesta, observando un lugar vacío entre Fred y una Carly que lucía rabiosa e intentaba morderla, siendo sostenida solo por Sean.
— Ahora, nuestra siguiente invitada seguramente pondrá de mejor humor el lugar…— continuaba Francisco, mientras varios miembros del staff levantaban las cosas que los fanáticos habían lanzado.
—Una chica dulce, artista, de nuestras favoritas para ganar…— narraba Miri con una sonrisa en su rostro —. Nunca estuvo entre los últimos dos en las ceremonias de eliminación, hasta que un error suyo le costó la victoria al equipo de las chicas.
—El primer miembro eliminado del trío de amigas de los Camarógrafos, la artista en la competencia, ¡que entre Bay! — anunciaba Francisco y la chica entraba repentinamente con una sonrisa en su rostro.
—¡Hola a todos! ¿Qué sucedió aquí? — preguntaba confundida, cuando se encontraba con el set hecho un caos, y una luz colgaba cerca de ella.
—No sabemos de qué hablas…— negaba Miri mientras la jalaba del brazo para tomar asiento en el sillón —. ¡Querida Bay! Qué gusto tenerte aquí, ¿cómo has estado?
—Bueno, considerando que ahora puedo comer las tres comidas del día, fui al fisioterapeuta a que me descontracturara la espalda, y puedo pasar tiempo en mi estudio pintando, creo que bastante bien — decía ella pensativa, y varios ex campistas reían.
—Te ves bastante bien para alguien que perdió la oportunidad de ganar un millón de dólares — le decía Francisco sorprendido, y la bella chica simplemente reía.
—Bueno, ¿qué caso tiene molestarse? Eso no hará que regrese a la competencia ni nada parecido — se encogía de hombros la chica —. Llegué más lejos de lo que pude haber predicho, hice amigas y conocí gente asombrosa.
—Hablando de gente asombrosa, ¿qué pasó con Wade? ¿Por qué ese cambio de opinión respecto a salir con él? — preguntaba Miri codeándola, y la chica se ruborizaba.
—Bien…he de confesar que no he tenido muy buenas experiencias amorosas, por lo que no me entusiasma mucho la idea de salir con un patán más…— confesaba la chica, frunciendo la nariz, pero luego se relajaba —. Sin embargo, Wade es genial. Es decir, es inteligente y muy dulce… Si voy a darle una oportunidad al romance, creo que él es el chico indicado — finalizaba y la tribuna aplaudía satisfecha con la respuesta.
—Considerando que Wade tenía ojos enamoradizos cada vez que volteaba a verte, y que no creo que haya salido con muchas chicas antes…— decía Miri mientras en pantalla se proyectaba una foto del recién mencionado, y Francisco le daba un codazo —. Creo que no tienes nada de qué preocuparte.
—¿Qué tienes que decir para el equipo de las chicas, luego de tu eliminación? — continuaba Francisco con la entrevista, y la chica meditaba un poco.
—Lamento mucho haber echado a perder la oportunidad de que Sky y Penny disfrutaran de un fin de semana de spa. De Jasmine y Mireya, no las conozco personalmente, pero vi la primera temporada y debo decir que también lamento si no fui de mucha ayuda en el desafío de la momia. De esa chica Tamara, algo me dice que está chiflada…— respondía Bay un tanto nerviosa —. Y bueno, que se pudra Selene. Nadie necesita tanta energía negativa — finalizaba la chica cruzándose de brazos, y todos aplaudían.
—Rubia estúpida…— susurraban nuevamente Carly y Sarah al unísono, esta vez añadiéndose Mel, y Sean arqueaba la ceja.
—Finalmente, ¿a quién te gustaría ver ganar? — preguntaba Miri, y la chica sonreía.
—Pues claro que me encantaría ver a Sky o a Wade en la final, creo que lo merecen — respondía finalmente la chica, y el público aplaudía y le enviaba saludos.
—Bueno, dado que eres la única invitada que fue lo suficientemente amable para responder todas las preguntas, no desviarte del tema, pero sobre todo, no estás loca…— señalaba Miri y los invitados anteriores se veían ofendidos — te invitamos a pasar con cualquiera de tus compañeros de equipo — y la chica observaba sólo a Mel, Sean y Ash, y tragaba saliva.
—Genial…
—Y finalmente, nuestro último invitado de la noche, y quien tampoco es un veterano, para el alivio de muchos…— anunciaba Francisco, y nuevamente la audiencia enloquecía.
—Un chico atractivo, dulce, amigo de muchos…es decir, ¿cómo no amarlo? — preguntaba la chica y se oía el grito de varias fanáticas que intentaban pasar por las bardas de seguridad —. Y si bien nunca estuvo entre los dos últimos en la ceremonia de eliminación, su error fue darle la espalda a la que hasta ahora ha sido la rubia líder de la temporada, misma que causó su eliminación, para su mismo pesar.
