Tal como hacían cada segundo jueves de cada mes, siendo una tradición que ni siquiera sabían cuando o porque habían empezado, la familia se hallaba en la sala reunida para la noche de películas familiar, Lincoln y Paige se encontraban semi acurrucados riéndose por lo bajo mientras que Logan estaba algo aburrido ya que la película era una de acción barata que no lograba despertar nada en él más allá de ver todos los errores de guion y cámara disfrutando principalmente las palomitas que habían preparado, pero el cuarto miembro estaba especialmente atento a la película, sobre todo desde que esta había entrado en el clímax del enfrentamiento entre el protagonista y el villano de turno.
- …no hay nada que puedas hacer, ¡Ya gané idiota!
- Lo único que has ganado es un pase al infierno.
El protagonista en ese momento disparo a un tanque de combustible dentro del garaje de carga de un avión provocando que este explotara mientras el protagonista tomaba una mochila de paracaídas y se aventaba al vació con el avión explotando de fondo.
Logan solo bostezo ante lo predecible del guion, pero los ojos de Lemuel parecían brillar mientras tenía abierta la boca de la impresión.
- Bueno, esta película es terrible jajaja. - Comentó Lincoln.
- Te dije que era mala desde que leíste la premisa. - Logan sonaba claramente decepcionado.
- ¿En serio pueden decir eso? - Lemy dijo aquello con una voz profunda mientras observaba fijamente la televisión aunque con un tono realmente indignado.
- Bueno, sí, la verdad es terrible. - Paige sonaba algo confundida de que alguien realmente haya disfrutado de esa película.
- De hecho es increíble que hubiéramos gastado 2 horas de nuestra vida viendo esto. – Tercio Logan.
- ¡Shhh! Que viene la mejor parte.
En ese momento el avión continuó explotando mientras el protagonista hacía algunas acrobacias en el aire y activaba el paracaídas.
- Supongo que ese sujeto nunca escucho del estilo caída libre.
Logan en ese momento se levantó, asqueado.
- ¡Suficiente! Yo me voy. - Y se fue a su cuarto.
- Esta película es una de las peores que he visto, - A Lemy. - ¿Por qué insististe tanto en que viéramos esta tontería?
- (Indignado) ¡¿Soy el único que comprende la complejidad de esta ambiciosa obra maestra cinematográfica?! ¡Esta película no es tonta, tú eres el tonto!
Lemy se quedo mirando fijamente a Lincoln quién le devolvió una mirada vacía, provocando que la determinación del castaño se mermara rápidamente en cuanto proceso lo que acababa de decir.
- Jejeje… eh… perdón, me deje llevar.
- Lemuel, a mi taller, ahora.
El castaño giro su cabeza con una expresión lastimera en dirección a su madre esperando algo de apoyo en lo que sabía que se venía, pero esta solo evito su mirada con todo el dolor de su corazón sabiendo que no podría defenderlo de esta.
Más tarde esa noche
Logan estaba mirando al techo de su habitación mientras lanzaba una pelota al aire y la atrapaba con su mano mientras pensaba en la película, realmente era mala, demasiado para su propio gusto, pero había estado meditándola bastante sobre todas las fallas que había identificado notando que en su último proyecto de animación personal estaba rozando alguna de esas fallas por lo que estaba pensando en como pulir esos detalles cuando sintió que la puerta de su habitación era abierta, viendo que no era otro más que su hermano mayor.
- Hola Logan, ¿Qué tal?
El peliblanco le dio una mirada cansada a su hermano, pues aunque ver aquella película le había servido como retroalimentación el hecho de haber desperdiciado casi dos horas de su vida viendola era algo que no le tenía feliz.
- ¿Qué quieres?
- Tú sabes sobre cine y esas cosas, ¿Sabes cuánto gana un doble de acción?
Logan levanto una de sus cejas en impresión ya que realmente no sabía que era lo que más le impresionaba, si ver a Lemy interesado en el mundillo del cine o el hecho de verlo interesado en trabajar.
- Eh… no, pero podría investigarlo.
- ¿Y sabes que tendría que hacer para poder trabajar como un doble de acción?
- Pues, supongo que tendrías que estudiar actuación o tener contactos dentro del mundo para que te incluyan en alguna película.
- Ya veo, ya veo, ¿Y conoces a alguien dentro del mundo del cine?
Un silencio se produjo en la habitación, uno donde Logan miró con expresión estoica a su hermano.
