Cinco (5) meses atrás, En las afueras de Ciudad Mahogany, en algún lugar cerca del Lago Rage, 8.37 P.M


-Creo que debería empezar diciéndote que yo soy el hijo de… Giovanni.-

-¿E-el hijo de… Giovanni?-

-Así como lo oyes…-

-¿Estás bromeando, verdad?- Indago Lucía con visible incredulidad, mientras ahora se sentaba en el frío pasto nocturno y después miraba con cara de pocos amigos al pelirrojo. -Si esta es una broma déjame decirte que-…

-No es una broma Lucy. Yo realmente soy el legítimo hijo de Giovanni.-

-¿Estamos hablando del mismo Giovanni que fue líder tanto del Equipo Rocket como también del gimnasio de Ciudad Viridian y que luego desapareció tras su derrota a manos de Red, Blue y Green en la cima del edificio de la corporación Silph?-

-Sé que esto debe sonar totalmente descabellado e ilógico para ti, pero Giovanni es mi padre por más difícil que sea de creerlo.-

-P-p-pero entonces tu serias entonces el…-

-¿El legítimo heredero del Equipo Rocket? Pues en efecto así es…-

-¡N-n-no puedo creerlo!- Reconoció la de oscura cabellera al mirar de arriba a abajo a Silver para posteriormente tragar saliva. -¿C-cómo es que nadie sabia de ti?-

-¿Si tú fueras la líder de una organización criminal mundialmente reconocida le dirías al mundo que tienes familia o hijos?-

-N-no... Claro que no lo haría.-

-Mi existencia siempre fue un secreto para todos en el Equipo Rocket como también para el resto del mundo.- Señaló el pelirrojo con desánimo. -Mi padre fue extremadamente cuidadoso en este tema para mantenerme a salvo de sus enemigos o de cualquier otro peligro que pudiera aparecer.-

-Comprendo lo que dices, pero…-

-¿Pero?-

-¿Pero qué hay de tu madre?-

-¿M-mi madre?- Repitió Silver cambiando drásticamente el tono de su voz. -Ella-…

-¿Qué le sucedió?-

-Ella murió dando a luz, así que técnicamente nunca pude conocerlas.- Aseveró Silver con algo de tristeza. -Solo la he visto en un par de antiguas fotos en mi vieja casa en Ciudad Viridian…-

-Ohhh… L-lo siento mucho.- Expresó Lucía, con completa vergüenza mientras que agachaba su cabeza. -N-no tenía idea de que ella-...

-No te preocupes por eso, Lucy.- Proclamó Silver al levantar la cabeza de Lucía con la punta de sus dedos, lo que automáticamente causó que el rostro de la chica se sonrojara. -Si tienes más cosas que preguntarme estoy dispuesto a responder.-

-¿Estás seguro de eso?-

-Completamente…-

-Hmmm… ¿Qué podría preguntar?-

-Lo que desees saber…-

-Ammm… ¿Sabes la razón de porqué Giovanni desapareció tan misteriosamente?-

-No tengo la menor idea.- Confiesa Silver con molestia, antes de apretar sus puños y negar con su cabeza. -Mi padre siempre fue un hombre extremadamente orgulloso y misterioso en muchísimos sentidos. Y segun escuche, cuando Red, Blue y Green lo derrotaron, el decidió desarticular al Equipo Rocket como penitencia.-

-¿Entonces crees que su desaparición tiene que ver con que lo derrotaron en combate?-

-Estoy completamente seguro de que la derrota contra Red, Blue y Green fue el motivo del porqué desapareció. Pero lo que no comprendo es porque se fue sin llevarme con él o por lo menos darme alguna explicación.-

-Eso es algo muy irresponsable de su parte.- Exclamó enérgicamente Lucia. -Abandonar a su propio hijo es algo demasiado cruel e inhumano incluso para alguien cómo él.-

-Coincido contigo. Pero al menos él me dejó el suficiente dinero como para vivir cómodamente. Además, el también me dejó a un Ursaring que apenas si puedo controlar en batalla.-

-Supongo que le tienes resentimiento por abandonarte. ¿Verdad?-

-Sí y no.-

-¿Si y no?- Repite Lucía con notable extrañeza en su rostro por la inesperada respuesta de Silver. -¿Que demonios quieres decir con eso? ¡Intenta ser al menos un poco mas especifico!-

-Mira, a pesar de todo lo que sucedió, le estoy algo agradecido por cuidar de mi y por protegerme. Pero lo que nunca le podré perdonar es el haberme abandonado cómo si fuera un trapo viejo y sin al menos tener la cortesía de decir algo al respecto.-

-E-entiendo. Pero hay algo que aún no tengo claro con respecto a todo esto, Silver. Y la verdad es que es bastante sospechoso.-

-¿Qué cosa?-

-¿Tu sabias o sospechabas a lo que tu padre se dedicaba?-

El pelirrojo negó lentamente y después coloco una agria expresión en su rostro. -Sinceramente no tenía la menor idea.- Confiesa Silver. -Pero aceptó que siempre tuve la sospecha de que el se dedicaba a algo más aparte de ser líder de gimnasio cuando lo veía preocupado sin razón aparente las pocas veces que nos veíamos. Pero a pesar de eso, nunca me imagine que él fuese el creador y líder de una de las organizaciones criminales más importantes y temidas del mundo.-

