Nashiko iba con cierto apuro al punto de reunión donde se vería con Haruto para la cita que tendrían en el parque de diversiones, o al menos así es como ella lo veía ya que no había indicios de que fuera una cita o solo una salida como amigos, a pesar de ello se preparó lo mejor que pudo, colocándose una ropa cómoda y que se vea bien para ella, aplicándose maquillaje leve y zapatillas, a su imagen piensa que se ve linda.
- (Bien, esto deberá de funcionar, no tengo razones para estar nerviosa.) – Mientras ella estaba en sus pensamientos, a lo lejos se encontraban cinco figuras escondidas.
- ¿Me pueden decir por qué hacemos esto? – Preguntó Haneru, Izumi la vio fijamente.
- Este es un evento sumamente raro que no volverá a pasar, puede darse la oportunidad de que una de nosotras finalmente pueda forjarse un novio y quiero estar ahí para presenciar el momento.
- Creo que estás exagerando…
- Nada asegura que Nashiko-san consiga pareja luego de una cita. – Comentó Hikari.
- Por favor, tenemos el deber moral de observar su progreso amoroso, para eso están las amigas. – Sonrió la pelinaranja.
- No creo que sea algo que las amigas deban de hacer. – Expresó Haneru con rostro inexpresivo.
- La verdad es que tengo curiosidad por ver como saldrá su cita, puede que hagan cosas lindas y estén acaramelados. – Pai ya estaba en su imaginación creyendo lo que pasaría y emocionándose.
- ¿Realmente es interesante ir a una cita? – Preguntó Riche con genuina curiosidad.
- Claro que lo es. – Empezó a explicar Izumi a la peligris. – Solo piensa en cómo es ir junto a alguien a divertirse, comer algo, estar agarrados de la mano y compartir una malteada mientras hablan de las cosas que les gustan hasta que en cierto momento se miran fijamente a los ojos y una chispa se enciende, para que luego este te tome en brazos y te dé un beso. – Todo ese tiempo ella estuvo imitando las escenas, a pesar de todo, Riche seguía con la interrogante.
- Lo siento Izumi-san, no entiendo mucho, como no he tenido más contacto con hombres más allá de mi familia y los mayordomos, no lo veo muy especial. – Izumi se dejó caer de rodillas en ese momento.
- Claro… siendo una chica rica, tendría que tener una educación de ese tipo…
- Miren. – Hikari señaló en aquel momento. Nashiko logró ver como el castaño llegó y se acercó a ella.
- Acabo de llegar ¿esperaste demasiado?
- No realmente… - Mintió, solo no quería hacerlo quedar mal. – Estoy algo emocionada por ir.
- Bien, vamos entonces. – Los dos comenzaron a caminar en ese momento, las chicas que estaban detrás hicieron lo mismo.
- Vamos tras ellos, esto no nos lo podemos perder. – Sonrió Izumi de forma cómplice. Ya así ambas partes se dirigieron al mismo sitio; el parque de diversiones no estaba muy lejos de donde se encontraron, por lo que solo bastó caminar unos cuantos metros para llegar a la entrada, Haruto y Nashiko ya estaban por entrar cuando él mostró los boletos, entrando al parque.
- Ahora debemos de entrar nosotras. – Expresó Pai. – Pero no tenemos boletos para entrar…
- Ugh, lamento no haber traído dinero para esto. – Izumi se sintió dolida por no haber pensado en ello.
- Puedo hacer algo. – En ese momento Riche sacó su teléfono e hizo una llamada, no tardó más de treinta segundos para que una limosina se detuviera y un mayordomo bajara.
- Aquí tiene lo que pidió señorita. – Este llevaba un maletín el cual le dio a la peligris.
- Gracias Oswald.
- Un gusto servirle. – Y de nuevo entró al vehículo el cual se fue rápidamente.