- No.
- Ya veo, ya veo, ¿Y no hay otro medio que requiera menos esfuerzo?
- No… lo creo.
- Ajá, está bien, gracias hermanito.
Dicho eso el castaño se retiro de la habitación, dejando bastante perplejo a su hermano menor.
- ¿Qué demonios irá a hacer ahora?
Lemy cuando abandono la habitación se encamino al primer piso, dirigiéndose hacia la oficina de su madre donde guardaba gran parte de los documentos relacionados a su trabajo sabiendo que probablemente estaría preparándose para el día siguiente antes de ir a dormir, encontrándola precisamente en dicho lugar tecleando en su computadora con una copa de vino a su lado.
- ¿Mamá? - Dio un par de toques a la puerta. - ¿Puedo?
- Oh, cariño. - Dejo de teclear y se volteó hacia Lemy. - Por supuesto, dime.
- Pues, quería pedirte algo.
- Bueno, dime si puedo ayudarte con ello.
- Pues, ¿Me prestas 300 dólares?
- Claro hijo, déjame ir al banco mañana y…
- ¿Para qué quieres 300 dólares si se puede saber? - Casi como si se hubiese materializado detrás suyo Lincoln había aparecido detrás de su primogénito, observándole con una expresión seria.
- Pues…
- Estoy esperando.
- Por favor Lincoln, si Lemy necesita 300 dólares debe ser por una buena causa.
- Ajá, no lo creo. - Nuevamente se centro en observar a su hijo. - Te estoy esperando chico.
- Pues…
- Lincoln, yo confió en mi hijo, se que si me lo pide es porque los necesita, ¿No? Vamos, dime cariño, ¿Para qué los necesitas?
- Quiero tirarme en paracaídas como el protagonista de la película que vimos. - Dijo con tono derrotado.
- ¿Ves? - Dijo mientras miraba a su esposa. - Además, es probable que salte y se le olvidé lo más importante.
- ¿Cómo saltar desde un avión? - Pregunto curioso Lemy.
- Ponerte el paracaídas.
- Ah… ni yo soy tan idiota papá, ¿No es cierto mamá?
Pero en el rostro de Paige había duda genuina.
- ¿Mamá?
- Creo… que lo mejor sería si no vives esa experiencia cariño.
- ¿Ehhh?
- Ya es decisión unánime Lemuel, y se acabó.
Sin mucho esfuerzo Lincoln termino por jalar fuera del cuarto a Lemy, cerrando la puerta detrás de él antes de que fuese capaz de terminar de procesar lo ocurrido, momento en el que termino por sentarse en el salón frente al televisor, cruzándose de brazos mientras se dedicaba a pensar en solo una y una única cosa.
- ¿Cómo lo hago para tirarme en paracaídas?
Unos minutos después
- ¿Diga?
- ¡Lu! ¡Hermanito! ¿Qué tal?
- ¿Lemy? Sigh, ¿Cuánto dinero quieres ahora?
- Oye, yo no llamaría a mi hermanito favorito solo para pedirle dinero.
- Ajá, ¿Entonces?
- Pues, he estado pensando que hace tiempo que no hacemos algo como familia, tú, yo, Logan, ya sabes, algo entre hermanos.
- Bueno, eso es verdad, aunque ahora estoy ocupado con algunos exámenes.
- Si, si, lo puedo imaginar, Logan está igual aquí con la preparatoria, pero oye, tú tienes más libertad de horarios, podrías escaparte un día y salir en un viaje con tu hermano mayor.
- No suena mal.
- Claro que no, ¿Y sabes que sería genial para coronar ese día? ¡Lanzarnos en paracaídas! Solo son 300 dólares por persona, pero conozco a mi hermanito lo suficiente para saber que 600 dólares es algo que puedes tener ahorrado o bien pedírselo a mamá, ya que… ¿Luthor? - La llamada fue cortada en el momento que Lemy dijo "paracaídas". - ¿Aló? ¿Hermanito? ¿Lu?
Lemy alejo el teléfono de su oído y confirmo que en efecto la llamada había sido cortada, mirando su teléfono por un instante antes de cruzar sus manos.
- Seguro fue solo la impresión de la genial idea, si, solo le dejaré procesar un poco la noticia y seguro que me llamará devuelta.
Y así termino quedándose media hora sentado en esa posición sin hacer más que observar su teléfono, momento en el que finalmente se levanto con una sonrisa en su rostro.