-¿En serio no lo sabías?-

-Hablo muy en serio, Lucy.- Reafirmó Silver. -Mi relación con Giovanni fue relativamente normal y gran parte de mi infancia me la pase estudiando en los más selectos y costosos internados de Sinnoh, Hoenn y Unova. Yo apenas si pasaba tiempo en Viridian debido a esto, así que nunca pude notar algo extraño. Pero sí reconozco que algo que siempre me llamó la atención fue que él insistió explicitamente en qué utilizará el apellido de soltera de mi madre y también en qué no le dijera a nadie de que yo era su hijo.-

-¿Y eso porque?-

-Supuestamente era para qué no me trataran diferente en los internados y esas cosas por el estilo, así que no le di tanta importancia a eso hasta después de que él me abandonará.-

-Aprecio mucho tu honestidad.- Señaló Lucía al volver a acostarse sobre el frío pasto, pero esta vez utilizando sus brazos de almohadas para apoyar su cabeza. -¿Qué más sucedió?-

-La verdad no recuerdo mucho de lo sucedido los primeros días luego de que me abandonó.- Declara Silver cruzándose de brazos y mirando con nostalgia el estrellado cielo nocturno. -Lo poco que recuerdo fue quedarme un par de semanas en Ciudad Viridian esperando a que él regresara. Pero a medida que pasaba el tiempo, poco a poco comencé a perder la esperanza en que volvería. No fue hasta que vi los carteles de se busca con su foto que me enteré que él era el líder del Equipo Rocket.-

-Me imagino la sorpresa que te llevaste al descubrir a lo que se dedicaba…-

-Yo no podía creer lo que veían mis ojos en ese momento.- Informó Silver con algo de resentimiento y tristeza. -¿Mi padre un criminal? Yo me rehusé a aceptar la realidad, y en ese preciso momento y por primera vez en mi vida, experimente lo que era sentir odio, angustia, resentimiento y frustración.-

-Silver…-

-Al día siguiente decidí irme de Ciudad Viridian para olvidar todo lo que me atormentaba y quizás dejar atrás mi pasado. Pero jurando a futuro ser lo suficientemente fuerte para demostrarle al mundo, pero en especial a Giovanni, de lo que yo podía ser capaz de lograr.-

-Pero a pesar de todo eso que me dices, ahora eres parte de la misma organización criminal que creó tu padre.- Recalcó fríamente Lucía. -Yo me uní por necesidad y para no morir de tu tienes el dinero que te dejo Giovanni. ¿Cómo y porqué estás aquí exactamente, Silver? No lo entiendo…-

Silver permaneció en completo silencio y el semblante de su rostro cambió de un momento a otro como si estuviera librando una difícil e intensa batalla mental contra sí mismo. Lucía en ese preciso instante supo que esa pregunta era de suma importancia si quería averiguar más sobre Silver y su razón de estar en el Equipo Rocket.

-¿S-silver… ?-

-Cuando me fui de Ciudad Viridian decidí que la mejor opción era establecerme en la región Johto. Pero más específicamente, necesitaba ir a alguna ciudad lo bastante ocupada y concurrida cómo para no llamar mucho la atención, y la ciudad más adecuada para eso era-…

-¡Ciudad Goldenrod!- Exclamó rápidamente la de oscura cabellera para terminar la oración de Silver. -¿Pero que esto tiene que ver con que te unieras al Equipo Rocket?-

-Pues porque luego de varios otros meses de vivir en relativa paz, un día al regresar a mi nuevo hogar me encontré dentro de ella a dos (2) sujetos sentados pacientemente esperando por mí, quienes se identificaron como miembros del Equipo Rocket. Sus apodos eran Petrel y Archer.-

-Ósea que ellos de alguna manera sabían de tu relación con Giovanni.-

-Exactamente.- Afirma Silver luego de fruncir el ceño y exhalar aire. -No tengo idea de cómo me encontraron o se enteraron de que yo era el hijo de Giovanni. Pero su intención era la de revivir al Equipo Rocket a su antigua gloria.-

-Y-ya veo…-

-Archer me hizo una oferta. El me propuso que si me unía a ellos, entonces me podría convertir con su ayuda, no solo en uno de los entrenadores más poderosos de todo Johto y Kanto, sino que también utilizarían todos sus recursos para localizar a mi padre para que volviera a retomar su posición de líder.-

-¿Y así fue que te convencieron?-

-En lo absoluto. Yo tenía toda la intención de rechazar su propuesta y llamar a las autoridades porque no tenía el más mínimo interés de pertenecer a ellos o de encontrar a mi padre. Pero en ese preciso momento fue que se me ocurrió una idea. Yo decidí que lo mejor que podía hacer era ir con ellos y utilizarlos para mí beneficio para así destruir el mal que dejó Giovanni en el mundo.-

-La mejor manera entonces sería uniéndose y destruirlos desde adentro…-

-¡Exactamente!- Exclamó el pelirrojo de manera enérgica ante lo dicho por su compañera. -Era más que obvio que esos dos (2) no tomarían un "no" por respuesta, luego de haber ido personalmente hasta mi. En ese momento mis opciones se vieron severamente reducidas, por lo que decidí unirme a ellos para conocer de primera mano sus planes, cómo operaban, su base de operaciones y entre más cosas, para luego quizás detenerlos de serme posible en un futuro cercano. Mi principal y único objetivo siempre ha sido el de erradicar al Equipo Rocket.-

-E-entiendo… ¿Pero qué hay de mí?- Preguntó súbitamente la chica de pecas al mirar ahora a los ojos de Silver con seriedad.