—Uno de los héroes de los Dobles, amigo de prácticamente todo su equipo, y posiblemente amante de Selene…— susurraba esto último Francisco, y varios reía —. ¡Démosle la bienvenida a Mathias!
En eso, el chico de cabello color azabache entraba con un andar despreocupado, hasta que veía de lejos a las fanáticas y les lanzaba un saludo que ocasionaba que un par se desmayara, y entonces abría los ojos como platos.
—¿Están bien? — preguntaba angustiado, y Miri hacía un ademán despreocupado.
—No te enfoques en eso, mejor acompáñanos por acá…— pedía cuando el chico se sentaba en el sillón de invitados, aún confundido —. Cuéntanos, ¿cómo has estado?
— Bueno, bastante bien. Es decir, sí, perdí un millón de dólares gracias a una rubia loca de remate, pero…oigan, hice grandes amigos — confesaba con una risa nerviosa, y le guiñaba el ojo a Paula y Marcos, quienes lo saludaban de lejos.
—Hablando de eso, ¿qué sucedió con Selene? Al principio te observabas muy interesado en ella, ¿qué cosa cambió? — preguntaba Francisco, y el chico se rascaba la nuca.
—Sí, bueno… ¿has visto a Selene? Es hermosa, tiene un cuerpo…— recordaba el chico con las manos en la cabeza, y luego suspiraba frustrado —. Al principio me pareció divertido, ya saben… ir al bosque y besuquearnos, cosas como esas — confesaba ante la mirada divertida de varios ex cinéfilos.
—Un momento, ¿estuviste besuqueándote con Selene todo ese tiempo? — preguntaba Celyan con cara de asco, mientras Marcos sonreía con aprobación.
—No fue todo el rato, ocurrió luego del desafío de superhéroes — la corregía Paula rápidamente, y luego se detenía en seco ante la mirada atenta de todos, especialmente de Math —. Lo lamento, Marcos me lo contó cuando salíamos — se disculpaba la chica encogiéndose de hombros.
—Se suponía que era un secreto — entrecerraba Math los ojos, y Marcos miraba apenado.
—Lo siento, viejo…
—¿Hay algún video que lo confirme? — preguntaba repentinamente Mel, aburrida, y Francisco sonreía.
—En los realities hay video de todo…— respondía mientras se observaba un video del Confesionario donde entraba Selene
Confesionario
—Bien, para todos aquellos camarógrafos pervertidos que se la pasan husmeando cerca de mi cabaña, creo que no tengo que confesarles acerca de mis salidas secretas con Math…— confesaba Selene de piernas cruzadas, sacudiendo su cabellera rubia como modelo —. A fin de cuentas, en esta competencia, cada movimiento es clave para acercarse a la victoria — continuaba luego, pero en eso se quedaba perdida con ojos enamoradizos, hasta que recuperaba la compostura y miraba con seriedad a la cámara —. Así que solo vengo a decirles lo mismo que le dije a Math, que es que, si cualquiera de ustedes se atreve a transmitir alguno de esos videos que tengan en su poder, ¡los buscaré y les cortaré las bolas hasta que parezcan muñecos de acción! ¿Quedó claro? — amenazaba y fuera del baño se escuchaba un llanto masculino, que llamaba su atención.
Fin del confesionario
—Aterrador…— reía Miri, mientras que su invitado se encogía de hombros despreocupado —. Me imagino que esa personalidad fue la gota que colmó el vaso.
—Como les dije, sí es linda…pero está loca — continuaba el chico y negaba con la cabeza —. Y tarde o temprano, sufrirá las consecuencias de haber torturado a su equipo y, básicamente a todos. Quise alejarme de ella antes de ser un daño colateral de esas consecuencias, pero no pensé que eso ocasionaría que ella terminara por eliminarme.
—¿Supiste que ella estaba detrás de tu eliminación desde ese momento? — preguntaba Francisco, y el chico asentía calmo.
—Claro, ¿quién más podría haber sido? Tamara era mi amiga, y si bien Randy está demente, me agradaba… ¡y Prince es genial, viejo! Además de ellos, jamás me llevé mal con los otros, por lo que tuvo que haber sido ella — repasaba el chico pensativo —. Aunque claro, aquel chico Stephen se estuvo comportando muy raro aquel día…
—¡Eso es porque es malvado! — gritaba Liz desde la tribuna, mientras los últimos invitados miraban confundidos, y Miri bufaba.
—Qué cansado es esto de repetir las cosas varias veces…— bufaba la chica mientras dirigía el control remoto a la pantalla, y comenzaba proyectarse un video de Stephen en el confesionario, justo después de la eliminación de Paula, y de que él y Jasmine fueran incorporados al equipo de los Dobles.