- Bien, solo me queda una opción.
Logan estaba leyendo el guion de la animación en la que trabajaba, tenía varias partes que habían sido editadas recientemente además de tener algunas notas en un cuaderno abierto junto a su computadora mientras escuchaba música con sus auriculares puestos, mientras reemplazaba una oración que diría uno de los secundarios de dicha escena sintió un escalofrío recorrer su espalda, como si algo no anduviese bien en la tranquilidad de su propio cuarto a lo que levanto su cabeza y miró en dirección hacia la entrada, notando como parte de la cabeza de Lemy estaba asomándose por esta.
El peliblanco solo suspiro, sacó sus audífonos y giro su silla para quedar mirando en dirección hacía su "invitado", sabiendo que ignorarlo sería peor que atender pronto su solicitud, algo que sabía por experiencia.
- ¿Qué paso ahora?
- Hermanito, ¿Tú sabes que eres mi hermano preferido?
La mirada escéptica de Logan hizo retroceder un poco a Lemuel, quién se detuvo un momento a pensar en lo que serían sus próximas palabras antes de gastar su última posibilidad de cumplir su sueño.
- Bien, es que… hay algo que necesito hacer de todo corazón. - Logan sabía que su hermano no era de poner expresiones aparte de su "cara de idiota" cuando conversaba, por lo que verlo formar aquella expresión afligida logro captar su atención.
- ¿Ok? ¿Y eso que es?
- Tú sabes que hoy en día hay muchos males en este mundo, tantos niños analfabetas, personas que saben identificar ni siquiera en que estado viven, niños que tienen que usar aparatos para poder oír o correr, ¡Es tan triste!
- Bueno, ciertamente eso es malo, pero no creo que podamos hacer mucho por ellos.
- ¡Eso es un error hermanito! Descubrí como podemos ayudar, ¡Quiero donar a la caridad! ¡Son solo 300 dólares que quiero entregarle a los menos afortunados!
Logan solo lo miró fijamente, sin ánimos para quejarse o refutarle, solo lo miró.
- Y me darán una camiseta.
- Sabía que no podía ser solo por caridad, viejo, en el centro comercial hay varias camisas por una decima parte de ese monto.
- Pero eso no ayudaría a los niños sin hogar, ni a los que no pueden asistir a la escuela, es por una buena causa.
- Tú quieres una camiseta.
- Pero una camiseta benéfica, te da puntos con diosito.
- ¿Desde cuándo crees en dios?
- Nunca es tarde hijo mío.
- Eh…
- Bueno, ¿Me prestas 300 dólares? Te dará puntos de buen chico.
- Ni siquiera tengo 300 dólares.
- Vamos, tú siempre has sido precavido en cuanto a gastos, seguro que tienes ahorrados unos 300 dólares.
- Bueno, tendría que revisar ya que no estoy seguro cuanto tengo ahorrado.
- Te conozco Logy. - Lemy levanto su pulgar y le regalo una sonrisa mientras le giñaba un ojo. - Se que tienes.
- (Molesto) No me vuelvas a decir Logy, ¿Oíste?
- Pero si te encantaba cuando eras chiquito.
- ¡Cuando tenía como 5 años!
- Y eras tan adorable.
- ¿Quieres los dólares o no?
- Shi.
- Entonces cállate mientras reviso.
Logan comenzó a curvarse para sacar su alcancía de uno de los cajones de escritorio, pero mientras hacía ese movimiento recapacito un poco sobre aquella situación, más considerando que era su hermano mayor quién le estaba pidiendo eso, comenzando a dudar considerablemente de aquella versión y de los pocos detalles que poseía.
- Mmm, por cierto, ¿A que fundación vas a donar?
- ¿A cuál? - La pregunta había alcanzado de improvisto al castaño, retrocediendo ligeramente mientras miraba a todos lados. - P..Pues a esa, ya sabes, esa fundación, la de… eso de los niños.
- ¿Cuál?
- Tú sabes de cual hablo, esa, ya sabes, la del… - Logan solo se cruzo de brazos y miró seriamente a su hermano. - Bueno, no hay caridad, quiero 300 dólares para tirarme en paracaídas. - El castaño termino cediendo ante la presión.
- Ajá, paracaidismo.
- Es una buena experiencia, tú viste lo genial que se veía ese tipo en la película mientras bajaba en paracaídas, ¡Debe ser lo mejor!
- Ajá, si, no.