-¿Huh?-

-Cuando cumplas tu objetivo de detener al Equipo Rocket. ¿Qué se supone harás conmigo?-

Posterior a haber escuchado a Lucia, Silver volvió a cambiar el semblante de su rostro a uno más rígido. Acto seguido, el pelirrojo se puso de pie, le dio la espalda a Lucía y simplemente decidió admirar la majestuosidad del Lago Rage y sus alrededores llenos de árboles. Sin embargo y después de un rato, la de oscura cabellera sin previo aviso se abalanza contra Silver e inesperadamente lo derriba sobre el pasto, para luego colocarse encima de él, cómo una especie de depredador al haber atrapado a su presa.

-¿Q-q-q-qué se supone estás haciendo?- Pregunta Silver en un nervioso tono de voz, mientras que se sonrojaba con intensidad. -¿L-lucy…?-

-Algo que debí hacer hace mucho tiempo.- Declaró Lucía al cerrar lentamente sus ojos, mientras que acercaba su rostro al de Silver. -S-solo dejate llevar. ¿De acuerdo?-

El corazón del pelirrojo estaba desmedidamente acelerado debido a la inesperada acción de Lucía. -¿Qué se supone debo hacer en esta situación?- Se pregunta mentalmente Silver, a la vez que intentaba con todas sus fuerzas controlar su acelerado corazón. -Y-yo… Y-yo-…

Cuando finalmente los suaves labios de Lucía se juntaron contra los del pelirrojo, Silver sintió un extraño pero placentero sentimiento de calidez el cual rápidamente se propagó por todo su cuerpo y lo dejo en un completo éxtasis de emociones y sentimientos. El por primera vez en mucho tiempo se sentía feliz y su acelerado corazón era viva muestra de ello.

-Déjame ayudarte a detenerlos.- Propuso Lucía, poco después de haber separado sus labios de los de Silver. -Y-yo puedo-...

-¡No lo permitiré!- Anuncia el pelirrojo con fervor y al mismo tiempo en que negaba con su cabeza. -Lo que yo estoy intentando hacer es muy peligroso y si llegaran a descubrir mis intenciones-…

-Es precisamente por esto que deseo ayudarte.- Interviene Lucía con completa determinación y firmeza. -Tú prometiste estar siempre a mi lado y si algo te llegara a pasar, no creo que pueda soportar el dolor de perder a alguien más en mi vida…-

-L-lucy-…

-Por favor, Silver, déjame ayudarte en esto… T-te lo suplico por lo que más quieras.-

-Y-ya lo veremos. Lo mejor es dejar este tema para otro dia. Pero no te prometo nada.- Señala Silver en un evidente tono lleno de resignación. -Ahora es mejor que regresemos a la base. Ya se está haciendo algo tarde…

-De acuerdo, de acuerdo. Pero antes de regresar tengo una última pregunta para ti.- Indicó Lucía.

-Hmph. ¿De qué se trata esta vez?-

Con más ímpetu qué otra cosa, en los labios de Lucía se dibujó una coqueta y burlona sonrisa llena de curiosidad. -¿E-ese fue tu primer beso, cierto?-

-¿Y q-que con e-eso?- Cuestiono Silver con nerviosismo, quien ahora tenía el rostro completamente enrojecido por la inesperada pregunta de su compañera. -¿Y qué si ese f-fue mi primer beso?-

-Hahaha, descuida, Silver. Ese fue mi primer beso también.- Confiesa Lucía de manera tranquila, antes de darle un último vistazo al Lago Rage. -Solo espero que podamos repetir este tipo de salidas más a menudo cuando terminemos con el Equipo Rocket en un futuro no muy lejano.-

-Ya verás que así será.- Aseguró Silver, instantes antes de besar tiernamente en los labios a Lucía. -Lo juro…-


Hotel "Gran Ecruteak", frente al cuarto A-30, 5:31 P.M


Luego de la sorpresiva aparición de la madre de Gold, su hermana mayor Asuka realizó un pequeño almuerzo familiar para celebrar su regreso y también para conmemorar la nueva medalla de Gold. Naoko Miki, Kuni y Sayo dejaron sus quehaceres en el hotel mientras duró la celebración para así conocer mejor a su tía y también para compartir junto a ella. Crystal, por su parte decidió regresar a la habitación para descansar un poco y también para hablar y teorizar con su padre sobre el misterioso fuego azul de Typhlosion.