Confesionario
—Hagamos un recuento, ¿sí? Un chico con problemas de control de ira, que 'repentinamente' se molestaba constantemente. Un patético fanático que 'cayó' por si solo del automóvil. Un pequeño depravado sexual increíblemente irritable…ni siquiera necesita explicación. Una entrometida entusiasta que 'hizo mal el nudo', y ocasionó que perdiéramos. Un coreano enamorado que cayó en la perdición por sí mismo…sí, claro — reía ante lo último, de manera irónica —. Una loca de atar que simplemente era insoportable, y por último, una gemela malvada que 'accidentalmente' contrajo una extraña fiebre en trasatlántico — finalizaba, y luego sonreía con un matiz ponzoñoso —. Sí, creo que después de todo, Jasmine tiene razón. Fui el competidor más fuerte en el equipo de los Microfonistas, y será lo mismo ahora que estoy con los Dobles. Uno a uno, todos irán cayendo, de una manera tan caótica y espontánea que nunca llegaran a siquiera pensar que fue culpa de alguien más. Poco a poco, todos se darán cuenta, incluida Jasmine, de que no es bueno subestimar a un simple geek. Porque, escúchenme bien, todos, tarde o temprano, comprenderán la única realidad de esta temporada: — decía el muchacho, serio, desafiante, mientras se acercaba más a la cámara — Yo seré el ganador del millón de dólares.
Fin del Confesionario
Después de que terminara la reproducción del video, todos los recién eliminados observaban la pantalla, boquiabiertos, habiendo quedado sin habla.
—Bueno, eso es…impresionante — admitía Mel cruzada de brazos, mientras Sarah y Carly observaban a su lado, con expresiones molestas.
—Un momento, ¿quieres decir que nuevamente fui saboteada en la competencia por un estúpido pelirrojo? — preguntaba Sarah indignada, y Sean alzaba las cejas.
—Nunca lo hubiera imaginado… — confesaba Sean, luciendo genuinamente sorprendido.
—¿Y eso qué tiene que ver conmigo? Nunca le hice nada… — preguntaba Math confundido, y ambos conductores se encogían de hombros, con las manos al aire.
—Al parecer, Stephen tiene un particular desprecio por las personas populares, así que lógicamente… no tomaría mucho tiempo antes de que se decidiera a eliminarte — preguntaba, y el chico se mostraba molesto por un segundo, aunque luego recuperaba su expresión relajada.
—Se alió junto con Jasmine y Selene para asegurar tu eliminación, luego de engañar a Jasmine haciéndole creer que le hacías la vida imposible — revelaba Francisco, mientras se reproducían videos de ambas chicas complotando junto con Penny.
—Otra víctima más de Stephen, ¿quién lo diría? — suspiraba Ash sorprendido, y Liz rodaba los ojos.
—¡YO SE LOS DIJE!
—Como sea, el punto es que terminé perdiendo, ¿no? — preguntaba Math encogiéndose de hombros —. Pero hey, me divertí y conocí a personas geniales, y es lo que importa, ¿no?
—No — contestaban Mel, Carly, Sean y Sarah al unísono.
—Genial, alguien que no está molesto por su eliminación, cuanto drama…— decía Miri irónica revoloteando los ojos —. ¿Y quién quieres que gane?
—Pues… ¡Prince, por supuesto! — exclamaba el chico casi de inmediato, con una sonrisa —. Aunque, ¿saben? También me gustaría ver a Tamara llegar a la final. Esa chica… tiene algo, creo que es más fuerte de lo que muchos creen — confesaba con una sonrisa, y Paula abría los ojos, sorprendida.
—¿No es ella la chica loca? — preguntaba Marcos en un susurro, y su ex novia asentía.
—Bueno, muchas gracias por estar aquí Math. Ahora, si nos disculpas…— agradecía Miri mientras empujaba al chico a la tribuna y luego ella y Francisco sonreían ante las cámaras —. ¡Y eso fue todo el programa del día de hoy! ¡Nos da gusto que todos nos hayan acompañado!
—Y para todos nuestros televidentes, no olviden que cuando el próximo Aftermath tome lugar, ya habremos descubierto quienes son los grandes finalistas de esta temporada — señalaba Francisco, y el público estallaba en gritos y alaridos que los aturdían a ellos y a la tribuna de perdedores.
—¿Siempre son así? — preguntaba Bay con una risa, mientras ella y Math se tapaban los oídos.
—No dejen de ver los últimos capítulos, ¡y nos vemos en el próximo Aftermath! — despedía Miri alzando los brazos con efusividad, y el público aplaudía entusiasmado una última vez.
Muchas gracias a todos y cada uno de ustedes por haberme prestado a estos y a otros maravillosos personajes, y haberme permitido crear historias con ellos.
Un saludo a quienes siguen leyendo, y también a quienes algún día volverán a pasar por aquí. Me gustaría saber de ustedes, pero también entiendo si no hay más que decir respecto a esta historia.
Nos leemos próximamente.