- Vamos Logan, solo tú puedes ayudarme.
- No voy a darte todos mis ahorros para que hagas esa tontería, conociéndote probablemente te tirarías sin el paracaídas.
- Eso no… ¿Qué te pusiste de acuerdo con papá o qué?
- ¿Qué?
- No importa, vamos hermanito, solo son 300 dólares.
- ¡Lo dices como si fuera poco!
- Para un chico con ahorros como tú sí.
- Oye, ni siquiera se si tengo 300 dólares ahorrados, además es probable que si lo haces te estampes contra el piso y te ma… mmm… ¿Solo son 300 dólares verdad?
- ¡Si!
- Bien, déjame ver cuanto tengo.
- ¡Logan, el dinero que obtenga tu hermano para que se tire en paracaídas te lo descontaré de tus futuras mesadas! - Grito desde el primer piso Lincoln.
- ¿Cómo nos escuchó? - Lemy se veía genuinamente sorprendido.
- Seguro que fue su entrenamiento por vivir con todas las tías. - Logan también se veía impresionado. - Pero bueno, ya oíste a papá, no obtendrás nada de mi Lemy.
- Maldición, ¿Ahora de donde saco 300 dólares?
- Trabaja.
- Si solo hubiera una manera practica de tener una remuneración esporádica en este mundo.
- Cómo trabajar.
- ¡Por qué la respuesta no llega a mí!
Logan sabía que estaba hablando con un caso perdido, era como hablarle a una pared solo que esta le devolvería cualquier tontería devuelta como contraargumento, por lo que estaba decidido a ponerse nuevamente los audífonos y volver a lo suyo, ya había escuchado la petición de su hermano y se había dado un veredicto, sería cosa de un breve instante para que el castaño se rindiese o intentase su siguiente golpe, pero al menos ya no lo involucraría a él… o al menos eso esperaba cuando en los 30 segundos que se desasocio de la conversación para meditar Lemy había recuperado su espíritu de pelea y lo había tomado desde el brazo, comenzando a arrastrarlo fuera de esta.
- ¡Y esa será una excelente experiencia para ambos!
- ¿De qué demonios hablas?
- Shh. - Lemy puso un dedo en la boca de su hermano. - Tú confía en mí.
Sin tiempo para recapacitar Logan fue arrastrado por Lemy hasta el primer piso, más concretamente hasta el despacho de su madre quien seguía frente a la computadora, entrando ambos antes de cerrar la puerta por dentro para impedir que "otros" ingresaran.
- Madre, estoy aquí junto con Logan porque necesitamos cumplir un pacto entre hermanos que nos prometimos hace poco.
- ¿De qué demonios estás hablando? - Logan no terminaba de entender que estaba pasando.
- Como familia tenemos la necesidad de crear vínculos que perduren en el tiempo, más allá de todo lo que la vida nos ponga por delante e intente separarnos, ¡Por eso es importante que nuestras experiencias nos hagan recordar esos lazos de hermandad que se han debilitado con el tiempo!
- ¡¿Pero de que demonios habla este tipo?! - Logan realmente intentaba ponerse al corriente de lo que estaba pasando.
- ¡Solo míralo madre! ¡El chico esta junto a mi y no sabe qué hacer, claramente nuestro vinculo fraternal se ha debilitado y necesitamos urgentemente recuperarlo!
- Mmm… ciertamente es bueno que ustedes como hermanos convivan más, pero paracaidismo…
- Si Logan va conmigo no olvidare ponerme la mochila, él me recordará.
- Eso es un buen punto.
- Espera, espera, espera, ¿Cuándo accedí yo a esto?
- Estabas dispuesto a pagar por mi viaje, y aprecio eso hermanito. - Lo toma de ambos hombros. - Quizás llegue con engaños a tu lado, ¡Pero aun así estabas determinado a apoyarme en mis planes! ¡¿Cómo puedo ser tan egoísta de no incluirte en una experiencia tan única como esta?!
- Hijos míos. - Paige estaba al borde de las lágrimas. - Tal espíritu de cooperación y hermandad, ¿Cómo no puedo estar orgullosa como madre?
- Madre. - Lemy sonaba tan emocionado como su madre.
- Lemuel. – Paige apenas contenía sus emociones.