Muy para el agrado de todos, el almuerzo en familia fue un completo éxito gracias principalmente a la espléndida comida que sirvieron y también en parte a las hilarantes historias que relataron, con lujo de detalles, tanto Sakura como Asuka acerca de varios aspectos de su vida. Al final del almuerzo un par de horas después, Asuka se llevó a su hermana de compras al centro de la Ciudad junto con todas sus hijas a excepción de Zuki, quien decidió acompañar a Gold a su habitación para también descansar un poco luego de un largo y exhaustivo dia.

-Me alegra mucho que nuestras madres después de tanto tiempo pudieran resolver sus diferencias y reunirse.- Comenta enérgicamente Gold, en un emotivo tono mientras que sacaba la llave que abría la puerta de su habitación. -Aunque confieso que no me espere que mi madre terminara apareciendo aquí de esta manera tan repentina.-

-Hehe, tu llegada cambió nuestras vidas para mejor.- Afirmó Zuki con una sonrisa. -Hace mucho tiempo no veía a mi madre tan feliz y todo es gracias a ti.-

-Como me dijeron Morty y Eusine en el gimnasio, "las casualidades no existen".-

-Concuerdo con ellos.- Reconoció la menor de las chicas kimono. Tu llegada a esta ciudad y que también te hospedaras aquí fue obra del mismísimo destino.-

Al abrir la puerta de la habitación en dónde se hospedaba, Gold y Zuki se percatan de que el televisor estaba encendido y la luz apagada. Al entrar completamente a la habitación, ambos notaron que Crystal yacía profundamente dormida en la cama de Gold, abrazando una de las almohadas con una enorme sonrisa de oreja a oreja.

-Heh, Crystal se ve muy linda cuando esta dormida.- Señaló el de New Bark antes de acariciar con delicadeza una de las mejillas de su compañera, para entonces apagar el televisor.

-¿Me pregunto qué estará soñando cómo para sonreír de esa forma?- Cuestiona ahora Zuki con notable curiosidad, luego de examinar rápidamente con su mirada a Crystal. -Hmmm…-

-Ni idea. Pero parece estar disfrutando mucho sea lo que sea que esté sucediendo en ese sueño.-

Inmediatamente luego de lo dicho por Gold, Crystal quién aún estaba profundamente dormida, aprieta aún más la almohada que abrazaba contra su cuerpo y luego comienza a gemir débilmente y también a balbucear un sinfín de cosas que apenas si se podían entender.

-Q-quizás lo está disfrutando un poco más de la cuenta.- Teorizó Zuki en voz baja al sonreír malévolamente, para posteriormente mirar pícaramente a su primo. -Si lo deseas puedo irme y así-…

-N-ni se te ocurra.- Denuncia el de New bark, cuando su rostro se sonrojaba con intensidad por imaginar lo que sugeriría su degenerada prima. -M-mejor salgamos al patio donde está la piscina para no despertar a Crystal que tengo algo importante que preguntarte.-

-Tch… Eres tan poco divertido.- Replicó Zuki de mala gana, mientras que salía junto a Gold al pequeño patio en dónde estaba la piscina. -En fin… ¿Qué era lo que deseas preguntarme?-

-Iré directo al grano.- Manifestó Gold, a la vez que cerraba la puerta corrediza de vidrio que conectaba con la habitación. -¿Acaso sucedió algo entre ustedes y Kelly?-

-¿P-por qué lo preguntas?-

-Pues para empezar, desde que regresé del gimnasio y vine a la habitación para cambiar mi ropa mojada, note que su mochila no estaba y tampoco la he visto a ella por ningún lado en el hotel.-

-N-no creo que debas de preocuparte por eso…-

-Luego en el almuerzo cuando le pregunté a Crystal sobre donde estaba Kelly, ella simplemente evito el tema de forma muy extraña antes de regresar a la habitación.-

Zuki apretó sus labios y permaneció en perfecto silencio ante todo lo dicho por Gold. Crystal y ella habían acordado no comentarle absolutamente nada a Gold de la batalla entre Silver y Kelly para no empeorar más aún las cosas, por lo que su silencio era imperativo.

-Enserio no paso nada de importancia entre nosotras.- Murmuró Zuki de manera tímida y nerviosa. -Lo más probable es que Kelly debe de estar de compras o quizás salió a entrenar un poco.-

-Acepto que yo soy bastante malo para mentir. Pero tú tampoco te quedas muy atrás que digamos.- Vocifera Gold en un agrio tono, antes de inesperadamente colocarse a escasos centímetros del rostro de su primera para mirarla fijamente a sus ojos color esmeralda. -Vamos Zuki, dime la verdad. ¿Esta bien?-

Cómo por acto reflejo, Zuki no pudo evitar sonrojarse notoriamente al estar tan cerca del rostro de su primo. Posteriormente, ella coloco un poco de distancia entre ellos y luego soltó un sonoro suspiro lleno de resignación.