- Creo haber resuelto esto. – Ella abrió el maletín rápidamente, lo que había dentro dejó a las chicas sin habla, no se trataba de nada más y nada menos que dinero adentro del maletín, miles de billetes bien acomodados. – Creo que con estos ocho millones podría comprar el parque y podamos pasar gratis.
- ¡No hagas eso! – La detuvieron Izumi y Haneru a la vez.
- ¿Por qué? Es la mejor forma de poder entrar. – Respondió la peligris como si nada, Pai y Hikari tenían gotones en sus frentes.
- Creo que mejor pagamos nuestras entradas y ya. – Sugirió la rubia. De ese modo se adentraron sin hacer demasiado ruido mientras continuaban en su persecución de Nashiko y Haruto. Los dos se encontraban observando el mapa de atracciones en aquel momento, la variedad hacía un poco complicado el que escojan a cuál ir primero.
- Seguro que hay muchos sitios a los cuales podemos ir ¿hay algo en específico donde desees ir primero? – Preguntó el castaño, Nashiko se puso a observar el mapa.
- Bueno, he venido aquí algunas veces cuando era pequeña y tengo algunos buenos recuerdos… ¿empezamos con algo suave? Las tazas.
- Bien, vamos ahí. – Y los dos fueron a la atracción mientras las demás chicas les seguían de lejos. Al llegar vieron que no había una fila larga por lo que pudieron subir en poco tiempo, así los dos estaban en una sola taza la cual podían girar. – Esto funciona según la fuerza que le pongamos, así que puede ser fuerte o ligero.
- Vamos con fuerza. – Nashiko sonrió confiadamente en lo que empezó a girar el medio por lo cual la taza aceleró en su fuerza, Haruto sonrió.
- No pensé que te gustara las emociones fuertes.
- He hecho lo mismo cuando era una niña, así que no pierdas el tiempo y pon a girar esta taza. – Los dos empezaron a girarla, siendo más rápida que las otras, mientras el resto de chicas observaba todo.
- Se están divirtiendo, realmente nuestra Nashiko-san podría salir con novio el día de hoy. – Sonrió Izumi.
- Tampoco podemos estar muy seguros al respecto, no debemos de sacar conclusiones apresuradas. – Señaló Haneru, en ese momento llegó Pai con un cono de helado.
- ¿Cómo va la observación de Nashiko-chan?
- Oye Pai ¿realmente es momento para que compres helado? – La pelinegra enarcó una ceja, Pai puso un rostro de duda.
- ¿Por qué no? Podemos aprovechar.
- No es justo que hayas comprado helado Pai, deberías haber pedido para todas. – Se quejó la pelinaranja, mientras seguían hablando, Hikari continuó observando fijamente.
- (Ha de ser muy divertido salir con alguien…)
- ¿Piensas algo Hikari-chan? – Riche sacó de sus pensamientos a la pelimorada.
- Riche-san… no es nada, solo estaba viéndolos.
- ¿En serio? – Ladeó su cabeza. – Te veías como que estés pensando en algo profundo… miren, ya se van. – A la señal de la peligris, las chicas observaron cómo los dos bajaron del juego en ese momento.
- No pensé que giraras tan rápido Jipensha-san. – Haruto estaba algo sorprendido por la velocidad con la que giró la taza del juego, ella sonrió orgullosa.
- Te lo dije, en mi familia amamos la velocidad.
- Pues eso me dejó agotado… ¿vamos a comprar una bebida?
- Por supuesto. – Los dos ahora fueron a la cafetería para comprar algo de beber, Nashiko ocupó un asiento mientras el castaño fue a comprarlas, en otra mesa alejada se encontraban las chicas.
- Izumi ¿por qué llevas ese sombrero y esos lentes? – Haneru y las demás se fijaron en que la pelinaranja tenía unos lentes de sol y un sombrero.
- Haneru, es básico en el espionaje el esconder tu rostro para que no te reconozcan, pensé que eres inteligente.
- Lo soy, pero es que llamas la atención de esa forma.