En un cruce de miradas que tomo unos pocos segundos fue que ambos se envolvieron en un abrazo, uno al que Logan realmente no tenía idea como reaccionar o siquiera si debía reaccionar, realmente no lograba alcanzar a asimilar los sucesos que ocurrían frente a él y menos pudo cuando el brazo de su madre apareció de la nada y lo jalo a ese momento familiar, obligándolo a formar parte del cariño fraternal que se estaba dando en ese preciso momento.
Uno que se vio comprometido en el momento que sintieron como alguien tocaba la puerta del despacho.
- Cariño, ¿No estás con Lemy verdad?
Ambos, madre e hijo se paralizaron en ese momento.
- Lincoln, ¿No estarás dudando de mi verdad? - La experiencia de Paige para permaneces seria aun en momentos tensos estaba siendo usada plenamente, pues pese a la formalidad con la que esas palabras habían sido dichas, el rostro de la mujer era uno de preocupación total el cual observaba a su hijo que se encontraba en la misma situación observando a todos lados.
- (Susurrando) ¿Qué hago mamá?
- (Susurrando) Escóndanse, pronto.
- ¿Y yo por qué…? - Logan no logro terminar la oración cuando su boca fue tapada por Lemy.
- Escuche la voz de Logan, ¿Qué está pasando cariño?
- Es una conversación madre e hijo, es privado Lincoln.
- Ajá… bueno, está bien, lo siento cariño.
Los tres pudieron escuchar como los pasos del patriarca se alejaban del lugar, momento en el que Lemy finalmente saco sus manos de la boca de Logan en lo que este junto a su madre suspiraban más tranquilos.
- Eso estuvo cerca.
- ¿Podría irme de una vez?
- Pero si tenemos que planear el viaje, ¿No me digas que ahora me vas a dejar a cargo de todo para que nos tiremos en paracaídas?
- Ciertamente Logan, siendo un viaje entre hermanos sería bueno que participaran ambos en todo, incluyendo la planificación.
- Oigan, yo ya me voy, tengo cosas mejores que hacer.
- Bueno, pero mañana planificaremos esto mejor hermanito. - Lemy le apunto con sus dedos mientras le guiñaba sonriente.
- Si, si, lo que digas.
Paige solo suspiro mientras reía, divertida por la actitud fraternal de sus hijos, Logan ya tenía suficiente de esa situación y a gusto personal, si Lemy quería hacer alguna idiotez como tirarse de un avión él no se iba a molestar más de lo necesario, por lo que abrió la puerta deseando simplemente continuar con su proyecto personal solo para que, en el momento que la puerta estuvo lo suficientemente abierta una cara sonriente fuese visible a los presentes del lugar.
- ¿Puedo participar de su agradable momento familiar?
Si algo sabían los hermanos Loud y tenían internalizado en lo más profundo de su interior era que ver a su padre tan "alegre" nunca era buena señal, a Logan ya no le importaba poder avanzar con el guion de su historia, solo quería sobrevivir esa noche. Casi como si se hubieran sincronizado perfectamente ambos hermanos saltaron para esconderse detrás de Paige quién solo había cerrado sus ojos e inflado sus mejillas.
- (Molesto) Niños, déjenme a solas con su madre un momento, ya hablaré con ustedes.
En silencio y sincronía completa ambos hermanos tragaron y huyeron de la habitación.
Ya estando fuera y con la puerta cerrada, Lemy suspiro aliviado.
- De la que nos salvamos, ¿No crees hermanito?
- Sacrificaste a mamá por tu tontería.
- Mamá estará bien, sabe convencer a papá.
- Viejo, eres despreciable.
- Es la supervivencia del más apto Logan, deberías aprender eso además de confiar más en mamá.
- Estás jugando con fuego.
En ese momento salió Lincoln de la habitación con una expresión más calmada.
- ¿Ves hermanito? Mamá lo logro.
- Lemy, estás castigado.
- ¿Eh? ¿Pero por qué?
- ¡Ja! Te lo dije.
- Tú también Logan.
- ¡¿Eh?! ¡¿Y yo por qué?!
- ¿No estabas muy de eso de la hermandad recién con tu madre? Pues asume las consecuencias de la hermandad, ya les comentaré sus castigos.
Dicho eso el peliblanco se retiró, dejando a ambos hermanos en silencio por un momento hasta que Lemy rompió el silencio.
- Al menos estaremos juntos en el castigo como buenos hermanos. - Y le regalo una sonrisa con un pulgar arriba.
- ¡Hijo de…!
Logan no pudo terminar su guion esa semana.