-Ok, ok, tu ganas Gold, te diré lo que deseas saber. Pero con la condición de que me digas primero porque nos mentiste a todos en el gimnasio sobre tu entrenamiento.-

-De acuerdo. Supuse que tarde o temprano alguna de ustedes me preguntaría al respecto de esto, así que me parece justo responder.- Replicó Gold ante la propuesta de su prima. -Ayer por la noche y luego de que Crystal me dejara solo en el campo de batalla, entrene con otra persona durante varias horas porque deseaba mejorar mis habilidades como entrenador cuanto antes.-

-¿A qué se debe esa súbita urgencia por mejorar tus habilidades de un dia para otro?- Indago Zuki en un tono que demostraba curiosidad y desconcierto. -Para mí ya eres un entrenador extremadamente fuerte y no creo que-...

-¡Aún no es suficiente!- Exclama el talentoso entrenador de New Bark con amargura. -Aún no me siento conforme con mi capacidad de manejar a mis pokémon o su actual nivel. O al menos no para lo que deseo lograr…-

-¿Entonces todo esto es por tu sueño de conquistar la liga pokémon el año entrante?-

-En parte tiene que ver con conquistar la liga pokémon a futuro. Pero lo que en verdad quiero es-…

-¡El quiere protegernos a nosotras!- Declara ahora Crystal, al inesperadamente abrir la puerta corrediza para salir al patio. -¿O me equivoco?-

-Ohhh… ¿Te despertamos?- Pregunta Zuki de manera sarcástica. -¿Qué tal estuvo tu siesta?-

-Definitivo qué ustedes no saben guardar silencio.- Manifiesta la prospecto a profesora entre bostezos y de muy mal humor. -Podía escuchar casi todo lo que decían desde dentro de la habitación.-

-Lo sentimos.- Respondieron Gold y Zuki al unísono.

Crystal exhalo con pesadez el aire alojado en sus pulmones. -Ya eso no importa.- Asegura la de coletas con más tranquilidad, luego de sentarse a orillas de la piscina para meter sus descalzos pies dentro del agua. -Por favor continúen su conversación.-

-En fin… Crystal tuvo razón en lo que dijo.- Confesó finalmente Gold con algo de vergüenza. -La principal razón de porque quiero ser más fuerte junto a mis pokémon, es porque deseo ser capaz de protegerlas a ustedes de cualquier peligro que se presente si continuamos con este viaje…-

-Cuando dices peligro… ¿Te refieres al Equipo Rocket, verdad?-

Gold asintió lenta y reaciamente ante la atinada pregunta de su prima.

-¿Entonces por eso ayer entrenaste con Silver?- Cuestiona Crystal. -Hmmm, todo tiene sentido ahora…-

-Espera… ¿C-c-cómo sabes que entrene con Silver?- Pregunta Gold con notable asombro. -¿Acaso me espiaste o algo asi?-

-¡N-NO SEAS RIDÍCULO! Yo no sería capaz de-…

-Nosotras nos encontramos con él antes de que regresaras del gimnasio.- Afirmó rápidamente Zuki, para qué de esa manera no se desviara la conversación. -El nos comento que desde anoche se estaba hospedando aquí, así que fue bastante obvio para nosotras deducir el resto.-

-Lo que no comprendo es porque entrenaste con él luego de todo lo que sucedió entre ustedes.- Señaló Crystal, mientras se cruzaba de brazos y miraba a Gold de reojo. -¿Es acaso porque él fue miembro del Equipo Rocket?-

-En gran parte es por eso. Pero por otro lado, yo necesitaba a alguien cómo él para poder tomar mi entrenamiento en serio y así mejorar de forma rápida, consistente y eficiente.-

-¿A alguien como él?- Repite Crystal sin entender del todo las palabras de Gold. -¿A qué te refieres con eso?-

-El se refiere a un auténtico rival. Gold ve a Silver como una persona contra quien no desea perder o quedarse atrás. En otras palabras, el pelirrojo es una especie de némesis para mi primo.-

-Zuki está en lo correcto.- Confesó Gold de mala gana y al poner cara de pocos amigos. -Yo en New Bark y sus alrededores fui considerado un genio para las batallas desde muy temprana edad, por lo que nunca tuve competencia o algún tipo de rival en ese sentido durante mi niñez. Y durante mi racha de victorias en los torneos infantiles en los que participe, nunca nadie estuvo ni cerca de vencerme. Sin embargo, Silver inadvertidamente se transformó en un rival para mi, luego de nuestro primer encuentro. El, aunque me cueste admitirlo, es mejor entrenador que yo en el manejo de sus pokémon y también en la creación de estrategias. Además, el nivel de combate de sus pokémon es extremadamente alto y creanme cuando les digo que sin su ayuda ayer por la noche, yo no hubiese sido capaz de mejorar tan rápido. Estoy completamente seguro de que tampoco hubiera descubierto qué Typhlosion podía generar llamas azules al incrementar su temperatura corporal.-

-Haaah… Entonces si tenía razón en mi hipótesis sobre la razón del fuego azul.- Exclama Crystal con orgullo. -¡Lo sabía!-

-Por eso te dije en el gimnasio que cada día me sorprendes más.- Reconoce Gold antes de sentarse a un lado de Crystal a orillas de la cálida piscina. -Fue gracias a Silver que logre evolucionar a Quilava y a mi Poliwhirl en Typhlosion y Politoed respectivamente…-

-¿Pero cómo exactamente descubriste que Typhlosion podía generar fuego azul?- Pregunta ahora Zuki. -Eso aún no lo tengo claro.-