- No peleen chicas, en vez de eso, comamos palomitas. – Pai ahora trajo una bolsa de palomitas grande.
- Tu también Pai, deberías dejar de comprar comida que en una de esas podrías encontrarte con ellos.
Volviendo con Nashiko, a los pocos minutos llegó Haruto con las bebidas para los dos, ella pidió un té de naranja frío mientras él bebía una soda, así los dos se sentaron a beber.
- Esto no está nada mal. – Comentó el chico. – No me entusiasmaba mucho el venir al parque pero resultó ser divertido, seguro es porque no estoy solo.
- Debe ser eso. – Respondió Nashiko. – Supongo que debería venir un día con mis amigas, podríamos divertirnos en los juegos.
- ¿Hubieras preferido venir con ellas? – Preguntó el chico, Nashiko se alarmó y lo negó rápidamente.
- N-No quiero decir que venir contigo sea aburrido, he disfrutado hasta ahora nuestra salida.
- Entiendo… es un alivio escucharlo. – Sonrió Haruto, Nashiko sintió vergüenza en aquel momento, sus mejillas se enrojecieron levemente.
- (Ah, eso fue peligroso, pensé que iba a deprimirlo con mi respuesta, menos mal no fue así… la verdad es que esto de salir con un chico es divertido, se siente muy distinto a todas las veces que he ido a lugares con las demás… me pregunto si lo repetiremos de nuevo en el futuro…)
Una vez terminaron sus bebidas fueron al siguiente juego, justamente se trataba de una casa embrujada, Nashiko sintió escalofríos.
- ¿Es necesario que vengamos aquí? – Preguntó ella, el castaño puso una sonrisa burlona.
- ¿Tienes miedo? Sí quieres, podemos saltarlo e ir a otro lugar más tranquilo, pero eso me demostrará que no aguantas este tipo de cosas. – Era obvio que él la estaba provocando, Nashiko lo sabía pero su propio orgullo evitaba que pudiera negarse.
- Así que piensas eso, muy bien, entremos y verás que soy valiente. – La pelinegra se adelantó a entrar con él siguiéndola, ya entonces el resto de chicas fue por detrás.
- ¿En serio entraremos? – Preguntó Pai la cual estaba algo asustada.
- Hay que seguir a esos dos en su cita en todo momento, no pierdan el tiempo y entremos. – Izumi no se rendiría en su espionaje de los dos por lo que entró.
- Ya que ella no se rendirá por nada, no hay de otra. – Haneru había aceptado el hecho por lo que igual entró.
- Será divertido, vamos. – Por su parte Riche veía la diversión de todo para eso para continuar, Hikari simplemente se hundió de hombros para ir detrás de ellas, la rubia tuvo que tragar saliva para entrar a la atracción y no quedarse atrás de todo.
Nashiko y Haruto se encontraban caminando por los pasillos que estaban oscuros, la pelinegra iba agarrada del brazo de Haruto en todo momento, más que nada por cualquier susto que pudiera salir.
- ¿Realmente estás bien? – Preguntó el castaño, viendo como ella temblaba.
- C-Claro que estoy bien, es solo un juego, no hay nada que pueda asus… - En ese momento saltó una figura lo cual causó que la pelinegra gritara y abrazara a Haruto. - ¡Aaaaaah!
- ¡Woah! – El castaño sintió algo suave en su costado, debido a que Nashiko lo estaba abrazando fuertemente, llegó a sentir sus pechos. – Esto… Jipensha-san.
- No me sueltes… - Ella tenía hundido su rostro en el brazo del chico. – Por favor… - Haruto sintió como ella estaba genuinamente asustada, lo entendió y no dijo nada más.
- Sigamos caminando y no me sueltes. – Continuaron de esa forma, pasando por el juego hasta que salieron. – ya estamos afuera.
- ¿Sí? – El castaño lo afirmó, ella se soltó finalmente. – Menos mal… realmente estaba asustada.