-Sucedió cuando Typhlosion luchaba contra el Feraligatr de Silver. Mi meta principal durante ese combate era intentar neutralizar, aunque fuera un poco, los ataques de tipo agua. Pero inesperadamente durante la pelea, el fuego de Typhlosion cambio de color después de un breve intercambio de ataques. Luego de eso, descubrí que además de poder generar fuego en condiciones poco favorables, sus ataques también se volvían al menos dos (2) o tres (3) veces más potentes y rápidos. Pero al costo de utilizar la mayor parte de su energía de un solo golpe.-

-Entonces es un arma de doble filo.- Indicó Crystal al fruncir el ceño. -Supongo que algo tan bueno no podía venir sin tener algún costo o defecto…-

-Pero no solo drena rápidamente la energía de Typhlosion, sino que es un estado muy impredecible, inestable y tampoco se activa a voluntad.-

-¿Huh?-

-De más o menos veinte (20) intentos, solo logre que Typhlosion pudiera utilizarlo un par de veces con relativo éxito. Además de que aparentemente ese estado tiene un límite de tiempo aproximado entre tres (3) a cinco (5) minutos antes de que su fuego vuelva a su color normal.-

-E-esa es una técnica demasiado arriesgada.- Manifiesta la de rosada cabellera con preocupación, posterior al comentario de su primo. -Recomiendo no la utilices en combate hasta que Typhlosion aprenda a dominarla adecuadamente.-

-Creeme, Zuki. Yo no tenía la más mínima intención de utilizar esa técnica en batalla contra Morty porque precisamente no deseaba tener que dar explicaciones o arriesgar más de la cuenta a Typhlosion. Pero al final no me quedó más remedio que recurrir a eso sí deseaba ganar la medalla…-

-¿Pero por qué ocultarlo?- Cuestiono Crystal de modo insistente, ante la indiferente mirada que tenía Gold en ese momento. -No comprendo porque no querías contarnos sobre esto.-

-E-eso no viene al caso ahora.- Asegura el de New Bark. -Luego les contaré. Pero ahora mismo quiero saber que sucedió entre ustedes y Kelly…-

-Uhhh… N-no es qué sucedió entre nosotras y Kelly.- Señaló Zuki con timidez. -Sino que sucedido entre Silver y ella.-

-¿Entre ella y Silver?- Repite Gold al inmediatamente cambiar por completo el semblante de su rostro, en cuestion de milesimas de segundo, a uno más rígido y serio. -¿Qué rayos tiene que ver Silver con Kelly?-

Crystal y Zuki intercambiaron nerviosas miradas por breves instantes ya que ninguna de ellas deseaba responder a la pregunta hecha por Gold. Ambas chicas simplemente se encogieron de hombros prácticamente a la vez y evitaron mirar al de New Bark.

-Exijo una explicación en este momento.- Ordena Gold con frialdad y molestia. -¿Qué rayos fue lo que sucedió en mi ausencia?-

-K-kelly tuve una batalla contra Silver y… Perdió.- Confesó finalmente Zuki. -Eso fue básicamente lo que sucedió…-

-¿Ehh?-

-Nosotras luego de regresar del gimnasio queríamos matar algo de tiempo mientras regresabas para almorzar todos juntos, por lo que decidimos las tres (3) ir un rato al campo de batalla para practicar un poco y entrenar. Informa Crystal con tristeza y agachando un poco su cabeza. -Pero mientras estábamos en el campo de batalla, apareció Silver y…-

-¿Y… ?-

-Kelly al verlo se enfurecido tanto que terminó por reclamarle que era su culpa la discusión que ustedes tuvieron ayer y que él era el causante de que quisieras terminar prematuramente tu viaje por Johto.- Agrega ahora Zuki. -Al final, ellos batallaron y Kelly resultó derrotada sin mucho esfuerzo…-

-¿Pero entonces en dónde está Kelly en este momento?-

-N-no lo sabemos.- Responde Zuki, mientras que negaba lentamente con la cabeza. -Ella luego de la batalla nos dio la espalda y se fue sin decirnos nada, así que decidimos darle un poco de espacio para que se recuperara mentalmente.-

-Hicieron bien en darle su espacio.- Asegura Gold al levantarse de dónde estaba sentado, para luego entrar rápidamente a la habitación principal. -Pero por alguna razón que no puedo explicar tengo un muy mal presentimiento de todo esto, así que saldré a buscarla ahora mismo.-

-¿Acaso tienes idea de donde ella pudiera estar?- Pregunta Crystal, mientras que sacaba sus pies de la piscina, para después seguir a Gold a la habitación. -Yo cuando regrese del almuerzo con tu familia la llame varias veces a su pokegear y no quiso contestar…-

Lentamente, Gold negó con su cabeza. -En lo Absoluto. Reconoció el de oscura cabellera, nuevamente de mala gana. -Pero siento que tengo que salir de aquí y buscarla cuanto antes.-

-D-déjanos ayudarte.- Propuso Crystal tomando de la mano a Gold. -Si cada uno de nosotros busca en lugares distintos, entonces podremos cubrir más terreno para localizarla más rápido.-

-Esa es una buena idea.- Reconoce Zuki. -Sugiero empecemos buscando en los lugares importantes de la ciudad y también en sus alrededores.-

-Esos lugares serían el anfiteatro, la torre quemada y la torre bell.- Menciona rápidamente Crystal. -Ahh… Supongo que también podríamos incluir en menor extensión el centro comercial de la ciudad.-

-Es muy poco probable que ella pueda haber ido a la Torre Bell porque solo los miembros de nuestro clan tienen acceso, así que esa opción queda automáticamente descartada.- Indica la perspicaz chica kimono. -En fin… Yo iré a la parte sur de la ciudad a buscarla y de paso llamaré a mis hermanas para avisarles que traigan a Kelly por sí la ven en el centro comercial.-

-Hmmm… En ese caso, iré al anfiteatro.- Anuncio Crystal. -Luego recorreré el este de la ciudad.-

-Entonces a mi me toca la torre quemada…-

-Si quieres puedo ir yo a la torre quemada y tú vas al anfiteatro.- Propuso Crystal al notar cómo el rostro de Gold volvía a colocar una agria expresión. -Se que lo que sucedió en ese lugar con los pokémon legendarios debió de -...

-No tienes de qué preocuparte, Crys. Yo me encargaré de ir a la Torre Quemada.-

-De acuerdo. En marcha entonces.- Exclama Zuki de manera enérgica. -Si alguno la encuentra o la ve, llamen inmediatamente a los demás.-

-¡Entendido!- Responden Gold y Crystal al unísono.


Zona oeste de Ciudad Ecruteak. Frente a la Torre Quemada, 6:15 P.M


Al bajarse del autobús que lo dejó frente a las largas escalinatas de piedra que conducían a la base de la torre quemada, Gold pudo sentir cómo una serie de escalofríos atacaban su espalda. Por su parte, el clima no ayudaba a la causa, ya que a medida que el sol desaparecía en el horizonte, el de new Bark podía sentir vívidamente cómo la temperatura poco a poco iba disminuyendo hasta el punto en que su propio aliento era ahora visible ante sus ojos.

Gold miró brevemente a su alrededor, por si encontraba con la mirada a la rubia en las cercanías, pero las calles aledañas al antiguo lugar estaban completamente vacías a excepción de un par de automóviles que transitaban por la avenida principal que estaba a un par de metros de distancia.

-Tengo un muy mal presentimiento de todo esto…-

Nuevamente, Gold no podía quitarse de encima un terrible sentimiento de incertidumbre que ahora recorría cada rincón de su cuerpo cómo un torbellino. Cada fibra de su ser le estaba pidiendo a gritos que se alejara lo más rápido y lejos que pudiera de ese maldito lugar. Pero su preocupación y amor por Kelly eran más fuertes que su propio sentido común.

Un par de segundos después y cuando Gold finalmente empieza a subir lentamente las interminables escaleras que conducían a la base de la torre, por alguna extraña razón que ni él mismo podía explicar, cada paso que daba y cada escalón que lograba subir provocaba en él un descontrolado aumento en los latidos de su asustado corazón. En su memoria aún estaba plasmado el vivo recuerdo de su aterrador encuentro con los pokémon legendarios Raikou, Entei y Suicune. Pero además de todo esto, también en su mente estaban las mortificantes predicciones de Morty sobre las tres (3) sombras de personas que tenian algun tipo de relacion con el.

Al llegar a la base de la torre, todos y cada uno de sus miedos, preocupaciones y angustias se esfumaron al ver Kelly, quien en ese momento no tenía puesta sus características gafas y ahora vestía con un sencillo suéter negro, unos shorts azules y sandalias, sentada tranquilamente junto a su mochila a un costado de la entrada principal de la torre. Ella simplemente contemplaba con suma atención los altos edificios construidos por todas partes de la ciudad y también cómo el sol terminaba por ocultarse en el horizonte.

-¡K-Ke-Kelly… G-gracias a Arceus que estás bien!- Exclamó el de New Bark con notable y profundo alivio, mientras que se dejaba caer de rodillas al suelo y luego soltaba un exagerado suspiro de satisfacción. -D-demonios. H-haha, nos tenías a todos muy preocupados.-

-¿G-Gold?- Manifestó la rubia en un pasible tono de voz y con visible sorpresa al notar la repentina aparición de su amado. -¿Qué haces aquí?-

-¿C-cómo qué qué hago aquí?-

-¿Acaso sucedió algo?-

-¡Por supuesto qué sucedió algo!- Denuncia Gold, antes de incorporarse del suelo para luego colocarse frente a la rubia. -Según tengo entendido, luchaste contra Silver y luego te fuiste sin decir nada. Ni siquiera atendiste las llamadas a tu pokegear…-

-Ohh…-

-¡Nos tenías muy preocupados a todos! Incluso llegué a pensar que algo malo te había llegado a pasar.-

-L-lo siento mucho.- Se excusó fríamente la rubia al agachar su cabeza cómo símbolo de arrepentimiento. -No era mi intención preocupar a nadie. Pero supongo que perdí un poco la noción del tiempo porque deseaba estar un rato a solas…-

-Está bien, solo olvidemos todo este asunto.- Propuso Gold al colocar una cálida sonrisa, para posteriormente abrazarla, luego de haberla ayudado a levantarse del suelo. -¿Te parece si regresamos al hotel y luego vamos al cine o cenamos? Yo invito.-

Cómo por acto reflejo y sin dudarlo, la rubia colocó rápidamente distancia entre ella y Gold. -¿R-regresar al hotel?- Repitió Kelly de manera lenta y comedida.