- Sí lo estabas, debiste decirlo y no aguantar algo que no podías. – Exclamó el chico, Nashiko bajó la mirada, algo triste.
- Lo siento… - Haruto no pudo seguir molesto con ella.
- Sigamos con los demás juegos, aún queda mucho por lo cual divertirse. – Tomó su mano para continuar avanzando. Al poco tiempo después salieron las demás, Pai estaba abrazando con fuerza a Hikari.
- Pai-san, ya estamos fuera, puedes soltarme. – Expresó la pelimorada.
- No sé que le ven de aterrador, es obvio que son animatrónicos. – Comentó Haneru.
- Es que no soporto las cosas de miedo… - Respondió la rubia.
- Fue divertido ¿podemos repetirlo? – Sugirió Riche.
- ¡No! – Se negó Pai rápidamente.
- Todo esto ha causado que perdiéramos el rastro de los dos, hay que seguir. – Izumi estaba por irse pero Haneru la sujetó del cuello de su blusa. - ¡Oye, casi me ahorcas!
- Izumi, creo que es mejor que lo dejemos aquí… no hay razón para que continuemos espiando a esos dos, hasta incluso es más sano dejarlos solos.
- Pero es su primera cita, como su amiga tengo que estar presente.
- No quisieras que te hagan lo mismo ¿cierto? – La pregunta de la pelinegra la tomó desprevenida y era verdad, no quisiera que la espíen en una cita.
- Entiendo… es mejor que lo dejemos así, luego nos contará todos los detalles. – Haneru asintió con una sonrisa.
- Muy bien, es mejor que nos vayamos, ellos dos necesitan su tiempo a solas.
- ¿Podemos ir a comer algo? – Preguntó Hikari.
- Oh, conozco un restaurante de cinco estrellas que…
- ¡No! – Gritaron todas a Riche que estaba a punto de sacar su idea descabellada, al final el grupo de chicas dejó a Nashiko por su cuenta y que ella se divierta.
El atardecer estaba por todo lo alto, al final los dos solo tenían un último sitio al cual ir, ya estaban subiendo a la rueda de la fortuna la cual su cabina empezó a ascender.
- El atardecer se ve hermoso… - Exclamó Nashiko, Haruto asintió.
- Claro que lo es… - Había un buen ambiente entre ambos, la pelinegra no pensó que se divertiría tanto en esa cita.
- Kokonoe-san, el día de hoy fue muy divertido, realmente no pensé que salir de este modo llegara a ser algo que me gustara.
- Es bueno saberlo, la verdad es que igual es la primera vez que salgo a solas con una chica, así que no sabía que tan bien iba a salir. – Nashiko estaba algo sorprendida, entonces sonrió, la luz del sol al atardecer la iluminó por detrás.
- Ya veo… entonces no estaría mal repetirlo otra vez. – Sugirió esta mientras tenía un ligero rubor en sus mejillas, Haruto la vio con algo de asombro.
- … Claro. – Fue todo lo que dijo mientras seguían viendo el atardecer desde ese lugar. Nashiko pudo disfrutar su primera cita y con Haruto era bastante cercana, o al menos ella creía que estaban acortando su relación, siendo que mucho puede cambiar entre ambos, siendo apenas el inicio de algo más para los dos.
Lamento la tardanza pero aquí ya traigo el siguiente cap de este fic, antes de todo me gustaría hablar de algo, este ha sido un año algo duro debido a todas las cosas que he tenido que hacer y tomado algunas decisiones, ya para el siguiente veremos un ritmo distinto respecto a mis subidas, ya entraré a trabajar y eso afectará bastante los fics que tengo y su subida, claro que no quiere decir que dejaré de escribir pero ya no será tan frecuente como antes, espero sepan entenderlo, a pesar de todo no dejaré en paro ninguno de mis fics, eso es algo seguro, ya por ahora eso sería todo, nos vemos en el próximo cap. Saludos.