-Uhhh.. Así es.-

-L-lo lamento mucho, Gold. Pero yo no regresare al hotel contigo.- Señaló la rubia, instantes antes de darse media vuelta y darle la espalda a Gold, para de esa manera fijar su mirada nuevamente en el horizonte y en los edificios. -Solo espero que me perdones…-

-¿C-cómo qué no vas a regresar?- Preguntó el de New Bark frunciendo el ceño y mirando con desconcierto a Kelly. -¿A-acaso este es un tipo de broma o algo por el estilo?-

Kelly negó lenta y tristemente con su cabeza. -Hablo muy enserio, Gold. Mi batalla contra Silver me hizo ver finalmente la realidad de cómo son las cosas ahora.-

-¿La realidad de cómo son las cosas? N-no entiendo que-...

-Finalmente me di de cuenta que yo no soy diga ni merezco estar a tu lado mientra siga siendo debil e inutil.- Señaló Kelly al mirar de frente a Gold, para entonces encogerse de hombros y soltar una que otra triste lágrima de sus ojos. -¿Cómo crees qué me siento luego de perder contra "ESE"? Yo entrené casi por un infernal año con Cynthia, quien actualmente es una de las entrenadoras más fuertes de todo el mundo, para volverme en una entrenadora que pudiera ser digna de tu amor. Pero a pesar de todo eso, yo no fui capaz de derrotarlo.-

-K-kelly, pero-…

-Lo que tengo que hacer ahora es más claro que el amor que siento por ti.- Vociferó la rubia al forzar una triste sonrisa en sus labios. -Tengo que volverme más fuerte a cómo de lugar para poder protegerte en un futuro, Gold. Y la única manera en que siento que puedo hacerlo es alejándome de ti para luego ir yo misma a acabar con el Equipo Rocket de una vez por todas.-

-¿A-ACASO ESTAS DEMENTE?- Preguntó Gold de un sorpresivo grito. -N-no seas ridícula o impulsiva. Tu muy bien sabes que en este momento ni tu ni yo somos rivales para ellos.-

-Eso lo se perfectamente, Gold…-

-T-tu no tienes nada que probarme.- Indicó el de New Bark con notable desesperación en sus ojos y sintiendo a la vez cómo un nudo se le empezaba a formar en la garganta. -E-esto que intentas hacer es suicidio…-

-S-si mi destino es morir, pues entonces que así sea.- Resalta la rubia de manera tranquila, antes de secar la infinidad de lágrimas que recorrían sus ahora sonrojadas mejillas. -Se que no vas a entenderme ni apoyar mi decisión. Pero yo necesito probarme a mí misma que soy digna de ti. Además, yo misma quiero acabar con el Equipo Rocket para así tomar venganza por separar a mi familia y también por indirectamente alejarme de ti.-

-Kelly… E-entiendo que te sientas de este modo.- Aseguró Gold al dar un par de pasos para acercarse a la rubia. -Pero esto qué intentas es una estupidez y-... Uuughhh-...

Sin previo aviso y en un inesperado giro de eventos, el Lucario de Kelly apareció de entre las sombras y le propinó un certero golpe a Gold en el estómago. Acto seguido, el de New Bark rápidamente perdió el equilibrio y terminó cayendo estrepitosamente contra el suelo.

-¿P-p-po-porque… H-hiciste… E-eso?- Pregunta Gold de manera débil y a la vez que esté sentía cómo su cuerpo y también su conciencia empezaban a adormecerse a un alarmante ritmo. -¿K-Kelly… P-porque? Y-yo te am-...

-Lamento mucho tener que recurrir a esto.- Susurro Kelly, poco antes de haberse inclinado para besar a Gold en sus ahora resecos labios. -Pero lastimosamente este es el final de nuestro viaje juntos. Yo sabía perfectamente qué intentarías detenerme, así que mi única opción era esta.-

-¡K-KELLY!-

-Espero sinceramente que algun dia me perdones por todo esto, y te juro por el amor que te tengo qué me volveré lo suficientemente fuerte cómo para protegerte y ser digna de ti. Pero ahora mismo siento que debo de destruir al Equipo Rocket yo misma. Lastimosamente no se cuanto tiempo me tomara, pero creo que eso es lo de menos ahora...-

-E-espera… P-porfavor… K-kelly… Ughhh… N-no h-hagas… E-esto… Y-yo…-

-En verdad lo siento.- Volvió a repetir la rubia, justo al regresar a Lucario a su pokebola para luego darle un último vistazo a su amado, quien ahora yacía inconsciente sobre el suelo y frente a la entrada de la torre quemada. -Te amo, mi Gold. Solo no me odies y espera pacientemente mi regreso… ¿De acuerdo?-